Alteración Genética
Capitulo 6
Harry se encontraba cenando en compañía de Sirius, Remus, Severus, Albus y Minerva. Sus pensamientos iban y volvían a sus amigos, como siempre la madrugada del 31 le había llegado sus regalos, pero Dumbledore no le dejó responder, porque no lo creía conveniente. Sabía que en cierto modo tenía razón, las cartas podían ser rastreadas, además de que algunos mortífagos habían sido capturados cerca de Hogwarts últimamente, nadie quería arriesgarse a que Harry fuera descubierto. Sin embargo no podía evitar el sentirse mal al preocupar a sus amigos de esa forma. Al menos solo faltaba un día y les vería de nuevo, sin embargo, con ese arreglo de Dumbledore no estaba muy seguro que fuese por mucho tiempo.
Esos últimos días se los había pasado repasando los libros de los alumnos de 7º año, aunque conocía la gran mayoría de hechizos, nunca estaba de mas repasar un poco. También montaba su escoba o simplemente tocaba un poco el piano o el violín. No era realmente bueno, pero disfrutaba la música y con poco esfuerzo y mucha practica podía sacar bien las canciones.
Soltó un suspiro mientras miraba a sus compañeros de mesa. Todos esperaban ver si sus esfuerzos habían resultado y si el joven podría comunicarse bien con las otras chicas. No es que tuvieran dudas de que el joven no hubiese aprendido bien, pero necesitaban verlo interactuar.
Rato después el joven se retiró a su habitación, el siguiente día seria bastante agitado.
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El 1º de septiembre había pasado realmente rápido, Harry se encontraba en esos momentos en uno de los tantos pasages del castillo, esperando a que los de primer año fueran sorteados. Se preparó mentalmente para lo que pasaría y la ceremonia dio comienzo...
Luego de un rato, los alumnos de primer año se les asignó una casa, y Dumbledore se levantó para dar su discurso habitual.
-Queridos alumnos, es verdad un honor para todos que estén de vuelta. Este año tendremos muchas sorpresas que serán reveladas a su debido momento. En este momento deben estar preguntándose por la ausencia del joven Potter. Por cuestiones de seguridad hemos decidido hacer un intercambio. Así que este año en lugar del joven Potter, tendremos a una joven, que viene desde Francia- la joven salió del pasaje pero aún estaba oculta por las sombras- Esta joven pasará por las cuatro casas, permaneciendo dos meses y una semana en cada una. Permítanme presentarles a Jillykat AnnLouis Sumer- Harry suspiró, solo a Padfoot se le podría ocurrir ese nombre, pero el quería que éste tuviera algo de todos, y que combinación mas extraña sacó.
Caminó hasta el frente del gran salón, se sentó en el banquillo y se colocó el sombrero, todo esto sin prestar atención a los cuchicheos y miradas que le eran dirigidos, a fin de cuentas ya estaba acostumbrado. Claro que no eran 'esa' clase de miradas las que le eran dedicadas en esa ocasión.
Draco observó como la belleza de cabellos negros caminaba al frente del salón, nunca en su vida se había encontrado con alguien como ella, su aura mágica era bastante poderosa, atrayente, su andar suave, como flotando, la túnica bailando a su alrededor, de manera suave, sensual y a la vez tan cándida. Sacudió la cabeza para aleja esos pensamientos, él no era del tipo romántico. Sin embargo, no pudo evitar desear que la joven quedara en la casa de las serpientes, él debía ganar terreno sobre ella, y no podía hacerlo si iba a otra casa, construyendo prejuicios contra los Slytherin.
No se dio cuenta que se había quedado soñando despierto, hasta que el sombrero gritó:
-SLYTHERIN- esta casa de inmediato estalló en aplausos.
~ Pero... ~
~ Ya te lo dije, es lo mejor para ti, pequeño. Además, no es como si te fueras a quedar en ella por siempre ~
~ esta bien ~ Harry se encontraba resignado, era algo que ya se temía.
