Weno aki esta el capitulo 7, descubrian ya a Remus? Si alguien kiere saberlo que lea este capitulo. Aviso: no soy J.K Rowling asik esto no es mío... yo solo me entretengo usando sus personajes.
CAPITULO 7: LUNA LLENA
Amaneció y Remus se levantó extrañado de que Sírius no hubiera le hubiera hecho ninguna broma de bienvenida, como despertarle a gritos o lanzarle un cubo de agua, cosas típicas del joven Black. Se levantó y se fue hacía la ventana, hacía un buen día, de los últimos días soleados de septiembre, ya que pronto empezarían las lluvias y más tarde llegaría la nieve para regocijo de todos los alumnos. Miró a sus compañeros, aun dormían placidamente, entonces se miró el reloj, aun no eran las 7 y los despertadores aun no habían sonado. Remus se había despertado antes porque no había dormido bien en toda la noche, había tenido pesadillas sobre las reacciones de sus amigos cuando descubrían lo que él era. Y cuando vio que ya había suficiente luz en la habitación se había levantado.
Decidió ir al baño antes de que los demás se despertaran y lo ocuparan. Se dirigió hacia la puerta de los baños que estaba entreabierta, y estaba tan sumido a en sus pensamientos que no se dio cuenta de que encima de la puerta había un cubo y cuando empujó la puerta para entrar...
PUMMMM!!
–Ahhh!! –gritó el licántropo asustado.
–Los otros chicos se levantaron de golpe, uno riéndose como un loco y los otros mirándolo y negando con la cabeza.
–JAJAJAJAJAJAJA, picaste Remus, picaste! –gritaba Sírius saltando encima de la cama –no pensaba que fueras tú la víctima, como siempre eres el ultimo... y encima siempre te das cuenta de todo...
–Brjdasñnvvñohfyg
–Como? Ey Remus tendrías que quitarte ese cubo de encima antes no crees?
–Argg que es esto Sírius? Que asco –dijo la víctima mirando el barro que llevaba encima, pero después mostró una sonrisa –bueno, tu mismo Sírius, chicos me voy a la ducha no creo que salga antes de que sea demasiado tarde para que podáis entrar –y viendo la cara de furia que ponían sus amigos añadió –pero no me deis las gracias a mi, dádselas a Sírius –y dicho eso el licántropo se encerró en el baño.
Mientras tanto sus compañeros se echaban encima de un Sírius atemorizado que gritaba pidiendo piedad.
Después del incidente de la mañana bajaron todos a desayunar, al final Remus había salido un poco antes para que los chicos pudieran lavarse la cara y peinarse, aunque por supuesto no dejó entrar a Sírius que bajó al Gran Comedor todo despeinado.
–Eh! Black nuevo look? –se rió un Slytherin un año mayor que ellos al pasar por delante de su mesa.
–El aludido solo soltó un gruñido y fue a sentarse a la mesa de los Gryffindor.
–Emm, Black... –empezó a decir un compañero
–QUE? Ya lo sé, no me he podido peinar vale? –contestó el moreno enfadado.
El chico que estaba sentado a su lado empezó a reírse y continuó.
–No es por eso hombre! No te enfades, solo quería hacerte una propuesta. –miró a Sírius y después continuó –he oído que McGonagall busca a alguien para que retransmita los partidos de Quidditch, ya que el chico que estaba antes ya se ha ido del colegio, y he pensado en ti, ya que prefiero que sea un Gryffindor antes que un Slytherin entiendes?
–Que? –contestó Black emocionado –me dejarías y altavoz para mi solito?
–Jajaja, si si Black, al ser capitán del equipo de Quidditch me dejan escoger y si nadie tiene nada en contra puedes serlo, pero tendrías que ir a hablarlo con McGonagall.
–Gracias Wood eres el mejor!
