CAPITULO TRES

LA MADRIGUERA

o.o.o.o


Pasaban más de las cinco de la madrugada y Harry se encontraba plácidamente dormido en su cama. Era la primera vez, después de mucho tiempo que tenía sueños agradables, y placenteros…

"Se encontraba con sus padres en un día de campo excepcional" reían y jugaban alegremente. Era lo que siempre había querido, estar al lado de ellos y no separarse jamás, que el tiempo pasara lento, que no terminara nunca de los nunca… Su madre le acariciaba el cabello y lo besaba en la frente, su padre le daba palmaditas en la espalda, diciéndole lo muy afortunado que era al tenerlo por hijo y que estaba muy orgulloso. No podía contener las lágrimas de la emoción... ¡Era tan mágico el momento¡Tan maravilloso!

Todo marchaba a la perfección, hasta que Hedwig comenzó a balancearse en su jaula tratando de despertarlo… y lo consiguió. Se levantó muy molesto con el ave, y le alzó la voz muy fuerte... Ya luego comprendió a qué se debía tanto escándalo por parte de su mascota.

Dos lechuzas revoloteaban a fuera de su ventana; la abrió de par en par y se metieron raudas y veloces a su habitación. El escándalo fue fenomenal. Podía escuchar los ronquidos Tío Vernón y Dudley hasta su habitación; pero al parecer no se habían dado cuenta de nada.

Una de las lechuzas era Pig, de Ron, y la otra era la misma que había entregado el regalo de cumpleaños. Pig aterrizó sobre su buró, la otra lechuza dejó caer la carta y salió velozmente, sin que Harry pudiera hacer nada por evitarlo.

Ya te atraparé.

Entonces se apresuró a desatar la carta de la pata de la pequeña lechuza de Ron; al fin tenía noticias del pelirrojo:

Querido Harry...

Sé que has de estar molesto por que no te hemos escrito en todo éste tiempo… Pero tuvimos problemas en casa. Mi padre y madre, tuvieron que viajar. Mi hermano Bill tuvo unos problemas (No sé de que tipo) no saben en cuanto tiempo regresarán. Por el momento solo estamos en casa Fred, George, Ginny y yo. Pig estaba enfermo y no podía hacer viajes largos; y Errol... Cada día está peor; ya no nos gusta mandarlo fuera de casa por que podría perderse y nunca más volver. Tampoco quisimos usar el correo muggle, por que ya sabemos que tendrías problemas con tu tío. Hermione me había pedido de favor, te mandara saludar, pero por los problemas arriba expuestos, me fue imposible hacerle su encargo. Ella salió de vacaciones con sus padres a un lugar en México, obviamente no puede hacer uso de alguna lechuza.

¿Te gustaría pasar unos días con nosotros? Por favor acepta, me haces mucha falta amigo; las bromas de los gemelos cada ves están mas insoportables, se la pasan probando y haciendo experimentos en casa para su tienda de bromas ¿Y a quien crees que están tomando como conejillo de Indias? Y Ginny se la pasa todo el día en su habitación, haciendo sabrá Merlín qué cosas; ha estado muy misteriosa estos últimos quince días, no deja que nos acerquemos a la puerta de su habitación… Pide permiso y ven ¡NECESITO AYUDA!

PD: Acabo de recibir noticias de Hermione, ella vendrá también. Me he anticipado diciéndole que tú vendrás en cuanto puedas (espero que sí) No esperes a que te escriba, ni lo hagas tú, mejor hablemos personalmente. Hasta pronto...

OTRA PD¡FELIZ CUMPLEAÑOS! Tarde pero seguro

Ron Weasley.

¿Qué clase de problemas habría tenido Bill para que sus padres decidieran dejarlos solos? - Se preguntó Harry. Siempre se metían en problemas a cada momento, cuando dejaban a los pelirrojos en casa, sin la autoridad debida.

-Está bien Ron- Habló en voz alta- iré inmediatamente ¡Oh¡Se me olvidaba leer la otra carta!

La leyó detenidamente, letra por letra.

Era un verso muy hermoso, que había llegado a lo más profundo de su alma. Pero seguían siendo todo un misterio para él.

¡Cómo le gustaría conocer a la persona que había tenido la delicadeza de mandarle tan bello presente y agradecerle su amabilidad!

