Hola ¿Cómo están? Yo por alguna razón estoy feliz, feliz y más porque de nuevo tengo muchos reviews no puedo creer el éxito de la historia pero bueno aquí hay otro chap y espero que lo disfruten.

Contesto

Ale: Ya te explique porque no te dije y no te he hecho el cuestionario te parece si lo dejamos cada dos o tres chaps es que ese era especial por ser el primer capitulo.

Lamister: que bueno que te intrigan los adelantos para eso están ^.^, que bueno que te guste el ff.

Maxie: bueno aquí esta el chap.

Pao Bloom: gracias y aquí esta el chap.

Emily Evans: me alegra que te parezca buena ^.^ aquí esta la continuación.

Nafra: A pero puede ser que le atines con la hipótesis y como vez ya seguí. (Cristi tiene razón ya todos me dicen Andi)

Isabelle Black: Si, si sabe mas de lo que les dije y creo que (según mis planes) se enteraran en el chap seis y si Remus a de verse muy tierno y bueno lo del hada ya también pronto sabrás quien es y sigo escribiendo.

Aydä: Me encanto tu nick. Bueno ya subo y bueno la intriga se te quedara por un rato porque no tengo planeado explicarlo todavía ^.^UU bueno aquí esta el siguiente chap.

Bueno esos fueron todos los rr. Gracias a todas las personas que leen este ff y no dejas reviews y a las que los dejan mil gracias. Pero bueno sólo quiero decir antes de continuar (por si hay alguna duda) que nada de lo que puedan reconocer es mío y quiero pedir perdón a cualquier autora si este ff contiene alguna situación que tenga el suyo o que se paresaza mucho, créanme no lo hago queriendo. Además quiero dedicar este ff a mi mejor amiga Montse Simó y a mis dos amigos (y compañeros en las locuras) Alejandro Jaime (el gussi) y Alejandro Cano. GRACIAS POR ESTAR ALLÍ SIEMPRE. Y claro a todos los que lean esto. Y como dije en el chap me haría feliz recibir rrs, no es muy difícil con un "sigue" o "es una basura" me conformo. No espero que todas las personas les guste, así que me encantaría recibir críticas (constructivas) pero por favor no necesito insultos (créanme no los necesito). Y bueno aquí esta el tercer chap del fic mas emocionante (creo) y con más preguntas espero que lo disfruten.

De que están hechos los sueños?

Por Syringen

Todo el mundo sueña pero ¿De que material están hechos los sueños?

Es algo que los personajes de este ff descubrirán.

Capitulo tres

Los ojos del cielo

Cuando veas en los ojos de un mortal el cielo tu vida no volverá a ser igual.

-Hola niñas.- dijo Lily mirando a varias chicas.

Todas estaban vestidas con el mismo uniforme verde y gris. Era un lindo internado, muy distinto a Hogwarts. Era un edificio grande, donde sólo había chicas, cuyos familiares había decidido deshacerse de ellas durante algunos años. Lily vivía allí desde que tenía trece años. Cuando sus padres habían comenzado a viajar por el mundo.  Cada verano iba y se quedaba allí. Dumbledore había hablado con la propietaria del lugar. Una mujer que parecía que podía romperse con cualquier movimiento. El lugar le había parecido seguro al director. Lily sonrió. Era la mayor, había otras dos chicas con las que podría llevarse bien, una de quince años y la otra de catorce. Las demás chicas eran desde los cinco años hasta los once, doce años. Lily las miró. Todas vestidas igual. ¿Se verían así en Hogwarts? Una falda gris, una blusa blanca, un chaleco verde, y el cabello recogido con listones verdes. De repente los colores los asocio con la casa de las serpientes.

-¿Y Lil ya hay un chico?-dijo picadamente una muchacha con las que platicaba desde hacia unos minutos. Era alta mucho más que Lily, tenía la piel apiñonada y llena de pecas, unos grandes ojos azul celeste y el cabello castaño.

-No Ali y no lo habrá por un rato. –la chica de quince años rió.

-No estaría tan segura si fuera tú. –Lily le sonrió.

La mayoría de las chicas se habían ido de nuevo a sus salones. La llegada de Lily siempre causaba revuelo. Una mujer salió de algún lugar diciéndoles a las chicas que se movieran más aprisa.

-Hola Lily ¿Cómo estuvo el colegio?

