Hola de nuevo!!!! Siento haberme tardado otra vez, pero la oruga venenosa de mi hermano, secuestró el pc durante dos días, y me fue absolutamente imposible subir capítulo antes. Bueno, siento la tardanza, y espero que os guste. Besos.

Capítulo 16: ¿Amor o pasión?

Harry se encontraba recostado en un sillón de su sala común. Nuevamente estaba casi vacía, a excepción de algún alumno de séptimo que cruzaba ocasionalmente la sala común hacia los dormitorios para buscar algo, y volvía a desaparecer tan rápido como el rayo.

Seguía sin gustarle el hecho de tener que estar solo, lo agobiaba, y aunque sabía que tenía una pila de deberes que hacer en la habitación, tampoco tenía ánimo para hacerlos, sin contar con que seguramente no se podría concentrar.... ¿por qué?

Suspiró. Sabía muy bien el porqué seguramente no se podría concentrar en el trabajo. Había una única razón para eso: Draco Malfoy. ¿Por qué diablos se había tenido que enamorar de él precisamente? Es que no tenía sentido, él era su enemigo... ¿qué había visto en él para que ese cambio hacia el Slytherin se produjera? La respuesta era sencilla: Todo. Todo lo que había visto de Draco hasta hora, todo lo que había descubierto en la última semana lo había sorprendido.

En los seis años anteriores, había conocido a la perfección la parte oscura de Draco, su frialdad, todo lo malo que se puede descubrir en una persona, por lo que ahora solo le quedaba descubrir las que siempre había creído, dudosas cualidades de Slytherin. La parte que lo hacía humano, que, aunque no lo pareciera a simple vista, muy en el fondo, era una buena persona...

Le costaba aceptar este hecho, aunque mucho más le costaba aceptar que se había enamorado de esa persona que nunca creyó pudiese llegar a ser tan especial para él....

Y ahora, lo había citado en la torre de Astronomía para quien sabe que. Esa torre no le traía buenos recuerdos... o más bien, le traía los más maravillosos recuerdos que pudiera imaginar, los cuales no quería ni por un momento recordar, los mismo que le asaltaban a cada segundo en su cabeza...

¿Qué diablos iban a hacer allí? No le parecía que pudiesen encontrar en la torre nada que tubiese que ver con el desafío, y la poción, ciertamente, no requería su presencia...

¿Draco lo había citado allí por otro motivo? No, no tenía sentido, a menos que... No, no podía ser- pensó sintiendo como el miedo y otra sensación totalmente distinta se extendía por su cuerpo- ¿Realmente lo habría citado para calmar finalmente su deseo? ¿Lo habría citado para eso?¿Para poseerlo y desecharlo después?¿ Se habría dado cuenta de lo que sentía por él?¿Querría humillarlo?

Muchas dudas se agolpaban en su interior, la mayoría de las cuales no podía responder, que le producían miedo y anhelo a partes iguales: sentimientos contradictorios en un mismo ser, al igual que odio y amor. Odiaba profundamente estar sintiendo eso por Draco, pero no podía impedir que esos sentimientos, ese amor, fluyera por su cuerpo y nublara sus sentidos...

Sonrió al recordar la definición de odio que había escrito en su ensayo. Le parecía o tan absurda, tan incorrecta cuando la escribió que hasta había llegado a pensar que el libro estaba equivocado, y sin embargo.... Ahora había comprendido cuan ciertas podía llegar a ser esas palabras...

Justo en ese momento, Hermione entró en la sala común, y a l verlo sonreír se acercó rápidamente a él.

-¿Qué ha pasado?¿Por qué estás tan feliz?

-Feliz no es la palabra, Herm.

-¿Qué quieres decir?-dijo sentándose a su lado.

-Nada, tonterías. Simplemente recordaba.

-¿recordabas?-volvió a preguntar Hermione contrariada.

-Tonterías, puras tonterías. Pero bueno, eso da igual-dijo cambiando de tema- ¿qué tal vas con el desafío?-añadió como quien no quiere la cosa.

-Pues hoy hemos descubierto el primer escondite, pero aun no lo hemos podido examinar, por.. bueno, condiciones climatológicas.

-Oh, si, el mediodía, ¿no?

