DISCLAIMER: Ninguno de estos personajes son mios. Todo pertenece a JK
Rowling, Warner Bros, etc, etc... NO gano dinero con esto
ADVERTENCIA: este fic contiene slash, si no te gusta no lo leas. Tambien hay escenas de violencia y violación (pero les voy a avisar cuando sucedan, para que el que no quiere no las lea).
RESPUESTAS A REVIEWS:
Glarawen: Gracias!!! Me alegra que te haya gustado el ff. La ultima parte (de Snape y Harry) me causó mucha gracia al escribirla. Porque no es muy sencillo imaginarse a Snape consolando a alguien, y encima, que esa persona se le ria en la cara!!!
Angel_gotico: Gracias por no dejar que me deprima por mis pocos reviews... Se que hay muchisimos ff´s y que uno recien empezado no atrae mucho. Sigo con la historia. Me tarde un poco en actualizar, porque empece la universidad y me están volviendo loca...
Ophelia Dakker: Así que Barby te mandó....si, me dijo que le había pasado la dire a una amiga del foro. Me alegra que te esté gustando este ff y que te haya gustado el de la venganza. Tengo varios ff´s, pero todod están en procesos de mejoras...no me gusta como están. En fin, ya veré que hago con ellos. Gracias por leer!!!
Agusstina Malfoy: Me alegra que te guste el ff. Menos de ron y Hermione? Ok. La verdad es que son demasiado importantes en la historia, pero también tenía que poner algo de ellos.
Luadica: Otra mas a la que le gustó la burla de Harry. Es cierto, es gracioso, pero muuuy necesario para que Harry cumpla con su cometido de emparejar a Remus y Severus...
MUCHAS GRACIAS A TODOS!! PERDON POR TARDAR EN ACTUALIZAR, ES QUE EMPECE LA FACULTAD Y LOS PROFESORES PARECEN TENER INTENCIONES DE QUEMARME LAS NEURONAS!!!
CAPITULO 5: UHF
Cómo es posible que me haya comportado de ese modo? Lo traté como si fuera una escoria! Cuando lo único que necesita es que le profesen amor, ese que le fue negado al morir Lily y James, cuando yo fui enviado injustamente a Azkaban, cuando los Dursley lo aceptaron....Me perdonará algún día?
-Sirius! Qué haces?
-Hola Moony. –respondió el animago con una sonrisa demasiado forzada.
-Qué pasó Padfoot? Pasó algo con Harry?
-Algo así. Me comporté como un idiota. –Sirius le relató a su amigo la discusión que acababa de finalizar en el despacho de Snape, mientras el otro lo escuchaba seriamente.
-Estabas celoso. –dijo el licántropo triunfante.
-Ce...celoso? de Snape?? Jamás! No! No entendiste nada!
-Padfoot, lo mejor será que lo admitas. Estabas celoso porque Harry prefería estar en compañía de tu enemigo escolar, en vez de contigo.
-No lo sé. –dijo el animago negando con la cabeza –Pero me dijo que él era un Slytherin y...
-Eso ya lo sabíamos. Él tiene una parte Slytherin, pero no lo es porque fue su elección la que lo marcó como un Gryffindor. Además...no tiene nada de malo ser una serpiente. Es sólo una Casa, como ser un Hufflepuff o un Ravenclaw.
-Moony...
-Qué?
-No habrá regresado esa "atracción" por cierto Slytherin con el pelo negro y grasoso y nariz ganchuda, no?
-No se de que hablas. –dijo Remus alejandose de su amigo.
***
El almuerzo había comenzado en el Gran Salón, todos los alumnos de todas las casas estaban congregados en sus mesas, disfrutando de las delicias que, como siempre, preparaban los elfos domésticos. Las conversaciones, el sonido de los cubiertos al tocar los platos, el de las copas al ser depositadas en las mesas después de beber, todo cesó cuando se abrió la puerta principal del lugar y dos sujetos ingresaron por ella.
Harry Potter, el cabecilla de Gryffindor, caminaba junto al Profesor Snape, el Jefe de Casa de Slytherin. Era una visión única, todos conocían su enemistad, desde el primer día en que el menor puso un pie en el colegio. Ninguno de los dos habló, pero se notaba que algo había cambiado en ellos. Tal vez era tiempo de dejar las viejas rivalidades de lado y comprotarse como lo que eran, dos personas adultas (por lo menos Snape), que lucharon codo a codo en la batalla final.
Harry se sentó, rodeado de silencio y miradas dignas de atravesarlo. En cuanto el murmullo volvió al Salón, el chico fue interrogado por sus compañeros de casa, sobre la escena anteriormente visualizada. Pero Harry no tenía ganas de dar explicaciones. Mas allá de estar en paz consigo mismo por haber logrado mantener una conversación sin insultos con Snape, aún se sentía desgraciado por la actitud de su padrino.
