Un futuro incierto

Ato

-¿Eh? ¿Yo? ¿Kendo?

JeanPiere se sorprende de la proposición de Tsuki, una vez ya han llegado a la casa de los hermanos Bresson, casi de noche.

-Si, quiero practicar, me he traído mis katanas, bueno, tenia que hacerlo, para el torneo, llevan los nombres de los planetas, esta es Mokusei (Júpiter), mi katana de madera - dice el oso panda mientras saca un paquete alargado y muy acolchado, abriéndolo y mostrando 8 katanas, enfundadas, preciosamente decoradas, excepto la que aparta a un lado, que es únicamente de bambú desnudo, la de entrenamiento. - Esta, la de la funda roja, es Kasei (Marte), fue la primera katana de metal que tuve, el resto son Suisei (Mercurio), Kinsei (Venus), Dosei (Saturno), Tennôsei (Urano), Mitsusei (Neptuno) y Meiôsei (Plutón). Mi maestro, cuando pasas uno de sus exámenes te da un ticket.

-¿Un ticket? Vaya diploma más cutre...

-No, también me dio un diploma, muy bonito que tengo colgado en mi cuarto...

-Am...

-Será mejor que empiece desde el principio.

-Mejor, mejor...

-Verás, en mi escuela de Kendo no hay muchos alumnos, unos 50 mas o menos, estamos todos en la misma aula, nuestro maestro, Sansen Musashi, es un kendaka muy respetado, de vez en cuando nos hace luchar contra él, él lucha al que cree que es nuestro nivel actual, si le ganamos, nos sube de nivel, de Dan como lo llama el... nos da un diploma y un "vale" para una katana.

-¡Eso significa que eres 7º Dan!

-U Eh... jejeje... si, pero no me gusta presumir, creo que como que soy el mas joven es menos severo conmigo.

-Anda, no digas chorradas, seguro que eres el mejor...

-Bueno, el caso, es que cuando yo tenia unos 7 años pasé su primer examen. Antes de irme me llamó a su despacho, es muy bonito, decorado con excelente gusto, conecta con el jardín de atrás, donde practicamos cuando hace buen tiempo y donde tiene sus bonsáis, en una pared tiene un montón de estanterías, y en cada una de ellas 1 o 2 katanas, aunque me resultó curioso, detrás suyo, de donde tiene la mesa, hay una vitrina con mas katanas, aunque no parecían tener nada de diferente de las que estaban al aire libre.

Bueno, me imprimió un diploma, y luego cogió un papel y escribió en un lado una nota que en ese momento no sabía leer, porque estaba en unos kanjis muy complicados, y en el otro lado, escribió una dirección, pero de forma que no me costara entenderla; entonces me dijo: "si alguna vez un dios bajase a la tierra, y todos los guerreros luchasen contra él, solo el que llevara una katana de Yamakawa Ozaki realmente podría vencerle, él, es el mejor creador de katanas que puedas encontrar, aunque se quedara dormido y le saliera torcida, seria una obra maestra comparada con una katana de cualquier otra persona, a pesar de todo, el no las hace profesionalmente, sino como una afición, y solo las hace para sus amigos, o los amigos de sus amigos... ¿ves estas katanas de la pared? Cuando uno de mis alumnos alcanza el 8º dan, lo considero aprobado, entonces compro una katana y hago grabar su nombre en ella, pero, con algunos alumnos, le pido a Ozaki que me haga una katana de las suyas, para grabar el nombre del buen alumno en ella, y la guardo celosamente en esta vitrina de detrás de mí; Tsuki-kun, ve a esta dirección, por el camino piensa como es la katana que quieres"...

-Bonita historia - comenta Julie - pero es hora de cenar.

-¡AH! ¡¿No me digas que has cocinado tú?!

-¿Que pasa con que haya cocinado tu hermana?

-Tsuki, ¿tienes un estomago resistente?

-¿Eh? Bueno... normalito, como la mayoría... ¿por?

-¿Que quieres que ponga en tu lapida?

- ··U ¿Eh?

-Jean, ya vale de pasarse con mi cocina, ¿no crees? ¬¬

-No me negarás que no puedes ni hacer un huevo con el libro de recetas.

-Bueno... si se explicase mejor.

-¿Mejor? ¡El libro que tenemos se explica perfectamente!

-¿A sí? ¿Y cuando es exactamente "una pizca"?

