ACLARACIÓN: Nooooooo, Gravitation no es mío TT-TT (si fuera mío la serie
animada tendría más de 100 episodios!!!, y se doblaría en todos los
países!!¬¬, sueño mucho). Ni Shuichi, ni Yuki me pertenecen, pero los tomo
"prestados" para realizar este fic, así que si desean realizar acciones
legales en mi contra, pierden su tiempo =P.
NOTA: Para seguir la corriente a la historia llamo a Shuichi con su nombre provisional: Koiichi. Y creo que con Yuki no hay problemas ya que solamente es el apellido. Sin más inconvenientes vamos al fic.
CAPÍTULO 14: OJO POR OJO.
En el capítulo anterior:
Ya muy lejos de sus ahora enemigos decidió detenerse. Su orgullo había sido pisoteado por un joven sin experiencia, jamás olvidaría esta humillación, le haría tragarse todas y cada una de sus palabras. Quería verlo arrastrándose ante él pidiendo disculpas, besando el suelo por el que caminara, haría pagar su insolencia.
-Estoy seguro de que tienes un punto débil Shirou... y yo voy a encontrarlo- frunció el ceño en un gesto de ira a la vez que volvía a retomar sus pasos –ojo por ojo... diente por diente... – fueron sus ultimas palabras antes de desaparecer entre la niebla.
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La fuerte voz de Shirou se escuchaba como cada mañana, completando así su rutina.
-¡¡¡KO-CHAN, YA ME VOY!!!-
La frase fue seguida por el sonido de los pasitos apresurados del muchacho bajando las escaleras a toda velocidad, respondiendo así al llamado del otro joven.
-Ah... Ah... –había llegado frente a él, respiraba jadeante, apoyando ambas manos en sus rodillas y con el cuerpo inclinado –Ah... Shi-kun, cuídate... mucho... - se enderezó rápidamente para dedicarle una sonrisa.
-Tu también Ko-chan- extendió una mano para acariciar el pelo rosa del pequeño. Aprovechó que su mano se encontraba en la cabeza del joven para tomarlo de la nuca y acercarlo, depositando en sus labios un suave beso que se rompió con la misma rapidez con la que vino –vete a desayunar...- susurró cerca de su oído.
-Ah... ¡HAI!- contestó animadamente después de salir del trance en el que se encontraba a causa del beso de su amante.
-Ja ne... –dijo el moreno al momento de darse media vuelta e ir en dirección a la puerta principal, levantando una mano en señal de despedida.
-¡Sayonara!- sonrió con los ojos entrecerrados y las manos entrelazadas en su espalda.
La puerta se cerró dejando a Koiichi nuevamente solo, pero esta historia no era la misma, no estaba solo por completo, ahora tenía un amigo a quien quería bastante y en el que confiaba plenamente.
-Ah, eso me recuerda- se había olvidado por completo que Yuki lo visitaría y al recordarlo salió disparado rumbo a su habitación.
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Tres sombras se movían con mucha cautela entre los arbustos de la gran mansión, su objetivo era fijo: "Buscar venganza"
–Shirou ya se ha marchado, ¡es el momento!- habló la voz chillona de un hombre mientras veía como el automóvil del susodicho se perdía a lo lejos.
–Todo con calma, que nunca se nos ha escapado una presa- dijo otro burlonamente a la vez que se frotaba las manos.
-¿Estas seguro que allí dentro hay alguien y que no nos toparemos con una casa vacía, Brad?- preguntó de manera desconfiada un tercero.
-¿me tomas por idiota?, ¡claro que allí hay alguien! Yo oí que... – fue interrumpido.
-Varios rumores afirman que Shirou esta comprometido, siempre he querido cerciorarme si estos son verdad- rió maliciosamente, los otros dos lo imitaron.
-Conociendo los gustos de Shirou, ella ha de ser muy bonita- de las sombras salió un hombre alto de pelo rubio con un pañuelo color carmesí en la cabeza llevaba puesta una gabardina negra, pantalones y zapatos del mismo color.
–Lástima que tengamos que eliminarla- se mostró otro hombre de larga cabellera color azabache con el mismo vestuario que el anterior.
–Si, en verdad es una pena- dijo un tipo de pelo color naranja que llevaba gafas oscuras cubriéndole los ojos, sus ropas no diferían de las de sus amigos.
–¡Manos a la obra!- gritaron los tres al unísono mientras se dirigían a toda prisa en dirección hacia la gran casa.
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Koiichi se encontraba frente al espejo de cuerpo entero que tenía en su habitación, listo para recibir a su invitado; llevaba un atuendo conformado por un sweater blanco, pantalón color beige y sus eternas zapatillas deportivas blancas.
-Hmmm..... ¿qué tal Kameko?- se giró hacia el animal pidiendo su opinión –Jajajaja... – tomó a su mascota entre sus manos y la elevó a lo alto. Tarareando una canción se puso a girar con la tortuga -¡Yuki vendrá, Kameko!, ¡Yuki vendrá!..... oh oh- detuvo en seco su baile percatándose de algo -¡NO HE DESAYUNADO!-
Dejó a Kameko en su espacio de la recámara y salió corriendo rápidamente a la cocina para preparar lo que sería su desayuno.
Algunos minutos después.....
Vestía un lindo delantal blanco sobre la ropa que tenía puesta, no quería que su traje se estropeara para cuando llegara el joven de ojos dorados, por nada del mundo se permitiría eso. Batía contento la mezcla para unos waffles, el estómago le gruñía demostrando cuán hambriento estaba, entre la alegría del momento inconscientemente se puso a cantar...
"Toumei ga yozora somete
hitori aruku itsumo no kaerimichi
Kuchizusamu konna kimochi
nemuru kimi ni todoketai na OH... UM...
Nanika ni obieteru jibun ga chotto iya ni naru
tsugeru omoi torinokoshita hibi ni...
dokoka ni wasureteru kokoro ga chotto itakunaru
toki wo tsunagu hoshi no yoru ni kimi wo sagashiteru...."
(NA: la canción es Anti-Nostalgic n.n)
Su canción había terminado y un confundido Koiichi se rascaba la cabeza en señal de confusión.
-etto... ¿qué fue eso?- la letra de esa extraña melodía rondaba su mente y él desconocía las razones -... es como si... como si ya la conociera...- se detuvo a meditar cruzándose de brazos, su rostro denotaba seriedad –bueno, no sé de qué me preocupo, de seguro ya la conocía y con el accidente también se me olvidó..... ¡un momento!..... eso puede significar que... ¡¡¡¡¡¡¡QUE YA ESTOY RECUPERANDO LA MEMORIA!!!!!!!- gritó con todas las fuerzas que tenía, los ojos se le tornaron vidriosos y una gran sonrisa se dibujó en su rostro, eso era un gran progreso.
Estaba en una especie de shock cuando la hermosa melodía del timbre llamó su atención.
-Ah!, es Yuki- dejó el preparado cociéndose en la wafflera y corrió a su habitación para ir en busca del regalo que le diera el rubio la noche pasada. Cogió al conejito rosa abrazándolo cariñosamente cuando en nuevo sonar del timbre lo hizo reaccionar.
-¡AY!- volteó hacia su mascota que retozaba en el agua de su "casita" -¿Me acompañas Kame-chan?.... ¿no?, bueno tú te lo pierdes.... adioooos- se despidió para dirigirse al encuentro con su amigo.
