Después de que satoshi termino todo lo que tenia que hacer como campeón mundial de pokemon, decidió tomarse un buen y merecido descanso...
Ahora, el joven satoshi, de ya 17 años, era alguien terriblemente atractivo...
Era muy alto, media 1:75, su pelo negro y brillante, alborotado como siempre, le daba un aire enorme de sensualidad....
Tenia esa inocencia... piel bronceada... ojos negros profundos. Atractivo.
Y esa arracada que traía en la oreja izquierda... era todo un pedazo de chico...
El, recorrió de nuevo el camino a casa, lentamente, pero con energías, pikachu, su fiel pokemon, descansaba sobre su cabeza...
Atravesaba el bosque y estaba por llegar a casa de su madre...
Una gran sonrisa se apodero de el. Sus ojos brillaron y comenzó a correr – vamos pikachu! – decía mientras arrojaba al pokemon al aire, este se despertaba felizmente y comenzaba a correr a lado de su dueño.
- aun nos queda recorrer el pueblo entero para llegar a casa...- sonríe –démonos prisa!-
el pequeño pokemon, le sonrió...
la recompensa fue buena, por fin, una cama caliente donde dormir, comida abundante y un buen descanso...
no podía haber nada mejor a eso...
ahora, en casa.
....................
la modesta casa de satoshi sekai, era asediada a diario por mucha gente.
Miles de reporteros de canales distintos, niños de kinder esperando un autógrafo de el mejor entrenador del mundo, club de fans con pancartas enormes, chicas guapas deseando ser sus novias y lanzándole piropos.... puestos de comida.
-y yo que pensé que llegando a casa todo seria mas tranquilo...- el bien formado chico dejo de sostener la cortina que cubría la ventana, estaba nervioso, y no lo disimulaba muy bien.... le daba nervios ser admirado... le daba miedo la fama... el amor también...
bilma que pasaba por ahí, con una enorme canasta de ropa, escucho lo que su hijo pronunciaba casi con un susurro... ella le sonrió y volteo hacia el...
mirándole hacia arriba -ellos aclaman a satoshi, el mejor entrenador del mundo, -baja la canasta, le acaricia la cabeza y la mejilla- te aclaman a ti hijo... ¿por qué no vas hacia allá y les concedes algunas preguntas? Ha? No seria mala idea!- satoshi miro la cara de alegría e ilusión de su madre, le sonrió con nerviosismo y afirmo con la cabeza- esta bien mama.- el chico camino con lentitud mientras dejaba atrás a bilma con una sonrisa en la cara, satoshi, con evidente nerviosismo, toco ligeramente el mango de la puerta, desde atrás bilma susurro algo raro.. y camino hacia el traspatio...
el joven dudo en abrir la puerta... el solo hecho de pensar que había miles de gente que lo aclamaban.
Trago saliva.
-¡¡¡¡digame joven sakai!!! ¿esta liga ha sido muy difícil para usted? - ¿alguna vez a perdido!? - ¿hay alguien espacial en su vida?? –
satoshi trataba de calmar a toda la congregación de gente, con evidente nerviosismo les hizo señas con las manos, de que se tranquilizaran, los reporteros y los fans, se callaron, satoshi les sonrió y bajando lentamente las manos, los miro a todos.
Un reportero alzo la mano con energía
- joven sekai...¡¡¿ha tenido novia alguna vez?!!-
el chico parpadeo con rapidez e hizo la cara para atrás, provocando que su cabello negro y sedoso, se moviera bruscamente por su movimiento repentino... un sonrojo algo fuerte, debajo de sus ojos, se hizo presente...
tenia la boca entreabierta, quería responder.
Imposible.
Millones de ojos sobre el, esperando que contestara.
No había respuesta....o...¿si?.
------------------------
Así transcurrió la atareada vida de el joven satoshi.
Diariamente, fuera de su hogar, había mucha gente que deseaba, tan siquiera, ver su rostro, algo de el, su ropa en el tendedero, su muy sexy arete...
Gente del mismo pueblo, del pueblo vecino y gente de todo el mundo.
Diario le llegaban millones de e-mails, con declaraciones de amor, admiración y algunas mas de envidia y odio...
Así como a diario, las chicas le chiflaban y le gritaban cosas comprometedoras...
Ahora esa era la vida de aquel joven, de tan solo 17 años. Nunca pensó, que llegara a tanto.
