ERI MOND LICHT: yay!! Te gustó el dibujo!! *^^* son muy lindos....jajaja, pero ni creas que dibujo así siempre...más bien modifico.....Bueno, lo siento...no te diré a quien escogerá Josie ahora....¡eso arruinaría el fic!...mil gracias por tu review!!

Kalid: ¬¬ apenas te das cuenta que estoy loca?!...Sí, si...el final será bueno [oye! El otro también lo fue!]...Oh! la peli la mueve!! *ü* viste a Frodo sonreír malévolamente en el monte del destino!..Se veía demasiado bien....xP siii, Arwen se veía horrible con ese vestido verde!!!....eh! te voy a mandar unos dibujos!

Kandra: ¿Qué no mate a Josie? ¿Qué se quede con Frodo? *risa malévola* ¿y que te hace creer que Josie elegirá a Frodo?....¿qué te hace creer que no estará en la batalla de Gondor junto a Legolas? Es más...¿qué te hace creer que no se irá con Pippin?....Ok, ok me emocioné....Pippin no tiene nada que ver....Pero una vez más! No les diré si Josie vivirá, si se irá con Legolas o con Frodo!...(ah....el poder de la duda!)

Jejejejeje, bueno ya.....aquí está el capi.

Capítulo 4.-Moria

-Tengan cuidado-les dijo Gandalf empezando a avanzar en la oscuridad.-Hay cosas más viejas y malignas que orcos en los lugares más profundos del mundo.-Josie se acercó a él, realmente estaba asustada, odiaba la oscuridad. Entonces sintió una mano confortadora en su hombro. Se giró y vio a Legolas que le sonreía, ella le sonrío también. Y tras ellos, caminaba Frodo, con cara de pocos amigos.-Silencio, es una jornada de cuatro días hasta llegar al otro lado. Esperemos que nuestra presencia pase inadvertida.-Avanzaban entre esqueletos y huesos, Josie tomó la mano de Legolas muerta de miedo.

-Tranquila-él le susurró.

-Es que...-dijo ella en voz baja-...esto no me agrada en lo más mínimo....-Legolas guió a Josie a través de una saliente de un precipicio. Subían escaleras por aquí, y por allá. Caminaban un poco más, y subían escaleras de nuevo...era extenuante.

Gandalf se detuvo e iluminó una pared. Algo plateado brillaba en ella. Todos lo miraron asombrados y tocaban los trazos plateados, tratando de adivinar lo que era.

-El valor de Moria no era oro, ni piedras preciosas...sino mithril.-Gandalf iluminó frente a ellos y todos se asombraron al ver lo profundo de la caída del precipicio. Josie apretó la mano de Legolas temiendo poder caer.-Bilbo tenía una camisa de anillos de mithril que Torin le dio.

-Oh, ese era un regalo noble-dijo Gimli desde atrás.

-Sí-acordó Gandalf.-Nunca se lo dije, pero su valor era más grande que el de la Comarca en sí.-Frodo abrió la boca sorprendido, él, en estos momentos llevaba esa malla....¡llevaba puesto algo más valioso que la Comarca!

Siguieron caminando hasta que el hambre y cansancio los venció. No sabían hace cuanto habían empezado ese trayecto, podría ser un día, podría ser dos horas...nadie llevaba cuenta de ello.-Hasta aquí llegaremos. Coman, duerman y descansen. Yo haré la guardia.-Gandalf les dijo.

-¡Comida!-Pippin se metió un pan completo a su boca.

-Vas a ahogarte....-lo reprendió Josie.

-¡Vale la pena!-dijo Merry engullendo un pan él también. Josie los miró sorprendida mientras sostenía su pedazo de pan en la mano.

-Es obvio Josie, que no hay descendencia hobbit en ti.-Pippin hablaba con la boca llena.

-¿Cómo estás tan seguro?

-No tienes pies de hobbits, no comes como hobbit, estás delgada.....tu estatura es lo único que me hace dudar, eres un poco más baja que nosotros.

-¡Oye!

-Es la verdad.....

-No empiecen una pelea-los reprimió Aragorn.-Pippin, deja a Joselyn en paz. Si ella no engulle su comida como tú, muy su problema.