Iba a tomar la perilla de la puerta cuando se dio cuenta de que algo andaba mal -¡¡¡OH NO!!!.......... ¡Qué tonto!, ¡por poco y salgo con delantal!- se rió de sí mismo dándose un pequeño golpecito en la cabeza para luego proceder a quitárselo. Sin más problemas se dirigió hasta la puerta y la abrió - Hola Yu...-
No pudo terminar la frase, sin tiempo para reaccionar ante esa situación se vio arrinconado contra la pared, un pañuelo cubría su boca y nariz, poco a poco se fue sumiendo en un profundo sueño a la vez que sus párpados caían lentamente ocultando sus ojos violetas, estaba perdiendo el sentido.
-Esto fue muy fácil- dijo el hombre rubio que entraba por la puerta seguido del moreno.
-Si- dijo el sujeto de cabellera naranja que tenía en brazos al chico desmayado.
-Y... ¿esa es la pareja del señor Shirou?- dijo el joven de pelo oscuro acercándose hacia el aludido –creí que sería una chica...- suspiró decepcionado.
-Yo también, pero debo admitir que este niño... no está nada mal- añadió el rubio acariciando la tersa piel del rostro joven del pelirrosa.
-¡No lo toques J.J.!- reprochó el sujeto de gafas apartando de un golpe la mano de su amigo.
-Vamos Mike, no seas amargado, ¿qué no podemos divertirnos nunca en el trabajo?-
El aludido suspiró pesadamente y asintió con la cabeza –Pero sólo un momento ¿oíste?, que se supone ya deberíamos estar en medio camino hacía el escondite- le extendió al pequeño.
El rubio al tenerlo en brazos sonrió maliciosamente -¿No me acompañas, Brad?- preguntó a su colega.
-No estoy de humor para juegos J.J. y creo que no tenemos tiempo, puedes hacer este tipo de cosas cuando lleguemos con el jefe. Debemos ser cautelosos, ¿qué tal si a Shirou le da por regresar?- apeló el moreno con mirada de fastidio.
-Brad tiene razón, J.J. es hora de irnos- apoyó el joven de pelo naranja.
-Pero tú me dijiste que...-
-Nada de peros, ¡ya oíste!- dijo el hombre al momento de salir.
-Bueno... –hizo una mueca de fastidio, pero al centrar su mirada nuevamente en el chico esta se transformó en una sonrisa –pero antes... – acercó su rostro al del más joven besándolo en el acto.
-¡Que te apresures J.J.!- increpó el joven de nombre Brad que permanecía de brazos cruzados admirando la escena.
-Ahh... – dio un largo suspiro al momento de liberar los labios del muchacho -... que delicia!, no sabes de lo que te perdiste Brad-
-Bah!- el moreno dio media vuelta y salió del lugar.
-¡Amargado!- le sacó la lengua -¿nos vamos cariño?- dijo volteándose hacia Koiichi a quién cargó en brazos y sacó de allí.
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-¡Maldita sea!, voy a llegar tarde y todo por culpa de esa estúpida lavadora –Yuki recordaba el incidente, quería lavar su ropa, pero al parecer la máquina había perdido el control y terminó expulsando todas sus prendas en diferentes direcciones, con eso su trabajo se había triplicado -¡Rayos!... ¿ah?- el escritor miraba extrañado como un automóvil salía a toda velocidad de la casa del pelirrosa, sin embargo, le restó importancia y siguió conduciendo hacia el interior de la mansión.
Estacionó sin novedad su coche y se dirigió hacia la entrada de la casa, grande fue su sorpresa al encontrar la puerta de ésta abierta. Al ingresar pudo sentir el humo que venía desde la cocina, corrió hacia allí pensando que encontraría a su pequeño en algún tipo de problema.
Lo único que halló fue el incendio que se había originado con una especie de corto circuito en la wafflera, con algo de dificultad consiguió apagarlo. Desesperadamente buscó a Shuichi por todos lados, mas no lo encontró.
-¡KOIICHI!, ¿DÓNDE ESTÁS? SOY YO, YUKI- no había respuesta, fue a la habitación del pequeño y solamente estaba su mascota. Bajó las escaleras... nada.
Estaba por rendirse cuando vislumbró algo en el piso, lentamente se acercó hasta levantar lo que era el conejo de peluche que le había regalado, rápidamente recordó lo sucedido momentos atrás, como ése coche se alejaba a toda prisa del lugar, como si intentaran huir.
-No puede ser... – Yuki sudó frío, finalmente lo había entendido, en ése coche se llevaban al muchacho y él no lo impidió, tenía las posibilidades, pero no lo hizo –K'uso!!-
A toda prisa salió del lugar, subió al coche y arrancó, pisó el acelerador a la máxima velocidad que podía. A un costado suyo descansaba el muñeco rosa, recordándole lo estúpido que había sido.
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Abrió los ojos lentamente, sin embargo, no veía nada en absoluto, el lugar en el que se encontraba en completa penumbra. Sólo un pequeño rayo de luz ingresaba por una de las esquinas.
Intentó ponerse de pie, pero se dio cuenta que sería imposible, al parecer estaba atado a una silla, lo único que tenía libre era la cabeza y eso no era de mucha ayuda.
Con el tiempo sus ojos se acostumbraron a la oscuridad y pudo distinguir algunas siluetas que allí se encontraban, al parecer eran niños, habían algunos que tenían aproximadamente la misma edad que él y otros que eran mucho menores, se preguntaba a qué lugar lo habían llevado.
Los ojos grises de uno de esos chicos no dejaban de verlo, Koiichi también se quedó mirándole hasta que finalmente articuló palabra.
-Hola, que... qué lugar es este?- preguntó suavemente para no asustar al muchacho.
-...... – el chico seguía en silencio pero nunca apartó la mirada de los ojos violeta, ni siquiera parpadeaba, sus grises ojos no expresaban ningún tipo de sentimiento, no poseía ese brillo, era como si estuviera muerto.
-qué sucede... - murmuró para sí, en ése preciso instante la puerta del lugar se abrió, seguido de las luces que se encendieron repentinamente lastimando por breves instante sus ojos, varios hombres ingresaron hasta rodearlo.
-Así que tú eres el chiquillo que Shirou protege tanto ¿verdad?- preguntó el mayor de todos ellos, para ser más precisos el hombre que estaba con Shirou la otra noche. Koiichi sólo atinó a mirarle con desprecio, no sabía por qué, pero no se fiaba de ese hombre –no me mires de esa manera o te va a pesar!- advirtió enérgicamente.
-¿Por qué me trajeron aquí?, ¡Quiero que me lleven de vuelta a mi casa ahora mismo!- ordenó el pequeño.
-Creo que Shirou te ha malcriado demasiado niño, eres tan altanero como él, ahhh.... – dio un largo suspiro, pero nuevamente habló -¿quieres saber por qué te trajimos aquí?... no pienso esconderlo, es mas te lo diré, en un principio pensaba matarte, pero ahora que te veo mejor... puedes serme de mucha utilidad- sonrió de manera maliciosa.
-¡No pienso ayudarle en nada!, ¡QUIERO QUE ME LLEVEN A MI CASA!- repitió nuevamente queriendo moverse pero las cuerdas atadas en sus manos y piernas se lo impedían.
-No soy ningún tonto, puedo ganar mucho dinero contigo, mocoso, varios pagarían lo que fuera por tenerte mínimamente una noche... – sonrió malévolamente extendiendo el dedo índice y fue dibujando con la yema de éste los perfectos labios del pelirrosa – y además... ¡¡AHHHH!!- un grito de dolor salió de boca del hombre mayor al ser mordido en dicho dedo por el joven, reaccionó estrellando su puño contra cara del muchacho -¡¡MALDITO BASTARDO!!, ¡¡TE ARREPENTIRÁS!!-
Koiichi levantó la mirada nuevamente, desafiante ante sus captores, el mismo ignoraba de dónde le venía aquella fuerza y determinación –Shirou-kun vendrá a salvarme- afirmó decidido.
