Nota previa: Para entender de mejor forma esta historia es recomendable leer primero el one short de "Es una promesa". Arigatou
Promesas pasadas
Por Kary
Capitulo XVI:
Si de esta agua no has de beber… déjala correr
Las olas chocaban suavemente cuando el sol alumbro la espuma blanca del mar, haciéndole saber a los pequeños cangrejos que era hora de ocultarse en la arena o entre las piedras, a lo lejos ya se observaban los pescadores que comenzaban a lanzar sus redes y a las gaviotas que emprendían vuelo en busca de su alimento.
¿Por qué las gaviotas chillaban tanto? ¿Por qué no terminaban de comer algún pez y se callaban? y… en fin ¿esas eran gaviotas? Las preguntas giraban en la cabeza de Kenshin cuando por fin abrió los ojos encontrándose con una cortina de seda azabache y un olor a jazmín fuerte y fascinante.
Kaoru se despertó en su abrazo con un bostezo.
- Ohayou gozaimasu- saludo Kenshin cuando ella se sentó bostezando aun.
- Ohayou Kenshin- lo saludo ella sonriendo al verlo, por un momento había olvidado que él había dormido a su lado y la sensación de saberlo lleno su cuerpo de una calidez bonita- ¿Qué es ese ruido?
- ¿Gaviotas?- respondió en una pregunta él escuchando los chillidos tan fuertes
- No lo creo- dijo Kaoru parándose cuando el sonido de algo rompiéndose llego a sus oídos
Cuando abrió la puerta se encontró con un espectáculo de cosas rotas y tiradas en el corredor, un Sanosuke tratando de esquivar una lámpara ENORME y una Megumi totalmente alterada y con el aspecto de loca salida de un manicomio.
- ¿Qué sucedió?- le pregunto perpleja Kaoru a Misao que veía desde dentro de su habitación, la muchacha negó con la cabeza. Aoshi que estaba cerca también negó.
- ¡¡¡¡¡¡KYAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA!!!!!- grito Megumi tan fuerte que los vidrios temblaron
- ¡¡Cállate zorra histérica!!- grito Sano apuntándola
- ¡¡MALDITO PERVERTIDO!! ¡¡¡¡¡¡HENTAI!!!!! – grito ella desde dentro de la habitación tirándole lo que parecía ser un libro muy pesado, el cual pego contra la pared cuando él lo esquivó y calló al suelo ruidosamente
- ¡¡Te dije que fue un error!! ¡¡Cierra la boca ya!!- dijo Sanosuke apresurado cuando ella comenzó a buscar otra cosa para tirarle, era su impresión o no estaba funcionando su forma de calmarla
- Fue un error ¿no?… ¡Error mis cuernos! ¡¡Error el día en que te conocí!! ¡¡Error el que te tenga que ver la cara todos los días!!- grito ella a todo pulmón- ¡¡Error que el asesinato de idiotas pervertidos sea un delito!! ¡¡Pero esto no fue ningún error!!
- ¿Qué sucedió oneesan?- pregunto Kaoru en un intento de calmar a su hermana mayor que estaba totalmente irreconocible y respiraba tan rápido que parecía estar a punto de lanzar fuego por la nariz
- ¡¿Qué sucedió?! ¡¿Qué sucedió?! ¡¡Sucedió que este idiota pervertido se metió en mi habitación en la noche y durmió en mi futón!! ¡¡Y yo estaba en el!! ¡¡¿Ahy Kami por que me haces esto?!!- grito fuertemente al cielo
- ¡Ya dije que fue un error! ¿Quién sería tan idiota de querer meterse en tu habitación que más bien parece un nido de cobras?- dijo Sanosuke cínicamente pero al ver la expresión de la kitsune corrió a esconderse detrás de Kenshin y Aoshi que lo miraron frustradamente
- Mejor quédate callado- murmuro secamente Misao mirándolo de reojo
- Bueno no fue nada grave oneesan- dijo Kaoru sonriendo un poco en un intento de encontrar la paz en la mañana- No es como si hubieran hecho algo o hubiese pasado alguna otra cosa
Malo.