Un buen día, el pueblo, comenzó a acostumbrarse a tener a el mejor entrenador del mundo, y así como llegaron en jauría, se fueron yendo, no por olvidarlo, no, de hecho la verdadera razón era que ya no creían muy correcto molestarlo en su privacidad, y mucho menos, abusar de su amabilidad, pues diario, hecho un manojo de nervios, salía a atenderlos, desde muy temprano, hasta que el sol, se escondía.
Fue así que los del mismo pueblo se ponían de acuerdo, para detectar a algún turista que deseara colarse en casa del chico, y perturbar su privacidad. Le llamaban la atención y dejaban que se fuera, entre masculladas e insultos.
¿El?, con un dejo de tristeza lo admiraba todo, detrás de la ventana....
mientras soltaba suavemente, la cortina de la ventana...
-----------------
- satoshi, hijo, aquí abajo te busca alguien, ¡baja por favor!- bilma, le gritaba con alegría desde la planta baja de la casa, satoshi no pudo oír muy bien, bueno, de hecho, no escucho nada, solo un pequeño ruido el joven, ni siquiera aparto la vista de lo que en ese momento admiraba con toda la atención del mundo...
estaba tan concentrado... en el pequeño trozo de papel que tenia en la mano...
estaba algo arrugado y sucio, le faltaba el cachito de la esquina inferior de la izquierda... parecía ser un papel sin ningún valor... algo que merecía ir al bote de la basura...
sin embargo, la tierna y sensual mirada del chico revelaba todo lo contrario...
el , miraba como si fuera lo mas maravilloso del mundo....
trataba de no arrugar el papel, mas de lo que ya estaba... lo trataba con mucho cuidado, con amor.
Con ternura.
Sus profundos ojos negros, se perdían entre las líneas del escrito... su boca entreabierta, su miraba sensual enfocada... suspiro... murmuro... ...paso su mano, sobre su alborotado cabello... estaba a punto de cerrar los ojos y perderse en sus pensamientos....
-SATOSHI??!!!- bilma entro sorpresivamente en la habitación, el chico volteo a verla, y con rapidez, escondió muy disimuladamente, aquel papel...lo escondió rápido y mas no bruscamente, con mucho cuidado y cariño.
Satoshi le sonrió y se paro de su cama, levanto la mano
-¿qué pasa mama? ¿me necesitas?, ¿qué puedo hacer por ti?- bilma le sonrió, lo miro hacia arriba – no hijo, yo no necesito nada – satoshi ladeo la cabeza – ¿a no?- no. – le dijo su madre con delicadeza- hay, una persona aya abajo que te busca- la madre de satoshi le sonrió muy efusivamente – se que hace mucho que no la vez, ¿por qué nos vas a echar un vistazo ha?-
satoshi miro la cara de su madre... se detuvo a pensar unos segundos, parpadeo con velocidad, se hecho para atrás y de repente corrió hacia el recibidor...
llego corriendo a donde las escaleras... miro hacia abajo
lo que ahí vio, le sorprendió....
Bilma, llego con lentitud, se poso tras de satoshi, este por su parte, no cabía en asombro.
- y dime satoshi, ¿por qué te quedas ahí parado ha?... no vas a saludarle?-
satoshi seguía mirando al invitado... pronto, se sacudió la cabeza, camino con lentitud, y bajando los escalones con calma, sin dejar de ver al invitado... sonri
-h-hola...este...Leo...yo... – satoshi, de puro nerviosismo, se paso su mano izquierda en la playera, colocándola después tras su nuca, no era muy bueno expresando lo que sentía- ¿c-cuanto tiempo? Primo.....-
satoshi le sonrió con sinceridad, y le extendió su mano derecha en forma de saludo, el, se había desilusionado un poco...
por un momento, creyó, vagamente que ella.. vendría.
por el contrario el invitado, lo miro hacia abajo. Con una mirada fría y evasiva...
satoshi comprendió y bajo con lentitud la mano... sin dejar de ver los ojos de leo, su primo...
y si satoshi era alto y guapo....Si satoshi lo era.... su primo leo, lo era un más...
pelo negro corto, hacia arriba... ojos color miel...fríos, 1:90, sensual...guapo.... unos 19...piel blanca como la nieve...
con un gran atractivo...
no podías apartar tus ojos de el...
era...tan guapo...
un silencio se hizo presente en la sala... detrás de los chicos, el atardecer se colaba por la ventana, los rayos anaranjados del sol, tropezaban por todos lados, jugando con todo lo que tocaban...el pelo de ambos.. la ropa... las fotografías...
de repente un pequeño rayo de sol, dio justo en el adorno de leo...
la llevaba al cuello.
una cruz de plata.
