6/Abril/2004

Retador: Jeru

Reto: Blaise/Ginny en el que Ginny diga "No es mi culpa que las ranas sean verdes"

Rating: PG

Spoilers: Un mínimo insignificante del 5º.

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            El tema 19 del libro de Runas Antiguas estaba en seria pugna por ser el más aburrido que Blaise Zabini se hubiera estudiado nunca. Tamborileaba con el lápiz, cuando divisó la cabeza pelirroja moviéndose entre las mesas. Consideró brevemente la idea de tirarse por la ventana, la desechó al momento, y reunió toda su compostura para enfrentarse a ella. Tres. Dos. Uno...

            - Zabini –dijo Ginny.

            -Weasley –dijo Blaise, sin mirarla.

-¿Te vienes a Hogsmeade a tomar un sorbete de limón? –dijo ella.

Levantó la cabeza. Ella tenía los dos primeros botones de la camisa blanca desabrochados, y la corbata de Gryffindor torcida hacia un lado, colocada a propósito para que pareciera casual. Llevaba una cola alta, con algunos mechones rojizos cubriéndole parte de la cara, y nada de maquillaje, así que Blaise podía ver los millones de pecas. La sonrisa era sincera, y eso le mosqueó.

-Escúchame, Weasley, te equivocas si te crees que yo soy igual de obtuso que el resto y no me he dado cuenta de que llevas un tiempo enrollándote con cualquier tío de Hogwarts que lleve una bufanda verde y plata. Excepto ese Ravenclaw de Michael Corner, te has paseado por ahí con Malfoy, con Nott, con Flint, con Bode, y corre un rumor que te incluye a ti, Pansy Parkinson y Millicent Bulstrode, y que es bastante escabroso. Pues lo siento, pero yo no voy a ser otra meta volante en el tour de Slytherins que te estás montando. Sinceramente, no sé cuánto te pagarán el resto de Gryffindors por ganar la apuesta, pero yo no te voy a ayudar a conseguirlo. Vete a buscar a Crabbe y a Goyle, que son los que te faltan.

Lo dijo todo casi sin respirar, de un tirón. Cuando terminó, ella sonreía más, y él se dio cuenta de que le había hecho saber que estaba al corriente de todos sus movimientos amorosos. Mierda.

- No es culpa mía que las ranas sean verdes

- ¿Eh? –dijo Blaise, que obviamente esperaba cualquier otra respuesta.

- Las ranas son verdes. El verde es el color de Slytherin. Mi padre me dijo que en los cuentos muggles, las princesas besan ranas para que se conviertan en príncipes. Así que yo beso Slytherins. –Lo dijo como si fuera un silogismo totalmente razonable.

Su expresión se puso triste un momento, y dejó de mirarle a los ojos.

–Lo de Michael Corner fue distinto. Yo estaba enamorada de un Gryffindor que estaba enamorado de una Ravenclaw, y pensé que a lo mejor así le daba celos. Pero no resultó. –Volvió a mirarle y recuperó la sonrisa-. Aunque Mike tenía una espalda divina. Bueno, ¿qué me dices? ¿Te vienes a Hogsmeade o no?

Él estaba bastante impresionado, y no podía dejar de pensar en todas esas pecas, pero quería resistirse un poco más.

- Es que... tengo que estudiar...

- Venga, invito yo, y eso que soy una pobretona Weasley. – se acercó mucho a su cuello para susurrarle al oído. –Y si vienes, te cuento si lo del rumor con Parkinson y Bullstrode es verdad o no.

Blaise cerró el libro de Runas Antiguas.

- Hecho.