Capitulo 23: Sentimientos.

-¡¿Entonces Yoh ya regreso?!-preguntó entre jadeos un hombre rubio que corría con rapidez.

-Sí, y pues la bienvenida no ha sido muy grata-contesto otro hombre que corría a la par con el otro.

-Lo imagino-fue lo ultimo que dijo antes de apresurar el paso.

Al cabo de unos diez minutos se encontraban ya frente a la casa de los Asakura, por fuera la quietud reinaba, ambos hombres se adentraron en la casa, sabiendo que adentro la tempestad apenas acababa de comenzar.

-¡Suéltame!, ¡Que parte de que me sueltes no entiendes!-gritaba frenéticamente en tanto pataleaba e intentaba safarse de los fuertes brazos que la mantenían sujeta.

Abrió la puerta de la habitación y se introdujo a ella con la rubia en brazos con dificultad, la soltó y se apresuro a cerrar la puerta.

Anna en cuanto se vio suelta se abalanzo hacía la puerta, teniendo a Ren nuevamente como su obstáculo.

-¡Déjame salir!-bufo-¡Voy a hacerle pagar a ese infeliz todo, todo lo que me ha hecho!

-Tranquilízate Anna, que no ves que te hará daño-repuso con serenidad.

-¡Y como quieres que calme si me esta llevando el demonio!-le dio una bofetada-Ahora déjame pasar.

-¡No!, ¡No lo haré!, Tú no vas a mancharte las manos con él, puedes insultarme todo lo que quieras, golpearme sin piedad sí quieres, pero ¡No te dejare por nada del mundo salir!

Golpes suaves resonaron en la puerta.

-¿¡Quien!?-dijo molesto Ren.

-Disculpen, soy yo, Tamao, solo quería avisarle que el joven Ryu ha llegado con el señor Fausto-escucho que una temerosa voz explicaba.

Ren dio un suspiro, como pudo separo a Anna de la puerta y la entreabrió solo lo suficiente para poder salir.

-Quédate con ella-le indico en cuanto salió-¿Ya esta bien?-pregunto mientras miraba al pequeño Hana que dormía.

Tamao asintió, Ren sonrió y beso una de las manitas del pequeño.

-Ahora vuelvo.

La chica junto con el pequeño entraron en la habitación, Anna se hallaba sentada sobre un sofá que estaba en una de las esquinas de la habitación, sus ojos así como su rostro se hallaban rojos, había dejado de luchar, sabía que era inútil seguir resistiéndose, su mirada se hallaba perdida.

Tamao se acerco a ella y con suavidad coloco su mano sobre el hombro de la joven y rubia mujer.

-Doña Anna-le llamo.

La chica volvió el rostro, aún con la mirada disipada y llena de ira.

-Creo que alguien desea estar con usted-prosiguió la muchacha y con mucho cuidado le enseño a Hana.

Anna pareció reaccionar de pronto, de sus ojos todo coraje se esfumo y ternura apareció, extendió sus brazos de manera ansiosa y le quito al bebé de las manos, al mirarlo noto las marcas que las lagrimas habían dejado en sus mejillas, levanto la cara e interrogo a Tamao con la mirada.

-Hana se hallaba en la habitación, en donde usted y el joven Yoh se encontraban-explico.

Anna se llevo una de sus manos a la boca asustada, pudo haberle hecho algo.

-Pero no se preocupe-prosiguió Tamao-Amidamaru lo protegió en todo momento, tan solo se asusto.

-Hana, perdóname hijo, otra vez estuve a punto de dañarte y no me di cuenta, no medí mi capacidad, ni mi coraje-beso la frente del niño-pero te prometo que no lo haré nunca más, tratare de controlarme en tu presencia, ahora que tu padre ha vuelto.

Tamao no dijo nada y miro en dirección a la puerta, ella también sentía mucha aversión por el hombre que había regresado.

En cuanto entraron subieron con prisa rumbo a las habitaciones, recorrieron los pasillos hasta encontrar la habitación destrozada, en el centro de ella, Yoh se hallaba inconsciente, había perdido un poco de sangre y la conciencia no había soportado el golpe, Amidamaru se encontraba a su lado, incapaz de tocarle, de curarle, se limitaba a contemplarlo en medio de una atmósfera triste y melancólica.