–Puedes llamarme Rupert, y cambiando de tema James tenemos que empezar a entrenar pronto, este año tenemos que volver a ganar la copa, por suerte podemos conservar casi el mismo equipo que el año pasado, solo tenemos que fichar a un nuevo bateador.
–Nuevo bateador has dicho? –Erin acababa de sentarse frente Rupert.
–Sip, estas interesada? Si es así mañana por la tarde te espero en el campo de Quidditch –el capitán se levantó de la mesa para irse ya, pero antes le dijo a James –y tu tienes que estar también quiero decidirlo con todo el equipo, vale?
–Si claro, pues hasta mañana entonces –respondió Potter
–Genial! Que ganas tengo de que se juegue el primer partido! –Sírius estaba contentísimo con su futuro cargo que ya se había olvidado de las greñas que llevaba.
–Tu? Es que también te vas a presentar a las pruebas para bateador?
–Tranquila cariño, te dejo eso para ti –y le dedicó una sonrisa –seré el retransmisor de los partidos!
–Que ni se te ocurra volver a llamarme eso Black! Y no me ganarías en batear.
–Que es lo que no quieres que te vuelva a llamar? Cariño... –dijo el moreno intentando picarla.
–Mira Black, como no te calles voy a hacer las practicas con tu cabeza!
–Claro cariño... –respondió Sírius sonriendo.
Todos esperaban a ver que respondería Shacklebolt pero no llegó a responder porque la chica cogió su vaso de leche y lo tiró a Black, el cual se quedó empapado pero sonriendo.
–Basta ya! Black no vuelvas a decirle nada! –había llegado el jefe de los prefectos de Gryffindor, Weasley –a ver aquí tenéis los horarios de los de segundo, y por favor dejad de lanzaros cosas.
–Vamos Arthur, no seas duro con los chicos, solo están comiendo –dijo una chica pelirroja a su lado.
–Lo siento, pero es que soy prefecto y tengo obligaciones –dijo sonriendo a la muchacha –venga terminemos de repartir los horarios.
–Que os jugáis que esos dos se casas nada mas salir de Hogwarts –dijo Remus sonriendo.
–Ole! Otra vez pociones con los Slytherins! Y encima tenemos la clase ahora mismo! –dijo James hundiéndose en su asiento. –venga terminad ya que no sé que nos hará ese loco si llegamos tarde.
Los chicos se levantaron y cogieron sus mochilas que iban cargadas de libros, pues antes sabían que asignaturas les tocarían ese primer día. Sírius les dijo que no le esperaran que tenía que pasar por la habitación a lavarse y a cambiarse de túnica, pues iba empapado de leche.
Los chicos entraron en la mazmorra y tomaron asiento al final, James y Peter estaban sentados en la ultima mesa y Remus justo delante de James girado hacía atrás para hablar con ellos mientras el profesor no llegara. Los chicos estaban absortos en su conversación y no vieron que Snape desde la otra punta de la clase estaba rellenando un globo con una extraña sustancia. Cuando ya lo hubo rellenado del todo espero a que ningún Gryffindor lo viera y lanzó el globo hacia los tres amigos. Parecía que iba a romperse al chocar contra Remus y todos los Slytherin ya estaban riendo, pero justo cuando el globo iba a impactar contra la espalda del licántropo el chico se giró rápidamente y atrapó el globo con la mano sin que este petara y dejara salir el liquido que había en su interior. El chico miró el globo y olió la sustancia que había dentro.
–Buen intento Snivellus, pero fallaste, toma! –y lanzo el globo rápidamente tomando por sorpresa a Snape y el globo si choco contra su cara y impregno con su líquido a Severus y a sus compañeros más cercanos –creo que no debiste poner las patas de araña...
–Lupin! –el profesor Oavin acaba de entrar en clase y miraba a Remus, o había estado allí desde hacía rato? –Cómo ha hecho eso? –preguntó el profesor sorprendido.
