CAPÍTULO 6: LOS NIÑOS DESAPARECEN

Aioros y Saga eran los encargados de cuidar la puerta mientras Ariadna y el Maestro ayudaban a Atena a nacer. No tenían idea de lo que estaba sucediendo en esa habitación.

-Esto es increíble- dijo Aioros.

-Sí- dijo Saga- Atena viene cada 200 años para traer paz al mundo... y nosotros seremos los primeros en verla...-

En ese momento, Shura llegó.

-¿Qué ha sucedido?- preguntó- ¿ya nació?-

Los dos sacudieron la cabeza.

-Aún no- dijo Aioros. Shura hizo un gesto de impaciencia.

-Vamos, el mundo ha esperado doscientos años-dijo Saga- unos minutos más no...- pero se interrumpió al escuchar un llanto de bebé. Los tres se miraron.

-Ve, Shura- dijo Aioros- avisa a los demás-

Shura asintió y volvió al salón del trono, donde los otros caballeros dorados y los aspirantes esperaban noticias.

-¡Caballeros!- anunció Shura- ¡Atena acaba de nacer!-

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Esa noche hubo una gran celebración en el Santuario. Todos: caballeros, amazonas, aspirantes y guardias. Las amazonas que aún no tenían armadura tenían permiso de quitarse sus máscaras. A Aioros le hervía la sangre cada vez que alguien ponía sus ojos sobre la hermosa amazona, a pesar de que su rostro seguía cubierto. Y por primera vez, Aioros estuvo de acuerdo con el uso de máscaras. A Shura le pareció muy gracioso que su amigo estuviera tan celoso.

Aioria y Milo se paseaban entre la multitud.

-Si las chicas amazonas no son tan malas- dijo Milo- yo creí que eran ogros con esas máscaras...-

-¿Disculpa?- dijo Marín, cruzando los brazos. Milo y Aioria sonrieron.

-Que con esas máscaras parecen ogros- dijo Milo- pero todas son muy bonitas... todas menos esa...-

-Milo...- dijo Marín.

-¿Sí?-

-Ese, no esa, es Afrodita, el aspirante a la armadura de Piscis...-

-Ups- dijo Milo, rascándose la cabeza y sonriendo- bueno, tú ganas, todas ustedes son muy bonitas entonces...-

Aioria y Marín se echaron a reír.

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Varios días después del nacimiento de Atena, Aioria había salido con Marín y Milo. Cuando Aioros fue a buscarlo en el sitio donde le había indicado que estarían, no encontró a nadie.

-Tal vez está con Marín- se dijo, y fue a buscar a Ariadna.

-Hola, Aioros...-

-Hola- dijo él- ¿no has visto a mi hermano?-

-Curioso- dijo ella- yo te iba a preguntar por Marín. No la he visto desde esta mañana, que se fue con tu hermano...-

Aioros y Ariadna se separaron para buscarlos. Ariadna encontró a Saga.

-¡Saga!-

-¿Qué sucede, muñeca?-

-Aioria y Marín desaparecieron- dijo Ariadna- ¿no los has visto?-

Saga sacudió la cabeza.

-¿Cuándo fue la última vez que viste a Marín?-

-Esta mañana- dijo Ariadna- ella iba a ir a jugar con Milo y Aioria en las ruinas más altas...-

-¿Milo? ¿en las ruinas más altas?- dijo Saga, y ella asintió.

-Sí- dijo Ariadna- ¿sabes algo de ellos?-

-Me temo que sí- dijo Saga- John me dijo que también Milo desapareció desde esta mañana. ¿Ya fueron a buscar allá?-

-Aioros fue, y no los encontró...-

Saga puso cara de seriedad. Era normal que Milo desapareciera de sus entrenamientos, pero Aioria y Marín ya eran otra cosa.

-Muñeca, ve e investiga si faltan más niños entre los aspirantes a caballeros dorados. Yo les ayudaré a buscar... nos veremos aquí en media hora, ¿de acuerdo?-

Ariadna asintió y se dirigió a las Doce Casas. Saga la miró hasta que desapareció.