El rostro de Megumi tomo un tono tan rojo como el del cabello de Kenshin, sus labios se fruncieron tanto que formaron una línea tan delgada como un hilo y su ceja izquierda entro en un tic nervioso muy rápido. Todos en el pasillo guardaron silencio, viendo como el cuerpo de la mayor de las muchachas temblaba de punta a punta y de pronto…
*Past*
La puerta de la habitación se cerro de golpe cuando Megumi entro como torbellino en ella, lo próximo que se escucho fue el cerrojo de la puerta y luego… el silencio.
- ¿Qué sucedió?- pregunto por milésima vez inocentemente Kaoru, viendo a Sanosuke que se había enterrado en el suelo con el rostro tan rojo como el de la propia kitsune.
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Megumi no salió en toda la mañana de la habitación, ni siquiera a desayunar a mandar o al baño, lo cual era bastante extraño debido a que ella solía bañarse sin falta en las mañanas. Misao le insistió varias veces a que saliera, tocando la puerta y gritándole que Sanosuke ya se había ido (lo cual no era cierto) pero la muchacha no dio signos de escucharla y no fue hasta mas tarde del mediodía en que salio del cuarto y sin decir nada salio de la casa.
- ¿Qué le hiciste Sanosuke?- le pregunto con cierta incredulidad Misao, Sano se encogió de hombros y siguió comiendo la galleta que tenía en la mano, no habían pasado ni cinco minutos cuando de repente se paro y salio por la puerta.
- ¿Quién los entiende?- pregunto Misao confundida por la actitud de ambos jóvenes, Kenshin sonrió consoladoramente mientras picaba una zanahoria- ¿Dónde esta Kaoru?
- Creo que se esta bañando- dijo Kenshin pensativo, pero Kaoru apareció en la cocina segundos después, limpia y fresca como una lechuga
- Que rico es bañarse… ¡me siento tan bien hoy!- dijo alegremente ondeando una de sus cintas azules en el aire
- No lo dudo, si no te vi volver en toda la noche, seguramente la pasaron muy bien juntos- dijo Misao pícaramente como quien no quiere la cosa- ¿he? No van a decirme que no fue así
- ¡Misao! ¡Eso no es cierto!- el rostro de Kaoru estaba casi encendido en llamas mientras que un sonrojado Kenshin parecía querer romper el record de cortar microscópicamente una zanahoria- ¡No tienes por que decir esas cosas!
- Yare, yare…- dijo la muchacha cerrando los ojos y pareciendo falsamente despreocupada- Y tu sigue jurando que nadie vio eso ¿vale?- dijo señalando un punto entre el cuerpo y la cabeza de la tanuki
La mano de Kaoru voló directamente hacía su cuello recordando la 'pequeña' marca que tenía desde ayer, provocada por el beso de Kenshin en la gasolinera… ese beso había sido uno de los mejores en su memoria y estaría completamente deacuerdo en repetirlo miles y miles de veces… ¡Basta! Ella tenía que estar enfadada con él y no estar deseando otras cosas… lenta muy lentamente volteó la cabeza hasta ver al pelirrojo que parecía sumergido en tratar de ocultarse bajo las zanahorias que había en el plato.
-oro…- gimió cuando la mirada fría y glacial de la pelinegra le dijo claramente Esta me las pagas Kenshin Himura
Misao rió con ganas al ver las caras de ambos muchachos, entonces no estaba tan equivocada, si todos creían que era una tonta que no se daba cuenta se nada estaban totalmente errados, dejo que Kaoru humeara y se sonrojara un poco más antes de hacer un amago con la mano.
