He aquí el siguiente capitulo, esta un poco largo. Nuevamente recuerdo que
todos los personajes pertenecen a Rowling y que no gano nada escribiendo
esto.
Ahora, los reviews:
prima-chan: gracias, claro que seguiré escribiendo. Melody: aquí esta el 2º capitulo, espero les guste. *********************************************** CAPITULO II. FELIZ CUMPLEAÑOS
Los tibios rayos del sol entraban por la ventana de la habitación que Harry había dejado abierta y acariciaban su rostro. Harry salía lentamente de sus sueños, mientras miraba la hora en su despertador, que ya marcaba el medio día.
Harry se levanto de un salto, sus tíos, siempre en su afán de molestarlo, lo levantaban temprano, pero ahora lo dejaron dormir hasta el medio día. Penso que tal vez sus tíos creían que había muerto mientras dormía, pero se convenció que prefirieron dejarlo dormir para luego regañarle. Se puso sus vaqueros y se lavo la cara. En ese momento, llegaron seis lechuzas y entraron por la ventana. Harry solo reconoció a dos de ellas: Hedwing y Pig.
Noto que las una de las lechuzas, de color grisáceo llevaba un paquete grande con las letras W&W muy estilizadas de, así que decidió abrir ese primero. Dentro encontró una carta de los gemelos Weasley.
Apreciable Señor Harry Potter:
¿Como estas? Esperamos que bien, ya que las cosas por aca no andan muy bien que digamos. Gracias nuevamente por los mil galeones que nos diste, al fin ya pudimos montar la tienda en el callejón Diagon. Te mandamos unos artículos como agradecimiento y que pases un feliz cumpleaños. Atentamente: Fred y George.
PD: si te quieres divertir, dale a alguien una de las pastillas color azul que vienen en la caja. También mamá te envió un regalo en nuestra caja.
Harry observo en interior de la caja y vio el frasco de las pastillas azules y un pequeño paquete que contenía un suéter que la señora Weasley le había tejido. Hizo la caja a un lado y abrio la carta de Ron.
Feliz cumpleaños Harry: Espero que estes bien. Disculpa si no te mando nada este año, pero lo que te compre es muy grande como para que Pig te lo llevará. Nos veremos en Hogwarts sino es que antes.
Ron.
Harry se pregunto que sería lo que le había comprado Ron, pero paso a ver la siguiente carta, que era de Hermione.
Harry: Feliz cumpleaños. Vaya, ya casi eres un hombre. Ya tiene s 16 años. Espero que hayas disfrutado tus vacaciones (aunque con esos tíos, quien las disfrutaría). Espero te guste el regalo, es una pequeña cadena en forma de perro. Tal vez te sirva para recordar que Sirius siempre estará contigo. Tengo algo muy importante que confesarte, pero prefiero decírtelo en persona, asi que nos vemos el 1º de septiembre en el expreso de Hogwarts.
Besos, Hermione.
Si la carta de Ron lo dejo pensando, esta dejo a Harry pasmado. Que quería confesarle Hermione. Pero agradeció el regalo de Hermione, el no tenía mas que una cuantas fotos para recordar a su padrino. Se coloco la cadena alrededor del cuello y abrió la siguiente carta, que la traía una extraña lechuza que tenía alrededor de los ojos las marcas de lo que podrían ser unos lentes. Le extraño que la carta no tuviera sello.
Estimado Harry Potter:
Se que es la primera vez que le escribo de manera tan informa, pero este no es un asunto de Hogwarts. Tengo algo muy importante que decirle, por lo que el día 1º de agosto iré por usted, así que deberá preparar sus cosas. También le pido que si le llega una carta del banco de Gringotts, no abra hasta que yo llegue, ya que lo que le tengo que decir tiene que ver con eso. Espero su comprensión.
