(Se abre el telón y aparece Kini con un vestido de algodón blanco... algo raro en ella =.=U)
Kini: (reverencia) Buenas, no quiero empezar pidiendo disculpas por el retraso, porque en realidad tengo muchísimas excusas ¬-¬U desde problemas familiares, escolares, personales... ¡Hasta con el Fanfiction! o (se tira al suelo)
Kouichi: (tomando el té con Lyserg escuchando música con los audífonos de Yoh XD) Eso pasa por publicar ese horrible fic u.ùU
Minako: (desde el público, estrujando a Eriol XD) ¡¡NUU!! Era un hermoso fic T.T ... TOT ¿PORRRRR QUEEEEÉEEE?
Kini: (Silencio... mira a Kouichi aún tirada como está) Calla, Kimura... que no estoy de humor ¬.¬U... Sé que a muchos les pasó un problema parecido (me vetaron... sin publicar en mucho tiempo ToT)... pero bueno... acá estamos ¡Publicando! XD (se pone de pie como si nada)
Kouji: (le da un último sorbo a su té) Loca u.
Kini: Intentaré ser algo más breve para contestar reviews, pero no quiero dejar pasar a mi invitada especial... ¡¡Mi 'nee-san May!! =D ñ.ñ Y Taku-chan nos ayudará a contestar los reviews, si aunque me pongas esa cara, Minamoto ¬o¬
Kouji: ¬-¬U (y con esa carita de parte de Kouji entra May y sube Takuya XD)
Kini: ¡¡May 'nee-san!! =D (se tiraría sobre ella, pero se contiene)
May: Hola, Kini n.nU
Takuya: ¡Kouji! XD
Kouji: =.=U Empecemos con la tortura de una vez...
Kanata
Kini: ¡Primero! ¡Me da mucho gusto que hayas regresado! XD Extrañaba tus locuras ToT ¡Y no agradezcas! ¡Fue un placer tenerte a ti, a Miyu y a los demás aquí en el capítulo pasado! n.n-
Kouji: ... Oh, sí u.úU (sarcasmo XD)
Kini: Pero tu review se ha cortado U (creo que ya lo sabes XD) a la próxima a ver si lo guardas como me dijiste ¡Quiero saber todo lo que me quieras decir! =D Oh, ¡y Kouji cuidó bien de tu lobito! X3
Takuya: o.oU ¿Por qué estás todo rojo, Kouji?
Kouji: Cállate...
May: u.ú Calla Minamoto... ¡Que me ha faltado traer a Marick!
Kini: ¡Nos vemos! ñ.ñUU (je, je... ¡prometo hacer un capi emocionante la próxima vez! XD) ¡Saluditos a Luzy! X3
Aoi Ookani
May: ¿De quién será ese nick tan hermoso?
Kini: ¡May! ¡May 'nee-san! =D ¡Hola!
May: Hola, Kini n.n-
Kouichi: ¿No se habían saludado ya?...
Kini: ¡¡Hola!! ¡'toy feliz de que estés aquí! X3 U (revisa el review de su 'nee-san) Como siempre... ¡Dices muchas cosas ciertas y muy observadoras! ToT ¡Kawaii! ¡Tan kawaii!
May: ñ.ñU ... Dejaste mal a Marick, Kouji ¬¬U
Kouji: ... Locas =-=U
Kini: ¡Eres un violador!
Lyserg y Kouichi: ... (caritas de confusión XD)
Kini: ¡Podría hablar por horas de tu review, 'nee-san! Pero... ya te lo comentaré.. después, de otras maneras =D (sonrisita de complicidad)
May: Como quieras, Kini (sonríe igual de vuelta X3)
Takuya: o.óU Se llevan demasiado bien...
Kouichi: May-san soporta muy bien a Kini-senseii ñ.ñU
Kini: ¡No te digo Bye aún porque te quedas! Sólo... ¡Gracias por el review!
May: XD No es nada...
lady-amaltea
Hao: (aparece de pronto, quitándose una camisa de fuerza XD) ¡¡¿Ya ven?!! ¡Yo no estoy loco! ¡Alguien entiende mis planes! ToT
Kini: Neee... te has confundido... tienes razón, lady-amaltea XD
May: Pobre Hao... ¡No te preocupes, quememos algo!
Kouji: ... Piromaníacos (Kouji suda gotita mientras May y Hao queman parte del escenario... y los extras lo apagan con los extinguidores XD)
Kini: El Hao-Lyserg ¡aún no termina! Después de todo... las intenciones de Hao eran buenas n.nU
Lyserg: ¿¡QUÉ!? .U (mareo)
Kouichi: ¡¡Lyserg!! (lo sostiene antes de que se de un golpe en el piso XD)
Kini: ¡Arigatô por tu review! n.n (reverencia)
anika-asakura
Hao: ¡Yo no soy un cerdo! (de nuevo se incendia todo a su alrededor... y... los extras le piden a Kini que les aumente el sueldo ¬.¬U)
Kini: Tienes razón, anika-asakura... ¡Hao es un cerdo! Y Anna está muy enfadada... ¡sólo que es Anna! Su orgullo le impide decir que lo está XD.
Kouji: ¡Te metes demasiado con Kyouyama!
Kini: Calla, mortal... ¡Oh! O.o ¿Me mandaste dos reviews? XD ¡Te has emocionado! (salta sobre Yoh) ¿A quien amas, kawaii? =D
Yoh: ñ.ñU (su típica sonrisa amable XD)
May: ¡Yay! ¡Twincest! (lee otra vez el Hao-Yoh del capi pasado)
Kini: ¡Ah! ¡Ahora todo puede pasar! X3 Gracias por escribir.
Hao: ¡Yo también te quiero! ToT (el cambio de ánimo)
La LLama
Lyserg: (escupe té) ¡¿Lyserg-Kouji?!
Kouji: ¿¡NANI!? (totalmente rojo)
Kouichi: ... Solamente estás liando más las cosas, senseii
Kini: XD ¿Yo?
Hao: T.T Yo sabía que alguien me creía... (ve llegar de nuevo la ambulancia del manicomio) ... Juu... ToT
May: ... ¡Hola, Yuzu! XD (optó por ignorar a Hao y su nueva aptitud de víctima = ya pronto se le pasa)
Lyserg: ... No es para tanto... (se está traumando por algo que no recuerda)
Kouichi: o.ò No te sientas mal, onegai...
Kini: ¡No te preocupes, Kuda-chan! ¡Todo se desliará a su tiempo! XD ¡Bye a todos! (se despide con la mano) ... Y Kouichi es mío o.ó ... (mira a todos los presentes... a ver si alguien le debate eso, pero todos la miran con una gotita de sudor en la frente XD)
May: Ay, imoto...
Kany-chan
Kini: ¡¡Mi alumnaaaa!! XD (de nuevo se lanzaría sobre alguien, pero se contiene) ¡Buen... hace mucho que regresaste de España...! ¡Como ha pasado el tiempo! ñ.ñU
Kouji: Claro... tú nunca publicas ¬¬U
Kini: U No te preocupes, ya haré un lemon tuyo y de Yosei... ¡Ya sé que lo estás pidiendo! XD
Kouji: ¿¡NA-!? (totalmente rojo XD)
Lyserg: ... Yo no recuerdo nada de esa escena =-= ... Minamoto-san y yo...
Kouichi: =.=U
Kini: XD ¡Fue un placer dedicarte esa escena, Kany! En realidad me gustó mucho escribirla =D ... ¡Wah! ¡LEMON! (¿sólo para hacer caer a Yosei? .-.U)
May: ¡Ah! ¡El Hao-Yoh! ¡Kawaii!
Kouji: ... Maldito Hao... maldita escena... maldita Ainotsuki =-=U
Kini: XD ¡Nos vemos, Kany! ¡¡Di adiós, Kouji!! ¡¡Di adiós a Yosei!! (que tengo pendiente el fic de "Coincidence" contigo UUU)
Kouji: A-diós... (susurro XD)
Holly Motto
Kini: No te preocupes, yo he estado igual ... demasiado trabajo, Universidad, familia, problemas personales... ¡Uff! ¡Descanso! ToT ... No sé cómo le haces para escribir May 'nee-san..
May: ¿Eh? (¿me respondes eso? XD)
Kini: ¡Oh! ¡La Llama! ¡Es Yuzu! XD ... Es que Lyserg-chan nació para sufrir =3 ... es inevitable.
Kouichi: ¡Kini-senseii! o.óU
Kini: ¿Qué? X3
Kouji: ... (prefiere no hablar ya de la escena que se montó con Lyserg... pero sigue rojo XD).
Lyserg: No-che... romántica... con Kouichi... o.o- ... (se sonroja por completo... igual que Kouichi)
Kini: o.o ¡Y aclarando! (de una vez a todos) Yo no invito personajes de otros fics ñ.ñUU ... Ellos me piden aparecer (pero no son de otros fics XD) son mis amigos... ¡mis amigos! =D (ahora sí se cuelga de May)
May: o.oU Kini... estás algo loca XD .. pero no me importa.
Takuya: XDDD ¡Ambas están locas!
Kini: Así que si quieres venir... tendrás que darme un tiempo ñ.ñU sobre todo ahora que los sucesos se van a dar (ejem) de una manera algo drástica y brusca... ¡pero gracias por escribir! ¡Nos vemos!
Shooting Star Natalie
Kouji: ¡¿¡Que el Kouji-Lyserg no te parece desagradable!?! (gritos a su estilo) ... No te preocupes... Eiji sabe =-=U (responde tranquilamente XD).. Ehmm... gracias por defender mi causa...
Kini: ¡Ya no te quiere! ¡¡Quiere a Naruto-kun!! ¡Ahora puedo torturarte! =D
Kouji: ... (ignora a Kini) No te preocupes... gracias por decir que soy noble u.uU
Kouichi: ¡Hi, Nat-san! n.n- (reverencia) ¡Claro, yo cuidaré de Lyserg! o.oU (recibe el paquete) ... ¿Traje de gatito? ...
Kini: PRRRRRR ¡¡GATITO!!
(Todos, excepto May... ven raro a Kini XD).
Takuya: ¡Pontélo, Kouichi! ¡Te verás kawaii! =D
Kouji: Aléjate de mi hermano ¬¬U
Kouichi: Eh... gracias por el traje, Nat-san ñ.nUUU
Lyserg: (suspiro) Pues de verdad no me acuerdo de qué pasó =-=U ... Y es bonito que la gente te quiera... pero no así T-T
Kini: ¡La droga nació para sufrir!
May: ¡Es cierto!
Kouichi: ¡NE! . UU
Lyserg: Ya, Kouichi... déjalo... No vale la pena...
Kouichi: ... Humm... -.-
Lyserg: Gracias por tu apoyo, Nat-san (su sonrisa amable).
Hao: ... ¿¡Qué!? (leyendo todo lo que Natalie le dice en el review XD) Esa maldita bruja... ¬¬U mataré a esa tal Yoru por humillarme y quedarse con mi Fifi-chan... u.ú Ya verá... (está traumado XD).
Kini: XDD ¡Wa ja ja ja! Hai, el Kouji-Lyserg pega (y eso me traumó por mucho tiempo =D), humm... si quieres información sobre Eiji-kun, contacta a Kanata XD.
May: Yo sé cosas que tú no sabes (risita) ... que nadie más sabe... (es privilegiada XD).
Kini: ñ.ñUU Haii... Yoru-san tiene un jefe... ¡Pero pronto sabrás de qué se trata todo esto! Yoh cobrará más protagonismo, al igual que Takuya (el elegido castaño se pone hiper XD). Ren y Horo Horo sufrirán XD pero eso será más adelante.
Ren y Horo Horo: ... (gotita)
May: XD ¡Saludos a ti también! (ya que está aquí XDD) ... ¡Dulces!
Hao: ... Esa maldita bruja... (sigue con su trauma)
Florchi: tu amiga del alma
Kini: o.o ¡Ne! No te preocupes por los reviews n.nU ¡Lo importante es que me has dejado ya! XD Con que tu PC se recupere (la mía está agonizante ToT)... Ohh... shieee... tu propuesta X3 (el tema de nuevo es Horo y Ren... y en ellos se dibujan varias gotitas de sudor XD).