- Bueno ya, no es para tanto oneesan- sonrió extrañamente, un brillo alegre y maligno en sus ojos- esas cosas son normales en una relación de pareja, es totalmente normal que jueguen
- ¡Misao!- grito Kaoru pasando del color rojo al morado en menos de un milisegundo. Misao iba a seguir mofándose cuando entro Aoshi en la cocina, llevaba un maletín negro en una mano y bajo un brazo su computadora portátil, murmuro un débil y casi inaudible saludo antes de sentarse en la mesa.
- Aoshi, estamos de vacaciones ¿Por qué no dejas el trabajo para después? – pregunto Kenshin en un tono amable al que Aoshi le respondió con algo que sonó a soy responsable a diferencia de ti
- Pero yo estoy haciendo el almuerzo- murmuro Kenshin con un tono entre apenado y auto consolador
- ¡Yo quiero ayudarte hoy Kenshin!- alegremente Kaoru agarro algunos rábanos y los balanceo en el aire
- ¿Entonces nunca vamos a ir a la playa?- pregunto Misao en un tono malcriado
- Nadie dijo que tú no puedas ir, ni que nosotros no iremos más tarde- le respondió Kenshin tranquilamente
- ¡Entonces me voy!- grito alegremente Misao, esperando el 'yo te acompaño' de Aoshi, claro que este nunca llego así que opto por otro método- Oh solo espero que haya gente en la playa, no quiero estar sola, después de todo yo soy solo una muchacha tímida e inocente de la que cualquier persona se puede aprovechar- recito dramáticamente viendo ha Aoshi con una expresión perruna que daba lástima en verdad
Aoshi cerró la computadora y murmuro algo sobre no poder concentrarse. No estaba mal si la acompañaba ¿no? No era un sacrificio salir con ella un rato, aunque solía marearse con su labia de todo el día tenía que admitir que en el fondo se divertía un poco con ella así no lo demostrara, pero es que esa no era su forma de ser, él no podía sonreír todo el tiempo ni hablar como radio las veinticuatro horas del día pero eso no significaba que a él no le agradarán las personas que eran así, por eso podía pasar su tiempo junto a esa muchacha sin molestarse y a pesar de ambos ser polos tan opuestos…
Ella era una de las pocas personas con las que él podía sentirse libre.
- Deacuerdo vamos- murmuro Aoshi y desapareció pronto escaleras arriba.
Misao dio un grito de emoción que sofoco metiéndose el puño en la boca para luego dar de saltitos por todas partes ¿Era un sueño o era realidad? Ella y Aoshi juntos y solos en la playa… sonaba hasta lindo ¿no?
Kenshin la vio escépticamente y murmuro– ¿Dónde esta la tímida e inocente muchacha?
- Yo solo veo a una niña manipuladora y maliciosa- murmuro secamente Kaoru. Misao les saco la lengua a ambos y luego corrió a saltos hacía las habitaciones.
- ¿Me ayudas?- pregunto sonriendo Kenshin luego de un rato a la muchacha que lo veía trabajar cortando cebollas ahora, Kaoru hizo una mueca de molestia y mal humor – Vamos yo te enseño, no es difícil koi-
Ella sonrió abiertamente.
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Ella miro a los tres niños correr felizmente en la arena mientras el sol ganaba su lucha contra las débiles nubes en lo más alto del cielo, hacía un calor sofocantemente pegajoso y Megumi se arrepentía de no haberse puesto el traje de baño debajo de la ropa.
Aun se sentía increíblemente abochornada por el incidente que había ocurrido en la mañana y el solo recordarlo hacía que se le subiese la sangre a la cabeza ¿Por qué a mí? Se preguntaba mentalmente, aunque la respuesta no parecía estar en ningún rincón su cerebro.
No era solo el simple hecho de que todos se hubieran dado cuenta que Sanosuke había pasado la noche en su habitación con ella, después de todo ellos nunca creerían que habían hecho algo más allá de dormir y sabían que definitivamente había sido culpa del cabeza pollo entrar sin que ella se diera cuenta en el cuarto que ella estaba usando, el hecho era…
Que si había pasado algo.