–Eh... no he sido yo profesor, Snape me lo ha... –empezó a decir el chico de los ojos dorados.
–No le he preguntado eso señor Lupin! Lo he visto todo perfectamente –y luego se giró hacia Snape –y usted recibirá su castigo, pero volviendo al tema Lupin como consiguió atrapar el globo sin que se rompiese estando usted de espaldas?
–Como? No lo sé, lo supe y basta.
–Muy bien, después de clase quiero hablar con usted Lupin, y contigo también Snape tenemos que hablar sobre su castigo. Y ahora empecemos la clase, vamos! –miró a toda la clase y se quedo mirando el pupitre vacío que había junto a Remus –donde esta el señor Black?
–Aquí! –Sírius entró corriendo –lo siento profesor he tenido un problema con el desayuno.
El profesor debió entender que Sírius estaba indispuesto y por eso dijo lo siguiente.
–De acuerdo si se encuentra mal ve con Madame Promfey, y acompañe a estos tres porque estas verrugas que les están saliendo no me parecen normales –dijo mirando a los muchachos.
Sírius miro a James y tuvo que hacer grandes esfuerzos para no echarse a reír, iba a contestar que se encontraba perfectamente pero decidió acompañar a los Slytherins a ver si se enteraba de algo y así podría saltarse una clase. Los cuatro chicos salieron de clase y subieron hacia la enfermería, cuando ya se hubieron alejado de las mazmorras el Gryffindor preguntó:
–Bueno, que ha pasado? Que os ha hecho James?
–Mira Black no te metas y pregúntaselo luego a tus amiguitos, ten en cuenta que estas en minoría –contestó Severus de mala leche.
–Ay, no creo que tus amiguitos estén para bromas –contestó el moreno mirando a los dos Slytherins que acompañaban a Snape –no tienen cara de dar palizas no? –Severus gruño algo que Sírius no logró entender –que pasa Snivellus? No quieres hablar?
–Mira Black, se ve que tu amiguito de ojos dorados tiene unos reflejos fuera de lo común, y pienso averiguar porque! –dicho esto entró en la enfermería.
Sírius se quedó en la puerta mirando como Madame Promfey curaba a los demás muchachos.
–Bueno señor Black! Tiene usted algún problema? Si no es así vuelva a clase –le ordenó la enfermera.
Pero Sírius no volvió a clase, lo que Snape le había dicho lo hizo pensar, a lo mejor lo que Remus les escondía también tenía que ver con sus extraños reflejos, el chico se fue a la biblioteca, a ver si conseguía encontrar información sobre su amigo, pero por donde empezar, lo único que tenia era sus desapariciones mensuales, rápidos reflejos, y su extraña reacción cuando alguien mencionaba al sauce boxeador. Una vez aclarados esos puntos podía empezar a buscar algún libro que le ayudase a averiguarlo.
Mientras los otros tres amigos estaban en clase de pociones, donde no ocurrió ningún otro incidente. Al terminar la clase el profesor Oavin llamó a Remus para hablar con él a solas, ya que Snape y sus compañeros aun no habían salido de la enfermería. El licántropo les dijo a los otros que no le esperasen y que se fuesen ya a Defensa Contra las Artes Oscuras, y se dirigió hacia el pupitre del profesor.
–Bien Lupin, ahora que estamos a solas espero que me expliques lo que ha pasado.
–Bueno, es que yo no lo sé y usted ya lo vio, me lanzaron el globo y lo cogí, simplemente fue eso.
–Vamos señor Lupin! No me diga que no lo sabe! Nadie puede tener tantos reflejos! –miró al chico que tenía enfrente y vio que se estaba quedando pálido –le pasa algo?
–No... ehmm... esto no me encuentro demasiado bien...
–Esta bien, siéntate, voy a por un vaso de agua –el alumno obedeció al profesor y se tomó el vaso de agua. –Sé que esconde algo y que Dumbledore esta enterado.