Fausto se dirigió hacía él apresuradamente, inmediatamente su esposa Eliza apareció con el maletín médico en sus manos.

Lo abrió y comenzó a sacar las vendas y el alcohol, su semblante se hallaba preocupado, abrió el antiséptico y tomo un poco de algodón.

-¡No!-escucho que una potente voz ordenaba.

Volvió el rostro y se encontró con Ren, que acababa de entrar en la habitación.

-Pero ¿qué estas diciendo?-pregunto Ryu.

-He dicho que no, él-dirigió una mirada despectiva al cuerpo desfallecido de Yoh-puede esperar.

-No entiendo-articulo el galeno.

-¡Yoh puede esperar!, ¡Anna se halla muy mal y necesita un calmante!, ¡Ahora!-puso énfasis en ahora.

-Claro, claro, debe hallarse muy mal-dijo Fausto como entendiendo, dirigió su mirada a su esposa-Eliza, ¿podrías ir i ponerle ese tranquilizante a Anna por favor?

Pero antes de que el espíritu pudiera asentir, Ren comenzó a gritar.

-¡No quiero que envíes a tu esposa!, ¡Tú, tú eres el que debe de ir!

-Ren, entiende-Fausto comenzaba a perder la paciencia-Yoh me necesita más ahora.

-¡No es así!, ¡Anna necesita más atención!, ¡Te pido, más bien TE EXIJO, que vayas y le coloques tú ese calmante!

-¡Que no te das cuenta que Yoh puede morir si no lo atiendo!-grito con exasperación.

-¡Y no ves tú que Anna también esta herida!-mintió.

Fausto se quedó callado por unos instantes.

-Querida, encárgate tú de curarlo, yo debo de revisar también a Anna-le indico a su esposa.

-No te preocupes Fausto yo le ayudare a curar a Don Yoh-dijo Ryu.

El doctor les sonrió y salió tras Ren en dirección a la habitación de Anna.

La luna roja y en cuarto menguante apareció en el cielo estrellado y dos hombres jóvenes caminaban por las calles de Funbari en medio de la oscuridad y la tranquilidad.

Caminaban en silencio, con los rostros serenos y el viento acariciándoles los cabellos y el alma, no tenían nada que decirse, habían elegido sus caminos días atrás y ambos sabían cual era su destino al llegar a la pensión.

Hao sonreía, con esa sonrisa cínica que siempre tenía, le deleitaba imaginar en que estado encontraría a su hermano, tal vez arañado, golpeado o quizás muerto, aunque sabía que la ultima opción era improbable, tenía la esperanza de que así fuera, así, él regresaría al más allá e Yoh con él y ya no estaría solo en la eternidad.

Horo Horo comenzó a silbar una canción, aquella que siempre lo hacía sentirse bien, además de que deseaba romper con ese incomodo silencio que los acompañaba.

-¿Crees que todo saldrá bien?-pregunto de pronto Hao.

-Esa es la frase que Yoh siempre dice cuando algo no marcha bien-contesto sin ganas y continuo silbando.

-Entonces debe ser verdad-Horo lo miro confundido, Hao desvió la mirada- Mira, ya hemos llegado-dijo entre un gran suspiro.

Fausto entró rápidamente en la habitación de Anna y paro en seco al encontrarla, sentada con su hijo en brazos, totalmente tranquila y sin ninguna herida.

Dirigió una mirada dura y fría a Ren, quien se encogió de hombros y puso cara de "yo no sé nada"

-Veo que te hayas bien Anna-dijo acercándose a ella.

-Sí, solo fueron mis nervios, pero ya estoy bien-dijo con serenidad-¿Cómo esta Yoh?-no pudo evitar hacer esa pregunta.

-Él esta bien, Ryu y Eliza lo están curando, se pondrá bien-contesto con una sonrisa al descubrir el porque de la preocupación de la rubia-Sé que este no es el momento Anna, pero ya sabes que harás con él.

-Sí, siempre lo he sabido, no he hecho otra cosa más que pensar en lo que haría en cuanto regresara-hablaba con amargura.

-¿Y que es?-pregunto con curiosidad Ren, sus brazos se hallaban cruzados y su mirada se encontraba anhelante.