-¿A salvarte?, si es el principal responsable de que estés aquí, pequeño idiota nadie te puede salvar- hizo una seña con la mano y un hombre que tenía una jeringa entre los dedos se acercó hasta quedar frente al pequeño –aplícasela- mandó.
-¿QUÉ?, no... NO SE ME ACERQUÉ!!- el pelirrosa pudo sentir la aguja que se incrustaba en la piel de su antebrazo, vertiendo el extraño líquido en su interior.
-Ese es mi método para ganar tu obediencia, no te preocupes, la droga te hace sentir mejor-
-¡¡¿¿DROGA??!!- preguntó incrédulo Koiichi antes de comenzar a sentirse raro, extrañamente mareado, las imágenes frente a sus ojos parecían disolverse.
-Todos estos niños trabajan para mí y ahora tú no eres la excepción jajajajaja- rió maniáticamente al momento de disponerse a salir, mas a unos cuantos pasos de la puerta se detuvo –desátenlo- dijo finalmente y continuó con su camino.
-Si- respondió el sujeto que momentos atrás había suministrado la sustancia. Koiichi cayó bruscamente de la silla y arrastrándose intentó salir de allí -¿No oíste niño?, tendrás una larga estancia aquí, ¡así que acostúmbrate!, puedes comenzar haciendo amistades, jajaja- carcajeó y mirando una última vez de reojo al muchacho cerró la pesada puerta.
-Yuki... ayúdame... – extendió débilmente una mano hacia donde veía imaginariamente al rubio –Yuki..... - y perdió la conciencia.
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El motor del Mercedes negro se rindió tras largas horas de persecución, Yuki lleno de ira se dejó caer pesadamente sobre el volante.
-¡¡RAYOS, SOY UN IDIOTA!!- se increpó golpeándose sucesivas veces la cabeza en el aro delante de él –Shuichi, si te hacen algo malo yo... yo... – salió cabizbajo del coche, aunque la carretera estaba desierta y el sol era bastante fuerte, sus deseos por encontrar al pelirrosa podían aún más.
Caminó y caminó, ningún lugar, ninguna persona a la cual preguntar del paradero de ése automóvil, sólo la angustia y la incertidumbre crecían en su interior.
Finalmente lo entendió, no podía hacer nada, no por el momento y mucho menos en ése estado, necesitaba calmarse y meditar cada instante desde que llegó a la mansión.
Las escenas se mostraban como un rompecabezas, por el bien de Shuichi y por el suyo "tenía" que recordar.
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Ya era cerca de media noche. Shirou se encontraba conduciendo de vuelta a su casa, tenía unas extrañas punzadas en el pecho, se sentía incómodo, por esa razón pensó que lo mejor sería descansar en casa, acompañado de su pequeño. Repentinamente su celular sonó.
-¿Hola?- habló cortésmente.
-Shirou... ¿Qué se siente perder lo que más quieres?- dijo la voz desconocida del otro lado de la línea.
-¿Quién es?, no estoy de humor para bromas- dicho esto colgó.
Segundos más tarde el repiqueteo del móvil volvió a hacerse presente. Dudando en si debía hacer caso o no, tomó la máquina en sus manos y contestó.
-¿Sí?- inquirió dubitante.
-Eso estuvo muy mal Shirou, ¿dónde quedaron tus modales?- preguntó sarcásticamente la desconocida voz.
-Tú de nuevo, ¡ya déjame en paz!- estaba a punto de colgar nuevamente cuando la voz lo detuvo.
-Ah ah, no intentes siquiera querer colgarme, sino él la pagará- amenazó.
Los ojos de Shirou se mostraron enormes de sorpresa -¿él...?- preguntó temeroso parando el auto en seco, rogaba estar equivocado, que la idea que pasaba por su mente fuera una mentira.
-¿no lo recuerdas?, pues si es así yo te refrescaré la memoria- se adelanto a la respuesta del moreno -es un lindo niño de largo cabello rosado, su piel es tersa y suave, sus ojos son como dos hermosos diamantes color violeta y su.... –
-¡¡CALLATE!!, ¡¡¿¿QUÉ LE HICISTE A KOIICHI??!!- la desesperación se apoderó del joven, su amado Koiichi podía estar muerto, las imágenes de todos los bellos momentos a su lado pasaban por su mente torturándolo aún más.
-¡Diste en el clavo!, ahora sabrás que soy Clark, de quien te burlaste y a quien pisoteaste, ¡mira! ahora se invierten los papeles-
-Te daré todo lo que quieras, pero por favor... no le hagas daño...- rogó con la voz entrecortada, de sus ojos celestes escapaban algunas lágrimas, no se sintió de esa manera desde la muerte de su verdadero amor. Ahora lo entendía, estaba enamorado igual o mucho más que antes, no podía perder nuevamente a su ser más preciado, iba a llegar hasta las últimas consecuencias.
-Todo lo que quiero es verte humillado, que te arrepientas de todo lo que me hiciste, ¡que te arrodilles ante mi como el perro que eres!, ¿qué dices?... o tu orgullo puede mucho más para no rebajarte de ésa manera, ¿dejaras que ese niño se muera?-
-Lo haré... haré lo que me pides...- el hombre mayor quedó atónito, esperaba otra respuesta por parte de su interlocutor, ¿tanto valía ese chico para él? -¿Dónde lo tienes?, iré ahora mismo- añadió.
Clark salió de su asombro, ahora que sabía de la importancia del muchacho haría sufrir mucho más a su enemigo -No es tan fácil Shirou- dijo en un suspiro -quiero verte sufrir y créeme tengo la manera de hacerlo-
-¡BASTARDO!, si le pones un dedo encima yo... – la voz del hombre lo interrumpió.
-No hables de más Shirou, ya te dije que el que pagará las consecuencias de tus actos será el chico- señaló, Shirou obedeció, no tenía opción -No te preocupes, si te portas bien... lo verás más pronto de lo que imaginas-
-¡¿CUÁNDO?!-
-Eso lo decido yo, adiós Shirou- se despidió burlonamente y colgó.
-¡¡KOIICHI, NO!!- gritó furioso, la ira lo invadió por completo.
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La oscuridad había vuelto, estaba peor con cada minuto que pasaba, ya no sentía su cuerpo, lo único que sabía es que se encontraba hecho ovillo en una de las esquinas, temía lo que pudiera pasarle.
El rechinido de la puerta metálica lo alarmó, la oscuridad le impedía ver de quién se trataba, sólo sentía los pasos que se acercaban cada vez más. Por un momento pensó que se trataría de Shirou.
La tenue luz de la luna que se adentraba por el pequeño hoyito de una de las altas esquinas develó el rubio cabello de esa persona.
-¿Yuki...?- preguntó suavemente, no podía verse el rostro de ese joven, pero su silueta se parecía mucho a la de su amigo, rogó al cielo por que fuera él -¿Yuki... eres tu...?- volvió a preguntar intentando sonreír levemente.
Súbitamente sintió las manos de ése sujeto tomar sus hombros con delicadeza. Koiichi sonrió aún más... podía ser Yuki. De pronto el suave agarre se fue transformando en uno violento que de golpe lo levantaba hasta ponerlo en pie.
-Es mucho mejor tenerte despierto... – el hombre que ahora lo tenía abrazado habló con tono lascivo en el oído del pelirrosa.
-Tu... tu no eres Yuki... –replicó el muchacho ya intentando forcejear con el rubio, sin embargo, sus fuerzas no eran suficientes.
