Por fin vuelvo a las andadas, y bajo un nuevo nombre (y nuevo mail, por si acaso os supone alguna molestia). Es que cumplí los 15 y tenía que volver a cambiar el nick (a ginny152004) y pensé que mejor que tener que cambiar el nick cada seis meses, lo cambiaba ahora definitivamente por mi nuevo mote: Heit.

Y bueno, lo de cada vez que publico: Siento el retraso, de verdad, pero es que me ha sido casi imposible escribir con los exámenes finales, y otras cosas que me han ido surgiendo (además de la desmotivación que supuso el que se rompiera el disket donde tenía este mismo capítulo que he tenido que volver a escribir y otras muchas cosas que ahora os vais a quedar con las ganas de leer) y no he podido sacar el tiempo de ninguna parte. Es cierto, ha habido momentos de esos que lo único que he hecho ha sido estar tirada en el sofá o en la cama sin nada que hacer pero... bueno, supongo que me entendéis... ¿no?

Siento hacer los capítulos tan cortos. Intento meterle más cosas, pero me parece que el tamaño es el adecuado, no sé si lo comprendéis... Pero espero compensarlo escribiendo más seguido... supongo que las vacaciones ayudarán a que me quede metida en mi casa con el aire acondicionado, ¿no?

Reviews:

MOR - Gracias. Espero que sigas leyendo mi fic y que sigas dejando review. ¡Animan mucho!

Lizlovegood12 - Gracias. Tranki, es que soy como el Guadiana: aparezco y desaparezco. Lo de la extensión de los capítulos lo explico en el tercer párrafo. Si ya se te ha olvidado de qué iba el fic, espero que no te suponga mucho tener que volvértelo a leer. Gracias por la aclaración y espero que me sigas comunicando tu opinión (y quejas si las hay)

Vale - Gracias. Me alegro mucho de que te gustara tanto y de que te parezca creíble (todo lo creíble que pueda ser que no aparezca Voldemort, claro). Me gustaría mucho que siguieras dejando review.

Ginny Potter W - Gracias por gastar tanto tiempo en escribirme un review tan extenso! Siento que hayas pasado una mala época, espero que te encuentres mucho mejor. Yo no sé qué me ha pasado con este libro (el quinto), que he tardado en leerlo dos meses (sí, dos, qué vergüenza me da admitirlo), quizá por la presión del instituto (donde también me tenía que leer varios libros) y por el subidón de pavo y tontería que creo he tenido. Tras leerlo, no sólo me dan ganas de matar a cierta persona, sino a varias. Lo de lo melómana de Ginny lo he puesto por mí, soy una completa fanática de la música que no quiere ni imaginar cómo sería su vida si grupos como Nirvana o Ramones no hubieran existido nunca. Siento lo de la extensión de los capítulos, pero ya lo he explicado algo más arriba. Gracias por tus consejos, intentaré complacerte. Espero que sigas disfrutando del fic y que me sigas escribiendo.

Gene - Gracias, me alegra que te guste el fic. Pronto... no, no he actualizado pronto, pero hago lo que puedo. Besos.

Niniel204 - Gracias! Que bien que te gustara tanto el fic y la forma que tengo de escribirlo, en serio, me halaga mucho, ahora sólo espero seguir en la misma línea. Espero volver a tener noticias tuyas cuando publique esto, me haría mucha ilusión.

Cuando terminéis de leer el capítulo (si llegáis a terminarlo), dejad review que, como ya dije una vez, hace que aumente mi cargo de conciencia por no actualizar más seguido.

CAPÍTULO 7

Harry caminaba solo por los pasillos de Hogwarts con una carpeta bajo el brazo tan llena que le sobresalían algunos pergaminos. Venía de la biblioteca y se dirigía a la sala común. Llevaba ya varios días, ayudado de Ron y Hermione, buscando en el equivalente mágico del Internet muggle las letras de las canciones de los grupos favoritos de Ginny. Era un trabajo bastante complicado teniendo en cuenta el gran abanico de gustos musicales que la chica poseía.

Las letras de Nirvana eran bastante interesantes, pero no eran las más apropiadas, las de HIM tenían una tendencia bastante suicida con algunas excepciones, las de los Ramones eran muy claras, a veces algo absurdas, pero le gustaban... Tras haber leído tantas letras era totalmente normal no recordar de quién era "Should I stay or should I go", así que todo era bastante complicado.

Iba pensando en esto cuando escuchó un grito al final del pasillo. Se oían las pisadas de al menos dos personas corriendo. Cuando aligeró el paso para ir en busca de una respuesta, para su sorpresa, apareció Ginny corriendo por el pasillo con una cámara de fotos (Harry la reconoció como la de Colin Creevey... tenía muy visto ese objetivo). Cuando Ginny pasó por su lado, sin dejar que Harry reaccionara, le cogió del brazo y le obligó a que corriera con ella.

