Hola a todos! ¿Saben? Hace poco me leí una novela de Isabell Allende "El reino del Dragón de Oro", la recomiendo, es muy interesante. Bueno, cambiando de tema, aquí los dejo con el segundo capítulo, espero que les guste...
Una aclaración antes, a los que ya se habían leído este capitulo, le agregué un poco al final. Ah! Otra cosa, por este fin de semana es lo único que pienso publicar, ya que desbaraté el tercer capítulo para poder organizar mejor en la historia lo que este iba contener, además, tengo varios exámenes y trabajos para la otra semana así que hasta el próximo viernes no tendré tiempo para dedicarle a la historia. Ahora sí los dejo con el segundo capi completo...
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Tan solo una palabra...
-¡Harry! ¡Chico despierta!- Harry se despertó sobresaltado, su tía Petunia lo llamaba desde el piso de abajo. "¡Que sueño tan ridículo tuve!" se dijo a sí mismo "¿Estoy acaso tan deprimido que hasta recurro a imposibles muestras de afecto en mis sueños?, pero lo de anoche no fue un sueño, mi tía me trajo la comida a la cama y me puso pañitos fríos, pero, ¿de ahí a lo del pastel? No, es algo que solo puede suceder en mi imaginación".
-¡Son las diez de la mañana!, ¡Harry Potter baja ya!- gritaba tía Petunia, -Ya voy- contestó Harry todavía asombrado por el estúpido sueño que había tenido. De mala gana bajó hacia el comedor, Dudley no estaba.
-¿Cómo te sientes?, ¿Ya estás mejor?- inquirió bruscamente tía Petunia.
-Eh... si-contestó Harry, y después de mucho pensarlo dijo en un susurro alto- gracias por lo de anoche, tía-
-Déjate de tonterías, cualquiera lo hubiera hecho- dijo un poco incómoda tía Petunia- más bien ayúdame a hacer el desayuno-
Hicieron pancakes y refresco de naranja. En una corta conversación que tuvo con su tía, se enteró que Dudley participaría en una competencia de boxeo y que Vernon lo estaría acompañando, así que ese día probablemente llegarían tarde a casa. Después del desayuno, tía Petunia puso a Harry a hacer el aseo general de la casa, algo que desde que él había llegado no había hecho, pues se mantenía la mayor parte del tiempo metido en su cuarto; él se alegró, no porque le gustara particularmente la tarea encomendada, sino porque pensó que eso lo mantendría ocupado y evitaría que pensara en los sucesos acontecidos a finales de sus quinto curso en Hogwarts, esos sucesos que lo atormentaban casi todas la noches y que destrozaban sin piedad su corazón.
Cerca de las doce del mediodía Harry ya había barrido y trapeado el suelo, lavado los platos y organizado la cocina. En esos momentos se encontraba limpiando las ventanas, sin quererlo, su mente lo había llevado unas semanas atrás, cuando su alma sufrió una conmoción muy grave de la que aún no se recuperaba. Recordó, cuando Kreacher le mintió sobre el paradero de Sirius, cuando junto con sus amigos se dirigió al departamento de misterios, cuando cogió la profecía, uno de sus muchos estúpidos errores; finalmente, sus recuerdos se detuvieron en una sola escena: Sirius cayendo detrás del velo para nunca más volver a salir...Todo era su culpa, su culpa, y la de ese viejo loco que no le había contado todo desde un principio, que le había ocultado tantas cosas, pero había sido por amor, para protegerlo ¿no?, ¿por qué rayos todo el mundo siempre quería protegerlo?. Lo mejor hubiera sido morir, así no le haría más daño a sus seres queridos, así no sentiría esa culpa que le carcomía su espíritu, que lo atormentaba... si él hubiera sido más prudente, si hubiera escuchado a Hermione, si hubiera abierto antes el paquete que Sirius le regaló, pero no, no lo hizo, siempre estaba afanado por cumplir un papel de héroe, por salvar a todos, pero en muchas ocasiones resultaba haciendo lo contrario, resultaba lastimando a quienes más quería, esa última vez el perjudicado había sido Sirius, ¿quién más sería la próxima víctima?, ¿quién más tendría que morir para que él, el "famoso" Harry Potter viviera?.-Perdóname Sirius- susurró Harry ahogándose en su dolor, sintiendo como ardientes lágrimas recorrían su rostro cuando un grito de su tía lo devolvió a la realidad.
-Muchacho, ¿qué te pasa?, llevo como media hora hablándote y no respondías, deja de hacer eso y siéntate acá- dijo tía Petunia quitándole el limpiavidrios de las manos, y señalándole un sofá- creo que debemos hablar sobre muchas cosas- dijo con una mirada seria mientras se sentaba en un sillón enfrente de Harry.
-¿Por qué estos últimos días has estado actuando más extraño de lo normal?, ¿qué ha pasado en tu...tu...mun...mun...mundo para que estés en... ese estado?-
-¿A ti que te importa?, no te ha importado mi mundo, nunca te he importado yo, ¡SOLO SOY UNA MALDITA CARGA PARA TI!- contestó furiosamente Harry, mientras derramaba gruesas lágrimas-¿Por qué ha de importarte lo que me pase ahora?, tu nunca has sabido lo que siento, nunca has sabido por todo lo que he pasado, ni todo lo que he sufrido, tu nunca me comprenderás- dijo Harry sintiendo como la mezcla de sentimientos que lo había atormentado durante todo el verano, salía a flote en ese instante. Se encogió un poco, se llevo las manos a la cabeza y se agarró fuertemente el cabello, tratando de calmar su dolor, su angustia...
