Décima primer parte : CEREZA

Unos instantes a penas y pasaron en silencio

La chica se sintió en confianza, y retomo la conversación – yo creo..que le saldrán algunos moretones, pues puedo deducir, que, eso le callo en la cabeza- la chica señalo una rama, de tamaño considerable – aun así, creo que usted estará bien dentro de una semana, con mucha atención y cuidados considerables-

Y siguió contemplandola

Leo solo le sonrió.

Pero lo hizo de tal forma...

...era tan espontáneo... tan limpio y franco.

La chica también lo hizo

Se miraron.

Se comprendieron con la mirada...

Y de pronto ella, se levanto con rapidez, junto con cuidado, las cosas que leo llevaba antes de caer, y se las entrego en su caja dorada- temo que su bolsa se ha roto, pero, lleve mi caja, no es muy resistente pero...- leo, la miro, le imploro con la mirada que no se fuera.

Ella no comprendió, a cambio, se reverencio frente a el.

Y le miro con decisión

-cuídese mucho, espero, volver a verle algún día...-

leo trato de hablar, su voz se esfumo, le traiciono.

La chica estaba a punto de dar la media vuelta, ya había recogido su sombrilla.

Leo levanto el brazo...

Si no podía detenerla con la boca, tal vez si con su cuerpo...

Pero antes de que esto sucediera, ella volteo y tomo rápidamente su mano, leo, se sonrojo y abrió mucho mas sus ojos miel, la luna, los acaricio...

La chica le deposito en las manos...

Un pequeño caramelo...

Leo, se sorprendió, no comprendía...

Antes de que pronunciase algo, la chica lo miro

-kamui siempre dice que un caramelo, es la mejor medicina que podemos probar, quisiera que lo tomaras, es de cereza-

leo se quedo perplejo, fue tan tierna al pronunciar esas palabras...

la chica le apretó las manos, le se alegró

Volteo y comenzó a caminar lentamente...

El siquiera pudo levantar su brazo para tratar de detenerla de nuevo, esta vez, hasta eso, le abandono... solo, la miro...extasiado,

Miro su sedoso cabello largo y con volumen, su cintura, su figura delgada, y su suave contoneo al caminar...

Ella volteo de repente y amistosamente, movió su mano forma de despedida...

Hablo, pero la distancia ya era considerable entre ellos 2, leo solo contemplo como se movían sus carmesíes labios...

Le sonrió por ultima vez y retomo su viaje...

Tardo un momento en desvanecerse.

Leo ya no pudo ni correr...

Solo se limito a bajar la cabeza...

-ni siquiera se tu nombre....

no se a donde vas.... ni de donde has venido...

...ni siquiera se, si en verdad...me enamore de ti...