CAPÍTULO 3

"DR. FANTOPUS"

Portada nº 3: Parodia de la portada del Ultimate Spiderman 8 (ed. española): Fantopus sirviendose de sus brazos mecánicos para avanzar, con su silueta recortada a la luz de la luna.

Cuartel Fanhunter de Lugópolis, en el interior de una celda especial...

- Bueno, podría haber sido peor.

- ¿Pero que dices Ryo? Nos han cogido, han cortado nuestra comunicación con el exterior... yo creo que estamos bien jodidos.- dijo Shocker

- En vez de quejarnos deberíamos pensar en como salir de aquí.- afirmó Sonja.

El resto del grupo permaneció en silencio, pensando en lo sucedido en las últimas dos horas. Su intento de huida, su captura...

En el exterior...

- ¿Qué plan tenemos para sacarlos, Winston?

- Ninguno, que yo sepa, pero quizá sea podamos sacarles de ahí de todos modos...

- Si... quizá. Entrar ahí, en un sitio plagado de Fanhunters, encontrar su celda entre las miles que hay (y eso si los han encerrado juntos, que si no...) y salir por donde entramos...

- ¿Entramos con el APC a lo loco?

- Demasiado previsible, ya lo hicimos una vez ¿recuerdas?

- Ah si, cuando lo del cargamento de DVDs robados...

- Tenemos que pensar en otra cosa...

- ¿Hacer como en "Asalto a la Comisaria del Distrito 13"?

- Olvidate de Carpenter por un momento... vamos Trinidad, piensa, piensa... ¡Ya lo tengo! Winston, ¿has jugado muy a menudo al Metal Gear?

- Si ¿por que lo preguntas?

- Te diré lo que vamos a hacer para rescatarles... escucha atentamente.

Cuartel Fanhunter de Lugópolis.

- Así que ese es su plan, Dr. Fantopus... muy interesante.

- Me alegro de que le guste, Comandante. Efectuaremos el primer ataque en esta ciudad. Si tiene éxito quizá le podría interesar a su Santidad el usarlo en otros puntos del Reino de Dick.- dijo el Dr. Fantopus, mientras jugueteaba con una pequeña bola de cristal que contenía un líquido verde...

En ese momento, un fanhunter entra en la sala...

- ¡Señor! ¡Señor!

- ¿Que ocurre, soldado?- preguntó el Comandante

- Una incursión señor... alguién ha entrado en el edificio... tres personas, dos por los conductos de ventilación y otra por el hueco del ascensor desde el subsuelo. Ahora los hemos perdido, podrían estar en cualquier parte del edificio.

... y mientras tanto, en cierta celda.

- ¿Sabéis?- dijo Ryo- Esto me recuerda a aquel capítulo de Dragon Ball... era de los primeros, en el que estaban encerrados en una celda y salían gracias a la transformación de Goku...

- Oh, cielos, ya está divagando...- dijo Tito

- Un momento... - Sonja se levantó como impulsada por un resorte- Ryo ¿qué es lo que has dicho?

- ¿Eh? Pues que estar aquí me recuerda a...

- No, eso no... lo de después.

- ¿Lo de la transformación de Goku?

. Si... ¡eso es!- de repente, su expresión se tornó sería y se volvió hacia Dhaem, que jugaba al "piedra-papel-tijera" con Lupe y Shocker- Dhaem, he de hablar contigo.

- ¿Qué ocurre?

- He tenido una idea para salir de aquí y... Crom... se que no me lo perdonarás, pero...

- ¿Que quieres dec...?- Dhaem se quedó mudo y palideció- ¡No! ¿No iras a...?

- Si, me temo que si...

- ¡Sonja! ¡Es peligroso! Sabes que puedo perder el control ¡No lo hagas!

- Lo siento Dhaem.

- ¡Sonja! ¡No lo...!

- ¡¡¡CTHULHU!!!

En el exterior de la celda, frente a la puerta, dos fanhunters vigilaban, tranquilamente, sin imaginarse lo que les iba a caer encima... literalmente. Porque en menos tiempo del que tuvieron para reaccionar la puerta de acero saltó de sus goznes y cayó sobre ellos. En el marco de la puerta se recortaba la figura de algo que parecía vagamente humano... y con tentáculos.