-¿Por qué no lo intentas?, ¿eh?, ¿Por qué no me lo cuentas ahora?- dijo tía Petunia con un leve rastro de enojo- ¿cuánto has sufrido? ¡Anda!, ¡Cuéntamelo!-insistió.
¡Si así lo quieres, lo haré!- respondió Harry con desprecio. Comenzó por contarle con mucha rabia como se había sentido lo diez primeros años de haber vivido con ellos, algunas veces tía petunia exclamaba que era un malagradecido, que tal vez lo mejor hubiera sido nunca dejarlo vivir en su casa. Impertérrito, Harry siguió con su historia, ella quería que se la contara, pues bien, así lo haría a pesar de sus insultos, le contaría todo. Le contó todo su primer curso, luego los demás, al llegar al final del cuarto, su tía se encontraba totalmente callada, prestándole mucha atención y como en estado de shock. Harry por su parte se había calmado un poco, y aunque seguía hablando con odio, ya no gritaba. Cuando llegó al final de su quinto curso se detuvo, no soportaba esos recuerdos, le dolían demasiado, pero aun así, tomó fuerzas, y se lo contó todo, absolutamente todo, incluso la profecía. Al terminar su relato, Harry estaba muy exhausto, se había quedado un poco afónico, pero ya no sentía odio, ni rabia, todo lo que había dicho, había descargado esos sentimientos fuera de él. Tía Petunia estaba en frente, con lágrimas en los ojos, y solo atinó a preguntar:
-¿Cómo es posible que hayas pasado por todo eso?, ¿Cómo puedes llevar una responsabilidad tan grande sobre tus hombros?- su tono de voz, daba a entender que había creído todas y cada una de las palabras de Harry-Yo...Yo nunca pensé...pensé que hubieras soportado tantas cosas...-entonces, mirando fijamente a Harry a los ojos, le dijo la palabra más sincera y cálida, salida del corazón, que nunca antes le había dicho a su sobrino- Perdóname-
Instintivamente tía Petunia se tapó la boca, como si hubiera dicho una mala palabra, ella no había querido decir eso, al menos no concientemente, no le gustaba demostrar sus sentimientos frente al chico, pero eso se le había salido sin querer, y aunque no lo quería aceptar, muy en el fondo de su alma sabía que era verdad, deseaba con todas sus fuerzas cambiar, que él la perdonara por hacerle pagar por una culpa que no era suya, sino de su madre, de Lily. Le había conmovido el relato de Harry, ella sabía que sus palabras eran sinceras, pero no podría cambiar tan fácilmente con el muchacho. Se dejó llevar por un momento por sus emociones, por su sentimiento de culpa, pero no podía perdonar a Lily, nunca le perdonaría sus dos grandes errores, y tal vez nunca volvería a dirigirse a ese muchacho de esa manera tan... ¿cariñosa?, sí, esa era la palabra, cariñosa. Le dolió mucho lo que Harry le contó, en parte pensaba que era un malagradecido, pero también en parte sabía que tenía razón, ellos casi nunca se habían comportado como una verdadera familia para él. Además estaba todo lo que había vivido en su colegio, todo lo que había tenido que soportar y... la profecía...era una carga muy pesada para un adolescente... quería mostrarle al chico, que aunque no fuera mucho, le tenía un poco de afecto, al fin y al cabo era su sobrino ¿no?, pero no, sabía que no lo haría, su orgullo y su resentimiento se lo impedían.
-¡Vete!, sube a tu cuarto y no salgas más por hoy, no te quiero ver más. ¡Sal de mi vista!- Harry no se movía, estaba sorprendido, shockeado por la actitud de su tía, por sus repentinos cambios emocionales- ¡AHORA!- gritó muy fuertemente tía Petunia. Inmediatamente Harry se dirigió a su cuarto, con la cabeza hecha un revoltijo, llena de preguntas y sentimientos contradictorios.
"¡Como si el pasado se pudiera olvidar tan fácilmente!" pensó amargamente tía Petunia mientras veía a su sobrino subir las escaleras.
Sus ojos se volvieron vidriosos, no debía recordar aquello, no podía seguir torturándose por algo que no había sido su culpa, tal vez ni siquiera era culpa de Lily, algo que no había estado en sus manos impedir o cambiar...Suspiró rememorando su pasado,... una época que quería olvidar...-Alan- susurró sentada en un sillón al tiempo que dos lágrimas recorrían y humedecían su rostro.
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Bueno, hasta aquí va el segundo capítulo, se que es corto, pero les prometo que el tercero será más largo, tal vez incluso que el primero. ¿Cómo voy?, ¿Les gusta cómo va la historia? Le agregé un pedacito al final, creo que así quedó mejor, ¿qué opinan? Please, dejen reviews!
Contestación a los reviews del primer capítulo:
Ithae: Eres mi primer review!, No tenía pensado revelarte todavía lo del hombre que murió, pero tu último review me sirvió para darme cuenta que iba demasiado rápido con algunas cosas, y que en el tercer capítulo iba a revelar tal vez demasiado. Espero que hayas recibido el mail.
kamesita: Gracias por tu review, espero que el segundo capítulo aunque es corto, te haya gustado.
Sakura-Yuzuki: Supongo que en este capi habrás encontrado la respuesta a tu pregunta, si no es así, no te preocupes, poco a poco le irás encontrando sentido. También quiero decirte que me gusta tu historia aunque no he podido leer el tercer capítulo.
Agradezco a los que me escribieron sobre el segundo capítulo, contestaré sus reviews cuando publique el tercer capítulo.
En los próximos capítulos empezará la acción, así que estén pendientes. Eso es todo por ahora así que...
Hasta pronto!