Esto, capto de inmediato la atención de satoshi...
Que sonrió inmediatamente para tratar de congeniar con su primo...
- Leo, ha estado estudiando en el seminario de Rusia – bilma, pronunciaba estas palabras con gran ilusión, y alegría –es un chico muy inteligente, quiere ser seminarista e impartir sus conocimientos a todos, es un gran chico- bilma le miro con ternura, satoshi miro a leo
Parecía sorprendente que una persona como leo, fuera tan entregado a lo que hacia...
Esa mirada fría y sin brillo que satoshi había notado.
Era tan raro....
No podía creer que una persona tan fría, decidiera dedicar por completo su vida a "Dios" y a ayudar a los demás...
Otro silencio algo incomodo, cayo en la sala...
De repente y como si fuera un milagro, leo, le dedico una pequeña sonrisa a satoshi, sus ojos aun fríos, expresaban, agradecimiento, no en gran escala, pero lo hacían.
Satoshi, se sintió en confianza y entre miradas de alegría, ambos primos, comenzaron a reír.... satoshi lo hacia en forma destrampada, con su mano aun en la nuca, mas leo, lo hacia con ternura...
...no era un chico frío.
Bilma, miraba desde atrás, con alegría.
--------------
Buen día.
Espero que estén teniendo un agradable momento en este instante.
Yo soy la escritora de este fan-fic. Soy tokio.
Para servirles a todos mis lectores.
Este fan-fic es uno de los mas recientes que se me han ocurrido, de hecho, ya llevaba días en proyecto, hasta hoy, que he decidido escribirlo.
Esperando que sea de su total agrado, pues deseo que mucha gente, lo lea y critique lo que
por eso, lo publicare en Internet.
Dedicado con todo mi cariño a "Manira" mi hermana, que siempre me esta aguantando, y que es la persona que siempre lee todos mis escritos antes que nadie. He aprendido bastante gracias a ella.
Nos leemos.
tokio-san
Ahora, el joven satoshi, de ya 17 años, era alguien terriblemente atractivo...
Era muy alto, media 1:75, su pelo negro y brillante, alborotado como siempre, le daba un aire enorme de sensualidad....
Tenia esa inocencia... piel bronceada... ojos negros profundos. Atractivo.
Y esa arracada que traía en la oreja izquierda... era todo un pedazo de chico...
El, recorrió de nuevo el camino a casa, lentamente, pero con energías, pikachu, su fiel pokemon, descansaba sobre su cabeza...
Atravesaba el bosque y estaba por llegar a casa de su madre...
Una gran sonrisa se apodero de el. Sus ojos brillaron y comenzó a correr – vamos pikachu! – decía mientras arrojaba al pokemon al aire, este se despertaba felizmente y comenzaba a correr a lado de su dueño.
- aun nos queda recorrer el pueblo entero para llegar a casa...- sonríe –démonos prisa!-
el pequeño pokemon, le sonrió...
la recompensa fue buena, por fin, una cama caliente donde dormir, comida abundante y un buen descanso...
no podía haber nada mejor a eso...
ahora, en casa.
....................
la modesta casa de satoshi sekai, era asediada a diario por mucha gente.
Miles de reporteros de canales distintos, niños de kinder esperando un autógrafo de el mejor entrenador del mundo, club de fans con pancartas enormes, chicas guapas deseando ser sus novias y lanzándole piropos.... puestos de comida.
-y yo que pensé que llegando a casa todo seria mas tranquilo...- el bien formado chico dejo de sostener la cortina que cubría la ventana, estaba nervioso, y no lo disimulaba muy bien.... le daba nervios ser admirado... le daba miedo la fama... el amor también...
bilma que pasaba por ahí, con una enorme canasta de ropa, escucho lo que su hijo pronunciaba casi con un susurro... ella le sonrió y volteo hacia el...
mirándole hacia arriba -ellos aclaman a satoshi, el mejor entrenador del mundo, -baja la canasta, le acaricia la cabeza y la mejilla- te aclaman a ti hijo... ¿por qué no vas hacia allá y les concedes algunas preguntas? Ha? No seria mala idea!- satoshi miro la cara de alegría e ilusión de su madre, le sonrió con nerviosismo y afirmo con la cabeza- esta bien mama.- el chico camino con lentitud mientras dejaba atrás a bilma con una sonrisa en la cara, satoshi, con evidente nerviosismo, toco ligeramente el mango de la puerta, desde atrás bilma susurro algo raro.. y camino hacia el traspatio...
el joven dudo en abrir la puerta... el solo hecho de pensar que había miles de gente que lo aclamaban.
