5 CapítuloLa broma de James.
-¡¡¡James!!!-gritaba Sirius. James se había quedado dormido en la mesa de Gryffindor y le revoleó uno de sus libros a su mejor amigo, que le dio de lleno en la cara.
-¡James, levántate!-le gritó autoritario, con lágrimas en los ojos por el golpe.
-¿Por qué?-preguntó James con cara de niño.
-Porque lo digo yo, el magnífico, el grande, el más lindo, el mej... -
-El más idiota, el más presumido, el más mujeriego, el más peludo- interrumpió James riendo.
-¡No le digas peludo!-dijo Remus, que se había acercado.
-¿Por qué no se matan?-preguntó Sirius enojado, mirándolos.
-Las chicas nos extrañarían muchísimo, Canutito lindo- le dijo Remus a Sirius agarrándolo del pelo.
Sirius tomó a James del cuello y lo levantó en el aire.
-¡Qué pesado!-murmuró James, mientras se arreglaba la túnica, sentado en el piso.
-Debemos ir a Botánica-dijo Peter rascándose la cabeza.
En el invernadero 7 se cruzaron con Malfoy, Crabbe y Goyle, sus enemigos mortales y amigos de Snape.
-Hola, Snapy-dijo Sirius, poniendo cara de asco-¿qué te pareció el beso que James y Lilly se dieron?,¿eh?¿romántico?-dijo y fue golpeado por Severus.
-Hey-dijo la profesora Sprout-¿qué sucede aquí?-preguntó enojada, mirando a los slytherins.
-Lo golpeó, profesora-dijo Remus señalando a Snape y ayudando a James a detener a Sirius, que pensaba saltar sobre Severus y matarlo a golpes.
-Les bajaré puntos si siguen molestando-les dijo a Severus y a Malfoy.
La clase dio comienzo. Mientras la profesora hablaba, James pensaba cómo le tiraría a Severus la pintura verde que tenía en un balde (lo habían llevado diciendo que era un trabajo de Pociones), Sirius le tiraba besos a Arabella y Remus se sonrojaba de la mirada interesada de Cat.En ese instante, James miró a la preciosa pelirroja junto a ó a recordar las veces que se besaron, recordó hace cuanto tiempo la deseaba, soñando con ella durante cada noche, luego de darse cuenta que la amaba. Recordó la fotografía de ella, escondida en la funda de su almohada, la cual besaba cada noche antes de ir a dormir, antes de soñar ese sueño que lo tenía desvelado, para luego despertarse con el miembro como un fierro entre las piernas, excitado con la muchacha de cabello rojizo. Porque, aunque James no lo dijera, la amaba profundamente, haciendo que ese deseo por poseerla y amarla sin censura se hiciera cada día más fuerte. Pero, a pesar de tener todo lo que cualquier persona necesita, a él le faltaba algo: Lily. Le faltaba el amor de ella, se sentía muy despreciado por esa bonita muchacha que lo volvía loco de amor.
-Cornamenta, ¿qué piensas hacer?- dijo la suave voz de Remus, volviéndolo a la realidad. "¿Cómo haré?"pensaba James mientras levantaba el balde cuidadosamente. En ese momento, el balde salió volando por un súbito golpe que Peter le dio sin querer, arrojando la pintura al aire, hacia donde estaba Severus. Éste, al ver la franja verde ir hacia él, se corrió y la pintura cayó... sobre Lily, tiñéndole el pelo, la camisa y la túnica de verde. Ella, enojada, le revoleó un libro a James por la cabeza, que le dio en la cara, haciendo que sus gafas se rompieran y sus ojos comenzaran a sangrar.
-¡¡¡YA BASTA!!!-gritó la profesora-diez puntos menos para Gryffindor- siguió, mirando a James. Lily se largó a llorar y salió corriendo. James fue enviado a la enfermería. Su cara no paraba de sangrar.
-Potter, ¿qué te han hecho?-le preguntó Madam Pomfrey.
-Nada, no es nada-decía él sin parar. Quería disculparse con Lily, esa pintura no era para ella. Se soltó de Poppy.Sus gafas estaban rotas.
"Oculus reparo" murmuró, señalando sus gafas con la varita. Se las puso y salió corriendo, buscando a Lily.