–Bueno, si ya lo sabe porque no se lo pregunta a él?
–Porque me gustaría que me lo dijeras tu... aunque si no quieres de todos modos lo averiguaré, y puede estar tranquilo sea lo que sea no se lo contare a nadie.
–Mmm... profesor? Lo siento pero ni siquiera soy capaz de contárselo a mis amigos –porque le había dicho eso? Porque estaba empezando a tener confianza en ese profesor?.
–Entiendo, cree que por ser el jefe de la casa Slytherin no puedes confiar en mi eh? –al ver que el chico se había quedado callado prosiguió –bien, le diré que aunque parezca lo contrario no tengo nada en contra de usted... y menos ahora que creo haber descubierto el motivo de sus ojeras.
–Remus se había quedado pálido, porque toda esa tontería si el ya lo sabia? Tan claro estaba? Debía llevar escrito licántropo en la frente.
–No me mire así Lupin! No pasa nada, he tardado un año en darme cuenta! No se preocupe no tengo nada en contra de los licántropos, al contrario estoy buscando una cura, o algo que haga las transformaciones más suaves.
–Porque me ha llamado si ya lo sabia?
–Porque quería que lo supiese, si necesita algo, ya sabe. Y ahora vaya a su clase.
Salió de las mazmorras y subió hacía clase de Defensa Contra las Artes Oscuras, cuando llegó la clase ya había empezado y corrió a sentarse junto a James, pero antes de que pudiese hacerlo la profesora lo detuvo.
–No hace falta que se siente Lupin, porque vamos a hacer una clase práctica, venga chicos levantaos, vamos a la aula de Historia de la Magia, que es mas espaciosa.
De camino a la aula de Historia los chicos le contaron a Sírius lo sucedido.
–Increíble Remus! Y como lo hiciste? –preguntó el moreno entusiasmado.
–No lo sé, simplemente lo hice... y bueno mejor hablamos luego que ya hemos llegado –contestó el licántropo aliviado de no tener que contestar.
–Bueno, durante este curso haremos más clases prácticas que teóricas, ya que tenemos que poner en práctica lo que estudiamos el curso anterior de acuerdo? –empezó la clase la profesora Grant –hoy estudiaremos los Boggarts, alguien recuerda que son? –miró a la clase que se había puesto alrededor de ella –si señorita Evans?
–Los Boggarts son unas criaturas que viven en espacios oscuros y cerrados, pero cuando ven a alguien se transforman en el peor miedo de este.
–Fantástico 5 puntos para Gryffindor –la sra Grant se giró y enseñó un armario que había al fondo de la clase –bien, pues ahí dentro se esconde un Boggart y hoy todos os enfrentareis a él. Como se repele un Boggart? Señor Lupin?
–Haciendo el hechizo Ridículo e imaginadote una situación divertida con tu mayor miedo.
–Exactamente Lupin, 5 puntos más para Gryffindor. Ahora quiero que todos penséis en vuestro mayor miedo y pensad una manera de repelerlo.
Toda la clase se quedó en silencio y murmurando cosas para si mismo, se oía alguna risita seguramente provocada por imaginarse su hechizo repeledor.
–Bien y ahora poneos en orden, así una fila.
Remus no sabia que hacer y se colocó al final de la fila detrás de Sírius, iba viendo como sus compañeros se enfrenaban al Boggart y como se reían todos, que tenía que hacer él? Su gran miedo era la luna y si en ese momento aparecía una luna en la clase alguien se daría cuenta, y encima como hacer que una luna pareciera graciosa?. Siguió mirando a sus compañeros, un chico llamado Terrins, transformó un dragón en una lagartija que escupía humo. La fila iba avanzando y el aun no sabía que tenia que hacer.