-Estoy seguro que él está detrás de esto- se dijo en voz baja- lo mataría si no fuera mi propia sangre...-

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Mu y Tao estaban sentados en la entrada de la casa de Aries.

-Mu, estoy seguro que vas a ganar tú- dijo Tao- eres el mejor...-

-Tú eres el más fuerte, Tao- dijo Mu.

-Lo sé- dijo Tao- pero tú eres más prudente... quisiera ser tú...-

-No digas eso- dijo Mu- tú tienes cosas que yo solo puedo soñar... tienes una familia, unos padres... yo daría lo que fuera por eso...-

-Gracias, Mu- sonrió Tao- me levantas el ánimo...-

Se escuchó un vidrio quebrándose dentro de la casa.

-¿Qué fue eso?-preguntó Tao.

-Iré a ver- dijo Mu, levantándose- ya vuelvo...-

Tao esperó a que Mu regresara, pero esto no sucedió, así que decidió entrar a buscarlo.

-¿Mu? ¿estás ahí?- dijo Tao- ¿dónde estás?-

No hubo respuesta.

-¡Tao!- llegó Ariadna- ¿dónde está Mu?-

-¡Mu despareció!- dijo Tao al verla- entró a la casa y... desapareció-

-Maldición- Ariadna murmuró entre dientes- debo buscar en las demás casas...-

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-No seas tonto, Afrodita- dijo Bellatrix- mis rosas son más lindas que las tuyas-

-El punto no es que sean lindas- dijo Afrodita.

-¿Entonces?-

-Deben servir para atacar a tu oponente- dijo Afrodita- ¿qué no has escuchado al maestro Adonis?-

-Pues que aburrido- dijo Bellatrix.

En ese momento, los dos escucharon un ruido extraño, proveniente de la casa de Acuario.

-¿Vamos a ver?- preguntó Afrodita.

-Ve tú- dijo Bellatrix- yo estoy cansada...-

-Como quieras- dijo Afrodita encogiéndose de hombros y bajando los escalones de mal humor- niñas...-

-Te oí- le gritó Bellatrix desde la entrada de la casa de Piscis- y más te vale que regreses pronto-

-Como sea- dijo Afrodita sin voltear hacia atrás, y entrando a la casa de Acuario. Bellatrix no se dio cuenta de que había alguien detrás de ella.

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El maestro Sidharta había salido, y había dejado a su alumno Shaka en su casa, meditando. El aprendiz de Cáncer entró y planeó asustarlo, pero Shaka sacudió la cabeza.

-Sé que estás ahí- le dijo sin abrir los ojos.

-¿Cómo lo supiste?-

-Siento tu presencia- dijo Shaka- tienes un cosmo muy ruidoso, Simone...-

-¡Máscara Mortal!- dijo el chico- me llamo Máscara Mortal...-

-Como sea- dijo Shaka- y no entiendo tu manía de querer cambiar tu nombre, si te llamas Simone...-

-¡Máscara Mortal!-

-Como sea- repitió Shaka- vete y déjame terminar mi meditación-

-Claro- dijo Máscara Mortal de mal humor- hasta luego- y salió de la casa de Virgo.

Shaka sintió su presencia salir. Continuó con su meditación, pero unos minutos después volvió a sentir un cosmo que entraba a su casa.

-¿Regresaste, Máscara Mortal?- preguntó Shaka. Nadie respondió.

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Varios minutos después, Ariadna volvió a encontrarse con Aioros, Saga y Shura, que también se había sumado a la búsqueda.

-¿Alguna señal de ellos?- preguntó Aioros.

-No- dijo Ariadna- y no son los únicos que faltan-

-¿No? ¿quién más?-

-Falta Mu en Aries, Simone en Cáncer...-

-Máscara Mortal- dijo Shura.

