DISCLAIMER: Ninguno de estos personajes son mios. Todo pertenece a JK Rowling, Warner Bros, etc, etc... NO gano dinero con esto

ADVERTENCIAS: Este fic contiene slash, si no te gusta no lo leas. ¡¡¡Estás avisado/a!!! ¡¡¡No quiero problemas!!! Podrá tener escenas de violencia o sexo explícito, pero yo voy a avisar cuando suceda para que si no quieren no las lean.
Ademas va a haber un romance entre Lizeth y Sirius..o por lo menos algunos acercamientos. Así que a quien no le guste este tipo de ffs, también lo puede ir dejando.

¡¡NO QUIERO QUEJAS POR ALGO QUE YA ESPECIFIQUE EN LA ADVERTENCIA!! SI SEGUIS LEYENDO ES BAJO TU RESPONSABILIDAD.........

En fin, para todos los que sigan leyendo....¡GRACIAS!

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PAREJAS: Harry/Draco, Remus/Severus, Ron/Hermione, Lizeth/Sirius/Narcissa.

TIEMPO: After Voldemort. La guerra terminó y Harry está en septimo año.

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CAPITULO 13: RECONOCIENDO SENTIMIENTOS.

Remus abrió los ojos con pereza. No tenía ninguna clase de deseo de levantarse. Lo único que quería hacer era quedarse todo el día en la cama con Severus. Sonrió al recordar la noche anterior y giró, para encontrarse con el cuerpo de su amante.

Claro que no esperaba ver la cama vacía. Lupin frunció el ceño pensando en los motivos que podría haber tenido Severus para no despertarlo. Nunca lo dejaba dormir y se iba. Todo se le hacía bastante extraño.

Se levantó y entró en el cuarto de baño, dispuesto a tomar una rápida ducha y vestirse antes de desayunar. Tal vez Dumbledore había arribado, pero no tenía sentido que no lo despertaran. Cada vez estaba mas confundido.

Volvió a entrar en la habitación con tan sólo una toalla en su cadera y el cuerpo repleto de gotas de agua.

-¿Quieres que te seque? -preguntó una voz grave y sensual, haciendo que Remus casi salte del susto.

-¡Severus Snape! ¡No vuelvas a asustarme así!

-Actúas como una niñita -le susurró Severus en el oído, abrazándolo por la espalda.

-No tientes a tu suerte Severus -le gruñó Lupin, pero no hizo ningún intento por librarse de esos brazos que le acariciaban el torso.

-¿A dónde se supone que ibas?

-Al Gran Salón, a la habitación de Padfoot, no se.

-Voy a tener que castigarte por pensar en irte sin despedirte de mi.

-Creí que te habías ido. -dijo Lupin reprimiendo un suspiro cuando Severus le mordió suavemente el lóbulo de la oreja.

-Ah claro. Fui a avisarle a Potter y Draco que Avery estaba a salvo con el chucho.

-¿Y qué dijeron? -preguntó interesado Remus girándo para mirar a su pareja a los ojos, y le sorprendió verlo sonriendo malignamente.

-No mucho. De hecho, estaban durmiendo tan cómodos uno en brazos del otro que no los desperté.

-¿Tu crees que...? Digo... ellos...

-No. Completamente vestidos.

-Creo -dijo Remus comenzando a desabrochar los botones de la túnica negra de Severus -Que yo voy a tener que castigarte por abandonarme en la cama para ir a inmiscuírte en problemas ajenos.

-No creo que....

-Cállate.

Remus selló los labios de Severus con un beso lleno de lujuria y lo arrastró hacia la cama, donde tomó completamente el control, provocando a Severus, de tal manera, que tuvo que rogar por su liberación.

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Harry y Draco dormían plácidamente uno en brazos del otro, tal como Severus le había informado a Lupin. Pero, lo cierto, es que la noche anterior, había sido bastante diferente a lo que ellos mismos podrían haber planeado.

---Flash-back---

Después de que el rubio lo llevara hasta el lecho, Harry se acomodó dándole la espalda, intentando evitar cualquier contacto físico. No comprendía que demonios le sucedía con Malfoy, pero lo mejor era no averiguarlo.

