:: Fantasía ::

A mi querida amiga Karolyn, porque es la persona más dulce que conocí en mi vida y que probablemente vaya a conocer después.

El joven miró su reloj: ya había pasado media hora desde que se había sentado en el banco de aquella plaza, a esperar. Un par de golondrinas revolotearon hasta sus pies, picoteando sus zapatos con suavidad. Sonrió, inclinándose para acariciarlas. Un niño que pasaba frente a él, de la mano de su madre, se quedó contemplándolo con fascinación.

-¡Mirá, mamá, ese chico está acariciando a los pajaritos!

-No seas ridículo, -Exclamó la madre sin prestarle atención. –los pájaros de una plaza no se dejan tocar.

-¡Pero, mamá...!

-Basta, apurate, dale.

Sintió pena por el niño, y, aprovechando que aún lo observaba, murmuró en silencio:

-Todo es posible. Todo. Cuando quieras.

Se sonrieron mutuamente: siempre son los más pequeños los primeros en comprender la verdad.

Una golondrina voló hasta su cabeza y le hizo cosquillas, despeinándolo. Cerró los ojos, extasiado con el breve episodio. Pero los abrió de pronto, al oír pasos apresurados por el camino de polvo de ladrillo.

-¡Lo siento tanto! –Se disculpó una voz femenina. –Es que no encontraba la calle...

Él contempló con cariño la amada figura.

-Valió la pena la espera. –Murmuró, poniéndose de pie.

El niño, que caminaba a los tropezones por no querer apartar la mirada de ellos, sintió que estaba presenciando algo verdaderamente grande. Un amor de ésos que sólo aparecen en las fantasías.

Kaho y Eriol también lo sintieron. Pero ellos sabían perfectamente que la vida también es una fantasía.

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Notas de la Autora: ¡Aquí está mi fic feliz! Espero que les haya gustado, especialmente a mi Karolyta querida que fue quien me pidió que lo escribiera. Esto me da libertad de hacer otra docena de fic morbosos, jo jo... Please dejen reviews y continúen en paz, sin olvidar que la verdad se nos presenta en ocasiones de las formas más extrañas. Quizás, en un fic como este. En una fantasía.

Lila Negra

Sábado, 18 de Septiembre de 2004