May: ¡Sí! ¡Sufre Lyserg! ¡SUFRE! (XD Hai, ya me dí cuenta de quien te lo ha pegado... por cierto, saluditos a Diego-kun n.n-)
Kini: ¡Gracias por los besos y por el review! XD (chicos en diferentes grados de sonrojo... y Hao con una gran marca de bofetada)
Hao: X.x ... Ahora todos me odian...
Jewy-chan
Kini: ... (minutos de absoluto silencio... pasa una mosca que rompe la ausencia de sonido) ¡¡MALDITO MINAMOTO!!
Kouji: O.oUU ¿Yo qué?
Kini: (recupera la compostura) ¡Cierto! ¡Tengo más de 200 reviews! ¡Pero todo es gracias a ustedes! (de repente se siente estrella de cine)
Kouichi: o.ò ... ¿Hai? (leyendo lo que dice Jewy) ... Yo la verdad no entiendo lo que Kini-senseii pretende (risas histéricas por parte de Kini)
Kini: Ne, ne... cuando escribí "el simplemente mentía", me refiero a Yoh pensando en Hao XD (lee el párrafo de nuevo, onegai... ¿o estuvo tan confuso? O.oU) ¡Pero es cierto! ¡Kouichi se ve guapo sea bueno o malo! (alucina más de lo normal).
Lyserg: . Todos recuerdan eso menos yo... (hablando de la escenita XD)
May: ¡La droga drogada! XD
Takuya: ¡Pobre Lyserg-kun! o.oU
Kini: Espero que estuviera drogado de verdad, porque lo mataré por confundir a Kouichi con Kouji... ¬¬U
Kouji: Hablaré por Kyouyama... (ya que la sacaron para dejar "fluir" el yaoi XD) ... =-=U ... No, mejor no...
Hao: ¡Wah! ¡Al fin alguien me quiere! ¡Claro! ¡Soy tan sexy! ... Humm... (recuerda el beso que se dió con su hermano XD = tranquilos... he de desliar eso ¬-¬U).
Kini: XD Hai, Yoh fue el que más tuvo shocks en el capi pasado (mira a Yoh en el público pensando en las palabras de Jewy) ... Hao lo besa, Kouichi le parece sospechoso... ¡Cierto! ¡Lyserg desnudo!
Kouji: ... ¿La luz de... quién? ...
Kini: XDD (risas histéricas) ¡Gracias por tu review! ¡Por ahí va la cosa! ¡¡Y CLAROOOO!! (mira a Kouji) ¡¡¡INUUU!!!
Kouji: x.x (al suelo)
May: ... Ay, Imoto (otra vez suspira, pero luego se ríe XD)
Minako-chan
Kini: ... (lee los dos reviews) .. ¡¡ERIOL-SAN!! ¡¡PERVE!! XD
Kouji: ¡¡¡Tú!!! ¡DEPRAVADO MENTAL! (después de leerse enterito todo el review) ¡Aléjate de Eiji! (intenta tranquilizarse) =.=U
Yoru: (aparece breves instantes O.oU) ¡¡WAHH!! ¡¡Eriol, cariño!! =D ¡¡Besos para ti también!! X3 Mataré a los que tú quieras, ju ju ju... ¡Y te espero por la noche! XD (desaparece... dejando un clima bastante fresco)
Todos: ... (no se explican qué pasó)
Kini: Aún necesito a los X-Laws, por eso no los... mató la alegre chica que vieron hace instantes ñ.ñU (sudando frío), sobre todo a Marco y a Jeanne, quien... al parecer aún no muere ¬¬U ¡Wah! Me encanta escribir sobre Kouichi e Yoh ¡Parecen hermanos! ¡Me gusta! =D ... Y no te preocupes, ya habrá más Yoh-Lyserg.
Hao: ¿Hao-Lyserg? T-T
Lyserg: ¡¡NO!! . (se pega a Kouichi)
Kini: XD ... Algo, algo... XDDD (mira todos los regalos que Minako dejó).
May: O.oU Vaya...
Kouji: ¡¡TE MATO!! (al tope del sonrojo)
Hao: Ahora ya no usaré cuerdas para el bondage X3 ...
Lyserg: ¬¬ ... (sigue abrazado a Kouichi, pero el inglés se ve más amenazante XD).
Hao: ... Me tiene que perdonar ToT ... ¡Yo soy tan bueno! (¿alguien se echó a reír por ese chiste como yo? XDDD) ... Y, ¿qué puedo decir? ... ¡Mi hermanito no está mal! =D
Yoh: ... (algo cansadito de que le hablen de eso) ñ.ñU
Kouichi: ¡Yo no voy a dejar a Lyserg a merced de esos locos violadores! . ...
Kini: Posesivo =-=U
Yoru: (aparece de nuevo) ... (mira a Hao) Neeeee... está muy feo =-=U (desaparece)
Hao: ¿¡QUÉ!? (le han dado en su orgullo)
May: Esa chica tiene agallas... aunque también está loca.
Kouji: ¡¡Déjame en paz, Minako!! (sonrojado... es decir, a punto de desmayarse XD).
Lyserg: Ehmm... tomaré en cuenta tu consejo, Minako-san (suda gotita).
Takuya: XD Me he dado cuenta de que en este fic hay una tremenda orgía... Y tal vez sí termine así.
May: O.o ¡¡Takuya!! ¬-¬ Seguro que tú también quieres participar XD.
Kini: ¡Wah! ¡Una lechuza! ¡¡Es mía!! ¡Para mí! ¡¡Gracias!! X3 (abraza posesivamente a la pobre lechuza). Y no te preocupes por los demás mientras haya regalo para mí XD.
Kouji: ¡¡MALDITA MINAKO!! (siiiií, está totalmente rojo XD)
Hayi-OS
Kini: (reverencia) Muchas gracias a aquél (o aquellos) que me haya nominado a mejor fic Angst en este concurso n.n- No me importa no ganar, sólo haber participado con los mejores fics de Shaman King de esta página XD (hai, ni siquiera estoy como Crossover X3) ... ¡Y gracias por votar por mí! XD ... Ne, gracias sólo por leerme ¡¡Arigatô!! ToT
VALSED
Lyserg: ... (sabe la respuesta a la segunda pregunta)
Kini: ¡Gracias por leer! Y la primera respuesta es ¡Sigue leyendo! Y a la segunda... ¡¡Síeeee!! XDDD
Lyserg: =-= ... (pensamiento: "Lo sabía").
O.L. Yuki
Kini: ¡¡YUKIIIIII!! (otro grito estilo Ayame Sohma XD) ... La pregunta de por qué hago sufrir tanto a Kouji es obvia XD.
May: ¡Sufre, Minamoto!
Kouji: ¬¬U
Lyserg: T-T ... ¿Por qué todos piensan que me veo kawaii sufriendo?
Kouichi: =.=U ...
Kouji: Tamao y yo somos amigos... ¡No llegaremos a nada más! .
Kini: Sí, sí, sí XDD ... ¡Me da gusto que hayas leído mi fic! ¡Otra que lo lee de un tirón! XDD No puedo prometer que no maltrataré a Kouji XD ¡Porque lo haré! - ¡Nos vemos después!
Coty-O-Neshiko
May: =D ¡Lo ves! ¡Escribes genial!
Kini: O.o ... Ari-gatô ... =.= ... ¡Gracias por el review! Y por decir que soy genial n.n- Me conformo con que sigas leyendo y que te siga gustando tanto como antes, ¡gracias otra vez!
Azianhikari
Lyserg: (suspiro mientras se acomoda la capa XD) Let me explain to you... Kini-san really hopes to translate this fic in english soon, but she first wants to finish this fic in spanish. And that's because she don't even know english... ¬-¬U
Kini: You little drug ¬.¬U
Lyserg: And so... she hopes that you keep writting... (al parecer, está ignorando a Kini XD)Thank you for review us (reverencia) n.n-
Kini: ¡¡Wahh!! ¡Acabamos al fin! (corre por todo el escenario).
Kouji: ... Amaneció más loca de lo normal...
May: u.ú ... Ahora... presentaremos a esa maldita (hablando del capítulo presente XD).
Kini: (se detiene) O.o ¡Oh, sí! XD Este capítulo se lo pasé a algunos que me lo pidieron n.nU... pero pronto tendrán el otro XD (espero) ¡Y será mejor que este! n.ñU Pero de todas maneras... Enjoy the... the...
May: -..- fic?
Kini: XD ¡Eso!
Kouichi: T.T ¡Este se trata mucho de mí! ¡Pero Lyserg sufre!
Kouji: Eso no es raro =-=U
Kouichi: T-T
Lyserg: ... Esto no es nada =.=U
Kini: Por cierto que en la primera escena de este capítulo... sabrán más o menos por qué este fic se llama "Amor en lejkja oscuridad" XD (y por qué me puse tan furiosa cuando me quisieron plagiar el título ¬.¬U) ... ¿Ustedes logran adivinar? n-n- ¡Espero que no! XD Así aún les durará un poco más la sorpresa X3 Bueno... Enjoy the lemon and the chaper! X3 (Hai, la primera escena tiene un ligero lemon XD ... ¿la parejita? Descúbranla ustedes XDD) ENJOY!!!
Digimon Frontier no me pertenece, es de Akiyoshi Hongo (tiene un altar en mi casa XD) y Shaman King es de Hiroyuki Takei, no mío
AMOR EN LA OSCURIDAD
27- Ex
Había sido tan... suave. No sabía si esa era la palabra exacta, pero era la sensación. La suavidad de deslizar sus manos por esa piel, escuchar esos pequeños suspiros al oído. Más... más... Unir sus labios a aquellos otros tan bonitos, tan perfectos. Sostenerlo fuerte, pero con cuidado... por miedo a romperle. Aspirar su aroma. Tan dulce.
- Pero... no está bien...
"¿Por qué no está bien? Tú lo qh) ¿uieres... también lo deseas."
- ... Él... no me pertenece... - abrazó sus piernas contra su pecho, deseando que el dor que sentía en ese lugar se fuera con esa acción.
"Si lo tomas te pertenecerá..."
- ¿¡Qué insinúas!? - gritó de pronto, como si aquello lo hubiera ofendido en sobremanera.
"¿No lo quieres para ti?"
- ¡¡No!! No... no de esa manera...
"... ¿Entonces aún crees en el amor? ¿Crees que la luz deba tener amor?"
- La luz...
"Tienes razón. Son afines..."
- La luz... la luz es la que debe tener amor... - unas pequeñas lágrimas aparecieron en sus ojos.
"La luz es la que debe dar amor..."
- ¿Me darás amor...?
Elevó la mirada al escuchar el suave tono de voz, esa voz tan melodiosa y distinta a las demás. Esos lindísimos ojos verdes que ahora lo examinaban detenidamente... Esa carita tan inocente; con las mejillas rojas.
- Yo... - no pudo continuar con la pequeña frase que ni siquiera estaba hilvanada en su cabeza. Esos labios atraparon los suyos en un dulce beso, un beso tan puro como nunca había experimentado... o tal vez sí, como la primera vez que le habían besado esos mismos labios... Como esa primera vez que había saboreado la misma deliciosa boca.
Finalmente sus lenguas se entrelazaron, él disfrutaba del momento, acariciando aquél delgado cuerpo tan delicado... Sus manos subieron al rostro del otro chico. Estaba tan tibio... Entreabrió los ojos, sólo para sonrojarse más notoriamente. Era tan lindo... con sus ojos cerrados, correspondiendo ese beso con tanta tímidez que le cautivaba.
Salió de su boca para observarlo mejor, pero él lo abrazó para mantenerlo cercano a su cuerpo... ¿Amor? ¿Eso le pedía?
"... Amor... el amor no existe en la oscuridad..."
- ¿Amor en la oscuridad....? - no lo dejó continuar, de nuevo lo besaba con insistencia, como si lo necesitara.
- Yo quiero pertenecerte... a ti...
- No... ¡No es lo correcto! ¡No sabes lo que dices! ... ¿No sabes? - tampoco podía resistirse a sus encantos por demasiado tiempo, volvía a hundir sus labios en aquel cuello tan calientito, a aspirar su aroma... a pedir por más. Lo recostó con suavidad en el piso... ¿piso? Sólo sabía que había algo que les sostenía... aunque no era importante ahora. Lo desvistió lentamente, rozando su piel contra la suya... la sensación era única.
