Esencias
Capítulo III: Sombras.
"La luz solo puede nacer entre las sombras..."
¿Era la enésima vez o solamente la tercera?
Ranma miraba a través del pequeño hueco que había entre el marco y la puerta. La luz caía suavemente sobre el cuerpo de la joven, que dormía placidamente. Volvió a entrecerrar la puerta. Apoyo la espalda sobre la pared y suspiró. Lentamente se deslizó hasta quedar sentado en el suelo. Con la mano volvió a abrir la puerta. Agudizo el oído, escuchando la tranquila respiración de su prometida.
Estaba intranquilo, con sensaciones amargas en su pecho. Se esforzaba por estar atento, aunque su cuerpo le pedía descansar. Se enojó consigo mismo y se dio algunos golpes en la cara.
En el piso inferior se oían ruidos de discusiones. El señor Tendo había despertado y logrado salir de la habitación. Discutía con su madre y ella no lo tomaba en cuenta.
Realmente, la actitud de su mamá lo tenía sin cuidado.
Ranma solo se había preocupado de llevar a Akane a su habitación y no separarse de su lado. Lo preocupaba que aquella luz volviera y la menor de los Tendo volviera a desaparecer.
Sus ojos le pesaban tanto....
Los rápidos pasos que subían por la escalera lo despertaron. Soun corría rápidamente y tras él, Nadoka.
-¡Detente!- gritaba mientras lo agarraba de la ropa.
El hombre no hacia caso. Avanzaba dando manotazos y contra toda fuerza.
-¡Debo verla!
El chico se levantó de un salto.
-¿Qué pasa?
-Ranma, sal de mi camino, debo ver a esa mujer, debo saber si es ella...
-Tú no tienes derecho a nada, ni siquiera cumpliste con el deber que se te había otorgado.
Tendo no la escuchaba, trató de hacer a Ranma a un lado de la puerta, pero este no se movió ni un solo centímetro.
- Ranma, comprendo...
El muchacho se relajó. Soun retrocedió unos pasos y se dió la vuelta hacia la pared. El aura de Tendo creció y una cabeza gigante con una gran lengua hizo aparición sobre el muchacho.
-!!DE-JA-ME-EN-TRAR!!
Ranma sintió como un sudor frío recorría su espalda.
-Souuuun...
El brillo de la katana los detuvo a ambos. La amenazadora cara volvió a ser la de un suplicante y lloroso padre. Ambos comenzaron a pelear nuevamente, mientras Ranma suspiraba cansado. Miró a través de la puerta y se sobresaltó.
Akane no estaba en su cama. Caminaba tranquilamente sobre el pequeño tejado que había bajo su ventana. Ranma ahogo un grito. No tardo ni un segundo en correr, pero apenas había llegado a la ventana cuando Akane cayó. Ranma llegó a la orilla dispuesto a saltar, pero el repentino encuentro con algo que despegaba del suelo lo sorprendió tanto que cayo de espaldas sobre las tibias tejas.
Akane volaba sobre su cabeza tal como si fuera un pajarito recién salido de su nido. Ganaba y perdía altura intermitentemente, extendiendo y doblando sus alas con gran dificultad. Nadoka posó su mano sobre el hombro de Ranma. Él la miró y apuntó a Akane tal como si hubiera sido un niño señalando su globo perdido.
-Ella puede volar...
-Desde siempre hijo, ella solamente estaba esperando que todas sus aptitudes se juntaran.
-Pero... ¿Qué pasó con las demás?
-Esta dentro de ella hijo, no te preocupes, tú debías de todas maneras casarte con una de Tendo...
Ranma miró a su madre como si no entendiera. Lentamente el recuerdo lejano del compromiso de honor entre familias vino a su mente... ¿Por qué aquello había pasado solamente a ser un recuerdo? Aquel peso con que siempre había pensado en la palabra compromiso volvía lentamente notarse sobre sus hombros, pero con aun más fuerza. ¿Cómo es que su madre podía pensar en este momento en eso? ¿De qué estaba hablando?
-Ranma, debo anunciarte que el compromiso entre familias tiene muchas más trascendencia que uno de honor, además de hacer un compromiso prometimos que tu protegerías a tu esposa... con tu propia vida...
Al muchacho le costaba demasiado reflexionar, ¿Pero no era eso lo que había hecho desde que puso un pie en esa casa, sin que nadie se lo pidiera? Claro... aún cuando muchas veces su "prometida" se hubiera negado...
-La idea inicial siempre fue que te casarás antes de que todo esto sucediera Ranma, pero el estúpido de tu padre te comprometió en muchas ocasiones, provocando todos estos pleitos entre tu prometida y tu...