El corazón le salto con solo recordarlo, no es que hubiese sido algo del otro mundo pero… ¡Que va! Si había sido algo… algo a lo que no le podía poner nombre.
+.+.+.+.+.+.
Los pájaros ya habían comenzado con su cantar matutino cuando Megumi despertó atrapada entre sus sábanas y entre un calor infernal, se sentía tan sofocada que incluso le costaba respirar y sentía como si tuviese un mueble encima que no la dejaba moverse con libertad.
Viendo las partículas de polvo entrar por la pequeña abertura que tenía la ventana Megumi pensó vaga e incoherentemente si Sanosuke podría hacerle el favor de quitarle el peso de encima más tarde y tirarlo por la ventana, volteó incomoda y parpadeó varías veces para ver mejor entre el claroscuros de la habitación.
Sus ojos se abrieron tan grandes como dos platos de té, idénticos a los de la persona que estaba a menos de cinco milímetros de ella. Miles de pensamientos que incluían cuchillos y armas de fuego pasaron por la cabeza de la muchacha cuando cayó en cuenta que ¡él estaba en su habitación acostado a su lado con casi la mitad de su cuerpo sobre el suyo! y como si un rayo la hubiese golpeado su boca se abrió grandemente con la intención de gritar tan fuerte que él saldría de la habitación volando hasta el otro lado del mundo pero…
Sanosuke rápidamente le tapo la boca con la mano al leerle las intenciones e hizo una señal de silencio. Los ojos de Megumi se habían convertido en témpanos de hielo frío que le enviaban una clara señal al muchacho Quiero una explicación, no después, no más tarde si no ¡ya!
- Shh… óyeme kitsune- dijo él en un susurro, sus ojos temblando al ver la expresión en el joven rostro de ella - Esto fue un error, me equivoque de habitación anoche ¿oyes? Me e-qui-vo-que no es para armar un alboroto que despierte a todos
La mirada de Megumi no había cambiado ni una pizca, seguía tan fría y calculadora como en un primer momento y Sano se asusto al pensar en las posibles técnicas de tortura que estaban pasando por la mente de la casi doctora. Oh si este había sido el error de su vida.
- Enserio- dijo él su voz saliendo como el chillido de un ratón – No creas que quería meterme en tu cuarto, después de todo no estoy tan loco como para querer pasar la noche contigo.
Error.
Megumi mordió tan fuertemente la mano de Sanosuke que este dejo escapar un alarido como el de un perro herido antes de morderse la lengua, pero no retiro su mano de la boca de ella que siguió apretando los dientes con fuerza.
- Maldita zorra- murmuro cuando unas cuantas lágrimas de dolor nacieron de sus ojos, Megumi le dio una mirada inteligente que le daba a saber que no lo soltaría tan fácilmente ¿Y que hizo Sano? Al no aguantar el dolor quito la mano de la boca de la muchacha y cuando ella se dispuso a gritar hizo lo primero que le vino a la mente.
Reemplazo su mano por… su boca.
Los ojos de Megumi se abrieron tanto que parecían querer salirse de sus órbitas y su corazón golpeó contra su pecho como si fuera una puerta cerrándose de golpe por el viento ¡la estaba besando! Nuevamente. Quería morderlo, golpearlo, gritarle, escupirle pero su cuerpo no reaccionaba, no se movía, solo permanecía allí como estatua viendo los ojos del muchacho que estaba callándola con sus labios… parecía que incluso a él le había sorprendido su propia acción.
Había resultado por lo menos, pensó febrilmente Sanosuke antes de caer en cuenta de lo que estaba haciendo ¡la estaba besando! ¡Aunque fuera solo para callarla lo estaba haciendo otra vez! Y su mente se lleno de pensamientos terroríficos sobre lo que ella le haría cuando se diera cuenta de todo, por que parecía estar bajo un shock sorpresivo.