-¡¡¡James!!!-gritaba Sirius. James se había quedado dormido en la mesa de Gryffindor y le revoleó uno de sus libros a su mejor amigo, que le dio de lleno en la cara.
-¡James, levántate!-le gritó autoritario, con lágrimas en los ojos por el golpe.
-¿Por qué?-preguntó James con cara de niño.
-Porque lo digo yo, el magnífico, el grande, el más lindo, el mej... -
-El más idiota, el más presumido, el más mujeriego, el más peludo- interrumpió James riendo.
-¡No le digas peludo!-dijo Remus, que se había acercado.
-¿Por qué no se matan?-preguntó Sirius enojado, mirándolos.
-Las chicas nos extrañarían muchísimo, Canutito lindo- le dijo Remus a Sirius agarrándolo del pelo.
Sirius tomó a James del cuello y lo levantó en el aire.
-¡Qué pesado!-murmuró James, mientras se arreglaba la túnica, sentado en el piso.
-Debemos ir a Botánica-dijo Peter rascándose la cabeza.
En el invernadero 7 se cruzaron con Malfoy, Crabbe y Goyle, sus enemigos mortales y amigos de Snape.
-Hola, Snapy-dijo Sirius, poniendo cara de asco-¿qué te pareció el beso que James y Lilly se dieron?,¿eh?¿romántico?-dijo y fue golpeado por Severus.
-Hey-dijo la profesora Sprout-¿qué sucede aquí?-preguntó enojada, mirando a los slytherins.
-Lo golpeó, profesora-dijo Remus señalando a Snape y ayudando a James a detener a Sirius, que pensaba saltar sobre Severus y matarlo a golpes.
-Les bajaré puntos si siguen molestando-les dijo a Severus y a Malfoy.
La clase dio comienzo. Mientras la profesora hablaba, James pensaba cómo le tiraría a Severus la pintura verde que tenía en un balde (lo habían llevado diciendo que era un trabajo de Pociones), Sirius le tiraba besos a Arabella y Remus se sonrojaba de la mirada interesada de Cat.En ese instante, James miró a la preciosa pelirroja junto a ó a recordar las veces que se besaron, recordó hace cuanto tiempo la deseaba, soñando con ella durante cada noche, luego de darse cuenta que la amaba. Recordó la fotografía de ella, escondida en la funda de su almohada, la cual besaba cada noche antes de ir a dormir, antes de soñar ese sueño que lo tenía desvelado, para luego despertarse con el miembro como un fierro entre las piernas, excitado con la muchacha de cabello rojizo. Porque, aunque James no lo dijera, la amaba profundamente, haciendo que ese deseo por poseerla y amarla sin censura se hiciera cada día más fuerte. Pero, a pesar de tener todo lo que cualquier persona necesita, a él le faltaba algo: Lily. Le faltaba el amor de ella, se sentía muy despreciado por esa bonita muchacha que lo volvía loco de amor.
-Cornamenta, ¿qué piensas hacer?- dijo la suave voz de Remus, volviéndolo a la realidad. "¿Cómo haré?"pensaba James mientras levantaba el balde cuidadosamente. En ese momento, el balde salió volando por un súbito golpe que Peter le dio sin querer, arrojando la pintura al aire, hacia donde estaba Severus. Éste, al ver la franja verde ir hacia él, se corrió y la pintura cayó... sobre Lily, tiñéndole el pelo, la camisa y la túnica de verde. Ella, enojada, le revoleó un libro a James por la cabeza, que le dio en la cara, haciendo que sus gafas se rompieran y sus ojos comenzaran a sangrar.
-¡¡¡YA BASTA!!!-gritó la profesora-diez puntos menos para Gryffindor- siguió, mirando a James. Lily se largó a llorar y salió corriendo. James fue enviado a la enfermería. Su cara no paraba de sangrar.
-Potter, ¿qué te han hecho?-le preguntó Madam Pomfrey.
-Nada, no es nada-decía él sin parar. Quería disculparse con Lily, esa pintura no era para ella. Se soltó de Poppy.Sus gafas estaban rotas.
"Oculus reparo" murmuró, señalando sus gafas con la varita. Se las puso y salió corriendo, buscando a Lily.