-Lo que te cabe entre las yemas del dedo índice y el pulgar. ¬¬

-... ¿A si?

-v,v ¿Habías entendido otra cosa?

-Bueno... me sonaba a "poca cantidad"... puse una cucharilla de postre...

-¡Kia! ¡Pero si tú siempre cargas las cucharas a más no poder!

-Venga... no pasa nada... me gustan las cosas saladas. - Dice Tsuki intentando calmar la situación.

Inmediatamente reacciona JeanPierre.

-¿A sí? )

-"Eso" no. ¬¬

-v,v Ju... Bueno, pondré otra botella de agua a la mesa, que cruz...

-Te he oído... Por una omelette que me sale mal...

(N.D.A.: Lizar: Omelette tortilla en francés)

-Yo también te he oído. ¬¬

-¡Sepas que la cruz es mía por haberme tocado un hermano tan insufrible como tu!

Al fin en mesa, con los nervios más tranquilos...

-Huele bastante bien - comenta el panda japonés.

JeanPierre corta un trozo de la tortilla de patatas y se lo sirve, haciendo un gesto de "esperad", come un trozo; al instante pone cara de sumo asco, lo escupe en el plato y bebe 2 vasos de agua enteros, con lágrimas saldándole de los ojos.

-¡Julie!

-¿Qué?

-¿No te diste cuenta que los huevos estaban pochos al abrirlos?

-¿Eh?

-Has usado los que estaban en el armario de encima de la vitroceramica, ¿no?

-Uh...

-Esos huevos llevaban ahí un mes, eran un experimento de ciencias...

-Uh... lo siento.

-¬¬ Tenia que entregarlo el próximo martes.

-VVU Te haré una nota disculpándote.

-Llevaban un cartel de "no tocar".

-¡Pensé que era una de tus bromas malas sobre mi cocina!

-Ah... - suspira el joven conejo marrón - no arreglaremos nada discutiendo... quedan huevos en la nevera, haré otra yo.

-Yo te ayudo.- Dice Tsuki, que lucha por contener la risa y la sorpresa frente a la situación...

-Gracias Tsuki.

Entran los dos en la cocina. Y Julie, aun sentada en la mesa.

-¡¿Seré cafre?! Por una vez que intento cocinar...

Y en la cocina.

-Tsuki, corta las patatas, ya están peladas, Julie siempre las pela primero, después mira las que necesita...

-Ah... Jeje... U ¿Donde están los cuchillos?

-Segundo cajón empezado por arriba, enfrente de ti.

-Ah... ¿oye, después de comer... que me dices de eso que te comenté del kendo?

-Me encantaría - Dice JeanPierre, cogiendo un gran bol y echando el contenido de los huevos dentro.

-¿Siempre cocinas tu?

-Casi siempre, a veces pedimos comida a domicilio y alguna horrible vez cocina Julie.

-Ah... U

-¿Y en la tuya? - pregunta mientras bate los huevos, apartándose una oreja que le había caído frente la cara.

-¿Has pensado en recogértelas como si fuesen una cola de caballo? Es broma; en mi casa... normalmente cocina mi tía, y a veces le ayuda mi prima, aunque no mucho, tiene 15 años y no está por esas "tonterías" como las llama ella.

-Que suerte tienes... tienes una familia, yo solo tengo a Julie y a algún pariente lejanísimo... bueno, tal vez también se podría añadir a Moonlight y a Mauritzzia...

-Moonlight es la fénix plateada que ayuda a tu hermana en las viñas, la que puede hablar con los árboles, ¿no?

-Sí...

-Pero Mauritzzia no la conozco.

-Es una violinista amiga de Julie, es una zorra.

-oO...

-Me refiero de raza, "zorra" de "zorro hembra".

-Ya he acabado.

-¡Que rápido!

-Bueno... un cuchillo es como una katana pequeña, ¿no? Tengo práctica...

-Je... mete los trozos de patata en el bol.

-Aja... - echa el contendido del plato dentro del bol de cristal con los huevos batidos. - aparte de tu hermana y esas 2 chicas... ¿nadie mas?

-Bueno... están las otras emeralds, Alian y compañía... y algún amigo de la escuela... y a ti.

- Ju... me vas a hacer sonrojar...

-Prefiero que enciendas el fogón grande de la vitroceramica, la tortilla no se hará por sí sola...

-¬¬ Has roto todo el encanto del momento.

-Perdóname Lune-kun , es que en la cocina me transformo. - Le dice el conejo pasándole la mano por el hombro.