Oh si, Sanosuke Sagara se iba a morir el día de hoy. El lo sabía, la zorra no descansaría hasta que el no terminará en quinientos mil pedazos regado por los cinco continentes ¿pero que podía hacer? Si se movía corría el riesgo de morir en el acto y además no era como si no estuviese disfrutando de la sensación de sus labios suaves y carnosos contra los suyos y de su respiración caliente acariciándole el rostro, y a medida que pasaban los segundos él la sentía relajarse sorprendentemente en el futón.
¡No! ¡Esto no era lo que tenía que suceder! ¡Ella tenía que estar golpeándolo y no respondiéndole! Pero su cuerpo parecía tener una mente propia diferente a la que le ordenaba a gritos que parase, una mente que seguía cada sentimiento que galopaba desde su corazón hacía sus venas y recorría el resto de su cuerpo. Dios su boca sabía a gloria. No podía evitarlo se estaba rindiendo ante la calidez de sus labios, estaba siendo débil pero en el fondo no le importaba serlo, no en el momento en que su cuerpo se recostó sobre el suyo acomodando su peso para no dañarla, no cuando su lengua lamía sus labios pidiéndole la entrada. Esto ya no era solo para callarla no, era algo diferente, era necesidad y deseo, Sanosuke deseaba besarla de una forma desenfrenada tanto como ella misma deseaba corresponderle.
Y al darse cuenta de esto la mente de Megumi se convirtió en un océano blanco falto de pensamientos coherentes, centrado solo en el placer que le estaba dando la boca de Sanosuke y en lo bien que se sentía el calor de su cuerpo cubriéndola con alas. Todo lo demás había perdido importancia.
Sanosuke ahondo el beso sintiendo la necesidad de sentir más de ella, de saborear cada rincón de su boca, de devorarla y para su placer ella le respondía con la misma intensidad y con la misma fuerza que hacía que en su pecho se arremolinaran emociones extrañas.
Y de repente, tan rápido como empezó se termino.
Ambos jadearon cuando el aire nuevo lleno sus pulmones, la pasión desvaneciéndose con cada nueva respiración. Sanosuke la observo fijamente, parecía deslumbrada y sus ojos brillaban a la par del sol, él sonrió arrogantemente para sus adentros cuando la vio mirarlo fijamente aun respirando con dificultad. El espero que ella dijera algo, aunque fuese una sola palabra pero… ella en cambio grito.
El resto ya lo saben seguramente, ella grito él la insulto, ella le tiro algo él la volvió a insultar y así siguieron hasta que todos los demás habitantes en la casa despertaron…
+.+.+.+.+.+.
Megumi suspiro cuando se recostó en la arena viendo hacía el cielo, una nube con la peculiar forma de espina de pez llamo su atención y ella se pregunto cuan obsesionada estaba con este ser llamado Sanosuke que todo le recordaba a él.
Ella no era así, ella no era de las que se sonrojaba al recibir algún comentario, ni era de las que se la pasaba suspirando por los rincones o viendo formas extrañas en las nubes ¿Qué tenía Sanosuke Sagara que hacía que estas cosas tan atípicas en ella fuesen su pan de cada día? Sinceramente no lo sabía, pero si sabía que ella no podía tener nada con él. Nada. Ella no podía enamorarse ni de Sanosuke ni de nadie más, el amor era una de las emociones más hermosas y más increíbles en el mundo, te daba fuerza para enfrentarte a todo lo que se opusiera a ese amor pero así mismo te cegaba frente a todo lo demás, si estabas enamorada podías olvidarte de ver el mundo de forma objetiva y de diferenciar lo bueno de lo malo y eso era algo por lo que Megumi no estaba dispuesta a pasar. El amor te debilitaba y eso ella lo había aprendido hacía tiempo, y no gracias a algún culebrón de su vida en donde su ex –novio la engañaba, le mentía y bla bla bla… no, ella lo había aprendido de la forma cruda, real y había aprendido que no siempre la vida era como los cuentos de hadas, con un 'vivieron felices por siempre' al final y el recordarlo le daba puntadas en el estómago.