Alguien con la capacidad para poder escribir de ésa manera, indudablemente era una persona con buenos sentimientos. Le contaría a Ron y a Hermione lo de su amor secreto, ellos sabrían aconsejarle qué hacer.

Se apresuró a guardar sus cosas en el baúl. Escribió rápidamente una nota a sus tíos explicándoles, que su padrino, "El peligroso multi asesino perseguido por la policía" Sirius Black necesitaba hablar urgentemente con él y que tenía que acudir a su llamado a la brevedad y que días más tarde pasaría a recoger sus demás pertenencias.

A Los Dursley no les quedaría otra opción más que dejar todo por la paz. Al contrario, estarían felices de no tenerlo cerca por un buen tiempo.

Dejó que Hedwig saliera de su prisión y le dijo que se fuera rumbo a la madriguera; obedeció alegremente dándole varios picotazos en la mano y se echó a volar. Enseguida, sacó su varita, la capa, los polvos flú, la esclava de oro, sus pupilentes y la crema anti cicatrices y pegó la nota en la puerta, a la vista de todos.

Bajó inmediatamente hacia la chimenea, todo estaba en silencio, no había moros en la costa.

– ¡LA MADRIGUERA! –Gritó.

¡¡ZUMM!! En un dos por tres se encontraba ahí. Como todavía no amanecía, la casa se encontraba en tinieblas, pero ya sabía el camino; subió las escaleras y se dirigió al cuarto de Ron. Abrió la puerta sigilosamente. Se escuchaba perfectamente la respiración del pelirrojo. Entonces empezó a maquinar una broma para asustarlo. Se puso encima la capa invisible, lo tomó por los pies, y lo jaló fuera de la cama, solo se oyó un golpe seco en el piso y un grito...

-¡AY!

¡Oh, no! Había sido un grito de mujer; enseguida, las antorchas de la habitación se prendieron.

-¡GINNY! -Gritó Harry.

-¡HARRY! -Gritó Ginny.

-Discúlpame, no pensé que fueras tú... ¡Yo, quise hacerle una broma a Ron! –El pelirrojo al ver la cara de asustado de Harry, no paró de burlarse.

-No… Te preocupes... Harry. –Ginny quedó estupefacta con la nueva apariencia del chico.

-Ginny durmió ésta noche en mi habitación- Dijo Ron si parar de reír- ahora que no están nuestro padres, le ha dado un poco de miedo dormir sola –Ginny le dirigió una mirada a Ron como queriendo decir: Cierra la boca. Segundos después se oyó un ¡¡PLIN!! Los gemelos se habían aparecido en el cuarto.

-Hola Harry... ¿Un gran alboroto el que has armado eh? –Dijo George guiñándole un ojo.

-¿Con que queriendo llamar la atención no? –Comentó Fred en tono de burla también.

-Me da mucho gusto verte Harry, ya... te extrañaba... –Ron apreció la nueva imagen de Harry.

-Igual yo Ron... A todos ustedes. No saben lo gratificante que es venir aquí, me siento como en mi casa.

-Creo que vale la pena brindar por el reencuentro con... ¡Cerveza de Mantequilla!

¡PLOP!

Cuatro vasos grandes aparecieron delante de todos, encima del escritorio de Ron.

-Hmm, mi preferida-Indicó el gemelo- Tendré que inventar nuestra propia bebida... Es un buen negocio. Un galeón, precio de promoción. ¿No suena nada mal eh, George? luego discutiremos algo que se me acaba de ocurrir...

-Veo que has mejorado notablemente tus habilidades para aparecer cosas Fred –Dijo Harry.

-Y tal parece que tú has mejorado en desaparecerlas... ¿Dónde quedó la cicatriz, el cabello y los lentes? –George lo miraba de arriba abajo.

-¡Ah! Es verdad... Decidí hacer un cambio drástico en mi apariencia personal... Estaba cansado de lucir igual... Y la cicatriz desaparece por medio de una crema que la neutraliza por espacio de doce horas. Y los lentes... Me aplicaron un hechizo para deshacerme definitivamente de ellos.

-Eso explica todo... hiciste lo correcto¿verdad Ron? Hasta pareces otra persona. Ya no serás más el niño que vivió... Ahora te bautizaremos con el mote de... "Harry, el galán de galanes de la escuela de magia y hechicería Hogwarts" Firmarás autógrafos, como cierto profesor, hace algunos años. Y nosotros seremos tus representantes. Cobraremos por cada foto que te quieran tomar... Una cantidad moderada, por supuesto, debes estar al alcance de todos los bolsillos de las chicas. –Harry se quedó sin habla.