-Daijôbu desu... - dice él dándole al botón de la vitroceramica- Otooto-kun.

-¿A que viene eso de llamarme "hermano pequeño" ahora?

-¿No has dicho tu mismo que me tienes entre tus "familiares"?

-Si, pero yo me quejaba de lo de "menor", ¿a qué viene eso?

-Pues que tu tienes 9 años y yo 10, soy un año mayor que tu.

-Puntualicemos, eres 5 meses mayor que yo.

-Pues ya está, soy mayor que tú, no hay vuelta de hoja.

-Y aparta que se quema la cena, eso tampoco tiene vuelta de hoja.

JeanPierre, con una precisión casi profesional, pone la tortilla en un plato y apaga la vitroceramica, pone la paella a lavar y pasa un trapo por el fogón que ha sido usado, (es el futuro, tienen una de esas vitroceramicas que no queman si las tocas) y sirve la comida a mesa.

-Si que has tardado.

-Al menos me ha quedado mejor que a cierta hermana mía...

-Jean, que soy yo la que te da la paga, alojamiento, y... bueno, los ingredientes para hacer la comida.

-Ah... - Suspira JeanPierre - Lo que tu digas...

-Kirei da yo... - dice Tsuki para sí.

-¿Eh?

-¿Que dices que es tan bonito?

-Aquí, cenando juntos, discutiendo tontamente, como una familia...

Los 2 conejos no saben que decir, Tsuki continúa:

-En mi casa son todos... muy fríos, son mis parientes, pero... casi nunca hablamos, y cada uno va a la suya...

-...

-...-Tsuki se da cuenta de la situación tensa que ha provocado.

-JeanPierre.

-¿Sí?

-Quería contártelo mas tarde, pero... Met ha llamado, a tu radar no le va la alarma que suena cuando se detecta una emerald.

-¿Y eso a que viene ahora?

-Hermano, mira la pantalla.

JeanPierre coge su radar, que está encima del escritorio de su cuarto, despliega la pantalla, y en ella aparecen unos puntos de colores, el suyo, verde, el de su hermana, gris blanquinoso, y otro blanco parpadeante, con una flecha clasificándolo como "desconocido, similitud con Mohamed"

JeanPierre mira a Tsuki

-El margen de error es de 2 centímetros; según me contó Tauro, Mohamed, la Time Stone, murió en el pasado, 10 años antes de la época actual, justo un mes antes de que nacieras tu, Tsuki - La coneja blanca se gira hacia el panda - la radiación es idéntica a la de Mohamed, es muy probable, no, es seguro, que eres la reencarnación de la Time Stone.

-Tsuki...

-Yo...

Julie se limita a suspirar.

-Hermana... ¿puede quedarse a vivir aquí?

-¿Qué? - Dicen a la vez Tsuki y Julie.

-Ya lo dijo Alian, cuanto más juntos estemos mejor, si cada vez que pasase algo importante Tsuki tuviese que venir desde Japón...

El panda no puede hacer mas que mirar a su amigo con los ojos tan abiertos que hasta le duelen, el conejo está en la puerta que comunica comedor con pasillo, con la vista baja, temblando, y Julie, sorprendida por la reacción de su hermano... apenas puede murmurar:

-Está bien.

Tsuki finalmente estalla, se levanta de golpe, tirando la silla al suelo, y se lanza a abrazar a JeanPierre, llorando de alegría, y descargando sobre el hombro de su amigo todas las emociones que ha sentido en apenas un minuto.

-Tsuki... ¿te encuentras bien?

-Yo... yo... claro que sí, estoy bien, mas que bien... yo... no sé... no sé que me pasa... te lo agradezco tanto y... no se como decirlo...

-No hace falta, ya te entiendo.

Mas tarde Tsuki se calmó y se limpió las lagrimas con la manga, se sentía totalmente incapaz de disimular su alegría, y cuando veía la sonrisa de los hermanos Bresson, recordaba que no necesitaba disimular, una vez acaban de comer JeanPierre le recuerda a Tsuki su propuesta de practicar kendo; Tsuki cogió sus katanas, que volvían a estar atadas dentro del paquete, salieron los dos al campo de viñedos, y JeanPierre acompañó a un sitio que le pareció idóneo para el kendo, era una pequeño claro, con el suelo llano y el espacio suficiente para moverse libremente.