-¡VIRGINIA GINIEVE NINETTE WEASLEY!

Reconoció aquella enfurecida voz como la de Ron. No paraba de preguntarse qué demonios pasaba cuando Ginny se paró frente a una puerta, la abrió y le arrastró dentro. Ginny cerró la puerta con un hechizo y, jadeante tras la carrera, se deslizó por la puerta hasta el suelo. Harry optó por sentarse sobre un pupitre (al parecer estaban en una aula vacía). De pronto, Ginny comenzó a reír.

-¡¿Qué le has hecho?! -preguntó Harry al fin, con lo que consiguió que Ginny se riera más.

-Ahora parece algo enfadado, pero ya verás como luego me lo agradecerá.

-¿No vas a contármelo?

Ginny le miró fijamente, como evaluando el grado de confianza que había entre ellos. Harry se sintió bastante incómodo.

-Ya sabes lo testarudo que es Ron -dijo Ginny-. Seguramente, si por él fuera, dejaría escapar a Hermione... Bueno, en realidad no es testarudez... es cobardía. Así que he decidido ayudarle -concluyó con una sonrisa traviesa y un brillo en los ojos que le recordaban a los gemelos Weasley.

-¿Cómo?

-El plan es el siguiente: le pedí la cámara de fotos a Colin y me escondí en el baño de prefectos, sabía que Ron iría esta tarde a darse un baño a cosa de las ocho. Me escondí y le eché algunas fotos un tanto comprometedoras por no decir que, de salir a la luz, pasaría la mayor vergüenza de toda su vida y jamás volvería a ser el mismo, pero como me empecé a reír a carcajadas me pilló. Pienso hacerle chantaje. Le mandaré una de las fotos y le diré que tiene de plazo hasta dentro de quince días para declararse a Hermione o... curiosamente estas fotos aparecerán en todos los tablones de anuncios de Hogwarts. ¿Qué te parece?

-Descabellado.

-Gracias.

-¿Y por qué me has traído a mí hasta aquí?

-Porque se te da muy mal mentir, Harry. Aunque le dijeras a Ron que me había ido por la izquierda, él habría notado que me había ido por la derecha.

-¿Miento mal?

-Lo siento, sé que es un dato revelador para ti.

Se quedaron un rato en silencio. ¿De verdad se le daba mal mentir? Entonces... ¿Se había dado cuenta de lo que sentía por ella?

Ginny miraba al techo, como repasando su plan mentalmente. Luego dirigió su mirada a la carpeta que Harry había dejado sobre el pupitre.

-¿Qué llevas ahí? -preguntó ella.

¿Qué le decía ahora? Ella misma le había dicho que no era bueno mintiendo... estaba en un aprieto.

-Son... apuntes -mintió (mal) Harry.

-Accio carpeta.

La carpeta se deslizó hasta llegar a los brazos de Ginny. Harry había intentado detenerla, pero sin éxito alguno. Ahora ella vería todas aquellas letras y... ¿Qué excusa le ponía?

-Mientes muy mal, Harry -dijo Ginny mientras abría la carpeta-. ¿All night long? ¿When I lost you? ¿Needles and pins? ¿Right here in my arms? ¿Are you gonna be my girl? ¿Coleccionas letras de canciones?

-Sí -lo soltó sin pensar.

-¡Vaya! ¡No sabía que te gustaran estos grupos! -dijo hojeando todos los pergaminos-. A mí también me gustan. Mi hermano Bill me ha mandado esta mañana un vinilo de The Chesterfield Kings, ¿los has escuchado?

-No.

-Van a dar un concierto la semana que viene, el viernes, en Hogsmade. Si te apetece puedes venir. Creo que te gustarán.

-Sí, claro...

-Hace unas semanas vinieron The Cynics... estuvieron muy bien ¿Cómo es que no fuiste?

- "-

Estaba por fin en la sala común, tirado en un sillón. No se explicaba cómo había podido salir airoso de aquella musical situación con Ginny Weasley, toda una melómana. A él le gustaba el rock, por supuesto, pero no era tan entendido, ni mucho menos. Conocía a los Ramones, Nirvana, Sex Pistols y muchos de los grupos que a ella le gustaban, pero no les sacaba tanta punta. Ni siquiera tenía una teoría tan detallada sobre el suicidio o asesinato de Kurt Cobain como tenía ella (que estaba completamente convencida de que todo había salido de la retorcida mente de la viuda de América).

