Capitulo 13: Siempre en mi mente.
Reían y caminaban tomados de la mano, de vez en cuado besos robados y caricias en las mejillas aparecían, ambos se veían muy contentos.
Habían acampado por más de tres semanas en un mismo lugar, pero la llegada a Hokaydo no podía demorar más, a Hiromi sus padres la esperaban desde hace dos meses atrás, y ella sabía que estarían preocupados, pero, es que era tan feliz a lado de Yoh que si por ella fuera se quedaría perdida en medio del bosque junto con él.
Les faltaba medio camino para llegar, los árboles se hacían cada vez más frondosos y del cielo la nieve comenzaba a caer, el invierno pronto llegaría.
Yoh se sentía sumamente tranquilo y feliz, había logrado por fin su tan anhelada libertad, se sentía tan bien que hasta había olvidado el motivo por el cual visitaba a Horo Horo, lo cierto para él era que no deseaba llegar nunca, sabía, y muy a su pesar, que en cuanto llegara su tan querida Hiromi se iría de su lado y él sufriría irremediablemente por su ausencia.
Copos de nieve comenzaron a caer, miró hacía el cielo y luego a un lado suyo, noto que Hiromi miraba con atención.
-Será mejor encontrar un refugio-dijo en tanto lo miraba, Yoh vio que tenía las mejillas de color carmín-Se avecina una tormenta.
Con paso decidido se dirigió a una pequeña cueva, sonrió, ahí estarían muy a gusto.
-¡Hey Yoh!-le llamo-Aquí estaremos bien-dijo y le hizo una seña para que se acercara.
Él sonrió y camino hacía ella, al cabo de unos minutos, ambos se encontraban adentro muy juntos y tratando de calentarse con una fogata demasiado improvisada, la tormenta de nieve comenzó a caer con fuerza.
-¿Por qué tenías las mejillas tan rojas?-le preguntó él después de haberle dado un beso.
-Porque es la manera de alertarme, cuando se ponen rojas quiere decir que vendrá una fuerte ventisca-contesto sonriendo y volviéndolo a besar.
Se sentía tan bien, sus bocas bailando un suave compás sus manos acariciando cada parte que la muy abrigadora ropa les permitía, dejándose guiar más por sus instintos que por su razón.
La nieve comenzó a tornarse aún más violenta, tanto como los besos dentro de la cueva, los ánimos comenzaban a calentarse.
Se separaron mirándose a los ojos, él se notaba que trataba de controlarse, tanto que ella no deseaba otra cosa más que continuar.
Jamás habían llegado tan lejos, en los meses que les siguieron de su primer beso, solo a eso se dedicaron, a besarse y abrazarse, nunca habían dejado que pasara de ahí, pero esa tarde...
Hiromi se empinó hacía un confundido Yoh que correspondió con igual apasionamiento aquel beso que la chica le daba, suavemente la recostó en el suelo de piedra, por el contrario de aquella vez en el lago, la voz quejumbrosa de su mente no le grito, no le hablo, solamente cambio de táctica.
Por un extraño motivo, el recuerdo de la primera vez que Anna y él se entregaron por completo apareció en su mente, cegándolo por completo.
**Flash Back**
Habitación en penumbras, ella sentada sobre el futón y él a su lado, acababan de casarse y en su primera noche juntos un silencio incomodo predominaba, no sabían que decirse y como reaccionar ante la nueva situación en la que se encontraban.
-Yo-dijeron al unísono mientras se giraban para quedar frente a frente, y a pesar de la oscuridad ambos pudieron notar su sonrojo.
-Pues yo-comenzó Yoh tragando saliva-digo, ya estamos casados.
-Sí-dijo ella con la voz apagada, esperaba que él dijera más que eso.
-Anna yo... -dudo un momento-no sé, perdóname, pero no sé como decirte que yo te amo-dijo de pronto y de forma natural.
Se sorprendió de sus palabras lo había dicho y no supo ni como, la miro, Anna lo miraba confundida con los ojos como platos y la boca entreabierta.