Sinceramente su vida era muy práctica para comenzar a molestarse con sentimientos que al final solo le traerían alguno que otro momento agradable pero que al final terminaría. Todo termina. Además ella aun no estaba enamorada de Sanosuke, no podía negarse (aunque lo negaría hasta la muerte frente a todos) que algo diferente a lo que sentía por las demás personas sentía por Sanosuke, lo había comprobado esa misma mañana. No era amor. Era deseo y pasión, era una sensación de locura que hacía que su cabeza estuviese en cualquier parte menos en la tierra pero definitivamente no amor ¿Cómo podía amar a una persona con la que no podía pasar dos minutos hablando sin comenzar a gritar? Pero así como no podía negar esa demencia que Sanosuke le provocaba no podía negar el hecho de que todo eso se trasformara en algún momento en amor. No, no y no. Eso no pasaría por que ella no lo permitiría, ningún sentimiento extraño la invadiría para cambiar su vida y voltearla patas arriba. Ese había sido solo un beso… bueno en realidad había sido EL BESO pero no volvería a pasar.
De todas formas nada le garantizaba que Sanosuke sintiese algo por ella, después de todo ¿Cuántas mujeres no habían pasado ya por su vida y claro, por su cama? Estaba segura que podía pasar una hora completa contando sin terminar, porque había que ser francos, Sanosuke Sagara no estaba para nada mal, pero ella no pretendía ser solo otra más en esa lista.
Megumi estaba decidida a no sentir nada por él y se repitió mentalmente No siento nada por Sanosuke Sagara, No siento nada por Sanosuke Sagara, No siento nada por Sanosuke Sagara tantas veces que las palabras comenzaron a enredársele en el cerebro, con un suspiro cansado se levanto de la arena decidida y sacudiéndose.
Y si estaba clara en que no sentía nada más que una especia de lujuria por él, en que los sentimientos solo te estorbaban cegándote a la realidad ¿Por qué sintió de repente que todo en su estómago se disolvió como el aire cuando lo vio a él caminar por la calle, sonriendo como nunca lo había hecho cuando estaba con ella, cargando una canasta llena de víveres y hablando alegremente con su prima Magdalia? ¿Por qué de repente la garganta se le tranco cuando él la noto y la vio fijamente, su sonrisa dejándolo por completo? ¿Y por que de repente sentía unas ganas infinitas de amarrarlo a su muñeca para que nunca la dejara?
Pobre Megumi, lejos estaba en aceptar que esos sentimientos eran vulgarmente conocidos como celos.
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Notas de la autora:
Hola!! Bueno que más puedo decir este capitulo salio sin mi consentimiento, mi musa de repente se rebelo y escribió esto :p aunque no puedo decir que no me gusto. Se que estuvo un poco corto pero bueno no tengo excusas, solo espero que les haya gustado, sobretodo a los que les encanta la pareja S/M y me querían matar la vez pasada ^^
Si los pensamientos de Megumi son extraños pero todo tiene una razón de ser y pronto la sabrán.
Por cierto ¡¡Saque una escena A/M para el próximo capitulo!! ¿¿Increíble no?? Ni yo me lo puedo creer todavía.
Unas cosas que se me olvido decir la vez pasada (como de costumbre) es que la letra de la canción Será que te conozco de Alejandro Filio fue un descubrimiento inesperado y que para saber la trama de la historia de K/K solo hace falta leerla, ojalá la hubiese encontrado antes u.u
Por cierto la escena principal del capitulo anterior no es de mi invención si no un recuerdo que tienen en la serie Kaoru y Kenshin cuando la pirata Shura secuestra a este ;P
Sinceramente espero poder publicar pronto el siguiente capitulo, que tal vez sea más largo que este. Y ¡¡Gracias por sus mensajes y todo su apoyo!! *_* ¡¡Lo aprecio tanto!! Espero que sigan animándome y dejándome sus comentarios para saber si sigo bien y si no tengo que golpear a mi musa.