-Vamos, no pongas esa cara, era una broma Harry, aunque debes pensarlo, si cambias de opinión, avísanos.

-George tiene razón, favoreció mucho el cambio- Contestó Ron- Aunque ya me había acostumbrado a verlo con la cicatriz en su frente... Pero felicidades, te ves... Muy bien. ¿Que opinas Ginny? –La pelirroja se puso tan nerviosa que tiró la cerveza al suelo.

-Lo siento... Tengo que irme, los veo más tarde... –Corrió a su cuarto y se encerró bajo llave.

-Siempre es lo mismo, cuando hablamos sobre ti, se pone nerviosa. –Comentó Ron.

-Lo siento, no fue mi intención...

-No te preocupes Harry; ya estamos acostumbrados a que pierda la cabeza cuando estás presente. Todos los Weasley sonrieron y observaron su reacción; un Harry apenado, con el color subido hasta las orejas.

-¿Eh... y qué fue lo que sucedió con Bill¿Porqué tuvieron que dejarlos solos?

-No sabemos absolutamente nada, sólo vi a papá gritar demasiado. Y mi mamá tuvo que tomarse algo para los nervios. Debe ser un lío bastante gordo... Mira que dejarnos la casa para nosotros solos –George se frotaba las manos maliciosamente.-Descansaremos de ellos un rato y viceversa.

-Hasta que no regresen, sabremos exactamente que sucedió. –Ron se encogió de hombros.-Aunque… no nos dirán todo el chisme completo, siempre se guardan la mejor parte.

-Chicos, nosotros nos retiramos, tenemos que hacer unas cuántas cosas más, antes de irnos a nuestra hermosa tienda a trabajar. Nos gustaría mucho que te dieras una vuelta Harry, y probaras unos dulces nuevos que acabamos de inventar, para que nos des tu punto de vista... y si tienes suerte, te daremos algunos para que se los obsequies a tu regordete primo –Fred recordó cuando Dudley se comió uno de broma y le creció la lengua algunos metros.

-Encantado Fred, seguramente serán buenísimos. –Lo había dicho por compromiso, ya sabía como se las gastaban los gemelos con sus experimentos raros.

-Esta bien, entonces nos vemos más al rato, Pórtense bien, que nada les cuesta

(¡PLIN! Los gemelos desaparecieron)

-¿Ves lo que te digo Harry?- Ron hizo cara de asco- Me tienen el estómago deshecho con sus inventos. Menos mal que compartirás conmigo éste martirio... Ahora quiero que me cuentes exactamente cómo es que tu tío te dio permiso para venir, y también la historia que hay detrás de tu nueva vida sin la cicatriz.

Harry explicó con lujo de detalle, lo de Missy, y sus regalos (Pupilentes y su funcionamiento; la crema…) la nota para su familia, enfatizando ampliamente en lo de "PELIGROSO ASESINO" y por último... Lo de su amor secreto...

-¡No te lo creo! No, no, no¿Un amor secreto¿Escuché bien? -Ron se limpiaba los oídos.

-Sí, escuchaste perfectamente... Y mira, ésta nota me llegó junto con la tuya… y ésta cajita contiene la esclava de oro. Ábrela para que te cerciores de que te digo la verdad.

Ron no dudó ni un instante.

-¡Wow Harry¡Debe valer una fortuna¡Está que se muere por ti! No cabe duda... Y la nota... ¡Despiertas pasiones! dime¿Sospechas de alguien?

-No, no sé quien pueda ser. Se aceptan sugerencias.

-Por el tamaño y valor del regalo, debe ser de una familia acomodada... Piensa qué chicas del colegio son adineradas... ¿Parvati¿Cho? ellas son unas buenas candidatas.

-Sinceramente, pienso que tal vez, sólo tal vez... Sea de Cho. ¿Que opinas?

-Es una posibilidad... ¿Y le has mandado alguna contestación, o algo por el estilo?

-Su lechuza es muy escurridiza, no se deja atrapar. Y como tenía prohibido sacar a Hedwig...

-Entonces quiere decir que no... Es una lástima…. Otra veZ felicidades Harry, tal parece que encontraste por fin el amor. ¡QUE ENVIDIA! - Por cierto, disculpa por no regalarte nada en tu cumpleaños, ya sabes, ando corto de fondos.