-Lo siento...-Pippin dirigió una sonrisa picarona a Josie. Ella meneó la cabeza y sonrió. Frodo los miraba atentamente. "Creo que fueron falsas esperanzas..." se decía mientras masticaba su comida. Josie no le había hablado desde que entraron a las minas. "Sólo está con Legolas..." Frodo recordó como Josie apretaba la mano de Legolas cuando sentía miedo. "Yo te protegería con mi vida..." Frodo suspiró y meneó la cabeza. Subió su mirada para ver a Josie de nuevo, ella tomaba agua, y cuando estuvo satisfecha dejó la botella y su mirada se cruzó con la de Frodo. Ella le sonrió y lo saludó con la mano, Frodo agradeció que estaba oscuro porque sintió como su cara se ponía roja. Sólo atinó a sonreír y mover su mano también.

-¡Hora de dormir!-Pippin tendió sus colchas junto a Josie.-No te preocupes Jos, no te pasará nada junto a mí.

-¡No le creas Josie!-dijo Merry poniendo sus colchas del otro lado de ella.-Estarás más segura conmigo.

-No sé porqué tengo el presentimiento de que estaré más segura allá...en el otro extremo-rió Josie mientras se levantaba.

-¡Cómo quieras! ¡Qué te coman los esqueletos muertos!-Pippin le dijo al ver, que como de costumbre, Josie extendía sus colchas un poco lejos de la comunidad.

-¡Cállate!-se escuchó la voz de Boromir.

-¡Sí Pippin, deja dormir!

-Ohh..¡qué genio se cargan!-Pippin se echó sus mantas encima y ya no habló más. Pero no puedo conciliar el sueño. Al cabo de un rato se levantó y miró a todos. Gandalf estaba de espaldas y no pareció notar que se había levantado. Pippin miró a Josie dormir "en el otro extremo", ella tenía sus colchas encima y respiraba suavemente. Entonces algo llamó la atención de Pippin. Frodo seguía despierto, sin embargo no había notado que Pippin también lo estaba, pues estaba encimado en sus pensamientos, mirando a Josie. Pippin sonrió, no se había equivocado después de todo. Después de unos momentos, Frodo suspiró y se dispuso a dormir.

-¿Gandalf?-susurró Pippin al aburrirse de ver a la gente dormir, pero este no le respondió, parecía estar en trance.-¡Gandalf!-lo llamó más fuerte, el mago salió del trance y le prestó atención a Pippin.

-¿Qué sucede?-dijo mirando al hobbit.

-Oh...es que no puedo dormir...

-¡¿Y esa es razón para molestarme?!

-No te enojes...sólo quería hablar con alguien...

-Bah....bueno, ¿y qué quieres decirme?

-¿No has notado que Frodo esta muy raro?

-¿Raro?-respondió Gandalf mirando a Frodo-No, no esta raro,-rió finalmente.-Está enamorado.

-¿¡Enamorado!?-exclamó Pippin-¡Lo sabía!

-¡¿Quién esta enamorado?!-dijo Merry abriendo los ojos de repente.

-¿No que muy dormido?

-Bueno, no podía conciliar el sueño con ustedes hablando....

-Claro....-dijo Pippin sarcástico-Bueno no importa, al parecer Frodito se ha enamorado de Josielincita....¿no es lindo?

-¿Frodo enamorado?-dijo Merry entre risas-No creí que escucharía eso de él...

-Ni yo....¿recuerdas a Wisteria?

-¡Claro que sí!-Merry tuvo que contener un ataque de risa.

-¿Wisteria?-preguntó Gandalf.

-Una hobbit que nos tenía a todos loquitos-dijo Pippin.-Para que fuera justo decidimos que cada uno hablaría con ella, y el que la conquistara pues....¡la conquistaba!

-Oh...-dijo Gandalf levantando las cejas.-¿Y quién ganó?

-Un Sacovilla....¡maldito sea!-Merry golpeó la almohada.

-Qué interesante....-Gandalf rió.-¿Pero que tiene que ver con Frodo?

-El pobre jamás se atrevió a hablarle. Una vez lo intentó, pero no dijo algo muy congruente que digamos....

-Se puso demasiado nervioso, ese fue su problema-Pippin miró a Frodo que dormía.

-De todas formas ella no era su tipo...

-¿Crees que Josie lo sea?-preguntó Pippin.