Le llegó el turno a James y el Boggart se transformo en un gran caballero negro montado en un gran caballo negro, se parecía a los nazgul del señor de los anillos pensó Remus, James hizo que el jinete estuviera montado en un pony rosa y vestido con un vestido de señora de esos de época. Después de James salió Sírius y el boggart se transformo en una mano que sujetaba un gran cuchillo ensangrentado, parecía que Sírius no reaccionaría pero al final transformó el cuchillo en uno de plástico de juguete.
–Crees que me harás miedo con eso? Venga Remus te toca.
Remus se quedó frente el cuchillo de juguete que de pronto desapareció, todo el mundo se quedó boquiabierto al ver que el Boggart había desaparecido, pero si era así porque esta Lupin tan rígido y pálido?. Después vieron que encima de la cabeza de su compañero había una esfera plateada.
–Rii, rid... ehh.. –tartamudeaba el licántropo, estaba sudando a mares.
–Vamos Lupin que usted puede! –pero Remus no contestó, parecía a punto de desmayarse.
–Riiddiikulo... –susurró el chico, estaba apunto de caerse pero antes de hacerlo gritó –RIDIKULO!
Esta vez si lo había conseguido y la esfera plateada desapareció con un PUFFF! , y después vieron como Remus caía al suelo. La profesora corrió hacia el y lo levantó.
–Venga, la clase ha terminado, fuera!
En la enfermería un chico abrió los ojos lentamente y observó su alrededor. Donde estoy? Se incorporó y vio que estaba en la enfermería.
–A ya esta despierto el señor Lupin! –dijo Madame Promfey y después dio ordenes a un elfo domestico que desapareció pocos segundos después por la puerta. –bueno he mandado llamar a la profesora Grant, está muy preocupada.
–Que, que a pasado? –preguntó Remus confuso.
–Te has desmayado en clase hijo, según me han contado después de enfrentarte a un boggart.
–NO! Ahora todos sabrán lo que soy! Y encima me desmayo!
–Tranquilízate, todos piensan que tienes miedo a bolas de cristal o algo parecido...
En ese momento entró la profesora Grant con cara de preocupación y se acercó al chico.
–Cómo se encuentra? Vaya susto nos ha dado a todos! –luego miró a la enfermera y le susurrando –puede dejarnos solos por favor? –Madame Promfey aunque a regañadientes obedeció. –Bueno ahora que estamos solos podremos hablar con tranquilidad no?
Remus asintió nervioso.
–He hablado con el profesor Dumbledore y me ha contado que usted es licántropo –al ver que el chico había pegado un bote sobre la cama añadió –tranquilo no tengo nada en contra suyo, ya sabía que uno de los alumnos lo era, pero el director no me dijo cual, bueno es igual... he contado a todos los alumnos que le tenias miedo a las bolas de cristal de acuerdo?
–Pe... pero... no he conseguido vencer al boggart? –preguntó el licántropo, la profesora se echó a reír –tan mal lo he hecho?
–No, tranquilo, eres de los mejores alumnos que tengo, solo que a lo mejor necesitas practicar un poco con los boggart, quizá si les pides ayuda a tus amigos... –la profesora calló al ver la cara de susto que hacia su alumno –vaya... no lo saben?
–James, para quieto que me mareas... –estaba diciendo Peter en la habitación
–Es que no puedo parar! Esto es el colmo! Cuando llegue lo va a confesar todo cueste lo que cueste –decía James.
–No te pases James... yo tampoco sé si lo hubiese dicho estando en su lugar... –dijo Sírius
–El que? El que? –preguntó Peter desorientado.
Joder Peter! No te enteras nada! –dijo Sírius después de mirar a su amigo James. –pues ahora te esperas a oírlo por boca de Remus.
Vale, hacemos como que no sabemos nada a ver si confiesa... –continuaba planificando James –y si no.. Nos podremos duros hasta que nos lo diga, somos amigos suyos no?
Los dos muchachos asintieron y en ese momento entró Remus, que aun estaba un poco pálido y se quedó mirando a sus amigos que lo estaban observando.
