OK, primero que nada gracias por los reviewers:
Kaede Sakuragi: me agrada la idea, sería divertido si hubieran terminado por algo así, es una buena posibilidad, espero te guste el capítulo.
Virgo no Shaka: me da gusto que hayas leído y que te guste como lo haga, estoy tratando de actualizar lo mas seguido posible y las parejas, creo que son de las que mejor se ven juntos
Shouran: Creo que Shaka empezó a tomar cuando Ikki lo botó pero podría ser, no hay que descartar ninguna idea. Gracias por la idea.
Lunawood: si, ¡a todos les gusta el fut! O al menos aquí si y ya pronto sabremos si Ikki perdona a Shaka, como veras en este capítulo lo extraña bastante. Ojala te guste.
Ahora, sin más:
Capítulo 4: Me muero por abrazarte
Milo en su casa despertó más temprano de lo usual. Desde la noche anterior no había podido dejar de pensar en lo que Camus le había dicho. Su amigo estaba enamorado de uno de los caballeros de Atena, le había insistido un millón de veces pero no había conseguido que Camus soltara el nombre del dueño de sus pensamientos. ¡Como él, Milo de Escorpio, su mejor amigo no lo sabía! Lo intrigaba descubrir quien sería.
–Definitivamente no es ninguno de los caballeros de plata, casi nunca trata con ellos- pensaba –y de los de bronce, solo se lleva con Hyoga y su novio así que es poco probable que sea uno de ellos. Entonces por proceso de eliminación nos quedan los caballeros de oro. ¡Si, debe ser un caballero dorado!
-¿Quién debe ser un caballero dorado?
-Shura, creo que estaba pensando en voz alta
-Si, así parece. ¿A dónde vas tan temprano?
-Voy a ver a Camus, vamos a salir a desayunar
–Pues bueno no te entretengo más- Shura se sintió feliz por su amigo, de seguro todo iba por buen camino, Milo nunca se despertaba temprano y el que lo hubiera hecho para ir a una "cita" con Camus era en definitiva una buena señal.
Aldebarán no pudo contener la risa al entrar a la casa de Aries y encontrar a Mu, con un delantal de tulipanes amarillos cantando y bailando mientras lavaba los platos. Mu al escucharlo se lo quitó rápidamente y adoptó una pose "natural"
-¿Por qué estas tan contento esta mañana, amigo mío?- pregunto Aldebarán cuando finalmente pudo dejar de reír.
-Aldebarán, mi amigo, la vida es hermosa.
-OK, si, lo que tu digas... Ah, claro, ahora lo recuerdo. ¿Quieres venir esta noche a un bar? Tú sabes, con todos.
-Suena bien.
-Perdona, ¿eso quiere decir que si vendrás?- dijo Aldebarán con asombro, el caballero de Aries casi nunca los acompañaba a esas salidas nocturnas.
Mu asintió con una sonrisa. A Saga le encantaban esas cosas y era probable que quisiera ir. –Perfecto- concluyo Aldebarán mientras caminaba a la salida –La cita es a las 8:00 aquí. No llegues tarde.
En otro lugar no muy lejano Shaka despertaba, con dolor de cabeza, la boca seca, un terrible olor a alcohol. Definitivamente había vuelto a excederse esa noche, pero a todo eso ¿Cómo había llegado a su casa? Recordaba que Saga le había ayudado a quitarse a Mu de encima, entonces se había tomado una botella de tequila, y una de vodka y una de ron y no podía recordar que mas, recordaba haber estado sentado en la barra, viendo como bailaban Marín y Aioria y de pronto todo se ponía borroso, recordaba haberse tratado de levantar y después... no, no tenía idea de cómo había llegado a casa –De seguro Mu me trajo. Le agradeceré mas tarde- se sentó en la cama y grande fue su sorpresa al voltear y ver a Ikki sentado en un silloncito cercano, lo miraba fijamente –No, no fue Mu quien te trajo y no necesitas dar las gracias- dijo, luego se puso de pie, tomo su chamarra y salió de la habitación
-Es un caballero dorado, ¿verdad?
-Ya te dije que no voy a decirte quien es Milo
-Pero es un caballero dorado, ¿o me equivoco?- miró fijamente a Camus, este último asintió finalmente -¡Lo sabía!
-¿Es Mu?, no, debe ser alguien que viva mas cerca ¿Shura?... ¿Afrodita? No, eso sería demasiado raro, ¿no es el anciano maestro?, no, debe ser alguien con mas, con mas estilo, mas sex appeal... ¿Saga?, ¡Shaka! Debe ser Shaka. ¿En serio es un caballero dorado?