-¿Pero se da cuenta de lo que esta diciendo?- estalló el chico dolido- ¡Han planeado toda mi vida sin que haya ninguna consideración por lo que yo pienso!
Quizás si lo hubiera sabido antes, no tendría esa sensación de estar siendo utilizado. Pero ahora... "Tú la protegías porque la querías" le dijo su voz interior, "no necesitas que nadie te lo digiera...". Ranma sintió como su corazón palpitaba con fuerza. La sangre golpeaba sus sienes.
-Ranma...- murmuró Nadoka mientras trataba de tocarlo.
El muchacho la esquivó. Saltó al suelo y traspasó el patio y el muro, alejándose rápidamente por la calle...
"Ranma..."
Abrió los ojos con dificultad. Sus ojos no le respondían como siempre. Veía manchas de colores y sentía mucho dolor.
"¡Ranma, despierta por favor!"
Alguien sollozaba a su lado y mientras él se sentía derrotado. Sabía que estaba muriendo, pero lo que más lamentaba, era que no podría verla por última vez...
Abro los ojos y me mantengo quieto. "Un sueño", pienso sin recordar nada concreto, "un amargo sueño". Lentamente vuelvo a cerrar los ojos con afán de no espantar aún el sueño, pero algo en el ambiente llega a molestarme. "Silencio, demasiado silencio". Lentamente me doy vuelta y me incorporo sobre el banco de la plaza. "Me he quedado dormido...". Lentamente comienzo a caminar hacia casa. No hay nadie en las calles y los faroles estaban apagados y al pasar bajo ellos el suelo cruje por los vidrios esparramados. "Que gente tan ociosa." me digo mientras que voy caminando me dio cuanta de que calles enteras estaban completamente oscuras, siendo rociadas con la suave luz de la luna. Cuando llegue a las calle de los Tendo, salté la misma pandereta por la que había salido y aterrice cerca de la fuente. Antes de entrar a la casa, sentí como un par de presencias pasaban por mi espalda. Giré y me puse en guardia.
-¿Quién es?
Unos murmullos rompieron el silencio y pequeñas risitas llegaron claramente a mis oídos. El viento sopló con fuerza huracanada, mientras las nubes cubrían la luna y las estrellas. La oscuridad fue de pronto absoluta. "No veo nada" pensé mientras recordaba aquellos faroles destruidos. El viento volvió a soplar con fuerza, mientras sentía como los pelos de mi piel se ponían en punta...
-¡Salgan!- ordené con un grito- ¡Salgan de donde estén!
-¡Uy!, ¡Que mal genio!
-¿Acaso es él quién la protegerá?
-Me lo imaginaba más alto...
-¿Alguien sabe donde queda el baño?
Miré de donde venía cada una de las voces, pero sentía que se movían con rapidez cerca de mí.
-¿Acaso eres tú Ranma Saotome?
-Si, soy yo. ¿Quiénes son ustedes y qué desean?
Las risas volvieron a provocarse, cada vez más fuertes.
-No es el momento de responder, no hay tiempo para preguntas absurdas, solo dinos, ¿está aquí la protectora?
Ranma no comprendió la pregunta, pero lo primero que se le vino a la mente es que buscaban a Akane.
-Yo... no se quién es...-balbucee con el tono menos convincente, delatándome.
-¡Miente!
-¡No nos quiere decir lo que sabe!
-Ranma Saotome, tú te la has buscado...
De un momento a otro, miles de puntos luminosos nacieron de la oscuridad. Las nubes volvieron a dejar ver a la luna, pude notar varias figuras negras que me rodeaban, que me observaban desde diferentes puntos del patio. "Diablos", pensé, sin atreverme a maldecir en algo. Sin que nadie diera una señal, varias de aquellas sombras cayeron sobre mí. Trataba de luchar contra ellas, pero se movían demasiado rápido y mi instinto no alcanzaba a percibirlas. En unos minutos caí al suelo y perdí la conciencia entre escalofriantes risas
Comentarios: Jajajaja, que os ha parecido? Ha sido más agotador de lo que esperaba -.-. He estado haciendo miles de cosas y entre ellas gracias a dios salió este tercer capítulo con muchos problemas... pero finalmente llegó! ehhh... solo decirles que espero que el proximo capitulo este pronto y que habra muchas sorpresas muahahahahaha!!!
Agradecimientos: A todas los que se detuvieron un segundo y me dejaron un lindo review. Como siempre dire, eso es lo que más nos motiva a los aficionados a seguir implacablemente nuestras historias frente a todos los problemas que podamos tener (que sentimental me salió este comentario ¬¬, creo que me falta dormir -.-).
See ya!