-No tengo idea quien pueda ser el tal Yuki, a mi me llaman J.J., no debes recordarme pues estabas inconsciente cuando nos conocimos, ahora he venido para presentarme como es debido... - lamió el lóbulo de la oreja del joven. Koiichi sólo tenía en mente escapar, pero el abrazo posesivo era mucho para él -¿no quieres jugar conmigo?, que pena... tengo malas noticias para ti, esta noche serás mío, no puedes resistirte....¡OH!, ya se cual es tu problema, este lugar es muy sucio para alguien como tú, por eso tengo planeado llevarte a mi habitación, ¿qué dices?-
El pelirrosa con las pocas fuerzas que le quedaban golpeaba el pecho del rubio, mas este ni se inmutaba –No quiero... – suplicó.
Apretó más la cintura del joven ocasionando que sus cuerpos estuvieran muy pegados, J.J. se excitó aún más con semejante contacto y sin previo aviso lo cargó en brazos.
-Ya no puedo esperar... – Koiichi pataleó intentando zafarse pero todos sus intentos eran vanos, lloró silenciosamente, no podría escapar.
CONTINUARÁ.....
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NOTAS DE AMAI: ¡Oh, vaya! (Amai esta en estado de shock)..... soy muy malaaaaa, snif!, ¿pero qué puedo hacer?, la historia tiene que ser así, así la creó mi enferma mente y así debe escribirse u-u. Ahora... ejem... oo ¿el próximo capítulo será lemon?, ¡Ay, no!, si es lemon será el primero que escriba en toda la historia de mi vida (que por cierto no es mucha) T-T.
¿Cómo va la historia hasta ahora?, quiero saber lo que piensan de ella, por eso no duden en dejar aunque un pequeñito review que no les cuesta nada. Estoy en exámenes así que no tengo mucho tiempo para escribir, pero ya saben si hay reviews puedo hacer la excepción (ojalá así sea ¬¬).
Siempre hablo... no, en este caso "escribo" de más, por eso para no cansarlas más me voy a responder reviews.
Zafiro:: Lo bueno es que te tomes la molestia de dejar review, arigatou, espero que no te pierdas y gracias por los ánimos, no había pensado en llegar a los 200, SERIA GENIAL!!!.
nat-chan07:: ¿Yuki jugando Pump it up?, eso sería cuando el infierno se congelara XD jajajaja, ¿no crees?. PD: Sip, se lo va a tirar XDDD, pero no tan pronto!!.
Haruka:: ¡Acertaste!, la venganza esta muy asquerosa, he leído libros de mafia y yakuzas, tanto que creo que me he traumado °-°, pero aún así tengo que seguir, que esto todavía no se acaba.
Akia Nekoi:: Tus corazonadas son perfectas!, la calma es preludio a los problemas, pobre de mi Shuuuuu (que mala soy a veces! (). Con respecto al final variado necesito una aclaración, gomen, no entiendo, espero que me expliques. Byeee y me gustó la rima Amai-sempai (nótese que ambas terminan en "ai" jajajjaa)
BISHOUJO HENTAI:: Por el momento no te preocupes, Shuichi no sabe nada nadita.-------Amai llevaba alrededor de 2 horas esperando a que Yuki despertara, esto comenzaba a irritarla. Amai: Creo que Bi Hen se pasó con los somníferos (sacude a Yuki quien no da señales de vida) ¡RAYOS! y cómo se supone que disfrute de Yuki si le da por dormir, bueno, paciencia Amai, paciencia, seguro que de un momento a otro despierta y después... (espacio no apto para menores)... ahhhh pronto Yuki pronto, por el momento a prepararme. Amai busca la ducha, necesitaba estar hermosa para su rubio escritor. Yuki: (roncando) Amai: Ahora vengo Yuki-sama. Yuki: (al notar que Amai ya no está y abriendo levemente el ojo derecho)... jejeje, que ingenua es.
Eli-chan1:: Ruego hacer caso de tus ruegos, que si no cumplo tus ruegos, me salen más ruegos y con tantos ruegos sólo ruego porque estos ruegos no sean los mismos ruegos que los otros ruegos. (¿alguien entendió? O.o... porque yo no XDDD). Yo actualizo muy rápido...creo, me alegra que te este gustando y Shuichi si esta sufriendo, espero no tener que escribir lemon para el otro. ¿QUÉ DICEN TODAS?, veamos que me dicen, pero la verdad no sé. PD: Ruega porque tus ruegos por Shuichi hagan efecto. PD2: Me cansé de decir "ruego" XDDDD. Bye no da.
Kiara Fujimuya:: ¿Tengo gran imaginación? T-T ARIGATOU, ahora sé que no es locura, gracias por las palabras de ánimo, es gracias a ustedes que me dan ganas de escribir. PD: Dime en cuáles son tus historias específicamente y las leo con mucho gusto n.n. Byeeeeee.
Selene Sumeragi:: Si, pobre Shirou, tengo que admitir, si hizo muy mal en llevarse a Shuichi, por eso Yuki sufre!!! Y con lo que le están haciendo ahora, NOOOOO (a Amai le da por golpearse la cabeza con el monitor).... ejem.... un momento de locura pasajera (Yuki: Siempre le dan). Gracias por dejar reviews pasados, me encanta leerlos. Ja ne.
Cerdo Volador:: XDDDD, gomen, no me aguanto la risa. Bueno ahora ya serias, tengo que conseguirme ése scanner ¬¬ aunque tenga que usar medidas drásticas. Y aunque no me creas hasta ahora no he visto ni leído NADA de Harry Potter, ni una sola de sus películas (¿la razón?, yo misma la desconozco), espero animarme un día de estos. Sayonara, gracias por dejar review!.
litaotk44:: Sip, pudes decirme Amai-chan, estamos en confianza,, y mala, pero Shirou se lo merece, lo malo es que quien paga los platos rotos es Shuichi!!!. Bye y gracias por continuar tu historia. Ja ne
yukino:: Por el momento no, gomen u-u, pero si le van a hacer daño a Shuichi como ya leíste y por ende Yuki va a sufrir, ya que Shu-chan es su vida T-T, ay! que lindos. Gracias, no se me había pasado por la cabeza hacer un fic original de la vida de Koiichi y Shirou, pero ahora que me lo pones a pensar, no es mala idea!!!. Sayonara nanoda!
Dary Kyana:: ¿tu peke?, oye ¬¬ es el mío!, jajaja, ya me han dicho que soy posesiva y estas en lo cierto, no te voy a hacer caso, gomen pero así tiene que ir la historia, gracias por el apoyo. Te digo lo mismo qque a Yukino, lo del fic original lo estoy pensando, GRACIAS POR ILUMINARME!!!
Chihiro:: Tambien me encanta que me dejen review, y como dijo mi amiga Zafiro, ojalá llegué a los 200!!.
Angy Kohai:: No, gracias a ti por molestarte en dejar review, gracias a todas!!!.
Como que escribo mucho, ne?, ahora me voy a responder a las chicas del correo:
Claudia-chan (Arigatou nano da, compadézcanse de Shu-chan), Palagata, Natalia (Con esta te desmayas), Mika Sakuma (Cada vez estoy más mala, y me ensaño con el kawaii de Shu), zzagide (Estoy en busca del dichoso scanner), Selpelin (Creo que finalmente tu sueño se hará realidad, quizá haga el lemon que tanto quieres) Tifanny-chan chibigirlhentai (Tu al igual que Selpelin están locas y ahora se salieron con la suya, ¿voy a escribir un lemon?), Pares, pricesserenity (no es nada), Norikokuchan (Siempre gracias) y Cristal-san (ya recuperará la memoria.... supongo :S)
Y la FÓRMULA DE LA ESCRITORA FELIZ: Escritora presionada con montón de reviews = ¡Capítulos largos y actualizados con rapidez! (¬¬ si no quiero morir debe ser así).