Cuando los aplausos murieron, el sombrero volvió a gritar.
-RAVENCLAW- los jóvenes de esta mesa aplaudieron con singular entusiasmo, algo realmente extraño en ellos.
-HUFFLEPUFF- Todos aplaudieron mientras la joven se dirigía a la mesa de las serpientes.
Harry se sentó lo mas lejos posible de Draco, pero este no iba a dejar las cosas así. El joven rubio hizo una seña a la joven sentada al lado de Jillykat, para sentarse en el lugar desocupado. Harry tuvo que controlarse para no soltar un bufido, solo esperaba que Malfoy no le molestara, claro que conociéndolo no era algo muy probable.
-Je m'apelle Draco, Draco Malfoy- (yo me llamo).
-Ha... Jillykat, enchanté- (encantada)
-Y dime preciosa, ¿de que parte eres?- pregunto Draco mientras la miraba coquetamente. Harry lo miró, parpadeo un par de veces y tuvo que admitir el hecho de que Draco Malfoy le estaba coqueteando!! Definitivamente necesitaba descansar, unas cuantas horas y no se imaginaría tremendas tonterías.
-Burdeaux- (Burdeos)
-Hermoso lugar, le he visitado unas cuantas veces con mi padre. Somos de descendencia francesa.- la joven le sonrió tímidamente- Espero te sientas a gusto con nosotros.
-Gracias-
-De nada- dijo mientras tomaba la mano de la joven y la llevaba a sus labios, luego de un pequeño beso, la soltó.
El resto de la cena paso sin ningún incidente, claro, excluyéndola mirada de casi todos los chicos en la recién llegada. Luego de media hora, todos se retiraron a las salas comunes. Draco, como prefecto guió a la joven hacia las mazmorras, dándole un pequeño recorrido. No mucho después, la joven se encontraba instalada en una habitación individual, en el área de las chicas. Intentó estudiar un poco pero los párpados le pesaban, no mucho después, caía rendida entre los brazos de Morfeo.
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Draco se encontraba con la mirada fija en el punto donde vio desaparecer a la misteriosa joven de cabellos azabaches. Blaise a su lado no se podría encontrar más divertido.
-Draco, por favor, amado mío, vuelve al mundo de los vivos- mientras decía esto hacia gestos melodramáticos.
-Es hermosa-
-Ciertamente, pero eso no quiere decir que debas retraerte en Jillylandia y babear como retardado. ¡Pensé que eras un Slytherin!
-¡Oh, Cállate!-
Pero no sólo era en la sala común de Slytherin que 'la nueva' joven había causado estragos.
SALA COMÚN DE GRYFFINDOR
Las jóvenes de Gryffindor estaban tratando de descifrar que era lo que tenía la nueva alumna que todos los chicos se encontraban en estado cata-tónico. Ginny volvió a pasar una mano frente a Colin tratando de bajarlo de las nubes.
-Oh, vamos Colin, que tanto le vez, no es nada del otro mundo- paso la mirada a su alrededor, comprobando nuevamente que necesitaban una buena cantidad de baberos.
-Pero no la viste, es perfecta. Estoy seguro que sería una perfecta modelo. Y su rostro, has visto alguna vez un verde más brillante. Unos labios mas rojos, una piel mas dorada, una cintura mas estrecha, un...-
-Capte el punto- le interrumpió la pelirroja, echando chispas.
-Pero sabes que es lo más raro de todo-
-¿QUE?- casi grito, claro que el joven rubio ni enterado.
-Me recuerda a Harry. ¿Crees que sean parientes?- la joven volvió a enfocar a la joven, pero solo tuvo una vaga imagen de ella. Debían ser alucinaciones del fotógrafo.
-Claro que no, Harry no tiene otros parientes vivos. ¡Y no! No creo que Harry se haya convertido en chica- sin mas la joven se fue a hablar con Hermione y a tratar de sacar a su hermano de su embobamiento.
