Muchas gracias por los reviews.., prometo subir los capítulos más seguido. Sigo esperando sus comentarios y ahora los dejo con el capítulo número 2





La Hermandad de la Níke

Una chica alta y delgada de unos 18 años se acercó a un edifico que parecía ser una vieja casa abandonada y en ruinas. Se aproximó muy despacio, con toda la precaución y vigilando que ninguna otra persona del pueblo le prestara mucha atención, sacó una varita y dió un toque al buzón que estaba a un lado de la cerca. Al momento del toque pronunció unas palabras: ¡Lechuza vigilante!

Y como por arte de magia se abrió la puerta de la casa. La chica caminó muy rápido hacia la puerta para que ningún muggle se diera cuenta de que la casa abandonada desde hacía ya 50 años se había abierto. Con unos documentos bajo un brazo, un portafolio y la varita en el otro entró a la vieja casa.

Dentro, quien sea que hubiera entrado en ella se habría sorprendido. Una bruja con una túnica roja, un extraño peinado de moño en el cabello que ya mostraba algunas canas, y unos lentes en forma de triángulo la recibió en lo que era el vestíbulo de unas oficinas muy grandes. La chica le dio los buenos días con una sonrisa en el rostro y a su vez, la bruja le entregó un fajo de fólderes de color verde con el encabezado "Defensa contra la Resistencia del Señor Tenebroso". La chica le dio las gracias y se dirigió hacia una oficina que se encontraba al final de un pasillo iluminado por lámparas de las que utilizan los muggles, pero se notaba que la luz provenía de la magia. Al llegar, abrió la puerta con dificultad, por el peso que llevaba en los brazos y descargó todo en el escritorio de una pequeña oficina. El cuarto estaba decorado como si fuese la sala de alguna cabaña. Al centro se encontraba un gran escritorio de madera de cedro que tenía la fotografía de un grupo de cuatro chicos, una pequeña planta carnívora de la especie de las Dróceras que le había regalado uno de los chicos de la foto. Las flores de esa plata eran pequeñas, de color púrpura. Las hojas forman pequeñas rosetas pegadas al tallo y está recubierto de pelos verdes o rojizos terminados en una gran glándula que excreta un líquido transparente con el que se pegan los insectos. A la derecha del escritorio tenía una chimenea que encendió con un movimiento de la varita y en la parte de arriba de ella, un conjunto de fotos de personas que se movieron y le sonrieron en cuanto se acercó al fuego. De pronto, el fuego comenzó a realizar ruidos como de pequeñas explosiones, a tornarse de color verde y la cabeza de un hombre con el cabello de color rojo con algunas canas en él salió y le sonrió a la chica. Me alegro de verte Ginny, ¿podrías venir un momento?, hay un anuncio que quiero hacerles a todos los jefes de departamento. Si padre, enseguida voy - le respondió la chica a la cabeza del hombre, que asintió y desapareció.

Ginny Weasley, la actual encargada del Departamento de Defensa contra la Resistencia del Señor Tenebroso, tomó rápidamente unas cuantas hojas de pergamino, una pluma de águila y un tintero. Salió de su oficina y se dirigió hacia unas largas escaleras. Apenas había subido unos 15 escalones cuando se detuvo en seco en un descanso, miró hacia un pedestal que tenía la escultura de El Mago Merlín y con la varita le tocó una de las estrellas del gorro diciendo: "Estrella parlanchina". La figura le guiñó un ojo e inmediatamente se abrió una puerta. Ginny entró a la habitación. En el cuarto no había más que un estante de libros muy viejos, un cuadro con el Mago Merlín que le sonreía cuando llegaba, una chimenea y una gran mesa redonda con muchas sillas alrededor que ya estaban ocupadas, solamente faltaba ella por sentarse e inmediatamente lo hizo. Fue directo a la silla vacía junto a un mago muy viejo de aspecto furioso que parecía estar más enojado que asustado como estaban los rostros de los demás magos ahí sentados y del otro lado estaba una chica muy bonita de unos 21 años de edad que le sonrió y una hermosa dentadura pudo verse reflejada en su cara. Ginny le sonrió por compromiso y tomo asiento. Su padre (que estaba solamente esperando que Ginny se sentara), se levantó y se dirigió hacia los demás magos. Muy bien, ahora que estamos completos creo que es necesario que recibamos los informes más recientes de las diferentes desapariciones de muggles. Señorita Chang, si me hace usted el favor de mostrar sus resultados a los miembros del Ministerio - Dijo Arthur Weasley, actual Ministro de Magia a la chica que estaba a un lado de Ginny. Si señor ministro - respondió Cho Chang, vigente jefa del Departamento de Defensa de Muggles - Como todos estarán enterados, las desapariciones de los muggles han sido más frecuentes que cuando el Señor Tenebroso estaba en guerra con nosotros, así que la gente de mi departamento, infiltrada en el mundo muggle ha estado investigando las últimas 20 desapariciones muggles. Como las anteriores, han sido niños de entre 6 y 9 años de edad que se encontraban en diferentes lugares de todo el Reino Unido. La más reciente ocurrió hace 2 días en un bosque de Escocia. Parece ser que era una familia de muggles. Encontramos a los padres muertos bajo los influjos de la maldición Avada Kedavra y la madre parece que fue antes torturada por la maldición cruciatus. Tenían dos hijos de los cuales no encontramos rastro alguno como en las otras ocasiones y tenemos la idea de que fue la Resistencia de Azael la que se encargó de estas desapariciones.