Lizeth Avery no le quietaba sus ojos de encima. Desde la otra punta de la mesa, lo miraba, gozando de saber que por su mentira, el chico había sufrido un castigo. Pronto sus ojos azules, chocaron con otro par verdes. Por unos momentos, las esmeraldas se sumergieron en las lagunas azules, pero ambos salieron de su ensoñación cuando Lizeth alzó una ceja y sonrió lateral y despectivamente.
Eso ya era demasiado, la maldita se le estaba riendo en su propia cara, por haberlo mandado a un castigo, que si bien no había tenido que cumplir, podría haber sido realmente horrible. Él no la había golpeado ni nada parecido. Si ni siquiera hablaba con ella. La chica se puso de pie y, al pasar por el lugar de Harry, éste le tomó el brazo, haciendo que por un momento, a los profesores se les detenga la respiración.
-Vas a pagarme esta. –dijo Harry –Sabes que yo no lo hice.
-Pruébalo, Potter.
***
Minnerva McGonagall hacía papelerío en su escritorio, pensando en su amigo Albus Dumbledore, aquel que había entrenado a Harry Potter en persona, para que pudiese aprovechar al máximo sus poderes y eliminar a Voldemort. Aquél que siempre tenía la solución para todos los problemas de la escuela, aquél que tenía un gran corazón, siempre dispuesto a colaborar y ayudar en las causas nobles.
Los domingos, definitivamente eran sus días de letargo. Por mas papeles, planificaciones o investigaciones que hiciera, siempre se perdía en sus pensamientos. Los sucesos del año anterior eran demasiado dolorosos e impresionantes como para olvidarlos facilmente. Demasiadas muertes, emasiado dolor, mezclado con la sensación de felicidad y seguridad por haber terminado con Voldemort, el mago tenebroso mas poderoso de los últimos tiempos.
-Minnerva....soñando despierta?
-Albus! –exclamó poniendose de pie –Estaba pensando en usted.
-Me alegra que aún me recuerden por aquí. –dijo el anciano con una sonrisa, mientras saludaba con la mano a los antiguos directores, alojados en recuadros.
-Qué te trae por Hogwarts? -preguntó McGonagall invitándolo a sentarse –Siemrpe eres bienvenido, pero puedo ver que no es una visita cordial.
-Siempre tan aguda, mi querida amiga. Es cierto, hay...hay una nueva fuerza que creo merece nuestra atención.
-No va a volver, verdad? Quiero decir...está muerto definitivamente, cierto?
-Voldemort no regresará, Minnerva. No es él quien me preocupa. Pero hay rumores, magos oscuros que se están reuniendo nuevamente, reclutados por alguien más.
-Alguna idea? Crees que algún alumno lo sabe?
-No lo sé. Pero no me gusta nada. Sé que el nuevo "Lord Oscuro" todavía no es tan poderoso como lo fue Voldemort, pero puede serlo en el futuro.
-Esto es grave. Tal vez Severus sepa algo.
La Directora del colegio se acercó a la chimenea y convocó al Profesor de Pociones, el ex mortífago que arriesgó su propia vida en innuerables ocasiones para aportar a la causa de "La Luz". Ahora era un miemro de la Orden de Merlín, al igual que Harry Potter, ambos Primera Clase, y Sirius Black, que gozaba de la Segunda Clase.
-Dumbledore. Cómo ha estado?
-Muy bien Severus. Descansando principalmente, pero me temo que no va a ser posible por mucho tiempo mas. Tengo noticias bastante desalentadoras.
-Noticias?
-Rumores en realidad, pero no por eso pienso desconocerlos. Un nuevo Dark Lord quiere tomar el lugar de Voldemort, y no estoy dispuesto a permitirlo.
-Está seguro? –preguntó el profesor, ya cansado de las inútiles guerras. –Tal vez sean...sólo rumores, como usted dijo.
-Es probable, pero confío en mis informantes Severus. Dime...has notado algún comportamiento extraño en alguno de los alumnos de tu casa?
-No. Todos siguen exactamente igual que siempre. Con diferencia del joven Malfoy, que se ha comprometido, pero no creo que esa sea una noticia relevante.
-Bueno, entonces no hay nada por aquí. Estén atentos, si perciben algo, por favor haganmelo saber. Cuanto antes eliminemos esto, menos fuerte será el Lado Oscuro.