NUNCA. Nunca se había sentido tan atraído hacia alguien. Sabía desde hace un tiempo que el Slytherin le gustaba, y hacía poco tiempo había llegado a la conclusión de que era mas que deseo físico. Pero esto exedía cualquier límite.

Todo el día pensaba en el sabor de los labios del rubio. Todo el día pensaba en lo bien que se sentiría acariciarlo y hacerle el amor hasta la saciedad. Pero esos pensamientos tenían que terminar, Malfoy iba a casarse con Lizeth y se iba a hacer cargo de su hijo.

Draco estaba en situación similar. Con el moreno en su cama, no podía dejar de recordar su sueño, ese sueño en el que tan bien se había sentido. Ese sueño que desató todo lo que estaba dentro suyo sin que él lo supiera.

Sintió la respiración de Potter tranquilizarse, indicando que se había dormido. Giró hacia él y se deleitó con la visión. El pelo revuelto sobre su almohada, la espalda apenas cubierta por uno de sus mejores pijamas, y las blancas sábanas haciendo un perfecto contraste.

-Potter -susurró. -Potter ¿estás despierto?

Cuando no obtuvo respuesta, meditó sobre lo que deseaba y lo que debía hacer. Tampoco era como si lo fuera a violar o algo por el estilo. Y tal vez esa fuera la única oportunidad que tuviese en su vida.

-Potter -volvió a susurrar para asegurarse.

Otra vez no hubo respuesta. Entonces el rubio se acercó a Harry y lo giró suavemente, haciendo que quedaran frente a frente. El moreno era hermoso; y verlo dormir casi le calmaba completamente el alma.

Con delicadeza, acarició el rostro de Potter. Comenzó por la cicatriz que lo había hecho famoso, delineándola con un dedo. Su mano descendió por su nariz, y acarició suavemente una mejilla.

Dudando, pero intentando disfrutar ese momento, acarició con cautela los labios del Gryffindor, que se abrieron inconscientemente ante el toque. Draco alejó su mano como si quemaran, pero la regresó cuando se percató de que Potter no se había despertado.

Entonces acercó su rostro al del moreno e hizo lo que mas deseaba en ese momento. Rozó sus labios contra los propios, en una caricia dulce y sin otras intenciones mas que guardar en su memoria el increíble sabor, mezcla de miel y menta.

Alentado por sus acciones, Draco rodeó el cuepo del moreno e hizo que apoye su cabeza en su pecho, mientras se disponía a dormir con una sonrisa en el rostro, sin darse cuenta de que Harry tenía la misma expresión.

---Fin Flash-back---

Después de que Snape saliera de la habitación, sin atreverse a despertarlos (por mas placer que le hubiera causado ver ambos rostros enrojecidos), ambos se removieron en sueños.

Aún medio dormidos, ninguno reparó en las piernas que se entrelazaban con las propias, en los brazos que los rodeaban, o en el aire tibio que rozaba sus rostros.

Draco apretó en sus brazos el cuerpo que dormía junto a él, acercándolo mas a su cuerpo. Las piernas enredadas provocaban una fricción placentera y dolorosa al mismo tiempo.

Harry metió sus brazos dentro del pijama de Draco, sin saber verdaderamente que estaba haciendo, y acarició con seguridad la piel que se le ofrecía.

Ambos despertaron completamente cuando sus labios se unieron en un movimiento instintivo. Sus ojos se abrieron de golpe, encontrándose frente a frente: gris y verde.

Harry tomó aire, se llenó de valor y, sin quitar sus ojos de los de Draco, volvió a besarlo. De mas está decir que el rubio estaba muy sorprendido por sus acciones, pero al sentir como la lengua de Harry le acariciaba la imperceptible línea donde se unían sus labios, no dudó y los abrió.

El beso se tornó completamente pasional y febril. Ninguno quería separarse y hacían grandes esfuerzos por aguantar la falta de aire en sus pulmones. Pero no podía sostenerse por demasiado tiempo mas, y Harry fue el primero en separarse, abandonando esa tentadora boca, para atacar el pálido cuello del Slytherin.

Los suaves gemidos y el temblor del cuerpo de Malfoy fueron demasiado para Harry que, a pesar que intentaba resistirse, no pudo evitarlo y empujó al otro de espaldas en la cama y se recostó sobre él, aún besándolo posesivamente.

