Lágrimas de tinta china
Una cena desastrosa
Suspiré nerviosa y cogiendo a mis hijos bajé las escaleras hasta el comedor, ni siquiera me preocupé de Draco ni de Harry.
-Venid mis queridines- dijo Molly dirigiendose a Cory y a Chris con una voz dulce y alegre-sentaros a mi lado.
-Yo quiero sentarme con mama- protestó Chris que seguía sujeto a mi mano.
-Pero cariño...no quieres sentarte con tu abuela....hoy es el último día que vamos a estar juntos...
-Vamos Chris, haz caso a tu abuela- le dije mientras le daba una palmadita en la espalda.
-Bien-dijo Arthur-A ver que os parece...Ginevra, tú siéntate junto a tus hermanos, tu Harry al lado de Fred y Hermione, querida, sientate a la derecha de Harry, Draco, puedes sentarte con Hermione, luego Charles, Bill, que los gemelos se sienten entre mi esposa y yo al lado de uno de ellos.
¿No os parece que es una estupenda disposición?
Yo la verdad estaba un poco incomoda entre Harry y Draco, sin embargo no estaba en disposición de discutir.
Aquella cena empezó con normalidad aunque estaba segura de que terminaría fatal.
Molly fue a la cocina para coger el primer plato, al poco rato salió con una enorme fuente llena de puré de patatas y guisante.
-Todavía no empecéis-dijo con una sonrisa en los labios-que aún faltan cosas.
Voló hacia la cocina y salió con una enorme bandeja llena de muslos de pollo y una salsera.
-Ginny querida...trae la ensalada y el pan.
-Si mama.
Arthur se dispuso a servir la comida cuando su esposa lo detuvo.
-Yo creo que a Harry le encantará servir la cena-dijo mientras le regalaba al ojiverde una cálida sonrisa.
-¿Y por que no lo sirve nuestro invitado sorpresa?-dijo George mientras le fulminaba con la mirada.
-A mi no me gustan esas cosas verdes-dijo Cory señalando los guisante que se encontraban esparcidos por el pure.
-No son cosas verdes-le regañé-son guisantes y son muy sanos, así que tienes que comertelos.
-No seas tan dura-me aconsejó Molly- aún son pequeños.
-Molly, son mis hijos...y yo sabré si he de ser dura.
-No te vendría mal aceptar algún consejo...después de todo yo he tenido siete hijos...
-¿No me estarás diciendo como educar a mis hijos?¿verdad?-dije furiosa mientras me levantaba de la silla.
-Draco me tiró disimuladamente del brazo para que me sentará, pero le ignoré, estaba demasiado enfadada, y lo peor d todo es que no sabía por que.
-Esta bien Molly-dijo Harry cogiendo el cucharón- yo serviré la cena-me miró un segundó con severidad- Hermione ¿quieres un poco de salsa?
-Sigo sin entender el por que de tantas tensiones-dijo Charlie mientras jugueteaba con un diente de dragón que tenía entre las manos.
-¿No lo sabes Charlie?-dijo Fred- pues te daré una pista...Malfoy.
En ese momento Charlie miró a Draco, que a mi parecer ni se había percatado de su presencia.
-Que sepas que yo no elegí quedarme-respondió Draco con desprecio.
-¿A no?, pues si no quieres estar aquí...ya sabes donde está la puerta-dijo Fred casi gritando.
-Pues quizás me vaya, esta claro que yo no pinto nada aquí.
-Eso-corroboró Harry-no pintas nada.
-Un Malfoy nunca se sentaría a cenar con...quiero decir...
-¿Cómo que un Malfoy?-pregunté yo más furiosa aún que antes- pensé que habías cambiado, pero ya veo, sigues siendo el mismo de antes...arrogante y egocéntrico.
-Lo siento Hermione...sabes que no quería decir eso...
-¿Y que querías decir?
Draco no contestó...seguramente por que no sabía que decir.
-Ya esta bien!-gritó Molly- esto es una cena de familia, se supone que tendría que ser feliz...y vosotros la estáis convirtiendo en una pesadilla.
Fred hizo un amago de comenzar a hablar pero su madre lo detuvo.
-Fred calla o te quedas sin postre-dijo regañándolo como si aún fuese un niño pequeño-tu tienes igual de culpa que el resto.
-Y yo que culpa tengo-protestó Ginny- yo no he abierto la boca en toda la noche.
-Tu la única.
-A Chris le han servido menos guisantes.
-Cory come y calla- le dije yo con una mirada severa.
-No me gusta la comida-protestó Chris apartando el plato- quiero el postre.