Camus negaba cada nombre que decía Milo, quien ya había repetido unas veinte veces los nombres de todos los caballeros –Esta bien. Me rindo por ahora
Antes del mediodía Milo se fue a su casa. En el camino pensaba quien podría ser el afortunado. -¿Afortunado? Si, es alguien muy afortunado- se decía –No cualquiera podría haber atrapado el frío corazoncito de su amigo, que además de todo, es todo un partidazo. Si, es culto, elegante, un gran compañero y amigo. Y, hay que aceptarlo, es bastante bien parecido. Imagino que también debe ser un gran amante... pero Milo ¿Qué cosas piensas?- se reprochó mentalmente –Le deseo mucha suerte a Camus y quienquiera que sea, pero pobre de ese tipo si trata mal a mi amigo porque se las vería con mi aguja escarlata, por Camus sería capaz de cualquier cosa. Si, es un gran amigo y le deseo lo mejor. ¡¿Entonces por que demonios estoy celoso?!- se detuvo de golpe. No entendía porque pero de pronto sentía celos de esa otra persona a la que Camus amaba tanto.
Necesitaba estar a solas un rato, meditar lo que estaba sintiendo, camino y caminó, quería alejarse del Santuario. En el camino se cruzó con Ikki, quien por cierto traía cara de pocos amigos. Y como molestar a los caballeros de bronce siempre lo animaba pensó en hacerlo enojar.
-¿A dónde vas fénix?
-No te importa
-¿Vienes de casa de Shaka?
-No te importa- lo miro desafiantemente
-¿Yo que te hice?- pero al ver frente a frente a Ikki pudo notar la gran tristeza en el corazón del caballero –Oye, lo siento. No ha sido un muy buen día y supongo que quise desquitarme contigo.
-No importa
-Oye, conozco un bar muy bueno y que esta abierto a esta hora. ¿Quieres un trago?
-¡No lo puedo creer. Apenas es mediodía y estos dos ya andan en peleas de cantina!
-Saori, calma- dijo Seiya tomándola de la mano –deja que me encargue de eso, si
La diosa trato de clamarse. La noticia de que dos de sus caballeros estaban arrestados por pelear en el bar no era una buena forma de ser despertada. Dejo que Seiya controlara el asunto y se dispuso a tomar un baño de burbujas, necesitaba relajarse y pensar en el castigo adecuado para esos dos.
Seiya acompañado de Shiryu fue a la delegación a sacar a Milo e Ikki, quienes entre la depresión y el alcohol ya no eran dueños de sus actos. Después de dejarlos en sus respectivas habitaciones se fueron a jugar Play Station con Kiki, pero Seiya perdía muy rápido y empezaba a desesperarse...
Ikki despertó pronto –No volveré a salir con Milo, sabe dios a que cantina de mala muerte me lleva donde puro alcohol adulterado que con un par de copitas ya estas mal... Necesito hablar con Shun, el es mi hermano y podrá decirme que hacer con Shaka ahora. Camino hasta la alcoba que compartían su hermano e Hyoga, abrió la puerta y vio a su hermano acostado, durmiendo pacíficamente, una dulce sonrisa se dibujo en sus labios, dio media vuelta y se topo con Hyoga –Anoche estaba exhausto, creo que dormirá un rato más. ¿Quieres que le diga que te busque cuando se levante?- pero Ikki aun estaba bajo los efectos del alcohol, y vio a Hyoga, cabellos rubios y ojos azules, una voz le hablaba amablemente y tal vez por inercia o porque sus querían jugarle una broma o tal vez era un grito de dolor de su corazón, sea por lo que fuere, sin decir nada, se acerco a Hyoga y trato de besarlo.
Pero el caballero del cisne ya se había percatado del estado del fénix por lo que lo empujo levemente mientras le decía –Ikki, soy yo, Hyoga, el novio de tu hermano menor Shun, ¿recuerdas?- Ikki lo miró atentamente –¡Hyoga!, hola ¿Dónde esta mi hermano?
-Aun duerme, ¿quieres que le diga que te busque cuando despierte?
-Si, dile que, dile que su hermano mayor lo necesita, que necesito de su consejo, OK? Puedes hacer eso por mi pato?
Hyoga asintió y luego vio a Ikki marcharse tambaleándose. ¿De que querría hablar con Shun?
OK, este fue el capítulo 4, gracias a todos aquellos que leyeron hasta aquí. Este capítulo estuvo un poco flojo pero es el preámbulo del gran final que vendrá ya en 2 o 3 capítulos. Cualquier comentario, sugerencia, crítica o jitomatazo favor de dejar un reviewer. Y si escuchan por ahí algún rumor o se les ocurre una idea de porque terminaron Shaka e Ikki, dejen un reviewer, por fa!!!