Se veía tan encantadora, su boca lo incitaba y sin saber como, cuando y porque, él se hallaba besándola con dulzura, un beso un tanto torpe pero cargado de muchos sentimientos, al separarse Yoh noto que aún tenía los ojos cerrados y una sonrisa coronaba su boca, una vez más la beso, esta vez atrayéndola hacía él y aprisionándola en un abrazo, ella atrajo su cara colocando sus manos en sus mejillas y fue ella la que profundizo el beso, abrió su boca y dejo pasar a la de Yoh, sus manos corrían sin parar por todo su cuerpo, tocando, desabrochando todo.
Se separaron solo para perderse en los ojos del otro y volver a fundirse en un desesperado beso, la boca de Yoh bajo hasta su cuello, probando y saboreando aquella delicada piel.
****
La piel que ahora besaba tenía un sabor distinto, sabía a nada, no le remitía nada.
****
Aspiraba su suave y penetrante aroma, era tan cálido, sus cabellos rubios y sedosos enredados en sus manos, su corazón latiendo con violencia mientras desataba el cordón de la yukata, las manos de ella acariciando su torso desnudo debido a que ella ya le había quitado su yukata, las sentía tan suaves, deliciosos escalofríos recorrían su cuerpo.
****
Pero ahora era distinto, no sentía esa calidez y se pregunto en donde estaba ese aroma, en donde habían quedado esos cabellos y esas manos tan nerviosas y ansiosas que lo acariciaron aquella vez, el corazón no le latía con furia y no había rastro alguno de escalofríos en su piel.
****
Sentía sus manos acariciando su cabello, abrazándolo con fuerza, sonidos de placer provenientes de ella lo estaban haciendo enloquecer, amaba a esa mujer, la amaba como a nada en el mundo, su Anna, ahora sería suya, al fin... Entre entrecortados gemidos escucho...
**Fin Flash back**
-Te amo Yoh.
Esas palabras sonaron distantes, diferentes a aquellas que había escuchado por primera vez, esa voz no era tan suave y melodiosa como la que había escuchado aquella hermosa noche.
Volvió súbitamente a la realidad, no estaba en la pensión, se encontraba en aquella fría cueva, pronto recordó todo, estaba con Hiromi, ambos se encontraban con las ropas mal puestas, Yoh se separo de ella con brusquedad.
-¿Yoh?, ¿Te sucede algo?-le preguntó ella un tanto frustrada en tanto se incorporaba
Él no contestó, la observaba con atención, como si la examinara.
-¿Pasa algo malo?-volvió a preguntar.
-No, nada-contesto retraído.
Ella sonrió y volvió atraerlo hacía ella, dispuesta a terminar lo que habían comenzado.
Al principio él se dejó llevar pero al cabo de unos instantes volvió a separarse de ella con violencia.
-No, No puedo-dijo de pronto, se incorporo y quedo de pie frente a ella.
-Pero, ¿por qué?-le pregunto confundida-Pensé que si te decía que te amaba, tú...
-No entiendes, no sabes igual-le interrumpió.
-¿Qué?-casi grito mientras en su rostro un gesto de disgusto aparecía.
-Que te falta algo-contesto caminando de un lado a otro acomodándose la ropa y abrochando su abrigo.
-No te entiendo Yoh, ¿Cómo que me falta algo?-dijo con furia y con indignación.
-Sí, sí Hiromi, te falta ese dulce sabor-tomo el pañuelo de Anna y lo olió- tu aroma no es cálido y excitante, tus manos no recorren mi piel igual, yo, no sé, perdóname-dijo con pesar antes de salir corriendo de allí.
-¡Yoh!, ¡Yoh!-escucho que le gritaba mientras se perdía entre nieve y oscuridad.
Corrió lo más rápido que podía, no sabía lo que estaba haciendo, no sabía porque aquel recuerdo apareció de pronto, confundiéndolo, llenándolo de angustia, no sabía hacía donde se dirigía, tan solo quería correr, desaparecer, no quería saber nada de nadie, de nada, miro con rencor el pañuelo rojo, ni siquiera sabía porque había cargado con él, habiéndolo dejado, podría despedazarlo, pero no podía y no sabía porque.
La nieve dejó de caer, el paisaje se despejó y el cansancio le llegó, se detuvo solo para tomar aire y tratar de tranquilizarse, quería despejar su mente, quería una respuesta, una señal y al levantar su rostro...
Hokaydo apareció.
CONTINUARA...
