Algunas horas más tarde...

- No puedo dormir es inútil. Necesito aclarar mi mente. - dice en voz baja el shaman king

Sale de su habitación, piensa en ir a dar un paseo para así pensar en todo lo ocurrido. Pero, por alguna razón prefiere detenerse en la entrada del cuarto de su ex prometida.

- Desde que ella se fue, entraba a esta habitación todos los días para así encontrar algo que me llevara hacia ella. Poco a poco mis esperanzas se esfumaron y deje de venir... Pero, ¿por qué ahora siento tantas ganas de entrar?

Luego, de reflexionar si entrar o no; se decide y entra.



-Todo esta como antes, tal y como lo dejó hace tres años. Aun ahora que ha regresado todo sigue estando igual...

Ha regresado. Estas palabras se le quedan...

- Volvió; así como se fue regreso. Pero, yo la busqué, todos la buscamos. Nunca apareció... Perdimos el anhelo de encontrarla... y ahora después de tres años regresa como si nada nunca hubiera pasado. Solo que ahora no somos nada... y tiene... tenemos un hijo...

Empieza a recorrer lentamente cada espacio y rincón. Hasta que descubre algo nuevo que estaba tirado en el suelo.

-Esto no se encontraba aquí- dice -Es una clase de libro.

Lo toma, lo abre y lo empieza a hojear.

-No; es un diario ¡El diario de Anna!

-Seguramente se le cayó hace rato, y ni cuenta se dio

No resiste la tentación de leer lo que dice.

-Además ella no esta aquí... no puede molestarse- dice a la vez que pone una sonrisa.

Empieza a leer detenidamente...

No sé que me pasa. Últimamente me he sentido algo extraña, me dan unos ascos terribles y me siento un poco mareada. Fausto se ha ofrecido a revisarme, simplemente no quiero. No es que no confié en él, sino que... ¡No! No puede ser eso...

En estos días tendré que ir con una doctora, para que me diga que me esta pasando. Con alguien que no te conozca ni a ti, Yoh, ni a tus amigos. En fin, mejor una doctora en la que confié, y sepa que no sabe nada de los Asakura...

Temo lo peor, pero sé que no pueden ser ciertas mis sospechas...

-Ay Anna, me hubieras dicho como te sentías... - prefiere continuar

¡No puede ser! ¡No! ¡¿Por qué a mí?! Esto no puede ser verdad... pero no quiero a mi bebé lo maten, ni tampoco quiero darlo a un orfanato. Tendré que recurrir a la otra solución que me dio la doctora... Aunque sé que no volveré a verte, mi amado Yoh Asakura...

Hoy puede ser la ultima vez que te vea. Ese dulce beso que me diste al llegar será él ultimo recibimiento que tendré tuyo... Yoh... Te extrañaré tanto, pero no quiero que lo sepas. Somos muy jóvenes, y seguramente sé lo que dirá tu abuela. Esta es la única solución. Solo espero puedas entender...

Dejare atrás la pensión Funbari, todos los momentos que pasamos ahí se quedaran en el pasado y con eso a ti también. Adiós, mi querido Yoh...

El shaman siente ganas de sacar toda esa furia que se tiene por no haber podido estar con ella para apoyarla. Solo continua leyendo...

Hace algunos meses que empecé una nueva vida. Yo sé que tal vez no sea a tu lado, querido Yoh, pero esto será mejor así. Me vine a vivir a Tokio. Por el momento rento una pequeña casa. Solo conque estemos a salvo.

Este niño que cargo en el vientre será nuestro hijo. Me pregunto si será igual que tú, ¿a quien se parecerá? Tendrá tu carisma o mi frialdad. Lo único que quiero es que sea feliz... aunque eso significa no verte mas, mi amado Yoh...

¿Sabes? Hoy me encontré a Ryu, le conté la verdad. Piensa ayudarme. Al fin y acabo, esto esta saliendo bien. Pensamos en poner una pequeña tienda de reliquias familiares...

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Han pasado tres años... Ryu me ha estado contando cosas de ti, Yoh. Tal vez, hoy sea el día más difícil desde que me fui de tu lado. He tenido a Hana (así le puse a nuestro hijo) Cada día se parece mas a ti, me causa dolor al verlo. Ya que tiene tus expresiones... Ojala pudieras verlo.

Pensaba hablarte para así decirte que lo visitaras, pero cual es mi sorpresa al saber que estas comprometido nuevamente; esta vez con Tamao. Y que se han mudado hacia Izumo, no sabia que decir cuando me entere. Sentía como poco a poco una daga se me iba enterrando en el alma...

Yoh, tengo una herida en el corazón, y esta vez no estas tú para sanarla...

Supongo que entonces Hana será mi pequeño secreto, hasta que se deba saber...

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Me ha llegado una carta de tu abuela. Dice que debo ir a Izumo para que tu abuela conozca a Hana. ¿Es cierto que haz tenido buena reputación con los shamanes novatos, desde que eres Shaman King?

Por cierto, me será muy difícil volverte a ver, y ahora con Tamao. Pero seré fuerte Yoh, y no me entrepondré en tu compromiso...

Nos vemos pronto, mi querido Yoh...

-Es la ultima- dice soltando un suspiro - ¿Pero qué es esto?

Encuentra una foto vieja...

-Pero... si es la fotografía que nos tomamos todos al regresar del torneo- dice -Si mal no recuerdo... ¡Sí! Anna y yo estamos tomados de la mano aquí...

Al terminar de hablar le da tanto coraje, que su única reacción es aventar el diario con la foto hacia la puerta y gritar...

-¡¿Por qué?! ¿Por qué Anna? ¿Por qué te tuviste que marchar y dejarme solo? Y ahora regresas como si nada... y te vas con nuestro hijo a la casa de mi hermano. ¿Por qué me haces esto Anna? ¿No ves que todavía te amo?

Tamao, que había estado oyendo y viendo todo lo que pudiera a través de la pequeña abertura que quedo, observa la fotografía y se asoma a ver lo que seguía diciendo su prometido... Solo pudo observar como Yoh agachaba la cabeza y se veían caer unas lagrimas hacia el suelo...

-Yoh... te amo tanto, pero no me gusta verte sufrir. ¿Acaso yo me interpuse en tu camino hacia Anna? No sé que más hacer... - susurra Tamao.

Ella se dirige hacia su cuarto a pensar. Yoh se queda profundamente dormido en el cuarto de su ex prometida.