Kaede Sakuragi: me agrada la idea, sería divertido si hubieran terminado por algo así, es una buena posibilidad, espero te guste el capítulo.
Virgo no Shaka: me da gusto que hayas leído y que te guste como lo haga, estoy tratando de actualizar lo mas seguido posible y las parejas, creo que son de las que mejor se ven juntos
Shouran: Creo que Shaka empezó a tomar cuando Ikki lo botó pero podría ser, no hay que descartar ninguna idea. Gracias por la idea.
Lunawood: si, ¡a todos les gusta el fut! O al menos aquí si y ya pronto sabremos si Ikki perdona a Shaka, como veras en este capítulo lo extraña bastante. Ojala te guste.
Ahora, sin más:
Capítulo 4: Me muero por abrazarte
Milo en su casa despertó más temprano de lo usual. Desde la noche anterior no había podido dejar de pensar en lo que Camus le había dicho. Su amigo estaba enamorado de uno de los caballeros de Atena, le había insistido un millón de veces pero no había conseguido que Camus soltara el nombre del dueño de sus pensamientos. ¡Como él, Milo de Escorpio, su mejor amigo no lo sabía! Lo intrigaba descubrir quien sería.
–Definitivamente no es ninguno de los caballeros de plata, casi nunca trata con ellos- pensaba –y de los de bronce, solo se lleva con Hyoga y su novio así que es poco probable que sea uno de ellos. Entonces por proceso de eliminación nos quedan los caballeros de oro. ¡Si, debe ser un caballero dorado!
-¿Quién debe ser un caballero dorado?
-Shura, creo que estaba pensando en voz alta
-Si, así parece. ¿A dónde vas tan temprano?
-Voy a ver a Camus, vamos a salir a desayunar
–Pues bueno no te entretengo más- Shura se sintió feliz por su amigo, de seguro todo iba por buen camino, Milo nunca se despertaba temprano y el que lo hubiera hecho para ir a una "cita" con Camus era en definitiva una buena señal.
Aldebarán no pudo contener la risa al entrar a la casa de Aries y encontrar a Mu, con un delantal de tulipanes amarillos cantando y bailando mientras lavaba los platos. Mu al escucharlo se lo quitó rápidamente y adoptó una pose "natural"
-¿Por qué estas tan contento esta mañana, amigo mío?- pregunto Aldebarán cuando finalmente pudo dejar de reír.
-Aldebarán, mi amigo, la vida es hermosa.
-OK, si, lo que tu digas... Ah, claro, ahora lo recuerdo. ¿Quieres venir esta noche a un bar? Tú sabes, con todos.
-Suena bien.
-Perdona, ¿eso quiere decir que si vendrás?- dijo Aldebarán con asombro, el caballero de Aries casi nunca los acompañaba a esas salidas nocturnas.
Mu asintió con una sonrisa. A Saga le encantaban esas cosas y era probable que quisiera ir. –Perfecto- concluyo Aldebarán mientras caminaba a la salida –La cita es a las 8:00 aquí. No llegues tarde.
En otro lugar no muy lejano Shaka despertaba, con dolor de cabeza, la boca seca, un terrible olor a alcohol. Definitivamente había vuelto a excederse esa noche, pero a todo eso ¿Cómo había llegado a su casa? Recordaba que Saga le había ayudado a quitarse a Mu de encima, entonces se había tomado una botella de tequila, y una de vodka y una de ron y no podía recordar que mas, recordaba haber estado sentado en la barra, viendo como bailaban Marín y Aioria y de pronto todo se ponía borroso, recordaba haberse tratado de levantar y después... no, no tenía idea de cómo había llegado a casa –De seguro Mu me trajo. Le agradeceré mas tarde- se sentó en la cama y grande fue su sorpresa al voltear y ver a Ikki sentado en un silloncito cercano, lo miraba fijamente –No, no fue Mu quien te trajo y no necesitas dar las gracias- dijo, luego se puso de pie, tomo su chamarra y salió de la habitación
-Es un caballero dorado, ¿verdad?
-Ya te dije que no voy a decirte quien es Milo
-Pero es un caballero dorado, ¿o me equivoco?- miró fijamente a Camus, este último asintió finalmente -¡Lo sabía!
-¿Es Mu?, no, debe ser alguien que viva mas cerca ¿Shura?... ¿Afrodita? No, eso sería demasiado raro, ¿no es el anciano maestro?, no, debe ser alguien con mas, con mas estilo, mas sex appeal... ¿Saga?, ¡Shaka! Debe ser Shaka. ¿En serio es un caballero dorado?