Tsuki saca una de las katanas, Kasei, la de la funda roja, la desenfunda y mueve un pequeño dial que está debajo del mango; y la hoja de la espada es rodeada por un aura rojiza y artificial.

-La normativa obliga a todas las armas blancas (espadas, cuchillos y cosas que corten) de exhibición llevar este regulador, crea un pequeño campo alrededor de la hoja para que no corte ni se clave, ahora es como una katana de madera.

-Ya lo sabía... ¿qué espada cojo yo?

-Kinsei, Venus. - Dice él lanzándole una katana con funda amarilla - Está muy bien equilibrada y se deja llevar con facilidad, te irá bien.

El conejo quita la funda, se da cuenta que Kasei, la roja que lleva Tsuki es la única que no tiene un aro que separa el mango de la espada, y cuando está en fundada es como un solo palo.

-¿Ya lo has visto? Yamakawa Ozaki me dijo que esta es la que va mas a mi estilo, y tiene razón, si no uso la de madera esta es la que prefiero coger.

-Ah... ¿y que tiene que ver eso con que no lleve aro?

-Bah, simplemente es una manera de distinguirla.

-Vale - hace el conejo activando la protección de la espada, que también queda cubierta del aura rojiza - ¡Vamos allá!

Los dos niños empiezan a hacer chocar las espadas tontamente, ni tan siquiera intentan darle al otro...

-Oye Jean-kun, aunque ahora no corten estas katanas aun...

-Ya te tengo - JeanPierre hace un movimiento por sorpresa y acierta a su amigo. ¡Plas!

-...¡Ouch! Pueden hacer daño como si fueran una katana de madera ¬¬ -Dice el panda frotándose la cabeza.

-U Perdón, oye, aun no me has contado el final de la historia de estas katanas.

-Ah si, pues bueno... no te lo he contado, mi profesor es un tigre.

-Mmm.

-¬¬ Deja de babear, bueno, fui a esa dirección, y no hay mucho que decir; Yamakawa Ozaki es una pantera negra, algo mayor que mi profesor, osea, de unos 47 o 48 años... me recibió con cara de pocos amigos, pero cuando le enseñé la nota cambió totalmente, me preguntó acerca de mi estilo y esas cosas, incluso me hizo practicar con él; Vive en un piso que pide a gritos una asistenta, y también tiene unas katanas con nombres de amigos suyos, aunque me llamó la atención dos katanas, una larga con funda negra y otra corta con funda blanca, en el despacho de Sansen Musashi, mi maestro, también habían dos como esas, pero con los colores invertidos; me contó que en la larga había el nombre de una de las personas que más le importan en este mundo, su hermano, y en la otra una frase de un monje de la antigüedad.

-¿Y que decía?

-Bueno... "Busca la verdad en tu interior, y no comas ajo cuando tengas que tratar con personas".

-No, en serio.

-Decía eso. v,v

- ººU Ah... ¿y la otra?

-Yamakawa Takezô.

-Am...

-Aunque yo, la primera vez que lo leí, pensé que se leía de otra forma...

-¿Eh?

-Esos signos se pueden leer como Yamakawa Takezô, o como Sansen Musashi.

-¿Sansen Musashi?

-Mi maestro se cambió el nombre, escrito es igual, pero cambió la lectura del nombre.

-¿Y porque?

-No se... supongo que para que no le relacionasen con su hermano, o como una manía... ni idea.

Siguieron haciendo el tonto con las katanas, mas tarde, volviendo a la casa, JeanPierre se paró frente a una lapida.

Tsuki la leyó en voz alta:

-"Pierre y Marie Bresson.

Maris, parents, enfants, et a manqué".

-Nunca te lo conté, ¿verdad?

-No.

-Mis padres creían que yo y Julie éramos alterados, ellos... nunca se entendieron muy bien, y eso ya fue la gota que colmó el vaso, siempre se discutían, mi padre le pegaba, mi madre le amenazaba... una noche la discusión fue mas fuerte que nunca; yo estaba en el cuarto de Julie, yo tenia... teníamos miedo, y no infundado, oímos un disparo... luego el silencio...

»El fuego fue apagado la mañana siguiente; según el informe policial, los detectores de fuego habían sido desconectados, el... el cuerpo me di madre estaba en el suelo, calcinado, y con una herida de bala... el de mi padre... también calcinado... colgado de uno de los árboles...

JeanPierre aprieta los puños con fuerza, de repente coge un palo del suelo y empieza a golpear la lapida de madera.