-Pues no sé...se veían muy coquetos en Caradhras....

-¡Te lo dije!....¡¿Se lo confesará a Josie?!-Pippin se veía muy entusiasmado

-¡Debería hacerlo!

-¿Y Legolas?...él también está mucho con Josie...

-Creo que tendremos que averiguar que pasa...

-Ustedes no deberían meter sus narices en estos asuntos-los reprimió Gandalf después de escucharlos. El entusiasmo de los hobbits disminuyó.

-Aguafiestas...

-Sólo duérmanse...no quiero verlos mañana quejándose todo el día.

-De acuerdo, de acuerdo-Pippin le lanzó una mirada a Merry. Fingió dormir hasta que Gandalf entró a su trance otra vez.

-¿Y ahora que te traes Pip?-preguntó Merry cuando Pippin se levantó de nuevo.

-Frodo ha estado muy solo bastante tiempo, creo que ya es hora de que conozca al señor amor....

-Si lo que quieres es hacer que Frodo le diga a Josie lo que siente....déjame decirte que no va a funcionar ¡él es muy tímido!

-No hay problema....bastantes planes se me ocurren ahora-Pippin sonrió-Creo que hacen una muy linda pareja....

-¿Y qué si a Josie no le gusta Frodo?

-Ahí es donde tú entras, mi amigo. De algún modo u otro le sacarás a Josie lo que piensa sobre Frodito.

-¡¿Cómo planeas que hagas eso?!-exclamó Merry-No soy exactamente la persona correcta  para poder establecer una plática con Josie sobre quién es el más guapo de la compañía....

-No tienes que hablar sobre quien es el más guapo de la compañía, que soy yo por supuesto...-dijo Pippin orgulloso, Merry puso los ojos en blanco.-Lo único que hay que hacer es sacarle lo que piensa sobre Frodito, invéntate cualquier excusa, no creo que sospeche algo.

-Lo pensaré....

-Pero...

-¡A dormir!-la voz de Gandalf los asustó. Miraron al mago que les lanzaba tal mirada que no les quedo otra que echarse las sábanas y tratar de conciliar el sueño.

Todos fueron despertados al día siguiente y siguieron la rutina que ya no variaba...camino, oscuridad, escaleras...pero llegaron a unas especialmente difíciles de subir.

-¡¿Y cómo se supone que vamos  a subir esto?!-exclamó Boromir, quien para variar estaba de mal humor.

-Gateando y trepando-dijo Gandalf de lo más tranquilo.

-Fabuloso-se escuchó murmurar a Boromir pero el eco hizo que todos lo escucharan. Trepando y gateando empezaron a subir uno de tras de otro. Merry tropezaba con frecuencia y esto hacía que Josie (que iba tras él) tropezara también. Pero todas esas veces fue salvada por Legolas (que iba tras ella). Lograron llegar a arriba con vida y el camino siguió por mucho tiempo, hasta que alcanzaron una pequeña sala que se dividía en tres puertas.

-No recuerdo esto.-Gandalf se paró en seco y miró a su alrededor. L a compañía no tuvo otra opción que esperar a que la memoria de Gandalf se refrescara. Aprovecharon esa oportunidad para comer y descansar.

-¿Estamos perdidos?-preguntó en un susurro Pippin una vez que acabó su comida.

-No-respondió Merry.-Sólo no sabemos donde estamos...

-Eso no ayuda...de verdad estamos perdidos...

-Shhh....Gandalf está pensando.

-Merry...

-¿Qué?...

-Tengo hambre...

-¡Acabas de comer!-exclamó Josie sentada cerca de Gandalf.

-Bienvenida a la conversación...

-Gracias.-Josie le sonrió a los hobbits desde la piedra en la que estaba sentada. Frodo la miró, estaba muy cerca de ella...¿debería acercarse más?. Buscó a Legolas, él estaba examinando los alrededores. Después de un poco de duda se sentó junto a Josie.

-Hola-susurró.

-Hola-le respondió ésta con una sonrisa.

-¡Tus manos!

-Lo sé...-Josie miró sus manos, estaban llenas de heridas y sucias.

-¿Te duele?-aguantando la respiración Frodo acarició la mano de Josie.

-No...¡están tan entumidas que no siento nada!