Bien, hasta el 15, que "esperemos" llegue rápido, y si no es así tengan piedad ( y deséenme suerte en mis pruebas. Bye bye nano da, ARIGATOU OTRA VEZ!!!. Ja ne! (
NOTA: Para seguir la corriente a la historia llamo a Shuichi con su nombre provisional: Koiichi. Y creo que con Yuki no hay problemas ya que solamente es el apellido. Sin más inconvenientes vamos al fic.
CAPÍTULO 14: OJO POR OJO.
En el capítulo anterior:
Ya muy lejos de sus ahora enemigos decidió detenerse. Su orgullo había sido pisoteado por un joven sin experiencia, jamás olvidaría esta humillación, le haría tragarse todas y cada una de sus palabras. Quería verlo arrastrándose ante él pidiendo disculpas, besando el suelo por el que caminara, haría pagar su insolencia.
-Estoy seguro de que tienes un punto débil Shirou... y yo voy a encontrarlo- frunció el ceño en un gesto de ira a la vez que volvía a retomar sus pasos –ojo por ojo... diente por diente... – fueron sus ultimas palabras antes de desaparecer entre la niebla.
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La fuerte voz de Shirou se escuchaba como cada mañana, completando así su rutina.
-¡¡¡KO-CHAN, YA ME VOY!!!-
La frase fue seguida por el sonido de los pasitos apresurados del muchacho bajando las escaleras a toda velocidad, respondiendo así al llamado del otro joven.
-Ah... Ah... –había llegado frente a él, respiraba jadeante, apoyando ambas manos en sus rodillas y con el cuerpo inclinado –Ah... Shi-kun, cuídate... mucho... - se enderezó rápidamente para dedicarle una sonrisa.
-Tu también Ko-chan- extendió una mano para acariciar el pelo rosa del pequeño. Aprovechó que su mano se encontraba en la cabeza del joven para tomarlo de la nuca y acercarlo, depositando en sus labios un suave beso que se rompió con la misma rapidez con la que vino –vete a desayunar...- susurró cerca de su oído.
-Ah... ¡HAI!- contestó animadamente después de salir del trance en el que se encontraba a causa del beso de su amante.
-Ja ne... –dijo el moreno al momento de darse media vuelta e ir en dirección a la puerta principal, levantando una mano en señal de despedida.
-¡Sayonara!- sonrió con los ojos entrecerrados y las manos entrelazadas en su espalda.
La puerta se cerró dejando a Koiichi nuevamente solo, pero esta historia no era la misma, no estaba solo por completo, ahora tenía un amigo a quien quería bastante y en el que confiaba plenamente.
-Ah, eso me recuerda- se había olvidado por completo que Yuki lo visitaría y al recordarlo salió disparado rumbo a su habitación.
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Tres sombras se movían con mucha cautela entre los arbustos de la gran mansión, su objetivo era fijo: "Buscar venganza"
–Shirou ya se ha marchado, ¡es el momento!- habló la voz chillona de un hombre mientras veía como el automóvil del susodicho se perdía a lo lejos.
–Todo con calma, que nunca se nos ha escapado una presa- dijo otro burlonamente a la vez que se frotaba las manos.
-¿Estas seguro que allí dentro hay alguien y que no nos toparemos con una casa vacía, Brad?- preguntó de manera desconfiada un tercero.
-¿me tomas por idiota?, ¡claro que allí hay alguien! Yo oí que... – fue interrumpido.
-Varios rumores afirman que Shirou esta comprometido, siempre he querido cerciorarme si estos son verdad- rió maliciosamente, los otros dos lo imitaron.
-Conociendo los gustos de Shirou, ella ha de ser muy bonita- de las sombras salió un hombre alto de pelo rubio con un pañuelo color carmesí en la cabeza llevaba puesta una gabardina negra, pantalones y zapatos del mismo color.
–Lástima que tengamos que eliminarla- se mostró otro hombre de larga cabellera color azabache con el mismo vestuario que el anterior.
–Si, en verdad es una pena- dijo un tipo de pelo color naranja que llevaba gafas oscuras cubriéndole los ojos, sus ropas no diferían de las de sus amigos.
–¡Manos a la obra!- gritaron los tres al unísono mientras se dirigían a toda prisa en dirección hacia la gran casa.
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Koiichi se encontraba frente al espejo de cuerpo entero que tenía en su habitación, listo para recibir a su invitado; llevaba un atuendo conformado por un sweater blanco, pantalón color beige y sus eternas zapatillas deportivas blancas.
-Hmmm..... ¿qué tal Kameko?- se giró hacia el animal pidiendo su opinión –Jajajaja... – tomó a su mascota entre sus manos y la elevó a lo alto. Tarareando una canción se puso a girar con la tortuga -¡Yuki vendrá, Kameko!, ¡Yuki vendrá!..... oh oh- detuvo en seco su baile percatándose de algo -¡NO HE DESAYUNADO!-
Dejó a Kameko en su espacio de la recámara y salió corriendo rápidamente a la cocina para preparar lo que sería su desayuno.
Algunos minutos después.....
Vestía un lindo delantal blanco sobre la ropa que tenía puesta, no quería que su traje se estropeara para cuando llegara el joven de ojos dorados, por nada del mundo se permitiría eso. Batía contento la mezcla para unos waffles, el estómago le gruñía demostrando cuán hambriento estaba, entre la alegría del momento inconscientemente se puso a cantar...
"Toumei ga yozora somete
hitori aruku itsumo no kaerimichi
Kuchizusamu konna kimochi
nemuru kimi ni todoketai na OH... UM...
Nanika ni obieteru jibun ga chotto iya ni naru
tsugeru omoi torinokoshita hibi ni...
dokoka ni wasureteru kokoro ga chotto itakunaru
toki wo tsunagu hoshi no yoru ni kimi wo sagashiteru...."
(NA: la canción es Anti-Nostalgic n.n)
Su canción había terminado y un confundido Koiichi se rascaba la cabeza en señal de confusión.
-etto... ¿qué fue eso?- la letra de esa extraña melodía rondaba su mente y él desconocía las razones -... es como si... como si ya la conociera...- se detuvo a meditar cruzándose de brazos, su rostro denotaba seriedad –bueno, no sé de qué me preocupo, de seguro ya la conocía y con el accidente también se me olvidó..... ¡un momento!..... eso puede significar que... ¡¡¡¡¡¡¡QUE YA ESTOY RECUPERANDO LA MEMORIA!!!!!!!- gritó con todas las fuerzas que tenía, los ojos se le tornaron vidriosos y una gran sonrisa se dibujó en su rostro, eso era un gran progreso.
Estaba en una especie de shock cuando la hermosa melodía del timbre llamó su atención.
-Ah!, es Yuki- dejó el preparado cociéndose en la wafflera y corrió a su habitación para ir en busca del regalo que le diera el rubio la noche pasada. Cogió al conejito rosa abrazándolo cariñosamente cuando en nuevo sonar del timbre lo hizo reaccionar.
-¡AY!- volteó hacia su mascota que retozaba en el agua de su "casita" -¿Me acompañas Kame-chan?.... ¿no?, bueno tú te lo pierdes.... adioooos- se despidió para dirigirse al encuentro con su amigo.
Iba a tomar la perilla de la puerta cuando se dio cuenta de que algo andaba mal -¡¡¡OH NO!!!.......... ¡Qué tonto!, ¡por poco y salgo con delantal!- se rió de sí mismo dándose un pequeño golpecito en la cabeza para luego proceder a quitárselo. Sin más problemas se dirigió hasta la puerta y la abrió - Hola Yu...-
No pudo terminar la frase, sin tiempo para reaccionar ante esa situación se vio arrinconado contra la pared, un pañuelo cubría su boca y nariz, poco a poco se fue sumiendo en un profundo sueño a la vez que sus párpados caían lentamente ocultando sus ojos violetas, estaba perdiendo el sentido.
