Hola:
Perdonarán mi tardanza pero he estado ocupada como no tienen idea. SEeque atrasos así no tienen pretexto pero para enmendarme un poco junté dos capítulos en uno solo.
Aún tengo algunas cosas del siguiente capitulo ya escritas pero siempre el problema es pasarlo a la computadora por falta de tiempo. Prometo hacerme un espacio cada día para ya no llegar a hacer esto de nuevo.
Quiero agradecerles por toda su paciencia también. Pero sobre todo quiero agradecerles a esas personitas que hacen posible este fic, entiéndanse como Abive que hace las veces de beta y las otras de presión para escribir... y otras cuantas de ... bueno basta jajaja. También a Starshy (como no le gusta que la llame) por ser la beta de este intento de fic decente.
Pero sobre todo a aquellas chicas que me mandan reviews que a fin de cuentas son para quienes escribo.
Muchas gracias también a aquellas que me tienen en su lista de favoritos.
Ahora la respuesta a los reviews.
Le Parroquet: Mensa jajajaja… te vamos a tener que prohibir todo tipo de dulces… de hecho que no tenías prohibidos los chocolates?... bueno al parecer si me llegó tu review… que tonta! Jajajajaja. No me ilusionaste ¬¬
Leo_P_Le_fail: Bueno este capitulo es mas largo!... no me vallan a matar U_U… y sí aún faltan muchos más jajaja.. me van a aguantar por un rato. Por cierto… ¿rana Gustavo?... ¿que o se llama rené? :s. Espero te guste este capítulo. Un beso
Niea: Siento haber hecho el capi tan corto pero prometo hacerlos mas largos U_U… pero es que a veces tengo que cortarlos en ese momento jejejeje… Que bueno que te haya gustado. Espero te guste este. Un beso
Nevichii: Que bueno que te gustó… si lo se, son muy cortos.. pero bueno… iré haciéndolos mas largos, lo prometo. Espero te guste este capítulo. Un beso
Nai: Quee bueno que te haya gustado, aquí está el capítulo. Muchas gracias por tu apreciación ^_^. Espero te guste. Un beso
Ahora sí, el fic.
La maldición del lobo.
Por: Gala
Preludio
-¿En que piensas Lily? – preguntó Cloe.
La chica pelirroja veía distraídamente por la ventana el cielo otoñal y las hojas amarillas que caían.
-En nada- contestó Lily sin quitar los ojos de la ventana.
-No será por Potter… ¿Verdad?
-¿Que dices?...Para nada… Es sólo que….
-Que…?- la invitó a continuar.
-Bueno… es que me confunde que de pronto se porte como un ser humano normal conmigo… Se me hace muy raro!!
-Lils – dijo Cloe sentándose a su lado- Te cueste o no aceptarlo, le gustas!, el chico te está echando los perros… literalmente. Y además yo se que a ti no te trae totalmente sin cuidado.
Lily guardó silencio comenzándose a sonrojar.
-¿Ves?- continuó su amiga dándose aires de sabio – El que calla, otorga…
-Te equivocas- le interrumpió- No me gusta James Potter.
-Pero no te trae sin cuidado, te repito…Además, yo jamás dije que te gustara – dijo entre risas – Te delataste.
La pelirroja le lanzó una mirada furibunda antes de golpearla en el brazo.
-No le vallas a decir a Susan sobre esta conversación, Cloe- le pidió.
-¿Por qué?- preguntó muy extrañada.
-Por que conociéndola querría investigar ella con sus "contactos".
-Oh, entiendo- contestó.
****** *******
Los Merodeadores estaban en su habitación, sentados en el suelo y viendo muy atentamente un papel en el que Sirius rayaba.
-… luego alguien se lanza, rebota y listo.- concluyó Padfoot con una sonrisa triunfante.
-Haz dado ideas extrañas en tu vida, Sirius, pero esta se lleva el premio- dijo Peter.
-A mi también me gusta, pero ¿dónde vamos a encontrar una liga de ese tamaño?- preguntó James.
-Eso es lo de menos- contestó Sirius sacudiendo la mano- Ahora el problema es encontrar el lugar perfecto.
-¿Que tal la ventana del séptimo piso?, esa grande frente a la pintura de los cerdos besucones- sugirió James.