- ... ¿Amor...?
- Quiero pertenecerte... a ti...
- Tú... - le miró con tristeza - ... Tú no eres tú... ¿no es así?
Sus dudas fueron contestadas con un dulce parpadeo con aquellos ojos verdes. Y un beso... un beso que le hizo olvidar que... todo esto era mentira.
"Tú puedes hacerlo verdadero..."
Acarició las caderas del chico, bajando sus manos para separar sus piernas. Le besó profundamente, ya sin poder esperar.
"... Eres nuestra luz... Su luz..."
- Luz... - apenas separó sus labios cuando ya había entrado en él de manera bastante brusca y precipitada. Sin embargo, el de ojos verdes apenas se movió. Lo aceptaba dentro de él, lo acercaba más a su cuerpo... ¿Era porque lo amaba?
No. Mentira.
- Jamás... llegarás a amarme, ¿no es así?
No hubo respuesta.
Sintió un golpe... Se había caído del asiento del Trailmon.
- ¡¡AHHH!! ¿¡Pero qué... !? - abrió sus ojos azules... sólo para encontrarse con otros ojos viéndolo. Unos grandes ojos.
- ¡Patamon, vuelve acá!
- ¡Sí, padre-madre! - el pequeño digimon naranja se alejó, aleteando alegremente, con ese dejo de ingenuidad característico de él.
Kouji parpadeó un par de veces antes de llevarse una mano a la cabeza, ese golpe sí que le había dolido. Y luego, recordar aquél sueño... le hizo sonrojarse por completo. ¿Por qué había soñado algo como eso? Porque aún lo recordaba... La suavidad... la sensación... el placer.
Sacudió la cabeza con fuerza, tallándose las mejillas rojas. Tenía que tranquilizarse... tenía que olvidar aquello.
- ... Como les iba diciendo... - Bokomon fue ayudado por Izumi a subir al asiento después de traer a Patamon, quien cómodamente se sentó al lado de la elegida rubia - Hace mucho tiempo, tres ángeles protegían al Digimundo.
- ¿Tres ángeles? - preguntó Yoh, recordando el rostro que había visto cuando buscaban aquél salón de los espejos que nunca apareció ante sus ojos.
- Ahh... las clases de religión me aburren - suspiró Horo Horo fastidiado, para luego ser golpeado de inmediato ser golpeado por un enojado Ren al grito de "¡Pon más atención!".
- Así es, tres ángeles digimon - el digimon blanco de la faja rosada mostró su libro entre orgulloso y receloso - Seraphimon, Ophanimon y Cherubimon.
- ¡Heh! ¡Kanbara! ¡Nosotros vimos este! - exclamó Horo Horo, mucho más despierto después de aquél golpe cortesía del chino.
- Cherubimon... - susurró Takuya con seriedad, mirando hacia un lado. Aún no se perdonaba por lo que había pasado anoche... por no haber estado presente.
- Yo ví este... - señaló Yoh, en voz baja también, aunque más con una curiosidad de niño pequeño.
- Ophanimon - Izumi se apretaba los bordes de su falda con fuerza, mirando al suelo.
- Muy bien... - dijo Bokomon, cerrando su libro de inmediato antes de que el castaño de audífonos naranjas examinara más de cerca la imagen de la digimon femenina - Entonces, ustedes vieron a Cherubimon y a Ophanimon en esa montaña donde estaba el Salón de los Espejos - Horo Horo e Yoh asistieron.
- Y escuchamos la voz de Ophanimon hace poco, no lo olvides - hizo notar Junpei, después de darle una mordida a una de sus barras de chocolate - Ella nos guió a ese lugar que después nos hizo abandonar para montarnos en este Trailmon de nuevo.
- Eso es muy raro, ¿no lo creen? - Tomoki dejó de mecerse en el asiento, mirando a todos sus mayores.
- ¿Por qué dicen que es extraño? - preguntó Ren - ¿Qué tienen de especial esos ángeles digimon?
- Lo principal es que están muertos - respondió Takuya, cortante, haciendo que el de ojos amarillos no respondiera de inmediato.
- ... ¿Qué dicen del otro... Seraphimon...?
- ¡Este pequeñín de aquí es nada más y nada menos que el gran Seraphimon! - Patamon sonrió confundido pero a la vez divertido porque su querídisimo "padre-madre" lo señalaba con orgullo.
Los shamanes prefierieron guardar silencio y no opinar en esa ocasión. Aunque por primera vez, Hao se levantó de su asiento alejado de todos para acercarse e inspeccionar a Patamon detenidamente.
- Entonces... los demás pueden renacer también - concluyó el shaman de fuego.
- Eso es algo que pudimos haber dicho nosotros - Takuya definitivamente no estaba de humor.
- No... Ophanimon y Cherubimon no han renacido... - murmuró Patamon, con sus lindos ojitos tristes.
La discusión sobre los ángeles continuaba, aunque Kouji aún no sabía por qué se había iniciado. Tal vez era porque Bokomon les había prometido a los shamanes que les hablaría de eso. Se levantó del suelo al fin, mirando a su alrededor, donde pudo observar a Tamao durmiendo plácidamente cubierta por una cobija para protegerse del frío muy cerca de donde él estaba. Luego... Anna Kyouyama en la otra esquina, también toda tapada, pero sin duda... despierta, escuchando lo que los otros decían sin opinar, todavía afectada por lo que había pasado. Y Pirika...
- Ahh... kawaii...
El joven de cabello oscuros se volvió hacia la chica, que obviamente no lo estaba llamando a él. La ainu observaba más bien a los dos chicos que tanto la enternecían. Kouji no supo siquiera qué gesto dibujar al ver a Kouichi y a Lyserg en uno de los rincones más alejados juntos, abrazados. No sabía si dormían o no, sólo podía observar lo cerca que estaban y que lucían muy relajados a pesar de lo que estaba pasando a su alrededor. A pesar de lo que les había pasado a ellos dos específicamente en el transcurso de toda esta aventura.
- Innecesaria... - susurró Kouji, intentando controlarse de nuevo al ver a Lyserg. Esos recuerdos volvían. ¿Había sido tan sólo un sueño? Sintió que lo observaban, buscó con la mirada. Nada.
- ¡¡Ya llegamos a la estación!! - la voz del Trailmon lo sacó de sus pensamientos.
Todos sus compañeros seguían comentando cosas que él decidió no darles importancia. Tamao se despertó dando un pequeño grito, aunque después se dió cuenta que se habían detenido. Se talló los ojos, somnolienta y, avergonzada, también se alistó para salir. Anna simplemente salió de sus sábanas, alisándose el cabello simplemente. Minamoto quiso ver de nuevo hacia donde estaba su hermano y 'esa persona', pero se dió cuenta de que él era el único que se estaba quedando atrás, por lo que decidió salir del Trailmon también.
- Muy bien... ¿y ahora en dónde estamos? - preguntó Takuya, dispuesto a dejar su mal humor de lado y volver a ser el animoso líder de los elegidos.
- Mhmm... - de nuevo, Bokomon comenzó a buscar en su libro, como si éste tuviera todas las respuestas.
Otra vez, Kouji buscó con la mirada. Sí, los encontró... Estaban tomados de la mano, sonriendo, como apartados de los demás. Parecían inusualmente alegres, como si la noche anterior se lo hubiera pasado... muy bien. Por la mente de Minamoto empezaban a pasar muchas ideas, pero de nuevo lo despertaron cuando una voz se alzó por sobre las demás.
- ¿Qué son esos árboles? - Pirika señalaba enfrente, llamando la atención de todos sus acompañantes.
- ¡AH! ¡Debe ser el Pueblo del Origen!
- ¿El Pueblo del Origen?
Los shamanes vieron a los elegidos, pero estos les devolvieron una mirada de confusión. Ellos tampoco sabían de lo que hablaba Bokomon. Pero antes de que el digimon les pudiera explicar con su típico aire de grandeza el significado de sus palabras, se escuchó un grito:
- ¿¡Quién es!?
Todos guardaron silencio ante esa pregunta, aunque sabían que tenían que responder, por lo que Yoh y Takuya dieron un paso al frente como buenos líderes que eran. Aunque el retador había salido pronto a enfrentarse con aquellos que habían osado a invadir su territorio.
- Todo está bien... vinimos en son de paz - dijo Yoh, con voz firme pero amable; cosa que a Takuya le pareció algo extraño. Hablar antes de atacar... claro, si es que se trataba de algún digimon peligroso.
Pero lejos de ser algún horrible digimon con aspecto amenazante, de entre los arbustos apareció una chica más o menos de su edad. Sostenía una rama de árbol en alto, como si esa frágil defensa le pudiera servir de algo en contra de algún enemigo más poderoso. Sin embargo, lucía determinada a luchar si era necesario.
- Oh... es... hermosa... - ahora el golpe que recibió Horo Horo fue cortesía de su hermana.
La chica dejó su postura defensiva para examinar al peculiar grupo con la mirada. Lo que había dicho el ainu era cierto. Era una linda muchacha, que vestía con una mini-falda de mezclilla y un top rojo que iba cubierto con una chaqueta abierta que dejaba ver su bien proporcionado cuerpo. Su era cabello castaño muy claro, corto hasta por encima de los hombros. Eso sin contar sus deslumbrantes ojos verdes.
- Ohhh... qué linda es... - también Junpei comenzaba a alucinar sobre alguna cita romántica con aquella desconocida que los analizaba con la mirada, todo esto ante los fallidos esfuerzos de Tomoki de devolverlo a la Tierra (o Digimundo, como en este caso). Al fin, ella pareció abrir la boca para decir algo...
- ... ¿Koui-chan...?
- ¿Qué? - todos se miraron entre sí.
- ¿Ha-Hania?
Sí, todas las miradas ahora se posaron en uno de los de su grupo. Incluso la de Lyserg. Especialmente la de Lyserg.
- ¿La conoces, Kouichi...?
- ¡¡Koui-chan!! - la pregunta formulada no tuvo que ser respondida cuando la chica que hace unos instantes había estado tan seria había saltado sobre el confundido Kimura para abrazarle efusivamente. Lyserg solamente se hizo a un lado, observando la escena, sin alcanzar a entender lo que pasaba. ¿Quién era esa mujer tan... rara?
- ¡¡OYE!! ¡¡Quita tus manos de mi hermano!! - la reacción de Kouji había sido tardada pero se había dado.
- ¿Hum? ¿Tú eres el hermano de Koui-chan? Nunca me había hablado de un hermano... Mhmm... ¡bueno, no importa! - se soltó de Kouichi para dar un pequeño saltito y agitar su mano a manera de saludo - ¡Yo soy Hiyama Hania y soy la novia de Koui-chan! ¡Mucho gusto!
- ¡¿NANI?!
- ¡¿Novia?!
Lyserg de inmediato miró a Kouichi, como pidiendo una explicación, pero éste sólo observaba el suelo.
- ¡Bienvenidos al Pueblo del Origen! - Swanmon hizo una reverencia de inmediato fue correspondida - Hania-chan, ¿podrías ayudarme con los biberones para alimentar a los bebés? También hay que preparar la mesa para nuestros nuevos invitados.
- ¡¡HAI!! - contestó ella, animadamente, marchándose tras el digimon.
- ... Ella no es mi novia... al menos ya no más... - susurró Kimura.
- Oh... ¿Y ella lo sabe?
- Claro que lo sabe - Kouichi dió un suspiro - ¿Estás enfadado? Lo siento.
- No, Kouichi... No estoy enfadado. Perdón por contestarte así... - Lyserg también hablaba en voz baja mientras los demás observaban el lugar - ¿Entonces por qué dice... eso?
- ... Pues no lo sé...
- ¡¡Koui-chan!! - la chica tomó de la mano a Kouichi y lo arrastraba - ¡Vamos a comer! ¡Swanmon-san prepara comida muy rica! ¡¡Y yo le he ayudado!! ¡¡A ti te gusta mucho como cocino!!
- Humm... hai... - Kouichi se detuvo en seco.
- ¿Qué sucede, Koui-chan? - le miró Hania.
Kimura se volvió hacia Diethel, quien observaba la escena con un gesto indefinido en el rostro... no sabía qué sentir al ver aquello. Esa muchacha llamada Hania sabía expresar muy bien lo que sentía hacia Kouichi... y él simplemente... no podía.
