MAL VERDE

By: Darkness

"Todos llevamos un demonio dentro"

Un fan fic de Spiderman.

CAPITULO 3: Un gato en la oscuridad.

Todo termina siempre en tu nombre

rueda mi mente tras de ti

presiento que me voy a enamorar.

SASHA SOKOL, Rueda mi mente

- No me salgas con tonterías Eddie, ¿Dónde están las fotos?.-

Peter Parker se detuvo justo delante de la puerta. J.J. Jameson se escuchaba realmente furioso. Más que de costumbre. Quiso acercarse un poco más para saber quién era la pobre víctima de su jefe, pero una mujer de cabello negro lo detuvo poniendo suavemente su mano en su pecho.

- Mejor no.- Le dijo.

Peter frunció el ceño y agudizó la vista. Con quien J.J. discutía le pareció ligeramente familiar.

-¡¡Le digo que Spiderman rompió mi cámara y el rollo se veló!!.-

Lo reconoció. El fotógrafo que le había estado tomando fotos sin su permiso esa mañana. Sintió una punzaba de culpabilidad, después de todo él había roto la cámara.

- Estas despedido ¡Fuera de aquí!.-

El joven salió y Peter pudo sentir su violento odio cuando pasó a su lado, empujándolo. Eddie Brock poseía una agresividad que lo hizo estremecerse.

- ¿Te vas a quedar ahí parado?.- Gruñó J.J.- ¡Entra Parker!.- Peter entró y se sentó delante de su jefe.- Como acabo de despedir a mi fotógrafo de sociales Tu irás en su lugar a la premier de la nueva película de K.B., ¿Entendido?.-

- ¡Jameson!.- Entró de pronto un hombre corpulento, de piel oscura.- Nos falta la primera plana, ¿Dónde están las fotos de Eddie?.-

- Brock está fuera, pon una foto de Kasady en primera plana: "Psicópata vuelve a prisión por onceava ocasión"… ¡Despierta Parker!

- ¡Si!.-

- ¿Qué me tienes o por qué sigues ahí sentado?.-

- ¡Ah! Le traigo unas fotos.-

- Más te vale que sean de Black Cat.-

Peter parpadeó sorprendido: "¿Perdón?"

- ¡Así se hace llamar la nueva amenaza de la ciudad! ¡Como si necesitáramos otro fenómeno!.-

- Basta Jameson.- Se quejó el hombre de piel negra.- No te consta. Todavía no sabemos si es un ladrón o un nuevo héroe.-

- ¿Cuál nuevo héroe? ¡Por favor Robbie! Actúa como ese viejo ladrón que "casualmente" se llamaba igual.-

- Jefe…- Habló tímidamente Peter, sacando su fólder de fotos.

- ¿Todavía sigues aquí Parker?.-

- Estás son las fotos nuevas de Spiderman.-

- ¡Perfecto!.-

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La noche se apoderaba del cielo, cubriéndolo con su manto oscuro. Aún en la ausencia de sol el calor era insistente. Peter no lo había notado por el aire acondicionado del laboratorio y el del Diario el Clarín, pero ahora lo resentía mientras se columpiaba entre los edificios con su traje de spiderman. El calor pegajosos y agobiante no podía disminuirlo ni con sus vueltas en el aire, su subir y bajar, su dejarse caer y después salvarse antes de tocar el piso, al contrario esas acciones parecían incrementarlo. Convencido de eso, se detuvo en la azotea de unos departamentos, donde se apoyó en el borde para contemplar la ciudad.

En una noche tan calurosa como esa se le había informado del fallecimiento de sus padres –tal vez por eso el calor lo hacía pensar tanto en ellos-. Él, apenas un niño de seis años, jugaba con sus carritos en la sala cuando de pronto llegaron sus tíos: Tía May tenía los ojos hinchados y rojos como si hubiera llorado durante horas; la figura alta y delgada de Tío Ben estaba entristecida. Fue su tío quien se inclinó a su altura y comenzó a explicarle que la muerte es algo natural e indispensable para la vida…

Levantó su mirada y por encima de los rascacielos, más allá de los altas edificios, se asomaba la luna llena. La primera del mes. Grande y majestuosa, indiscutida reina del cielo.