-Ya cariño-dijo Ginny con su encantadora voz- a mi tampoco me gustan mucho los guisantes...mira, si os coméis todo el puré luego os llevaré a por un helado.
-Esta bien tia- dijo Cory y Chris.
No te como Draco intentó hablar con migo a lo largo de la comida sin embargo yo me limité a ignorarlo.
-No se como se te ha ocurrido traerle-me susurro Harry.
-Dudo que puedas entenderlo.
-¿Por qué dices eso? Hermione, luego tenemos que hablar.
Estaba a punto de decirle que estaba todo dicho, sin embargo no pude hacerlo, él se merecía una explicación, quizás si se la hubiese dado antes nada de esto habría ocurrido.
Antes de servir el postre Arthur que había estado callado durante toda la cena decidió proponer un brindis.
-¿Por qué nosotros no tenemos copa?- preguntó Chris.
-Cariño...los niños no pueden beber alcohol, pero mira, podeis brindar con zumo de calabaza.
-Yo no quiero zumo-protestó Cory
-Y yo tampoco
-Pues brindar con agua-dije yo cansada de sus comentarios, en casa nunca eran tan caprichosos, o tal vez lo hacían para que les prestara más atención.
-Esta bien...que os parece si brindamos por otra maravillosa cena como esta?
Todos le miramos anonadados, nadie diría que sa cena había sido maravillosa.
-Esta bien- y que os parece ¿Por que podamos reunirnos todos nosotros de nuevo?
-No creo que sea necesario que estemos todos nosotros-sugirió Harry, aunque no dijo quien sobraba, todos lo sabíamos.
-Muy bien...pues entonces...¿Qué todos nosotros seamos felices?
Todos nosotros levantamos nuestras copas y gritamos "que todos seamos felices" aunque fuese un brindis estúpido al menos nadie había encontrado ninguna queja, y eso ya era algo.
Molly trajo de la cocina una norme tarta de chocolate era maravillosa, estaba decorada con flores que cambiaban constantemente de color.
No sobró nada de la tarta, incluso hubo gente que repitió más de unavez.
-¿Todavía teneis ganas de un helado?-preguntó Ginny a los gemelos.
-Si- dijeron a unisono.
Ginny y los gemelos fueron a por unos helados aunque dado la hora que era dudaba que hubiera algo abierto.
Harry y yo subimos a una habitación para hablar.
-Esta bien, explicamelo, por que sigo sin entenderlo.
-Mira, Cory me pidió que dejases de venir, que no quería verte, por que el pensaba que intentabas ocupar el sitio de Ron...yo no sabía que hacer, el era mi hijo y pensé que lo mejor sería...
-tirar a la basura casi quince años de amistad, ¿verdad?.
-No es eso,¿crees que no me costó decirte que no volvieras?¿crees que me es facil romper con todos mis recuerdos?, pero son mis hijos y solo quiero que sean felices.
-Hermione-dijo abrazandome con fuerza- no quiero perderte, eres lo más importante para mi, ya no tengo amigos tampoco tengo novias, por que siempre pienso que tu y yo...pero no, eres la esposa de Ron. Algo en mí me dice que estoy condenado a estar solo, por eso no me digas que no podemos volver a vernos...¿acaso no recuerdas nuestros años en Hogwarts?
-Harry...ojalá fuese tan facil...
No quería continuar con aquella conversación que hacía que me sintiese culpable, así que salí de la habitación dejando a Harry. Ginny y los gemelos ya habían vuelto ambos llevaban dos grandes helados de fresa y nata.
-Mama, mama-dijeron mientras corrían hacia mí- mira lo que nos ha comprado la tia.
-Y ya le habeis dado las gracias?
-Ups, gracias tia Ginny v
-Por cierto-dije yo mirando hacia los lados- ¿Donde está Draco?.
-Se ha ido-se apresuró a decir Arthur- aunque no te preocupes, puedes utilizar nuestros polvos flú para volver.
-Muchas gracias Arthur, empecé a despedirme d todos, todos ellos parecían mucho más amables ahora que Draco se había ido.
Entonces escuché el crujir de las escaleras, supe al instante que era Harry y me apresure a coger los polvos.
-Bueno, nosotros ya nos vamos- dije cogiendo a los gemelos que acababan de despedirse de su abuela.
Talvez fuese cobarde al no enfrentarme con mis problemas pero es que de momento no estaba preparada.
Nos introducimos en la chimenea y apretando aquel puñado de polvos lo lanzé gritando.
-Royal Street numero 13.
Notas de la autora-
Ya sabeis...dejad reviews v.
