Holaaaaaaaa, bueno ultimement ando depre, nadie (excepto Synn) me manda
reviews... po weno, ya llegarán épocas mjores... y si no llegan pos q le vamos
a hacer!!!
Synn: Gracias x seguir mi fik, y q no lo agas x hacer, espero q te guste aunq sea un pokito... bueno ya verás q pasa cn drakito... y a gal le encantan los malotes... (normal, a kien no??) es vdd q lo de q Marduk tnga 4 patas es un inconveniente pero... quería meter un personaje distinto estaba aburrida de tanto hombre (yo siempre voy a lo rarito!!)
Bueno espero q disfrutes del capi!!!!!!!!!!!!!! REVIEWSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSssssssSSSS
13. CAPITULO: El castigo
En clase de pociones del jueves a la tarde...
- Señoritas Pommiers y Granger, mañana a las 19.30 las quiero en mi despacho por haber llegado tarde el otro día. Sean puntuales.
Malfoy intentó persuadir a Snape para que no me castigara, ya que decía que no nos veíamos nunca. Hermione y yo salimos de la sala común el viernes a las 19.15, llegamos al despacho de Snape con cinco minutos de adelanto. Llamamos a la puerta.
- Pasen.
- Profesor, venimos a hacer nuestro castigo.
- Bien, quiero que limpien las mazmorras y que hagan dos calderos de poción veritaserum.
- Pero... eso nos llevará toda la noche. Y nosotras solo llegamos 15 minutos tarde a su clase.
- ¿Qué le pasa señorita Granger, no está contenta? ¿Quiere más?
- No señor. Así está bien.
- Bien, pues pueden comenzar.
Primero empezamos a hacer la poción. Tardamos en preparar todos los ingredientes más o menos una hora. ¡¡Y eso que solo era para un caldero!! A las 22.00 acabamos de hacer el primer caldero. Mientras Hermione metía en frascos la poción y empezaba a cortar en trozos los ingredientes para hacer un segundo caldero de veritaserum yo fui a por más ingredientes al despacho de Snape. Llamé a la puerta. No oí nada así que entré. Abrí el armario en donde se encontraban los ingredientes necesarios. Empecé a coger todo lo que nos hacía falta, cuando oí unos pasos, sin estar segura de porqué me escondí. No sabía por qué lo hacía. Por que en realidad tenía todo el derecho del mudo de estar hay. Alguien abrió la puerta del despacho. Iba con una capa negra, zapatos negros y era de piel pálida. ¡¡Ron!! Reprimí mi grito de asombro. Fue directo al armario de Snape. Si... ya me acordaba, una vez que había estado con Marduk, había oído como le decían a Ron que robara las cosas del despacho de Snape. Y fuera como fuera yo lo tenía que impedir. Mi mente empezó a pensar a 100 por hora. Podría chillar pero antes de que le diera tiempo de llegar a nadie Ron ya me habría echado un conjuro. Entonces yo le tendría que echar un conjuro. Pero esa era una de las típicas situaciones en las que intentas hacer algo que sabes y no consigues hacerlo. Me tenía que concentrar. No encontraba un hechizo adecuado. Hasta que...
-¡Petrificus totalus!
Ron cayó al suelo y todos los ingredientes que tenía entre sus brazos se cayeron al suelo. Estaba rígido, sus brazos estaban pegados a su cuerpo. Sus ojos se movían a la velocidad de los rayos. De un lado a otro buscando quién le había lanzado el conjuro. Salí de mi escondite. Ron me miró e intentó decir algo pero tampoco podía hablar. Así que fui yo la que hablé.
- Ron, Ron, Ron... ¿cuando aprenderás? Antes de entrar al despacho de algún profesor hay que llamar a la puerta. Pero al ser tan maleducado no lo hicistes. ¡Y no me pillastes por sorpresa! No intentes hablar porque no lo conseguirás. Y lo sabes. Por cierto, ya que te tengo aquí pillado... voy ha hacerte unas preguntas sobre Akisato.- Ya me esperaba su reacción. Sus ojos se quedaron en blanco. Y me miró. Imploraban clemencia. Al parecer seguramente no le dejarían hablar de Akisato ni de Voldemort.- Bueno Ron, te voy a dejar hablar aunque no dejaré tus demás miembros moverse. ¡Moveo bucca!
- No te diré nada sobre Akisato. Ni sobre Voldemort. ¡¡Soy su más fiel seguidor!!
- Si... eso dicen todos. Pero tú Ron... no eras como ellos. Tú... eras tierno, cariñoso y amable. Yo pensaba que...
- ¡PUES TE CONFUNDES! Ese era el Ron de antes, el aburrido, que se dejaba llevar por la gente. El que no era bueno en nada y pensaba que su mejor amigo era Harry Potter pero en realidad Harry solo quería lo mejor para sí mismo.
- Bueno, si no quieres hablar... peor para ti.