-De maravilla señorita Roobs.

-Me alegro. ¿Cómo esta Albus?

-Bien, con las mismas energías de siempre. – La mujer sonrió. Una sonrisa cansada. Estaba vieja, no era la misma de antes.

-Alina acompaña a Lily a su habitación. Tienes la tarde libre.

-Gracias señorita.- las dos chicas empezaron a avanzar.

-Me encanta que estés de nuevo aquí.

-Si es un bonito lugar, aunque me gusta más Hogwarts.

-¿Y a quien no le gustaría mas? Imagínate un lugar enteramente mágico.

-Sabes ahora puedo hacer magia fuera del colegio.

-¿ENSERIO? Guau será un genial verano.

-Si ¿Qué noticias hay? ¿Quién se ha ido? ¿Hay nuevas?

-Cintia se fue, sus padres se la llevaron, también las gemelas y han llegado algunas personas pero creo que ya te conocen. Las chicas te dieron a conocer inmediatamente y otra chica de dieciséis como tu. Duerme en el cuarto de alado al tuyo. Se llama Alessandra. Esa simpática, pero muy callada. Salió, es como tu, no la pueden tener aquí. La conocerás en la cena.

-Si te refieres a mi, Ali, llegue hace rato.- dijo una chica. Lily la miró. Lo primero que observo fueron sus grandes ojos azul oscuro. Esos ojos que no olvidaría jamás y que tenía la sensación de haber visto antes. Estaban llenos de una extraña tristeza. Toda oculta por una capa de vida perdida. Era alta, un poco más que Lily, con el cabello muy negro, no reflejaba la luz, además era muy largo le llegaba hasta la cintura, la piel muy pálida, Lily notó algunas cortadas y por último miró de nuevo sus ojos.

-Debes se Alessandra.

-Si, puedes decirme Ale.- aunque quería ser amable su voz era cortante y fría.

-Soy Lily.

-Me lo imaginaba, nadie mas hubiera causado tanta conmoción en este lugar.

-¿Qué?

-Eres famosa, muchas niñas te admiran.- En su cara apareció una sonrisa amarga.- Muchas.- dijo antes de desaparecer por la puerta.

-Es extraña, como te dije no habla mucho. Bueno tú tienes que contarme todo de la magia.- dijo Ali mientras las dos chicas entraban a la habitación de Lily.

-Esta tal y como la deje.

-Nadie entra nunca.

Lily pasó su mirada por el cuarto. Tal y como lo recordaba. Una buhardilla acogedora y muy linda en el piso más alto de la casa. La habitación más lejana del pasillo. Estaba decorada con rojo y dorado pro doquier, fotos de sus amigas, del equipo de Quiddich, algunos libros de magia en la estantería sobre el escritorio. Una cama, sin dosel, la cómoda, un par de sillas y algunas otras cosas. Dejo caer su baúl.

-¿Qué quieres que te cuente?

-Todo en especial quien te dio ese collar.

Lily tomó la cadena de plata de su cuello mientras se sonrojaba. Ali lanzó un gritito.

~*~

James miró la casa frente a el. Era vieja y parecía que se desplomaría en cualquier momento. Tenía un gran jardín que su abuela cultivaba. "arquitectura del siglo quince" solía decir su abuelo. Sirius siempre reía cuando decía eso porque siempre seguía algún comentario como "Tan vieja como tu abuela e igual de resistente"

-Guau las rosas salieron bonitas este año. –dijo a Sirius le gustaba ayudar a la abuela Potter en el jardín, cargar el abono, ayudar a plantar, como el decía hacer el trabajo duro.

-Si, cariño, fui a comprar un nuevo abono con el señor Martín, parece que les gusta.

-Si, ya quiero empezar a trabajar. ¿Cómo están lo geranios? ¿Tengo que escarbar?- dijo con una mirada de maniático.

-Si, querido, sabia que te gustaría escarbar para lo geranios.

-GRACIAS.- grito el chico mientras subía las escaleras del porche y entraba a la casa.

-A veces me recuerda a mi viejo perro doberman… como le gustaba escarbar.- dijo la anciana con una sonrisa. 

-Si, a veces se asemeja mucho a un perro. –dijo James aguantando la risa.

-Se pondrá muy feliz al ver las nuevas plantas que recibí, James, amor, podrías decirle que lo de la jardinería esta ahora en el cobertizo del sur.