Trago saliva.
-¡¡¡¡digame joven sakai!!! ¿esta liga ha sido muy difícil para usted? - ¿alguna vez a perdido!? - ¿hay alguien espacial en su vida?? –
satoshi trataba de calmar a toda la congregación de gente, con evidente nerviosismo les hizo señas con las manos, de que se tranquilizaran, los reporteros y los fans, se callaron, satoshi les sonrió y bajando lentamente las manos, los miro a todos.
Un reportero alzo la mano con energía
- joven sekai...¡¡¿ha tenido novia alguna vez?!!-
el chico parpadeo con rapidez e hizo la cara para atrás, provocando que su cabello negro y sedoso, se moviera bruscamente por su movimiento repentino... un sonrojo algo fuerte, debajo de sus ojos, se hizo presente...
tenia la boca entreabierta, quería responder.
Imposible.
Millones de ojos sobre el, esperando que contestara.
No había respuesta....o...¿si?.
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Así transcurrió la atareada vida de el joven satoshi.
Diariamente, fuera de su hogar, había mucha gente que deseaba, tan siquiera, ver su rostro, algo de el, su ropa en el tendedero, su muy sexy arete...
Gente del mismo pueblo, del pueblo vecino y gente de todo el mundo.
Diario le llegaban millones de e-mails, con declaraciones de amor, admiración y algunas mas de envidia y odio...
Así como a diario, las chicas le chiflaban y le gritaban cosas comprometedoras...
Ahora esa era la vida de aquel joven, de tan solo 17 años. Nunca pensó, que llegara a tanto.
Un buen día, el pueblo, comenzó a acostumbrarse a tener a el mejor entrenador del mundo, y así como llegaron en jauría, se fueron yendo, no por olvidarlo, no, de hecho la verdadera razón era que ya no creían muy correcto molestarlo en su privacidad, y mucho menos, abusar de su amabilidad, pues diario, hecho un manojo de nervios, salía a atenderlos, desde muy temprano, hasta que el sol, se escondía.
Fue así que los del mismo pueblo se ponían de acuerdo, para detectar a algún turista que deseara colarse en casa del chico, y perturbar su privacidad. Le llamaban la atención y dejaban que se fuera, entre masculladas e insultos.
¿El?, con un dejo de tristeza lo admiraba todo, detrás de la ventana....
mientras soltaba suavemente, la cortina de la ventana...
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- satoshi, hijo, aquí abajo te busca alguien, ¡baja por favor!- bilma, le gritaba con alegría desde la planta baja de la casa, satoshi no pudo oír muy bien, bueno, de hecho, no escucho nada, solo un pequeño ruido el joven, ni siquiera aparto la vista de lo que en ese momento admiraba con toda la atención del mundo...
estaba tan concentrado... en el pequeño trozo de papel que tenia en la mano...
estaba algo arrugado y sucio, le faltaba el cachito de la esquina inferior de la izquierda... parecía ser un papel sin ningún valor... algo que merecía ir al bote de la basura...
sin embargo, la tierna y sensual mirada del chico revelaba todo lo contrario...
el , miraba como si fuera lo mas maravilloso del mundo....
trataba de no arrugar el papel, mas de lo que ya estaba... lo trataba con mucho cuidado, con amor.
Con ternura.
Sus profundos ojos negros, se perdían entre las líneas del escrito... su boca entreabierta, su miraba sensual enfocada... suspiro... murmuro... ...paso su mano, sobre su alborotado cabello... estaba a punto de cerrar los ojos y perderse en sus pensamientos....
-SATOSHI??!!!- bilma entro sorpresivamente en la habitación, el chico volteo a verla, y con rapidez, escondió muy disimuladamente, aquel papel...lo escondió rápido y mas no bruscamente, con mucho cuidado y cariño.