***
El apacible fin de semana llegó a su fin, y todos los alumnos dejaban las mazmorras luego de su clase de Pociones. Slytherins y Gryffindors, odio consumado, rivalidad eterna, salvo por dos personas. Lizeth Avery y Draco Malfoy, caminando por los pasillos, con la cabeza alzada y el andar sólo característico de la arrogancia de ambas familias.
-Vas a decirme que fue lo que hablaste con Potter en el aluerzo el sabado?
-No tiene importancia Draco. Ya te dije, hice que lo castiguen y vino a decirme que él no había hecho nada.
-Pero TU LE HABLASTE! Cuando te prohibí que lo hicieras. –dijo Draco acercándose peligrosamente a su prometida.
-Si "Pruébalo Potter" te parece una conversación, entonces tienes serios problemas de comunicación Draco. –respondió Lizeth dando un paso atrás –No me interesa el inmundo "Niño que vivió", no entiendo cuál es tu preocupación.
-NO quiero que te acerques a él. –amenazó Draco apretándole el brazo izquierdo con fuerza –Entendiste?
-Draco...por favor...no me lastimes...Snape....vio los moretones.
-QUE!?!?!?!?!
-Me llamó para hablar con él...una poción mal hecha, o algo así –mintió Lizeth –pero cuando vio un moretón en mi cuello me llevó a la enfermería. ME QUEBRASTE UNA COSTILLA ANIMAL! –le gritó Lizeth, ganándose una bofetada.
-No vuelvas a hablarme de ese modo. –siseó Draco –Mas vale que no sospechen que yo fui el que te causó eso, o te vas a arrepentir, me escuchaste?
-Si Draco. No te preocupes. Dije que Potter me empujó por las escaleras por negarme a una cita con él. Por eso lo castigaron.
-Bien. Vete. No quiero verte hasta mañana, así que ni siquiera aparezcas por el Gran Salón.
-Si Draco –dijo Lizeth bajando la cabeza.
***
Su castigo, su salvación, sus instantes de paz junto al mas grande rival de su padre y su padrino. James también habría reaccionado así? Volviendose loco sólo porque le gustaba pasar tiempo en las mazmorras, en compañía de Snape? Tal vez sí, tal vez no, pero no iba a saberlo nunca, porque no tenía posibilidades de hablar con su padre hasta el día en que muriera.
La muerte....qué era lo que sucedía cuando abandonabas este mundo terrenal? Sus padres estarían en algo similar al Paraíso? Ese Paraíso del que tanto hablaban los muggles? O todos estarían en un mismo sitio? Definitivamente, dudaba mucho que Voldemort y sus padres estuviesen juntos, como viejos amigos. Reencarnación? Tal vez estaban junto a él, en la forma de algún alumno menor, y no se había dado cuenta.
-Mamá...-suspiró Harry.
-Potter...estás bien? –preguntó Snape, levantando la vista de los aburridos pergaminos en los que estaba enfrascado.
-No. Si. No lo sé.
-No te preocupes, los Potter nunca tuvieron pensamientos coherentes, es...herencia familiar.
-Profesor...me preguntaba si...No. Olvídelo.
-Cada vez que te preguntas algo, rompes las reglas Potter. –le recordó Snape con una sonrisa de desprecio.
-Puedo hacerle una pregunta?
-Ya la hizo. Pero le concedo otra.
-Cómo lo hace? Cómo puede ocultar tan bien sus pensamientos o emociones?
-Práctica, Potter. Pero no entiendo para que quieres saber eso...
-Me sería muy útil. Yo...estoy cansado de que todo el mundo se de cuenta de todo, que lean a través de mis ojos. Ya no quiero...
-Se puede saber qué te pasa? –preguntó Snape incrédulo –Deberías ser...mm..no se.. feliz? Derrotaste al Dark Lord, tienes al pulguiento Black a tu lado, ninguno de tus mejores amigos falleció...
-Si, si, ya se... "Y soy el Gran Héroe" al que todos idolatran, con el que la mitad del mundo mágico quiere casarse y tener hijos, etc, etc, etc. Estoy harto de eso. Qué no puedo ser.. "Harry"?
-No reniegues quien eres Harry –dijo una voz desde la puerta –Puedo pasar Severus?
-Ya entraste, Lupin. –dijo Snape con indiferencia y se volcó nuevamente a sus pergaminos.
Con un suspiro de desilusión, Remus Lucpin se acercó a Harry, que estaba sentado en un amplio sillón verde, en el despacho de Snape. Se sentó a su lado, intentando entender qué era lo que le sucedía a Harry, ese pequeño que era como un hijo para él, al que quería mas que a su propia vida.
-Qué pasa Harry? Es Sirius?
-Sirius? -preguntó Harry con una ceja levantada –No conozco a nadie con ese nombre.
