sábado, 28 de febrero de 2004/jueves, 15 de julio de 2004
Sol de Medianoche.
Capítulo 3.
Conversaciones sin trascendencia ni importancia llenaron la mesa del pequeño restaurant hasta que Kosuke-san llegó para recoger a Daisuke. El alegre muchacho se despidió con una sonrisa para todos, pero sus ojos demostraron preocupación a la hora de mirar a Satoshi, quien se mantenía serio y sereno.
--Nos vemos... Un placer Matsumoto-san, Nakano-san.
--Igualmente Niwa-kun –despidió Eikichi, quien había hecho buenas migas con el pelirrojo.
--Buenas noches chico –dijo el mayor mientras estrechaba la mano de Dai con mas fuerza de la que a Niwa le hubiera gustado. –Cuidate mucho.
Kosuke-san hizo una leve venia desde la puerta del restaurant y luego se alejó junto a su hijo, mientras hablaban algo que parecía interesante e importante, a juzgar por la cara del mayor.
El ceño de Hiwatari se arrugó en ese momento, y Nakano no dejó de notar ni el gesto ni la razón del gesto... Matsumoto Sanosuke no le quitaba los ojos de encima al muchachito mientras se alejaba.
--¿Pasa algo General?
--¿Eh?
--Le pregunto si pasa algo.
--No, no pasa nada.
--Entonces podemos pasar a lo que nos reúne General –acotó Satoshi con tono impaciente. El hombre mayor sonrió y se apoyó con cierta soberbia sobre sus codos.
--Tú lo has dicho muchacho. –siseó cerca de su nariz –Hablemos de Dark.
--¿Estás seguro Daisuke?
--Si... Satoshi-kun y yo lo sentimos... Sea lo que sea ese asesino, estaba cerca de nosotros en aquél momento. ¿Tú no sentiste nada cuando pasaste por ese lugar? –el adulto sonrió con cierta pena en sus rasgos.
--Lo siento hijo, pero yo no tengo la habilidad que posee la familia de tu madre. Ella es descendiente de los Niwa, no yo.
--Eh... lo siento Papá.
--No te preocupes. –en ese momento la sombra pareció desaparecer de la cara de Kosuke-san y sonrió ampliamente al orgullo de su vida –Te tengo buenas noticias. Hemos descubierto algo.
--¿En serio?
--¡Claro!, vamos, en casa te cuento.
Y una vez en casa.
--¿Y qué descubrieron? –preguntó con curiosidad.
--Pues –comenzó su Abuelo –Confirmamos los rumores que yo conocía. Al nacer Krad y Dark, un ente superior fue creado de manera paralela. Una especie de "Juez" que interferiría solo en caso de que la lucha entre Krad y Dark sobrepasara los límites permitidos.
--¿Límites?
--A los dueños de sus espíritus se les llama "Tammers" –explica el viejo –Y aunque no lo sepan, estos siempre están en riesgo vital. Los Tammers pueden morir en cualquier momento de la batalla... si el espíritu se lo propone. Si el poseedor muriera, los poderes del espíritu quedan completamente liberados, y ese sería el momento en que el Juez interviniera. Sin embargo, nunca Dark o Krad pudieron matar a sus poseedores, ni siquiera Krad pudo hacerlo con este chico Hiwatari, a pesar de todo lo que lo intentó.
--Esta inactividad hizo que el Juez fuera presa de los codiciosos –continuó Emiko-san –Muchos mal utilizaron su poder mediante invocaciones y hechizos, logrando que su voluntad le abandonara. Ahora el Juez solo es una marioneta de aquél que pueda controlar su poder e imponer su propia voluntad.
--Muchos han muerto por oponerse al Juez, y muchos también lo han hecho al intentar controlarlo. Debes tener mucho cuidado Daisuke... por favor...
--Papá...
--El Juez es implacable, y su poder supera al del Ángel y el Ángel Negro. Controlado adecuadamente es mortal.
--Pero... ¿porqué usarían al Juez para algo tan vano como el asesinato de una mujer normal?
--Inmediatamente culparon a Dark. –dijo Kosuke-san –Eso significa que solo lo hizo para obligar a Dark a moverse. El Juez sabe, al contrario de su Controlador, que los Espíritus no están solos. Inconscientemente buscó presionar al Tammer. Aunque supongo que el control que ejercen sobre él nubla su conocimiento cabal sobre las habilidades de los Espíritus.
