GUILITY
(por Jaen Snape)
Disclaimer: Los personajes no me pertenecen. Son propiedad de JK Rowling. No utilizo nada con ánimo de lucro, sino para la diversión de las lectoras. No gano nada con esto y por supuesto, no soy Rowling, porque sino no estaría escribiendo esto ahora mismo.
Advertencias: Esto es un fic SLASH (relación CHICO/CHICO) Sino te gusta el género, mejor sal de aquí. También habrá Violación non-con, tortura y violencia.
Pareja: Harry/Severus; Harry/Voldemort
Rating: R
Summary: Ni profesor ni alumno saben lo que les espera cuando uno es secuestrado y el otro se ve metido en medio sin poder evitarlo. Ambos compartiendo la misma celda, ambos encadenados a una fría, sucia, mugrienta y apestosa mazmorra llena de sangre y carne incrustado por el piso y las paredes. Prisioneros... ¿El amor les salvará? ¿Perderán las pocas esperanzas de ser rescatados? SLASH Harry/Severus
N/a: Aquí estoy con este pequeño fic que quiero dedicar a Vimpela ya que ella me regaló un fantástico fic llamado 100 Razones, precioso.
Respuesta a los reviews:
Reyka/Edysev: ¡Hola!
¿Enserio lloraste? ¡Que bueno! Eso significa que estuvo genial... o eso es lo que se dice... (sin comentarios ToT) Lo sé... los hice sufrir muchisimo... y para mí no fue fácil, lo juro.
¡Pues aquí está la segunda y última parte! Aunque prometo que en cuanto acabe el primer capítulo de la Secuela lo cuelgo de inmediato. ¡CON LEMMON Y TODO! Creo que... mejor sigue leyendo y sabrás... Snif... snif...
Ya ya... y estará casi a tiempo para salvar a su amor... pero eso es adelantarme demasiadp bocazas
Claaaaaro. No podían ser tan malos sin que cuando en verdad se morían se dieran cuenta de cuantas veces les había salvado el culo a esos tres...
Gracias por tus felicitaciones guapísima.
Besotes y sigue leyendo.
Griseld: ¡Hola!
Gracias, muchas gracias. Espero que este capítulo te guste y espero que me sigas leyendo cuando cuelgue la secuela de este fic.
Besotes y sigue leyendo.
Elmerodeador: ¡Hola!
Gracias. La verdad es que me está costando lo suyo y además, ahora estoy con la secuela y prometo que en la secuela sí habrá lemmon.
Estaba inconsciente a medias. Recuerda que cuando Harry gritó, Sev se despertó bruscamente...
Y no has visto todo... Malfoy aún tiene que reaparecer después y Voldemort... qué puedo decir de él en este fic... MUERTE... (Papi? N-no... si no iba en serio... papi... guarda la varita... papi, ¿qué vas a hacer? "¡CRUCIO!" Aaaaaaaaaah)
Ouch... eso dolió ToT... Eso me pasa por provocarle... ¬¬
Sip... ya verás las cosas se arreglan de una forma u otra, lo hacen.
Besotes y sigue leyendo.
anna potter: ¡Hola!
Se siente en el alma... mejor sigue leyendo (ToT)
Besotes y sigue leyendo.
Capítulo 2
Mentiras
Con pasos cortos, pero rápidos se dirigió hasta la puerta que allí se encontraba y que Malfoy le había indicado golpear.
Sabía que no estaba preparado, pero cuanto antes comenzara con aquel suplicio, antes acabaría. Lo que más temía era el hecho de hacer aquello para Severus, porque la vida del hombre dependía de él y de lo que en aquel momento ocurriera, por mucho que le estuviera asqueando y por muy mal que se sintiera por ello.
No sabía cuándo, pero tocó a la puerta y ésta se abrió dejándole paso a una estancia aún más grande que la anterior, con una cama inmensa con dosel. A la derecha podía ver una especie de habitación-vestidor bastante grande y espaciosa. A la izquierda un inmenso armario decorado con tonos plateados, verdes y negros. Se había quedado totalmente maravillado por la inmensidad y belleza del lugar y la gélida voz de Voldemort lo sobresaltó.
"¿Te gusta, pequeño?" preguntó éste burlón por ver la expresión atónita del muchacho.
"Nada que sea tuyo me sorprende, Voldemort" dijo con sarcasmo y voz fría Harry.