- Lyserg, vamos...
- ¡Ah! ¡¡Tú también puedes venir!! - ella lo invitaba con una gran sonrisa, en contraste con la sonrisa melancólica de Kimura. El inglés miró unos instantes al suelo antes de decidirse a acompañarles.
Ya los demás estaban sentados, observando detenidamente a los tres que se acercaban, aunque a Hania no le importaba en absoluto. Ella amaba sentirse admirada. Y Junpei la complacía muy bien, con corazoncitos en los ojos. Izumi suspiró aliviada, al menos no estaría acosándola en esta ocasión. Yoh soltó una risita ante el gesto de la rubia de ojos verdes. Aunque a Pirika no le gustaba para nada que esa niña que apenas acababan de conocer se estuviera metiendo entre la pareja que ella consideraba tan 'kawaii', no le desagraba del todo.
- ¡Me da mucho gusto conocerlos a todos! - había dicho Hiyama, tan animada como siempre - Swanmon-san y yo no estamos al tanto de todo, pero me haría muy feliz que me contaran lo que está pasando en el Digimundo.
- Nosotros lo que queremos saber... - Kouji la miraba acusadoramente. Lyserg conocía esa mirada. Oh, sí... muy parecida a las que le dirigía a él - ... es cómo llegaste aquí.
- Humm... sí, claro - asistió con alegría, sentando a Kouichi casi a la fuerza a su lado. Diethel no se sentía nada cómodo en aquella situación, así que, casi sin pensarlo hizo lo único que se le ocurrió para sentirse mejor: se sentó al lado de Yoh.
- Muy bien... - Minamoto apoyó su mano en el rostro, impaciente - Te escuchamos.
- ¡Ok! Bueno... lo que pasa es que... - de pronto la alegría de Hiyama se iba por unos instantes, pero una fugaz sonrisa apareció de nuevo en su rostro - Koui-chan me había dicho que no quería seguir con nuestra relación y... se había ido.
Kimura observó a Lyserg, como queriendo confirmar que el inglés al fin se había convencido que le había dicho la verdad, pero Diethel confiaba en su novio... sólo escuchaba la historia de aquella muchacha.
- ... Pero yo no estaba convencida de la razón por la cual Koui-chan había cortado conmigo. Sólo porque... él 'no se consideraba digno de m'. No me gustó eso... - ahogó un suspiro y se abrazó del chico - Tú eres digno no sólo de mí sino de quien sea...
- Eso lo sabemos... continúa y suelta a mi hermano... - pocas veces habían visto a Kouji tan enfadado. De hecho, solamente con Lyserg lo habían visto así.
- Entonces comencé a seguirlo - anunció alegremente - Hai, lo espiaba, para saber si no tenía a... ustedes saben, otra novia... - se sintió avengorzada por decir eso, pero era verdad.
- Hania... - Kouichi la observó, sorprendido.
- Deja de llamarme así... ¡Dime Hania-chan! ¡Como antes!
- Ejem...
- Sí, ya voy... - se apoyó en sus piernas y comenzó a mecerse de adelante hacia atrás, de manera muy infantil hasta que decidió hablar de nuevo - ... Un día, Koui-chan fue a la estación de metro y subió a uno de esos trenes... y yo subí en el mismo que él, aunque no lo ví. Ya me había dado cuenta de que Koui-chan estaba siguiendo a una persona y yo me preguntaba si se trataba de la chica que ahora le gustaba a él... Pero, la tonta de mí se quedó dormida en lugar de buscarlo ¡qué torpe soy! - soltó un suspiro y muy divertida comenzó a reír, eso sin que los demás la siguieran, nadie excepto Chocolove, quien de inmediato fue golpeado por Ren y por Horo Horo.
Kouichi recordaba ese día... Fue el día en que había seguido a Kouji para hablar con él y al fin conocerlo... pero, el final de ese día. No lo recordaba... Se llevó una mano a la cabeza, provocando que la mirada de Lyserg se posara en él, con preocupación.
- ¡Sin embargo! - Hania se levantó y señaló a Takuya primero y luego a Kouji - ¡¡Ya me acordé!! ¡¡A ustedes sí los ví ese día!! Yo también tomé un elevador, pero no el mismo que ustedes... tomé otro, me preguntaba porque el castaño de googles corría tan rápido para alcanzar un tonto elevador cuando después de dí cuenta del por qué.
- ¿Tú también viniste en los Trailmon? - preguntó Izumi.
- ¡¡Así es!!
... Elevador... Recordaba eso. La puerta se cerró... También recordaba eso... ¿Pero después? ¿Qué había pasado después?
- Entonces pensé que Koui-chan también había tomado uno de esos Trailmon y ¡ya ven! ¡¡No me he equivocado!! ¡¡Y he venido aquí para hacer las paces contigo y volver a empezar, Koui-chan!!
- No, Hania...
- ¿Qué cosa? - ella sólo pudo observar como Kouichi se levantaba de su lado, sólo para sentarse en otro. Al lado de Lyserg.
- Ya tengo a otra persona. Lo siento.
El inglés no pudo evitar sonrojarse. Jamás se imaginó que Kouichi haría algo como eso, tan público... tan significativo. No sabía cómo describirlo. Pero para Hania aquello no era nada divertido, sólo se le quedó viendo, como si no hubiera captado el mensaje aún.
- Pero... pero... es un chico... ¿ne? Es un hombre... ¿verdad?
- Hai, así es... - Kouichi le sonrió amablemente.
- Oh... - se sentó, bajando la mirada - Yo... sólo vine a este lugar por ti, Koui-chan.
- Lo siento, Hania...-san... - murmuró el chico.
- ¡¡Iie!! ¡¡No me llames así!! - de nuevo volvía a sonreír, aunque con vestigios de pequeñas lágrimas.
Lyserg se sentía realmente incómodo ante aquella situación. Ella era una linda chica, y quería mucho a Kouichi... entonces... entonces...
- ... ¡¡Llámame Hania-chan!! - sólo recibió una otra sonrisa amable, pero ninguna afirmación.
... Kouichi no se merecía a alguien 'sucio' como él.
- Etto.. ¿Les parece si comemos? - propuso Yoh, tratando de aliviar la situación.
- ¡¡¡Sí!!! ¡¡Comamos!! - exclamó la chica nueva, ante la mirada de total fastidio de Kouji. Algo no le agradaba de esa mujer.
- ¿Te sientes bien, Lyserg? - le preguntó Kimura, en voz baja.
- Sí... - susurró también, pero cabizbajo. Claro que lo recordaba. Lo que había pasado anoche. Lo que Hao le había hecho. Kouichi no lo merecía... pero no debía comenzar a llorar ahora... Sin embargo, el japonés lo abrazaba fuertemente, eso no lo ayudaba mucho a mantenerse en compostura. Como siempre, Kimura hacía que su voluntad se quebrara fácilmente.
- Lo siento... no quería que pasaras por esto... lo siento...
No, él no sabía nada... Él no sabía por qué realmente estaba tan triste. Y no debía saber. Ya no quería causarle más problemas. Lo que menos quería en este mundo era que Kouichi se sintiera mal por su culpa. Sólo quería que fuera feliz. Ese era su único deseo.
- ... No es tu culpa... - apretaba los párpados fuerte, esperando que las lágrimas no le escaparan de los ojos.
- Vamos... después harán eso.. - la voz de Horo Horo los hizo separarse, sonrojados ambos - Para eso hay cuartos, ¿saben? - recibió un golpe por parte de Ren, el segundo del día.
- ¡Déjalos! ¡Es que se quieren mucho! - dijo Pirika, para después suspirar.
- Eso es cierto - Yoh soltó una risita, tomando un poco de arroz frito antes de llevárselo a la boca.
- Por cierto... ¿alguien a visto a Hao? - preguntó Junpei, después de la tercera ronda de tallarines.
- ¿A... Hao...?
De pronto, el ambiente se ponía extrañamente pesado. Izumi observó detenidamente a Yoh, quien estaba sentado a su lado. Se había quedado prácticamente congelado, borrando la sonrisa que había tenido hacía tan poco tiempo. Por su parte, Kouichi sólo pudo observar como Lyserg bajaba la mirada al suelo, sin decir absolutamente nada. Eso era raro, ya que lo usual era que el inglés soltara comentarios del tipo "Pues no me importa donde est" o "Ojalá que nunca regrese"... Definitivamente... algo extraño pasaba.
- ¿Hao? - preguntó Hania - ¿Es uno de cabello castaño y de ojos negros muy parecido a Yoh-kun? ¡Ah! Debe estar con Swanmon-san ¡Yo lo ví por ahí! - movió su mano en señal de despreocupación - ¡Debemos acabarnos todo esto!
- ¡¡Será un placer!! - saltaron Horo Horo y Junpei al mismo tiempo.
- Es increíble... como lo llama Yoh-kun con tanta familiaridad... - murmuró Izumi, ya molesta y celosa... Igual Anna, ya la veía con ojos asesinos, aunque de una manera mucho más recatada que Orimoto.
- Kouji... - Tamao sólo miraba a su amigo, quien no le quitaba los ojos de encima a la castaña de ojos verdes, quien estaba sentada muy alegre comiendo, totalmente ajena a los sentimientos diversos de despertaba.
- Lyserg... debes comer un poco - le pidió Kouichi - Antes de que se lo terminen todo... - le sonrió, tratando de aliviarle del mal que le aquejaba que él desconocía.
- Humm... sí... - tomó sus palillos, observando su comida. Pero cuando al fin se iba a llevar un bocado a la boca, escuchó unas risitas que llamaron su atención. Miró al frente... Era Hania.
- ¡Lo siento! - no podía dejar de reír - ¡Es que tienes una manera muy peculiar de tomar los palillos para comer!
Tanto como Kouichi y Lyserg la miraron, extrañados. Incluso Yoh dejó sus cavilaciones de lado para mirar a la chica.
- ¿No eres de Japón, verdad?
- ... No, soy de Inglaterra... - dijo Lyserg, en voz muy baja.
- ¡Ah! ¡¡Eso explica tu manera tan rara de hablar el japonés!! ¡Tienes un acento muy gracioso!
Para ese entonces, sólo Horo Horo y Junpei seguían absortos en comer. Todos los demás miraban a Hania como bicho raro. No entendían por qué se reía así... ¿Se reía de Lyserg?
- ¡Hania!
- ¡Es la verdad, Koui-chan! Tú sabes que soy muy sincera - de pronto, así como había empezado dejó de reír - Y a ti... ¿Te afectó tanto cortarme que te volviste homosexual?
Kimura se quedó en silencio.
- ¡Oye! - Kouji se puso de pie, furioso. Y ni siquiera Tamao pudo detenerlo - ¡¡No te metas con mi hermano!!
- Lo siento, de verdad... pero quiero saber la respuesta... ¡¡Quiero saber si eso es verdad, Koui-chan!!
- No lo soporto... - ahora el que se puso de pie fue Lyserg, pero sólo para marcharse. Dejó su utensilio oriental para comer en la mesa y se marchó.
- ¡Lyserg! - ni siquiera el llamado de Kouichi pudo detenerlo.
- ¡Koui-chan contéstame!
- ¡¡No!! - se volvió hacia ella al mismo tiempo que daba su negativa - ¡No Hania! ¡Ni siquiera he pensado en ti todo este tiempo! - sólo logró que Kimura también se marchara en busca de Lyserg.
Nunca habían visto a Kouichi tan enfadado. Tal vez ni siquiera Hania Hiyama, quien ya no se atrevió a emitir ningún otro comentario tras esa escena. Poco a poco, todos volvieron a su comida, conscientes de que tenían que aprovechar que contaban con alimentos por ahora, sobre todo los elegidos. Aunque eso a Kouji no le importaba mucho...
Fue Hao el que vió salir al inglés del lugar en donde se encontraban. El castaño estaba afuera, observando aquellos árboles que tenían digi-huevos en lugar de cualquier fruta comestible. Minutos antes había estado hablando con la digimon que atendía el lugar sólo para distraerse un rato. Para eso y... para averiguar más. Aunque, en realidad no había encontrado nada extraño. Todavía.