-Potter -susurró Malfoy con voz grave, el deseo demasiado presente.

-Mmmm -respondió sin dejar de besar el ahora pecho descubierto de Draco.

-Potter, espera un momento -pidió Draco elevándo el rostro de Harry con sus manos, para poder verlo a los ojos. Era tan parecido a su sueño. -No, no podemos.

-Sólo esta vez. Te prometo que no te voy a quitar los pantalones. Sólo déjame...

La súplica de Harry fue cortada por los labios ansiosos y desesperados de Draco, que había decidido que si era la única vez, la iba a disfrutar.

Mientras se besaban frenéticamente, comenzaron a moverse el uno contra el otro, sensualmente, buscando aumentar su placer y liberarse completamente.

Draco abrazó la cintura de Harry con sus piernas cuando ambos comenzaron a convulsionarse y juntos alcanzaron el máximo punto de placer, con dos gemidos lastimeros.

-Potter yo...

-Sh... -le susurró Harry aún sobre él. -Gracias por este recuerdo. De verdad deseo que Lizeth y tu sean felices, por eso no volveré a hacer algo así amor.

Harry depositó un tierno beso en los labios de Draco, tomó su ropa, se cubrió con la capa de su padre y abandonó la habitación.

Decir que Draco estaba impactado con las acciones y palabras del moreno era poco. No había atinado a decir ni hacer nada cuando escuchó que Potter lo llamaba "amor".

Después de unos quince minutos de pensar en Harry y lo que no iba a suceder nunca, el sucio pantalón del pijama comenzó a molestarle y decidió darse una ducha.

-Te odio padre -murmuró al levantarse de la cama.

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Sirius se despertó desorientado. Estaba seguro que la noche anterior Lizeth había dormido en su cama. Había tenido que usar toda su fuerza de voluntad para no besarla, sólo la había abrazado hasta que se durrmió.

Pero ahora estaba solo y no había signos del rubio angel. Enojado consigo mismo, por haber pensado que Lizeth estaba verdaderamente interesada en él, se levantó de la cama, entró al baño y se dio una refrescante ducha.

Después de vestirse con una fina túnica azul, peinar su negro cabello y mirar de reojo por última vez el reloj muggle que descansaba sobre su mesa de luz, salió de su habitación para desayunar en el Gran Salón.

-Al fin se despierta, profesor. -dijo una voz mas que conocida desde el sillón de su sala de estar.

-¿Lizeth?

-Yo... quería agradecerle por dejarme dormir aquí anoche -dijo la rubia señalando la mesa ratona que descansaba entre los sillones, donde había un delicioso desayuno listo para ser injerido.

-Gracias, pero no era necesario.

-Lo siento, no quería incomodarlo. -dijo Lizeth dirigiéndose a la puerta.

-¡No! -Sirius se apresuó a tomarla de un brazo antes de que lograra salir -No quise decir eso. De verdad te agradezco, pero deberías pensar en ti.

-No hay mucho que pensar. Sólo tengo que hablar con Draco y decirle que no pienso dejar que se haga cargo de un hijo de no es suyo.

-Tal vez... tal vez deberías reconsiderarlo -dijo Sirius sentándose en uno sofá. -No es como si puedas hacerlo todo sola.

-¿No entiende nada, verdad? NO voy a casarme con Draco, NO voy a arruinar su vida.

-Pero él... él se preocupa por ti y eso debe ser porque te quiere.

-No. Draco no está enamorado de mi. Él ama a alguien mas, aunque no se dió cuenta todavía.

-¿Y tu? ¿Tu estás enamorada de él?

-No. Y en lo único que tengo que pensar es en cómo demonios detener a Lucius.

-Lizeth, ¿por qué no me dices cuales son sus planes?

-Lo siento.

Sirius observó a su alumna extrañado. Algo debió darle, porque a penas pronunció esas dos palabras salió corriendo hacia la habitación, tapándose la boca con una mano. ¿Qué se suponía que significaba eso?

Está embarazada. La revelación cayó como un balde de agua fría. Náuseas matutinas. El profesor se puso de pie al instante y corrió tras Lizeth, para encontrarla frente al inhodoro, expulsando lo poco que residía en su estómago.