Un ruido familiar le hizo bajar la cabeza. En la calle varios policías corrían tras una sombra negra –la misma que él había visto en el almacén-, pero antes de atraparla resbalaron y cayeron al suelo. La sombra, que Spiderman reconoció como una mujer, saltó ágilmente entre los coches que transitaban en la calle, provocando que estos se estrellaran contra la acera, entre sí o contra alguna tienda; los autos de atrás tratando de esquivarlos patinaron en el pavimento e inevitablemente fueron a chocar contra los otros. Las sirenas se dispararon, el humo y los gritos le siguieron.

Con una hermosa maniobra la mujer saltó hasta quedar sobre un faro de luz, parecía sonreír al observar lo que había causado. Al instante llegaron varias patrullas y la rodearon, los policías dijeron que la habían seguido y que tenía que entregarse. Entonces, con una muestra de agilidad felina ella saltó hasta el tejado de una casa, burlando cínicamente a los policías y desvaneciéndose en la oscuridad. El faro de luz donde ella había estado se vino abajo destrozando tras patrullas.

¿Quién era ésta mujer que dejaba tanta destrucción a su paso? Spiderman creyó saberlo.

- Creo que he visto a un lindo gatito.- Murmuró al momento de lanzarse tras ella.

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Recostado en el sillón jugaba con una daga en sus manos: sosteniendo el mango con la derecha hacia girarla en la punta de su dedo índice izquierdo. La mano no sangraba pues estaba cubierta con una armadura verde que se extendía por todo su cuerpo hasta detenerse en el cuello. Sus ojos no veían nada, se iban por ahí y se perdían en la luces de la ciudad. El ceño fruncido indicaba que se hallaba hundido en profundas reflexiones.

El experimento en la cámara fue todo un éxito. El humo verde lo había hecho más rápido, más fuerte, más ágil y –contrario a su padre- él si lo recordaba. Ya había puesto en práctica sus nuevas habilidades, matando al científico que lo ayudó y a los que construyeron la réplica de la cámara. Total, él era Harry Osborn, dueño de las empresas OsCorp y podía reemplazarlos por otros más eficientes.

Ahora estaba ahí, envuelto en su propio y fuerte tormento, vestido como su padre lo hiciera antaño, planeando su venganza con una frialdad y exactitud propias de un asesino. Todo tenía que ser cuidadosamente calculado puesto que esperó casi tres años para poder llevarla acabo. En ese tiempo su semblante, antes gallardo y arrogante, se endureció; su mirar jocoso se volvió severo. Pocas veces sonreía –una sonrisa verdadera no ese gesto vacío que mostraba a los demás- y el ceño estaba fruncido la mayor parte del tiempo, además había comenzado a beber. Dejó la escuela para dedicarse a los negocios de su padre, tratando de mejorar la empresa que se le había confiado.

Fueron tiempos terribles, años de vacío espantoso, en los que prefería estar muerto a tener que soportar esa tortura: despertar todas las mañanas con la dolorosa desolación, saber que no importara a donde fuera no volvería a ver a su padre, que no importaba cuando lo esperaba no volvería a escuchar las pisadas de su padre, lo mismo que el crujir de sus papeles en esa habitación, el golpear de sus dedos en la mesa cuando estaba impaciente, su voz lejana cuando contestaba el celular… Todo eso le había sido cruelmente arrebatado.

Su mar de odio fluía más violentamente que nunca. Había amado a su madre como el animal quiere a la suya, por instinto y sin pensar en ella realmente; pero a su padre lo amaba y respetaba como toda la fuerza de sus años, aún cuando él no le había prestado la atención que todo niño requiere, aún cuando él había preferido a Peter…

Con punzante odio lanzó la daga a la pared, donde se incrustó.

- Mañana.- Dijo, con voz profunda teñida de desprecio.- Mañana en la noche empezará mi venganza.-

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Black Cat. Popularmente los gatos negros son símbolo de mal augurio. Si se cruzan en tu camino eventualmente tendrás mala suerte. La Gata Negra le hacía honor asu nombre. Spiderman perdió la cuenta de cuantas cosas extrañas le habían pasado en la persecución; dos paredes y tres techos se derrumbaron casi sobre él, de donde sujetaba su telaraña se rompió unas cuatro veces y explotó un carro después que ella pasó. Pero lo más insólito de todo era la actitud de la Gata, pues se detuvo en dos ocasiones; una para salvar a unos niños que iban a ser aplastados por una de las paredes que se derrumbaron y otra cuando salvó a una anciana que estaba siendo asaltada. ¿Black Cat era una ladrona o una heroína? No tenía idea. Tal vez debería preguntárselo.