Una vez dicho eso, Cho regresó a su lugar y espero atenta los comentarios de los demás miembros del ministerio. Todos se quedaron en absoluto silencio. Algunos murmuraban cosas a los compañeros que tenían a un lado hasta que Arthur Weasley se levantó de nuevo acompañándolo el silencio de los demás magos. Bueno, creo que los escuadrones que tenemos vigilando los movimientos de los mortífagos no han sido lo suficientemente capaces de detectar donde se encuentran agrupadas los distintos frentes de la resistencia - y miró hacia el mago que se encontraba al lado derecho de Ginny - pero espero que los aurores nos tengan buenas noticias ¿Ginny, qué puedes decirnos tú?. Bien señor ministro, Hermione Granger que estaba vigilando los bosques de Irlanda no ha encontrado rastro alguno de la resistencia, lo mismo que Ronald Weasley y Neville Longbotton que se encontraban examinando Lonch Tay en Escocia ¿Y Harry?, ¿Harry no ha encontrado nada? - Interrumpió el informe de Ginny un mago que se encontraba sentado frente a ella en la mesa. Era alto, delgado de aspecto alarmado porque no tenía noticias de Harry. Harry Potter - prosiguió Ginny - no ha encontrado nada tampoco en las laderas de los ríos Thámesis y Trent, señor Black, sin embargo, los aurores han llegado a la conclusión de que las resistencias están en continuo movimiento y por eso es más difícil encontrarlos, porque no se quedan en un lugar por más de tres días para su seguridad - y habiendo dicho esto, tomó siento nuevamente.

Sirius Black, el encargado de Departamento de Espías Mágicos mostró en el rostro una gran decepción al notar que las pistas que habían obtenido sus espías con tanto esfuerzo, no habían sido de mucha ayuda. De pronto, con el rostro rojo por la furia, se levantó el mago que se encontraba a la derecha de Ginny. Uno de sus ojos se movía con más rapidez que el otro que era normal y las cicatrices de su rostro parecían que iban a estallar en cualquier momento. ¡Y dónde se encuentran los aurores en estos momentos!, deberían de estar aquí rindiendo sus declaraciones y sus informes - gritó el mago. Tranquilo Moddy - le dijo Arthur Weasley - En estos momentos la señorita Weasley nos lo iba a explicar - y dirigió a Ginny una mirada llena de dudas sobre la pregunta de Ojoloco Moddy, un antiguo auror. Los aurores fueron llamados con Dumbledore de urgencia, parecía que tenía un asunto urgente que tratar con ellos - dijo Ginny y notó que todos los magos presentes la miraban con el rostro de duda. Ahí tienes Moddy, - dijo Arthur Weasley - no están con nosotros porque Dumbledore los llamó.

Los miembros de la junta siguieron tratando otros asuntos de importancia mientras que la mente de Ginny salía de su cuerpo para preguntarse en dónde se encontrarían los miembros de la Hermandad de la Níke, el grupo de aurores que habían estado nombrando en la junta.

No muy lejos de ahí, en un bosque cerca de la ladera de Loch Lomond, cuatro chicos se aparecieron junto a un viejo árbol que estaba al pie de una colina. Eran tres chicos y una chica, todos de unos 20 años de edad. Se les notaba el cansancio en el rostro y traían las túnicas muy sucias gracias al trabajo que habían estado realizando. Creo que las pistas que le dieron a Sirius no eran ciertas del todo - dijo el más alto de los chicos, de cabello rojo y lacio que le caía sobre los ojos y el rostro cubierto de pecas - ¿Ustedes encontraron algo? No Ron - dijo la chica, alta y delgada con el cabello castaño que miraba preocupada a los otros chicos - no he encontrado ni una sola pista del paradero de las resistencias. Nosotros estuvimos buscando bajo todo el lago y no encontramos más que unas sirenas, tritones, grindylows y una familia de calamares gigantes, ¿cierto Ron? - dijo uno de los chicos a Ron. Éste chico era el más pequeño de todos, un poco robusto y con el pelo lacio al igual que Ron. Si Neville, nada de importancia - respondió Ron ¿Y tu Harry?, ¿Tampoco has encontrado nada? - le preguntó la chica al último de los chicos, un muchacho alto, delgado, con los ojos de color verde y el cabello rebelde de color negro azabache. La verdad Hermione, creo que tu teoría sobre que las resistencias se encuentran en constante movimiento es cierta porque...

