Capitulo segundo: "La chica que nunca fue"
La tibia mañana tenía una esencia lúgubre a su alrededor; un buen amigo había perecido. Ginny lo conoció demasiado poco pero sabía que era un miembro de la Orden, y que era amigo de sus padres. El Ministerio de la magia ofreció una pequeña recepción en honor de aquel primer héroe caído en esta segunda guerra; pero para Ginny, él no era el primero, era Sirius. A él también lo conoció poco, pero supo mucho de el gracias a Ron, Hermione y el amor que Harry le profesaba.
"Harry" pensó la chica amargamente mientras permanecía sentada en un sofá de aquel lugar, donde todos hablaban y decían lo magnifico y valiente que Kingsley Shaklebolt había sido. "me gustaría ayudarle, hacerle comprender que no está solo, pero ¿Cómo hacer esto cuando yo misma me siento vacía? Me siento pequeña y desamparada y ahora mis ojos se llenan de lágrimas, ¿Por qué? ¿Por este extenso sentimiento de impotencia? Tengo presente todavía el año pasado, cuando la serpiente ataco a mi padre; nos dijeron que por eso no podíamos entrar a la orden, que éramos muy jóvenes, que no comprendíamos que había cosas por las cuales valía la pena morir. Pero yo si comprendo. Todavía soy necia y estúpida, pero los entiendo. Comprendo que sin pensarlo dos veces daría mi vida por el bienestar de este mundo, por salvar a mi familia del dolor, por el amor que siento por mis hermanos, mis padres y mis amigos. Comprendo que hay cosas por las cuales vale la pena morir, vivir y luchar. Muchas personas han hecho tanto por mí, y ahora es tiempo para mi de saldar esas deudas, limpiaré mis mejillas, me sostendré con mi fe, mi fe que me dice que este mundo puede mejorar, que Voldemort, sí, el innombrable, puede ser vencido, destruido. Y le demostraré a él que no me ha quebrado, que no logró deshacerme."
Ginny salió de sus pensamientos al verse atrapada en un abrazo, eran unas manos cálidas las que la rodeaban, un cuerpo firme y delgado, su visión estaba nublada por las lágrimas pero no necesitaba escuchar o ver porque ya sabía de quien eran aquellas manos.
"Bill" dijo entre sollozos y casi inaudiblemente.
"Ginger" escuchó el susurro en su oído "no me gusta verte llorar, me rompe el corazón" Ginny pasó sus brazos alrededor de Bill y comenzó a llorar, los ojos de Bill se cristalizaron también. "sé que tienes miedo, pequeña, pero tan sólo te diré una cosa y quiero que la recuerdes para siempre: Todos estaremos bien" dijo él tratando de mantener la voz normal, tratando de no sonar como si realmente su corazón estuviera rompiéndose por ver a su hermanita en este estado.
Ron y Charlie permanecieron callados durante el tiempo que permanecieron al lado de sus padres, pero cuando la Sra. Weasley salió a enviar una lechuza, ellos no sabían que hacer; no querían pensar en lo que ocurría.
"¿Dónde está Bill?" atinó a preguntar Charlie.
"No lo s" replicó tristemente Ron. Charlie le dio un pequeño golpecito y ambos jóvenes salieron de la pequeña habitación donde se encontraban, buscaron en varios cuartos más y encontraron a Bill rodeando con sus brazos a Ginny, él le estaba hablando.
"Vámonos" susurró Charlie. Los Weasley siempre habían sabido acerca de la apegada relación que existía entre Ginny y Bill; y Charlie, aunque nunca lo admitiera públicamente, reconocía que sentía un poco de envidia que su hermano mayor tuviera todo ese amor y respeto de parte de Ginny y él no.
Ron observó a su hermano cuidadosamente, sabía que algo andaba mal pero no podía decir exactamente qué. Levantó su mirada nuevamente, ahí estaba su hermanita rodeada por su hermano mayor, ambos abatidos.
"Sabes que te quiere ¿no es cierto?" prefirió referirse simplemente a Ginny "y ahora nos necesitan, nos necesitamos mutuamente porque somos todo lo que tenemos" Charlie se sorprendió al escuchar esto de su hermano, le revolvió el cabello con la mano como si se tratara de un infante y respirando hondamente, continuaron hasta llegar con Bill y Gin.
