14 Capítulo Líos en la biblioteca.

Lily se dirigió furiosa a la Torre Gryffindor. -Lo odio con toda mi alma-dijo, al sentarse junto con los demás en el sofá cerca de la chimenea en la sala común. -¿A quién?-preguntó Remus. -Al idiota de Snape-dijo Lily. Todos se miraron sombríamente. -Sí, es un idiota-dijo James. -Vamos a dormir-dijo Cat bostezando. -¡Qué buena idea!-dijo Sirius, bostezando también. Se dirigieron a las habitaciones. James se acostó con una gran sonrisa. -Cornamenta, ¿te sucede algo?-preguntó Remus. -No-contestó el otro con una hermosa sonrisa. -Pues, se te ve muy feliz-dijo Sirius. -No me ocurre nada-dijo James, corriendo el dosel de su cama. Remus y Sirius se miraron. No entendían qué demonios le ocurría a James. Hacía muchísimo tiempo que James no se sonreía así, una de las pocas veces que ocurrió eso fue cuando besó a Lily por primera vez, en primer año. Eso significaba que algo tenía ella que ver con esa felicidad. -Lily, se te ve muy contenta, ¿te ocurre algo?-preguntó Cat desvistiéndose. Lily estaba ruborizada y sus ojos claros brillaban. -Tenías razón, Bella-dijo. -¿Con qué?-preguntó Bella sentándose en su cama. -Me ocurrió algo hermoso con el amor de mi vida- dijo, sacando del cajón una foto de James. -¿Qué te ocurrió?- preguntaron las tres a coro. Lily las miró. Suspiró ondamente mientras besaba la foto del muchacho. -Lo amo-dijo. -Sí lo sabemos, ¿qué te ocurrió?-preguntó Susan. -Lo besé-dijo Lily-pero no de la forma normal, fue muy fervoroso-. -Dices que tenía razón, entonces ocurrió lo que predije. Hay que decírselo a la profesora-dijo Arabella. -No seas egocéntrica, Figg, ya te pareces a Sirius-dijo Susan. Arabella se ruborizó exageradamente ante el comentario de su morena amiga. Cat y Lily se reían por lo bajo. -Fue duro el sarcasmo-dijo Cat, acostándose. -A dormir todas-dijo Bella, aún ruborizada. A las 4 de la mañana de esa ¿noche?, James se despertó sobresaltado. Estaba transpirado y aturdido. Acababa de soñar con Lily, aunque no había sido una pesadilla, más bien fue un hermoso sueño. Se levantó de su cama y bajó las escaleras, quería tomar un poco de aire. -James, ¿qué haces aquí?-preguntó la dulce voz de Lily. -No pude dormir-dijo él abrazándola y besándola fervorosamente. Se sentaron en el sillón más grande. -Vamos a otro lado-dijo ella. -Lily, son las cuatro de la mañana-dijo James, besándola. -Bueno, señor meloso-le contestó ella, devolviéndole el beso. Se sentó sobre él. Le acarició el rostro y le quitó la camiseta. -Eres muy lindo, James Potter-dijo Lily besándole el pecho. -Sí, lo sé-dijo él. Se besaron. Le tomó la mano y salieron de la sala común. Caminaron por los pasillos desiertos de la escuela. Salieron a los parques. El cielo estaba nublado y comenzó a relampaguear. Empezó a llover intensamente. -Jajajajajajaja-decía Lily, mientras el agua de lluvia le recorría el cuerpo. Se quitó la remera y James pudo ver una vez más los bien formados senos de la muchacha y su fina cintura. Se lanzó sobre James y cayeron en la hierba, mientras se embarraban. -Estás loca, mi amor-le dijo James, acariciándole el rostro. -Te amo-. -Yo también-le contestó él. -Quítate los pantalones o te los arranco con los dientes, bombón-dijo Lily. James le sonrió abiertamente. -Loca total-dijo él. Se levantó e intentó limpiarse el barro del cuerpo. Lily se le acercó y lo ayudó en la tarea. -Mmmhhhh, ¡qué sexy!-le dijo ella en el oído. La tomó en sus brazos y corrió hacia el castillo. Ella no paraba de reír y lo besaba constantemente, acariciándole el cuello. Llegaron a la sala común. La Dama Gorda dormía plácidamente. -Holaaaaaaaa-le gritó James. -Muchacho-dijo ella sobresaltada-la contraseña- -Huevos de hipógrifo-dijo Lily. Entraron en la Torre Gryffindor. Se besaron largamente antes de entrar en sus habitaciones. -Que sueñes con los angelitos, mi amor-le dijo James a Lily. Ella se ruborizó intensamente. -Te amo-le dijo cuando él entraba a su habitación. Se acostaron y se durmieron en segundos. Esa mañana, James fue despertado por un fuerte almohadonazo de sus dos amigos. -Idiotas-dijo James, intentando golpearlos. -James, soñabas con Lily-dijo Sirius. -Sí, hablabas en sueños. Hay Lily cuánto te amo-dijo Remus simulando la voz de James. -Tienes que tratarte-dijo Sirius. Se subió a la cama de James y comenzó a saltar sobre él. -Ya me levanto, Canuto-dijo James molesto. Se levantó y se dirigió al baño. -Hoy es sábado ¿iremos a Hogsmeade verdad?-dijo Sirius a los gritos. -No lo sé-dijo James dentro del baño. -¿Cómo no lo sé?-dijo Remus. -Tengo tarea-mintió James. Había planeado con Lily encontrarse mientras los muchachos no estaban. Bajaron a la sala común. -Buen día, muñecas-dijo Sirius a todas las chicas que estaban allí. Las muchachas le sonrieron. -Vamos a la biblioteca-les dijo Lily a los muchachos. -¿A la biblioteca?.Eres la única demente que va a la biblioteca los fines de semana-dijo Sirius-bueno vamos-siguió, viendo que todos coincidían con Lily y que James estuvo a punto de golpearlo. Se dirigieron a la biblioteca. -¿Qué hacemos aquí?