La persecución continuó hasta un oscuro callejón. Tres altas paredes bloqueaban la salida. La oscuridad y un vapor blanco dominaban el lugar, excepto en un pedazo donde la luz de luna lo iluminaba. La Gata Negra se detuvo en ese claro, volteándose ligeramente hacia su perseguidor, que acababa de tocar piso. Spiderman pudo verla bien y se dio cuenta de que era hermosa: los cabellos platinos, largos y ligeramente ondulados resplandecían bajo la luz lunas; a través del pequeño antifaz se podían apreciar los ojos esmeraldas; los labios carnosos estaban ligeramente abiertos; su esbelta figura, de estrecha cintura y torneadas piernas, se hallaba cubierta por un ajustado traje negro, cuyo escote dejaba a la vista parte del blanco pecho. Ella era peligrosamente bella.

La Gata Negra curvó los labios carmesí en una sonrisa seductora al momento de perderse entre las sombras. Spiderman corrió tras ella pero se detuvo en el claro. Su sentido arácnido –ese que le advertía del peligro- le decía que ella seguía ahí. En alguna parte.

- ¿Quién eres tu?.-

- The Black Cat.- Fue la respuesta, cuya primera palabra él escuchó a su izquierda, la segunda atrás de sí y la tercera a su derecha. La Gata Negra lo rodeaba en círculos, acechándolo en la oscuridad.

- Dime cuáles son tus intenciones.- Preguntó sintiendo como ella continuaba con sus vueltas, cada vez más rápido.- ¿Eres una ladrona o una heroína?.-

- Un poco de ambas.-

- ¿Por qué robaste la joyería?.-

- Porque me gustan las gemas.-

- ¿Por qué salvaste a los niños?.-

- Porque estaban en peligro.-

- ¿Por qué no dejas de dar vueltas? ¡Me estás mareando!.-

La Gata Negra se detuvo.

- Tú eres el asombroso Spiderman, quien ha derrotado a villanos como el Duende Verde y el Doctor Octopus… ¿Crees que podrás domar a esta gatita?.-

En seguida ella saltó justo frente a él, con las garras relucientes, dispuesta a atacarlo. Pero Spiderman reaccionó más rápido y saltó, esquivando el golpe. La Gata le lanzó una patada pero él dobló el cuerpo hacia atrás, apoyó las manos en el suelo y se alejó de su atacante.

- Podemos resolver esto de una forma pacifica.- Le dijo escalando una pared y viéndola desde arriba, con la espalda pegada al ladrillo mientras las manos se apoyaban en los muslos doblados y los pies lo sostenía en el muro.- Verás, va contra mi religión atacar a mujeres.-

- Que lástima Spidey.- Ella alzó el dorso de su mano y Spiderman vio cómo algo salía y se incrustaba en la pared justo al lado de su cabeza. Era una cuerda negra con gancho de plata. Antes de que él pudiera decir algo la Gata negra tensó la cuerda y escaló por la pared con una rapidez pasmosa. Spiderman la tuvo frente a frente y apenas fue capaz de esquivar el puñetazo que se clavó en el muro, dejando un hoyo.

- ¡Que mujer!.- Exclamó Spiderman francamente sorprendido.

- Gracias cariño.- Dijo ella sonriendo al momento de darse la vuelta y lanzarle un golpe con el talón, mismo que el héroe evitó, pero cayó al suelo, junto con una parte de la pared. La Gata lo siguió al piso.

- Muy bien. Si tú insistes.- Le dijo Spiderman bloqueando con los brazos la serie de golpes que ella depositó en él. Ya harto de la situación, le dio una patada en el abdomen, mandándola a estrellarse contra un contenedor de basura.- ¿Estás bien?.-

- De verdad eres asombroso..- Dijo ella con la respiración agitada pero poniéndose de pie.- Nunca antes un hombre me había derrotado.-

Balck Cat se sacudió el polvo del traje y se acercó a Spiderman. Una sonrisa en los labios, su mirada ardiente fija en él y las manos en la cadera. Él se perdió en el mar verde de sus ojos mientras sentía su respiración entrecortarse, su pulso acelerado y el inevitable sonrojo de su piel.