--Si el Juez estuviera en su plena facultad... ya habría venido a matarte inmediatamente. –sentenció Emiko con temor. –Él sabe que los Niwa mantenemos a Dark y los Hikari a Krad.
--Pero... no entiendo nada. ¿Cómo descubrieron tantas cosas en tan poco tiempo?... ¿porqué piensan que viene por mí si el Controlador puede obligarle a hacer lo que quiera?, ¿porqué querría ir contra Krad y Dark si estos no han sobrepasado el límite del combate?
Todos guardaron silencio. Sus miradas se volvieron vacías y Daisuke se sintió asfixiado en su propia casa...
Pronto todo fue oscuridad, mientras un leve aroma a manzanas llegaba a su nariz. El suelo se desvaneció y las paredes desparecieron... pero ese perfume....
--¡Daisuke!
--¡Daisuke!, ¡reacciona!
Emiko lloraba mientras Kosuke remecía suavemente a su hijo, inconsciente en sus brazos.
--¡Daisuke!
El Abuelo fue rápidamente por a acomodar un sillón en donde pudieran tenderlo, y Emiko comenzó a buscar algo para intentar despertarlo.
Y mientras el alboroto reinaba en la casa de los Niwa, una figura oscura se mantenía sobre el techo, mirando con curiosidad el cielo nocturno. Una gota de sangre se deslizó desde su frente hasta su barbilla y cayó lentamente, llevada por el viento. Una pequeña sonrisa se formó en su cara pálida y cerró los ojos para sentir el fresco aire.
--Ayúdame... Niwa Daisuke... si no lo haces… acabaré matándote...
--¿Qué crees que habrá pasado Nakano?
--Ni idea General. Se fue tan repentinamente que no logro deducir una posible razón para su... "escape".
--Y con lo bueno que estaba el vino... ¿Al menos logramos algo de lo que buscábamos?
--Solo que el Comandante Hiwatari afirma con seguridad que el culpable del asesinato no es Dark –dijo Eikichi mirando su inseparable libreta –Dice conocer, pero no poseer, plumas del Ladrón Fantasma, y asegura que estas se parecen, pero que no son.
--¿Conclusiones?
--Nada de provecho Señor.
--Entiendo... Nakano, quiero que investigues algo del muchacho que venía con Hiwatari... el chico Niwa.
--¿Daisuke-kun?, claro.
--Creo que es hora de irnos. ¿Qué tal si caminamos?, es una noche preciosa....
Con la cuenta pagada y sin la presencia de Hiwatari, ambos policías se marcharon del restaurant.
--Me preocupan las acciones del Comandante, Señor.
--¿Porqué?
--No es normal que un muchacho que conversa tranquilamente de un tema importante de pronto se ponga pálido como un muerto y salga corriendo del lugar sin dar ninguna explicación.
--¿Y qué piensas?
--Algo ocurrió sin duda.
--Pero no contestó ningún llamado o señal.
--Podría haberlo recordado.
--O sentido...
--¿Sentido Señor?, ¿a qué se refiere?
--A nada en especial mi buen Nakano.
El resto del trayecto fue recorrido en completo silencio. En el hotel se separaron para ir a sus habitaciones. Al verse solo, Matsumoto revisó su maleta y sacó un antiguo libro.
--Con que Niwa Daisuke... podría ser... Emiko, ¿cumpliste tu sueño?
La imagen sonriente de una castaña con cara de inocente aparecía entre las tantas fotos que había. El uniforme de marinera le sentaba de maravilla sobre su figura delicada y floreciente.
--Emiko... –por un momento su mirada se ensombreció –Este es un extraño encuentro...
Una sonrisa extraña cruzó su cara, al tiempo que dejaba la foto a un lado y recordaba al hijo de Emiko…
--Daisuke-kun…. Sin duda alguna, un extraño encuentro…
Un sordo sonido proveniente del balcón lo puso alerta. Con cuidado tomó su arma del bolsillo de su chaqueta, y con los menores movimientos posibles, simuló seguir sin oír nada. Con pasos sigilosos se acercó al lugar.
--¡¿Quién…?!
Pero solo era ella….
--¿Qué haces aquí?
--….Los encontré.
--Pues que coincidencia –dijo con ironía y superioridad –Yo también lo encontré.