-preguntó Sirius aburrido. -Yo voy a buscar un libro-dijo Lily. Miró a James significativamente. -Yo... a... ya vengo-dijo James levantándose de la silla. -¿Adónde vas?-preguntó Sirius sospechosamente. Tenía el ceño fruncido. -A buscar un libro... sobre... sobre... Artes Oscuras, me parecen interesantes-dijo rápidamente, viendo que su amigo, que no era nada tonto, sospechaba. Se levantó y buscó a Lily. La encontró cerca de la zona restringida, la "segunda sala común" para los merodeadores. La abrazó dulcemente. Se besaron. -James, no podemos hacerlo aquí-le dijo ella. -Lo sé, pero bésame-le contestó. Se dieron un fervoroso beso. Se acariciaron, mientras Lily le desabrochaba la camisa y se la quitaba. Sentía un fuerte calor en el cuerpo que la abrumaba. Respiraba agitada. James sentía latir su corazón rápidamente, en cualquier momento se le saldría. Su respiración se aceleró cuando ella le besó el cuello y le acarició los músculos del pecho. Le acarició los muslos a Lily y la fina cintura. -Te amo-murmuró él en voz baja. -Ponte la camisa-le dijo ella-yo también-le contestó dulcemente. James se puso la camisa. -Oh, Potter-dijo una voz chillona. Miraron hacia atrás. -JORKINS!!!!-bramaron a dúo. -¿Salen juntos?¡qué buen chisme!!!-dijo la colorada de anteojos cuadrados. -Hablas y te mato-le dijo James. -No hablo con una condición, guapo-dijo. James la miró asustado. -¿Cuál?- -Que me beses-dijo Bertha. Lily, detrás de James, se puso verde. -¿Por qué no besas esto?-le dijo, apuntándola con la varita. James la detuvo. -Muchachos, ¿qué hacen?-preguntó una voz salvadora para James. -Estábamos... estábamos... -agarró un libro rápidamente-leyendo- -¿Leyendo "Mujercitas"?-preguntó Sirius mirando la tapa del libro que James tenía en las manos. -Ah. -James se había ruborizado muchísimo-esto es tuyo, Lily-dijo, dándole el libro. -¿Qué hace ésta con ustedes?-preguntó Sirius mirando a Bertha. -Cambié de idea-dijo Bertha-quiero que él me bese- James suspiró aliviado. -Canuto, Canuto, tienes que salvarme-dijo James-tienes que besar a Bertha Jorkins, por favor- Sirius lo miró asombrado. -¿Estás loco?-preguntó Sirius. -Luego te explicaré todo-dijo James, mirando a su amigo de manera suplicante. Sirius asintió con la cabeza y se puso manos a la obra. Se acercó a Bertha y la besó. -Puaj-dijo Lily acercándose a James. -¡Qué bien besas Black!-dijo Bertha, guiñándole el ojo a Sirius. Sirius esperó a que Bertha desapareciera y salió corriendo camino a la Torre Gryffindor, sin antes agarrar a James de la túnica y arrastrarlo con él. Lily los siguió. Entraron a la sala común. Subieron las escaleras y entraron en la habitación. Sirius entró al baño. Agarró el dentífrico y puso una inmensa cantidad en su lengua, para luego cepillarse rápidamente. -Me deben una explicación-dijo Sirius con la boca llena de dentífrico. -Sí-dijo James. Miró a Sirius y vio que éste seguía poniéndose más dentífrico en la lengua. -Vas a ahogarte-dijo Lily riendo. -Eres un exagerado-le dijo James. -Tú lo dices porque no le diste un beso de lengua a Jorkins, ¡qué gracioso!- dijo Sirius. Se enjuagó la boca y escupió.-Espero que me lo expliquen-les dijo. -Bueno, estábamos con Lily-se aclaró la garganta-besándonos-Sirius se asombro ante la confesión-y... - -Jorkins apareció de pronto detrás de nosotros y nos dijo que si James no la besaba, hablaría-dijo Lily rápidamente, sin tomar aliento. Sirius se sonreía. -¿Algo más?-preguntó. -Sí, Lily y yo somos novios, pero por favor no le digas a nadie-dijo James suplicante. -¿Cuándo piensan decírselo a los demás?-preguntó Sirius. -No lo sabemos, pero no digas nada-dijo James-te conozco, y nunca guardas los secretos- -Jorkins va a contárselo a alguien, así que deberíamos preparar un plan- dijo Sirius. -Si, ¿y si le hacemos un maleficio para que no pueda hablar durante meses?- preguntó Lilly. -Sería buenísimo-dijo Sirius sonriéndole a James. Bajaron las escaleras y se dirigieron a la biblioteca, en donde los esperaban los muchachos y las muchachas. -¿Iremos a Hogsmeade?-preguntó Arabella, ruborizándose ante la mirada de Sirius. -Sí-dijo Sirius sonriéndole. -Nosotros no vamos-dijo a Lily. -Qué???-dijo James, que fue codeado fuertemente por Lily-ah, sí, no, tenemos tarea-dijo, mirándola interrogatoriamente. -¿Tarea????-dijeron a coro lo demás. -Sí, tarea-dijo James mirando a Sirius, que se estaba riendo por lo bajo. -Pues adiós-dijeron todos. Los acompañaron hasta la puerta del castillo, saludaron a todos, James golpeó a Sirius para que no dijera nada. -James, ya se fueron-dijo Lily, tomándole la mano. Estuvieron a punto de besarse, pero una pesada persona apareció.