Pero un extraño ruido no le permitió continuar a Harry. Inesperadamente la roca que cubría la caverna se abrió y Harry fue el primero en entrar. Siguiéndole, Ron, Hermione y Neville se adentraron a la cueva que automáticamente se cerró sin dejar rastro alguno de la entrada. Harry sacó la varita y dijo "Lummus". Los otros chicos lo hicieron también.

Los chicos caminaron iluminando la cueva con sus varitas. Recorrían un túnel lleno de plantas extrañas y musgo en las paredes, sin embargo, ninguno de ellos parecía interesado en examinar la flora del lugar, sino que seguían caminando apresuradamente recorriendo el túnel y esperando que pronto terminase. Finalmente se encontraron con lo que parecía el final del camino. Frente a ellos se encontraba una cámara iluminada por una tenue luz azul que la alumbraba por completo. Los chicos se detuvieron a la entrada y observaron una especie de humo azul que al verlos, inmediatamente tomó forma de un mago ya grande de edad, con una larga barba plateada, al igual que el cabello, una túnica azul y ojos del mismo color cubiertos por unas gafas que parecían medias lunas. El mago les sonrió y los chicos pudieron notar que la imagen del mago podía reflejarse en varios cristales de cuarzo que estaban incrustados en la pared. Me da mucho gusto verlos de nuevo, mis queridos miembros de la Hermandad de la Niké - les dijo con una voz dulce el mago que se encontraba frente a ellos. Es un placer para nosotros que nos hayas mandado llamar Dumbledore - le dijo Harry devolviéndole la sonrisa. Vaya, veo por el brillo de sus ojos que siguen tras la pista de las resistencias sin éxito alguno ¿verdad? - preguntó Dumbledore. Estas en lo correcto como siempre - dijo Hermione - no podemos encontrarlos, son muy escurridizos, pero no te preocupes por nosotros, hallaremos la forma de vencerlos para que sus planes de restaurar al Señor Tenebroso fracasen. Además - prosiguió Ron - ya hemos limpiado el ministerio de todos aquellos mortífagos que aún le pasaban información a nuestros enemigos y estamos seguros de que todos los magos que no se encuentran ni con la resistencia ni en Azkaban, están de nuestro lado. Y tú Neville, ¿No tienes nada en especial que informarme? - le preguntó Dumbledore con una sonrisa paternal Si, señor - dijo Neville con un poco de timidez en la voz - los gigantes de los montes de Alemania y los Países Bajos ya están de nuestro lado y... bueno, lo demás tal vez no sea importante para ti Dumbledore - terminó Neville un poco temeroso. Todo lo que sea importante para ustedes, lo es para mi Neville - le respondió Dumbledore. Bueno - prosiguió Neville - gracias a unas pociones descubiertas recientemente por Harry y Ginny, mis padres ya están reaccionando. Ya me pueden reconocer. ¡Excelente! - dijo Dumbledore - Creo que entonces están listos para lo que tengo que decirles. La resistencia ha estado desapareciendo pequeños muggles de todo el Reino Unido porque se los está dando a los dementores como alimento. ¡¿Qué?! - dijeron los cuatro chicos con el rostro lleno de terror. Así es mis pequeños amigos, los dementores están haciendo un trabajo especial para ellos. Se encargan de hacer excavaciones por todo el Reino Unido para encontrar el libro Negro de magia y hechicería que le perteneció a un gran mago. En ese libro se encuentran los hechizos más potentes que ningún mago se pueda imaginar y casualmente, se encuentra la poción que le regresaría a Voldemort su cuerpo. Lo mismo que a ti Dumbaldore - le dijo Harry Si Harry, al igual que a mí, y bueno, como los dementores no hacen el trabajo gratis, los mortífagos se han encargado de proporcionarles como alimento las almas de esos pobres niños muggles que son todo un delicioso banquete para ellos. ¡Que horrible! - exclamó Hermione - no es posible que los mortífagos tengan tan poco corazón. Esos son unos desalmados Hermione - le dijo Ron - Recuerda que el mismo Draco Malfoy entregó a su padre a los mortífagos por haber traicionado a Quien-tu-sabes Se llama Voldemort Ron - le dijo Harry - Ya piérdele el miedo a su nombre Harry tiene razón - le dijo Dumbledore - lo menos que se puede esperar de un buen auror es que pueda mencionar claramente el nombre de su enemigo. Y regresando con los mortífagos y la resistencia - dijo Neville - supongo que tienes una pista ¿No?. Así es, y creo que con la información que Harry obtuvo, será más productiva - le dijo Dumbledore y los tres chicos miraron a Harry. ¿Y cuál es esa pista? - preguntó Hermione Tendrán que buscar a la bruja con poderes que no conoce - les dijo Dumbaldore - ella vive como una muggle porque no sabe que es bruja, que tiene poderes inimaginables y la resistencia ya está tras su pista. Cuando ella descubra cuales son los poderes que es capaz de manejar, será la única persona en el mundo mágico que podrá encontrar el Libro Negro, así que tienen que encontrarla antes de que los mortífagos lo hagan, pero la verdad, creo que ella será quien los encuentre. La reconocerán cuando la vean porque tiene en los ojos un brillo especial, además tiene en la palma de la mano izquierda un triángulo que es el símbolo de su poder. Si quieren más información sobre ella, acudan al oráculo de Delfos, él les responderá sus preguntas. Ahora, ya váyanse mis queridos muchachos. Como tú digas Dumbledore - le dijo Harry y dirigiéndose a los chicos - Vámonos ya muchachos, hay muchas cosas que hacer y tenemos que llegar al ministerio.