- A mí no me importan las cosas materiales Ron. Conque sigas siendo mi amigo, es más que suficiente.

-Siendo así, me tranquilizo –Ron se puso contento de nuevo. -Y qué me dices de los pupilentes ¿Ya los has probado?

-No he tenido la oportunidad, sobre todo con los grises, se más o menos el funcionamiento de los otros.

-¿Y qué esperas¡Hazlo ya y dime que sucede!

-De acuerdo, pásame la caja... Perfecto... ¡Ouch! Esto es delicado, me produce irritación en los ojos…. Listo... ¡POR MERLIN RON! –Gritó Harry dándose media vuelta.

-No vengas para acá... Aléjate de mi vista.

-¿Por qué¿Qué ocurrió?

-¡TE VI COMPLETAMENTE DESNUDO!

-¡¿En serio?! – ¡wow! – Harry ¿estás pensando lo mismo que yo?

-¡No, no creo estar pensando lo mismo que tú! –Harry se los quitó de inmediato, la verdad y para ser honestos, Ron tenía un buen equipo debajo.

-¡PODREMOS ESPIAR A LAS CHICAS¡SORPRENDENTE¡Vaya regalo de cumpleaños! Qué suerte tienes... Oye, espera un momento... ¡ME VISTE DESNUDO¡Harry! –Ron se puso del color de su cabello. -Promete que no lo volverás a hacer en mi cuarto... tampoco los usarás en el resto de la casa. Y no le diremos a Hermione absolutamente nada, o te obligará a devolverlos.

-Lo prometo... No tienes que decírmelo en ése tono... ¡Pueden resultar muy peligrosos si caen en manos de alguien más!

-Otra cosa... ¿Qué tal si Missy, tenía unos pupilentes iguales a estos, cuando tú estabas ahí dentro? -Harry estuvo apunto de desmayar, ojala Ron no estuviera en lo cierto, porque si no, vomitaría.

-N-No lo creo. Missy no se ve la clase de persona que…

El canto de un gallo, les puso en alerta de que ya había aclarado el día.

-¡Vaya, ya amaneció! El tiempo pasó volando ¿tienes apetito Harry?

-¡Bastante! Los Dursley me mataban de hambre. Cualquier cosa, me caerá bien al estómago.

Los dos bajaron a la cocina, enfrascados en una plática irrelevante.

o.o.o.o

Ya pasaba más de medio día. Y como tenían el tiempo libre, subieron colina arriba a admirar el paisaje. Para Harry fue como volver a nacer; Respirar todo ése aire puro del campo, ver el cielo azul, sentir el viento golpear en su rostro, los rayos del sol quemar su piel…

La provincia le sentaba bien; la ciudad no era para él, tan ruidosa, tan llena de tráfico, gente histérica peleando por todo y a todas horas.

El tiempo parecía ir más lento, pero eso pasaba a segundo plano; estaba muy feliz de sentirse libre y poder ir a sus anchas a cualquier parte. Ron le contó algunas de sus travesuras de pequeño, como por ejemplo en cierta ocasión, el pelirrojo tendría alrededor de cuatro años, tomó la varita de su padre para jugar e hizo un desastre en toda la casa y tardaron más de una semana en poner todo en su lugar. ¡Que bonitos recuerdos guardaba su amigo! Y lo envidiaba por eso, pero era una envidia buena; ya que el no tuvo la dicha de crecer al lado de sus padres. No tuvo una infancia feliz, y todo se lo debía a su peor enemigo LORD VOLDEMORT, quien seguramente se encontraba escondido en algún lúgubre lugar, cuidado por su vasallo Colagusano, esperando el momento justo para atraparlo, torturarlo y después, aniquilarlo de una manera grotesca y humillante con la ayuda de sus fieles mortífagos

Estaba destinado a vencer o morir, no tenía más alternativas, marcado a vivir siempre en la incertidumbre, por eso trataba de vivir al máximo, sin importar romper alguna que otra regla escolar, si no lo hacía ahora, no lo haría nunca. Pero no todo era malo, tenía dos grandes amigos, una bonita familia –Así consideraba a los Weasley– Y un amor, (aunque misterioso y lejano) que le producía cierto cosquilleo en el estómago, cada que recordaba el verso que traía en la bolsa trasera de su roído pantalón de mezclilla.