- Oh... vaya... - el shaman de ojos negros optó por acercarse a Lyserg, intesado por la rápidez en que caminaba el chico, aléjandose de los otros. Pero luego se detuvo al ver a la otra persona que caminaba hacia Diethel.
- ¡Lyserg, por favor no te vayas!
- Quiero estar solo, Kouichi...
- ¿Pero por qué? No tomes en cuenta lo que dice Hania. Ella sólo estaba jugando, ella siempre juega de esa manera...
- No me gusta como juega... - Lyserg al fin se detuvo. Se dió cuenta de algo... ¡le estaba pasando lo mismo que a Kouichi! Pero no... ¡Yoh no era para nada tan imprudente como esa chica!
- Ya lo sé, perdónala, por favor...
- Deja de justificarla, Kouichi... ella es... es... ¡No sé cómo explicarlo! No me agrada...
Kouichi soltó un suspiro, negando con la cabeza. Lyserg se dió cuenta de eso. No quería causarle más preocupaciones a Kimura, pero había algo en esa mujer que definitivamente no le gustaba. Y por lo mismo, no entendía como el que ahora era su pareja pudo haber estado saliendo con una persona como Hania Hiyama... ¿o es que ese era el tipo de carácter que Kouichi buscaba? ¿Por qué ahora Kouichi y él estaban juntos? ¿Realmente debían estar juntos?
- Kouichi...
- ... ¿Hai? - tenía la mirada baja, tratando de reunir fuerzas para contestar la pregunta, cualquiera que ésta fuese.
- ... ¿Eres feliz...?
Levantó la mirada, algo sorprendido. Lyserg lo miraba fijamente, con sus ojos verdes algo tristes. Pero con mucha ternura... con la misma ternura que dibujaba su rostro cada vez que le veía. Kouichi entrecerró los ojos y se acercó más al inglés, sosteniéndole la mirada.
- Soy la persona más feliz del Universo desde que te conocí, Lyserg.
Casi se lanzó sobre él para abrazarle. Diethel lo recibió entre sus brazos, aunque con un gesto más marcado de melancolía que de compartida felicidad. Aunque se sentía también alegre por saberlo... aún y cuando secretamente sabía que esa era la respuesta que Kouichi le daría.
- Pero yo no soy...
- ¡Tú eres lo mejor que me ha pasado! - ahora sonreía como si no hubiese estado triste hacia unos cuantos instantes.
- Y ella... Hiyama-san...
- Ella... es una historia interesante... pero es parte de mi pasado - Kouichi se separó ligeramente de Lyserg, aunque solamente lo hizo para mirarle a los ojos - Nunca me cansaré de mirarte así... tus lindos ojos verdes... lo más hermoso que he visto en mi vida...
- Gra-Gracias... - Lyserg se sonrojó vistosamente, pero recordó algo con tristeza - Hiyama-san también tiene ojos verdes...
- ... Sentémonos aquí... - simplemente señaló al suelo, junto a un arbusto también rebosante de digi-huevos de todos colores. Y así lo hicieron, se sentaron sobre el pasto. Lyserg se sentó sobre sus piernas, miró a su alrededor unos instantes, como si sintiera que lo observaban, pero luego fijó su vista en Kimura, quien le sonrió - ... ¿Acaso quieres que te de una prueba de mi amor?
- ¿Prueba de amor? - conocía esa frase... Se ruborizó de nuevo.
El japonés de nuevo sonreía, con total inocencia; como totalmente ajeno a lo que realmente significaba esa frase. Pero se inclinó sobre Lyserg y tomó su rostro entre sus manos para luego besarle dulcemente. El inglés le correspondió... Como le pasaba casi siempre, se olvidaba de sus preocupaciones cuando sentía los labios de Kouichi sobre los suyos, las manos de Kouichi sobre su cuerpo. Cuando el japonés se hubo separado al fin de él, solamente pudo mirarle otra vez... ¿realmente Kouichi se lo merecía? ¿Merecía a alguien como él, que no podría demostrarle nunca amor de una manera 'normal' sin tener malos recuerdos todo el tiempo?
- ¿Qué te ocurre...? - de nuevo tomaba suaveme el rostro del inglés entre sus manos - No me gusta cuando luces tan triste... ¿Es por Hania?
- ... - no, no era por ella. Es decir, no era únicamente por ella. Pero era una excelente excusa para no decir lo que realmente le preocupaba - A ti te gustan las chicas, ¿verdad?
- ¿Hum? - como le sonaba esa pregunta... ¡pero no podía decirle a Lyserg que Hao era quien le había preguntado eso! - ... Supongo que sí - sonrió con incredúlidad.
- ... Yo soy hombre... - contestó Lyserg, secamente, aunque sin mostrarse tan ofendido como hubiera deseado. Y es que la respuesta de Kouichi no le molestaba.. ¿cómo molestarse con él con esa sonrisita tan graciosa adornando su rostro?
- Eso lo sé... perfectamente... creéme... - Kimura se sonrojó, desviando levemente la mirada, aunque para agregar lo siguiente, procuró mirar a Diethel a los ojos - Yo te amo porque tú eres tú... no por el sexo que tienes.
- Etto... - otra vez... las respuestas de Kouichi lo dejaban sin habla y totalmente rojo. Aunque tenía que seguir hablando para no mostrarse triste. Para que no descubriera la verdad - Tú nunca te has acostado con un hombre, Kouichi - decir eso solamente provocó que se sonrojara aún más, así que cerró los ojos, como si aquello atenuara el carmesí de sus mejillas.
- Cierto, pero tampoco con una mujer - señaló el japonés. Él más bien parecía muy divertido con todo ese interrogatorio. Ahora le parecía muy bueno que fuera Lyserg quien le hiciera preguntas y no otras personas. Después de todo, era Diethel en quien él se interesaba.
- ¡Pero...! ¡¿Tú eres virgen?!
- ... Tengo 11 años... ¿no es normal? - le preguntó, en voz baja, de nuevo con esa voz inocente.
- Su-pongo... - murmuró Lyserg. Recordó que Kouichi le había dicho que sólo había 'fajado' con su novia... O sea, Hania Hiyama. Pero definitivamente no creía a Kimura capaz de... hacer algo como eso. No, ni siquiera de eso. Esa Hiyama... pervirtiendo a su novio... Pensar en eso provocó que Diethel sonriera ligeramente. Ah, qué posesivo se estaba volviendo.
- ¿Nani? ¿Qué pasa? ¿De qué te ríes? ¡Yo quiero saber!
- Nada, nada... - le sonrió tranquilizadoramente, gesto que funcionó. Kouichi se sentó de nuevo, gustoso de que Lyserg volviera a sonreír otra vez - Y dime... ¿cuántos años tiene Hiyama-san?
- Pues... haciendo cuentas... creo que debe tener 15 años.
- ¡¿15 años?! ¡¡Kouichi Kimura!!
- ¿Na-ni? ¿Por qué me regañas? - sabía que cuando Lyserg lo llamaba por su nombre completo era porque, definitivamente, seguía un sermón...
- Es que tú eres sólo un niño y ella ya es una señorita ¿Sabes que las chicas se desarrollan primero mentalmente que nosotros? Con razón te ha pedido que hagan "esas" cosas... qué irresponsable de su parte...
- Ah... Mhmm... Pero ahora estás tú para cuidarme, ¿ne? - Kouichi se había inclinado sobre el inglés hasta recargarse sobre su hombro, provocando que el chico europeo se tensara ligeramente. Poco a poco se fue relajando... se sentía raro así, pero... se sentía bien.
- Hai... - cerró los ojos, acariciando levemente el cabello oscuro de Kimura. Cuánta tranquilidad sentía... De pronto se le olvidó que sentía alguna preocupación. Ahora más que nunca estaba seguro de cuando le amaba.
- Lyserg...
- ¿Sí?
- Hania tiene los ojos cafés... esos son pupilentes... y de hecho, es la primera vez que la veo de ojos verdes... y francamente se le ven mal.
El inglés no pudo evitar soltar una risita. Protegerle... amarle... No quería lastimarlo por nada del mundo. Lo amaba también simplemente por ser él.
De arriba de uno de los árboles bajó una figura al suelo con gran maestría aún cuando siguiera herido, cortesía de cierta bruja. Estaba bastante alejado de aquellos dos... y precisamente por ellos dos en su rostro se reflejaba ese gesto de seriedad. Hao se alejó del lugar... Tenía en mente otro plan. Y ese plan incluía al único chico que conocía que aún podía hacer algo.
- ¡¡¡KOUJIIIIIII!!!
- ¡¡AHH!! ¿¡Qué quieres, Kanbara!? ¡¡No estoy sordo como para que me grites así!!
- ¡Es que nada más estás viendo a Hania-san! Y... no sé... me haces pensar mal - Takuya rió escándolosamente hasta que Izumi lo golpeó para que se callara.
- Mhmm... - Minamoto prefirió ignorar a los elegidos del fuego y del viento, que de nuevo se enfrascaban en una discusión para estudiar otra vez a aquella chica de cabellos café claro y ojos verdes (pupilentes, según la aclaración de Kouichi). Hania estaba acomodando algunas cajas en los estantes, en donde estaban los biberones para los bebés digimons que pronto nacerían en masa según Swanmon.
- Está muy bien proporcionada, ¿verdad, Minamoto? - Horo Horo le daba codazos nada discretos al guerrero de la luz. Todo esto hasta que recibió él mismo otro tipo de golpes, mucho más fuertes de dos lados: uno de parte de su servicial y amada hermana Pirika y otro, como no, de su 'amigo' Ren.
- ¡¡Es tan linda!! - los gritos de Junpei no eran tampoco una muestra de recato, incluso Hiyama se dió la vuelta y le saludó con una sonrisa lo que provocó que el elegido practicamente se derritiera.
- ¡Los bebés están naciendo, Hania-chan! - Swanmon entró dando muestras de júbilo. La chica aludida también lucía muy emocionada, incluso saltó desde el lugar donde se encontraba, un lugar bastante elevado, dando muestra de una gran maestría para, al menos, la gimnasia.
- ¡¡Qué felicidad, Swanmon-san!! ¡¡Eh, chicos, vengan a ver!!
Ren, Yoh, Izumi, Anna y Kouji fueron los que quedaron en aquella bodega de donde colgaban canastas del techo, pues los demás salieron a ver como nacían los bebés digimons. Incluso Tamao pareció dudar, pero Minamoto le dió a entender con la mirada que él comprendía que Tamamura no quería perderse algo tan tierno como ver nacer a una linda criaturita.
Kyouyama, como últimamente, se sentó en la esquina más apartada de donde estaban los demás y procuró no mirar hacia donde estaba Yoh. Tao sólo refunfuñó un par de veces, diciendo lo inútil que era haber llegado a un lugar como este y que debían de irse cuanto antes; así que hizo lo mismo que Anna, sólo que del lado contrario. Se sentó y se cruzó de brazos, dispuesto a ignorar cualquier cosa que no fuese un "¡Vámonos de aquí!".
- Se ve que Hiyama-san no te agrada, Minamoto-kun - Kouji elevó la mirada para encontrarse con que la siempre alegre sonrisa alegre de Yoh había cambiado a una amable solamente. Aunque lo entendía... cuando el menor de los Asakura se dirigía a él, solía hacerlo con ese mismo gesto.
- ¿¡A quién podría agradarle esa harpía!? - fue Izumi la que contestó, dando un pisotón en el piso, signo inequívoco de fastidio - ¿Quién se cree que es? Dice que fue novia de Kouichi-kun... ¡pero insulta a Diethel-kun! ¡Eso no está bien! Diethel-kun es muy bueno con Kouichi-kun...
- Yo no creo que haya sido intención de Hiyama-san ofender a Lyserg - intervino Yoh, tratando de calmar a Izumi - Sólo que Lyserg está... un poco sensible.
- ¿Cómo que no quiso insultarlo? ¡Se burló de él frente a Kouichi-kun! ¿No me digas que eso no es quererte aprovechar de la situación, Yoh-kun?
- De acuerdo... tienes razón en parte, Izumi-san... pero... - el castaño sacudió su cabeza en señal de negativa - ... no podemos juzgar a Hiyama-san... Si de verdad todo lo que hizo lo hizo porque amaba o ama profundamente a Kouichi-kun... No podemos juzgarla. No somos nadie cuando nosotros hemos hecho locuras tal vez peores por amor...