-Oh...-Frodo sonrió. Miró el anillo que Josie llevaba en su dedo; era de oro y tenía un brillante que destellaba con la luz que emitía la vara de Gandalf.-¿Y ese anillo?-Frodo señaló el dedo de Josie.

-Me lo dio mi padre antes de morir....-Josie miró fijamente le anillo y dio un largo suspiro y se quedó mirando al vacío.

-Lo siento mucho-Frodo no supo que decir.

-Está bien...fue hace mucho tiempo; apenas hace unos años lo pude usar si que resbalara por mis dedos...-Súbitamente Josie miró tras de sí. Frodo hizo lo mismo. Algo avanzaba entre la oscuridad

-¿Qué es eso?-dijo Josie nerviosa.

-No lo sé-respondió Frodo y levantándose fue con Gandalf-Hay algo ahí abajo-le dijo.

-Es Gollum-respondió Gandalf sin darle importancia.

-¿Gollum?-preguntó Josie uniéndose a la conversación.

-Nos lleva siguiendo tres días-continuó Gandalf. Un gesto de preocupación cruzó la cara de Frodo.

-¿Escapó de los calabozos de Barad-dûr?

-Escapó...o fue soltado. El anillo lo ha traído aquí; jamás podrá dejar de necesitarlo.-Josie miró a los dos confundida.-Él odia y ama el anillo, de la misma forma en que se odia y se ama a él mismo. La vida de Sméagol es una triste historia.

-¿Sméagol?...creí que se llamaba Gollum-dijo Josie tras escuchar la explicación de Gandalf.

-Sméagol fue su nombre una vez. Antes de que el anillo lo encontrara, antes de que lo volviera loco.

-Es una lástima que Bilbo no lo haya matado cuando tuvo la oportunidad-dijo Frodo.

-¿Lástima?-Gandalf se volvió hacia Frodo.-Fue la lástima lo que detuvo la mano de Bilbo. Muchos que viven merecen morir. Muchos que mueren merecen vivir. ¿Puedes decidir tú eso, Frodo?-Frodo meditó su respuesta. Josie los miraba mientras trataba de recordar si había escuchado el nombre de Bilbo en una conversación.-No estés tan dispuesto a juzgar a los que merecen la muerte, aún los sabios no pueden saber que pasará. Mi corazón me dice que Gollum aún jugará un papel, para bien o para mal, antes de que esto acabe. La lástima de Bilbo puede definir el destino de muchos.

-Desearía que el anillo no hubiera llegado a mí-Frodo suspiró y se sentó junto a Gandalf.-Desearía que nada de esto hubiera pasado...

-Eso es lo que desea la gente cuando se ve en estas situaciones, pero lo único que debemos hacer nosotros es decidir que hacer con el tiempo que se nos da-dijo Gandalf, Frodo lo miró con una expresión de preocupación de nuevo. Gandalf suspiró y miró a Josie-Hay muchas fuerzas en este mundo, Frodo, no sólo las del bien y el mal. Estaba escrito que Bilbo encontrara el anillo. Por lo tanto, está escrito que tú lo tengas, y eso es un pensamiento alentador. –Frodo le sonrió. Gandalf sonrió también y lanzó a Josie con una mirada de cómplice. Ella rió y se sentó junto a Frodo.

-¿Quién es Bilbo?-le preguntó. Frodo sonrió.

-Verás, es mi tío. Hace tiempo el encontró...

-¡Ah!-exclamó Gandalf-Es por acá.

-¡Se acordó!-exclamó Merry.

-No. Pero el aire no huele tan mal aquí abajo.-Gandalf caminó hacia la izquierda.

-Me lo terminarás de contar luego.-Josie sonrió y siguió a Gandalf.

-Si dudas, Meriadoc, siempre sigue a tu nariz-aconsejó Gandalf. Frodo miró a Merry, iba junto a Josie fingiendo oler todo.

-¡Ah, un cambio!-exclamó Pippin.-¡Ahora bajamos escaleras y no las subimos!

-Ya era hora...-murmuró Sam junto a Frodo.

-Me arriesgaré a iluminar más-se oyó decir a Gandalf. Estaban frente a una enorme cámara con columnas por doquier.-Admírense de la grandeza de la ciudad de Dwarrowdelf.-Comenzaron a caminar a través de esa enorme sala que parecía interminable.