-¿Ya habéis estado allí? Estoy empezando a odiar a Malfoy, algo que ese arrogante no había conseguido en estos seis años.

-No, odio no, Herm, no lo odies-dijo sonriendo al volver a recordar la definición- Ignóralo, el odio no conduce a nada, solo a lograr que nos quebremos la cabeza y nos volvamos completamente locos...

-¿Qué ha pasado?

-¿Cómo?-preguntó Harry sin comprender la pregunta.

-¿qué ha pasado entre vosotros? Has roto la promesa, ¿Verdad?

-¿A que viene eso ahora?

-No me contestes con otra pregunta. Llevas evitando mi mirada desde que llegamos, ¿Sabes que eres malo disimulando?

-Odio esa percepción sobrenatural tuya.

-Eso no contesta a mi pregunta-dijo Hermione sonriendo- ¿Te volvió a besar?

-NO-dijo Harry casi al instante, más alto de lo que pretendía- Claro que no, te dije que no volvería a dejar que eso pasara...yo... este...

-¡¡No me lo puedo creer!! ¿Le besaste tu?¿Tu?- A Hermione se les escapó una carcajada.

-¿Qué diablos te hace tanta gracia?

-¿qué me hace gracia? Harry, tu NUNCA besas a nadie. No sueles tener iniciativa en esas cosas, ¿Y ahora dices que TU besaste a Malfoy? Es para reírse...

Harry se sonrojó y volvió a bajar la vista, con el ceño fruncido por el enojo.

-¿qué es lo que te preocupa ahora?-preguntó Hermione al ver el ceño fruncido en su amigo.

-¿A mí? Arg, eres odiosa, ¿lo sabías? Bueno, me ha citado esta noche en un lugar apartado del castillo, y realmente no se que es lo que quiere que hagamos allí... quiero decir-dijo sonrojándose al darse cuenta de cómo había sonado su última frase- que no se si tiene algo que ver con el desafío o... bueno, tu sabes.

-¿Qué tan apartado es ese lugar?-preguntó Hermione perspicaz.

-La torre de Astronomía.

-La torre de..-dijo como si no comprendiera bien, y de pronto preguntó- ¿Y todavía no sabes que es lo que quiere?¿Tu sabes la fama que tiene esa torre?- Harry arqueó las cejas con incertidumbre, preguntado sin hablar que era lo que quería decir su amiga- Harry, esa torre es conocida porque las parejas suelen ir allí buscando... bueno, "intimidad". Y aun encima te cita de noche... Es como si te pusiera un cartel a todas luces que dijera "Vamos a pasar una desenfrenada noche de sexo salvaje"-rió Hermione.

Un millar de imágenes de Draco y él, sin ropa, recorriendo sus cuerpos, eligieron ese preciso momento para cruzar su mente, sin ayudar precisamente a tomar una decisión "lógica" sobre si ir o no a la cita...

-Pero nosotros estamos haciendo allí nuestra poción, ¿No tendría que ver con eso? Ya hemos estado allí más veces.

-¿Cuál fue la última vez que estuvieron ahí juntos?-preguntó de pronto Hermione.

Harry se concentró un momento, recordando y no pudo evitar cerrar los ojos y suspirar resignado cuando contestó:

-Cuando nos besamos por primera vez.

-¿Lo ves? Hary, no debes ir allí esta noche, es clara la idea que Draco tiene en mente, y de seguro no es una cena romántica a la luz de las velas para declararte su amor.

-Ya lo se, Herm, pero, ¿Y si descubrió algo sobre el nuevo objeto? Cuando descubrimos la clave, puso una expresión extraña que...

-Nada de peros ni de "y sis". Tu sabes tan bien como yo la respuesta a tu propia pregunta. Lo que te debes preguntar es si merece la pena "agarrarte" a algo que posiblemente no durará, y hacerte ilusiones con algo que quizás no es real.

Harry estaba demasiado confundido y angustiado como para darse cuenta de que Hermione no había afirmado categóricamente, sino que había hecho una suposición. Tan lleno de dudas como estaba, solo acertó a decir:

-No te preocupes, Herm, por nada del mundo iré esta noche a la torre de Astronomía.