Los dos se quedaron tumbados un rato en la maleza, hasta que una voz lejana los distrajo de sus pensamientos. Una figura femenina venía subiendo a toda carrera... Si sus ojos no los engañaban se trataba de Hermione, quien los saludaba con la mano. Les dio mucho gusto verla, y corrieron, para ver quien llegaba primero a su encuentro.

-¡Hermione! Qué gusto verte de nuevo –Gritó Ron.

- A mi también me da gusto verlos (les dio un fuerte abrazo) -¡HARRY¿Pero qué te paso?

-Hola Hermione... ¿Cómo has estado? Y lo que me pasó... solo cambié... un poco...

-¡No puedo creerlo! Estás... tan ¡DIFERENTE! – Y Guapo

-Ya te contará todo Hermione... Dinos ¿Cómo te fue de vacaciones¿Te divertiste mucho?

-No me pudo ir mejor... Les traje algunas cosas, están dentro de la casa... –No dejaba de mirar a Harry que se daba cuenta y hacía como que no lo advertía.

-Pues qué esperamos, vamos para allá. Todos tenemos muchas novedades muy interesantes, te irás de espalda con lo que te contará Harry, Es algo realmente extraordinario. ¿Verdad que tengo Razón? -Harry asintió con la cabeza.

-Ya lo creo que sí... Andando. ¡Qué cambio!

o.o.o.o

Una vez entregados los regalos, (Una micro escoba de juguete para Harry, que en verdad volaba, y un ajedrez mágico para Ron, que le decía cual ficha mover, nada fuera del otro mundo) Harry puso al tanto a la chica de todo lo que le había sucedido en los últimos días. Como se lo esperaba, recibió una gran reprimenda de su parte al contarle lo del amor secreto, y lo del regalo costoso.

"NO LO HUBIERAS ACEPTADO"

Le dijo muy seria... ¡QUE TAL SI ES UNA TRAMPA DE VOLDEMORT! y bla, bla, bla...

Pero después de algunos minutos se le quitó el mal humor y volvió a ser la misma de siempre. Ginny escuchaba atentamente, no se había perdido nada de la plática de los chicos, y le dieron unos celos terribles al escuchar la historia de Harry; estuvo a punto de llorar delante de todos, pero se aguantó lo más que pudo. Se disculpó y se volvió a encerrar en su cuarto, fue cuando Ron le comentó lo extraña que estaba desde hacía tiempo... COSAS DE MUJERES contestó la inteligente bruja para disculparla. Hablaron también de Bill y lo misterioso del caso. Por ultimo del viaje a México.

o.o.o.o

La tarde transcurrió normal, no se dieron cuenta, pero la noche los alcanzó rápidamente. Hermione dormiría con Ginny y Harry con Ron como era la costumbre. Se acostaron al dar las diez de la noche.

A pesar de que estaba tranquilo, Harry tenía una sed tremenda, era verano y el clima caluroso, por lo que se dirigió a la cocina a tomar un poco de agua fresca. Estaba oscuro, así que se fue a ciegas... Escuchó algunos ruidos, por lo que se puso alerta...

Mi varita la dejé arriba.

Su nueva visión se acostumbró a la oscuridad y vio que era Ginny la que estaba ahí con algo en las manos. Ella se sorprendió al verlo...

-Ha... ¡Harry¡Qué... haces... despierto!

-Bajé a tomar un poco de agua, tengo mucho calor... ¿Y tú?

-Bueno... yo... hice lo mismo... tomé agua... pero ya... ya me voy... Hasta mañana...

Subió las escaleras rápidamente.

Qué actitud más rara… En fin, a lo que vine.

Buscó un vaso para servirse; pero no vio agua potable por ningún lado...

Servido en la mesa, estaba una taza con un líquido verdoso... ¡¡Agua de limón! Lo que necesitaba... Lo bebió todo, sin desperdiciar nada.

–¡Por Merlín que sabor tan espantoso!

El agua sabía horrible... pero lo había refrescado que era lo que había estado buscando en un principio y apuró todo el líquido hasta dejar vacío el vaso.

Listo, mañana será otro día... Les propondré a los chicos ir de picnic... Si, les gustará la idea. Tengo ganas de correr por todas partes, hace tiempo que no lo hago. Bien, ahora la cama me espera…