PROBLEMAS

Eran aproximadamente las tres de la mañana, y vemos a uno de nuestros héroes bajándose de un taxi con tres hermosas "damas", encontradas en un bar. Dichas damas, no tuvieron ningún problema cuando el "santo de bronce" les invitó a pasar a "su mansión". Y menos, cuando el santito, las llevó al segundo piso de su mansión y las metió a un cuarto (nada pequeño por cierto)....

Bueno, en esas estaban (se oían ruidos, jaleos y demás), cuando un somnoliento Tatsumi golpeó no varias sino muchas veces la puerta del cuarto:

-Abre de una maldita vez!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! Gritó

Se escuchó una sonora maldición y en esas, abre la puerta un desarreglado y desvestido Ikki, que ya estaba apuntando a Tatsumi con su dedo cuando dijo: (Más bien gritó)

-Qué demonios quieres? Estoy muy ocupado, si la loca de Saori no está y está comprobado que no hay ningún maldito Dios que quiera invadir el mundo, qué necesitas??????????????????????

Tatsumi, había quedado impresionado por la amenaza del Fénix y le contestó:

"Señor Ikki, disculpe", lo que pasa es que tiene una llamada.

El santo, que estaba impaciente porque sus amiguitas lo estaban llamando, contestó:

Atiéndela tú, tú eres el mayordomo. Y se dispuso a cerrar la puerta.

Tatsumi, sabiendo que con lo que iba a hacer estaba arriesgando su pellejo, pasó saliva y dijo:

Créame señor que lo intenté, pero (glup), la llamada tiene que ver con su hermano......y es de la (glup) policia..

El fénix, que con la sola mención de su hermano y la policía en una misma frase le había hecho bajar hasta cierto punto la borrachera dijo:

Miserable Tatsumi, presta para acá el teléfono.... Si algo le pasó a mi hermanito, tú me las pagas. Y diciendo esto, toma el teléfono en una mano y con la otra coge a Tatsumi del cuello.

Luego, haciendo la voz lo más sobria posible dice:

Aló, buenas noches, días, (en fin), con quién desea hablar?

Al otro lado de la bocina se escuchó la voz de un aburrido oficial quien dijo:

Otra vez?, maldita sea, quiero hablar con el señor Ikki... (y tapando la bocina preguntó, que si todavía no tenían idea acerca del apellido de aquel mal nacido) bueno, del hermano y responsable de la custodia de Shun ...(otro mal nacido).

Ikki, poniéndose del color del papel, dijo:

- Sí habla con él, le pasó algo a mi hermano, está herido, muerto, me puede decir quién le hizo algo, porque si fue nuevamente alguno de esos indeseables caballeros, ya se podrían ir alistando para viajar a la octava casilla del infierno....-Súbitamente el fénix recordó con quien hablaba y se calló por un momento,- donde irán después de que algún Dios los juzgue por sus pecados, porque quiénes son los seres humanos para matarse entre ellos, terminó diciendo Ikki.

El oficial, más aburrido que molesto, le contestó:

- Ni lo hirieron ni lo mataron, cálmese, lo único es que su hermano y otros tres idiotas –perdón, caballeros- están detenidos.

- Qué?????????????????, mi hermano detenido. Debe haber un error oficial, dígame cuáles son los cargos?

- Pues a ver, siéntese porque la lista es larga: a ver, se les acusa de abuso de bebidas alcohólicas, irrespeto a la autoridad, posesión de armas, exhibicionismo en vía pública, sin contar que son menores de edad y se encontraban en compañía de mujeres de dudosa reputación. Eso es todo.

El fénix se había quedado de una sola pieza y sin darse cuenta, apretó más el cuello de Tatsumi quien empezó a ahogarse, y recuperando la poca compostura que le quedaba dijo:

- Oficial, usted nombró a otros tres caballeros, me puede dar sus nombres por favor?- y aunque el Fénix ya sabía sus nombres, sólo quería asegurarse, porque antes de ir por ellos, dejaría encargado a Tatsumi de que fuera arreglando todo para sus funerales.

- Pues a ver,- esta vez el oficial no se tomó la molestia de tapar la bocina y dijo: Qué ninguno de estos tarados tiene apellido????. A ver, señor Ikki? los nombres de las personas detenidas junto con su hermanos son: Seiya , Shiryu y Hyoga. Los conoce usted? Pero dígame si va a venir a pagar la fianza y recogerlos o mejor voy mandándolos para el reclusorio.

- Los conocía, eh perdón oficial, los conozco. Dígame, en qué delegación están? Y soltando automáticamente a Tatsumi, quien se había salvado de morir ahogado, anotó la dirección.

Ikki, colgó el teléfono y se quedó por un momento mirando un punto en la pared, luego, emitió una risa salvaje que erizo los pelos de la nuca de Tatsumi, y provocó que las mujeres que estaban esperando al Fénix, se fueran vistiendo rápidamente.

El fénix, se dio vuelta despacio, y con los ojos más rojos de lo normal (producto de la ira más que del alcohol) dijo:

- Tatsumi, sabes en dónde está mi hermano?

Tatsumi, quien detestaba a todos aquellos niños, le respondió:

- No, no, yo me acuesto muy temprano, pero, cuando me fui a acostar hoy, su hermano estaba con Seiya, Shiryu y Hyoga en el comedor(

Ikki, se acercó más a Tatsumi y le dijo:

- Pues según el oficial, mi hermanito está en una delegación, y...me pregunto yo, para qué demonios te pagan a ti, sino es para saber que pasa en este hueco?. ..

Tatsumi, quien había comprendido, en el tamaño lío en el que se habían metido los demás caballeros, preguntó:

- Perdón señor, pero va a sacarlos de allí?

Ikki, se quedó mirándolo por un momento, y después de reír salvajemente dijo:

-Claro que sí, hay que saldar algunas cuentas. Tatsumi, quieres seguir con vida?

Tatsumi, sin entender aún la pregunta dijo:

-Cla..cla..claro Ikki, qué debo hacer?

El fénix, le contestó:

-Únicamente, darme todo el dinero que traes encima y alistarme uno de los carros de la tonta de Saori. Debo traer a mi hermano y a los difuntos que vienen con él.

-Di..di..difuntos? preguntó Tatsumi, pero viendo que Ikki, no estaba para preguntas salió corriendo y alistó todo lo que el fénix le pidió en menos de cinco minutos.

El fénix (ya vestido y todo) tomó todo lo que Tatsumi le dio y salió rápidamente hacia donde estaba el coche esperándolo. Antes de salir, se volteó y le dijo a Tatsumi:

- No te preocupes Tatsumi, sólo habrán tres funerales y tú no estás en ninguno de ellos. Deshazte de las mujeres que hay en mi cuarto y ve alistando unas cuantas rejas y demás, porque si bien, los tres inútiles que están con mi hermano van a morir, mi querido hermanito no va a volver a ver la luz del sol.

Y diciendo esto, sube al auto y arranca como alma que se lo lleva el diablo.

Tatsumi va entrando otra vez a la casa, y subiendo las escaleras, va rogando porque el fénix no se estrelle o la tacaña de la Saori no le va a pagar nunca...además y aunque no simpatice con ninguno de los mocosos de bronce, pide por cada uno de ellos, porque cuando Ikki los encuentre...