Remus se sorprendió. Harry nunca se había comportado así, por mas peleas que tuvieran, Sirius y él siempre se amigaban y volvían a ser padre e hijo, hermano mayor y menor, amigos, confidentes. Pero ahora, el ojiverde no dejaba ver nada por sus ojos, no había odio, resentimiento, culpa, nada...simplemente dos orbes verdes que brillaban con intensidad, pero como si no pudieran expresar lo que le sucedía a Harry.
Snape también notó el cambio. La voz de Potter al pronunciar el nombre de su padrino había sido demasiado neutral. Como si estuviese hablando de...una planta. Sonrió ante ese pensamiento. Potter estaba intentando mostrarse frío y...lo estaba logrando. Al parecer había hecho algunas prácticas, y estaba probando sus resultados en ese momento.
-Harry...no seas así. Sabes que Padfoot te quiere. Sólo estaba celoso..nada mas.
-Eso no justifica lo que el perro rabioso me dijo Remus –siguió Harry en la misma postura –Si bienes a hablar de él, bien puedes marcharte.
-Muy Slytherin de tu parte, Harry –respondió Remus con una sonrisa –Pero te olvidas que soy un licántropo y puedo "oler" las emociones.
-Mierda! –murmuró Harry –Bueno, no importa. Qué haces aquí?
-Venía a preguntarte si sabes dónde puedo encontrar a Avery. No almorzó ni fue a clases en todo el día.
-Ja! Y por qué tendría que saberlo yo? Pregúntale a "Draco-hurón-saltarín- Malfoy".
-Como si me fuera a responder...
-Avery no fue a clases y no bajará a cenar porque Draco le dijo que no quería verla en todo el día –rspondió Snape –Los escuché al terminar la clase de Pociones.
-Oh. Bueno, gracias Severus.
-Perdón? –preguntó Harry sorprendido –Malfoy le dice cuándo puede almorzar o cuando no?
-Supongo que será un castigo por haberte hablado el sábado. –dijo Snape, como si fuera lo mas natural del mundo.
-Pero...cómo puede dejar que la trate de ese modo? Quiero decir...no es la mujer mas agradable de la Tierra, pero..
-Pero Draco es un Malfoy, Potter –dijo Snape nuevamente –Avery es su... "posesión", puede hacer con ella lo que quiera. Si quiere tirarla de la Torre de Astronomía, puede hacerlo. Si quiere dejarla sin comer un mes, también.
-Si quiere golpearla? –preguntó Harry comprendiendo por primera vez algunas cosas.
-La golpea. –respondió Lupin.
-Y ustedes descubrieron los golpes y ella dijo que fui yo, verdad? –los dos hombres asintieron –Genial! Esperemos a que no la mate, porque sino iré a Azkaban.
-Ahora estás exagerando.
-Pero Remus...por qué no lo deja?
-Ufff –resolpló Snape –Voy a explicarte algo Potter. Lo mantienes en tu pequeño cerebro y no lo exteriorizas, entendido? –Harry asintió –Los compromisos o matrimonios arreglados son mediante un contrato, que firman los padres de las... "víctimas". No hay manera de romperlos, salvo que los padres lo decidan. En el contrato establecen obligaciones para ambas partes, como por ejemplo, cuanto tiempo después del enlace debe nacer el heredero, etc. Por lo general, los "novios", no tienen voz ni voto. Sólo siguen las instrucciones del contrato (sobre todo, las mujeres). Visto y considerando que Avery padre está muerto, para romper el compromiso es necesario que Lucius Malfoy deshaga el contrato, porque él tiene la tenencia de Lizeth. Ella es parte de la familia Malfoy desde que su padre murió. Es una especie de "objeto" con el que Draco puede hacer lo que se le de la gana.
-Y si se niega??
-Depende el contrato. Viniendo de dos seres tan desagradables, no me cabe la menor duda de que primero matarán a toda persona a la que Avery le tenga aprecio, y después la matan a ella.
-Pobre...
-Ves Potter? Sigue habiendo gente mas desgraciada que tu en el mundo.
-Severus! No puedes dejar de....-pero Remus se cortó al ver las expresiones de los dos acompañantes. Snape y Harry estaban mirándose fijamente, sin odio ni rencor, como evitando algo que pronto se convertiría en una...estruendosa carcajada. Definitivamente la compañía que se hacían sacaba lo mejor de cada uno.
Hola!!!! Les gustó??? Tardé mucho en actualizar, lo sé. Pero es que tuve algunos problemas...no sabía bien como hacerlo...en fin...ya está listo.
Dejenme sus reviews!!! Que son muy importantes!!! Se aceptan sugerencias, críticas, repudio a mi pobre calidad de escritura, etc.