-¡Tontos, tontos, tontos!...

-J... Jean, ¡Cálmate!

-¡Malditos! ¡Tontos! ¿Por qué? ¡¿Por qué?!

Jean suelta el palo, que se ha roto hasta apenas despunta un poco de su mano.

-Vamos... vamos... no me gusta verte llorar.

-Tsu... Tsuki... ¡Tsuki! - El conejo se abraza - Amigo mío...

-Si... vamos clámate... esto... Jean-kun.

-¿Sí?

-Me alegro que estés mas tranquilo, pero... aun tengo las katanas, y si una de tus manos sigue bajando por mi espalda hasta donde tu y yo ya sabemos, te la corto... y la mano también.

-¿ººU Harías eso?

- v,v No lo dudes.

-Esto... ¿que tal si vamos a dormir? Ya se está haciendo muy tarde...

-Si, vayamos a casa.

-A cas... ¡Tsuki!

-A casa... una casa...

-Que bien te has adaptado... en apenas una hora.

-Ya sabes, a lo bueno uno se acostumbra pronto.

-Jeje - Hace Jean ya cruzando el umbral de la casa.

Julie está en el salón, mirando relajadamente la TV, cuando ve entrar a su hermano y al nuevo inquilino.

-Anda, ¡ha llegado el séptimo de caballería!

-Hermana, somos los 7 samuráis... menos 5...

-Como quieras, pero ya es hora de que los renacuajos vayan a la cama.

-Juuu, no quiero.

- ¬¬ ¡A dormir! ¡Ahora!

-Está bien - refunfuña JeanPierre - vamos Tsuki.

-Tsuki, espera, quiero hablar contigo.

-¿Eh? ¿Por qué el no tiene que irse a dormir ahora?

-¡Porque es un año mayor que tu! ¡A la cama "ipso facto"!

- ¬¬ Mala. - Protesta, a pesar de que ya se dirige a su cuarto.

- v,v Ay... Bueno, Tsuki, he llamado a tus tíos... te dejan venir a vivir aquí... la verdad, creo que te habrían dejado incluso si no les hubiera dicho que eras la reencarnación de la time stone...

-No me extraña. - Comenta el panda, que desde que había entrado en la ni había abierto la boca.

-Y bien, ¿Qué te parece tu nueva casa?

-Mmm... no se como decirlo... parece un hogar.

-Anda, mira que eres tontarrón.

-¿Eh?

-Nada, no me hagas caso, es que a veces me salta la vena maternal y...

-Hermanita, ¿tenias algo mas que decirle? - Comenta JeanPierre.

-¿Eh? Ah, no, solo era eso, venga, creo que yo también me iré a dormir pronto, ha sido un día muy largo, con ese erizo pesado de campeonato.

-¿Met? - Pregunta JeanPierre.

-No, Svart, el de Italia.

-Ah.

Se dirigen todos a los dormitorios, JeanPierre ya casi está dentro de su cama cuando Tsuki va a entrar, pero Julie le detiene

-Si aprecias tu integridad moral y tu salud, duerme en mi cama esta noche; es de 2 personas, cabremos.

-¬¬ Hey hermanita, yo no haría nada que Tsuki no quisiese.

-Repite eso mirándome a los ojos.

-...

-¿Y bien?

-Que duerma contigo esta noche, pero mañana mismo ya estás comprando una cama para que podamos compartir el cuarto. ¬¬

-Eh... yo iba a sugerir algo por el estilo. - Comenta Tsuki, cortando la discusión de los hermanos.

La acción hace efecto, pero de pronto a al joven conejo se le enciende una lucecita.

-¿Cuando dices "algo por el estilo" te refieres a lo de comprar otra cama o a lo de no dormir en la mía? ¬¬

-Ah... pues... (Pensando) ¿Y ahora que le digo?

-Hermanito mío, creo que se refiere a un poco de las dos cosas, y venga a dormir, ¿vienes Tsuki?

-Ah, sí claro. (Pensando) ¡Gracias gracias gracias!

-Tsuki, tienes la misma talla que Jean, ¿no?

-¿Eh? Si, creo.

-Hermanito, déjale un pijama a Tsuki.

-¿Quéééé? ¡Pero si solo me queda uno limpio!

-¿Y se puede saber que más te da? Si siempre duermes en calzoncillos, como mucho.

-Uh... bueno...