Como él no pudo articular palabra alguna la Gata Negra se rió suavemente y se ocultó entre las sombras, perdiéndose como un gato en la oscuridad.

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La luz fluorescente iluminaba el laboratorio escolar, velando al hombre que permanecía sentado frente a la mesa. Su bata de inmaculado blanco parecía brillar bajo la luz artificial. Su mirar tan sereno e impasible como siempre parecía examinar la jeringa sobre los papeles. Años de investigación al fin habían dado frutos. Uno de sus más grandes sueños se materializaba en esa jeringa, cuyo contenido, un suero extraído del ADN reptilito manipulado, reposaba inocentemente.

El pequeño gecko se estiró perezosamente en el bolsillo de la bata, frotando su cuerpo contra el pecho de su amo. Se dio la vuelta y asomó la cabeza por el borde de la tela. Connors lo tomó para después depositarlo suavemente sobre sus notas, donde permaneció con la cabeza levantada hacia él.

- ¿Puedes creerlo?.- Le dijo.- Al fin lo tengo: un suero capaz de estimular al cuerpo humano para que regenere partes del mismo. Un verdadero logro en genética y herpetología… pero por supuesto hay que probarlo.- En su voz no había ninguna emoción, pero sus ojos brillaron con una serena intensidad.- Si tengo éxito mejoraré mi vida y de la millones más.- Terminado de hablar alzó el brazo y con los dientes jaló la manga de la bata hasta dejar descubierto el antebrazo.

Si en verdad funcionada no volvería a hacer eso, pues tendría a su otro brazo para ayudarle. Y si se iba más lejos, también podría ayudar a todos esos niños mutilados que miraba en televisión. Todas aquellas víctimas de accidentes y guerras. Guerras estúpidas, violencia innecesaria. La diplomacia y el razonamiento son más efectivos, más civilizados. Eso lo aprendió muy bien en la Guerra del Golfo Pérsico… oh, sí, antes de ser maestro de Física ejercía como cirujano. ¿Qué lo había obligado a tomar esa decisión? Ni aún ahora lo sabía, pero ir a la guerra fue una estupidez. Hasta el retacado e idealista Otto Octavius –un buen amigo- le dijo que era una idiotez.

Medio millón de almas se llevó la "Operación Tormenta del Desierto" … Recordó esas noches, los gritos, los bombardeos, los heridos que muchas veces morían en sus manos y finalmente el día del accidente. Después de establecerse la superioridad aérea, las fuerzas de la coalición inutilizaron los centros de mando y control iraquíes, especialmente de Bagdad y Basora, y atacaron de modo implacable a la infantería de Irak, sin embargo también fueron agredidos cruelmente los centros civiles… justo cuando la compañía en la que viajaba pasaba por ahí… una extraña suerte lo salvó ese día y sólo perdió un brazo…

Un estremecimiento invadió su espina dorsal. Mientras pensaba tomó la jeringa y la colocó en su mano de tal forma que la aguja rozara débilmente la vena de su muñeca. Con un ligero movimiento, la hundió y comenzó a inyectar el suero. Su rostro permaneció inmutable.

Jamás se esperaba ver de su parte una demostración dolor, de mal humor, resentimiento ira o petulancia, ya que nunca lo había hecho, ni aún de niño. Nunca mostró a sus padres o a Otto las heridas que la guerra le había provocado. Jamás habló de ellas –de no ser por el brazo perdido nadie se hubiera enterado de su estancia en el Golfo-.

- Ya está.- Habló débilmente, colocando la jeringa otra vez en la mesa y esperó a que hiciera efecto.- El catalizador que agregué tendrá que acelerar la reacción… .-

En cuestión de segundos una extraña adrenalina lo recorrió haciendo arder su sangre, exaltando sus sentidos de una manera que ni en sus años mozos había experimentado. Sus ojos se entornaron mientras el líquido quemaba sus venas al esparcirse cual mortal veneno en su sistema. Todo comenzó a hacerse borroso a su alrededor, el piso se alejaba de sus pies y él tuvo que apoyarse en la mesa para no caer. Sobre los papeles el gecko le miraba expectante. Connors quiso sonreírle pero de pronto la adrenalina se transformó en dolor. Una oleada de dolor puro le tiró al frío suelo, donde comenzó a retorcerse como una serpiente. Mordió su labio inferior para no gritar. Sus ojos entornados se volvieron amarillos y la pupila se angostó hasta hacerse vertical. Arqueó la espalda, todo el dolor se concentró en el hombro derecho… pudo escuchar la tela y la piel rasgarse antes de que una parte de su cerebro quedara sumida en la inconsciencia y otra despertara…