Fui corriendo a por Harry y avisé a Hermione para que vigilase a Ron. Pero... al volver con Harry...
Synn: Gracias x seguir mi fik, y q no lo agas x hacer, espero q te guste aunq sea un pokito... bueno ya verás q pasa cn drakito... y a gal le encantan los malotes... (normal, a kien no??) es vdd q lo de q Marduk tnga 4 patas es un inconveniente pero... quería meter un personaje distinto estaba aburrida de tanto hombre (yo siempre voy a lo rarito!!)
Bueno espero q disfrutes del capi!!!!!!!!!!!!!! REVIEWSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSssssssSSSS
13. CAPITULO: El castigo
En clase de pociones del jueves a la tarde...
- Señoritas Pommiers y Granger, mañana a las 19.30 las quiero en mi despacho por haber llegado tarde el otro día. Sean puntuales.
Malfoy intentó persuadir a Snape para que no me castigara, ya que decía que no nos veíamos nunca. Hermione y yo salimos de la sala común el viernes a las 19.15, llegamos al despacho de Snape con cinco minutos de adelanto. Llamamos a la puerta.
- Pasen.
- Profesor, venimos a hacer nuestro castigo.
- Bien, quiero que limpien las mazmorras y que hagan dos calderos de poción veritaserum.
- Pero... eso nos llevará toda la noche. Y nosotras solo llegamos 15 minutos tarde a su clase.
- ¿Qué le pasa señorita Granger, no está contenta? ¿Quiere más?
- No señor. Así está bien.
- Bien, pues pueden comenzar.
Primero empezamos a hacer la poción. Tardamos en preparar todos los ingredientes más o menos una hora. ¡¡Y eso que solo era para un caldero!! A las 22.00 acabamos de hacer el primer caldero. Mientras Hermione metía en frascos la poción y empezaba a cortar en trozos los ingredientes para hacer un segundo caldero de veritaserum yo fui a por más ingredientes al despacho de Snape. Llamé a la puerta. No oí nada así que entré. Abrí el armario en donde se encontraban los ingredientes necesarios. Empecé a coger todo lo que nos hacía falta, cuando oí unos pasos, sin estar segura de porqué me escondí. No sabía por qué lo hacía. Por que en realidad tenía todo el derecho del mudo de estar hay. Alguien abrió la puerta del despacho. Iba con una capa negra, zapatos negros y era de piel pálida. ¡¡Ron!! Reprimí mi grito de asombro. Fue directo al armario de Snape. Si... ya me acordaba, una vez que había estado con Marduk, había oído como le decían a Ron que robara las cosas del despacho de Snape. Y fuera como fuera yo lo tenía que impedir. Mi mente empezó a pensar a 100 por hora. Podría chillar pero antes de que le diera tiempo de llegar a nadie Ron ya me habría echado un conjuro. Entonces yo le tendría que echar un conjuro. Pero esa era una de las típicas situaciones en las que intentas hacer algo que sabes y no consigues hacerlo. Me tenía que concentrar. No encontraba un hechizo adecuado. Hasta que...
-¡Petrificus totalus!
Ron cayó al suelo y todos los ingredientes que tenía entre sus brazos se cayeron al suelo. Estaba rígido, sus brazos estaban pegados a su cuerpo. Sus ojos se movían a la velocidad de los rayos. De un lado a otro buscando quién le había lanzado el conjuro. Salí de mi escondite. Ron me miró e intentó decir algo pero tampoco podía hablar. Así que fui yo la que hablé.
- Ron, Ron, Ron... ¿cuando aprenderás? Antes de entrar al despacho de algún profesor hay que llamar a la puerta. Pero al ser tan maleducado no lo hicistes. ¡Y no me pillastes por sorpresa! No intentes hablar porque no lo conseguirás. Y lo sabes. Por cierto, ya que te tengo aquí pillado... voy ha hacerte unas preguntas sobre Akisato.- Ya me esperaba su reacción. Sus ojos se quedaron en blanco. Y me miró. Imploraban clemencia. Al parecer seguramente no le dejarían hablar de Akisato ni de Voldemort.- Bueno Ron, te voy a dejar hablar aunque no dejaré tus demás miembros moverse. ¡Moveo bucca!
- No te diré nada sobre Akisato. Ni sobre Voldemort. ¡¡Soy su más fiel seguidor!!
- Si... eso dicen todos. Pero tú Ron... no eras como ellos. Tú... eras tierno, cariñoso y amable. Yo pensaba que...
- ¡PUES TE CONFUNDES! Ese era el Ron de antes, el aburrido, que se dejaba llevar por la gente. El que no era bueno en nada y pensaba que su mejor amigo era Harry Potter pero en realidad Harry solo quería lo mejor para sí mismo.
- Bueno, si no quieres hablar... peor para ti.
Fui corriendo a por Harry y avisé a Hermione para que vigilase a Ron. Pero... al volver con Harry...