-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-

A las nueve y media, Harry se encontraba recorriendo el pasillo que llevaba hacia el almacén en desuso en el cual había quedado con Draco.

Se sentía inquieto y culpable por haber faltado a la palabra que le había dado a Hermione, ni siquiera sabía por que estaba haciendo esto, por que se había dirigido, tras la cena, a la torre de Astronomía....

Bueno, si lo sabía, la respuesta pesaba en él como una losa de piedra desde hacía unos días, desde que había descubierto que era ese sentimiento que lo embargaba, pero eso no quitaba el saber que estaba cometiendo una locura...

Hermione tenía razón, se estaba agarrando a un clavo ardiendo con tal de no despertar a la realidad.... la única realidad en estos momentos, que le decía que Draco no lo amaba, simplemente era un pasatiempo para él, un capricho, que una vez que lo obtuviera, se olvidaría de él, lo desecharía como todo lo que no tenía valor...

Pero a la vez, otra voz en su cabeza le decía que eso no era así, que Draco lo amaba, que había sentido su ternura, lo había sentido temblando con emoción contenida con sentimiento más allá del que se pudiera expresar en palabras, sentimiento que solo podía clasificarse como amor... le decía que lo había visto en sus ojos, aunque sin atreverse a confirmarlo por miedo al rechazo... pero no, eso era precisamente engañarse a si mismo.

Draco nunca había sentido amor, mucho menos por él, lo que le hacía preguntarse una vez más ¿qué diablos estaba haciendo en la torre de astronomía a esas horas?

Había llevado consigo el objeto que habían hallado esa tarde, quizás por excusa para acudir al encuentro, quizás por no querer aparecer ante Draco como un depravado cuando el Slytherin solo quería seguir con el desafío, tal vez mezcla de ambas...

Lo cierto era que le temblaban las piernas, que estaba nervioso, exaltado, con oídos atentos a cualquier ruido fuera de lo normal...

Sentía como si estuviese quebrantando una norma, la peor norma del colegio, como si estuviera transgrediendo una ley inquebrantable... y se sentía mal... y a la vez, se sentía mejor que nunca, más vivo, si cabía, más osado.. y más tímido... Un cúmulo de sentimientos contradictorios que le impedían pensar con claridad sobre lo que estaba a punto de hacer, y a la vez le decían que había estado esperando eso toda su vida...

Cuando se encontró frente al a puerta del almacén, dudó unos segundos sobres si entrar o no, pero finalmente posó su mano en el pomo y empujó con suavidad la puerta...

-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-

Draco llevaba veinte minutos en el almacén, esperando sentado sobre un viejo sillón que allí había, y mirando por la única ventana que había en la estancia...

Había llegado más temprano de lo habitual, y ni siquiera sabía muy bien porqué había acudido al almacén esa noche, y mucho menos por qué había citado a Harry allí...

O mejor dicho, si lo sabía, por supuesto que lo sabía... "Deseo" Quería satisfacer su deseo , librarse de esa absurda obsesión que lo había atormentado desde hacía una semana...

Sabía que Harry también lo deseaba, lo había podido notar en sus besos, y recordando el último que habían compartido, no era descabellado pensar que Harry, quizás, se había enamorado de él.

Estaba acostumbrado a esa reacción, solía tener que emplear ese absurdo sentimiento con sus amantes, fingiendo un enamoramientos que nunca sentía, para poder satisfacer su deseo, pero nunca creyó que Harry pudiese llegar a amarlo a él.

Desearlo si, era fácil, él era el chico más deseado de Hogwarts, y era capaz de causar desmayos con un solo guiño, pero, ¿Amor? ¿En su enemigo?

Sin duda eso sería útil después de superar su obsesión, podría vengarse... y dejar a Harry malherido...

Lejos de causarle placer este pensamiento, hizo que se le contrajera el estómago, sensación parecida a la que había sentido al pensar que Harry sería aplastado por la roca en el aula de la planta baja... Arg, ¿Porqué ese sentimiento?

Ojalá Harry llegara pronto, estaba seguro de que vendría a pesar de todo... quería acabar cuanto antes con todo eso...

Casi como si sus pensamientos fuesen escuchados, el Gryffindor abrió la puerta e irrumpió en el frágil silencio de la habitación con su imponente presencia. El momento había llegado...