Jean coge un pijama del armario y se lo da a Tsuki, despidiéndose hasta la mañana siguiente, se va a la habitación de Julie, que se encuentra al final del pasillo para cambiarse.

-Que duermas bien diablillo. - Le dice tiernamente Julie, mientras cubre a su hermano con las sabanas.

-Me malcrías.

-Bueno, ¿qué esperas? Tengo que mimar mucho al único pariente cercano que me queda...

-Si... los abuelos por parte de papá murieron en la guerra, la otra iaia en ese accidente y el iaio por culpa de la neurofibrosis...

-Bonne nuit, lapin.

-Bonne nuit, vieux magicien.

-¬¬ ¿Vieja bruja? Anda, tienes cada salida...

- Buenas noches.

Julie se dirige luego a su cuarto, Tsuki está sentado en la cama, abrochándose los últimos botones de la camisa del pijama.

-Bueno, que duermas bien osito de peluche. - Dice ella dirigiéndose a la otra mitad de la cama y cogiendo un pijama de su armario.

-¿Eh? ¿Osito de peluche?

-Anda, no te lo tomes a mal, lo digo como un elogio.

-Ah... de acuerdo.

-¿Podrías girarte?

-¿Como?

-Tengo que cambiarme, y me da un poco de cosa que me miren, te haces a la idea, ¿verdad?

-Ah sí claro. - responde girándose rápidamente, sonrojado de mala manera.

-Venga, venga; tranquilo, ya estoy... ¿te metes en la cama o piensas estar mucho tiempo mirando la pared?

-Ah, sí claro. U

Tsuki se mete en la cama y se gira, encontrándose frente a frente con Julie, cosa que le hace sonrojarse de nuevo.

-Buenas noches. - Hace ella acariciándole la mejilla, antes de girarse para apagar la luz.

Tsuki recuerda una frase de las muchas que se encontraban en las paredes de su gimnasio.

"La paz es el mayor de los regalos terrenales.
Una conciencia tranquila y callada."

-Creo... que era de Shakespeare... uuah... Oyasumi nasai...

Por la mañana siguiente le despierta la alarma de un despertador (¿me lo parece o es una redundancia?), nada mas abrir los ojos se encuentra cara a cara con un conejo marrón.

-¿Uh?... Buenos días Jean-kun

-Vamos, levántate bello durmiente.

-Mmmff. - hace el panda, incorporándose. - ¿Qué hora es?

-Las 8 de la mañana.

-¿Qué? ¿Acaso hay escuela hoy?

-¬¬ ¿Un domingo? Ni locos.

-Entonces porque me levantas temprano.

-Bienvenido a la vida del campo, aquí te tienes que levantar tempranito a diario.

-·· ¿Qué? Me vuelvo a Japón...

-¬¬ Quieto aquí come-bambú, tus padres ya han mandado tus cosas, y Julie ya ha encargado la cama nueva.

-¿Cómo? - pregunta con una cara mezcla de incredulidad y sorpresa - pero bueno, ¿a que hora os habéis levantado?

-Pues... hoy no hay que recoger uvas ni prensarlas... a las 7 y cuarto más o menos... ¡pero venga! ¿A que esperas?

-Si, si... - hace el panda incorporándose - Uh... que pereza levantarme tan tempranísimo... - se sienta en la cama, bostezando; abre los ojos alarmado cuando ve que Jean va con el torso desnudo, aunque se tranquiliza al ver que lleva los pantalones del pijama.

- v,v Uf...

-¿Te pasa algo?

-¿Eh? No, que va (piensa) Que susto...

Mas tarde, una vez desayunados, duchados y vestidos, van todos al campo, mientras Julie repasa el vino de la bodega (que esté en perfectas condiciones y nadie se haya colado por la noche para pegarse una juerga.) JeanPierre y Tsuki repasan los indicadores de los viñedos (humedad, acidez de la tierra, y cualquier otro factor).

-¡¿Qué tal los de tu trozo?! - Grita el conejo desde la lejanía.

-Eh... ¡todos los indicadores están en verde, por lo que veo!

-¡Bien!

-¡¿Por qué no lo comprobamos desde el ordenador de casa?!

-¡Porque basta que uno esté caído o aflojado o cualquier cosa para que de una lectura falsa, así estamos mas seguros de que todo va bien, y a los árboles les gusta que les hagamos caso!

-¡¿Les gusta?!

-¡Sí! ¡Moonlight siempre dice: "poder hablarle a los árboles es practico, pero...