"Tú siempre tan arrogante. Con esa actitud no vas a ningún lado, chico. Ya deberías saberlo" dijo Voldemort levantándose de la cama y saliendo de los doseles que lo ocultaban.
Cuando vio al muchacho se quedó pasmado. No creía que se fuera a poner aquella túnica, eso le dificultaba el acceso a él. No por la ropa, sino por la serpiente que sólo obedecía al portador de aquella túnica.
La ira se le reflejaba en la mirada y eso fue captado por Harry, al cual le apareció en sus labios una torcida sonrisa, evidentemente divertido por la actitud de aquel temible hombre. En verdad, no sabía el por qué de aquella reacción, pero estaba seguro que pronto se lo iba a decir.
"¿Por qué te has puesto ésa, precisamente?" logró decir iracundo el Dark Lord.
"¿No te gusta Voldemort? A mí sí, la serpiente es preciosa, ¿no?"ahora sabía exactamente el porque del enojo del hombre e intuyó que la serpiente sólo le obedecería a él.
"Esa túnica..." comenzó Voldemort casi sin poder controlar la cólera que se le estaba acumulando en el cuerpo y perdiendo completamente el control de la Magia Oscura, algo peligroso, porque peligraba su vida, y era bien sabido por el Dark Lord.
"¿Sí?"preguntó inmensamente divertido Harry. "¿Qué pasa con ella? ¿No será por la serpiente, Voldemort?"había dado en el clavo. "¡Oh! ¿Quién iba a decirlo? Lord Voldemort temiéndole a una serpiente que por años fue de su propiedad" dijo Harry soltando una pequeña carcajada.
La ira aumentaba con peligrosidad. Harry vio el peligro inminente y le ordenó a la serpiente en pársel ante un atónito Voldemort, que se retirara y que no le hiciera daño al hombre si él no se lo ordenaba.
La serpiente bajó de él y se retiró enroscándose a uno de los postes de la adoselada cama.
"¡Sabes pársel!"dijo Voldemort.
"Es uno de los tantos poderes que adquirí la noche en que intentaste matarme, s"dijo con suma tranquilidad Harry.
Al llegar a la enfermería, Pomfrey fue a buscar lo que iba a necesitar para la cura de Severus.
Remus se quedó allí, junto al hombre, intentando calmarle para que no hiciera alguna locura, como ir en busca del muchacho.
Pronto, la medi-maga regresó con varias pociones y ungüentos. Le hizo beber las horrendas pociones mientras ella y Remus esparcían los potingues por las múltiples contusiones, heridas y moratones.
Lo más difícil fue curar la brutalidad que encontraron en la entrada del hombre, por lo visto, había sido tomado innumerables veces, una vez más encarnizadamente brutal que la anterior y eso hacía a Severus Snape ser tocado en aquella parte, por lo que Remus tuvo que consolarle y decirle que ellos no le iban a hacer daño y que se relajara.
En el despacho de Albus Dumbledore se encontraban reunidos; un histérico Sirius Black, una conciliadora y torpe Nymphradora Tonks, un tranquilo pero vigilante Ojoloco Moody, un asustado Mundungus Fletcher y algunos miembros más.
"¡C"MO DIABLOS HA PODIDO OCURRIR SEMEJANTE COSA!"chillaba histérico Sirius, quien no paraba de ir de un lado a otro del despacho moviendo de sobremanera las manos. "¡C"MO HAN PODIDO ENTRAR EN SNAPE MANOR 19 MORTÍFAGOS Y LLEVARSE A SNAPE Y A HARRY! ¡SE SUPONÍA QUE MIEMBROS DE LA ORDEN ESTABAN VIGILANDO LA MANSI"N!" decía completamente fuera de sus casillas.
"Lo sabemos Sirius, pero no fueron suficientes. A la hora que los mortífagos atacaron era la hora de cambio de guardia..." intentaba explicarle Dumbledore de manera calmada. Pero eso sólo provocó más histerismo en Sirius, quien se acercó peligrosamente a Dumbledore y con la cara a escasos centímetros del otro hombre le dijo:
"Más vale que Harry esté intacto, porque no respondo de mis actos si algo le ocurre. Te juro que pagará si le toca un simple pelo a mi ahijado, tenlo por seguro"
"Lo sé, pero no creo que sea sensato lo que dices. Después de esto te va a necesitar a su lado y si intentas algo, lo más probable es que mueras" dijo Dumbledore.