Atentamente: Minerva McGonagal
Definitivamente, algo muy extraño estaba pasando, ¿porque todos tenían algo que decirle a Harry? Al menos, sabía que McGonagal iría por el al día siguiente, así que solo ese día y regresaría al mundo mágico, o eso creía. Harry busco la carta de Gringotts de la que su profesora de transformaciones hablaba, la tomo de una lechuza rojiza que la momento en que Harry tomo la carta, esta salio por la ventana. Decidió no abrirla, ya que sabía que si desobedecía a McGonagal, le iría mal. Así, se dirigió a la ultima lechuza, que traía un paquete cuadrado de unos 30 centímetros por lado y una pequeña nota, en la que reconoció la caligrafía de su Director.
Harry:
Feliz cumpleaños. Esto pertenecío a tus padres y creo que debes tenerlo ahora. HABLAREMOS DESPUES.
Albus Dumbledore.
Esto era el colmo, lo mínimo que Harry esperaba de todos era un pésame por la muerte de su padrino, pero en vez de eso, solo recibía cartas que lo dejaban intrigado. Decidió abrir el paquete, quería saber que era lo que tenía de sus padres. Pero.
-¡Chico, baja ahora mismo!-. La voz de tío Vernon indicaba que no debía desobedecer, así que Harry salio volado hacia la cocina, pero al abrir la puerta, casi se cae de espaldas de la impresión.
-¡Feliz Cumpleaños!!!!
Harry estaba atónito, en la sala, estaban sus tíos, Vernon y Petunia, pero también estaban la señora Figg y una atractiva muchacha con el pelo color castaño, que le guiño un ojo al momento en que un pequeño mechón del cabello de la chica cambiaba a color rosado. Harry fue el único que se dio cuenta de eso, y reconoció a la chica como Tonks.
-¡Vamos chico, acércate!-. Dijo amable la señora Figg y Harry se acerco.
- ¿Qué es esto?-. pregunto consternado Harry.
-Una fiesta de cumpleaños, ¿qué no vez?-. contesto fríamente la voz de tío Vernon.
- Así es Harry-. Tía Petunia comenzo a hablar.- La señora Figg quiso organizarte ella una fiesta de cumpleaños, y no nos pudimos negar, ¿verdad Vernon?
- Si-. Contesto secamente el tío
Si las cartas estaban extrañas, esto lo era aun mas. Por primera vez su tía Petunia (y solo su tía, porque su tío seguía igual de arrogante), se comportaba como, una tía.
-Bien, ¿Qué esperas para partir el pastel? - y la chica dirigió su mano hacia un pastel en el centro de la mesa de la cocina.
-Eh, si- dijo un poco tonto Harry.
-Oh, si. Lo siento, esta es mi sobrina Nyphandora. Nyphandora, el es Harry.
-Mucho gusto- dijo Harry extendiendo la mano
-Igualmente.
Momentos después, Harry disfrutaba una fiesta de cumpleaños con su tía, la señora Figg y Tonks (puesto que tío Vernon no participio y se limito a leer el diario). Harry partió el pastel, recibio los regalos de Arabella y de Tonks, pero casualmente, había mas regalos bajo la mesa.
-Esos son de nuestra parte-. Hablo Petunia.- Ayer que salimos, te los compramos, por lo mismo que hablamos ayer chico. Espero te gusten.
-Si, son para compensar algunos que no te dimos a tiempo -. Dijo la voz de tío Vernon, tan antipática como siempre.
-Bien, gracias-. Harry realmente estaba contebto. Sus tíos nunca le habían celebrado su cumpleaños, pero lo estaba aun más ya que tenía la compañía de dos miembros de la Orden del Fénix. Aun así noto que algo faltaba, algo que siempre donde estaba Harry, era el ajonjolí de todos los moles. - ¿Dónde esta Duddley?
Harry no creía la que pasaba. Tia Petunia estaba calentado unos huevos, pero cuando Harry pregunto por Duddley, del sartén salio una enorme llama de fuego (N/A: no se emocionen aun, la llama era normal, roja con amarillo, no verde).
-¿Qué sucede Petunia, Harry solo preguntaba por tu hijo?-. Pregunto la señora Figg. Harry noto que sabia algo sobre su tía que el no. Pero al momento que acabo la hablar la señora Figg, el vidrio de la ventana estallo.
-Vaya, si que hace aire, verdad -. Vernon se puso de pie, y apenas y supo como articulo las palabras. Estaba completamente rojo.
