Hi!!!
Este es un nuevo fic. Algunas cosas que están aquí son
experiencias propias.
Espero que les guste mucho. Aquí va...
-------------------------------------------------------------------
-----------------------------------------
UNA DECEPSIÓN
La chica se encontraba en su habitación; simplemente cerró la puerta, fue hasta su cama y las imágenes del chico que ella amaba amando a otra venían a su mente aunque ella no lo quisiera así. Esas imágenes eran las causantes de que la pobre chica estuviera llorando durante toda la noche, sin preocuparse por nada más.
¿Cómo es posible que hayan pasado 4 años y aún lo continúe queriendo tanto? Esta era la única pregunta que venía a ella. Pensaba en cómo era posible que después de tanto tiempo, el chico del que se había enamorado aún siguiera presente en sus pensamientos, pero, sobre todo, presente en su corazón. Había sido un amor a primera vista, un amor infantil.
Era suficiente: ya no podía seguir llorando así. Decidió encender la radio, pero esa canción:
Para qué mi boca, si no te prueba
Para qué mis labios, si no te besan
Para qué mi corazón que tu amor no siente
Para qué mi vida, si no te tiene a TI
¡Qué coincidencia! Esa canción expresaba exactamente lo que ella sentía. Haberlo visto tan feliz con otra, había sido como si le quitaran su razón de existir. Ella siempre había sido muy sentimental, pero jamás había llorado tanto por una sólo persona y estaba empezando a sentir que no valía la pena gastar sus lágrimas por alguien que la veía sólo como una amiga, o...¿ Ni siquiera eso? Tal vez la veía tan sólo como una conocida más, de las muchas que tenía.
Nunca había expresado sus verdaderos sentimientos. Ellos dos eran tan distintos: ella una sentimental, vanidosa, le gustaba ser el centro de atención, inocente; pero él era solitario, parecía no preocuparse por su imagen (aunque parecía no hacerle falta), tal vez despreocupado.
Ahora que lo pensaba, ella había hecho creer a los demás y hasta a sí misma que se había fijado en otra chico. Sabía que ese chico se había fijado en ella y al decir que ella le correspondía, se había hecho sentir amada y que ella amaba el chico. Todo había sido una mentira producido por su propia mente para tratar de olvidar su verdadero amor.
Pero a pesar de todo, lo que más le dolía era que la chica que su querido amaba era una de sus mejores amigas. Tratar de aceptarlo había sido muy doloroso para ella. Y pensando en esto, se quedó dormida.
Sra. Tachicawa: ¡¡¡Mimi despierta!!!
Mimi despertó, tenía los ojos un poco hinchados por todo lo que había llorado la noche anterior. Se arregló rápido pero cuidadosamente para ir al colegio.
La semana pasada había vuelto a Odiaba, ahora para quedarse. Todos sus viejos amigos habían ido al aeropuerto. Tai con su pelo siempre alborotado, Izzi con su computadora portátil, Joe con sus lentes, Kari quien ya era una señorita, TK había crecido bastante y por último Matt y Sora... ¡JUNTOS! Sintió que algo le atravesó el corazón , se sintió demasiado mal por lo que simplemente los saludó y les dijo que estaba muy cansada por lo que quería irse rápido a su casa. Todos, un poco extrañados, la vieron irse en el auto con sus padres. Mimi no había salido de sus casa o hablado con sus amigos en toda la semana, pero hoy debía enfrentarse a todos , pero sobre todo a Matt y a Sora.
En el camino iba pensando en cómo pudo ser que ellos dos se unieron. Hace 4 años, antes de que Mimi se fuera a Estados Unidos, ella había creído que entre quienes se iba a dar una relación era entre Tai y Sora, que eran más unidos que cualquier otro. Pero... ¿Qué había cambiado?
Llegó al colegio, pero no vio a ningún conocido. En su clase se encontró con Izzi quien la saludó y siguió en sus cosas. Era una suerte tener a un compañero tan distraído, pero mejor aún, no ser compañera de Matt, Sora y Tai, quienes eran un año mayor que ella.