--…Amo no entiende… -corrigió la figura, aún escondida en las sombras –Usted… encontró… Yo, LOS encontré.
El reloj pasaba la medianoche. El silencio reinaba en la casa, sin ceder un solo centímetro.
Emiko-san mordía con nerviosismo crónico la punta de un pequeño pañuelo, mientras Kosuke-san intentaba mantener las manos lo suficientemente quietas como para preparar un té a su esposa. El chico Hiwatari había llegado hacía pocos instantes, instalándose junto a Daisuke con una desolada expresión de pánico. El Abuelo se había perdido en la biblioteca, intentando encontrar algo más sobre la Criatura. Su nieto había dicho algo antes de caer inconsciente… solo dos palabras…
El Juez…
Recordaba esas palabras. Formaban parte de una vieja leyenda que él había olvidado hasta ese momento…
Salido de la oscuridad y nacido del Todo Dividido, el Tercer Vértice poseedor de la Gran Justicia acabará con la guerra eterna entre Luz y Oscuridad.
Poseedor de ambos poderes y de ninguno, llegará cuando el viento se corte en los labios de las generaciones. Cuando menos se le espere, llegará cubierto de maldad y de ansias de muerte.
No importa la fuerza, será domado. Ese será el día del Desastre. El Juez llegará el día menos pensado sobre las víctimas que menos lo esperan.
Su infinita fuerza y justicia tiene una debilidad. Al ser parte de Todo y de Nada al mismo tiempo, vaga entre los mundos como un alma. Aquél que sea capaz de encontrarlo, podrá domar su voluntad, y así será llamado el Gran Juez, con la misión de llevar a cabo el Juicio de Voluntades en donde las Partes serán redimidas o condenadas. Sin embargo el Gran Juez que controla el espíritu del Tercer Vértice puede hacer mal uso de su nuevo poder. Entonces Luz y Oscuridad correrán peligro. El equilibrio amenazará con romperse y todo será consumido.
El día del Desastre, las Partes deberán unirse. Solo el Todo acaba con el Todo y la Nada destruye a la Nada.
Sin embargo, ¡cuidado Partes!, si el alma no es liberada, la Triada se verá irremisiblemente consumida por la corrupción. Todos desaparecerán y su existencia se borrará para siempre.
El Alma será el objetivo. Liberar a aquél que los liberará. Solo así, los tres podrán existir por siempre y para siempre.
Recuérdalo siempre. Existe la Luz Negra, representada en Dark y la Brillante Oscuridad, representada en el Ángel Krad. Es más fácil decir que Dark es Yami y Krad, Hikari, pero no sería lo correcto.
Junto a ellos, como el pilar de la balanza que ellos forman, está el Juez. Se dice que nadie lo ha visto nunca, ya que su tiempo no ha llegado. Así como infinito es su poder, infinita es su debilidad. El Juez es todo y nada al mismo tiempo. Es fuerte y débil, hombre y mujer. Por eso dicen que su presencia no puede ser concebida en este mundo, que está dividido en polos. Sin embargo, llegará el día en que el Juez deba venir a este mundo, para juzgar a Luz y Oscuridad. Así, ambos serán condenados o salvados. Como son un equilibrio, no puede ser uno salvado y el otro condenado. Dos cosas podrían pasar cuando esto ocurra: la primera dice que si ambos son salvados, el mundo seguirá su camino, ya que se demostrará que Bien y Mal son el equilibrio correcto y que las especies merecen seguir viviendo a merced de este régimen.
En cambio, si son condenados, el mundo como lo conocemos cambiará, y un nuevo equilibrio será colocado. La humanidad comenzará de nuevo bajo el poder de estos nuevos elementos y todo el ciclo volverá a comenzar. Así, Luz y Oscuridad serán destruidas y su Juez partirá con ellos.
Roguemos porque el Juez no aparezca pronto Hijo. Ruego cada noche que el Juez no sea domado. Ruego cada noche por ti, mi hijo querido, para que el terrible juicio no toque tus ojos.
Roguemos al Juez para darnos tiempo. Roguemos a los dioses para que detengan al Juez el día que decida bajar al mundo. Roguemos que no llegue nunca un domador. Roguemos… roguemos porque el mundo sea el mundo… al menos en nuestras épocas.
Continuará.
5 meses... 5 páginas. No tengo cara para responder los reviews. Solo gracias por leer.
