El Copyright y la Marca Registrada del nombre y del personaje Harry Potter, de todos los demás nombres propios y personajes, así como todos los símbolos y elementos relacionados, son propiedad de Warner Bros., 2000

Una vez más estoy aquí u.u, este capítulo me consto avanzarlo más que cualquier cosa que haya escrito en la vida, al principio pensaba usar relleno, pero no quería decepcionarme sola y simplemente adelanté algunas cosas que se supone van en el sexto capítulo xD

Ya, lean!

Algo Distinto
Capítulo 4: Colmillos de Acero, paseo por el bosque

-Lumus! -ordenó Harry a la varita.

Había caminado un par de kilómetros hacia el centro del bosque. A pesar de que afuera estaba brillando un imponente sol, en esa parte no se veía prácticamente nada. Llegó a un pequeño claro y recordó haberlo visto antes.

"Sí, aquí fue donde estúpidamente montamos vuelo en los Thestral para ir al ministerio"

Escuchó el crujir de unas ramas, miró hacia el lugar de donde creía provenía el ruido, pero no había nada. Se sentó en las raíces de un gran árbol y miro hacia el... ¿cielo?. En verdad su vista se perdía entre las copas de los árboles, varios metros más arriba.

"Maldito mundo... ¿qué te he hecho yo para que seas así conmigo?. Me dejaste sin padres, me abandonaste en una casa donde no me querían, me enfrentaste a los mayores peligros y ahora me quitaste a la única persona que admiraba de verdad, a la única persona que quise de verdad¿Por qué a mí?. ¡Qué... ¡Ay, qué diab...!"

Algo rozó su pierna.

Miró hacia abajo, molesto porque lo sacaron de su trance. Vio una serpiente. La impresión por el tamaño del animal lo hizo echarse hacia atrás. La serpiente se irguió en su cola, quedando su cabeza a la altura de la de Harry.

-Harry Potter... ¿me equivoco?

Parsél. Ya casi había olvidado completamente que conocía el lenguaje de las serpientes.

Asintió con la cabeza, con nerviosismo. La serpiente pareciera haber sonreído.

-Me presento... -Le clavó sus alargadas pupilas amarillas en las suyas. -Soy Colmillos de Acero -Inclinó la cabeza.

-Col... ¿Colmillos de Acero, dices? -La serpiente volvió a levantar la cabeza, mirándolo como quién va a matar a alguien. -¿Puedo saber... cómo sabes mi nombre?

Se acercó más a Harry.

-¿Quién no conoce al famoso Harry Potter? -Sonrió de nuevo.

"Otra vez con el cuento de "el famoso", qué fastidio"

Tomó aire y trató de mantener la mirada de la serpiente.

-¿Qué quieres de mí? -preguntó Harry, haciéndose el interesante.

-En realidad eras tú el que necesitaba algo -Harry se sonrojó levemente. -La soledad, la oscuridad...¿no?

-Sí...

-Dado que vienes a buscar la soledad a MI bosque, espero que me des algo a cambio. No esperabas que te iba a salir gratis...

"No sabía que el bosque tuviera dueño" Pensó, arrogante.

-Bueno, ahora lo sabes -dijo Colmillos de Acero, para sorpresa de Harry-. Sí, puedo leer la mente también. No soy una criatura común, como te habrás dado cuenta.

Harry como que entró a un dilema.

-¡Harry!

Se escuchó un grito proveniente desde atrás de la espesura de algunos matorrales a lo lejos. Harry no tardó mucho en reconocer que la voz era de Ginny, cuando llegó corriendo hasta él, apuntando con la varita a Colmillos de Acero.

-¡No... te... muevas...! -Le gritó, acercándose de a poco a ella.

Pero la serpiente se movió, volteándose hacia Ginny y colocándose en posición de ataque. Ella lo empezó a atacar con hechizos potentes, pero la serpiente era rápida y comenzó a avanzar hacia ella.

-Harry... ¡ayúdame!

-Colmillos, déjala -dijo Harry, saliendo de su ensimismamiento-. Ella se va a ir, ahora.

-¡Pero Harry...!