Los cuatro se despidieron de Dumbledore y salieron por el mismo camino de la caverna. Cuando llegaron a donde se supone que estaba la entrada, la roca que la cubría se movió de nuevo dejándolos salir. Una vez afuera, los chicos miraron a Harry extrañados por lo que Dumbledore les acababa de decir. ¿Existirá de verdad una bruja que no sepa que es bruja? - preguntó con escepticismo Ron a los demás chicos. Yo creo que es posible - le respondió Hermione - pero por lo que estoy extrañada es que no nos hayas dicho que encontraste pistas Harry. Recuerda que estaba iniciando a hablar de lo que había encontrado en mi búsqueda cuando la entrada del refugio de Dumbledore se abrió - le contestó Harry - pero en estos momentos se las digo. En las laderas de los ríos me encontré con algo que nos puede llevar al lugar en donde se encuentra ahora la resistencia de Azael. ¿De verdad Harry? - preguntó Neville asombrado - ¿Es eso posible?.

Harry realizó un movimiento con la cabeza afirmando lo que antes había dicho. De pronto, de la túnica sacó un pequeño trozo de pergamino amarillo que estaba roto de un lado y parecía tener dibujado algo al centro; además sacó también un trozo de tela verde esmeralda, que parecía haber pertenecido a una túnica. Les mostró a los chicos sus dos hallazgos y en cuanto vieron el trozo de pergamino, se alarmaron y alegraron a la vez. Esta es la marca Tenebrosa ¿Verdad Harry? - le preguntó Neville Así es, es la marca Tenebrosa, solo que a la mitad - respondió Harry ¿Cómo lo obtuviste? - le preguntó Hermione. Bueno, estaba convirtiendo una pequeña roca de río en un chivatoscopio para que la búsqueda por las laderas fuera más rápida. De pronto la piedra comenzó a brillar demasiado, señal de que algún enemigo se acercaba y me escondí entre unas hierbas. Apareció ante mi una pequeña niña muggle de unos 7 años de edad que llevaba unas cubetas para llevar agua del río y la voz de alguien muy conocido por nosotros se escuchó a lo lejos. De entre la hierba salió la mismísima Rita Skeeter que inmediatamente tomó a la niña del brazo y desapareció. Cuando salí a buscar alguna pista que Skeeter hubiera dejado, me encontré con este trozo de pergamino, que parece ser como Voldemort se comunica con ellos y además, entre unas ramas estaba este pedazo de capa de Skeeter, creo que no se ha dado cuenta de que su túnica ya está muy rota. Vaya, así que Skeeter se convirtió en un mortífago -exclamó Ron Nada es imposible para esa mujer - dijo con desprecio Hermione Así es, pero eso no es todo chicos -agregó Harry - cuando un mortífago se encuentra cerca, la marca Tenebrosa se vuelve negra, así que si corremos con suerte, será una especie de brújula que nos llevará directo a los escondites de las resistencias. Ese si que es un gran descubrimiento Harry - le dijo Hermione - pero creo que por ahora, tendremos que ir directo al oráculo de Delfos. Eso que nos dijo Dumbledore de una bruja que no sabe que es bruja, me tiene un poco angustiada. Esa es una gran idea, Hermione - concluyó Neville Si, pero primero hay que darnos una vuelta por el Ministerio de Magia - dijo Ron - mi padre y Ginny deben de estar ansiosos por que lleguemos.

Los cuatro magos desaparecieron y se dirigieron al ministerio de magia a rendir su informe en donde la encargada de su departamento, Ginny Weasley los recibió con los brazos abiertos