-Creo que es hora de que nos vayamos, ¿verdad tía?
-Cierto Nyphandora. Petunía, Vernon, Harry, fue un placer-. Y al decir esto, salio junto con Tonks por la puerta. Justo cuando salieron, hubo un pequeño lapso de cilecio, roto por Tío Vernon.
-Bien, ya se fueron, mira la hora, ya pasan de las tres, creo que es momento de levantarle el castigo a Dudders-. Dijo como si no hubiera pasado nada, pero como respuesta recibió que el cuadro que estaba en una de las paredes, se cayera.
-No Vernon. Sus calificaciones no han sido buenas, y su comportamiento no ha sido la excepeción.
-Pero Petnia, es solo un chico, cualquiera comete errores.
-Vernon, ya tiene 16 años, no podemos seguir consintiéndolo como si tuviera 6.
-Esta bien, solo iré a hablar con el-. Dijo tío Vernon terminado la discusión y saliendo por la puerta. Se oyeron sus pasos subir las escaleras en la cocina, que había quedado en silencio.
-Tía Petunia, ¿te puedo preguntar algo?-. Harry rompió el silencio.
-Ya lo has hecho ¿no?- dijo tía Petunia, aparentando tranquilidad.
-Bien, ¿realmente estas segura de que no eres una bruja?
Había tocado el carbon. La lampara cayo sobre el suelo, estrellándose, y Harry creyó que su tía le gritaría como nunca, pero en vez de eso, tomo una silla y se coloco frente a Harry.
-Ahora estamos solos chico, así que presta mucha atención-. Tía Petunia estaba preocupada y miraba como tratando de encontrar a alguien que pudiera oírlos.- Todo lo que ha sucedido, lo del florero, el sartén la ventana, la lámpara, ¿sabes que significa, cierto?
-¿Magia? -. Preguntó Harry
-Así es.
-Entonces si eres bruja, ¿verdad?
-Si, y no. Veras, durante años he intentado esconder que en parte soy bruja, mas que nada por temor a que Vernon lo descubra, aunque inventaría cualquier cosa para no admitir que la magia existe-. Esta vez, la voz de tía Petunia se oía segura.
-Aun no entiendo que me quieres decir-. Dijo Harry con interés.
- Verás, un año después de que tu madre recibiera su carta para Hogwarts, yo recibí la mía. Estaba encantada de conocer ese mundo, donde todo podía pasar, pero cuando llegué a 4º curso y tu madre al quinto, nos enteramos de que un mago oscuro estaba aumentando su fuerza, tuve miedo de que nos matará, como lo había hecho con uno de mis compañeros, así que decidí salir de Hogwarts y olvidar todo aquello, para regresar a una vida "normal". Aun así, siempre quise a mi hermana, a pesar de lo que te he dicho sobre ella. Tuve miedo de que le pasará algo, pero cuando murió y tu llegaste a mis brazos, juré definitivamente que no entrarías a Hogwarts, para mantenerte a salvo, pero me equivoque. Ahora solo te faltan dos años para terminar, así que prométeme que te cuidaras.-. Harry vio en la cara de su tía una mirada maternal, que demostraba que lo que había dicho era cierto.
-Lo haré- dijo Harry, al momento que su tía lo abrazaba. - solo que, tengo que decirte que mañana vendrán por mi.
-Se lo diré a tu tío-. Dijo soltándolo y secándose las lagrimas. -Llévate tus cosas y ordénalas. Feliz cumpleaños.
Harry salio con todos sus regalos de la cocina y entro a su habitación, acomodo sus cosas como se lo ordeno su tía. Estaba conmovido por lo que le dijo su tía y pensó en lo grande que debía ser el poder de Voldemort como para hacer que otro magos se olviden de su mundo. Termino de acomodar sus cosas y guardo en su baúl las cartas. Se recostó y tomo la cadena que le dio Hermione, recordó a Sirius, pero sabía que si se seguía aferrando a él, solo se haría daño. Comenzó a dormir, esperando el día siguiente, que saldría de Privet Drive.