Notas: Un poco extraño el flash back pero verán, dentro de este, Yoh compara su noche con Anna con lo que esta sucediendo con Hiromi, de ahí en fuera creo que no hay nada que aclarar, bueno sí, no me maten, después de todo nada paso, espero les guste este capitulo, ahora a contestar sus reviews:
Padme Gilraen: Ahora sí tu muñeco quedara totalmente destrozado, pero espero que no le hayas hecho tanto daño, ya que Yoh se arrepintió, así que espero te guste el capitulo, oye, me has dejado sorprendida, no solo te casas sino que ahora dominaras el mundo, esta bien amiga, esperemos que lo logres y en tu mundo de perros negros y esclavitud, por favor me tengas piedad.
Hikari yuuko: Ahora sabes que sucedió con Yoh en ese tiempo y claro que se enterara, y de que forma, vaya, de tan solo imaginarme la escena una malévola sonrisa (parecida a la del grinch) aparece en mi rostro, claro que saldrá Horo Horo, ahora que Yoh ya llegó a Hokaydo él será una pieza clave, en cuanto a lo de Ren, no lo tenía en mente pero tienes razón no lo puedo dejar solito, tu idea no es mala, pero lo pensare, Ah, entonces tu si te unes a la quema, esta bien.
Kari Asakura: Por desgracia no sucederá así, Anna no se dejara vencer por la gratitud, aunque a veces parezca que sí, y claro que Yoh sufrirá, tan lento y tan punzante como pueda, sí es un irresponsable, pero, ¡hombres!, todos son casi iguales.
Chareik: Tú gasolina es muy bien recibida, de hecho una amiga de la escuela quiere llevar dinamitas para hacerla estallar, me alegra saber que te gusta la historia y claro que Anna será dura, muy dura, lo0 castigara, lo hará sufrir y le dará donde mas le duele, lo juro solemnemente (Beu pone su mano en el pecho de lado del corazón) palabra de Boy Scaut.
Xris: Amiga que bueno que encontraste el fic, espero hacerte ahora doblemente feliz, aunque tal vez Yoh te habrá hecho enojar, pero como veras la dejo ahí en medio de la nada, creo que ya se le esta haciendo costumbre, en fin, la venganza se acerca, lentamente pero se acerca, JAJAJAJA, dios hasta me di miedo, cuídate mucho.
Lady Kaoru: Vaya es bueno saber que hay otra más que se ha unido a la quema, bueno en tu pregunta hacía lo de Ren, lo sabrás cuando llegue el momento, verdad que ella no puede quedarse con Ren, Si lo que no queremos es que Yoh tenga motivos para replicar, así que Anna no será como su querido maridito y eso del Tai Chi es buena idea, tal vez yo también tome un curso, a veces yo misma me altero cuando escribo JAJA, cuídate.
Niki: Aquí esta el otro capitulo, sí a Hana le agrada Ren, después de todo el ayuda mucho a su mamá, y la venganza se acerca, e Yoh caerá.
Anna_ángel 112: No prometo un RenxAnna, ya que no lo veo correcto, no quiero darle motivos a Yoh para reprocharle a Anna, no eso no, y el final pues sí será feliz.
Alesita-san: Gracias, y como dije no lo prometo para no darle motivos a Yoh, pero puede que lo piense más y tal vez, en un arranque de locura... pero no prometo nada, en cuanto a lo de Anna, ella esta embarazada y por lo tanto sensible y sentimental y un tanto cursi, eso sí, al nacer Hana, ella volverá a su temperamento frío con algunos toques de dulzura.
Fenryr: Por lo que veo discernimos en cuanto a justicia, tal vez tu molestia resida en que Anna esta embarazada y ella huyó y de no haber sido así, tal vez se le podría perdonar, de todas formas a mí también me gustaría debatir ese asunto, un poco confuso en mi caso pero sería muy interesante y el negocio si florece, no soy tan mala con Anna.
Annita Kyôyama fcc: Pues ya vez que no solo fue un beso y claro que Anna lo atormentara, castigara y martirizara, de hecho el poder femenino se le otorgara para hacerse justicia, JAJAJA (Creo que debo de ver menos Televisión)
Ahora me despido gracias por sus comentarios y nos vemos en próximo capitulo, en el cual, a propósito nacerá Hana, chao.