–Ey hola! Que tal? –al ver que ninguno contestaba continuó –bueno vais a decir algo?
–Sírius iba a decir algo pero James lo calló.
–Creo que el que tiene que decir algo eres tu –contestó James secamente.
–Yo? A os referís a lo del desmayo en clase? Pues es que no me encontraba muy bien, bueno no tienes entreno hoy? –cambió de tema.
–No me refería a eso Remus, quiero que nos expliques la verdad –insistió James, pero Remus se había quedado callado y no contestaba –somos tus amigos no? Pues dínoslo YA!
Remus dio un saltó por el grito de James. Y empezó a andar hacía la puerta.
–Mmm.. acabó de recordar que Lily me tenía que dar algo...
–Tu no te mueves de aquí –esta vez fue Sírius quien lo detuvo –venga Remus, no te pedimos tanto, por que no confías en nosotros?
El licántropo al ver que no tenia ninguna salida suspiró y se sentó en la cama.
–De acuerdo... desaparezco una vez al mes, porque... porque... soy un hombre lobo –miró a sus amigos, y el único que tenía cara de sorprendido era Peter –vaya ya lo sabíais no? Bueno ya que he empezado os contaré toda la historia... Vivo en las afueras de un pequeño pueblo, cerca del bosque, la gente del pueblo siempre contaba que en el bosque ocurrían cosas extrañas y por la noche se oían los aullidos de los lobos. Una noche decidí salir y ver con mis propios ojos a esos lobos. Por desgracia era luna llena y no había solo lobos, sino también licántropos y bueno ya os podéis imaginar lo que pasó no? Desde entonces en las noches de luna llena mis padres me encerraban en una jaula, para que no pudiera hacer daño a nadie durante mis transformaciones, pensaron que no podría ir al colegio, pero entonces Dumbledore fue nombrado director y les explicó a mis padres que si podía ir al colegio si tomábamos las medidas necesarias. Y por eso plantaron el sauce boxeador, hay un nudo en el tronco que detiene las ramas durante unos minutos, y debajo hay un túnel que conduce a Hogsmeade. Y todos los del pueblo piensan que en esa casa viven fantasmas locos o algo así... Y bueno lo demás ya lo conocéis, me da miedo a la luna llena, por eso lo del boggart, tengo buenos reflejos y todo eso...
Todos se quedaron en silencio durante unos minutos pero al final James decidió romper el hielo.
–Por qué no nos lo dijiste antes?
–Es obvio no? No quería perder a mis únicos amigos –dijo Remus entristecido –entenderé que ya no lo queráis ser.
En ese momento Sírius se lanzó encima de Remus.
–Pues claro que queremos ser amigos tuyos! No seas tonto!
Después James y Peter se lanzaron también encima de su amigo y estalló una batalla de almohadas que decidieron terminar a la hora de cenar.
Esa noche Remus se fue a dormir feliz y sin preocupaciones. Y pensar que había estado temiendo ese momento durante casi dos años y al final ellos continuaban a su lado. Ese día había sido bastante extraño, primero el profesor de pociones que lo averiguó y le dio su apoyo, después en defensa contra las artes oscuras habían podido ocultar lo del boggart en forma de luna y la profesora quería ayudarlo también, y finalmente lo mejor, continuaba teniendo amigos! Tenía que contárselo a Lily también, ya que ella había insistido mucho en ello y que aunque al final se lo hubiera contado obligado no importaba.
Bueno, pues aki esta el capitulo 7 xD, dejad reviews;) ya cnt estos:
Zoe: asies x llegirte'l y no soc un bixo!!!!
D Potter-Black-Lupin: muxas asias, ya ta actualixado siento tardar xo tngo insti xD, y si k s van a enamorar lily y James cmo no!! xo a ver... asta 7o creo k no... 6o puede... nuse ya veremos.. y Remus tb es mi amorrr!! xD