Les gusto, estuvo bien, alguna crítica o sugerencia, manden sus reviews a:
ricaraxagongar@hotmail.com
se los voy a agradecer.
Ahora, los reviews:
prima-chan: gracias, claro que seguiré escribiendo. Melody: aquí esta el 2º capitulo, espero les guste. *********************************************** CAPITULO II. FELIZ CUMPLEAÑOS
Los tibios rayos del sol entraban por la ventana de la habitación que Harry había dejado abierta y acariciaban su rostro. Harry salía lentamente de sus sueños, mientras miraba la hora en su despertador, que ya marcaba el medio día.
Harry se levanto de un salto, sus tíos, siempre en su afán de molestarlo, lo levantaban temprano, pero ahora lo dejaron dormir hasta el medio día. Penso que tal vez sus tíos creían que había muerto mientras dormía, pero se convenció que prefirieron dejarlo dormir para luego regañarle. Se puso sus vaqueros y se lavo la cara. En ese momento, llegaron seis lechuzas y entraron por la ventana. Harry solo reconoció a dos de ellas: Hedwing y Pig.
Noto que las una de las lechuzas, de color grisáceo llevaba un paquete grande con las letras W&W muy estilizadas de, así que decidió abrir ese primero. Dentro encontró una carta de los gemelos Weasley.
Apreciable Señor Harry Potter:
¿Como estas? Esperamos que bien, ya que las cosas por aca no andan muy bien que digamos. Gracias nuevamente por los mil galeones que nos diste, al fin ya pudimos montar la tienda en el callejón Diagon. Te mandamos unos artículos como agradecimiento y que pases un feliz cumpleaños. Atentamente: Fred y George.
PD: si te quieres divertir, dale a alguien una de las pastillas color azul que vienen en la caja. También mamá te envió un regalo en nuestra caja.
Harry observo en interior de la caja y vio el frasco de las pastillas azules y un pequeño paquete que contenía un suéter que la señora Weasley le había tejido. Hizo la caja a un lado y abrio la carta de Ron.
Feliz cumpleaños Harry: Espero que estes bien. Disculpa si no te mando nada este año, pero lo que te compre es muy grande como para que Pig te lo llevará. Nos veremos en Hogwarts sino es que antes.
Ron.
Harry se pregunto que sería lo que le había comprado Ron, pero paso a ver la siguiente carta, que era de Hermione.
Harry: Feliz cumpleaños. Vaya, ya casi eres un hombre. Ya tiene s 16 años. Espero que hayas disfrutado tus vacaciones (aunque con esos tíos, quien las disfrutaría). Espero te guste el regalo, es una pequeña cadena en forma de perro. Tal vez te sirva para recordar que Sirius siempre estará contigo. Tengo algo muy importante que confesarte, pero prefiero decírtelo en persona, asi que nos vemos el 1º de septiembre en el expreso de Hogwarts.
Besos, Hermione.
Si la carta de Ron lo dejo pensando, esta dejo a Harry pasmado. Que quería confesarle Hermione. Pero agradeció el regalo de Hermione, el no tenía mas que una cuantas fotos para recordar a su padrino. Se coloco la cadena alrededor del cuello y abrió la siguiente carta, que la traía una extraña lechuza que tenía alrededor de los ojos las marcas de lo que podrían ser unos lentes. Le extraño que la carta no tuviera sello.
Estimado Harry Potter:
Se que es la primera vez que le escribo de manera tan informa, pero este no es un asunto de Hogwarts. Tengo algo muy importante que decirle, por lo que el día 1º de agosto iré por usted, así que deberá preparar sus cosas. También le pido que si le llega una carta del banco de Gringotts, no abra hasta que yo llegue, ya que lo que le tengo que decir tiene que ver con eso. Espero su comprensión.
Atentamente: Minerva McGonagal
Definitivamente, algo muy extraño estaba pasando, ¿porque todos tenían algo que decirle a Harry? Al menos, sabía que McGonagal iría por el al día siguiente, así que solo ese día y regresaría al mundo mágico, o eso creía. Harry busco la carta de Gringotts de la que su profesora de transformaciones hablaba, la tomo de una lechuza rojiza que la momento en que Harry tomo la carta, esta salio por la ventana. Decidió no abrirla, ya que sabía que si desobedecía a McGonagal, le iría mal. Así, se dirigió a la ultima lechuza, que traía un paquete cuadrado de unos 30 centímetros por lado y una pequeña nota, en la que reconoció la caligrafía de su Director.