Reían y caminaban tomados de la mano, de vez en cuado besos robados y caricias en las mejillas aparecían, ambos se veían muy contentos.
Habían acampado por más de tres semanas en un mismo lugar, pero la llegada a Hokaydo no podía demorar más, a Hiromi sus padres la esperaban desde hace dos meses atrás, y ella sabía que estarían preocupados, pero, es que era tan feliz a lado de Yoh que si por ella fuera se quedaría perdida en medio del bosque junto con él.
Les faltaba medio camino para llegar, los árboles se hacían cada vez más frondosos y del cielo la nieve comenzaba a caer, el invierno pronto llegaría.
Yoh se sentía sumamente tranquilo y feliz, había logrado por fin su tan anhelada libertad, se sentía tan bien que hasta había olvidado el motivo por el cual visitaba a Horo Horo, lo cierto para él era que no deseaba llegar nunca, sabía, y muy a su pesar, que en cuanto llegara su tan querida Hiromi se iría de su lado y él sufriría irremediablemente por su ausencia.
Copos de nieve comenzaron a caer, miró hacía el cielo y luego a un lado suyo, noto que Hiromi miraba con atención.
-Será mejor encontrar un refugio-dijo en tanto lo miraba, Yoh vio que tenía las mejillas de color carmín-Se avecina una tormenta.
Con paso decidido se dirigió a una pequeña cueva, sonrió, ahí estarían muy a gusto.
-¡Hey Yoh!-le llamo-Aquí estaremos bien-dijo y le hizo una seña para que se acercara.
Él sonrió y camino hacía ella, al cabo de unos minutos, ambos se encontraban adentro muy juntos y tratando de calentarse con una fogata demasiado improvisada, la tormenta de nieve comenzó a caer con fuerza.
-¿Por qué tenías las mejillas tan rojas?-le preguntó él después de haberle dado un beso.
-Porque es la manera de alertarme, cuando se ponen rojas quiere decir que vendrá una fuerte ventisca-contesto sonriendo y volviéndolo a besar.
Se sentía tan bien, sus bocas bailando un suave compás sus manos acariciando cada parte que la muy abrigadora ropa les permitía, dejándose guiar más por sus instintos que por su razón.
La nieve comenzó a tornarse aún más violenta, tanto como los besos dentro de la cueva, los ánimos comenzaban a calentarse.
Se separaron mirándose a los ojos, él se notaba que trataba de controlarse, tanto que ella no deseaba otra cosa más que continuar.
Jamás habían llegado tan lejos, en los meses que les siguieron de su primer beso, solo a eso se dedicaron, a besarse y abrazarse, nunca habían dejado que pasara de ahí, pero esa tarde...
Hiromi se empinó hacía un confundido Yoh que correspondió con igual apasionamiento aquel beso que la chica le daba, suavemente la recostó en el suelo de piedra, por el contrario de aquella vez en el lago, la voz quejumbrosa de su mente no le grito, no le hablo, solamente cambio de táctica.
Por un extraño motivo, el recuerdo de la primera vez que Anna y él se entregaron por completo apareció en su mente, cegándolo por completo.
**Flash Back**
Habitación en penumbras, ella sentada sobre el futón y él a su lado, acababan de casarse y en su primera noche juntos un silencio incomodo predominaba, no sabían que decirse y como reaccionar ante la nueva situación en la que se encontraban.
-Yo-dijeron al unísono mientras se giraban para quedar frente a frente, y a pesar de la oscuridad ambos pudieron notar su sonrojo.
-Pues yo-comenzó Yoh tragando saliva-digo, ya estamos casados.
-Sí-dijo ella con la voz apagada, esperaba que él dijera más que eso.
-Anna yo... -dudo un momento-no sé, perdóname, pero no sé como decirte que yo te amo-dijo de pronto y de forma natural.
Se sorprendió de sus palabras lo había dicho y no supo ni como, la miro, Anna lo miraba confundida con los ojos como platos y la boca entreabierta.