-¡Oh!-gritó Gimli súbitamente y corrió hasta un pequeño cuarto que iluminaba una ventana.

-¡Gimli!-lo llamó Gandalf. Pero Gimli ya estaba adentro del cuarto. Se detuvo frente a una tumba donde la luz caía.

-¡No!-se le oyó decir.-Oh, no. No.-La compañía entró y vio a Gimli arrodillado.

-Aquí yace Balin, hijo de Fundin. Señor de Moria-leyó Gandalf en la tumba.-Entonces, está muerto. Como lo temí.- Gimli sollozaba arrodillado en la tumba. Gandalf le dio su sombrero y su bastón a Pippin y tomó un libro que uno de los esqueletos sujetaba

-Debemos irnos. No podemos perder tiempo-susurró Legolas a Aragorn.

-Han tomado el puente del segundo salón-leyó Gandalf.- Hemos cerrado las puertas. No los podremos detener por mucho. El suelo tiembla.  Tambores, tambores en lo profundo.-Gandalf cambió la página. Todos sentían un miedo invadirlos.-No podemos salir. Una sombra se mueve en la oscuridad. No podemos salir. Aquí vienen.-Un ruido los hizo sobresaltar a todos. Pippin había tirado un cadáver que estaba sentado en un pozo de agua. Todos escucharon el eco por el lugar. Sus corazones latían a mil por hora y la adrenalina corría por sus venas. De pronto Josie notó que del susto había tomado el brazo de Frodo.

-Lo siento-murmuró soltándolo. Frodo le sonrió un poco sonrojado.

-¡Tuk imbécil!, ¡Tírate tú la próxima vez y líbranos de tu estupidez!.- La compañía suspiró aliviada. Entonces un tambor se escuchó a lo lejos. Josie tomó el brazo de Frodo de nuevo.

-¿Qué fue eso?

-No lo sé-respondió Frodo con un nudo en la garganta.

-¡Frodo!-dijo Sam mirando a Dardo. Frodo la sacó. Brillaba con un color azul.

-Orcos-dijo Legolas. Boromir corrió a la puerta. Dos flechas casi le dan.

-¡Atrás! ¡Estén cerca de Gandalf!-gritó Aragorn y fue a ayudar a Boromir a cerrar las puertas. Josie apretó la mano de Frodo, estaba realmente asustada.

-Todo estará bien-le dijo Frodo.-Yo te protegeré.

-¡Josie!-Gandalf le dio una pequeña espada. Josie miró a Frodo aún asustada.

-No te pasará nada, lo juro.

-Tienen un trol de caverna-dijo Boromir irónico. Todos sacaron sus espadas. Josie miró la suya sin saber que hacer.

-Quédate a mi lado.-Frodo se colocó frente a Josie.

-¡Qué vengan! ¡Aún hay un enano que respira en Moria!-gritó Gimli encima de la tumba. Las puertas se empezaron a romper. Legolas disparó una flecha. Finalmente entraron. La batalla había comenzado.

Josie miró horrorizada a los orcos. Jamás había visto semejantes criaturas, eran horribles. Los orcos se acercaron a los hobbits. Ellos formaron un círculo alrededor de Josie y empezaron a luchar. De pronto un rugido se escuchó. Un enorme mounstro acababa de entrar en la sala.  Merry y Pippin tomaron a Frodo y lo escondieron tras una columna.

-¡Josie!-gritó Frodo cuando se lo llevaron. Josie de pronto se vio sin protección.

-¡Sam!-gritó al verlo venir.

-¡Atrás!-Sam tomó un sartén y golpeó a un orco que iba a atacar a Josie.-¡Tenga!-le dio otro sartén a Josie.

-Esto es útil-Josie golpeó a un orco.

Mientras tanto el trol localizó a los otros hobbits. Con un golpe de su garrote logró separarlos, dejando a Frodo solo. Frodo se escondió detrás de una columna y constantemente se cambiaba de lugar para que el trol no lo viera. En uno de esos cambios algo llamó la atención de Frodo. Josie gritaba desesperadamente mientras trataba de defenderse de tres orcos. Frodo se quedó petrificado mientras veía a los orcos atacar a su amada Josie, y esto hizo que el trol lo encontrara. Lo acorraló y lo tomó del pie.