Megumi014: Gracias pues este capitulo espero que te guste por que es sobretodo un S/M, y Kanryuu bueno más adelante saldrá una explicación de que demonios hace aquí, aunque creo que las cosas se aclaran un poco, poco a poco :P
Rayen: Je ¡Aquí esta el beso! Mm… su reacción fue rara :P quitando el hecho que ella lo quería matar pues su reacción no fue tan mala :p Espero que te haya gustado
Aska Ishida: Pues el próximo capitulo tiene una escena de Aoshi/Misao y es muy linda solo tienes que esperar un poquito más
Mer: Gracias!! Pues ya viste lo que paso :p parece que no fue tan malo que Sano se equivocara de cuarto al final.
Ai8: Hola!! Pues ya se que eres Ai que malo que te cambiaran el nombre pero no importa ^_^ Espero que te guste el capitulo!!
Kaoru86 Kamiya: Muchas gracias! En verdad no se si haré el lemon pero puede ser. ME alegra que te guste mi historia ^^
Kahoru Himura: Pues si, normalmente cuando escribo el primer capitulo de una historia también escribo el último, no se si será complejo de Rowling o que :p Y lo de k/k por ahí va la cosa. Por cierto mi msn 6 es un caos, no me funciona nunca, por eso es que no he podido hablar contigo ni con nadie, haber como hago -_-
Misao-19: jeje espero esta vez haberme tardado menos, y prepárate por que en la próxima hay a/m ¡¡Por fin!! :p
Ale: ¡¡Si al fin vacaciones!! Bueno no creo que Soujiro aparezca mucho pero a ver si lo pongo por ahí. Espero que este capitulo te guste
Michire-Mein: jeje pues gracias por tu apoyo aunque no estoy completamente segura de hacer la escena lemon, me alegra que tenga apoyo. Pues pobre Misao pero acaba de sacarse la lotería así que veremos que pasa cuando este con Aoshi en la playa, y Soujiro no se bien si tendrá una mayor participación. Y Takeda bueno por ahí se van descubriendo las cosas, pero pronto se sabrán por completo ^^ Y bueno Sano al final no salio tan lastimado :p Espero que me digas que te pareció el capitulo!
Sumire-chan: xD que bien que te guste. Por cierto a mi me gusta como escribes, solo que no tengo mucho tiempo de leer historias ;_; pero hago lo que puedo. Dime que tal??
Lourdes Ariki: je tiempo sin verte en verdad ^^ Pues cosas misteriosas pasaran pronto, incluso es muy misterioso que Kaoru sea la única que recuerde cosas y Kenshin ahí que la sigue pero no mucho… mmm… Pues espero verte más seguido :p y Gracias!!
Anto_chan: Que linda gracias!! En este capitulo hubo S/M para regalar espero que te haya gustado y Takeda bueno pronto… muy pronto… xD
Hitokiri Lady: Hola!! Que bien que te gusto esa escena, te diré que me gusto mucho escribirla ^^ y soy tal feliztu fuiste la única a la que le gusto que pusiera a Magdalia *_* Y si a Kao-chan siempre le sale la galleta gorda ¬¬ Y que bien que te gusto la canción y que la letra también te haya parecido acertada es muy linda. Gracias!!
Demi-san: Si gracias!!!!!!!! Oye este capitulo quedo gracias a ti!! ¿lo sabes no? Pues espero que lo disfrutes!!
Gracias por sus mensajes y no se olviden por favor de dejarme uno para saber si voy por la vía correcta!
Kary
Ja ne