-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-

Harry buscó en la pequeña estancia con la mirada, y enseguida localizó a Draco con la mirada. Estaba sentado en un viejo sillón, mirando hacia la ventana con aire ausente. Tenía una pierna por encima de uno de los apoyabrazos del sillón, y estaba medio reclinado en su asiento, en una cómoda posición. Giró su cabeza hacia él casi con desgana... hasta que sus ojos se encontraron. Entonces toda la apatía que podría haber sentido el rubio hasta el momento, desapareció, para dar cabida en sus ojos a una nueva sensación.... Deseo, mezclado con algo más....

Cerró la puerta tras de sí, al mismo tiempo que Draco se levantaba del sillón y se acercaba a él, lentamente, en un movimiento medido, desprendiendo su habitual elegancia y seguridad.... En unos pocos pasos se puso frente a él, como la otra vez, con las manos en la espalda, entrelazadas, pero con una respetable distancia entre ambos...

Harry se comenzaba a poner nervioso... más nervioso si cabe de lo que había estado antes de entrar el almacén, y rompiendo el incómodo silencio que todavía reinaba en la habitación y desviando la mirada, dijo:

-¿Para que me has citado aquí, Malfoy? Supongo que es para hablar de desafío y...

-¿No lo sabes?-lo interrumpió Malfoy con calma, mirándolo más profundamente a los ojos.

Harry esperó unos momentos a que el rubio añadiera algo más, pero no lo hizo. Seguía contemplando sus ojos como si hallara un gran placer en este simple hecho, como si contemplar sus ojos esmeralda fuese la más excitante de las tareas, como si no quisiese nada más que ver durante horas esos ojos que había deseado todo este tiempo, y a la vez como si deseara que el tiempo pasara rápidamente para poder hacer mucho más que mirarlo....

-¿A que juegas, Malfoy?-dijo apartando nuevamente su mirada. Esos ojos color plata parecían hechizarlo, impidiéndole la capacidad de pensar...

-¿Jugar?¿Quién habla de juegos?-dijo Malfoy con voz serena y extrañamente ronca de repente. Por algún motivo, ese tono de voz, puso más nervioso a Harry, que no sabía que hacer con sus manos, las cuales se retorcían incesantemente ante sí, hasta que decidió llevárselas a la espalda, imitando el gesto de su compañero de equipo, aunque sin lograr su aplomo y serenidad, mucho menos su elegancia...

-Malfoy... lo que quiera que estés pensando... no- Harry no encontraba las palabras, su cerebro parecía no funcionar correctamente y el tono de su voz, lejos de sonar firme y autoritario, sonaba suplicante, como si no desease realmente lo que estaba diciendo....¿¿Qué diablos?? No deseaba lo que estaba diciendo, deseaba lanzarse al cuerpo del otro y besarlo eternamente, enterrar sus manos en su cuerpo y explorar cada rincón...

-¿No?-preguntó Draco de pronto esbozando una de sus raras sonrisas y clavando su mirada en los labios de Harry- Dime que no lo deseas-volvió a mirar sus ojos esmeralda-dime que quieres que me aparte y te deje ir y lo haré.

Harry intentaba formar las palabras. Era sencillo, solo tenía que decir "Deseo irme", y sabía que Draco no se lo impediría, por alguna razón, confiaba en su palabra, pero su boca parecía incapaz de emitir ningún sonido, y sus ojos eran incapaces de mentirle a esas plateadas perlas que lo miraban en la oscuridad... No quería irse, y aunque seguramente sería el mayor error de su vida, deseaba que el tiempo pasara rápidamente para que se acabaran las palabras, las preguntas, las respuestas no dadas, por miedo, por inseguridad, y compartieran un lenguaje nuevo, lenguaje en el que sus cuerpos dirían todo sin necesidad de nada más, solo un toque, una caricia, diría más que cualquier discurso que pudieran exponer en palabras, porque ambos sentían la verdad que había nacido entre ellos, verdad que no podía esconderse bajo mentiras poco convincentes o miradas desviadas....

-¿Por qué has venido, Harry?-preguntó nuevamente esa voz serena en un susurro.