"Tranquilo, Black" intervino Moody. "El chico sabe cuidarse, además de que ya no es tan pequeño como pensamos, tiene 19 años..."
"¡RAZ"N DE MÁS PARA QUE LO ENCONTREMOS!" estalló de nuevo Sirius girándose hacia Ojoloco Moody y enfrentándole.
Remus salió de la enfermería dejando a Snape dormido y a Pomfrey en su despacho. Lo que no vieron fue que el cuerpo del ex profesor desaparecía volviendo a la celda en la que lo habían retenido por horas. Allí, Draco Malfoy se encargó de volverlo a atar a los grilletes.
Voldemort se acercó entonces al chico quien se tensó de inmediato cuando una fría (helada) acarició su frente, justo en la cicatriz, siguiendo la forma de ésta, para después ir bajando por la mejilla, contorneando los labios y bajando a su barbilla, agarrándola de manera posesiva y besándole de manera imponente y feroz.
Harry intentó apartar al hombre, pero Voldemort le amarró las manos fuertemente, impidiéndole al muchacho que lo apartara y dañándole aún más las ya por sí lastimadas muñecas.
El niño que vivió no estaba dispuesto a ser desvirgado sin luchar. Se lo pondría tan difícil como estuviera en sus manos y lucharía hasta no poder más, hasta que su cuerpo se quedara exhausto y no pudiera luchar más. Sabía que no sería mucho, pero le haría entender que las cosas no eran tan fáciles con él, ni mucho menos.
"Eres una perra mala"dijo de forma demasiado sensual y a la vez fría arrancándole un escalofrío al muchacho, de arriba abajo.
"Y tú un cerdo obsesivo"le contestó Harry en un gélido tono.
Voldemort amarró a Harry de un brazo, lo llevó hasta la cama y lo tiró sobre ella sin miramientos. Entonces se echó encima de él y comenzó a arrancarle los botones de manera bestial, mientras Harry intentaba golpear sin éxito al que tenía encima.
El Dark Lord le cogió las manos con una mano y las amarró por encima de la cabeza del muchacho dejándolo así inmóvil.
Cuando al fin consiguió su cometido, conjuró unas cuerdas con las que ató las muñecas de Harry a la cama teniéndolo así completamente a su merced...
Severus se despertó en esos momentos. Pronto se dio cuenta que ya no estaba en Hogwarts. Sus manos volvían a estar atadas a aquellos odiosos grilletes.
Alzó la cabeza y vio a un enmascarado enfrente de él. No tuvo que pensar demasiado para percatarse de quién era, ya que con sólo mirarle a los ojos y ver aquel gélido color gris supo a quien se enfrentaba.
"Malfoy..." logró decir con un pequeño esfuerzo.
"Hola, Severus. Volvemos a vernos" dijo Draco Malfoy.
"¿Por qué haces esto? ¿Por qué no hiciste lo que te pedí? ¡Dime!" dijo Severus que por momentos estaba volviéndose histérico.
"Porque él me da algo con lo que muchos soñarían" dijo simplemente éste.
"Podrías haber sido feliz lejos de todo esto. Lejos de él..." razonable la voz del ex profesor y ex mortífago.
"¿Eso cree, Snape?" preguntó burlón Malfoy.
"No lo creo, Malfoy, lo afirmo. Sé lo que es ser mortífago, sé lo que promete y sé lo que hace para convencer. Créeme cuando digo que todo son mentiras, artimañas para conseguir lo que pretende. ¿Crees que vas a obtener su corazón, Draco? No sabes cuan equivocado estás" sonrió "Su corazón pertenece a Satanás, Draco. Nadie puede arrebatárselo, nadie puede tener su corazón. Lo vendió, tal como él mismo se vendió a la sed de poder y de maldad"
Draco se puso lívido de ira. ¡¿Cómo podía decir aquello de la persona que amaba?! ¡¿Cómo se atrevía a hablar así del poderoso Lord Voldemort?! Sacó su varita del bolsillo de su túnica y apuntó con ella al pecho de Severus Snape, aquél que se había atrevido a insultar a su amor.
"¡CRUCIO!" dijo Malfoy histérico.
Severus comenzó a convulsionarse y a gritar amarrado de las muñecas por los grilletes. El dolor era punzante, persistente, como si mil cuchillos se le estuvieran hincando en el cuerpo sin piedad en la carne, pero sin ser así exactamente.