-¿Qué?-

-No le gusta que lo llamen Simone- dijo Shura- es Máscara Mortal...-

-Como sea- dijo Saga, poniendo los ojos en blanco.

-También falta Shaka en Virgo, Milo en Escorpión, Camus y Dimitri en Acuario, y Afrodita y Bellatrix en Piscis- continuó Ariadna.

-¿Y porqué no desaparecieron Tao, Aldebarán y Joseph?- preguntó Shura.

-Creo que quisieron llevarse a los que son los más posibles candidatos a caballeros dorados- dijo Aioros.

-Buena teoría- dijo Shura- solo hay un problema: Aldebarán es el único candidato a caballero de Tauro...-

-¿Qué no has visto su tamaño?- dijo Aioros- ese chico es enorme...-

-Tienes razón- dijo Shura- sería muy difícil desaparecer a ese tipo...-

-Es extraño- dijo Saga- aún la manera en la que desaparecieron-

-Hay que encontrarlos- djio Aioros.

-Yo... creo que tengo una idea de dónde están...- dijo Saga.

Todos miraron a Saga, sorprendidos.

-Es como agregó el caballero de Géminis.

-Bueno, eso es algo- dijo Aioros- vamos, Saga...-

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-¡Quiero salir de aquí!- lloró Bellatrix.

Todos los niños que habían desaparecido estaban ahí. Alguien los había dormido y los había llevado inconscientes a ese lugar, que al parecer estaba bajo tierra.

-Yo nos sacaré de aquí- dijo Máscara Mortal- ¡ONDAS INFERNALES!- pero su ataque rebotó en la pared, y de ésta a otra. El ataque estuvo rebotando de pared en pared hasta que se desvaneció.

-Nuestros ataques son inútiles- dijo Aioria- si esa pared nos devuelve los ataques...-

-¡Quiero salir de aquí!- volvió a decir Bellatrix.

-Tal vez uno de los aprendices de Aries puedan sacarnos- dijo Dimitri- ellos utilizan la psicoquinesis, y pueden teletransportarse...-

-Hay un pequeño problema, Dimitri- dijo Camus fríamente- solo está Mu, y aún está inconsciente...-

Marín se acercó al pequeño Mu.

-Tiene algo en su frente-dijo ella al observarlo bien- algo como de metal...-

-A ver- dijo Aioria. Camus también se acercó.

-Eso debe ser lo que lo mantiene inconsciente- dijo Camus- los que nos trajeron aquí sabían que Mu tenía esa habilidad y decidieron anularla...-

-Tal vez Milo pueda romper ese objeto con su Aguja Escarlata- dijo Aioria.

-Tal vez- dijo Milo, acercándose también.

-No sean tontos- dijo Dimitri- ese tonto ataque no les servirá de nada...-

-Cállate- dijo Camus, lanzándole una mirada fría.

-Ten cuidado de no lastimarlo- dijo Shaka. Marín sostuvo la cabeza de Mu, y Milo intentó romper ese artefacto con su Aguja Escarlata, pero el metal ni siquiera se marcó.

-Es inútil- dijo Milo- y no puedo hacerlo más fuerte porque lo lastimaría...-

-Tengo una idea- dijo Shaka.

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-¿De nuevo en las ruinas más altas?- preguntó Ariadna.

-Sí, muñeca- dijo Saga- se me ocurrió que tal vez ellos están aquí mismo... escondidos-

-¿Escondidos?- preguntaron Ariadna, Aioros y Shura al mismo tiempo. Saga asintió.

-Cuando era aprendiz, mi... alguien encontró una cueva por aquí...-

-Entonces, lo más probable es que Marín, Aioria y Milo hayan caído por accidente a esas cuevas...-

-Lo dudo- dijo Aioros- los demás niños desaparecieron desde las Doce Casas...-

-¿Dónde están esas cuevas, Saga?- preguntó Ariadna.

-Ese es el problema, muñeca- dijo Saga- no lo recuerdo con exactitud...-

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CONTINUARÁ...