Al menos había conseguido quedar con Ginny para hacer algo que no fueran los deberes. Le iba a llevar al concierto de los Chesterfield, pues decía que no se lo podía perder. Aunque seguramente irían con los amigos de ella, pero algo es algo.

Quizá si seguía adelante con lo de mandarle las canciones a base de howlers se delataría él solo y no tendría nada de misterioso... Estaba hecho un lío. Lo mejor sería bajar a cenar. Iba a ser gracioso ver a Ron después de lo que le había pasado en el baño de prefectos con su hermana aunque, por supuesto, se suponía que él no sabía nada al respecto.

- "-

Ya en el comedor, sentado junto a Ron y Hermione, el ambiente era bastante tenso. Ron tenía una cara tan larga de enfado que nadie se atrevía a decir ni una palabra. Harry hacía como que no sabía nada, y Hermione estaba muy extrañada, pero no se atrevía a preguntar.

En contra a la rutina, una lechuza entró al Gran Comedor y se dirigió hacia Ron. Harry se suponía qué contenía la carta, así que pensó que lo más apropiado era distraer a Hermione, que estaba bastante atenta, para que no pudiera ver nada.

Mientras hablaba con ella sobre el examen de Transformaciones, miraba a Ron por el rabillo del ojo. Estaba muy rojo y sus ojos mostraban una ira incontenible. Pudo ver que, por debajo de la mesa, Ron había hecho pedazos su correspondencia.

-¿Qué era? -preguntó Hermione con algo de valentía.

-Nada -respondió tajante, por lo que Hermione decidió no insistir.

De repente, Dumbledore se puso en pie y todos se quedaron en silencio.

-Os comunico que el viernes de la semana que viene podremos disfrutar de la agradable visita de los alumnos de quinto, sexto y séptimo del colegio de magia Guadiana, de España, que estarán de viaje de estudios en nuestro país. Espero que todos les mostréis la hospitalidad que se merecen. Se quedarán aquí durante todo el fin de semana, alojados en unas habitaciones que dispondremos especialmente para ellos. Ese día, aprovechando que es viernes, se celebrará un baile para darles la bienvenida -en ese momento, la mayoría de las chicas pronunciaron un "oooh" seguido de "qué bien", mientras que los chicos hacían otro "oooh", pero seguido de "mierda"-. Pero no os sintáis presionados a encontrar pareja -se apresuró a decir Dumbledore-, podéis ir solos o en grupo. La finalidad del baile no es encontrar pareja, sino hacer amistad con nuestros visitantes.

-Oh, genial, no creo que pueda volver a pasar por lo de buscar pareja -dijo Ron y Hermione carraspeó.

En esos momentos, Harry no se acordaba de que esa misma noche había quedado con Ginny para acompañarla al concierto. Ron seguía hablando, pero Harry no le hacía caso, estaba mirando a Ginny, que acababa de entrar al comedor. Ella se sentó en frente de Harry diciendo "hola, ¿me he perdido algo? Parece que todo el mundo está bastante excitado" y sonriendo abiertamente. Ron la miraba con odio y Harry simplemente se había quedado embobado.

-Harry, ¿se puede saber qué haces? -le preguntó Hermione, señalando su brazo.

Al darse cuenta, Harry se sonrojó mucho y cambió su postura. Ginny, Ron y Hermione se reían: había metido el codo en el plato de Hermione sin darse cuenta. Cuando se olvidaron del incidente, Hermione le contó a Ginny lo del baile y la visita del colegio español.

-Vaya, pues me temo que Harry y yo haremos amigos el sábado y el domingo, porque ya tenemos planes incancelables para esa noche, ¿verdad Harry? -dijo Ginny y Ron y Hermione abrieron sorprendidos los ojos y la boca: ¿Tenían planes? ¿Juntos? ¿Para el viernes por la noche?

-Sí, es verdad -contestó Harry, mirando a Ron y Hermione suplicándoles con la mirada que no pusieran esa cara-. Vamos a ir a Hogsmade, al concierto de los Chesterfield Kings.

-Es una lástima que coincida con el baile -comentó Ginny-. Ya sé que no hay bailes con estudiantes extranjeros todos los años, pero tampoco vienen los Chesterfield muy a menudo, así que... yo pienso ir al concierto, pero si tú prefieres quedarte en el baile, Harry, lo comprendo.

-No no no -se apresuró a decir Harry-. Odio los bailes, seguro que lo paso mejor contigo en el concierto.

Como respuesta, Ginny sólo le sonrió abiertamente, pero eso fue suficiente para que Harry deseara con más ganas todavía que llegara la noche del concierto.