Tan pronto como aquel dolor había comenzado, desapareció. Esperó a recuperar parte de su aliento para decir:
"¿Qué crees que eres para él, Draco? ¿Su amante? ¿Su pareja? No eres más que su concubina, su... Mírate Malfoy. No sé como has podido caer tan bajo. Él mató a tu padre cuando lo liberaron de Azkaban, él fue el que hizo que tu infancia fuera solitaria. Él fue el que inculcó en tu padre un odio insaciable. Sólo él es culpable de la vida que tuviste que llevar y ahora te enamoras de la persona equivocada" dijo Severus mirándole a los ojos.
Draco Malfoy comenzaba a dudar de la palabra de Voldemort, pero no podía evitar lo que él mismo sentía y tampoco quería hacerlo, así que dio media vuelta y se dispuso a salir de aquel lugar.
"¿Dónde está Harry?" preguntó Severus viendo las intenciones del rubio.
"Con mi Lord" dijo simplemente éste dándose la vuelta y viendo en aquel rostro la angustia que habían provocado sus palabras.
Supo entonces que su ex profesor amaba a Harry y él mismo se angustió, cayendo en la cuenta de las intenciones de Voldemort al llevarlo a sus habitaciones.
Sin pensarlo un minuto más se acercó al otro hombre, le desató y se aplicó sobre sí mismo un "desmaius". Severus cogió la varita de Draco y le agradeció la ayuda que le estaba proporcionando.
Sabía bien dónde se encontraban las habitaciones del Dark Lord y se dirigió a ellas sin perder tiempo. Tan sólo tuvo que desmayar a varios mortífagos que intentaron cerrarle el paso.
Harry estaba amarrado a la cama, inmóvil y a completa disposición del Dark Lord. Las manos de éste comenzaron a vagar por el desnudo cuerpo del otro, deleitándose.
El cuerpo de Harry comenzó a responder a aquellas atenciones, algo que Harry odió profundamente, ya que, eso no era lo que él quería. Pero no estaba dispuesto a ponerle fácil aquel sometimiento y con destreza le dio una patada con una de las rodillas en la espalda al otro.
Voldemort aulló de dolor por el golpe y le propinó una bofetada que le giró la cara. Harry respondió a aquello con otro buen golpe de nuevo en la espalda. Después de aquello, Lord Voldemort estaba fuera de sí. Conjuró dos cuerdas más atando las piernas de Harry de igual manera que los brazos, manteniéndolo así inmovilizado por completo.
Por lo menos Harry lo había intentado... Pero aún le quedaban fuerzas para luchar, así que, no iba a rendirse por unas simples cuerdas. Le haría saber cuan testarudo podía llegar a ser Harry Potter cuando algo no le agradaba.
Con un hechizo, Voldemort se desvistió, quedando así listo para aquella "unión", aunque Harry continuó poniéndole las cosas extremadamente difíciles.
Le propinó un golpe tras otro, dejándole marcas por varias partes del cuerpo y malaventuradamente, las fuerzas de Harry llegaron a su fin cuando llegó la primera y brutal envestida, a la que siguieron cuatro, cinco, ocho, once... hasta que perdió la cuenta por el inmenso dolor que sentía que lo estaba llevando a la inconsciencia.
Severus Snape se encontró a muchos más mortífagos de los que se había esperado encontrar en su camino hacia la liberación de Harry y eso le quitó mucho tiempo. Ninguno, pero, pudo evitar lo que tenía en mente.
Cuando llegó al último pasillo que lo llevaría a las habitaciones privadas del Dark Lord, escuchó el desgarrador grito de Harry y comprendió lo tarde que había llegado y enloqueció.
Corrió, corrió más de lo que en toda su miserable vida lo había hecho, sabiendo que el tiempo estaba en su contra.
Cuando llegó enfrente de la puerta la abrió de una patada.
La puerta se abrió de par en par y en el dintel de ésta, apareció una figura de un hombre de piel casi nívea, con expresión de odio y preocupación. Con un movimiento de varita, Lord Voldemort se vio chocando contra la pared contraria.
Severus se acercó casi llorando hasta el cuerpo semi-inconsciente de Harry. Se dio la vuelta hacia Voldemort quien se acababa de levantar de manera dificultosa.
"Hola, Severus" dijo Voldemort con una media sonrisa frotándose el lugar en el que se había golpeado.
"Ni te atrevas a hablarme, cerdo. Pagarás por esto" dijo levantando aún más la varita.