Se arrodilló tras ella y rodeó su cintura con un brazo, mientras que con el otro le alejaba el cabello de la frente. Y así estuvieron algunos minutos, hasta que Lizeth dejó de convulsionarse.

-¿Estás bien? -susurró Sirius atrayéndo a la chica a su pecho.

-Odio esto -murmuró Lizeth acomodando su rostro en el cuello de su profesor.

-Ya pasará.

-Claro -dijo irónicamente Lizeth -En tres malditos meses.

-Lizeth... aún puedes..

-¿Qué? -exclamó la rubia mirándolo a los ojos -¿Deshacerme de él? ¡NUNCA... NUNCA pensé que fuera a escuchar esas palabras de "su" boca!

Y con ese drástico cambio de humor, Lizeth se separó de su profesor, y dejó sus aposentos.

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Sirius terminó su desayuno maldiciéndose mentalmente una y otra, y otra, y otra vez por su estupidez. ¿Cómo se le ocurría decirle algo así?

Era cierto que odiaba ver a Lizeth sufriendo. Era cierto que aborrecía la idea de que estuviera embarazada de otro hombre. Era mas cierto que le disgustaba que el otro hombre sea Lucius Malfoy. Pero también era cierto que tenía un cariño especial por ese bebé.

Toques repetitivos e insistentes en su "puerta" lo sacaron de sus cavilaciones. Refunfuñando y murmurando maldiciones para quien fuera que estaba detrás del cuadro, se levantó y le indicó a Gryffindor que abriera.

-Lo siento -dijo un muy abatido Harry Potter -¿Estabas ocupado?

-No. Claro que no. Pasa.

El silencio que siguió a esas pocas palabras era insoportable. De pronto, Sirius se encontró odiándose a sí mismo por haberse alejado de su ahijado. Primero por las discusiones por Snape, después por Lizeth...

Harry estaba sentado en el sillón frente al suyo, estrujándo las mangas de su túnica con fuerza y mordiéndose el labio inferior. Eso no estaba nada bien.

-Harry, ¿quieres decirme qué sucede?

-Yo... Tu.... -murmuró Harry sin levantar la vista.

-Vamos hijo, ¿qué pasa?

-¿Hijo? -dijo Harry clavándo sus ojos verdes en él -¿Sigo siendo tu hijo?

-¡Claro que si! -exclamó Sirius sentándose junto a él -¿Qué clase de estúpida pregunta es esa?

-¿Entoces puedo contarte cualquier cosa sin que te enfades?

-Claro que si. -dijo Sirius entornando los ojos.

-Soy egoísta, MUY egoísta. -informó Harry sin mirarlo.

-Eso no es cierto. YO soy egoísta, no tu.

-Si, lo soy. Lo soy porque no quiero que Lizeth se case con Draco. No quiero que él se haga cargo de su hijo. No quiero...

-SSShhh -dijo Sirius abrazándolo. Lo que faltaba, que Harry se enamore de "su" Lizeth. -Pídele que se case contigo.

-No lo haría. -murmuró Harry devolviendo el abrazo -No va a dejarla sola, ya me lo dijo.

-Entonces... -Sirius se silenció automáticamente al darse cuenta que Harry no hablaba de Lizeth sino de Draco -Harry... ¿Estás enamorado de Draco Malfoy?

-Creo que si. -gimió Harry apretándose mas contra su padrino. -Mi vida apesta.

-¿Se lo has dicho?

-No. Pero... creo que ya se debe haber dado cuenta. Esta mañana le dije.... lo llame "amor". ¿C"MO PUEDO SER TAN IDIOTA?

-Dile que fue una broma.

-No va a creerme. No después de.... AAAAGGGGGGGRRRRRRR.

-No hiciste el amor con Draco Malfoy -dijo Sirius mirándolo a los ojos. -dime que no lo hiciste.

-Bueno... no "exactamente". Quiero decir... no pude resistirme y lo besé y... lo acaricié y.... ¡Pero no nos quitamos los pantalones! ¡Lo juro!

-Harry... no voy a regañarte. Está bien que hagas lo que sientas -dijo el animago acercándolo nuevamente a él -Pero no está bien que te hagas daño a ti mismo. Tu sabías que Draco iba a hacerse cargo de Lizeth.