"Pero tan sólo te diré una cosa y quiero que la recuerdes para siempre: Todos estaremos bien" escucharon hablar a Bill; el rostro de Ron se sintió caliente, se sentó de cuclillas apoyándose en el sillón.
"¿Lo prometes?" sollozó ella nuevamente "¿Prometes que todos ustedes estarán bien?"
"Lo prometemos" musitaron ellos al unísono sin darse cuenta. Ginny y Bill rompieron su abrazo y Ron tomó la mano de Ginny entre las suyas mientras Charlie colocaba su mano sobre el hombro de Bill.
"Pero Ginny" continuó Charlie "también tú tienes que prometer que estarás bien" y entre su llanto una sonrisa nació.
"¡Los quiero tanto!" abrazó a sus tres hermanos, y Ron, por ser todavía el más quisquilloso e inexperto, se sonrojó un poco al dejarse llevar por la emotividad del momento, mas no lo lamentó "no se han dado cuenta que, mientras ustedes estén bien yo estoy bien" terminó ella entre lágrimas, risas y besos que repartía a las mejillas de sus hermanos.
La fúnebre recepción ya no se percibía tan oscura, algo le había brindado luz y esperanza; el amor le había brindado luz y esperanza. Sabían en sus corazones que más pérdidas faltaban, pero que a pesar de todo, estarían juntos, sin importar qué.
"Queridos" escucharon la voz de su madre "los he estado buscando, su padre ha ido al cuartel de la Orden ya que Dumbledore se lo pidió, Harry llegó esta mañana ahí, y no confía en lo que pueda ocurrir entre él y Remus, ambos estarán muy afligidos" dijo la Sra. Weasley tratando de sonar contenta, pero estos cuatro chicos eran sus hijos, por lo tanto sabía cuando algo los agobiaba y ahora podía ver en sus ojos reflejados los momentos que acababa de ocurrir "y… y nosotros llegaremos más tarde, pero primero iremos a la Mansión de los Longbottom, al parecer tendremos un invitado muy especial el resto de las vacaciones, y Charlie y Bill" prosiguió la Sra. Weasley "recuerden lo que hablamos antes de venir aqu
"¡Pero creí que los gemelos se encargarían de eso!" se quejó Charlie.
"Mamá tiene razón" respondió Bill entre risas "no me gustaría asistir a una fiesta que ha sido completamente organizada por Los Sortilegios Weasley" tomó del brazo a Charlie y guiñándole un ojo a sus hermanos menores, desaparecieron.
Minutos más tarde la Sra. Weasley, Ron y Ginny, arribaban a la Mansión Longbottom, era un hermoso día de verano después de todo; al parecer el clima no se percataba de las muertes y el dolor que habitaban en el corazón de nuestros amigos.
"En unos momentos bajara el joven Longbottom" escucharon una diminuta vocecita dirigirse a ellos. Era una elfina doméstica con enormes ojos violetas y un traje muy presentable; Ron pensó que Hermione se sentiría orgullosa de Neville. La pequeña y singular criatura desapareció mientras los Weasley esperaban un poco confusos, pero tan rápido como la elfina partió, regresó. "¿Dónde están mis modales?" dijo sonriendo "por favor, tomen asiento. ¿Gustan de una taza de té? ¿Galletas?" terminó amablemente.
"No, no, pero gracias por todo" le respondió cordialmente la Sra. Weasley.
"De todas formas, si ustedes han de necesitar algo, será un placer para Sissy servirles. Sissy ha escuchado muchas cosas buenas acerca de los señores, y como han cuidado a mi niño" miró intencionalmente a Ginny y Ron "¡Ustedes deben ser sus amigos! Y tú, la niña que lo acompañó al baile" se dirigió directamente a Ginny esta vez, la cual simplemente sonrió.
"Así es" respondió.
"¿Y trataste muy bien a mi niño? ¡Estoy completamente segura que esa noche se veía muy apuesto!"
"¡Y realmente se veía muy apuesto!" exclamó Ginny felizmente. Ron le dirigió una mirada recelosa. Unos pasos se escucharon bajar de la escalera haciendo que la elfina callara lo que estaba a punto de decir.