Camus negaba cada nombre que decía Milo, quien ya había repetido unas veinte veces los nombres de todos los caballeros –Esta bien. Me rindo por ahora
Antes del mediodía Milo se fue a su casa. En el camino pensaba quien podría ser el afortunado. -¿Afortunado? Si, es alguien muy afortunado- se decía –No cualquiera podría haber atrapado el frío corazoncito de su amigo, que además de todo, es todo un partidazo. Si, es culto, elegante, un gran compañero y amigo. Y, hay que aceptarlo, es bastante bien parecido. Imagino que también debe ser un gran amante... pero Milo ¿Qué cosas piensas?- se reprochó mentalmente –Le deseo mucha suerte a Camus y quienquiera que sea, pero pobre de ese tipo si trata mal a mi amigo porque se las vería con mi aguja escarlata, por Camus sería capaz de cualquier cosa. Si, es un gran amigo y le deseo lo mejor. ¡¿Entonces por que demonios estoy celoso?!- se detuvo de golpe. No entendía porque pero de pronto sentía celos de esa otra persona a la que Camus amaba tanto.
Necesitaba estar a solas un rato, meditar lo que estaba sintiendo, camino y caminó, quería alejarse del Santuario. En el camino se cruzó con Ikki, quien por cierto traía cara de pocos amigos. Y como molestar a los caballeros de bronce siempre lo animaba pensó en hacerlo enojar.
-¿A dónde vas fénix?
-No te importa
-¿Vienes de casa de Shaka?
-No te importa- lo miro desafiantemente
-¿Yo que te hice?- pero al ver frente a frente a Ikki pudo notar la gran tristeza en el corazón del caballero –Oye, lo siento. No ha sido un muy buen día y supongo que quise desquitarme contigo.
-No importa
-Oye, conozco un bar muy bueno y que esta abierto a esta hora. ¿Quieres un trago?
-¡No lo puedo creer. Apenas es mediodía y estos dos ya andan en peleas de cantina!
-Saori, calma- dijo Seiya tomándola de la mano –deja que me encargue de eso, si
La diosa trato de clamarse. La noticia de que dos de sus caballeros estaban arrestados por pelear en el bar no era una buena forma de ser despertada. Dejo que Seiya controlara el asunto y se dispuso a tomar un baño de burbujas, necesitaba relajarse y pensar en el castigo adecuado para esos dos.
Seiya acompañado de Shiryu fue a la delegación a sacar a Milo e Ikki, quienes entre la depresión y el alcohol ya no eran dueños de sus actos. Después de dejarlos en sus respectivas habitaciones se fueron a jugar Play Station con Kiki, pero Seiya perdía muy rápido y empezaba a desesperarse...
Ikki despertó pronto –No volveré a salir con Milo, sabe dios a que cantina de mala muerte me lleva donde puro alcohol adulterado que con un par de copitas ya estas mal... Necesito hablar con Shun, el es mi hermano y podrá decirme que hacer con Shaka ahora. Camino hasta la alcoba que compartían su hermano e Hyoga, abrió la puerta y vio a su hermano acostado, durmiendo pacíficamente, una dulce sonrisa se dibujo en sus labios, dio media vuelta y se topo con Hyoga –Anoche estaba exhausto, creo que dormirá un rato más. ¿Quieres que le diga que te busque cuando se levante?- pero Ikki aun estaba bajo los efectos del alcohol, y vio a Hyoga, cabellos rubios y ojos azules, una voz le hablaba amablemente y tal vez por inercia o porque sus querían jugarle una broma o tal vez era un grito de dolor de su corazón, sea por lo que fuere, sin decir nada, se acerco a Hyoga y trato de besarlo.
Pero el caballero del cisne ya se había percatado del estado del fénix por lo que lo empujo levemente mientras le decía –Ikki, soy yo, Hyoga, el novio de tu hermano menor Shun, ¿recuerdas?- Ikki lo miró atentamente –¡Hyoga!, hola ¿Dónde esta mi hermano?
-Aun duerme, ¿quieres que le diga que te busque cuando despierte?
-Si, dile que, dile que su hermano mayor lo necesita, que necesito de su consejo, OK? Puedes hacer eso por mi pato?
Hyoga asintió y luego vio a Ikki marcharse tambaleándose. ¿De que querría hablar con Shun?
OK, este fue el capítulo 4, gracias a todos aquellos que leyeron hasta aquí. Este capítulo estuvo un poco flojo pero es el preámbulo del gran final que vendrá ya en 2 o 3 capítulos. Cualquier comentario, sugerencia, crítica o jitomatazo favor de dejar un reviewer. Y si escuchan por ahí algún rumor o se les ocurre una idea de porque terminaron Shaka e Ikki, dejen un reviewer, por fa!!!