-... poder escucharlos es algo realmente maravilloso.

Demás de Tsuki está una fénix plateada, de ojos de un verde irreal, plumas que brillan como diamantes, una sonrisa tierna, unas largas alas que le salen de los brazos, una cola de caballo hasta los hombros (obviamente de plumas) y una bata de doctora.

-¡Hey Moonlight! ¡Ya has llegado! - le grita a la mujer JeanPierre, corriendo hacia ella.

-Hola renacuajo.

-Ah... ah... ¿qué tal? - dice, recuperando el aliento y poniéndose al lado del panda, sin ni esperar la respuesta dice: - Este es Tsuki Ato, mi amigo del que te hablé.

-Ah, ¿tu también eres un alterado?

-Eh... pues si... - dice muy bajo, avergonzado.

-¡Hey, venga! Ni se te oye, ¿acaso tienes el poder de silenciarte?

-Eh... no, de echo no tengo poderes de alterado.

-Ah, vaya, aun no tienes ninguna habilidad... que pena... :-S

-¡Si que tiene una! - Interrumpe JeanPierre - Es la reencarnación de la Time Stone!

-¿En serio? Vaya, parecéis una plaga, ya tengo aquí 3 reencarnaciones en esta casa

-Si... es que conocimos a otros, y queremos reunirnos todos.

- Que bien... ¿está tu hermana?

-Está haciendo recuento de existencias.

-Uf... hay para rato...

-Esto... - dice tímidamente Tsuki - ¿cual es su poder?

-Puedes tutearme, y mi poder es el de hablar con los árboles.

La fénix pone una mano sobre uno de los árboles y tanto ella como el quedan rodeados de una luz cálida, del mismo verde que sus ojos...

-Este, por ejemplo... dice que tiene sed.

-El indicador dice que la humedad está bien.

-Si, pero sus raíces son mas pequeñas que las de la mayoría, y por eso le cuesta mas tomar los nutrientes.

-Un momento. - JeanPierre saca un pequeño ordenador de bolsillo y marca una orden, casi inmediatamente se oye el sonido de una cañería y el suelo se vuelve más blando y húmedo.

-Dice que ahora está perfecto.

-Es impresionante... - dice sorprendido Tsuki - ya me gustaría hacer algo así...

-Seguro que tu también conseguirás algún poder maravilloso... el echo que los primeros alterados fueran pensados para ser armas, no significa que sus descendientes tengamos que serlo.

-¿Eh? ¿Armas?

-¿No conoces la historia de los alterados? Ya te la cuento yo, verás, los alterados somos personas con una mutación genética que nos distingue de la cadena de ADN de otras personas. Físicamente, somos exactamente iguales que las personas normales y corrientes, pero, en nuestro interior, hay unas radiaciones, llamadas epsilon, que, mezclándose con las hormonas producidas en el cerebro, crean distintos tipos de energía el cual puede manipularse. En los inicios de la mutación, laboratorios especializados de todo el mundo experimentaban de forma "legal" (pues se nos hacía firmar contratos el cual nos dejaban impunes frente a accidentes) con los sujetos, y manipulaban el ADN para intentar producir reacciones (curar distintos tipos de canceres... o incluso permitir adquirir poderes). Estos sujetos adquirieron poderes tan raros como manipular una materia, convertir el agua en vapor, o en hielo, conseguir aumentar la fuerza física durante un corto periodo de tiempo... incluso podían manipular el tiempo. Más tarde, los militares, al ver estos enormes progresos, decidieron, conjuntamente con el gobierno, hacer experimentación con personas del ejército con fines bélicos. Se dieron cuenta de que el cuerpo alterado emitía las ondas llamadas epsilon, y dieron las bases de la teoría del gen alterado (así se llama la teoría). La mutación es hereditaria no directa, es decir, que si estas mutado, tus hijos podrían no estarlo, pero tus nietos, bisnietos, tataranietos, etc... tienen mas posibilidades de tener el gen mutado... pero mas tarde temiendo su potencial, quisieron deshacerse de ellos, pero ya estábamos muy extendidos... nos persiguieron, aunque hoy en día ya somos mas aceptados...

-Ah... vaya. - hace el panda una vez Moonlight acaba su relato.

-Ahora que recuerdo, tengo una cosa que quería enseñarte. - Le dice JeanPierre a Moonlight.

