-IV: ¿Pero, esto que es?

-¿Pero, q...q... que te ha pasado?- preguntó entrecortadamente Momoko, ayudando a su amiga a entrar.

-Pues nada, que iba corriendo por la calle para llegar aquí lo antes posible, y por poco tengo un accidente...

Momoko puso cara de circunstacia... -¿Eeeh, que?-

-Si, un motorista por poco me arrolla, aunque admito que fue mi culpa por cruzar sin mirar... Pero me llevé un susto tremendo.

-Anda, pasa dentro chica, y tómate algo-

Aunque Momoko actuó con tranquilidad, intuía ya lo que había ocurrido, y temía que su primo Hoshi hubiese sido el motorista que por poco atropella a Scarlett, ya que habían demasiadas coincidencias.

Las chicas entraron al saloncito, pero el primo de Momoko parecía no estar por alli. –De igual ha ido al baño o la cocina- Pensó Momoko.

Scarlett se sentó en un sillón que estaba vacío, y las primas de Momoko se presentaron.

-Hola, yo soy Umi, y esta es mi hermana Sora, ¿Que tal?-

Le dieron dos besos cada una a la muchacha.

-Parece ser que estás algo mareada- Comentó Sora con tono inquisitivo.

-Si, bueno, es que por poco me atropella una moto de camino aquí.

Cuando oyeron esto, todos los presentes en el salón se quedaron callados, y como si por arte de magia hubiese sido, justo en ese momento entró Hoshi en el salón, que venía de la cocina con unos refrescos.

Entonces el silencio se hizo totalmente insoportable. Scarlett se quedó atontada al verlo, y a él le pasó algo parecido...

Momoko interrumpió el silencio –Vaya, jejeje -Dijo con voz nerviosa -Parece ser que entonces ustedes dos ya se conocían, ¿no?

Hoshi asintió, y se acercó a Scarlett, presentándose.

-Hola, ¿Scarlett? Bueno, me llamo Hoshi y soy el primo de Momi.

-Eeerr, si, bueno, pues eso, ¿Encantada?

Enseguida los demás empezaron a a hacer comentarios, y pareció que todo volvía a la normalidad.

Hoshi y Scarlett no habían hablado en toda la noche, y en un momento de descuido por parte de ella, Hoshi se sentó a su lado...

-Bueno, disculparás lo que ocurrió antes, ¿No? Espero que no te haya pasado nada malo, no era mi intención...- Dijo poniendo una mano en su hombro.

Justo en el momento en el que Scarlett iba a responderle que no pasaba nada, sintió unos mareos terribles, y se desmayó. Durante este tiempo, tuvo una extraña visión, que logró recordad tras despertarse minutos después.

En esta visión, Scarlett estaba en el Mundo de los Ángeles, pero no era tiempo de guerra, sino al contrario. El ambiente estaba totalmente impregnado de ondas de amor, de tal magnitud que hasta el aire se veía de color rosado... Pero no iba sola, como ella suponía, sino que iba de la mano de un chico, un ángel, alto, apuesto, pero al que no conseguía ver el rostro. De pronto, al ángel comenzó a alejarse de ella, como si una fuerza exterior lo llevara, y gritaba:

"¡Scarlett, Scarlett, amor mío, siempre estaré a tu lado, pase lo que pase, no te abandonaré jamás!"

Ella empezó a correr hacia él, y justo cuando iba a conseguir ver su rostro, algo la despertó:

-Scarlett, Scarlett, estoy a tu lado, ¡Despierta!

La chica abrió los ojos, y aún no diferenciaba la voz de Hoshi, que era quien le había dicho estas palabras, de la voz del ángel que gritaba aún en su mente... Miró a Hoshi a los ojos, y sintió una punzada en el corazón, no una punzada de dolor, sino de consuelo... Ambos se miraban a los ojos, y de pronto se abrazaron. El resto de la sala no entendía nada de lo que estaba ocurriendo. Ni el porqué de las palabras de Hoshi para que Scarlett despertara, ni la reacción de ésta al abrazarse a él.

Pero el abrazo de ambos provocó otra visión en la mente de Scarlett, esta vez sin desmayos... En esta ocasión se veían a los mismos personajes de la anterior, ella y el ángel misterioso... Estaban a la orilla de un lago de color púrpura, en un atardecer de colores rosados y naranjas. Cuando Scarlett volvió la cabeza para mirar a su amado, solo consiguió ver un color negro azulado, el de su cabello, justo antes de volver a la realidad. Cuando se dio cuenta de lo que ocurría se separó enseguida de Hoshi, se levantó, pidió disculpas, y simplemente se fue de casa de Momoko.

Todos se quedaron totalmente atónitos, y Hinagiku alcanzó a comentar: "Pues si que le ha sentado mal a esta lo de antes" Lo que provocó una mirada de desaprobación por parte de todos los demás.

Hoshi no dejó de pensar en ella durante todo el tiempo que duró la fiesta, tenía dudas, sobre todo acerca de qué era aquella visión que había tenido al abrazarla...