El Gryffindor volvía a sentir la boca seca, y no sabía que responder. Había venido porque Draco se lo había dicho, pero sabía que el Slytherin no se estaba refiriendo a eso. Sin duda, daba por hecho que Harry sabía que no irían a estudiar en esa torre, si con estudiar se refieren a los libros u objetos, no a estudiarse mutuamente... en ese caso preguntaba por que había acudido sabiendo lo que iba a pasar entre ellos, sabiendo que no se limitarían tan solo a besarse, no a media noche en un cuarto apartado, y Harry no se hallaba preparado para responder a esa pregunta, ni siquiera ante si mismo...

Draco lo miraba ensimismado. Había dudado que el Gryffindor fuera a aparecer esa noche, sobre todo sabiendo lo que podría ocurrir entre ellos después de los últimos dos días, y conociendo la fama que tenía la torre, pero había venido, había aparecido casi sin esperarlo, incluso antes de lo que había previsto, y quería conocer el motivo que lo había llevado a la torre esa noche... si había deseo... o algo más.... ¡¡Se veía tan nervioso el Gryffindor!!¡¡Había tal cantidad de sentimientos confusos en sus ojos!! Pequeños destellos de un millar de sentimientos distintos cruzaban sus ojos, dándole un aspecto desvalido, y a la vez tan mágico, tan... distinto....

Los rayos de luna caían sobre su pelo color azabache, resaltando sus mechones como si plata líquida se deslizara por su cabello indomable, resaltando sus rasgos... y simplemente no pudo evitarlo. Si esperar respuesta, sin esperar ningún otro gesto, se acercó al Gryffindor y rozó suavemente sus labios con los suyos, cerrando los ojos, dejando que las sensaciones nuevas que siempre le producía el moreno se extendieran por su cuerpo...

Harry respondió a su pequeño roce con sorpresa, pero seguidamente, con lentitud, con ternura, fue recorriendo con su lengua sus labios encarnados, haciéndolo que deseara profundizar el beso, volver a sentir sensaciones olvidadas... Sus lenguas se rozaron y el contacto lo hizo perder el control de si mismo que tanto valoraba. Sus manos se deslizaron alrededor de la cintura de Harry, al tiempo que sentía como las manos del moreno se enredaban en su cabello, acariciándolo suavemente, torturándolo lentamente...

Su beso era una mezcla perfecta entre el primer beso que habían compartido en ese mismo lugar y el que se habían dado en la torre de Adivinación, mezcla entre ternura y pasión, sin llegar a su mayor exponente, pero compenetrándose a la perfección. Era mágico, distinto a cuanto había sentido hasta el momento. Todo lo que había compartido con Harry era nuevo, siempre diferente, siempre único... Esa calidez en su interior que nunca había experimentado, parecía dejar su cuerpo más expuesto que nunca al toque de Harry...

Sus manos se deslizaron sin control por debajo de su camisa, ansiando el toque de la piel de Harry bajo sus dedos, sintiendo la suavidad y el calor que emanaba de su cuerpo... Sintió al moreno estremecerse entre sus brazos y un suspiro de placer se escapó de su boca... deseaba hacer temblar al moreno de excitación, de placer, quería hacerlo disfrutar como nunca lo había hecho, que sintiera todas y cada una de sus caricias, que fuera la mejor experiencia de su vida... ¿Por qué se estaba preocupando tan siquiera del bienestar de Harry?

En ese preciso momento sitió como el moreno deslizaba su túnica desde sus hombros hacia el suelo, recorriendo sus brazos, deslizando sus manos sobre los músculos de sus brazos.... separó sus brazos del ansiado banquete que suponía el cuerpo de Harry durante unos segundos, solo para permitir que la túnica que ahora colgaba de sus brazos, abandonara su cuerpo completamente, cayendo al suelo olvidada. Sus manos se apresuraron a regresar hacia la espalda de Harry, volviendo a acariciarla dulcemente, sin separar tan siquiera un instante su boca de la del moreno... Por primera vez en la vida, quería que fuera lento, hacer que la persona que estaba entre sus brazos disfrutara al máximo, sin ni siquiera preocuparse por el mismo, por satisfacer el deseo que ya latía en el interior de sus pantalones, en cada fibra de su ser...