-Esto fue muy fácil- dijo el hombre rubio que entraba por la puerta seguido del moreno.
-Si- dijo el sujeto de cabellera naranja que tenía en brazos al chico desmayado.
-Y... ¿esa es la pareja del señor Shirou?- dijo el joven de pelo oscuro acercándose hacia el aludido –creí que sería una chica...- suspiró decepcionado.
-Yo también, pero debo admitir que este niño... no está nada mal- añadió el rubio acariciando la tersa piel del rostro joven del pelirrosa.
-¡No lo toques J.J.!- reprochó el sujeto de gafas apartando de un golpe la mano de su amigo.
-Vamos Mike, no seas amargado, ¿qué no podemos divertirnos nunca en el trabajo?-
El aludido suspiró pesadamente y asintió con la cabeza –Pero sólo un momento ¿oíste?, que se supone ya deberíamos estar en medio camino hacía el escondite- le extendió al pequeño.
El rubio al tenerlo en brazos sonrió maliciosamente -¿No me acompañas, Brad?- preguntó a su colega.
-No estoy de humor para juegos J.J. y creo que no tenemos tiempo, puedes hacer este tipo de cosas cuando lleguemos con el jefe. Debemos ser cautelosos, ¿qué tal si a Shirou le da por regresar?- apeló el moreno con mirada de fastidio.
-Brad tiene razón, J.J. es hora de irnos- apoyó el joven de pelo naranja.
-Pero tú me dijiste que...-
-Nada de peros, ¡ya oíste!- dijo el hombre al momento de salir.
-Bueno... –hizo una mueca de fastidio, pero al centrar su mirada nuevamente en el chico esta se transformó en una sonrisa –pero antes... – acercó su rostro al del más joven besándolo en el acto.
-¡Que te apresures J.J.!- increpó el joven de nombre Brad que permanecía de brazos cruzados admirando la escena.
-Ahh... – dio un largo suspiro al momento de liberar los labios del muchacho -... que delicia!, no sabes de lo que te perdiste Brad-
-Bah!- el moreno dio media vuelta y salió del lugar.
-¡Amargado!- le sacó la lengua -¿nos vamos cariño?- dijo volteándose hacia Koiichi a quién cargó en brazos y sacó de allí.
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-¡Maldita sea!, voy a llegar tarde y todo por culpa de esa estúpida lavadora –Yuki recordaba el incidente, quería lavar su ropa, pero al parecer la máquina había perdido el control y terminó expulsando todas sus prendas en diferentes direcciones, con eso su trabajo se había triplicado -¡Rayos!... ¿ah?- el escritor miraba extrañado como un automóvil salía a toda velocidad de la casa del pelirrosa, sin embargo, le restó importancia y siguió conduciendo hacia el interior de la mansión.
Estacionó sin novedad su coche y se dirigió hacia la entrada de la casa, grande fue su sorpresa al encontrar la puerta de ésta abierta. Al ingresar pudo sentir el humo que venía desde la cocina, corrió hacia allí pensando que encontraría a su pequeño en algún tipo de problema.
Lo único que halló fue el incendio que se había originado con una especie de corto circuito en la wafflera, con algo de dificultad consiguió apagarlo. Desesperadamente buscó a Shuichi por todos lados, mas no lo encontró.
-¡KOIICHI!, ¿DÓNDE ESTÁS? SOY YO, YUKI- no había respuesta, fue a la habitación del pequeño y solamente estaba su mascota. Bajó las escaleras... nada.
Estaba por rendirse cuando vislumbró algo en el piso, lentamente se acercó hasta levantar lo que era el conejo de peluche que le había regalado, rápidamente recordó lo sucedido momentos atrás, como ése coche se alejaba a toda prisa del lugar, como si intentaran huir.
-No puede ser... – Yuki sudó frío, finalmente lo había entendido, en ése coche se llevaban al muchacho y él no lo impidió, tenía las posibilidades, pero no lo hizo –K'uso!!-
A toda prisa salió del lugar, subió al coche y arrancó, pisó el acelerador a la máxima velocidad que podía. A un costado suyo descansaba el muñeco rosa, recordándole lo estúpido que había sido.
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Abrió los ojos lentamente, sin embargo, no veía nada en absoluto, el lugar en el que se encontraba en completa penumbra. Sólo un pequeño rayo de luz ingresaba por una de las esquinas.
Intentó ponerse de pie, pero se dio cuenta que sería imposible, al parecer estaba atado a una silla, lo único que tenía libre era la cabeza y eso no era de mucha ayuda.
Con el tiempo sus ojos se acostumbraron a la oscuridad y pudo distinguir algunas siluetas que allí se encontraban, al parecer eran niños, habían algunos que tenían aproximadamente la misma edad que él y otros que eran mucho menores, se preguntaba a qué lugar lo habían llevado.
Los ojos grises de uno de esos chicos no dejaban de verlo, Koiichi también se quedó mirándole hasta que finalmente articuló palabra.
-Hola, que... qué lugar es este?- preguntó suavemente para no asustar al muchacho.
-...... – el chico seguía en silencio pero nunca apartó la mirada de los ojos violeta, ni siquiera parpadeaba, sus grises ojos no expresaban ningún tipo de sentimiento, no poseía ese brillo, era como si estuviera muerto.
-qué sucede... - murmuró para sí, en ése preciso instante la puerta del lugar se abrió, seguido de las luces que se encendieron repentinamente lastimando por breves instante sus ojos, varios hombres ingresaron hasta rodearlo.
-Así que tú eres el chiquillo que Shirou protege tanto ¿verdad?- preguntó el mayor de todos ellos, para ser más precisos el hombre que estaba con Shirou la otra noche. Koiichi sólo atinó a mirarle con desprecio, no sabía por qué, pero no se fiaba de ese hombre –no me mires de esa manera o te va a pesar!- advirtió enérgicamente.
-¿Por qué me trajeron aquí?, ¡Quiero que me lleven de vuelta a mi casa ahora mismo!- ordenó el pequeño.
-Creo que Shirou te ha malcriado demasiado niño, eres tan altanero como él, ahhh.... – dio un largo suspiro, pero nuevamente habló -¿quieres saber por qué te trajimos aquí?... no pienso esconderlo, es mas te lo diré, en un principio pensaba matarte, pero ahora que te veo mejor... puedes serme de mucha utilidad- sonrió de manera maliciosa.
-¡No pienso ayudarle en nada!, ¡QUIERO QUE ME LLEVEN A MI CASA!- repitió nuevamente queriendo moverse pero las cuerdas atadas en sus manos y piernas se lo impedían.
-No soy ningún tonto, puedo ganar mucho dinero contigo, mocoso, varios pagarían lo que fuera por tenerte mínimamente una noche... – sonrió malévolamente extendiendo el dedo índice y fue dibujando con la yema de éste los perfectos labios del pelirrosa – y además... ¡¡AHHHH!!- un grito de dolor salió de boca del hombre mayor al ser mordido en dicho dedo por el joven, reaccionó estrellando su puño contra cara del muchacho -¡¡MALDITO BASTARDO!!, ¡¡TE ARREPENTIRÁS!!-
Koiichi levantó la mirada nuevamente, desafiante ante sus captores, el mismo ignoraba de dónde le venía aquella fuerza y determinación –Shirou-kun vendrá a salvarme- afirmó decidido.
-¿A salvarte?, si es el principal responsable de que estés aquí, pequeño idiota nadie te puede salvar- hizo una seña con la mano y un hombre que tenía una jeringa entre los dedos se acercó hasta quedar frente al pequeño –aplícasela- mandó.