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La Gata Negra, también conocida como Felicia Hardy llegó a su lujoso apartamento, entrando por la ventana y se tiró en la cama. El corazón le latía con violencia y una extraña exaltación le recorría la piel. En su cabeza solo había espacio para él. Cada pensamiento terminaba en él. Cada suspiro tenía su nombre.

Spiderman.

¿Cómo era esto posible? ¿Cómo había caído tan fácil y tan rápido en las redes de esa araña?

Un buen cazador sabe aguardar su presa. Ella esperaría por él, aunque eso significara que tuviera que dejar su actividades de ladrón –por lo menos por un tiempo o ¿Quién sabe? Tal vez le gustara ser una heroína-.

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Peter Parker regresó a su casa después de su peculiar encuentro. Se sentía extraño, inexplicablemente nervioso. Trató de calmarse cuado penetró en su departamento. Ya era muy tarde por lo hizo el menor ruido posible, para no despertar a MJ. Grande fue su sorpresa cuando la vio recostada sobre la mesa del comedor, con una taza de café aún humeante. Se había quedado dormida esperándolo.

La ternura que lo envolvió pudo deshacer el nerviosismo que lo embriagaba. Con cuidado la levantó de la silla y la llevó hasta el dormitorio, donde suavemente la deposito en la cama. Después fue a bañarse, cuando terminó se tumbó al lado de ella y al instante se quedó dormido.

Un día más terminaba.

CONTINUARA…

SIGUE EN: De la Luna a la Tierra y del Rojiazul al Negro

NOTAS DE LA AUTORA:

Cualquiera que conozca mis fics sabe que amo los datos históricos, así que si les pareció un tanto tedioso lo de Connors, lo siento ¡Fue inevitable =P! –y lo hice corto, xq pude haberme explayado más XD-

Sobre Felicia Ardí, ahondaré más en el personaje en los siguientes capítulos, esto sólo fue la presentación :P

Ahora, a contestar Reviews!!!

TANI: Primeramente debo decir que tu review me sorprendió. ¡Y me agradó mucho! ¿El verdadero guión de Spiderman 3? ¡Oh me sonrojo ! La crítica constructiva siempre es bienvenida . ; Usualmente suelo ser muy cuidadosa y no meter expresiones locales, pero a veces se me va uno que otro modismo sin darme cuenta –como es el español que siempre escuchas no te percatas que hay gente que no lo comprende. ¡La maravilla del Internet que permite a personas de distintas partes interactuar!

Tomaré en consideración lo que me dices –sobre las chicas, Felicia.- y concuerdo con que meter a Venom complicaría demasiado la historia, sin embargo –Y permítanme el adelanto- el traje negro SÍ estará en el fic, pero no con la complicada historia del comic –caramba, eso de mandar a Peter a la luna como que no, y menos se puede meter a todos los superhéroe de Marvel como en "Secret Wars"- me guiaré por lo ocurrido en la serie animada.

¡Un saludo!

ULTIMATE SPIERMAN: Gracias, gracias por tus comentarios, de verdad me halagan –cosas tan lindas como las que dices hacen que quiera seguir escribiendo XD-

AGUS Y MOONY: Ya también espero que prosperen los fic de Spidey, a ver si la gente se anima a escribir algo, como sea, Harry SI que es linda –y más por James Franco :D

KEN-SAN, jAnNeTh, LORET: Os agradezco sus comentarios XD y espero que sigan leyendo el fic.

ALFREDXIII: Vaya, tu si no tienes nada que hacer verdad cabrón? XP primero me molestas en la escuela y ahora en … pero dejándonos de tonterías, gracias por tus comentario –X todos-.

TAIGRIN DIDO: Me encantan tus fics de Spidey XD ya te he agregado a mi lista de autores favoritos, síguele, que aventarse las historias en pocas horas no lo hace cualquiera. Y gracias x tu comentario, ojalá continúes leyendo el fic.

SPIDERMAN RULEZ XD