-¡Aragorn! ¡Aragorn!-fue todo lo que pudo decir Frodo mientras trataba de sujetarse de algo.

-¡Frodo!-Aragorn corrió hacia donde Frodo estaba justo a tiempo para salvarlo. Aragorn empezó a luchar contra el trol. Frodo se levantó y se dispuso a ayudar a Aragorn cuando escuchó otro grito.

-¡Josie!-volteó hacia atrás. Un orco había herido a Josie; sin siquiera pensarlo dos veces corrió hacia ella. No notó como el trol derrumbaba a Aragorn y lo perseguía.

-¡Ayúdame!-gritó Josie al ver a Frodo venir. Frodo mató a los orcos que peleaban contra Josie, que apenas podía defenderse por su brazo herido.

-¡Josie!-Frodo tomó su brazo para ver la herida.

-¡Cuidado!-Josie vio el Trol venir. Con su enorme lanza amenazó a ambos, pero Frodo logró herir la mano amenazante. Ante esta acción el trol tiró a Frodo lejos de Josie, lo arrinconó y se dispuso a atacarlo. Entonces se detuvo. Fue como si el trol hubiera recapacitado de la acción que iba a cometer. Miró a Josie y luego a Frodo. Levantó amenazante su lanza y Frodo cerró los ojos esperando lo peor. Pero su sorpresa fue mayor al abrirlos y ver que el trol ya no lo apuntaba a él, sino a Josie que estaba pálida como un fantasma.

-¡No!-Frodo se levantó lo más rápido que pudo y logró interponerse entre la lanza y Josie en el momento exacto. Sintió el duro golpe en su pecho. Oyó el aterrorizado grito de Josie. Y ya no escucho nada más.

Fue como si el grito de Josie hubiera encendido una luz en el cerebro de todos, pues todos callaron y se dirigieron hacia donde ellos estaban. Merry y Pippin saltaron sobre el Trol y le enterraron sus espadas.

-¡Frodo!-gritó Sam. Frodo cayo en el suelo. Josie lo colocó boca arriba sobre su regazo.

-¡Frodo!-lo llamó desperada. Gandalf y Gimli se lanzaron contra el trol mientras los demás acababan con los orcos. Finalmente el trol cayo vencido.

-Oh, no-dijo Aragorn acercándose a Josie y Frodo. Miró a Josie, lágrimas corrían por sus mejillas. De pronto Frodo soltó un bufido.

-¡Está vivo!-exclamó Sam. Todos suspiraron aliviados. Frodo abrió los ojos y se encontró con la sonrisa de Josie.

-Estoy bien-dijo incorporándose-No estoy herido.

-Deberías estar muerto-dijo Aragorn sorprendido.-Esa lanza hubiera atravesado a un jabalí.

-Creo que este hobbit tiene habilidades escondidas-dijo Gandalf acercándose. Legolas se acercó también y levantó a Josie. Inmediatamente empezó a curar su brazo. Frodo desabrochó su camisa dejando ver la cotilla de Mithril que llevaba puesta.

-Mithril-dijo Gimli sorprendido.-Está lleno de sorpresas, maese Bolsón.-Gandalf se sobresaltó. Más orcos venían.

-¡Al puente Khazad-dûm!-gritó. Todos se levantaron y corrieron tras Gandalf. Pronto vieron y oyeron a los orcos darles alcance. Salían de todas partes, y no tardaron en rodearlos. La compañía perdió toda esperanza de salvación. Un gruñido se oyó a lo lejos. Todos los orcos se sobresaltaron y salieron huyendo.

-¿Y ahora que clase de brujería es esta?-dijo Boromir.

-El balrog-dijo Gandalf-Un demonio del fuego. Su poder está fuera de sus alcances. ¡Corran!-Todos siguieron a Gandalf una vez más.-¡Guíalos!-le dijo a Aragorn una vez que entraron a la cámara del puente.-¡Aquí las flechas y las espadas ya no sirven! ¡El puente está por allá!

-¡Gandalf!

-¡Haz lo que digo!-La compañía empezó a bajar unas enromes escaleras, pero un obstáculo se les atravesó. Una parte de ellas estaban rotas. Legolas tomó a Josie y saltó presuroso. La depositó en el suelo y se dirigió a la compañía.