-¿QUÉ?, no... NO SE ME ACERQUÉ!!- el pelirrosa pudo sentir la aguja que se incrustaba en la piel de su antebrazo, vertiendo el extraño líquido en su interior.
-Ese es mi método para ganar tu obediencia, no te preocupes, la droga te hace sentir mejor-
-¡¡¿¿DROGA??!!- preguntó incrédulo Koiichi antes de comenzar a sentirse raro, extrañamente mareado, las imágenes frente a sus ojos parecían disolverse.
-Todos estos niños trabajan para mí y ahora tú no eres la excepción jajajajaja- rió maniáticamente al momento de disponerse a salir, mas a unos cuantos pasos de la puerta se detuvo –desátenlo- dijo finalmente y continuó con su camino.
-Si- respondió el sujeto que momentos atrás había suministrado la sustancia. Koiichi cayó bruscamente de la silla y arrastrándose intentó salir de allí -¿No oíste niño?, tendrás una larga estancia aquí, ¡así que acostúmbrate!, puedes comenzar haciendo amistades, jajaja- carcajeó y mirando una última vez de reojo al muchacho cerró la pesada puerta.
-Yuki... ayúdame... – extendió débilmente una mano hacia donde veía imaginariamente al rubio –Yuki..... - y perdió la conciencia.
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El motor del Mercedes negro se rindió tras largas horas de persecución, Yuki lleno de ira se dejó caer pesadamente sobre el volante.
-¡¡RAYOS, SOY UN IDIOTA!!- se increpó golpeándose sucesivas veces la cabeza en el aro delante de él –Shuichi, si te hacen algo malo yo... yo... – salió cabizbajo del coche, aunque la carretera estaba desierta y el sol era bastante fuerte, sus deseos por encontrar al pelirrosa podían aún más.
Caminó y caminó, ningún lugar, ninguna persona a la cual preguntar del paradero de ése automóvil, sólo la angustia y la incertidumbre crecían en su interior.
Finalmente lo entendió, no podía hacer nada, no por el momento y mucho menos en ése estado, necesitaba calmarse y meditar cada instante desde que llegó a la mansión.
Las escenas se mostraban como un rompecabezas, por el bien de Shuichi y por el suyo "tenía" que recordar.
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Ya era cerca de media noche. Shirou se encontraba conduciendo de vuelta a su casa, tenía unas extrañas punzadas en el pecho, se sentía incómodo, por esa razón pensó que lo mejor sería descansar en casa, acompañado de su pequeño. Repentinamente su celular sonó.
-¿Hola?- habló cortésmente.
-Shirou... ¿Qué se siente perder lo que más quieres?- dijo la voz desconocida del otro lado de la línea.
-¿Quién es?, no estoy de humor para bromas- dicho esto colgó.
Segundos más tarde el repiqueteo del móvil volvió a hacerse presente. Dudando en si debía hacer caso o no, tomó la máquina en sus manos y contestó.
-¿Sí?- inquirió dubitante.
-Eso estuvo muy mal Shirou, ¿dónde quedaron tus modales?- preguntó sarcásticamente la desconocida voz.
-Tú de nuevo, ¡ya déjame en paz!- estaba a punto de colgar nuevamente cuando la voz lo detuvo.
-Ah ah, no intentes siquiera querer colgarme, sino él la pagará- amenazó.
Los ojos de Shirou se mostraron enormes de sorpresa -¿él...?- preguntó temeroso parando el auto en seco, rogaba estar equivocado, que la idea que pasaba por su mente fuera una mentira.
-¿no lo recuerdas?, pues si es así yo te refrescaré la memoria- se adelanto a la respuesta del moreno -es un lindo niño de largo cabello rosado, su piel es tersa y suave, sus ojos son como dos hermosos diamantes color violeta y su.... –
-¡¡CALLATE!!, ¡¡¿¿QUÉ LE HICISTE A KOIICHI??!!- la desesperación se apoderó del joven, su amado Koiichi podía estar muerto, las imágenes de todos los bellos momentos a su lado pasaban por su mente torturándolo aún más.
-¡Diste en el clavo!, ahora sabrás que soy Clark, de quien te burlaste y a quien pisoteaste, ¡mira! ahora se invierten los papeles-
-Te daré todo lo que quieras, pero por favor... no le hagas daño...- rogó con la voz entrecortada, de sus ojos celestes escapaban algunas lágrimas, no se sintió de esa manera desde la muerte de su verdadero amor. Ahora lo entendía, estaba enamorado igual o mucho más que antes, no podía perder nuevamente a su ser más preciado, iba a llegar hasta las últimas consecuencias.
-Todo lo que quiero es verte humillado, que te arrepientas de todo lo que me hiciste, ¡que te arrodilles ante mi como el perro que eres!, ¿qué dices?... o tu orgullo puede mucho más para no rebajarte de ésa manera, ¿dejaras que ese niño se muera?-
-Lo haré... haré lo que me pides...- el hombre mayor quedó atónito, esperaba otra respuesta por parte de su interlocutor, ¿tanto valía ese chico para él? -¿Dónde lo tienes?, iré ahora mismo- añadió.
Clark salió de su asombro, ahora que sabía de la importancia del muchacho haría sufrir mucho más a su enemigo -No es tan fácil Shirou- dijo en un suspiro -quiero verte sufrir y créeme tengo la manera de hacerlo-
-¡BASTARDO!, si le pones un dedo encima yo... – la voz del hombre lo interrumpió.
-No hables de más Shirou, ya te dije que el que pagará las consecuencias de tus actos será el chico- señaló, Shirou obedeció, no tenía opción -No te preocupes, si te portas bien... lo verás más pronto de lo que imaginas-
-¡¿CUÁNDO?!-
-Eso lo decido yo, adiós Shirou- se despidió burlonamente y colgó.
-¡¡KOIICHI, NO!!- gritó furioso, la ira lo invadió por completo.
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La oscuridad había vuelto, estaba peor con cada minuto que pasaba, ya no sentía su cuerpo, lo único que sabía es que se encontraba hecho ovillo en una de las esquinas, temía lo que pudiera pasarle.
El rechinido de la puerta metálica lo alarmó, la oscuridad le impedía ver de quién se trataba, sólo sentía los pasos que se acercaban cada vez más. Por un momento pensó que se trataría de Shirou.
La tenue luz de la luna que se adentraba por el pequeño hoyito de una de las altas esquinas develó el rubio cabello de esa persona.
-¿Yuki...?- preguntó suavemente, no podía verse el rostro de ese joven, pero su silueta se parecía mucho a la de su amigo, rogó al cielo por que fuera él -¿Yuki... eres tu...?- volvió a preguntar intentando sonreír levemente.
Súbitamente sintió las manos de ése sujeto tomar sus hombros con delicadeza. Koiichi sonrió aún más... podía ser Yuki. De pronto el suave agarre se fue transformando en uno violento que de golpe lo levantaba hasta ponerlo en pie.
-Es mucho mejor tenerte despierto... – el hombre que ahora lo tenía abrazado habló con tono lascivo en el oído del pelirrosa.
-Tu... tu no eres Yuki... –replicó el muchacho ya intentando forcejear con el rubio, sin embargo, sus fuerzas no eran suficientes.
-No tengo idea quien pueda ser el tal Yuki, a mi me llaman J.J., no debes recordarme pues estabas inconsciente cuando nos conocimos, ahora he venido para presentarme como es debido... - lamió el lóbulo de la oreja del joven. Koiichi sólo tenía en mente escapar, pero el abrazo posesivo era mucho para él -¿no quieres jugar conmigo?, que pena... tengo malas noticias para ti, esta noche serás mío, no puedes resistirte....¡OH!, ya se cual es tu problema, este lugar es muy sucio para alguien como tú, por eso tengo planeado llevarte a mi habitación, ¿qué dices?-
El pelirrosa con las pocas fuerzas que le quedaban golpeaba el pecho del rubio, mas este ni se inmutaba –No quiero... – suplicó.
