¡Buenas! Aqui teneis el nuevo capítulo, espero que os guste.

A la mañana siguiente en su mesita, junto a sus gafas habia un pequeño paquete, cuando lo abrio vio una pequeña cadena de plata, con el escudo de su abuelo como colgante. Adjunto habia una nota que decia:

Querido Dan:

El colgante es un transladador, lo puedes activar cogiendolo en la mano y diciendo asportare´. Estes donde estes, siempre te llevará a la Mansión de Valo.

Te espero a las 6 de la tarde.

En espera.

Tu abuelo.

Harry no podia creer su suerte, decidió enviar a Hedwig con las cartas cuando se fuera, ella le encontraria, estuviera donde estuviera.

Después de avisar a su tia, Harry se pasó el dia quitando las malas hierbas del jardín, a las cinco y media sus tios se fueron para ir a cenar, el restaurante quedaba bastante lejos, y estarían mucho tiempo en el coche.

A las 6 en punto envió a Hedwig con las cartas para Ron y Hermione, cogió el colgante en su mano, cerró los ojos y dijo "asportare", notó la sensación ya conocida como si le estiraran por el ombligo. Cuando abrió los ojos se vió en una habitación inmensa iluminada por un candelabrio que colgaba del techo, la pared era de piedra, en el suelo una gran alfombra verde esmeralda. En un lado de la habitación habia un ventanal que cubria todo el lado del cuarto, cubierto por unas cortinas del mismo color que la alfombra. La Pared que quedaba enfrente estaba tapada por un inmenso armario de madera negra. En una de las paredes que quedaba en medio habia una cama de dorsel verde y madera negra en la que seguramente caberian 5 personas, estaba cubierta con sábanas de seda negra, enfrente de la cama estaba la puerta, de doble hoja (madera negra como no), digna de la habitación, flanqueada de dos sillas de madera negra recubiertas de terciopelo verde. La habitación se veia un poco lúgubre, pero aun así Harry estaba encantado. Mientras pensaba eso la puerta se abrió y pasó un hombre, que se quedó inspeccionando a Harry.

Mientras tanto Harry observaba al hombre. Tendria unos sesenta años, aunque no se veía en absoluto viejo. Tenia el pelo corto, ya gris, ojos verdes esmeralda, se podia ver perfectamente que era el padre de Lily, ya que esta era calcada a él, en su cara no se mostraba ninguna arruga, aunque su expresión demostraba cansancio, a causa de la edad. Llevaba un traje negro, y le acompañba un bastón de madera negra, que en la parte de arriba tenia un ciervo, en cullo cuerno se enrollaba una serpiente.

"¡Dan! ¡Nieto, que alegria verte!" Dijo el hombre acercandose a Harry y dándole un abrazo de bienvenida. Cuando se separaron salieron del cuarto y Harry pudo ver que habia un tipo biblioteca llena de libros, con un escritorio muy grande, una chimenea que aun siendo verano estaba encendida y dos sillones muy acogedores delante de ésta. David siguío: "Te llamaré desde ya Dan, ya no eres Harry, por lo menos por un tiempo. Tu puedes llamarme abuelo o David, o como te parezca mejor. Ven conmigo, primero te enseñaré la casa, luego comemos algo y veremos que queda por hacer."

Dicho y hecho, David le enseñó la casa a Harry, aunque mas que casa caberia decir castillo, era inmenso. Como pronto averiguó Harry el cuarto al que habia llegado seria el suyo. El castillo era todo de piedra, pero aun asi muy acogedor, Harry estaba feliz, sentia que estaba en casa, por fin. Despues de haber visto toda la casa y haber comido, llegaron a la biblioteca de David, donde se sentaron junto a la chimenea.

"Dan, para poder hacer cargo de tu título como Lord de Valo tendremos que arreglar bastantes cosas." Empezó dicendo David.

"Entiendo abuelo" Dijo Harry, habia decidido llamarle asi. "Pero, ¿como lo haremos para que nadie me reconozca como Harry Potter? Como ya dijiste, soy conocido en todo el mundo, y no solo mi nombre si no tambien mi cara"

"No te preocupes por eso Dan, aparte de tus ojos eres identico a tu padre, hay un pequeño hechizo (que por cierto nadie conoce) que puede hacer que este hecho cambie un poco y sera la copia exacta de tu madre, y a causa de eso a mi. Es un hechizo reversible, pero como Lord Dan de Valo no puedes ir con la cara de Harry Potter por el mundo. ¿Estas deacuerdo en que te aplique el hechizo?"

Harry miraba a su abuelo boquiabierto, con los ojos como platos "¿Eso es posible?¿Se puede cambiar el aspecto de una persona con un hechizo?"

"No exactamente, pero se puede conseguir con un hechizo que una persona sea idéntica a su progenitor" Explicó David. "Entonces dime Dan, ¿estás deacuerdo en que te aplique el hechizo?"

Harry no tuvo que pensárselo dos veces, acepto al instante. "Deacuerdo" Volvió a coger la palabra David. "Un punto menos que aclarar, pero quedan un par de cosas mas. ¿Que sabes sobre la familia Malfoy?"

Harry miró sorprendido a su abuelo. "No se mucho la verdad, pero para mi es suficiente. Se que son bastate ricos, que el Sr. Malfoy es mortífago, que su hijo va a Hogwarts, haciéndome la vida imposible y que todos los pertenecientes de esa familia son unos arrogantes intratables"

"Pues estas bastante equivocado, son ricos si, pero comparados con nosotros se podrian llamar de la clase media (" Harry abrió la boca mas que sorprendido "). Que Lucius sea mortífago o no no nos incumbe..." "¡¿Cómo que no nos incumbe?!" Interrumpió Harry. "¡Es del lado oscuro, esta liado con mi mayor enemigo!"

"¡Dan! ¡Cálmate! Tendremos que comenzar ya con los modales de la nobleza, no olvides, ya no eres Harry, ahora eres LORD. Primero: Nunca interrumpas a nadie. Segundo: Nunca levantes la voz ante nadie. Tercero: Nunca muestres tus sentimientos, no le importan a nadie. ¿Entendido?"

Bueno, espero que os haya gustado y que escribais reviews.

Hasta pronto.

Condess.