-Si, abuela.

-bien iré a cambiarme.- y así todos entraron a la casa.

~*~

-MAMÁ YA.

-ELINOR DEJA DE HUIR.

-MAMÁ DEJA DE PERSEGUIRME. ES SUFICIENTE, NO SOMOS UNA FAMILIA NO INTENTES QUE LO PARESCAMOS. – la chica callada y calmada de Hogwarts había desaparecido, la joven Dashwood estaba fura de si. Frente a ella estaba una mujer, ambas eran muy parecidas, la única diferencia era los ojos grises de la joven.

-SOMO UNA FAMILIA.

-ASÍ CLARO MADRE, ENGAÑA A TU JEFE Y A TODOS LOS INUTILES DE ESA OFICINA PERO YO NO CAERE EN EL JUEGO.

-ELINOR VULEVE ACÁ.

-no.- Elinor había bajado su voz hasta los susurros llenos de cólera.-No pienso caer en tus garras de nuevo, no tengo once años, no creas que puedes engañarme de la misma manera, creme no puedes.

-no me hables así.- dijo la mujer y tomó a la chica por la muñeca moviéndola de un lado a otro con furia, luego la soltó. La joven cayó al suelo. –Eres una chica tonta, harás lo que te diga.

-No, esto se acabo.- dijo Elinor.- Se acabó ser la chica tonta que no hace nada, no pienso quedarme aquí y escuchar tus estupideces madre que llegue tu jefe y se enteré que tu hija se fue.

-¿Qué quieres decir?

-ya lo he dicho me voy. No llevo aquí ni un mes y ya estoy harta, me voy.

-¿Y a donde iras? Nadie querrá una chica insolente como tú.

-Debería denunciarte, iré a casa de mi amiga Ingrid. No pienso soportarte mas, lo he hecho por los últimos siete años, te volviste insoportable desde el momento en que murió papá. –Elinor y su madre estaban en la entrada de al casa. Allí había un baúl, parecía que allí había estado desde el momento que la joven aprendiz de bruja había llegado a la casa, hacia ya casi tres semanas.

-No puedes abandonarme.

-Claro que puedo. Iré al ministerio y haré lo que debía hacer hace mucho tiempo.

-No lo harás, no eres capaz, siempre te ha faltado valor y decisión.

-Iré, mírame.

-No te dejare.- la mujer la tomó de la muñeca y empezó a subir las escaleras.

-SUELTAME.

-NO

-MAMÁ DÉJAME. – Su madre la arrastraba, iba golpeando las escaleras. Se paró y puso fuerza.

-MIRÁ NIÑA ES HORA DE QUE APRENDAS QUE NO PUEDES HACER LO QUE DESES petrificus totalus. – Elinor quedo tiesa. –Aprenderás a respetar. –Con otro movimiento de su varita la hizo levitar y con más calma la subió a su habitación. Eli miraba el techo. Lágrimas empezaron a cruzar su cara. "Gracias papá" pensó "gracias por condenarme." Su madre la hizo entrar a su cuarto, le dio movimiento otra vez y le cerró la puerta en las narices.

-MAMÁ DEJAME SALIR. MAMÁ. – la mujer puso un hechizo silenciador y bajo a la sala para leer.

Elinor se dejó caer en su cama. Le dolía la muñeca de donde su madre la había jalado. Pero le dolía más lo que sentía. Quería salir, quería vivir, escapar de su madre. Hundió su cara en la almohada y empezó a sollozar. "no es justo" repitió en su cabeza "NO ES JUSTO". Un rayo cruzo el cielo nocturno, un trueno estalló y como si esa hubiera sido la señal que esperaba la lluvia empezó a caer.

~*~

Lily miró los rayos cruzar el cielo, escucho los truenos y sintió la lluvia que mojaba sus brazos. Estaba apoyada en el alfeizar de la ventana. Ninguna de las chicas del internado estaba, se habían ido a una excursión, a una granja, llegarían dentro de dos días. Lily al no estudiar allí no iba a ese tipo de paseos, se quedaba en el instituto y perdía las horas hablando con la cocinera. Pero esta vez había otra persona en la casa. Alessandra también se había quedado. Lily y ella se veían, cruzaban palabras agradables, pero no hablaban. Lily seguía extrañada con los ojos de la chica. ¿Dónde los había visto antes? Metió los brazos y cerró la ventana. Apagó las luces y se quedo a oscuras en la habitación. Pensando en muchas cosas una de ellas tenía que ver con el collar que pendía de su cuello. Sonrió mientras jugaba con la estrella.