SALA COMÚN DE HUFFLEPUFF
-¿Has visto antes una sonrisa tan hermosa? Es tan cálida como un fresco día de primavera (bueno, los Hufflepuff son patéticamente románticos, ¿no?). Su rostro refleja serenidad y confianza, y esa aura a su alrededor tan cándida. ¿Crees que le gusten los chocolates?-
-No lo sé, Justin. Pero a las mujeres nos gustan las flores, personalmente me encantan las rosas, pero puede que ella prefiera las lilas o tal vez los girasoles. También puedes escribirle algún poema o una carta de amor-
-Gracias por el consejo- respondieron varios chicos en coro.
Hannah y Susan suspiraron, lo único que deseaban es que la chica no se burlara de ellos, no creían que los chicos pudieran soportar algo así, ocultarían su pena, sí. Pero no se repondrían fácilmente. Pero los Hufflepuff nunca desconfiaban hasta que se les traicionaba y la primera casa a la que fue sorteada fue Slytherin. No podía esperarse demasiado. Las dos chicas compartieron una mirada de comprensión. Al final, ellas estarían allí para felicitarlos o para ayudarles a recoger los pedazos de un corazón destrozado.
SALA COMÚN DE RAVENCLAW
Los chicos parecían sumidos en sus estudios, todos con un gran tomo abierto ante si, sus caras sumergidas entre las paginas. De repente uno de ellos soltó un suspiro.
-¿Crees que este interesada en la filosofía? A fin de cuentas, su segunda casa fue Ravenclaw, eso demuestra que tiene una mente clara, abierta al conocimiento. Debe ser bastante inteligente-
-Es verdad, pero normalmente las mujeres disfrutan hablar de temas mas relajados, como música, opera o ballet. Tal vez teatro- intervino un chico de sexto año.
-Además que hay que conocer sus orígenes- intervino otro chico de séptimo- Creo que hay que investigar la historia de Francia y su cultura.
-Creo que tienes razón- y así termino la charla, cada uno imaginando formas de ganarse el corazón de Jillykat.
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El estrés de días anteriores no le permitió dormir mas de cuatro horas y eso que se encontraba sumamente cansado. Sabiendo que no podría regresar a su pacifico sueño, sacó el estuche donde guardaba su violín (regalo de Minerva), luego de pasar sus dedos por el, reverenciándolo, sacó el preciado instrumento de sus confines y empezó a afinarlo. Tocó unas cuantas notas, antes de tocar una simple melodía.
A pesar de todas las horas de estudio, el violín era un instrumento complicado, hasta el momento solo había aprendido unas pocas piezas, sencillas todas, pero que salían desde su corazón, disfrutando cada nota.
Esa noche, el hogar de los Slytherin se cubrió de una extraña niebla, que solo ayudó a relajar aun más a sus habitantes y como nunca antes, todos durmieron entre ángeles y querubines.
N/A: Siento mucho la tardanza, en verdad ahora me es bastante difícil actualizar, principalmente porque no sé que fic debo actualizar primero (*gulp*), pero es que en serio, hay otros fics que necesitan mi atención, así que dudo que vuelva a subir un capi de este hasta dentro de dos semanas. También siento muchísimo no poder responder sus reviews, me siento muy mal de no poder agradecer personalmente a aquellas personas que me mandan su mail o me dejan su review, pero quiero que sepan que en verdad lo aprecio. Les mando un besote a cada uno de ustedes.
Cuídense. Espero les haya gustado el capitulo.
Gracias a: tamyshka, Anne, kat Basted, Melania Weasley, Sally, Anonimus, ^_^, Dadaiiro, Val, Alym, Arwen11, Vrag, PadmaPatilNaberrie, Akiko Koori, la-meli-forever, Fatima Gochi, Bloomy. Espero no haberme saltado a nadie. En verdad, a todas un besote de todo corazón.
Por si las dudas, no hablo francés, pero tengo un pequeño diccionario y trato de escribir lo mejor que puedo, por eso no se verán frases muy complicadas aquí.