-¡Gandalf!-lo llamó. Gandalf saltó, y flechas empezaron a caer. Josie tuvo que tomar la mano de Gandalf, estaba a punto de perder el equilibrio.

-¡Merry, Pippin!-Boromir saltó con ellos. Legolas contraatacaba a los orcos cuando el puente se volvió a romper. Ahora sólo quedaban Gimli, Frodo, Sam y Aragorn.

-¡Sujeten a Josie!-les ordenó Gandalf a los hobbits al ver que ella estaba a punto de desmayarse.

-¡Sam!-Aragorn lo tomó y lo lanzó hacia Legolas. Se dirigió a Gimli.

-Nadie lanza a un enano-lo detuvo Gimli. Y él saltó, pero no logró llegar del todo. Legolas lo sujetó de la barba.

-¡No la barba!-gritó Gimli.  El puente se rompió una vez más. Aragorn y Frodo aún no cruzaban.

-Quieto-le dijo Aragorn a Frodo. Un enorme abismo los separaba.-¡Sujétate!-Una piedra que cayó del techo rompió la otra parte de la escalera y los dejó varados. Aragorn tomó a Frodo.-¡No te sueltes! ¡Inclínate! Quieto.-Lograron que las escaleras se inclinaran hasta llegar a las otras.

-¡Vamos!

-¡Ahora!-Legolas y Gandalf los atraparon cuando la escalera se impactó. La compañía siguió caminando aunque las piernas de todos temblaban.

-¡Hacia el puente!-Finalmente habían llegado. Todos corrieron hacia él mientras un horrible mounstro surgió de entre las llamas. Cruzaron el delgado puente con el mounstro pisando sus talones, pero Gandalf se paró en el medio.

-¡No puedes pasar!-gritó al Balrog.

 -¡Gandalf!-gritó Frodo. El Balrog desafió a Gandalf.

-Yo soy un sirviente del fuego secreto, cuidador de la llama de Anor.-Gandalf levantó su bastón.-El fuego negro no te servirá, ¡flama de Udûn!-Un extraño campo de fuerza rodeó a Gandalf.-Vuelve a la sombra.-El Balrog sacó un látigo de fuego.-¡NO PASARÁS!-Gandalf levantó su bastón y su espada y golpeó el puente haciendo una pequeña explosión. Eso no intimidó al Balrog, dio otro paso, pero el puente se rompió. El monstruo cayó en la oscuridad. Gandalf suspiró aliviado y se giró hacia la compañía. Súbitamente el látigo del Balrog lo tomó del pie. Gandalf casi cae, sólo se sostenía con sus manos.

-¡No! ¡No!-Frodo gritaba con desesperación y quería correr hacía Gandalf, pero Boromir lo detuvo.-¡Gandalf!-lo llamó. Gandalf  se aferró a el borde, pero no pudo sostenerse. Miró con detenimiento a la compañía y les dijo sus últimas palabras-Huyan, tontos.-Se soltó y cayó en la misma oscuridad que el Balrog.

-¡NOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO!-gritó Frodo más desesperado que nunca. Boromir lo detuvo antes de que corriera hacia el puente roto y lo sacó de ahí contra su voluntad.

-¡Aragorn!-gritó. Salieron finalmente de las minas y vieron la luz que no habían visto en mucho tiempo. Todos se sentaron a llorar por Gandalf. Legolas soltó a Josie que aún temblaba y apenas podía hablar. La miró a los ojos y la abrazó. Josie se echó a llorar en su hombro. Boromir consoló a Gimli, y Merry a Pippin.

-Legolas, levántalos-interrumpió Aragorn. Legolas cargó a Josie y se dirigió hacia Merry y Pippin.

-¡Dales un momento, por piedad!-exclamó Boromir.

-Para la noche estas colinas rebozarán con orcos. Debemos llegar a los bosques de Lothlórien. Vamos, Boromir. Legolas. Gimli, levántenlos.-Aragorn se dirigió hacia Sam.-De pie-le dijo levantándolo.-¿Frodo? ¡Frodo!-El hobbit caminaaba con la cabeza abajo, se alejaba de ellos.  Frodo volteó y pudieron ver las lágrimas en su cara. Sin más que poder decir o hacer  partieron hacia Lothlórien.



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