Se veía tan encantadora, su boca lo incitaba y sin saber como, cuando y porque, él se hallaba besándola con dulzura, un beso un tanto torpe pero cargado de muchos sentimientos, al separarse Yoh noto que aún tenía los ojos cerrados y una sonrisa coronaba su boca, una vez más la beso, esta vez atrayéndola hacía él y aprisionándola en un abrazo, ella atrajo su cara colocando sus manos en sus mejillas y fue ella la que profundizo el beso, abrió su boca y dejo pasar a la de Yoh, sus manos corrían sin parar por todo su cuerpo, tocando, desabrochando todo.
Se separaron solo para perderse en los ojos del otro y volver a fundirse en un desesperado beso, la boca de Yoh bajo hasta su cuello, probando y saboreando aquella delicada piel.
****
La piel que ahora besaba tenía un sabor distinto, sabía a nada, no le remitía nada.
****
Aspiraba su suave y penetrante aroma, era tan cálido, sus cabellos rubios y sedosos enredados en sus manos, su corazón latiendo con violencia mientras desataba el cordón de la yukata, las manos de ella acariciando su torso desnudo debido a que ella ya le había quitado su yukata, las sentía tan suaves, deliciosos escalofríos recorrían su cuerpo.
****
Pero ahora era distinto, no sentía esa calidez y se pregunto en donde estaba ese aroma, en donde habían quedado esos cabellos y esas manos tan nerviosas y ansiosas que lo acariciaron aquella vez, el corazón no le latía con furia y no había rastro alguno de escalofríos en su piel.
****
Sentía sus manos acariciando su cabello, abrazándolo con fuerza, sonidos de placer provenientes de ella lo estaban haciendo enloquecer, amaba a esa mujer, la amaba como a nada en el mundo, su Anna, ahora sería suya, al fin... Entre entrecortados gemidos escucho...
**Fin Flash back**
-Te amo Yoh.
Esas palabras sonaron distantes, diferentes a aquellas que había escuchado por primera vez, esa voz no era tan suave y melodiosa como la que había escuchado aquella hermosa noche.
Volvió súbitamente a la realidad, no estaba en la pensión, se encontraba en aquella fría cueva, pronto recordó todo, estaba con Hiromi, ambos se encontraban con las ropas mal puestas, Yoh se separo de ella con brusquedad.
-¿Yoh?, ¿Te sucede algo?-le preguntó ella un tanto frustrada en tanto se incorporaba
Él no contestó, la observaba con atención, como si la examinara.
-¿Pasa algo malo?-volvió a preguntar.
-No, nada-contesto retraído.
Ella sonrió y volvió atraerlo hacía ella, dispuesta a terminar lo que habían comenzado.
Al principio él se dejó llevar pero al cabo de unos instantes volvió a separarse de ella con violencia.
-No, No puedo-dijo de pronto, se incorporo y quedo de pie frente a ella.
-Pero, ¿por qué?-le pregunto confundida-Pensé que si te decía que te amaba, tú...
-No entiendes, no sabes igual-le interrumpió.
-¿Qué?-casi grito mientras en su rostro un gesto de disgusto aparecía.
-Que te falta algo-contesto caminando de un lado a otro acomodándose la ropa y abrochando su abrigo.
-No te entiendo Yoh, ¿Cómo que me falta algo?-dijo con furia y con indignación.
-Sí, sí Hiromi, te falta ese dulce sabor-tomo el pañuelo de Anna y lo olió- tu aroma no es cálido y excitante, tus manos no recorren mi piel igual, yo, no sé, perdóname-dijo con pesar antes de salir corriendo de allí.
-¡Yoh!, ¡Yoh!-escucho que le gritaba mientras se perdía entre nieve y oscuridad.
Corrió lo más rápido que podía, no sabía lo que estaba haciendo, no sabía porque aquel recuerdo apareció de pronto, confundiéndolo, llenándolo de angustia, no sabía hacía donde se dirigía, tan solo quería correr, desaparecer, no quería saber nada de nadie, de nada, miro con rencor el pañuelo rojo, ni siquiera sabía porque había cargado con él, habiéndolo dejado, podría despedazarlo, pero no podía y no sabía porque.
La nieve dejó de caer, el paisaje se despejó y el cansancio le llegó, se detuvo solo para tomar aire y tratar de tranquilizarse, quería despejar su mente, quería una respuesta, una señal y al levantar su rostro...
Hokaydo apareció.
CONTINUARA...