Ante ese comentario, Izumi no sólo enmudeció, sino también se sonrojó profundamente. Asakura no solamente hablaba de ella, sino también de él. "Nosotros" había dicho. Yoh era tan sabio debajo de esa aparencia desobligada. Aunque Anna no se movió de su lugar, sí apretó los párpados con fuerza. Abría deseado taparse los oídos, pero no pudo permitirse ese gesto de debilidad.
- Será lo que quieras, Asakura... Pero no dejaré que esa maldita se acerque a mi hermano... - Kouji cortó el silencio con estas simples palabras.
- Como siempre tan posesivo - Orimoto miró a su compañero con incredúlidad - ¿No puedes dejar que tu hermano se defienda solo? Te aseguro que él puede.
- ... Ya sé que puede... Kouichi es muy fuerte... - susurró Kouji, para sorpresa de la chica - Pero yo quiero protegerle - ahora Yoh sonreía con ternura. Increíble, Kouji Minamoto le provocaba ternura.
- ... Me da gusto que quieras tanto a tu hermano gemelo - Yoh soltó una risita, aunque luego dibujó una sonrisa melancólica - Ojalá mi relación con mi hermano... fuera como la que tienen ustedes dos.
- ¡Ja! ¡Que no se te ocurra comparar a Kouichi con el infeliz de tu hermano! - era triste, pero Yoh sabía que no podía debatir el cometario; poco educado, como se lo hizo saber Izumi a Kouji de manera inmediata; porque era cierto... Su hermano era un infeliz. Pero ese mismo infeliz ahora era quien ocupaba toda su mente... era quien le había robado uno de los besos más intensos que había tenido en su vida. Simplemente no podía sacarlo de su mente.
Y, como si le hubiesen invocado, el castaño de cabellos largos apareció por la puerta. Su gesto de seriedad desapareció cuando sintió que todos le observaban.
- ¿Qué? Ya sé que soy irresistible pero...
- ¡¡Tú!! ¡¡Maldito!! - Kouji se fue al encuentro del shaman del fuego. Yoh le había contado a Minamoto algunas cosas, como que Hao había drogado a Lyserg y que por eso había actuado así... aunque no había mencionado nada sobre la violación de la que había sido víctima el pobre inglés - ¿Cómo te atreves a hacerle eso a Diethel?
- Oh, vamos... Si le sacaste mucha ventaja... - Hao sonrió, satisfecho por ver el rostro enrojecido de Minamoto, todo eso acompañado todavía de ese gesto de furia - ¿Así de grave se te hace haberte aprovechado de una de mis jugadas?
La última frase de Hao le valió un certero golpe en el rotro por parte de un furioso Kouji, sobre todo porque el elegido sabía que en parte... el castaño tenía razón. Así que el shaman, lejos de enfadarse, solamente reía... aunque de pronto pareció recordar algo, parando de sus burlas se volvió hacia el todavía intranquilo Minamoto y con todo el descaro del mundo, le propuso:
- Quiero que trabajemos juntos.
- ¡¡Vete a la mierda!!
Izumi se llevó las manos a la boca. Nunca había escuchado a Minamoto tan enfadado, mucho menos contestarle así a alguien, aun si se trataba de alguien como Hao. Yoh solamente observó a su gemelo, quien ni siquiera se inmutó con el insulto. Kouji se dió la vuelta, dispuesto a alejarse, pero el shaman de largos cabellos lo tomó del brazo sin medir sus fuerzas.
- Escúchame niño... Esto no es un juego. Aún podemos salvarle...
- ¡¡Suéltame, bastardo!!
- ¡Kouji! - antes de que la rubia pudiera intervenir, Yoh había puesto su brazo en el camino de la chica. Ella le miró sin entender, pero el menor de los Asakura sólo observarba la escena, así que Izumi decidió hacer lo mismo.
- ... ¿No te has dado cuenta que tú eres la maldita clave de todo? - le preguntó Hao, sin quitar su gesto serio, como pocas veces se le había visto.
- ¿Clave? ... - Kouji se quedó inmóvil por unos instantes... ese sueño... Las palabras que Patamon le había dicho. No, ¡todo eso era mentira! El elegido de la luz aprovechó que Hao había debilitado su agarre para safarze con brusquedad - ¡¡No me interesa!! ¡Eso de la estúpida luz es una tontería! ¡¡Yo no tengo nada que ver en esto!!
- ¿La luz? ... - Hao mostró un dejo de curiosidad - ¿Ellos también te han hablado? ¿¡Qué te han dicho!? ¡¡Tú eres quien puede salvarle, ¿no es así?!! ¡¡Tú eres quien tiene la clave para acabar con este problema!!
- ¡¡Yo no tengo nada que ver!! ¡¡Es una tontería!!
Para esas alturas, Yoh e Izumi ya no sabían de qué estaban hablando aquellos dos... ni porque Kouji cada vez lucía más alterado. Incluso, parecía que en cualquier momento... se pondría a llorar de desesperación.
- ¡¡Vamos!! ¡¡Tienes que ayudarle!! - le terminó gritando el dueño del espíritu del fuego - ¡Tienes que asumir el maldito rol de luz que tienes!
- ¡¡NO!! ¡¡Jamás le haré daño!! ¿¡Entiendes!? ¡¡NO PUEDO!!
Dicho esto, Kouji se marchó corriendo sin que nadie pudiera detenerlo, ni siquiera Orimoto, quien fue la única que lo intentó. Porque Yoh solamente observaba a su gemelo, que había vuelvo a endurecer su rostro, como si hubiera perdido una oportunidad valiosa.
- ... Ya le obligaré... - le oyó murmurar, mientras había sonar su capa mientras daba media vuelta para alejarse.
- ¡Hao! - se detuvo al escuchar la voz de su gemelo. Incluso se volvió - ¿Qué ha sido todo esto? ¿Qué es lo que deseas de Minamoto-kun?
- ... Jamás lo entenderías, Yoh... - le dijo simplemente.
- Lo has dejado muy alterado... ¿Es algo que los demás no debemos de saber?
Hao bajó la mirada, pero no por inseguridad, sino porque estaba analizando la respuesta que le daría a su gemelo.
- Yoh... tal vez no entiendas todo lo que voy a contarte. Pero creo que tú puedes saberlo... - suspiró - Esto me ha pasado incluso antes de conocerlos a ellos, a los elegidos que se convierten en criaturas raras llamadas digimons... Y me dejó de pasar cuando lo conocí a él... - el hermano menor miraba fijamente al mayor, quien había cerrado los ojos, como tratando otra vez de escoger las palabras adecuadas. Sin embargo, apenas iba a abrir la boca otra vez cuando escuchó una voz que lo desconcentró por completo.
- ¡¡Miren, digimons bebés!!
- Ehmm... sí, son bonitos, Hiyama-san... - sonrió Yoh, nerviosamente, mientras miraba de reojo como Hao se recuperaba del susto respirando profundamente.
- ¡¡Ahh!! ¡¡Es cierto!! - Izumi vió a las lindas criaturitas llamadas Botamons y no pudo evitar soltar algunos suspiros y grititos, aunque después recordó que era Hania Hiyama quien los traía en sus brazos y trató de guardar compostura.
- Vamos, Izumi-chan... ¡Cuida de ellos! - no esperó respuesta, cuando la castaña ya había puesto los bebés en los brazos de la rubia. Luego buscaba a alguien con la mirada.
- ¿Qué sucede, Hiyama-san? - preguntó Yoh, al mirar que Hao ya estaba mejor.
- Nada... es que buscaba a Kouji-kun. ¿Así se llama el hermano gemelo de Koui-chan, verdad?
- Hai, ¿para qué lo quieres? - ahora era Izumi la que preguntaba, batallando con dos bolitas de pelo negras que eran muy inquietas.
- No... por nada... - susurró Hania, mirando exactamente el camino que Kouji había seguido para escapar de los reclamos de Hao. La chica se llevó una mano al pecho, con un gesto digno de una película dramática y suspiró.
Lo que seguía era batallar con decenas de digimons bebés que acababan de nacer y que, obviamente, estaban hambrientos. Así que los shamanes y los elegidos no se daban abasto para darles de comer a estos pequeñines. Incluso no se explicaban como unas cositas tan pequeñas pudieran comer tanto como Horo Horo en uno de sus días con más apetito.
- Serás un excelente padre, Lyserg - comentó Kouichi, con un ligero sonrojo en sus mejillas, que provocó que el propio rubor del inglés se extendiera.
Aunque no todos tenía el toque del shaman de la radiestecia con los bebés. De hecho, el ainu agradecía que Ren estuviera ahí para ayudarle... de hecho, el chino era quien hacía todo el trabajo de Horo Horo, cosa que sólo fue tolerada por la seguridad de los digimons recién nacidos. Igual por Chocolove, quien era 'vigilado' por Tomoki, que por cierto gozaba de doble trabajo al cuidar de los bebés aparte del ya mencionado shaman.
Tamao extrañó la compañía de Kouji en el asunto de cuidar a los bebés, pues quería ver qué tan bueno era Minamoto en este asunto, pero el chico aún no había aparecido. Incluso Anna se veía por ahí, hacía su trabajo sin mucha energía, pero con toda la intensión de tener su mente ocupada en algo.
- ¡Eres muy buena madre, Izumi-chan! - exclamó Junpei, al ver a la rubia amamantando a un pequeño digimon con uno de los biberones.
- Debo coincidir... tienes mucha paciencia para esto, Izumi-san - ahora era Yoh quien hablaba. La decepción de Shibayama hubiera sido mayor de no ser porque Hania pasó por ahí para ayudarle. De hecho, Hiyama ayudaba a todos los presentes en las tareas. Ella, según decía, tenía experiencia en esto porque después de llegar en el Trailmon que la había traído al Digimundo había viajado mucho hasta llegar a la Ciudad del Inicio y había trabajado aquí hasta ahora.
- ... Pero... ¿en dónde estará Kouji-kun? - preguntó Hiyama, al aire.
- ¿A mi hermano? ¿Para qué lo buscas? - Kouichi dejó dormidos a dos pequeños en una de las canastas y se acercó a la chica al escuchar aquello. Lyserg seguía alimentanto a un Snowbotamon, pero escuchaba lo que pasaba.
- ... Lo que pasa es que quiero hacer las pases con él, creo que no le agradé mucho a Kouji-kun... - ella sonrió tímidamente.
- Je, lo primero que debes hacer es dejar de llamarle 'Kouji-kun'. A él no le gusta que le llamen por su nombre a menos que tenga confianza contigo.
- ¡Oh! Lo tomaré en cuenta, Koui-chan.
- Hania... ¿por qué insistes en llamarme... así?
- ¿Koui-chan? ... ¡Porque se oye más kawaii! ¡Nos vemos, Koui-chan! - Hania se alejó para ayudar a Pirika.
- ... Al menos lo intenté...
- ¿No te gusta que te llamen 'Koui-chan'? - Diethel se acercó a él después de terminar con lo suyo.
- No es eso... es que se me hace una falta de respeto para ti.
- ¿Para mí?... Debo admitir que no me gusta pero, en realidad no es tan importante. Aunque me he preguntado... - bajó levemente la mirada, sonrojado y un tanto apenado por lo que iba a decir - sé que los novios en Japón hacen eso... se tratan con más cariño...
- Humm... Hai... Por eso Yoh-san... te llamaba así.
- Lyserg-chan...
- Sí...
- ¿Entonces?
- ... ¿Entonces?
¡Era obvio y ambos lo sabían! Pero ninguno daba el primer paso. Lyserg por tímidez y Kouichi por...
- ¡¡¡Koui-chan!!! ¡¡Ven por un momento!!
- Ha-i.
Y Lyserg solamente subió un poco la mirada para ver como él se alejaba. Porque Hania le había llamado... Ya no podía evitarlo. Internamente estaba sintiendo un algo en contra de Hiyama que no había experimentado antes contra nadie más.
Habían pasado varias horas más. Tal vez era de noche, pero no se sabía por las nubes que habían cubierto todo el Digimundo. Y, tal y como Hania les había contado la historia de su vida (anécnota que se había extendido por mucho tiempo), ellos le contaron sobre Yoru y la historia de los shamanes y por qué estaban ahí. Hiyama se mostró muy emocionada todo el tiempo, sobre todo por la idea de que estos nobles guerreros peleaban por algo como salvar la Tierra y el Digimundo.