Ya era hora de recreo, Mimi se dirigió al comedor. Era su primer día en ese colegio, por lo que muchos chicos no podían evitar admirar la belleza de la nueva alumna, con sus ojos color miel y su cabello castaño suelto; pero Mimi estaba tan distraída pensando en Matt que no les prestó atención. De repente una voz familiar la sacó de sus pensamientos.
Sora: Mimi, ven a sentarte con nosotros.
Tai, Matt y Sora estaban sentados en una mesa. Pero era extraño, habían muchas chicas alrededor.
Chica 1: Matt ¿Me podría sentar junto a ti?
Matt: Lárguense de una vez, además este asiento está reservado para mi amiga.
Chica 2: Hay cómo las envidio, tanto a la nueva como a tu novia Sora.
Sora: Podrían dejarnos en paz de una vez, por favor.
Chica 3: Discúlpanos Sora, ya no los interrumpiremos.
Sora: No te preocupes Mimi, ya estoy acostumbrada- dijo al ver la cara de preocupación de Mimi.
Aunque la preocupación de Mimi era más por ver a tantas chicas tras Matt que por el hecho de que Sora no se pusiera celosa. Esta significaba una posibilidad más pequeña de que Matt se fijara alguna vez en ella teniendo a otro ciento e chicas de donde escoger.
Tai: Mimi ¿Estás bien?- dijo al ver a su amiga pálida.
Mimi: No te preocupes, me sentí un poco mareada.
Matt: ¿Quieres que te lleve a la enfermería?
Mimi: No, no es necesario. Pero gracias.
Sora: Yo debo irme ya, porque prometía una compañera ayudarle con su trabajo.
Matt: Pues chao- dijo y le dio un beso a Sora. De repente Mimi, que observaba la escena con mucho dolor, notó que su vista se nublaba y e ahí no supo más...
HOLA!!! Espero que les guste este nuevo fic, que es totalmente Mimato. Escríbanme Reviews para hacerme sugerencias o si quieren quejarse. También pueden hacerlo a mmora97@hotmail.com
Prometo actualizarlo pronto. P.D.: También pueden leer mi otro fic. Se llama Why Not? CHAO
UNA DECEPSIÓN
La chica se encontraba en su habitación; simplemente cerró la puerta, fue hasta su cama y las imágenes del chico que ella amaba amando a otra venían a su mente aunque ella no lo quisiera así. Esas imágenes eran las causantes de que la pobre chica estuviera llorando durante toda la noche, sin preocuparse por nada más.
¿Cómo es posible que hayan pasado 4 años y aún lo continúe queriendo tanto? Esta era la única pregunta que venía a ella. Pensaba en cómo era posible que después de tanto tiempo, el chico del que se había enamorado aún siguiera presente en sus pensamientos, pero, sobre todo, presente en su corazón. Había sido un amor a primera vista, un amor infantil.
Era suficiente: ya no podía seguir llorando así. Decidió encender la radio, pero esa canción:
Para qué mi boca, si no te prueba
Para qué mis labios, si no te besan
Para qué mi corazón que tu amor no siente
Para qué mi vida, si no te tiene a TI
¡Qué coincidencia! Esa canción expresaba exactamente lo que ella sentía. Haberlo visto tan feliz con otra, había sido como si le quitaran su razón de existir. Ella siempre había sido muy sentimental, pero jamás había llorado tanto por una sólo persona y estaba empezando a sentir que no valía la pena gastar sus lágrimas por alguien que la veía sólo como una amiga, o...¿ Ni siquiera eso? Tal vez la veía tan sólo como una conocida más, de las muchas que tenía.
Nunca había expresado sus verdaderos sentimientos. Ellos dos eran tan distintos: ella una sentimental, vanidosa, le gustaba ser el centro de atención, inocente; pero él era solitario, parecía no preocuparse por su imagen (aunque parecía no hacerle falta), tal vez despreocupado.
Ahora que lo pensaba, ella había hecho creer a los demás y hasta a sí misma que se había fijado en otra chico. Sabía que ese chico se había fijado en ella y al decir que ella le correspondía, se había hecho sentir amada y que ella amaba el chico. Todo había sido una mentira producido por su propia mente para tratar de olvidar su verdadero amor.