-¿Qué me pasa?-se regaño. -¿Por qué no puedo quitarte de mi cabeza?- Se echo para atrás y se acostó en el suelo. Saco la cadena de su cuello y la miró. -¿Qué me pasa? ¿Por qué de repente eres lo único que rodea mi cabeza? ¿Por qué?- Otro rayo. Sonrió una vez más. Con una de esas sonrisas tontas. Una ráfaga de aire frío la hizo voltear una vez más a la ventana. Se paró. La había cerrado, se acordaba. Se extendió para tomar el borde. No lo alcanzaba estaba muy lejos. Se apoyó en el alfeizar esperando que el viento le trajera de regreso la ventana. La lluvia caía fuerte y la mojaba toda. Sonrió, no le molestaba la lluvia. Otro rayo. Lily se echo hacia atrás asustada. ¿Qué había sido eso? ¿Qué? Le recordaba tantas cosas. ¿Qué? ¿Dónde la había visto antes? Era una persona que se deslizaba calmadamente lejos de la casa. Como una sombra. Una sombra. Varias imágenes llegaron a su mente como flechazos, pero hubo un recuerdo que se quedo estancado en su cerebro. Tan nítido, como si hubiera pasado hacía muy poco tiempo, cuando habían pasado casi tres años antes. Su respiración se agitaba más. De repente llego otra imagen. Los ojos de Lily se abrieron de par en par. Se arrodillo frente a su baúl. Saco dos moños, su varita y luego lanzo sus cosas hacia la esquina más lejana. Apretó con fuerza la cadena de su cuello y salió corriendo. Cerró la puerta de un golpe.

-ALESSANDRA ABRE.- la chica entreabrió la puerta.

-¿Lily que sucede? –La pelirroja pateo la puerta, esta golpeo la pared.

-¿LILY QUÉ PASA?

-¿Por qué no me lo dijiste?

-¿Decirte que cosa?- Lily empujo a Ale a la pared.

-Que eras una bruja- de la bolsa de la chica saco una varita, mostrando a su vez la suya.

-¿Cómo lo descubriste?

-No soy idiota, además sabía que te había visto antes.

-¿Qué? No estado en Inglaterra desde hace años.

-tres años para ser exactos, fue en un festival la última vez que estuviste en este país. . - Alessandra palideseó.

-¿Cómo…Cómo lo sabes?

-Te vi, te vi desaparecer. En el momento en el que el kiosco exploto volteé al puente y allí vi esos ojos. – señalo las pupilas de Alessandra.

-¿Por qué lo recordaste desde hace un mes que estamos viviendo bajo el mismo techo?

-Porque esta noche volví a ver la sombra que vi esa noche de verano. Justo después de que el hada hablara conmigo. Lo dijo claramente cuando veas en los ojos de un mortal el cielo, tu vida no volverá a ser igual. Y justo ese día no volvió a ser igual, el ministerio se llevo a mis padres haciéndolos viajar a distintas partes del mundo, separaron a mi familia. Yo vine a este lugar, mi hermana… quien sabe donde este. Pero no vengo a decir eso, ahí que irnos.

-¿Cómo?

-Por la puerta de atrás, tenemos que alejarnos, ten.-le dio un moño. –Es un translador, cuando estés sola piensa en la persona que mas confianza te inspire, aparecerás con ella.

-¿Quién te los dio?

-El director de mi colegio.

-Pues iré con el mismo Dumbledore.

-Salúdamelo.- oyeron otro golpe en la puerta este mas fuerte. -¿Lista?

-Claro.

-Entonces vámonos.

-Si.- las dos chicas bajaron las escaleras y salieron de la casa. Se miraron cuando llegaron a un cruce. La lluvia caía fuertemente, las calles estaban llenas de lodo.

-¿Es el adiós Lily?

-No nos veremos de nuevo, dile a Dumbledore que el hada ha vuelto a acertar que empiece a buscar aliados.

-Se lo diré. ¿A donde iras tu?

-No lo se. Hasta luego.

-Nos veremos.- las dos chicas se separaron. Lily volteo. 