- ¡¡Yo también quiero luchar con ustedes!!
- No puedes, no tienes digivice como nosotros - Izumi le dió un golpe a Takuya por presumido.
- Oohh... - Hania hizo un pequeño puchero que pretendía ser tierno - Pero Koui-chan podrá decirles que soy una maestra en artes marciales y en gimnasia. Además, tengo habilidades extrasensoriales, tal vez como los shamanes aquí presentes, desarrollaron con mucho tiempo de entrenamiento.
- ¡¡No la...!! - Ren estrelló el rostro de Horo Horo contra el suelo. Nada de malas palabras, por favor.
- ... Es cierto... - murmuró Kimura, para después ponerse de pie - Voy a buscar a mi hermano, estoy preocupado por él.
- Yo voy contigo, Kouichi - le pidió Lyserg, aunque éste posó uno de sus dedos en los labios del inglés, quien le miró, extrañado.
- Necesitas descansar... quiero que duermas bien, ¿hai?- el de cabello oscuro retiró su dedo índice de los labios de Diethel con la misma suavidad de antes y le sonrió - Además, Kouji debe estar muy alterado como para haberse ido así y no creo que le haga bien verte.
- Je, je, je ¡Es cierto! ¡Ese amargado! - soltó Takuya, riendo - ¡No te preocupes, Kouichi! ¡Yo cuidaré personalmente de Lyserg-kun!
Kouichi le devolvió una sonrisa también a su líder, aunque luego miró a Yoh, quien solamente le asistió con la cabeza. Ahora Kimura se sentía mucho más tranquilo.
- No tardes mucho... - susurró Lyserg.
- ¡No hay problema!
- ¡¡Entonces déjame a mí ir contigo, Koui-chan!!
- Iie... lo siento, Hania... - el elegido solamente negó con la cabeza, aunque sin siquiera verla, para luego salir de aquél almacen donde también dormían los bebés.
Hania se quedó en silencio, un poco ofendida por aquella negativa. Miró al inglés, quien aún observaba el camino por el que se había ido Kouichi, para luego bajar la mirada con tristeza.
- Ahh... ¡esos dos siempre son así! - suspiró sonoramente Junpei.
- Es obvio... Minamoto-kun se preocupa por Kouichi-kun y Kouichi-kun por Minamoto-kun... - sonrió Yoh, logrando que Lyserg elevara ligeramente sus ojos verdes para mirarle. El castaño notó eso y agrandó su sonrisa. Al parecer, Diethel seguía confiando en él como antes y eso lo agradecía... aunque aún se sentía un poco incómodo mirándole.
- ¿Koui-chan siempre es así?
Se sorprendieron por la pregunta. No entendían lo que quería decir. Pero Lyserg era el más extrañado, incluso era la primera vez que le miraba directamente. Al sentir que había llamado la atención, Hiyama se acomodó entre las sábanas que habían esparcido para dormir sobre ellas y se sentó en una pose típicamente japonesa.
- ¿Qué quieres decir? - fue Ren quien se animó a preguntar, más por interés en sus 'investigaciones' que por otra cosa.
- Oh, vamos... ¡Ese Kouichi que ustedes ven no es mi Koui-chan!
- ¿Nani? - Hao había estado separado de ellos, pero al oír aquello decidió acercarse. Buscó la reacción de Lyserg, pero éste permaneció callado.
- ¿Cómo que qué? Fácil... Koui-chan es callado, tímido... es hasta un tanto retraído. Raras veces habla... Pero no tiene la capacidad de demostrar tanto cariño y empatía ¡cuando sonreía es que quería parecer amable, no porque lo quisiera ser! Ustedes no conocen a Koui-chan...
Debía aceptarlo, esa no era una declaración esperada. El chino se inclinó hacia adelante... ¿una personalidad diferente? ¿Es que Kouichi estaba actuando con ellos?
- No te has puesto a pensar... que tal vez tú eres la que no conoce a Kouichi...
- ¿Qué?
¡Eso sí que era noticia! Lyserg había hablado y se había enfrentado a la chica nueva, abriendo un claro debate en un tema en el que los demás poco podían opinar. Aunque intervenir era lo que menos querían. Yoh observaba fijamente a Diethel, francamente sorprendido, sin embargo, deseaba con todo su corazón que siguiera hablando. Que se defendiera por sí mismo.
- Que... - bajó un poco la voz, pero luego se aclaró la garganta para seguir - ... ¡Kouichi no es como tú crees! Él... sonríe porque quiere, porque se siente cómodo haciéndolo. Es cierto, a veces lo hace porque quiere ser amable. Lo sé, porque yo muchas veces lo he hecho así. Y... también... - tragó saliva y cerró los ojos - ¡es muy cariñoso!
- ... - la chica de cabellos cafés cada vez lucía más furiosa... y ella no era de las que se quedaba con el enojo adentro - ¿¡Tú qué sabes!? ¡¡Yo estuve un año de novia con él y yo tenía que hacer casi todo!! Yo era quien lo guiaba, yo era quien hablaba... yo era quien...
- No me extraña que Kouichi no hablara si no lo dejas hablar - ugh, golpe bajo - Y, que no expresara su cariño contigo quiere decir sólo una cosa...
- ¡Ya basta! ¡No discutiré asuntos de mi novio contigo! - Hania se dió la vuelta para alejarse de Lyserg. Eso también significaba sólo una cosa. Que el inglés había ganado. Los demás hubieran deseado aplaudirle a Diethel, pero éste sólo emitió un suspiro, no muy seguro de su desempeño en aquella pelea verbal. Miró a Yoh, quien le sonrió tratando de tranquilizarle.
- Ya estuvo bien de demostraciones de conocimientos... ¡a dormir! No te preocupes, Tamamura-san ¡¡El amargado volverá!! - exclamó Takuya, mientras todos se acomodaban para dormir. Incluso Lyserg, quien se acurrucó entre unas mantas y cerró los ojos, tratando de hacer caso a lo que Kouichi le había dicho.
Pero no pudo cumplir aquello, porque estuvo revolviéndose en la improvisada cama por un par de horas. Ni Kouichi ni Kouji habían regresado y ya empezaba a preocuparse por ambos hermanos. Se levantó, cuidando no despertar a nadie y se dirigió a la única salida del almacén para esperarles afuera. Sabía que Kimura lo regañaría, pero ya no podía estar acostado.
Abrió la puerta y se sentó en el suelo, mirando las oscuras nubes... preguntándose si era de día o de noche. Si era el Sol o las estrellas las que brillaban. Tenía que ocupar su mente, porque cada vez que dejaba de pensar en algo, lo que le había ocurrido con Hao volvía... y toda esa avalancha de imágenes confusas que no lograba hilvanar llenaban su cabeza.
- Ah... eres tú... ¿Te llamas Diethel, ne?
- ... Hai - justo lo que necesitaba, Hania Hiyama de pie a su lado. Las costumbres de su país le pedían ponerse de pie, pero se sentía demasiado agotado para hacer eso. Agradeció que ella se sentara... aunque no le gustó que lo hiciera tan cerca de él.
- Oye... perdón por lo de allá. A veces digo cosas sin pensar, ¿te pasa eso?
"No muy a menudo" sí que le pasaba... pero tal y como pasó por su mente. ¡No le pasaba tan seguido!
- Perdóname tú a mí por ser tan rudo.
- Oh, si tú no has sido rudo ¡Eres demasiado dócil! Te hubiera destrozado fácilmente, pero no se me dió la gana - Lyserg frunció el ceño ante ese comentario, pero prefirió no decir nada, sólo mirar al suelo. No estaba de humor como para pelear - Entonces... tu debilidad es lo que le ha gustado a Koui-chan...
Esa afirmación le sobresaltó. No la miró a ella, sólo seguía mirando al piso cubierto de fresca hierba, con los ojos muy abiertos.
- Sí... el hecho de que tú seas aún más tímido que él... que tú seas aún más introvertido que él. Todo eso lo convierte en alguien dominante... ¡Jo, porque conmigo jamás lo hubiera logrado!
¡Dios! ¿Qué clase de mujer era esta? Describía a Kouichi de una manera humillante, como si lo viera con desprecio, como si solamente lo utilizara...
- ¿Sabes? Estás en un error. Koui-chan no te ama. A él le gustan las chicas... ¿Tú crees que él realmente te quiere? Él te está utilizando también... para darme celos a mí. Lo sé porque me está ignorando... ¡Pero no está dando resultado, porque yo no siento celos de ti! Jamás podría sentir celos de alguien como tú. Pero no es por ofenderte, espero que esto no te ofenda, Diethel.
- ... ¿Quién... eres tú?
- ¿No te has dado cuenta? ¡Yo soy la novia de Koui-chan! Yo soy quien lo ama, quien podrá cuidarlo... Tú no eres nada. ¿Crees que podrás hacer algo por él? Eres un chico, o al menos eso parece... Cuando sean mayores no podrán tener hijos, ¿o sí? Claro que no.
¿Quién era ella? ... Ya no era odio lo que sentía contra ella, si es que alguna vez fue eso. Ahora era... no sabía cómo describirlo. Sólo... ¡quería alejarla de Kouichi! Si ella era tan dura, tan 'sincera' ... ¿qué era lo que le diría a Kouichi?... ¿Al "tímido", "introvertido" y "callado" Kouichi? ¡¡Aquello le desesperaba!! Ya ni siquiera escuchaba lo que le estaba diciendo en contra de él, sólo pensaba en el daño que seguramente le había causado a Kouichi antes tener a una novia como ella... Tan "sincera", "independiente" y... "extrovertida". Tal vez... 'perfecta'.
De pronto: sucedió. Se sujetó el vientre. De nuevo, esa oleada de dolor tan intenso que hacía tiempo no sentía. Comenzó a toser, se llevó una mano a la boca. Cerró los ojos, pero eso no evitó que todo a su alrededor diera vueltas.
Hiyama detuvo su boca por unos instantes para mirarle. Como Lyserg tosía más y más fuerte, tapándose la boca con una de sus manos.
- Mhmm... ¿eso es por llamar la atención también? - se puso de pie, abriendo la puerta - No sorprendes a nadie, la verdad. Que cada quien se quede con lo que es suyo... ¿no crees? - no se inmutó por el hecho de que el inglés seguía tosiendo, con su pequeño cuerpo encogiéndose de dolor. Sólo entró en el almacén con los demás y lo dejó en el suelo.
Pero, para la suerte del pobre chico, alguien al fin regresaba. Ese alguien le vió, escuchó esos gemidos de dolor que alcanzaba a emitir y se lanzó a ayudarle. Lo tomó en sus brazos, limpiándole con las mangas de su camisa la sangre que salía de su boca para llevarlo dentro y atenderle... ¿Cómo? ... No sabía... Sólo sabía que... tenía que esperar a que se le pasara.
Lentamente fue abriendo sus ojos verdes. Aún tenía en su boca el sabor metálico de su propia sangre, pero ya se sentía un poco mejor.
- Toma, bebe esto... es agua.
Y así lo hizo, tomó un trago del líquido, aunque aquello no le sabía bien. Le extendió un pequeño tazón.
- Mejor escupe hasta que te sepa bien... puedo traer más agua fresca, ¿sabes?
De nuevo, obedeció tímidamente. Miró a quien le atendía y en voz bajísima le agradeció tantas atenciones.
- Gracias... Minamoto-san...
El elegido le contestó chasqueando la lengua, como un gesto de fastidio. Sirvió un poco más de agua en el vaso de la jarra que tenía al lado. Se la ofreció a Diethel, quien la tomó gustoso. Mucho mejor.
- Te ha vuelto a pasar, ¿verdad? - le miró fijamente, con seriedad.
- ... Hai... - Lyserg se había sentado en la sábana en donde segundos antes había reposado, con el vaso entre sus manos.
- Tú... ¿no le has dicho a Kouichi sobre esto, cierto?
Simplemente negó con la cabeza, mientras sus dedos comenzaban a jugar nerviosamente con la pieza de cristal. No quería dar más preocupaciones... Kimura ya había pasado por muchos problemas... y eso lo sabía nada más al darse cuenta de la clase de novia que había tenido.