Pero a pesar de todo, lo que más le dolía era que la chica que su querido amaba era una de sus mejores amigas. Tratar de aceptarlo había sido muy doloroso para ella. Y pensando en esto, se quedó dormida.
Sra. Tachicawa: ¡¡¡Mimi despierta!!!
Mimi despertó, tenía los ojos un poco hinchados por todo lo que había llorado la noche anterior. Se arregló rápido pero cuidadosamente para ir al colegio.
La semana pasada había vuelto a Odiaba, ahora para quedarse. Todos sus viejos amigos habían ido al aeropuerto. Tai con su pelo siempre alborotado, Izzi con su computadora portátil, Joe con sus lentes, Kari quien ya era una señorita, TK había crecido bastante y por último Matt y Sora... ¡JUNTOS! Sintió que algo le atravesó el corazón , se sintió demasiado mal por lo que simplemente los saludó y les dijo que estaba muy cansada por lo que quería irse rápido a su casa. Todos, un poco extrañados, la vieron irse en el auto con sus padres. Mimi no había salido de sus casa o hablado con sus amigos en toda la semana, pero hoy debía enfrentarse a todos , pero sobre todo a Matt y a Sora.
En el camino iba pensando en cómo pudo ser que ellos dos se unieron. Hace 4 años, antes de que Mimi se fuera a Estados Unidos, ella había creído que entre quienes se iba a dar una relación era entre Tai y Sora, que eran más unidos que cualquier otro. Pero... ¿Qué había cambiado?
Llegó al colegio, pero no vio a ningún conocido. En su clase se encontró con Izzi quien la saludó y siguió en sus cosas. Era una suerte tener a un compañero tan distraído, pero mejor aún, no ser compañera de Matt, Sora y Tai, quienes eran un año mayor que ella.
Ya era hora de recreo, Mimi se dirigió al comedor. Era su primer día en ese colegio, por lo que muchos chicos no podían evitar admirar la belleza de la nueva alumna, con sus ojos color miel y su cabello castaño suelto; pero Mimi estaba tan distraída pensando en Matt que no les prestó atención. De repente una voz familiar la sacó de sus pensamientos.
Sora: Mimi, ven a sentarte con nosotros.
Tai, Matt y Sora estaban sentados en una mesa. Pero era extraño, habían muchas chicas alrededor.
Chica 1: Matt ¿Me podría sentar junto a ti?
Matt: Lárguense de una vez, además este asiento está reservado para mi amiga.
Chica 2: Hay cómo las envidio, tanto a la nueva como a tu novia Sora.
Sora: Podrían dejarnos en paz de una vez, por favor.
Chica 3: Discúlpanos Sora, ya no los interrumpiremos.
Sora: No te preocupes Mimi, ya estoy acostumbrada- dijo al ver la cara de preocupación de Mimi.
Aunque la preocupación de Mimi era más por ver a tantas chicas tras Matt que por el hecho de que Sora no se pusiera celosa. Esta significaba una posibilidad más pequeña de que Matt se fijara alguna vez en ella teniendo a otro ciento e chicas de donde escoger.
Tai: Mimi ¿Estás bien?- dijo al ver a su amiga pálida.
Mimi: No te preocupes, me sentí un poco mareada.
Matt: ¿Quieres que te lleve a la enfermería?
Mimi: No, no es necesario. Pero gracias.
Sora: Yo debo irme ya, porque prometía una compañera ayudarle con su trabajo.
Matt: Pues chao- dijo y le dio un beso a Sora. De repente Mimi, que observaba la escena con mucho dolor, notó que su vista se nublaba y e ahí no supo más...
HOLA!!! Espero que les guste este nuevo fic, que es totalmente Mimato. Escríbanme Reviews para hacerme sugerencias o si quieren quejarse. También pueden hacerlo a mmora97@hotmail.com
Prometo actualizarlo pronto. P.D.: También pueden leer mi otro fic. Se llama Why Not? CHAO