- Blloargh... Cthulhu R'lyeh...

- Lo que tu digas bicho- dijo Ryo- ahora muévete.

- Jo, casi me dan penda- dijo Lupe mirando mientras cogía las armas de los fanhunters y se las pasaba a Shocker y a Tito.

En otra parte del cuartel...

- Mierda, creo que no es por aquí...

David Dunn, el hombre del chubasquero azul, avanzaba por los pasillos más perdido que un lord Sith en un capítulo de los Teletubbies. Había conseguido entrar por el hueco del ascensor tras cruzar media ciudad por las alcantarillas y las viejas estaciones de metro, esquivando caimanes y algún que otro bicharraco mutante suelto... Seguía avanzando por el pasillo cuando al llegar a una esquina se encontró con dos armas apuntando delante mismo de sus narices.

- Eh... no es un fanhunter.

- ¿Estas segura?

- Disculpen... pero ¿podrían decirme por donde están los laboratorios de este sitio?

Y en los laboratorios...

- ¡¡Creo que esta no es la salida!!

- ¿Lo has adivinado tu solo Tito?

Las balas silbaban al pasar sobre sus cabezas, mientras los fanhunters caían ante el avanzar del grupo, que ya parecía un juggernaut múltiple. Tras salir de la celda y recuperar sus armas, la alarma no tardó en sonar, pero no por su huida sino por lo que parecía ser la entrada de algún intruso.

- ¡Seguid avanzando! ¡Pase lo que pase seguid avanzando!- gritó Shocker

- Yaaaurghla- respondió Dhaem... si aún se le podía llamar así.

Shocker, armado con dos o tres granadas causaba estragos, mientras Tito saltaba de un lado a otro disparando y lanzando telaraña con la que desarmaba a los fanhunters. Sonja y su espada causaban terror entre las tropas, lo mismo que Lupe y sus garras. Dhaem estaba dejando a muchos de los que le hacían frente como si fueran víctimas de una peli gore y Ryo se dedicaba a hacer malabarismos con su katana, algo ante lo que los fanhunters no sabía muy bien como reaccionar. En el momento de esa breve distracción Ryo aprovechaba para 'rematar' el trabajo. En ese momento, Dhaem comenzó a sufrir violentas convulsiones que le llevaron a sufrir otra metamorfosis...

- ¿Eh? ¿Me he perdido algo?

- Bienvenido de vuelta orejudo.

El combate acabó tan rápido como había empezado. Los seis estaban rodeados por unos veinte fanhunters tirados en el suelo.

- Bueno, no ha sido tan difícil- dijo Lupe

- Mejor que sigamos avanzando... a ver que hay tras esa puerta.- dijo Tito.

Al ver lo que había al otro lado no pudieron evitar quedarse con la boca abierta. Ante ellos se alzaba un enorme misil situado en una rampa de lanzamiento.

- ¿Que demonios es eso?- preguntó Dhaem.

- Yo creo que está bastante claro...- dijo una voz tras ellos. Era el Dr. Fantopus, acompañado por el Comandante Fanhunter.

- ¡¡Ese es el tipo del que nos habló el informador!!- gritó Sonja.

- Ignoro de quien hablas pequeña... pero no me gusta que un grupo de destarrapados marginales se cuele en mi laboratorio.

- ¿Ha dicho algo sobre un informador? Quizá tengamos un topo dentro...- dijo el Comandante- Tendremos que volver a encerrarlos e interrogarlos a fondo.

- ¡Jamás! - exclamó Shocker- ¡No caeremos sin luchar!

El ex-marine se lanzó sobre Fantopus, que solo con uno de sus cuatro brazos metálicos consiguió inmovilizarlo y volverlo a lanzar hacia donde estaban sus compañeros. Tras eso, el doctor sacó de uno de los bolsillos de su bata blanca una especie de pistola que a simple vista parecía de plástico. Disparó, emitiendo una serie de ondas de color verdoso sobre el grupo.

- ¡Eh! No puedo moverme - dijo Lupe.