Una gélida carcajada se elevó en el aire. Eso, hubiera aterrorizado a cualquiera, a cualquiera menos a Severus Snape, quien ya no se acobardaba por aquél que se hacía llamar Lord Voldemort, el "Mago más Grande del Mundo Mágico". Eso lo tenía ya superado, puesto que se había pasado al otro bando hacía mucho y no temía a nombrarlo por lo que era.
"¡Desmaius!" dijo Snape. Voldemort cayó al suelo desmayado. En esos momentos Severus se dio la vuelta y desató a Harry de las ligaduras que lo mantenían adherido a la cama, lo cogió en brazos e intentó despertarle. Era necesario hacerle despertar, una oportunidad como aquella, no la podían desaprovechar. Pero fue inútil, así que salieron de ahí lo más rápido que pudieron.
En las mazmorras, Draco comenzaba a despertarse. Entonces vio llegar a Harry y a Severus y se apresuró a proporcionarles un traslador para salir de ahí.
La señora Pomfrey estaba histérica. Hacía más de cinco horas que tanto ella como Remus habían dejado a Severus Snape en la enfermería durmiendo plácidamente y cuando la medi-bruja había ido a subministrarle las pociones necesarias de nuevo, la cama estaba vacía, como si jamás hubiera habido nadie allí.
Dumbledore intentaba calmar a una muy apurada, consternada, histérica y abatida "Poppy" Pomfrey, mientras que Sirius no ayudaba a la causa despotricando contra el hombre desaparecido.
Remus intentaba acallar las críticas de Sirius, sin obtener grandes resultados, mientras que Ojoloco Moody escudriñaba con su ojo mágico escudriñaba toda la enfermería en busca de indicios de que hubiera entrado gente o que de alguna manera, Snape pudiera haberse escapado.
Tonks le daba a la señora Pomfrey palmaditas en la espalda, mientras que los demás miembros de la Orden hablaban entre ellos de las probabilidades de encontrara a esos dos hombres.
La respiración del chico era entrecortada y tenía que hacer grandes esfuerzos para respirar. Severus comprendió que estaba hiperventilando. Sin pensarlo ni un segundo se agachó, colocó a Harry apoyando su cabeza en su brazo izquierdo y con la mano derecha le tapó la nariz, mientras sus labios sellaban los del otro administrándole así su propio aire.
Pronto, Harry se fue calmando y comenzó a respirar suficientemente bien como para continuar su carrera de vuelta a la enfermería.
Pronto estuvieron dentro del castillo y se vieron corriendo rumbo al ala médica.
Severus irrumpió en la enfermería llevando a un aletargado Harry entre sus brazos. En seguida la señora Pomfrey salió corriendo de la enfermería avisada por Moody y lo que vio le gustó menos que lo que vio cuando por primera vez había atendido a Severus.
"¡Merlín de los Merlines!" dijo la medi-maga acercándose corriendo a la cama en la que Severus estaba depositando en aquellos momentos a un inconsciente Harry mientras el mismo Snape se venía abajo desmayado cogido entre Sirius y Moody.
Ambos hombres estuvieron toda la noche observados de cerca por la medi-bruja para asegurarse que no les pasaba nada, ni que volvían a desaparecer, como Severus había hecho.
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Un mes más tarde. Harry se enfrentó al fin a Lord Voldemort, con ímpetu y valor logró la tan ansiada victoria a favor del Mundo Mágico.
Lord Voldemort había caído para siempre y ahora ni él ni nadie iban a separarlo de Severus.
En aquel momento apareció el hombre. Harry corrió hacia él después de haber mirado por última vez al inerte cuerpo del otro hombre y lo abrazó, pero no siendo suficiente con eso, levantó la cabeza y besó a Severus cogiéndolo desprevenido por el gesto.
"Severus" dijo Harry aún con la boca cerca de la del otro. "Te amo, siempre lo he hecho desde hace dos años y no me atrevía a decirlo por temor de que tú no sintieras lo mismo por mí. Pero te arriesgaste viniéndome a buscar y eso demuestra más que mil palabras juntas" dijo Harry besando de nuevo los labios del otro hombre que agarró a Harry de la cintura atrayéndolo a él y profundizando el beso.
"Yo también te amo, Harry y siento habértelo ocultado todo este tiempo, pero yo también temía que no sintieras lo mismo que yo" dijo volviéndolo a besar.
Fin