Harry:
Feliz cumpleaños. Esto pertenecío a tus padres y creo que debes tenerlo ahora. HABLAREMOS DESPUES.
Albus Dumbledore.
Esto era el colmo, lo mínimo que Harry esperaba de todos era un pésame por la muerte de su padrino, pero en vez de eso, solo recibía cartas que lo dejaban intrigado. Decidió abrir el paquete, quería saber que era lo que tenía de sus padres. Pero.
-¡Chico, baja ahora mismo!-. La voz de tío Vernon indicaba que no debía desobedecer, así que Harry salio volado hacia la cocina, pero al abrir la puerta, casi se cae de espaldas de la impresión.
-¡Feliz Cumpleaños!!!!
Harry estaba atónito, en la sala, estaban sus tíos, Vernon y Petunia, pero también estaban la señora Figg y una atractiva muchacha con el pelo color castaño, que le guiño un ojo al momento en que un pequeño mechón del cabello de la chica cambiaba a color rosado. Harry fue el único que se dio cuenta de eso, y reconoció a la chica como Tonks.
-¡Vamos chico, acércate!-. Dijo amable la señora Figg y Harry se acerco.
- ¿Qué es esto?-. pregunto consternado Harry.
-Una fiesta de cumpleaños, ¿qué no vez?-. contesto fríamente la voz de tío Vernon.
- Así es Harry-. Tía Petunia comenzo a hablar.- La señora Figg quiso organizarte ella una fiesta de cumpleaños, y no nos pudimos negar, ¿verdad Vernon?
- Si-. Contesto secamente el tío
Si las cartas estaban extrañas, esto lo era aun mas. Por primera vez su tía Petunia (y solo su tía, porque su tío seguía igual de arrogante), se comportaba como, una tía.
-Bien, ¿Qué esperas para partir el pastel? - y la chica dirigió su mano hacia un pastel en el centro de la mesa de la cocina.
-Eh, si- dijo un poco tonto Harry.
-Oh, si. Lo siento, esta es mi sobrina Nyphandora. Nyphandora, el es Harry.
-Mucho gusto- dijo Harry extendiendo la mano
-Igualmente.
Momentos después, Harry disfrutaba una fiesta de cumpleaños con su tía, la señora Figg y Tonks (puesto que tío Vernon no participio y se limito a leer el diario). Harry partió el pastel, recibio los regalos de Arabella y de Tonks, pero casualmente, había mas regalos bajo la mesa.
-Esos son de nuestra parte-. Hablo Petunia.- Ayer que salimos, te los compramos, por lo mismo que hablamos ayer chico. Espero te gusten.
-Si, son para compensar algunos que no te dimos a tiempo -. Dijo la voz de tío Vernon, tan antipática como siempre.
-Bien, gracias-. Harry realmente estaba contebto. Sus tíos nunca le habían celebrado su cumpleaños, pero lo estaba aun más ya que tenía la compañía de dos miembros de la Orden del Fénix. Aun así noto que algo faltaba, algo que siempre donde estaba Harry, era el ajonjolí de todos los moles. - ¿Dónde esta Duddley?
Harry no creía la que pasaba. Tia Petunia estaba calentado unos huevos, pero cuando Harry pregunto por Duddley, del sartén salio una enorme llama de fuego (N/A: no se emocionen aun, la llama era normal, roja con amarillo, no verde).
-¿Qué sucede Petunia, Harry solo preguntaba por tu hijo?-. Pregunto la señora Figg. Harry noto que sabia algo sobre su tía que el no. Pero al momento que acabo la hablar la señora Figg, el vidrio de la ventana estallo.
-Vaya, si que hace aire, verdad -. Vernon se puso de pie, y apenas y supo como articulo las palabras. Estaba completamente rojo.
-Creo que es hora de que nos vayamos, ¿verdad tía?