Apretó más la cintura del joven ocasionando que sus cuerpos estuvieran muy pegados, J.J. se excitó aún más con semejante contacto y sin previo aviso lo cargó en brazos.
-Ya no puedo esperar... – Koiichi pataleó intentando zafarse pero todos sus intentos eran vanos, lloró silenciosamente, no podría escapar.
CONTINUARÁ.....
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NOTAS DE AMAI: ¡Oh, vaya! (Amai esta en estado de shock)..... soy muy malaaaaa, snif!, ¿pero qué puedo hacer?, la historia tiene que ser así, así la creó mi enferma mente y así debe escribirse u-u. Ahora... ejem... oo ¿el próximo capítulo será lemon?, ¡Ay, no!, si es lemon será el primero que escriba en toda la historia de mi vida (que por cierto no es mucha) T-T.
¿Cómo va la historia hasta ahora?, quiero saber lo que piensan de ella, por eso no duden en dejar aunque un pequeñito review que no les cuesta nada. Estoy en exámenes así que no tengo mucho tiempo para escribir, pero ya saben si hay reviews puedo hacer la excepción (ojalá así sea ¬¬).
Siempre hablo... no, en este caso "escribo" de más, por eso para no cansarlas más me voy a responder reviews.
Zafiro:: Lo bueno es que te tomes la molestia de dejar review, arigatou, espero que no te pierdas y gracias por los ánimos, no había pensado en llegar a los 200, SERIA GENIAL!!!.
nat-chan07:: ¿Yuki jugando Pump it up?, eso sería cuando el infierno se congelara XD jajajaja, ¿no crees?. PD: Sip, se lo va a tirar XDDD, pero no tan pronto!!.
Haruka:: ¡Acertaste!, la venganza esta muy asquerosa, he leído libros de mafia y yakuzas, tanto que creo que me he traumado °-°, pero aún así tengo que seguir, que esto todavía no se acaba.
Akia Nekoi:: Tus corazonadas son perfectas!, la calma es preludio a los problemas, pobre de mi Shuuuuu (que mala soy a veces! (). Con respecto al final variado necesito una aclaración, gomen, no entiendo, espero que me expliques. Byeee y me gustó la rima Amai-sempai (nótese que ambas terminan en "ai" jajajjaa)
BISHOUJO HENTAI:: Por el momento no te preocupes, Shuichi no sabe nada nadita.-------Amai llevaba alrededor de 2 horas esperando a que Yuki despertara, esto comenzaba a irritarla. Amai: Creo que Bi Hen se pasó con los somníferos (sacude a Yuki quien no da señales de vida) ¡RAYOS! y cómo se supone que disfrute de Yuki si le da por dormir, bueno, paciencia Amai, paciencia, seguro que de un momento a otro despierta y después... (espacio no apto para menores)... ahhhh pronto Yuki pronto, por el momento a prepararme. Amai busca la ducha, necesitaba estar hermosa para su rubio escritor. Yuki: (roncando) Amai: Ahora vengo Yuki-sama. Yuki: (al notar que Amai ya no está y abriendo levemente el ojo derecho)... jejeje, que ingenua es.
Eli-chan1:: Ruego hacer caso de tus ruegos, que si no cumplo tus ruegos, me salen más ruegos y con tantos ruegos sólo ruego porque estos ruegos no sean los mismos ruegos que los otros ruegos. (¿alguien entendió? O.o... porque yo no XDDD). Yo actualizo muy rápido...creo, me alegra que te este gustando y Shuichi si esta sufriendo, espero no tener que escribir lemon para el otro. ¿QUÉ DICEN TODAS?, veamos que me dicen, pero la verdad no sé. PD: Ruega porque tus ruegos por Shuichi hagan efecto. PD2: Me cansé de decir "ruego" XDDDD. Bye no da.
Kiara Fujimuya:: ¿Tengo gran imaginación? T-T ARIGATOU, ahora sé que no es locura, gracias por las palabras de ánimo, es gracias a ustedes que me dan ganas de escribir. PD: Dime en cuáles son tus historias específicamente y las leo con mucho gusto n.n. Byeeeeee.
Selene Sumeragi:: Si, pobre Shirou, tengo que admitir, si hizo muy mal en llevarse a Shuichi, por eso Yuki sufre!!! Y con lo que le están haciendo ahora, NOOOOO (a Amai le da por golpearse la cabeza con el monitor).... ejem.... un momento de locura pasajera (Yuki: Siempre le dan). Gracias por dejar reviews pasados, me encanta leerlos. Ja ne.
Cerdo Volador:: XDDDD, gomen, no me aguanto la risa. Bueno ahora ya serias, tengo que conseguirme ése scanner ¬¬ aunque tenga que usar medidas drásticas. Y aunque no me creas hasta ahora no he visto ni leído NADA de Harry Potter, ni una sola de sus películas (¿la razón?, yo misma la desconozco), espero animarme un día de estos. Sayonara, gracias por dejar review!.
litaotk44:: Sip, pudes decirme Amai-chan, estamos en confianza,, y mala, pero Shirou se lo merece, lo malo es que quien paga los platos rotos es Shuichi!!!. Bye y gracias por continuar tu historia. Ja ne
yukino:: Por el momento no, gomen u-u, pero si le van a hacer daño a Shuichi como ya leíste y por ende Yuki va a sufrir, ya que Shu-chan es su vida T-T, ay! que lindos. Gracias, no se me había pasado por la cabeza hacer un fic original de la vida de Koiichi y Shirou, pero ahora que me lo pones a pensar, no es mala idea!!!. Sayonara nanoda!
Dary Kyana:: ¿tu peke?, oye ¬¬ es el mío!, jajaja, ya me han dicho que soy posesiva y estas en lo cierto, no te voy a hacer caso, gomen pero así tiene que ir la historia, gracias por el apoyo. Te digo lo mismo qque a Yukino, lo del fic original lo estoy pensando, GRACIAS POR ILUMINARME!!!
Chihiro:: Tambien me encanta que me dejen review, y como dijo mi amiga Zafiro, ojalá llegué a los 200!!.
Angy Kohai:: No, gracias a ti por molestarte en dejar review, gracias a todas!!!.
Como que escribo mucho, ne?, ahora me voy a responder a las chicas del correo:
Claudia-chan (Arigatou nano da, compadézcanse de Shu-chan), Palagata, Natalia (Con esta te desmayas), Mika Sakuma (Cada vez estoy más mala, y me ensaño con el kawaii de Shu), zzagide (Estoy en busca del dichoso scanner), Selpelin (Creo que finalmente tu sueño se hará realidad, quizá haga el lemon que tanto quieres) Tifanny-chan chibigirlhentai (Tu al igual que Selpelin están locas y ahora se salieron con la suya, ¿voy a escribir un lemon?), Pares, pricesserenity (no es nada), Norikokuchan (Siempre gracias) y Cristal-san (ya recuperará la memoria.... supongo :S)
Y la FÓRMULA DE LA ESCRITORA FELIZ: Escritora presionada con montón de reviews = ¡Capítulos largos y actualizados con rapidez! (¬¬ si no quiero morir debe ser así).
Bien, hasta el 15, que "esperemos" llegue rápido, y si no es así tengan piedad ( y deséenme suerte en mis pruebas. Bye bye nano da, ARIGATOU OTRA VEZ!!!. Ja ne! (