-Oh, sí… los cerdos- recordó Sirius con una sonrisa como, hacía dos años, habían hecho un "retoque" a una pintura que mostraba a un grifo y a un nundu en una eterna y feroz batalla… y que ahora cada cierto tiempo pasaban unos cerdos enviando besos y dejando una estela de arco iris a su paso, hasta convertir la usualmente tétrica pintura en una mancha de color. Dumbledore había reído tanto que ordenó que la pintura se dejara así y obsequió 10 puntos a cada uno por su talento artístico.
-Por cierto, Sirius, ¿de dónde sacaste esa idea?
-Es un secreto profesional.
-¿Que piensas tú, Remus?... Has estado muy callado- preguntó Peter.
-Bueno… yo pienso que es bastante arriesgado, pero me gusta la idea.
-Será mejor que Peter y yo nos vayamos- dijo James levantándose y desarrugando su túnica.- Tenemos clase.
Todos lo imitaron y cada quien se ocupó de sus asuntos.
-Voy a dormir un rato- dijo Remus una vez que Peter y James se habían ido.
-Está bien, yo voy a ir con las chicas, regreso al rato o te veo en el Gran Comedor a la hora de la cena.
-Está bien
Sirius salió cerrando la puerta con cuidado y se dirigió a las escaleras que daban a las habitaciones de las chicas, murmuró unas palabras para deshacerse del hechizo de las escaleras y subió.
Llegó a la puerta correspondiente a las chicas de sexto y tocó tres veces.
-Adelante- escuchó.
Entró y vio a Cloe y a Susan sentadas en el suelo leyendo una revista.
-Estamos haciendo un test de Corazón de Bruja, toma una pluma y ven.
Sirius estaba extrañado pero obedeció.
-¿Que clase de Test es?- preguntó sin poder reprimir una sonrisa burlona.
-Se llama "¿de verdad sientes lo que dices?"- informó Cloe.
Sirius rió burlón de nuevo… Que cursilerías! Pero prefería estar ahí que en su habitación, últimamente Remus lo hacía sentir extraño… No incómodo, pero era algo que no podía definir y lo asustaba.
-Pregunta número uno "Cuando vez a tu peor es nada (NA. aka novio) lo primero que piensas es: a) Que bien se le ven esos pantalones. b) ¿A donde iremos a cenar esta noche?. C) te quedas en blanco y con ganas de abrazarlo.
Cada quién anotó su respuesta en silencio a cada pregunta, una más extraña que la anterior. Terminando sumaron sus puntos.
-¿Cuantos tienes, Sirius? – Preguntó Susan
-Treinta y cuatro.- Respondió aún divertido.
-Veamos… treinta y cuatro… treinta y cuatro… aquí está. De veintinueve a treinta y cuatro- Leyó Cloe- "Valla, tu si sabes lo que quieres, sabes que lo suyo no es nada pasajero, Chicas como tú (Sirius frunció el ceño) son realmente preciadas, sigue así pues recuerda que si dices amar a alguien y no lo haces es el peor de los engaños."
Sirius estaba mudo.
-Bueno eso me tranquiliza- respondió su novia.
-¿Cuántos tienes tu, Sussie?- Preguntó Cloe.
Sirius no podía escuchar nada mas, a él no lo tranquilizaba, algo dentro había estado de acuerdo con eso… Lo que ellas no sabían era que no había estado pensando en Susan al responder las preguntas.
-Olvidé que tengo que ir a hacer una tarea, me tengo que ir.
-Está bien- dijo Susan mientras él se agachaba para darle un casto beso en la boca, luego salió del cuarto. Susan se llevó una mano a los labios.
-¿Que pasó?- preguntó su amiga al ver su reacción.
-Nada… sólo… le noté algo raro.
****** ****
Seguía dando vueltas intentado conciliar el sueño. La luna llena apenas si había pasado y los malestares no aparecerían hasta unos días antes de su transformación… Entonces por que esa ansiedad?
Tú lo sabes
No sé de qué hablas
No mientas, sabes por que estás así.
No es cierto… No es por eso… Yo… sólo…
**** *****
Aventó furioso una piedra al lago, ¿Cómo podía haber pensado eso? ¡Eran simples boberías de una revista tonta!... ¿Por qué había reaccionado de esa manera?
Se culpaba a sí mismo por estar en una situación así, por querer confundirse.
"Estoy en un hoyo" pensó mientras se dejaba caer sobre el pasto. Una ráfaga de aire frío meció su cabello reconfortándole por unos segundos.