- ... Algún día se va a enterar... Mi hermano es distraído, pero no es tonto y lo sabes... - contestó Minamoto, poniéndose de pie, llenando el vaso por última vez después de que Lyserg se lo diera para que lo que quedaba en la jarra se terminara y poder llevársela - Y ahora yo soy el que tiene que buscar a Kouichi...
- ¿Eso significa que no ha regresado?
- ¡Obviamente no! - le gritó, aunque después cambió su tono de voz - Lo siento, no quise gritarte - se sonrojó levemente, luego sacudió la cabeza, como si eso le ayudara - Me voy, luego vendrá Asakura a cuidarte... Y me refiero a Asakura Yoh, no al bastardo de su hermano - dijo entre dientes.
- Minamoto-san...
- ¿Hum? ¿Nani? - se volvió, extrañado de que Lyserg le llamara. Y es que la reacción era de miedo la mayoría de las veces.
- ... ¿Tú crees que Kouichi nos está mintiendo? ¿Que él en realidad no es así? Que su sonrisa es... por obligación...
Kouji le miró con incredúlidad.
- Bueno... ¿te has golpeado la cabeza? Es cierto que es reservado, pero eso es para no preocupar a los demás... - ladeó la cabeza, todo al ver la miradita que Lyserg le dirigía. Trató de mantenerse sereno - Kouichi jamás me mentiría... ¡A menos que se tratara de encubrir algo que tuviera que ver contigo! En todo caso... jamás te mentiría a ti... Por eso te odio... - eso lo dijo más de una manera graciosa que enfadada, por lo que Lyserg no se lo tomó como amenaza y suspiró, más tranquilo - ... ¿Quién te dijo que Kouichi era hipócrita?
- ... Hiyama-san...
- ¡Esa perra! ¡No me extraña! Mejor no tomes en cuenta lo que te dice y déjala ladrar lo que se le dé se gana. Y me voy. ¡Ya me has distraído demasiado!
- Minamoto-san...
- ¿Y ahora qué?
- Gracias.. ¡Gracias por todo! - le mostró una gran sonrisa. Una sonrisa sincera que Kouji nunca le había visto dedicada a él. Eso le provocó un sonrojo mucho más extenso que los anteriores, así que sólo tartamudeó un "De nada" antes de salir prácticamente huyendo.
El inglés se quedó solo por unos minutos más. Se dió cuenta que estaba otra vez en el almacén, sólo que estaba más bien apartado de los demás. Y eso lo pensaba como conclusión de que no había visto a nadie más que a Minamoto. Kouji Minamoto... la actitud que había tomado para con él le había parecido un tanto rara. Nunca le había tratado de una manera tan amable. Sonrió levemente al darse cuenta de que tal vez el hermano de su novio estaba tratando de conocerle mejor después de todo. Se propuso no resistirse y dejar que el elegido de la luz comprobara lo que quisiera comprobar para que se diera cuenta de que él era sincero en lo que sentía por Kouichi.
- ¡Oye, Diethel! - se volvió. Esa no era la voz de Yoh, definitivamente... era la voz de ella. Hania Hiyama estaba de pie a espaldas de él, con las manos tras la espalda, en una pose que trataba de parecer inocente. Incluso su gesto parecía de niñita regañada.
- Mande, Hiyama-san... - como cada vez que le ocurrían esos ataques de los que aún desconocía su fuente, Lyserg se sentía sumamente débil. Pero de todas maneras trató de sonreírle amablemente, olvidándose un poco de lo que la castaña había dicho antes.
- Sólo quería decir que lo sentía... ¡No sabía que de verdad estabas enfermo! - avanzó unos cuantos pasos y cuando estuvo frente a Lyserg se puso de cuclillas para estar a la altura del chico. Tomó su rostro con una de sus manos cosa que al inglés no le gustó para nada, sin embargo, no se movió - ¡Oh, Dios! ¡Si estás helado! De verdad debes estar muy enfermo... Mhmm... - parecía pensar algo muy detenidamente y Lyserg sólo deseaba que le soltara - ¿Entonces Koui-chan está contigo por lástima?
- What?! - aquella pregunta lo había sorprendido por completo. Sin quererlo, fijó sus ojos en los de Hania. En los falsos ojos verdes de Hania.
- Tell me, Lyserg Diethel... Do you really think that you are loved by Koui-chan? Tell me...
Simplemente cerró los ojos. Él creía... él...
- ¡¡Hania, suéltalo en este instante!!
- ¿Nani? - la chica se separó del chico inglés para mirar a quien estaba tan cerca de ellos - Yo... ¡puedo explicarte!
- No necesito que me expliques nada... - la tomó de la muñeca, aléjandola de Lyserg, quien sólo observaba muy sorprendido la escena - ¡Ahora recuerdo por qué terminé contigo! ¡¡Eres demasiado posesiva!!
- ¡Mentiroso! ¡No fue eso lo que me dijiste!
- Esa es una de las principales razones... por favor, vete, Hiyama...
- ¡Pero! ... - supo que había perdido en esta ocasión, por lo que no quiso alegar más. Hizo lo que le pedía, se retiró sin más... dispuesta a hacer otro plan.
Ahora se sentó frente al inglés, quien aún no quitaba su gesto de asombro.
- Lo siento ¡Lo siento! No quería que vieras eso... - se disculpó Kouichi - Pero ya me dí cuenta de lo que te estaba haciendo.. ¿te hizo daño? - extendió su brazo para acariciar dulcemente el rostro de Lyserg, quien de nuevo cerraba sus ojos para sentir con más intensidad aquello.
No lo resistió más y le abrazó. Diethel era quien le abrazaba. ¡Claro que lo sabía! ¡Kouichi le amaba!
- Tranquilo, Lyserg... Sabes que yo no amaré a nadie más que a ti - lo abrazaba con más fuerza. Pero el inglés sólo asistía sin decir nada. No quería hablar, sólo quería seguir sintiéndose así.
Y, de pie, él los observaba. Kouji era quien le había dicho a Kouichi en donde estaba Lyserg. Suerte que lo había encontrado ya en la entrada del lugar en donde estaban. Pero Minamoto sentía un gran vacío que aún no podía llenar...
"La luz es quien debe dar amor... no hay amor en la oscuridad".
Kouji apretó los párpados con fuerza y se alejó de aquella escena que... tanto daño le causaba a su corazón.
- ¿Te ha salido todo mal, ne? - Hiyama miró a quien le llamaba. Hao Asakura.
- ¿Y a ti eso te importa mucho?
- Yo podría ayudarte a separarles... - el shaman la miró con ojos bastantes sugerentes. Hania sólo le devolvió una mirada de desprecio.
- Discúlpame, pero yo soy demasiado buena como para trabajar con basura como tú...
- ¡Vaya! ¡Tenemos a una chica valiente! - soltó una carcajada, sólo para bajar después del árbol en el que se encontraba - Te sugiero que consideres mi proposición... - se acercó al oído de la chica para susurrarle seductoramente - ... Yo puedo devolverte a Kimura en bandeja de oro si gustas.
Pero Hania, dándose aires de grandeza bastante usuales en ella, alejó a Hao de ella, diciéndole que no hiciera tanto escándalo, que lo que sí podría hacer era despertar a los bebés, todo eso para después agregar:
- Yo puedo hacer el trabajo por mí misma... búscate a otro que se arrastre ante ti... - escucharon un ruido que los hizo volverse. Era Kouji saliendo del lugar sólo para tomar algo de aire fresco. Hao sonrió con todo el descaro del mundo, cosa que Hania notó claramente.
- Entonces... nos vemos - el castaño se alejó de la chica para acercarse a su verdadera presa de nuevo, que era Minamoto, por supuesto.
- ¿Con que es el hermano de Koui-chan lo que te interesa? - no obtuvo respuesta, pues Hao ya estaba bastante lejos. Hiyama emitió un suspiro y miró al cielo cubierto de nubes oscuras. Sí.. un nuevo plan...
- ... Lyserg-chan...
- ¿Nani? - Lyserg se incorporó para mirarle. Kouichi desvió la mirada, visiblemente sonrojado.
- Lyserg-chan... así es como te llamaba Yoh-san... Así es como... yo...
- ¿Sí? - el inglés sonrió tiernamente, para después tomar el rostro del de ojos azules entre sus manos - ... ¿Tú qué?
- ... Yo... quiero llamarte así también...
- ... Pues... puedes hacerlo - bajó sus manos, para también ronrojarse ligeramente.
- Pero...
- ¿Hay un pero? ... ¿Crees que pensaré en Yoh cuando me llames así?
- Iie, no es eso... - emitió un pequeño suspiro - ... Lo que pasa es que yo llamaba antes a Hania así... "Hania-chan" y, pensé que si te comenzaba a llamar así, pues... tú pensarías que te estaba comparando con ella... o algo así.
Lyserg sólo le observaba sin entender mucho lo que decía. Él jamás en su vida se imaginó que esa era la razón. Más bien pensaba que era parecida a la suya, por tímidez y...
- ... También por temor a comprometerme...
- Comprometerse... - repitió Lyserg.
- Hai, no quiero que te sientas presionado por mí, no quiero que sientas que te estoy atando a mí incondicionalmente. Aunque, lo que sí quiero que sepas y sientas... es que lo que siento por ti es serio, Lyserg...
- Oh... yo también... - miró al suelo, tratando de reunir fuerzas para hablar, que no se notara tanto que aún se sentía un poco mal - Yo también me siento igual que tú - sonrió con sinceridad - ... Pero yo quiero... "comprometerme" de esa manera.
¡Interesante manera de comproterse!
- ¿Hai? ¡¡Sugoi!! Es decir... ¡Qué bien! digo... La verdad no sé qué decir - soltó una risita avergonzada ante la misma sonrisa de felicidad de Diethel.
- Sólo que... ¡la verdad yo no quiero decirte "Koui-chan"!
Kouichi se echó a reír ante la exclamación de Lyserg, aún y cuando éste lo hubiera dicho muy en serio.
- Puedes decirme... ¿Kouichi-chan...? Se oye raro... ¿verdad? Es culpa de mis padres por ponerme ese nombre tan extraño.
- Me gusta tu nombre, Kouichi...
- ¡A mí me gusta más tu nombre, Lyserg-chan! ... ¿o Lys-chan? Ji ji... ¡kawaii!
- ... Tú puedes llamarme como quieras... - se abrazó a él, cerrando los ojos de nuevo - ... Kouichi... -chan... Sí... se oye raro... - rió un poco - But is cute...
- ... Ai shitteru... - susurró el japonés, al sentir que su acompañante se estaba durmiendo.
- ... Yo también te amo, Kouichi-chan...
To be Continue ===
Kini: ¡¡Ahh!! Too much sugar!! Kawaii XD (no se preocupen, que me he desquitar pronto X3). ¡Por fin se han decidido! ¡27 capítulo y ustedes siempre seguían con lo mismo! ¡¡Ya era justo y necesario!! ¬-¬ ... Ok, prometí y me prometí Lysichi... ¡y aquí hay Lysichi! XD
Kouichi y Lyserg: ... (rojitos)
Kini: ¡Escribí Lysichi! ¡Soy feliz!
May: ¡Te quedó kawaii, imoto!
Takuya: ¡Hacen tan linda pareja! T¬T
Kouji: ... (se trauma por otra escena Kouji-Lyserg XD).
Kini: (aparece detrás de Kouji) ... Eres un perve... Kouji...
May: 9.9U Minamoto...
Kini: XD No importa... ¡el próximo capítulo tendrá poco que ver con este! Kawaii. Y le cumpliré a Holly Motto su petición de una noche romántica n.n-
Kouichi y Lyserg: ... (más rojos).
Kini: ¡Pero ya no les digo nada! XD Sólo me queda agradecer su gran paciencia y su fidelidad n.nU ... ¡Arigatô! ... Y a mi 'nee-san May ... ¡te quiero! T-T
May: Yo también te quiero, Kini n.nU
Kini: ¡Hagamos un Koukou juntas! =D
Público: ... ¿Kou-kou?
Kouichi y Kouji: ...
Kini: XDDD ¡¡Ya sabrán de eso!! ¡¡NOS VEMOS!! Hasta el capítulo 28 -