-Yo sólo... en ese momento lo único que quería era tener... algo. Algo que poder recordar en el futuro. Pero creo que no fue una buena idea.

-Lo siento Harry. -murmuró Sirius, dándose cuenta por primera vez, que Harry ya no era un niño y que su corazón iba a romparese, porque cuando amaba, lo hacía sin límites.

Aunque, si lo pensaba de nuevo.... Entoces fue cuando una frase de Lizeth apareció en su mente. "Draco no está enamorado de mi. Él ama a alguien mas."

Si ese "alguien mas" fuese Harry, entonces no todo estaba perdido y su hijo podía ser feliz. Sólo faltaría alguien que se quedara junto a Lizeth y, se encontró fantaseando con ser él.

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RESPUESTA A LOS REVIEWS:

Pekenyita: ¡Hola! Me alegra mucho que te haya gustado mi ff, sobre todo porque a mi me encanta el tuyo... jaja. Tenés razón que Harry no tiene mucho trato con Sirius, y voy a tener que solucionarlo. Es que, a veces son taaaantas las cosas que hay que tener en cuenta que uno se agarrota. Espero que sigas leyendo.

LolaPotter: ¡Qué bueno que te guste el ff! La idea es terminarlo en unos pocos capítulos mas, espero poder lograrlo.

Galindezlpm: Es la primera vez que lees este ff, pero Barby me dijo que estuviste preguntando por mi en el foro. Tenemos todo controlado entre las dos. Espero que sigas leyendo y que te siga gustando.

Ali: Hola Ali. ¡Que gusto que estés leyendo el ff! Ya veremos como hago para solucionar todos estos problemas entre Draco, Lizeth, Lucius, Sirius y Harry. Va a ser algo difícil, o tal vez no. No lo sé... jajajaja.

LiamBlack: Así que te babeas.... Es que no hay otra reacción posible. Severus.... tan lindo con Remus, Y Sirius con Lizeth... Y Draco con Harry... Sólo hay que matar muy dolorosamente a Lucius... MUAJAJAJAJAJA. Espero que sigas leyendo.

Luna-Loveblack: Draco y Harry son medio ciegos, pero es que no podés pretender que de un día para el otro se confiesen su amor. No te preocupes, que ellos van a quedar juntos, estoy segura.

Sandra: Gracias por tu review y por tu opinión. Me alegro que te guste el ff.

Shura: Wow... al tuyo se le llama un review largo. Coincido en muchas cosas con vos, y me alegro que puedas verlo desde mi punto de vista. Narcissa se siente identificada con Lizeth porque su vida fue igual, y estoy segura de que va a ser lo posible para cambiarla y que no viva todo lo que le tocó a ella. Y Lucius... en pocas palabras: se fue al carajo. A veces me sorprendo de mi capacidad de maldad, creo que sería una buena mortífaga. En fin, ya veremos como se va solucionando todo. Gracias por tu review.

Ophelia Dakker: No puedo dejar de reirme cada vez que leo uno de tus reviews. Es que te imagino gritando como una loca porque suelo hacerlo. de hecho, el otro día le dejé un review gigante a una chica y la mitad era: "sos mala, sos mala". Espero que este capítulo te haya gustado.

Kaguya: Draco es todo un caballero, eso sí. Y esperemos que eso no le permita quedarse con Harry. Gracias por tu review.

Hailey Hamilton: Definitivamente tus reviews son los mejores que leí en mi vida. ¡Me encantan! Ya sé que estás desesperada porque deje juntos s Narcissa y Sirius, pero aún no se que voy a hacer. Espero que si al final me sale contrario a tu preferencia, aún te guste el ff. Y, la verdad es que lo del corazón de Sirius, me salió del alma. Se me representó la idea tan perfectamente en mi cabeza, que no pude hacer mas que ponerla. Me alegra que te haya gustado.

Danybel: Muchas gracias por los halagos. No tengo problema en que publiques la historia, pero sí te pido que pongas que es mía. Espero que te siga gustando.

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¡UN BESOTE PARA TODAS!

MUCHAS GRACIAS POR SUS REVIEWS...

Gala Snape