Sintió como el Gryffindor abandonaba su boca, aunque no abrió los ojos. Seguía sintiendo como sus manos se deslizaban por su cuerpo suavemente, y al instante siguiente sintió la boca de Harry perderse en su cuello en la más increíble de las caricias, haciendo que otro suspiro involuntario se escapara de sus labios, sintiendo como ahora era su cuerpo el que se convulsionaba en un inesperado estremecimiento....

Las manos de Harry desabotonaban ahora su camisa, lentamente, tomándose su tiempo, torturándolo con ese profundo anhelo y esa agonía que se había apoderado de él...

Sus manos abandonaron la espalda de Harry y comenzaron a desanudarle la corbata, hasta que esta calló al suelo olvidada junto a la túnica de Draco... Temblaba... estaba temblando... él, Draco Malfoy, temblando bajo el toque de Harry Potter...

Su pecho quedó al descubierto, expuesto al toque de Harry, cuyas manos se apresuraron a llenarlo de caricias, deslizándose por sus músculos, hasta el último rincón de su torso...

¡¡Dios!! No podía pensar, no quería pensar en nada, solo sentir a Harry... ¿cómo no se había sentido así antes? No era solo deseo, pasión... no, esa sensación maravillosa tenía que ser cosa de magia... ¿qué otra cosa lo haría temblar así, sin control, bajo cada caricia de esos dedos vengativos que querían que sufriera como nunca?...

Otro suspiro escapó de sus labios y apretó sus dedos, casi clavándolos en la espalda de Harry ¡¡Por Merlín!! No podía soportarlo más... quería sentirlo ya bajo su cuerpo, quería hacer suyo al objeto de su deseo, quería amarlo desenfrenadamente como nunca antes había amado a nadie... ¿Amado?

Abrió sus ojos con sorpresa y temor, todavía sintiendo como Harry lo tocaba... ¿Amaba a Harry?¿Amor era esa sensación cálida que lo había embargado? Había desechado esa sensación antes de haberla analizado, y eso no era propio de él... el amor era para los débiles... ¿pero por que se sentía entonces tan vulnerable al toque de Harry, a lo que le pasara?¿Por qué se preocupaba por él? No, no quería una noche de sexo desenfrenada y olvidarse de todo después, no quería que ese capricho terminara... quería sentirlo suyo, saber que iba a ser siempre suyo, que nadie más tocaría lo que tanto apreciaba... su mayor tesoro, más allá de cualquier cosa terrenal que poseyera...

¡¡Dios!! Amaba a Harry... ¿por qué él?¿Y por que se daba cuenta ahora? Lo amaba, como nunca antes había amado a nadie, pero quería sentirse amado... No quería su deseo, su lujuria, quería su amor, su ternura.... pero quizás el Gryffindor nunca llegara a amarlo... Había creído ver ese sentimiento en sus ojos, pero, ¿no sería un reflejo de los propios ojos lo que había visto en las esmeraldas del gryffindor al mirar en ellos?...

Por primera vez en la vida, quería sentirse amado, protegido, como nunca antes lo habías estado, ni siquiera con su familia, y tener a Harry ahí, besándolo por pura pasión, por puro deseo, sin nada más, no era lo que deseaba en ese momento.

Se separó bruscamente de Harry, lo miró a los ojos un instante, y sin mediar palabra salió por la puerta que estaba a su izquierda, dejando el almacén atrás...

Necesitaba estar solo, necesitaba pensar y analizar lo que acababa de descubrir, y después, elegir la forma correcta de actuar...

Era curioso, ahora era él, Draco Malfoy, el que salía huyendo de Harry... ¿No era una contradicción perfecta?