Satoshi le sonrió y se paro de su cama, levanto la mano
-¿qué pasa mama? ¿me necesitas?, ¿qué puedo hacer por ti?- bilma le sonrió, lo miro hacia arriba – no hijo, yo no necesito nada – satoshi ladeo la cabeza – ¿a no?- no. – le dijo su madre con delicadeza- hay, una persona aya abajo que te busca- la madre de satoshi le sonrió muy efusivamente – se que hace mucho que no la vez, ¿por qué nos vas a echar un vistazo ha?-
satoshi miro la cara de su madre... se detuvo a pensar unos segundos, parpadeo con velocidad, se hecho para atrás y de repente corrió hacia el recibidor...
llego corriendo a donde las escaleras... miro hacia abajo
lo que ahí vio, le sorprendió....
Bilma, llego con lentitud, se poso tras de satoshi, este por su parte, no cabía en asombro.
- y dime satoshi, ¿por qué te quedas ahí parado ha?... no vas a saludarle?-
satoshi seguía mirando al invitado... pronto, se sacudió la cabeza, camino con lentitud, y bajando los escalones con calma, sin dejar de ver al invitado... sonri
-h-hola...este...Leo...yo... – satoshi, de puro nerviosismo, se paso su mano izquierda en la playera, colocándola después tras su nuca, no era muy bueno expresando lo que sentía- ¿c-cuanto tiempo? Primo.....-
satoshi le sonrió con sinceridad, y le extendió su mano derecha en forma de saludo, el, se había desilusionado un poco...
por un momento, creyó, vagamente que ella.. vendría.
por el contrario el invitado, lo miro hacia abajo. Con una mirada fría y evasiva...
satoshi comprendió y bajo con lentitud la mano... sin dejar de ver los ojos de leo, su primo...
y si satoshi era alto y guapo....Si satoshi lo era.... su primo leo, lo era un más...
pelo negro corto, hacia arriba... ojos color miel...fríos, 1:90, sensual...guapo.... unos 19...piel blanca como la nieve...
con un gran atractivo...
no podías apartar tus ojos de el...
era...tan guapo...
un silencio se hizo presente en la sala... detrás de los chicos, el atardecer se colaba por la ventana, los rayos anaranjados del sol, tropezaban por todos lados, jugando con todo lo que tocaban...el pelo de ambos.. la ropa... las fotografías...
de repente un pequeño rayo de sol, dio justo en el adorno de leo...
la llevaba al cuello.
una cruz de plata.
Esto, capto de inmediato la atención de satoshi...
Que sonrió inmediatamente para tratar de congeniar con su primo...
- Leo, ha estado estudiando en el seminario de Rusia – bilma, pronunciaba estas palabras con gran ilusión, y alegría –es un chico muy inteligente, quiere ser seminarista e impartir sus conocimientos a todos, es un gran chico- bilma le miro con ternura, satoshi miro a leo
Parecía sorprendente que una persona como leo, fuera tan entregado a lo que hacia...
Esa mirada fría y sin brillo que satoshi había notado.
Era tan raro....
No podía creer que una persona tan fría, decidiera dedicar por completo su vida a "Dios" y a ayudar a los demás...
Otro silencio algo incomodo, cayo en la sala...
De repente y como si fuera un milagro, leo, le dedico una pequeña sonrisa a satoshi, sus ojos aun fríos, expresaban, agradecimiento, no en gran escala, pero lo hacían.
Satoshi, se sintió en confianza y entre miradas de alegría, ambos primos, comenzaron a reír.... satoshi lo hacia en forma destrampada, con su mano aun en la nuca, mas leo, lo hacia con ternura...
...no era un chico frío.
Bilma, miraba desde atrás, con alegría.
--------------
Buen día.
Espero que estén teniendo un agradable momento en este instante.
Yo soy la escritora de este fan-fic. Soy tokio.
Para servirles a todos mis lectores.
Este fan-fic es uno de los mas recientes que se me han ocurrido, de hecho, ya llevaba días en proyecto, hasta hoy, que he decidido escribirlo.
Esperando que sea de su total agrado, pues deseo que mucha gente, lo lea y critique lo que
por eso, lo publicare en Internet.
Dedicado con todo mi cariño a "Manira" mi hermana, que siempre me esta aguantando, y que es la persona que siempre lee todos mis escritos antes que nadie. He aprendido bastante gracias a ella.
Nos leemos.
tokio-san