-ALESSANDRA AQUÍ VIENEN.- grito. Sabía que la perseguirían a ella. –DESAPAERCE.

Empezó a correr o más rápido que sus piernas le permitían. Entró en la arboleda del parque, tenía que desaparecer, ¿pero con quien iría, con quien? Seguía corriendo, la lluvia caía a su alrededor. Otro rayo, el trueno la hizo saltar. Pero no paró. Fue cuando lo sintió. Alguien la había tomado de la mano. Se volteo rápidamente, soltándose, haciéndose hacia atrás. Un hombre estaba parado frente a ella. Se veía imponente.

-Hola.- dijo, esa sola palabra estaba llena de odio, amargura y era fría, sin vida, sin ningún sentimiento de bondad. Quería correr, pero sus piernas no le respondían. Empezó a caminar poco a poco, alejándose, le hombre sólo la veía. Parecía que sonreía. Lily no lo resistió más y empezó a correr.

-Nadie escapa de mí.- dijo el hombre. Lily seguía corriendo. –Nadie. –La chica cayó de bruces en el suelo. Miró el moño en sus manos. Se volteo. Despacio el hombre se acercaba. Había alzado su varita.

-Nadie me ve y sale ileso, o vivo.- Lily estaba llena de miedo. "quiero salir, ayuda, ayuda" apretó fuertemente el moño y su varita, con la otra mano la cadena. Una cara apreció en su mente.

-Avada Keda…- "no, no pienso rendirme." pensó. Fijo todas sus energías en esa cara en su mente. Sintió como todo empezaba a dar vueltas. -...bra.- El rayo verde se acercaba. Lily sintió como todo desaparecía a su alrededor. Dibujo una sonrisa en su rostro. Todo se iba borrando la luz verde se confundía con todo. La chica sabía que iba pasar. Solo cerró los ojos y espero.

¿Y que les pareció? Espero que les haya gustado. Bueno quiero aclarar algo, en el primer chap se abran dado cuenta que había spoilers del quinto libro insignificantes pero no estoy siguiendo lo que dice este libro así que no creo que haya más, a menos que mi mente me juegue una mala pasada. También quiero avisarles que me iré de viaje desde el15 de este mes hasta el 7 de enero, es probable que traiga conmigo bastantes chaps ya escritos pero no subiré durante ese periodo. En la semana que me queda intentaré subir dos chaps mas (ya tengo escrito hasta el 5 completo y estoy empezando el sexto) Espero que tengan alguna hipótesis. Así que solo les dejo los adelantos.

Adelantos.

El próximo chap se llama Noche de caos y hay algunas escenas.

-¿Entonces bajarás?

-No.- La madre de la chica cerró la puerta  y con su varita lanzó un hechizo silenciador.

-No me hagas hacerlo en el modo difícil.

-No vas a controlarme otra vez con eso.

-¿apostamos?

-No te atreverías.

-A diferencia tuya yo no soy una cobarde.

-La verdad yo tampoco.- Elinor estaba harta, harta de su madre, harta de la vida que llevaba, si hubiera sido por ella nunca habría regresado a esa casa.

-La verdad no es cierto y lo sabes.

-yo ni siquiera quería vivir contigo.

-Creme también pienso que eres un estorbo.

-¿para que tuviste una hija entonases?

-Aun me lo pregunto.

-No voy a bajar.

-Si lo harás Imperio.-Elinor distinguió la sensación conocida de paz y tranquilidad. "no, no otra vez, no volveré, no otra vez, NO" El hechizo se deshizo miró las escaleras  e hizo la única cosa que supo corrió. Abrió su baúl y saco su varita. El ruido había atraído a los invitados.

-¿Por qué?

-Por Eli sobre todo, no se me da mala espina que no haya escrito más.

-Ingrid eres muy paranoica.

-No es eso, sabes siento como tu con Cindy.

-¿a que te refieres?

-A ese sentimiento de que algo anda mal. – Una lechuza tocó en el vidrio. Ingrid se acercó y la metió.

-Carla es para ti del trabajo.- le extendió la carta. Su hermana la tomó y la abrió rápidamente.

-Por Merlín Ingrid tienes un sexto sentido.

-¿Por qué?

Espero que nos veamos en el siguiente chap muy pronto por ahora se despide.

Syringen A.L.C.S