-Cierto Nyphandora. Petunía, Vernon, Harry, fue un placer-. Y al decir esto, salio junto con Tonks por la puerta. Justo cuando salieron, hubo un pequeño lapso de cilecio, roto por Tío Vernon.
-Bien, ya se fueron, mira la hora, ya pasan de las tres, creo que es momento de levantarle el castigo a Dudders-. Dijo como si no hubiera pasado nada, pero como respuesta recibió que el cuadro que estaba en una de las paredes, se cayera.
-No Vernon. Sus calificaciones no han sido buenas, y su comportamiento no ha sido la excepeción.
-Pero Petnia, es solo un chico, cualquiera comete errores.
-Vernon, ya tiene 16 años, no podemos seguir consintiéndolo como si tuviera 6.
-Esta bien, solo iré a hablar con el-. Dijo tío Vernon terminado la discusión y saliendo por la puerta. Se oyeron sus pasos subir las escaleras en la cocina, que había quedado en silencio.
-Tía Petunia, ¿te puedo preguntar algo?-. Harry rompió el silencio.
-Ya lo has hecho ¿no?- dijo tía Petunia, aparentando tranquilidad.
-Bien, ¿realmente estas segura de que no eres una bruja?
Había tocado el carbon. La lampara cayo sobre el suelo, estrellándose, y Harry creyó que su tía le gritaría como nunca, pero en vez de eso, tomo una silla y se coloco frente a Harry.
-Ahora estamos solos chico, así que presta mucha atención-. Tía Petunia estaba preocupada y miraba como tratando de encontrar a alguien que pudiera oírlos.- Todo lo que ha sucedido, lo del florero, el sartén la ventana, la lámpara, ¿sabes que significa, cierto?
-¿Magia? -. Preguntó Harry
-Así es.
-Entonces si eres bruja, ¿verdad?
-Si, y no. Veras, durante años he intentado esconder que en parte soy bruja, mas que nada por temor a que Vernon lo descubra, aunque inventaría cualquier cosa para no admitir que la magia existe-. Esta vez, la voz de tía Petunia se oía segura.
-Aun no entiendo que me quieres decir-. Dijo Harry con interés.
- Verás, un año después de que tu madre recibiera su carta para Hogwarts, yo recibí la mía. Estaba encantada de conocer ese mundo, donde todo podía pasar, pero cuando llegué a 4º curso y tu madre al quinto, nos enteramos de que un mago oscuro estaba aumentando su fuerza, tuve miedo de que nos matará, como lo había hecho con uno de mis compañeros, así que decidí salir de Hogwarts y olvidar todo aquello, para regresar a una vida "normal". Aun así, siempre quise a mi hermana, a pesar de lo que te he dicho sobre ella. Tuve miedo de que le pasará algo, pero cuando murió y tu llegaste a mis brazos, juré definitivamente que no entrarías a Hogwarts, para mantenerte a salvo, pero me equivoque. Ahora solo te faltan dos años para terminar, así que prométeme que te cuidaras.-. Harry vio en la cara de su tía una mirada maternal, que demostraba que lo que había dicho era cierto.
-Lo haré- dijo Harry, al momento que su tía lo abrazaba. - solo que, tengo que decirte que mañana vendrán por mi.
-Se lo diré a tu tío-. Dijo soltándolo y secándose las lagrimas. -Llévate tus cosas y ordénalas. Feliz cumpleaños.
Harry salio con todos sus regalos de la cocina y entro a su habitación, acomodo sus cosas como se lo ordeno su tía. Estaba conmovido por lo que le dijo su tía y pensó en lo grande que debía ser el poder de Voldemort como para hacer que otro magos se olviden de su mundo. Termino de acomodar sus cosas y guardo en su baúl las cartas. Se recostó y tomo la cadena que le dio Hermione, recordó a Sirius, pero sabía que si se seguía aferrando a él, solo se haría daño. Comenzó a dormir, esperando el día siguiente, que saldría de Privet Drive.
Les gusto, estuvo bien, alguna crítica o sugerencia, manden sus reviews a:
ricaraxagongar@hotmail.com
se los voy a agradecer.