- Yo tampoco- dijo Ryo- ¿Qué es lo que nos ha lanzado?

- Uno de mis últimos inventos, insurrecto, un rayo inmovilizador que os mantendrá en ese estado unos minutos.

- ¡Je!, la cumbre de la originalidad- se mofó Tito.

- Bien, - dijo el Comandante Fanhunter- Ahora los meteremos otra vez en la celda y...

- ¡¡Un momento!!- exclamó Ryo

- ¿Qué? ¿Qué pasa?

- Siendo ustedes los malos que tienen a los héroes a su merced... ¿No van a contarnos sus planes? Es un requisito... si no, no vale.

- Eso es una estupidez- dijo el Comandante Fanhunter.

- No- respondió Fantopus- Mi honor de villano y el código de los pulp me lo exigen, les contaré mi plan. Ese misil que veis ahí porta en su interior muestras de un retrovirus que provocará una serie de mutaciones en los genes de los fans. En el curso de mis investigaciones descubrí la existencia de un gen fan, un gen que incitaba a la subcultura, y que conseguí erradicar con ese virus de mi invención.

- Cuando el cohete sea lanzado a las afueras de la ciudad- prosiguió el Comandante Fanhunter- Todos los fans perderán sus ansias de subcultura, víctimas del retrovirus, y se convertirán en buenos ciudadanos del Reino de Dick. ¡Será el fin de la Resistencia!

En ese momento, con un rápido movimiento, el Dr. Fantopus agarró al Comandante con uno de sus tentáculos: - Me temo que le he mentido Comandante... será el fin de la Resistencia, si... pero no de ese modo.

- ¡Suélteme! ¿Que es lo que pretende?

- El virus solo afectará a los fans... si. Pero no los convertirá en ciudadanos dóciles. Los matará.

- Eso no suena muy bien...- dijo Dhaem.

- ¡No puede hacer eso Fantopus! Puedo ser un cabrón, un fundamentalista de Dick, un torturador, un dictador... ¡pero no soy un genocida!

- Esto solo es el principio... primero será Lugopolis y después el mundo- Con otro de sus tentáculos, Fantopus teclea un código en el ordenador cercano al misil. Una voz metálica resuena en todo el recinto: "Tres minutos para la ignición"

Entonces, uno de los conductos de aire situados en el techo se abrió violentamente y tres figuras saltaron desde lo alto, cayendo ágilmente delante de Fantopus.

- ¡¡Son Trinidad y Winston!!- exclamó Tito- Y un tipo raro con un chubasquero.

- Lo hemos oído todo Fantopus- dijo David Dunn- Será mejor que apague ese juguetito.

- Usted... ¡usted es el tipo de la parada del autobús de hace dos días en Londres! ¿Cómo ha llegado aquí?

- Es una historia muy larga... pero he venido a detenerle.

- Y nosotros a rescatar a nuestros compañeros y de paso jorobarles el pastel- dijo Winston.

Fantopus retrocedió y lanzó al Comandante Fanhunter por el aire, derribando a Winston y a Trinidad. Dunn saltó sobre el doctor, que golpeó al hombre con otro tentáculo.

- ¡Ja! Cuello roto...

Pero Dunn se levantó del suelo sin ningún rasguño.

- ¿Qué?- dijo Fantopus, asombrado- ¡Es imposible! ¿Eres irrompible o que?

- Más o menos- dijo Dunn- Y ahora te detendré de una vez por todas...

- ¡¡ME TEMO QUE NO!!

Todos se volvieron hacía el punto del que había salido aquella imperiosa voz. En el umbral de la puerta se encontraba uno de los científicos del laboratorio, encargado de los ordenadores.

- Fantopus es mío.

- ¿Quien eres tu? ¿Otro aspirante a cadáver?- dijo Fantopus

El joven se llevó las manos al rostro y lo arrancó, pues no era más que una máscara de látex. El verdadero rostro tras la mascara era el de...

- ¡No!- gritó Dhaem- ¡No puede ser!

- Me temo que si muchacho- dijo el extraño, que era claramente un alienígena, de piel gris y ojos metálicos- Soy yo, Wachoman. La muerte no ha podido retenerme.

CONTINUARÁ...