HASTA EL PROXIMO CAPITULO!
ADVERTENCIA: este fic contiene slash, si no te gusta no lo leas. Tambien hay escenas de violencia y violación (pero les voy a avisar cuando sucedan, para que el que no quiere no las lea).
RESPUESTAS A REVIEWS:
Glarawen: Gracias!!! Me alegra que te haya gustado el ff. La ultima parte (de Snape y Harry) me causó mucha gracia al escribirla. Porque no es muy sencillo imaginarse a Snape consolando a alguien, y encima, que esa persona se le ria en la cara!!!
Angel_gotico: Gracias por no dejar que me deprima por mis pocos reviews... Se que hay muchisimos ff´s y que uno recien empezado no atrae mucho. Sigo con la historia. Me tarde un poco en actualizar, porque empece la universidad y me están volviendo loca...
Ophelia Dakker: Así que Barby te mandó....si, me dijo que le había pasado la dire a una amiga del foro. Me alegra que te esté gustando este ff y que te haya gustado el de la venganza. Tengo varios ff´s, pero todod están en procesos de mejoras...no me gusta como están. En fin, ya veré que hago con ellos. Gracias por leer!!!
Agusstina Malfoy: Me alegra que te guste el ff. Menos de ron y Hermione? Ok. La verdad es que son demasiado importantes en la historia, pero también tenía que poner algo de ellos.
Luadica: Otra mas a la que le gustó la burla de Harry. Es cierto, es gracioso, pero muuuy necesario para que Harry cumpla con su cometido de emparejar a Remus y Severus...
MUCHAS GRACIAS A TODOS!! PERDON POR TARDAR EN ACTUALIZAR, ES QUE EMPECE LA FACULTAD Y LOS PROFESORES PARECEN TENER INTENCIONES DE QUEMARME LAS NEURONAS!!!
CAPITULO 5: UHF
Cómo es posible que me haya comportado de ese modo? Lo traté como si fuera una escoria! Cuando lo único que necesita es que le profesen amor, ese que le fue negado al morir Lily y James, cuando yo fui enviado injustamente a Azkaban, cuando los Dursley lo aceptaron....Me perdonará algún día?
-Sirius! Qué haces?
-Hola Moony. –respondió el animago con una sonrisa demasiado forzada.
-Qué pasó Padfoot? Pasó algo con Harry?
-Algo así. Me comporté como un idiota. –Sirius le relató a su amigo la discusión que acababa de finalizar en el despacho de Snape, mientras el otro lo escuchaba seriamente.
-Estabas celoso. –dijo el licántropo triunfante.
-Ce...celoso? de Snape?? Jamás! No! No entendiste nada!
-Padfoot, lo mejor será que lo admitas. Estabas celoso porque Harry prefería estar en compañía de tu enemigo escolar, en vez de contigo.
-No lo sé. –dijo el animago negando con la cabeza –Pero me dijo que él era un Slytherin y...
-Eso ya lo sabíamos. Él tiene una parte Slytherin, pero no lo es porque fue su elección la que lo marcó como un Gryffindor. Además...no tiene nada de malo ser una serpiente. Es sólo una Casa, como ser un Hufflepuff o un Ravenclaw.
-Moony...
-Qué?
-No habrá regresado esa "atracción" por cierto Slytherin con el pelo negro y grasoso y nariz ganchuda, no?
-No se de que hablas. –dijo Remus alejandose de su amigo.
***
El almuerzo había comenzado en el Gran Salón, todos los alumnos de todas las casas estaban congregados en sus mesas, disfrutando de las delicias que, como siempre, preparaban los elfos domésticos. Las conversaciones, el sonido de los cubiertos al tocar los platos, el de las copas al ser depositadas en las mesas después de beber, todo cesó cuando se abrió la puerta principal del lugar y dos sujetos ingresaron por ella.
Harry Potter, el cabecilla de Gryffindor, caminaba junto al Profesor Snape, el Jefe de Casa de Slytherin. Era una visión única, todos conocían su enemistad, desde el primer día en que el menor puso un pie en el colegio. Ninguno de los dos habló, pero se notaba que algo había cambiado en ellos. Tal vez era tiempo de dejar las viejas rivalidades de lado y comprotarse como lo que eran, dos personas adultas (por lo menos Snape), que lucharon codo a codo en la batalla final.
Harry se sentó, rodeado de silencio y miradas dignas de atravesarlo. En cuanto el murmullo volvió al Salón, el chico fue interrogado por sus compañeros de casa, sobre la escena anteriormente visualizada. Pero Harry no tenía ganas de dar explicaciones. Mas allá de estar en paz consigo mismo por haber logrado mantener una conversación sin insultos con Snape, aún se sentía desgraciado por la actitud de su padrino.