"¡Sissy!" balbuceó Neville "Lo siento, ¡no creí que llegaran tan temprano! Olvide completamente la hora y todavía no termino de empacar."
"No te preocupes, querido. Tenemos tiempo" le dijo cálidamente la Sra. Weasley.
"Si quieres, te puedo ayudar a empacar" sugirió Ron, la verdad es que tenía hambre y, por lo tanto, prisa por llegar a su hogar, y por ver a Harry también.
"Bien, ¡vamos! Pero primero, Sissy, ¿Por qué no vas por unas galletas? Y… ¿me podrías llevar a mí?" se sonrojó un poco "será la ultima vez en este verano que comeré tus galletas" la sonrisa se desvaneció del rostro de Sissy y estuvo a punto de ponerse triste, pero se controló y respondió alegremente.
"Entonces mi niño, te prepararé una canasta para el resto del verano" y partió rápidamente a la cocina. Neville la vio tristemente y también desapareció de vista instantes más tardes, seguido por Ron.
"¿Cómo te sientes, querida?" musitó la Sra. Weasley al encontrarse sola con Ginny y darse cuenta que era la perfecta ocasión para conversar con ella. Ginny desvió su mirada, el sólo hecho de recordar dolía. "Pronto llegaremos al cuartel, lamento que no puedan pasar un agradable verano en la Madriguera, pero así como están las cosas, no se puede"
"¿Extrañas a Percy, mama?" le preguntó serenamente a su madre, un escalofrío cubrió el cuerpo de la Sra. Weasley.
"Es mi hijo, por supuesto que lo extraño" Ginny miró fijamente a su madre esta vez; ella también sufría, ella entendía.
"El problema entre la Orden y el Ministerio se ha disuelto, ¿Por qué crees que Percy no ha vuelto?"
"Es muy orgulloso para hacerlo, para admitir que se equivoc
"¿Qué harías si regresara?"
"Lo abrazaría, lo tendría ahí para siempre y le diría que nunca, que nunca se le ocurriera partir de nuevo"
Ginny sabía que debía pensar en su hermano y en su madre, sabía que ambos la pasaban mal por este distanciamiento mas sin embargo no podía evitar pensar que ella desearía querer a alguien de esa forma tan incondicional. Y ahora más que nunca admiraba a su madre, por el valor y la fuerza que tenía. Era cierto, su madre era aquella roca en la cual se recargaba cada vez que lo necesitaba; era su fuente alivio y protección, de energía y fuerza.
"Desearía ser más como t" dijo Ginny de la nada, lo cual sorprendió a la Sra. Weasley, sus ojos cristalizados ahora.
"Tú nunca serás como yo, querida" respondió mientras dudaba entre abrazarla o no "no te conformes con tan poco. Estoy segura que serás mejor."
"Nunca podré ser mejor que t
"Tienes razón, nunca lo serás porque no eres yo, eres tú. Tienes muchas cualidades que quizás ahora no puedes ver… si observas las cualidades de los demás, querida, y crees que encontrarás algo tuyo ahí, no es así. Tú tienes eso y más, y por eso también debes esforzarte todavía más. Debes luchar por ser tu misma; y si te fallas, te convertirás en la chica que nunca fue, en una imitación y en un engaño."
"¡¡Estamos listos!!" gritaron Neville y Ron al tiempo que Sissy salía de la cocina con una hermosa canasta cubierta por un precioso mantel rojo y dorado.
"mi niño" dijo amorosamente Sissy al borde de las lágrimas "cuídate mucho mi niño" decía mientras abrazaba las piernas de Neville. Los Weasley no pudieron evitar conmoverse ante este acto, de acuerdo a Ginny, de amor incondicional. Neville se inclinó y besó a la elfina en la frente e, instantes después, desapareció en la chimenea dejando a la elfina triste y meditabunda.
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Espero que esto les siga gustando! Y sigan dejando reviews!! o
Sacralo: Bueno, ya sabes que actualizo HA antes que aquí y eso… aun así, gracias!
Garry: Grazie por tus palabras de apoyo!
Nos vemos pronto!