Es que… él no era de "esos"… ¿o si?... Nunca se lo había planteado antes, era ridículo. Pero los ojos dorados de su amigo últimamente lo habían hecho sentirse perdido, su desesperación cesaba inconscientemente cuando lo veía sonreír… y cuando lo veía dormir se preguntaba si un ángel bajaba cada noche para pintar una paz semejante en un ser humano.
"Ashh, que cursi!" pensó aún mas molesto, mientras aventaba otra piedra con tanta fuerza que le dio de lleno al calamar.
-Oh oh- murmuró mientras se levantaba y caminaba con paso rápido al castillo; sin saber que ningún ángel pintaba el rostro de Remus, que tallando sus ojos cansadamente aún acostado en la cama, se dio por vencido a poder dormir y tomó un libro de su mesita de noche, dispuesto a leer.
Lily iba agachada leyendo muy atentamente unas notas que le había pasado un chico de séptimo para que contestara las preguntas de McGonagall y ganara puntos. Iba tan concentrada que no se dio cuanta por donde iba hasta que chocó con algo.
-Fíjate por donde vas, sangre sucia- dijo Snape con desagrado.
Lily levantó la cara para ver a su interlocutor- Ah, eres tú- dijo desinteresada volviendo a su lectura mientras continuaba caminando, al pasar junto a Snape, éste la golpeó con el hombro.
-Llegas tarde- dijo Susan cuando Lily se sentó junto a ella en el salón de transformaciones.
-Lo siento- se disculpó, por fin dejando su lectura.
-James reacciona- le llamó Peter al ver que no quitaba la vista de la pelirroja.
Sirius rió mientras bostezaba descaradamente. Remus simplemente seguía leyendo.
La maestra llegó cinco minutos después dejándoles trabajo mientras ella iba recogiendo las tareas, para luego explicarles el siguiente trabajo y dictarles algunos apuntes.
Las clases en general se iban lentas y aburridas.
-Qué tanto lees, Remus?- preguntó Sirius genuinamente interesado a la hora de la comida ya que su amigo no separaba la vista del libro.
-Es un libro.
-¿En serio?
Remus rió.
-Se trata de una chica bastante loca y asesina- respondió viendo directamente a los ojos de Sirius, lo que hizo que su corazón latiera velozmente.
-Tenemos la siguiente hora libre- anunció James.
-Tal vez deberíamos ir con Hagrid a ver si nos consiguió lo que le pedimos.- sugirió Peter.
-Ya conseguí el tubo- dijo Sirius llevándose un bocado de papas a la boca.
-Esto va a resultar más fácil de lo que pensábamos.
Siguieron platicando animadamente y riendo. Terminando de comer, se fueron a los terrenos del colegio (James escuchó que Lily iba a estar ahí).
Caminaron cerca del lago, hablando y haciendo listas de lo que tendrían que comprar el próximo fin de semana en Hogsmeade.
-¡Siri!- gritó una voz de entre los arbustos y luego vieron a Susan correr dejando solas a Lily y a Cloe.
-Vengan- les invitó. Estamos haciendo planes para el fin de semana.
Medio a regañadientes accedieron y la acompañaron a donde había dejado a sus amigas.
-James, esta es tu oportunidad- susurró Sirius.
-¿Oportunidad para qué?- preguntó Susan.
-Oh…. para nada- respondió mientras la agarraba de la cintura.
Sirius se sentía ansioso y le estaba costando trabajo concentrarse pues constantemente su mente divagaba y sin proponérselo llegaba siempre a una misma persona: Remus.
Se molestó consigo mismo, queriendo enterrar esos pensamientos.
-… Y luego de ahí estábamos pensando ir al café- decía Cloe muy emocionada mientras Remus seguía leyendo su libro… si es que se podía leer un libro que estaba al revés. Peter daba ideas de lugares para ir todos juntos, James veía a Lily y ésta lo ignoraba.
Pasaron más de diez minutos planeando, hasta que las chicas anunciaron que tenían que irse, de manera que ellos se ofrecieron a acompañarlas.
Sirius le dio un codazo a James fingiendo toser cuando todos se levantaban. James captó y se puso muy nervioso.
-Ejem… Lily… ¿Puedo hablar contigo?
__________________________________________ _______________________________
Bueno eso fue todo por hoy.
Esperemos que ya no me tarde tanto U_U
Dejen reviews!
Gala