Lizeth Avery no le quietaba sus ojos de encima. Desde la otra punta de la mesa, lo miraba, gozando de saber que por su mentira, el chico había sufrido un castigo. Pronto sus ojos azules, chocaron con otro par verdes. Por unos momentos, las esmeraldas se sumergieron en las lagunas azules, pero ambos salieron de su ensoñación cuando Lizeth alzó una ceja y sonrió lateral y despectivamente.
Eso ya era demasiado, la maldita se le estaba riendo en su propia cara, por haberlo mandado a un castigo, que si bien no había tenido que cumplir, podría haber sido realmente horrible. Él no la había golpeado ni nada parecido. Si ni siquiera hablaba con ella. La chica se puso de pie y, al pasar por el lugar de Harry, éste le tomó el brazo, haciendo que por un momento, a los profesores se les detenga la respiración.
-Vas a pagarme esta. –dijo Harry –Sabes que yo no lo hice.
-Pruébalo, Potter.
***
Minnerva McGonagall hacía papelerío en su escritorio, pensando en su amigo Albus Dumbledore, aquel que había entrenado a Harry Potter en persona, para que pudiese aprovechar al máximo sus poderes y eliminar a Voldemort. Aquél que siempre tenía la solución para todos los problemas de la escuela, aquél que tenía un gran corazón, siempre dispuesto a colaborar y ayudar en las causas nobles.
Los domingos, definitivamente eran sus días de letargo. Por mas papeles, planificaciones o investigaciones que hiciera, siempre se perdía en sus pensamientos. Los sucesos del año anterior eran demasiado dolorosos e impresionantes como para olvidarlos facilmente. Demasiadas muertes, emasiado dolor, mezclado con la sensación de felicidad y seguridad por haber terminado con Voldemort, el mago tenebroso mas poderoso de los últimos tiempos.
-Minnerva....soñando despierta?
-Albus! –exclamó poniendose de pie –Estaba pensando en usted.
-Me alegra que aún me recuerden por aquí. –dijo el anciano con una sonrisa, mientras saludaba con la mano a los antiguos directores, alojados en recuadros.
-Qué te trae por Hogwarts? -preguntó McGonagall invitándolo a sentarse –Siemrpe eres bienvenido, pero puedo ver que no es una visita cordial.
-Siempre tan aguda, mi querida amiga. Es cierto, hay...hay una nueva fuerza que creo merece nuestra atención.
-No va a volver, verdad? Quiero decir...está muerto definitivamente, cierto?
-Voldemort no regresará, Minnerva. No es él quien me preocupa. Pero hay rumores, magos oscuros que se están reuniendo nuevamente, reclutados por alguien más.
-Alguna idea? Crees que algún alumno lo sabe?
-No lo sé. Pero no me gusta nada. Sé que el nuevo "Lord Oscuro" todavía no es tan poderoso como lo fue Voldemort, pero puede serlo en el futuro.
-Esto es grave. Tal vez Severus sepa algo.
La Directora del colegio se acercó a la chimenea y convocó al Profesor de Pociones, el ex mortífago que arriesgó su propia vida en innuerables ocasiones para aportar a la causa de "La Luz". Ahora era un miemro de la Orden de Merlín, al igual que Harry Potter, ambos Primera Clase, y Sirius Black, que gozaba de la Segunda Clase.
-Dumbledore. Cómo ha estado?
-Muy bien Severus. Descansando principalmente, pero me temo que no va a ser posible por mucho tiempo mas. Tengo noticias bastante desalentadoras.
-Noticias?
-Rumores en realidad, pero no por eso pienso desconocerlos. Un nuevo Dark Lord quiere tomar el lugar de Voldemort, y no estoy dispuesto a permitirlo.
-Está seguro? –preguntó el profesor, ya cansado de las inútiles guerras. –Tal vez sean...sólo rumores, como usted dijo.
-Es probable, pero confío en mis informantes Severus. Dime...has notado algún comportamiento extraño en alguno de los alumnos de tu casa?
-No. Todos siguen exactamente igual que siempre. Con diferencia del joven Malfoy, que se ha comprometido, pero no creo que esa sea una noticia relevante.
-Bueno, entonces no hay nada por aquí. Estén atentos, si perciben algo, por favor haganmelo saber. Cuanto antes eliminemos esto, menos fuerte será el Lado Oscuro.
***
El apacible fin de semana llegó a su fin, y todos los alumnos dejaban las mazmorras luego de su clase de Pociones. Slytherins y Gryffindors, odio consumado, rivalidad eterna, salvo por dos personas. Lizeth Avery y Draco Malfoy, caminando por los pasillos, con la cabeza alzada y el andar sólo característico de la arrogancia de ambas familias.