Notas: Un poco extraño el flash back pero verán, dentro de este, Yoh compara su noche con Anna con lo que esta sucediendo con Hiromi, de ahí en fuera creo que no hay nada que aclarar, bueno sí, no me maten, después de todo nada paso, espero les guste este capitulo, ahora a contestar sus reviews:
Padme Gilraen: Ahora sí tu muñeco quedara totalmente destrozado, pero espero que no le hayas hecho tanto daño, ya que Yoh se arrepintió, así que espero te guste el capitulo, oye, me has dejado sorprendida, no solo te casas sino que ahora dominaras el mundo, esta bien amiga, esperemos que lo logres y en tu mundo de perros negros y esclavitud, por favor me tengas piedad.
Hikari yuuko: Ahora sabes que sucedió con Yoh en ese tiempo y claro que se enterara, y de que forma, vaya, de tan solo imaginarme la escena una malévola sonrisa (parecida a la del grinch) aparece en mi rostro, claro que saldrá Horo Horo, ahora que Yoh ya llegó a Hokaydo él será una pieza clave, en cuanto a lo de Ren, no lo tenía en mente pero tienes razón no lo puedo dejar solito, tu idea no es mala, pero lo pensare, Ah, entonces tu si te unes a la quema, esta bien.
Kari Asakura: Por desgracia no sucederá así, Anna no se dejara vencer por la gratitud, aunque a veces parezca que sí, y claro que Yoh sufrirá, tan lento y tan punzante como pueda, sí es un irresponsable, pero, ¡hombres!, todos son casi iguales.
Chareik: Tú gasolina es muy bien recibida, de hecho una amiga de la escuela quiere llevar dinamitas para hacerla estallar, me alegra saber que te gusta la historia y claro que Anna será dura, muy dura, lo0 castigara, lo hará sufrir y le dará donde mas le duele, lo juro solemnemente (Beu pone su mano en el pecho de lado del corazón) palabra de Boy Scaut.
Xris: Amiga que bueno que encontraste el fic, espero hacerte ahora doblemente feliz, aunque tal vez Yoh te habrá hecho enojar, pero como veras la dejo ahí en medio de la nada, creo que ya se le esta haciendo costumbre, en fin, la venganza se acerca, lentamente pero se acerca, JAJAJAJA, dios hasta me di miedo, cuídate mucho.
Lady Kaoru: Vaya es bueno saber que hay otra más que se ha unido a la quema, bueno en tu pregunta hacía lo de Ren, lo sabrás cuando llegue el momento, verdad que ella no puede quedarse con Ren, Si lo que no queremos es que Yoh tenga motivos para replicar, así que Anna no será como su querido maridito y eso del Tai Chi es buena idea, tal vez yo también tome un curso, a veces yo misma me altero cuando escribo JAJA, cuídate.
Niki: Aquí esta el otro capitulo, sí a Hana le agrada Ren, después de todo el ayuda mucho a su mamá, y la venganza se acerca, e Yoh caerá.
Anna_ángel 112: No prometo un RenxAnna, ya que no lo veo correcto, no quiero darle motivos a Yoh para reprocharle a Anna, no eso no, y el final pues sí será feliz.
Alesita-san: Gracias, y como dije no lo prometo para no darle motivos a Yoh, pero puede que lo piense más y tal vez, en un arranque de locura... pero no prometo nada, en cuanto a lo de Anna, ella esta embarazada y por lo tanto sensible y sentimental y un tanto cursi, eso sí, al nacer Hana, ella volverá a su temperamento frío con algunos toques de dulzura.
Fenryr: Por lo que veo discernimos en cuanto a justicia, tal vez tu molestia resida en que Anna esta embarazada y ella huyó y de no haber sido así, tal vez se le podría perdonar, de todas formas a mí también me gustaría debatir ese asunto, un poco confuso en mi caso pero sería muy interesante y el negocio si florece, no soy tan mala con Anna.
Annita Kyôyama fcc: Pues ya vez que no solo fue un beso y claro que Anna lo atormentara, castigara y martirizara, de hecho el poder femenino se le otorgara para hacerse justicia, JAJAJA (Creo que debo de ver menos Televisión)
Ahora me despido gracias por sus comentarios y nos vemos en próximo capitulo, en el cual, a propósito nacerá Hana, chao.