FIN DEL CAPÍTULO

Anotación: La autora no se hace responsable. Se acaba de meter debajo de una capa de invisivilidad, por previsión de que los lectores quieran echarsele encima, jajajjaja. No me mateeeeeis, pleaseeeee!!!!!!!!!!!!! XD Bueno, capítulo sensiblemente más largo que los demás, y el que queda, todavía es más largo que este. Ahora, el epílogo es bastante más corto, pero bueno, espero que los sigáis disfrutando ;-)

liuny, si el otro te pareció interesante, no quiero ni pensar en este, jejejeje. Bueno, parece que Draco ya (por fin) ha descubierto que eso que está sintiendo es Amor, ¿como actuará ahora? Bueno, no más queda el siguiente capítulo y el epílogo, así que la curiosidad de saber como va a ser saciada pronto ;-) Arriba Slytherin, y gracias por el review!!

malena, bienvenida. Me alegra que te guste, gracias por el review :D

gabiKinomoto, bueno, ¿para que querría Draco que Harry fuera a la torre? jajajaja, bueno, ahora ya lo sabes, ¿no? Uff, siento el final del capítulo (bueno, no, XDD), pero es que estos chicos actuan por su cuenta, yo no los controlo, ains... Graxes por el review, linda, espero que te siga gustando ;-)

Loka-Park-Felton, bueno, pues si, tienes razón en lo de que no se va a dejar reviews feos, ¿no? jejejeje. Gracias por tu afecto, tu también tienes el mío por dejarme siempre unos reviews tan buenos, linda ;-) Espero que tu pc vaya mejorando, es horrible tener mal el pc. Bueno, parece que la oruga venenosa de mi hermano volvió a la carga, y lleva dos días sin dejarme conectar, arggggg, lo odio. Tendré que emplear un hechizo más fuerte.... En fin, gracias de nuevo por el review, linda. Besos :D

Duare, si, Draco iba bien encaminado, tan bien encaminado que ya se ha dado cuenta (en que momentos, ¿verdad? jajajaja ) (yo más que con Harry, tendría deseos de acostarme con Draco, pero esa es otra historia XDD ) Me alegra que te esté gustando, espero que siga así después de este desastroso capítulo, jejejejeje. Por cierto, lo de la torre de astronomía lo sabía, si me uní a tu grupo de msn (por eso te pedí la dirección ) aunque todavía no haya escrito nada por ahí, ya sabes que me uní ;-) Graxes por el review :D

Conacha, pues sí, como tu dices, Aleluya que se dio cuenta de lo que sentía, uff. Todos sabíamos que Harry es lento, pero es que Draco en este fic lo supera, jajajajajaja, y eso que tiene en teoría más "experiencia" XD Pero como bien dices, los fue descubriendo solo, sin ayuda de ninguna "Hermione", así que no es de extrañar que se tardara tanto, ¿no?¿He dicho yo alguna vez que estaba completamente cuerda o que empleaba la lógica? no, ¿verdad? jajajajaja, entonces claro que hay ideas extrañas en mi fic, jajajajaja. Gracias una vez más por tu review ;-)

the angel of the dreams, tienes razón, Harry es muy perspicaz en relación a Draco, pero generalmente porque tiene ayuda. Puede distinguir sus sensaciones (miedo, angustia, y demás ) pero no asociarlas a "sentimientos más profundos". Bueno, el desafío tiene mucho que ver con los sentimientos de ellos dos... o tal vez no. Tendrás que seguir leyendo para saberlo, jejejejeje. Solo te digo una cosa. El fic se llama "Desafío", quizás no se refiera solamente a lo que tienen que hacer para las clases.... Gracias por el review ;-)

Malfoy Slytherin, jajajaja, si, Draco tan sarcástico como siempre, si es que este chico no cambia, ains, jajajajaja. Bueno, en realidad es un mero toque, pero que tiernos que se ven juntitos, ¿verdad? jejejejeje Supongo que tus ojos se quedarían pegados a la pantalla en la última escena, y se despegarían bruscamente cuando Draco se alejó del almacén, ¿no? jajajajaja, ains, que mala que soy, y voy a ser la causante de que tengas que ir al oculista, que remordimiento de conciencia, ains... jejejeje. Graxes por el review. Besos ;-)

Anny Pervert Snape, si, la tensión sexual entre ambos también está acabando conmigo, ains, jajajajajaja. Pero es que esos dos hacen lo que les place, desgraciadamente no los controlo... Acercamientos hubo, ahora, no creo que los que ellos (ni nosotros) esperában, jejejeje. Gracias por el review.

Y a todos, ya sabéis. Cualquier duda, comentario o sugerencia, en review, please.

Besos

missi