-Vas a decirme que fue lo que hablaste con Potter en el aluerzo el sabado?
-No tiene importancia Draco. Ya te dije, hice que lo castiguen y vino a decirme que él no había hecho nada.
-Pero TU LE HABLASTE! Cuando te prohibí que lo hicieras. –dijo Draco acercándose peligrosamente a su prometida.
-Si "Pruébalo Potter" te parece una conversación, entonces tienes serios problemas de comunicación Draco. –respondió Lizeth dando un paso atrás –No me interesa el inmundo "Niño que vivió", no entiendo cuál es tu preocupación.
-NO quiero que te acerques a él. –amenazó Draco apretándole el brazo izquierdo con fuerza –Entendiste?
-Draco...por favor...no me lastimes...Snape....vio los moretones.
-QUE!?!?!?!?!
-Me llamó para hablar con él...una poción mal hecha, o algo así –mintió Lizeth –pero cuando vio un moretón en mi cuello me llevó a la enfermería. ME QUEBRASTE UNA COSTILLA ANIMAL! –le gritó Lizeth, ganándose una bofetada.
-No vuelvas a hablarme de ese modo. –siseó Draco –Mas vale que no sospechen que yo fui el que te causó eso, o te vas a arrepentir, me escuchaste?
-Si Draco. No te preocupes. Dije que Potter me empujó por las escaleras por negarme a una cita con él. Por eso lo castigaron.
-Bien. Vete. No quiero verte hasta mañana, así que ni siquiera aparezcas por el Gran Salón.
-Si Draco –dijo Lizeth bajando la cabeza.
***
Su castigo, su salvación, sus instantes de paz junto al mas grande rival de su padre y su padrino. James también habría reaccionado así? Volviendose loco sólo porque le gustaba pasar tiempo en las mazmorras, en compañía de Snape? Tal vez sí, tal vez no, pero no iba a saberlo nunca, porque no tenía posibilidades de hablar con su padre hasta el día en que muriera.
La muerte....qué era lo que sucedía cuando abandonabas este mundo terrenal? Sus padres estarían en algo similar al Paraíso? Ese Paraíso del que tanto hablaban los muggles? O todos estarían en un mismo sitio? Definitivamente, dudaba mucho que Voldemort y sus padres estuviesen juntos, como viejos amigos. Reencarnación? Tal vez estaban junto a él, en la forma de algún alumno menor, y no se había dado cuenta.
-Mamá...-suspiró Harry.
-Potter...estás bien? –preguntó Snape, levantando la vista de los aburridos pergaminos en los que estaba enfrascado.
-No. Si. No lo sé.
-No te preocupes, los Potter nunca tuvieron pensamientos coherentes, es...herencia familiar.
-Profesor...me preguntaba si...No. Olvídelo.
-Cada vez que te preguntas algo, rompes las reglas Potter. –le recordó Snape con una sonrisa de desprecio.
-Puedo hacerle una pregunta?
-Ya la hizo. Pero le concedo otra.
-Cómo lo hace? Cómo puede ocultar tan bien sus pensamientos o emociones?
-Práctica, Potter. Pero no entiendo para que quieres saber eso...
-Me sería muy útil. Yo...estoy cansado de que todo el mundo se de cuenta de todo, que lean a través de mis ojos. Ya no quiero...
-Se puede saber qué te pasa? –preguntó Snape incrédulo –Deberías ser...mm..no se.. feliz? Derrotaste al Dark Lord, tienes al pulguiento Black a tu lado, ninguno de tus mejores amigos falleció...
-Si, si, ya se... "Y soy el Gran Héroe" al que todos idolatran, con el que la mitad del mundo mágico quiere casarse y tener hijos, etc, etc, etc. Estoy harto de eso. Qué no puedo ser.. "Harry"?
-No reniegues quien eres Harry –dijo una voz desde la puerta –Puedo pasar Severus?
-Ya entraste, Lupin. –dijo Snape con indiferencia y se volcó nuevamente a sus pergaminos.
Con un suspiro de desilusión, Remus Lucpin se acercó a Harry, que estaba sentado en un amplio sillón verde, en el despacho de Snape. Se sentó a su lado, intentando entender qué era lo que le sucedía a Harry, ese pequeño que era como un hijo para él, al que quería mas que a su propia vida.
-Qué pasa Harry? Es Sirius?
-Sirius? -preguntó Harry con una ceja levantada –No conozco a nadie con ese nombre.