-Sal de aquí -le ordenó, mirándola fríamente.

Colmillos de Acero se arrastró hasta quedar junto a Harry.

Ginny sintió que se le humedecían los ojos.

-Yo pensé... que eras distinto... -Una lágrima rodó por su mejilla.

Se dio media vuelta y se fue corriendo.

Flashback de Ginny

"¡Necesito salir de aquí!" Pensó, mirando por la ventana y tratando de recordar alguna excusa. Lo hizo. "¡Las cositas esas de Fred y George!"

-¿Colin, tienes Saltaclases? -le susurró, pues estaba junto a ella.

-Sí, a ver, espera -dijo él, buscando en su mochila, bien al fondo tenía la bolsita. Sacó una-. Toma -Se la pasó.

La mordió y uno segundo después de su nariz chorreaba sangre, apuró a ensuciarse el suéter y se tapó la nariz.

-¡Profesor Binns, Weasley esta sangrando!

-Eh, sí, vaya a la enfermería señorita Weasley.

Ginny corrió lo más rápido que pudo, salió escaleras abajo, por un pasillo largo que la condujo al patio. Se acercó al límite del bosque, con la varita en mano, y entró. Era la primera vez que entraba prácticamente sola.

Fin del Flashback

-Todas las estupideces que soy capaz de hacer por ti, Potter.

Llegó al castillo y se fue directamente a la sala común, que estaba vacía. No iba a regresar a clases.

Apenas Ginny se había ido del Bosque Prohibido, la serpiente volvió a girarse hacia Harry.

-La noche no es compasiva. Me hubieras dejado matarla -dijo unos minutos después.

-No... no sé...

-Ya es tarde, a esta hora los centauros salen a comer -Lo interrumpió, mirando hacia arriba y al fondo. -Debes salir del bosque. Regresa al anochecer.

Obedeció sin chistar. Puso su varita en alto y siguió el sendero por el cual hace un rato había salido Ginny. Luego de unos minutos caminando lo encegueció la luz que le llegó de golpe a la cara. Su reloj de mano marcaba las 11 de la mañana. Salió del bosque y fue camino al campo de Quidditch, invocó su escoba, dejó el abrigo en los camarines y se lanzó a volar un rato.

"Es la oscuridad lo que yo necesito según esa serpiente pero... se refería literalmente a la oscuridad... ¿Puedo confiar en Colmillos de Acero?"

Las horas se le pasaban rapidísimo. Recién se dio cuenta de lo tarde que era a eso de las 4 de la tarde, cuando empezaba a anochecer. Fue cayendo rápidamente en picada para frenar a unos metros del suelo, donde se enderezó y bajó de la escoba. Su estómago gruñó, recordó que pasó todo el día sin comer.

Iba saliendo del campo de Quidditch cuando en el camino se cruzó con el equipo, su equipo de Gryffindor, al que pertenecía.

-Qué bueno que ya estás aquí, Harry -le dijo un entusiasta Dennis Creevey-. Justo íbamos a entrenar.

Harry era el capitán del equipo de Quidditch de este año, pero como no le ponía mucho empeño, el menor de los Creevey oficiaba como reemplazante.

Se fijó en Ron, unos metros más atrás de Dennis. Éste lo miraba con cara de incertidumbre.

-He estado... mmm... vine a buscar unas cosas, estoy algo cansado para entrenar ahora -dijo Harry, sin despegar los ojos de su mejor amigo.

-Bien, pues, si no quieres... -empezó Dennis mirando al equipo-. Vamos chicos.

Todos siguieron a Creevey hacia el campo, menos Ron, que se quedó contemplando a Harry.

-¿Qué te pasó, Ha...

-Adiós -le interrumpió Harry, mirando directo hacia el castillo y tomando marcha hacia él, dejando a un Ron completamente desconcertado.

Continuará...

Al fin el fin del cuarto capítulo. Les aviso que si quieren ver Draco&Hermione tienen que esperar el quinto que ahí se viene con todo, jejeje. A ver si me dejan un review nuevamente y olvidamos la tradición de los tres reviews por capítulo xD.

Bye!!!