Mientras todo eso pasa, en Barna, Malice pasea por la calle, mirando escaparates en busca de algo de su gusto, cuando se encuentra con un erizo de un color ceniza oscuro, con una gabardina de color negro y unos pantalones oscuros, el cual le hacia en Italia...

-Tu... ¿Svart?

-Mh... - Sigue andando como si no le oyese.

-¡Eh! ¡Svartsoul! - Malice ya se pone a su lado - ¡¿No me oyes?!

-No chilles, te oigo, solo... que no te escucho...

-Muy gracioso, ¿se puede saber que haces aquí?

-¿Hay algo que me impida ir a Barna?

-No... pero la gente no suele cruzar medio Mediterráneo por gusto... si no están de vacaciones.

-Tenía asuntos que atender.

-¿Qué asuntos?

-Laborales. - Se limita a decir Svart, evadiendo el tema.

-Ya veo que no quieres... ¡El!...

Girando la calle, está Black Claw, el asesino de su padre, mirándola fijamente con el arma levantada hacia Malice. Ella se sorprende tanto que no tiene tiempo ni de decir...

- ¡Tu!

...porque él ya ha disparado.

Svart, solo ver a Black Claw, intenta cubrir a la chica, poniéndole el brazo derecho frente a ella, se oye un ruido como si chocara una piedra en una sartén. Él, aun así, empuja a Malice hacia el suelo, mete las manos dentro de su gabardina, y saca dos pistolas, una de color negro completamente y otra grisáceo. Se gira y dispara media docena de tiros, tres de ellas le aciertan en las plumas del ala izquierda. El cuervo se escabulle entre las sombras de la calle.

Malice se intenta levantar, pues el golpe contra el suelo ha sido duro, y, cuando se ha podido incorporar, Svart no estaba. Seguramente había ido a por Black Claw.

Malice no va a quedarse de brazos cruzados... ni irse a por Black Claw. Coge su teléfono móvil de última generación (se puede ajustar entre tener una conversación holográfica con el cuerpo entero o solo mostrando los hombros y la cara) y dice en voz alta: ¡Tauro! La imagen aparece rápidamente, mostrando el cuerpo entero de Tauro.

Tauro: ¿Si? ¿Que pasa Malice?

Mal: Te tengo que explicar una cosa que me acaba de pasar... donde estas, Tauro?

Tauro: Estoy cerca del centro de la ciudad, ¿y tú?

Mal: Ven a buscarme en el parque del alce.

Tauro: Ok.

Dos minutos más tarde, un coche de policía aparca cerca de ella. Malice se sube y el coche arranca.

Tauro: ¿Que pasa? ¿Que te ha sucedido?

Mal: ...He visto a Black Claw

Tauro: ¿Que? ¿Donde?

Mal: Aquí cerca, en una de estas calles. Pero eso no es todo... me ha disparado

Tauro se pone blanco, y frena el coche de repente. La mira, buscándole algún agujero donde brotase la sangre.

Mal: Noo, no. No me ha dado...

Tauro: Mmmm. Cuéntamelo todo

Tras una extensa y detallada explicación, Tauro se pregunta una cosa

Tauro: ¿Dices que Svart te protegió con el brazo? ¿Y que sonó a metálico?

Mal: si... eso es muy curioso. Luego disparó y Black Claw se fue...

-Mh....

-¿Que estás pensando?

-Tengo una idea, pero tengo que hacer unas comprobaciones, en cuando sepa algo te aviso, ¿vale?

-Como quieras... ¿me puedes dejar ahí? - La leoparda señala un edificio con el logo de Sesoft, la empresa de su padre.

-Vaya, veo que realmente te lo dejó todo tu padre.

-Si, es mucho trabajo... - Malice se baja del coche - Hasta otra, lobo feroz. - le guiña.

-No tienes gracia alguna, bonita - pero igualmente le devuelve el guiño - ya te avisaré.

Fin del capitulo 17

Lizarman: ¡¡¡AAAALLLL FIIIINNN!!!

Dios, como se ha alargado esto, perdonad por el capitulo extra-largo... casi roza el sadomasoquismo, y tnks a Keitarô Ikari por ayudarme con lo japo.

Svart: pos si, muy largo, y larga la espera para tenerlo acabado, pero creo que vale la pena, ¿no? Pero ahora que empieza el instituto (al menos a mi) me han entrado mas ganas de seguir con el fic (será por la decepción de NgRO tb) xDD. No dudeis que sigamos adelante con este fic!