Remus se sorprendió. Harry nunca se había comportado así, por mas peleas que tuvieran, Sirius y él siempre se amigaban y volvían a ser padre e hijo, hermano mayor y menor, amigos, confidentes. Pero ahora, el ojiverde no dejaba ver nada por sus ojos, no había odio, resentimiento, culpa, nada...simplemente dos orbes verdes que brillaban con intensidad, pero como si no pudieran expresar lo que le sucedía a Harry.
Snape también notó el cambio. La voz de Potter al pronunciar el nombre de su padrino había sido demasiado neutral. Como si estuviese hablando de...una planta. Sonrió ante ese pensamiento. Potter estaba intentando mostrarse frío y...lo estaba logrando. Al parecer había hecho algunas prácticas, y estaba probando sus resultados en ese momento.
-Harry...no seas así. Sabes que Padfoot te quiere. Sólo estaba celoso..nada mas.
-Eso no justifica lo que el perro rabioso me dijo Remus –siguió Harry en la misma postura –Si bienes a hablar de él, bien puedes marcharte.
-Muy Slytherin de tu parte, Harry –respondió Remus con una sonrisa –Pero te olvidas que soy un licántropo y puedo "oler" las emociones.
-Mierda! –murmuró Harry –Bueno, no importa. Qué haces aquí?
-Venía a preguntarte si sabes dónde puedo encontrar a Avery. No almorzó ni fue a clases en todo el día.
-Ja! Y por qué tendría que saberlo yo? Pregúntale a "Draco-hurón-saltarín- Malfoy".
-Como si me fuera a responder...
-Avery no fue a clases y no bajará a cenar porque Draco le dijo que no quería verla en todo el día –rspondió Snape –Los escuché al terminar la clase de Pociones.
-Oh. Bueno, gracias Severus.
-Perdón? –preguntó Harry sorprendido –Malfoy le dice cuándo puede almorzar o cuando no?
-Supongo que será un castigo por haberte hablado el sábado. –dijo Snape, como si fuera lo mas natural del mundo.
-Pero...cómo puede dejar que la trate de ese modo? Quiero decir...no es la mujer mas agradable de la Tierra, pero..
-Pero Draco es un Malfoy, Potter –dijo Snape nuevamente –Avery es su... "posesión", puede hacer con ella lo que quiera. Si quiere tirarla de la Torre de Astronomía, puede hacerlo. Si quiere dejarla sin comer un mes, también.
-Si quiere golpearla? –preguntó Harry comprendiendo por primera vez algunas cosas.
-La golpea. –respondió Lupin.
-Y ustedes descubrieron los golpes y ella dijo que fui yo, verdad? –los dos hombres asintieron –Genial! Esperemos a que no la mate, porque sino iré a Azkaban.
-Ahora estás exagerando.
-Pero Remus...por qué no lo deja?
-Ufff –resolpló Snape –Voy a explicarte algo Potter. Lo mantienes en tu pequeño cerebro y no lo exteriorizas, entendido? –Harry asintió –Los compromisos o matrimonios arreglados son mediante un contrato, que firman los padres de las... "víctimas". No hay manera de romperlos, salvo que los padres lo decidan. En el contrato establecen obligaciones para ambas partes, como por ejemplo, cuanto tiempo después del enlace debe nacer el heredero, etc. Por lo general, los "novios", no tienen voz ni voto. Sólo siguen las instrucciones del contrato (sobre todo, las mujeres). Visto y considerando que Avery padre está muerto, para romper el compromiso es necesario que Lucius Malfoy deshaga el contrato, porque él tiene la tenencia de Lizeth. Ella es parte de la familia Malfoy desde que su padre murió. Es una especie de "objeto" con el que Draco puede hacer lo que se le de la gana.
-Y si se niega??
-Depende el contrato. Viniendo de dos seres tan desagradables, no me cabe la menor duda de que primero matarán a toda persona a la que Avery le tenga aprecio, y después la matan a ella.
-Pobre...
-Ves Potter? Sigue habiendo gente mas desgraciada que tu en el mundo.
-Severus! No puedes dejar de....-pero Remus se cortó al ver las expresiones de los dos acompañantes. Snape y Harry estaban mirándose fijamente, sin odio ni rencor, como evitando algo que pronto se convertiría en una...estruendosa carcajada. Definitivamente la compañía que se hacían sacaba lo mejor de cada uno.
Hola!!!! Les gustó??? Tardé mucho en actualizar, lo sé. Pero es que tuve algunos problemas...no sabía bien como hacerlo...en fin...ya está listo.
Dejenme sus reviews!!! Que son muy importantes!!! Se aceptan sugerencias, críticas, repudio a mi pobre calidad de escritura, etc.
HASTA EL PROXIMO CAPITULO!