-Tamao-llamo la joven-Ve a la habitación que esta a lado de la de Hana y arréglala, en cuanto este lista pídele a Ryu que lleve ahí a Yoh.

-Yo mismo me encargare de que todo se cumpla-Fausto hablaba con confianza y con una sonrisa-Vamos Tamao.

En contra de su voluntad y con desgano la joven salió detrás del doctor y con la idea de arreglar la habitación.

Manta se hallaba sentado en la entrada de la casa, sentimientos encontrados lo sacudían, su mejor amigo había regresado y había vuelto con la misma grandeza y esa aura llena de paz que cuando lo conoció, el tiempo no había pasado por el rostro de Yoh, ningún rastro de penas, de angustias, de dolor se asomaban en él, parecía que había disfrutado con mucho gusto el viaje.

Un sentimiento profundo se apodero de él, por mucho que apreciara a Yoh, no podía olvidad todo el daño que le había causado a una mujer que había confiado enteramente en él, su hijo, ese niño se había visto desprovisto de un padre, tal y como había sucedido con Anna y con él mismo.

Porque el que un padre se vaya por largas temporadas porque los negocios son más importantes habían marcado su vida y su alma.

No apoyaría a Yoh, eso ya estaba decidido.

Dentro de la oscuridad dos siluetas alcanzó a vislumbrar.

-¡Estas loca!-exclamo Ren en cuanto se quedo a solas con Anna-¡Cómo que le darás una habitación!

-Es lo correcto-respondió con seriedad Anna.

-¡No, lo correcto es sacarlo de aquí a patadas!

La joven negó con la cabeza.

-Esta es la casa de su familia-explico- SU casa, por lo tanto yo no lo puedo correr.

CONTINUARA...

Notas: Espero les haya gustado, me quedo más largo que los demás y eso que lo iba a hacer corto.

Estoy nerviosa, mañana tengo dos presentaciones de obras diferentes y estoy entre ansiosa y nerviosa, pero eso es otra cosa, así que no los aburro con mis tonterías y respondo sus reviews:

Keiko Asakura: ¡Hola amiga!, antes que nada quiero decirte que me alegra mucho que te haya gustado el fic que te dedique, volviendo a este, No solo Manta y Tamao le mostraran indiferencio sino otro u otros más, aunque Yoh tendrá la lealtad incondicional de otros, y yo también quería matar a Yoh. Cuídate mucho, te mando un abrazo.

Viosil Uab: Espero que en este capitulo te haya quedado clara la postura de Manta, en cuanto al dramatismo llegue a pensar que había exagerado, pero luego lo pensé más claramente y me pareció que cualquiera reaccionaría así (suponiendo que tengamos el mismo carácter de Anna) y pues ya marque los grupitos de los RENvolucionarios como los llamas y los YOHnservadores (este se le ocurrió a mi hermano), cuídate mucho y saludos y buenos deseos a ti y a tu familia.

Hikari yuuko: Lo que suceda desde aquí será una gran bomba que explotara con la llegada de Hiromi, esa mujer traerá cosas muy desagradables bajo el brazo, cosas que cambiaran todo, de hecho todo cambiara desde este momento, en cuanto a Hana, el pequeño reaccionara como cualquier bebé lo haría ante un desconocido que aparece de la nada y llena de gritos su espacio vital.

Padme Gilraen: Pues tal vez se lo diga, ya que es lo más lógico y natural, en cuanto al préstamo, SÍ, por favor, ya he tenido que hipotecar la casa de las barbies de mi hermana para poder pagarle a Hao, ¡cobra millones! Y pues ya continué, espero te haya gustado, cuídate mucho amiga. Chareik: Era lo que se tenía que hacer, Anna reacciono de acuerdo a su carácter y como el dolor se lo dicto, además Yoh tenía que comenzar a sufrir físicamente primero, para pasar a la parte más cruel de todas, que es el sufrimiento emocional, en cuanto a lo de si Hana le dirá a Ren papá, eso es a mí parecer algo que se nota a leguas, sería lo lógico ¿no lo crees?

Xris: Te he de confesar que cuando lo escribí también actuaba cada reacción, claro avente cosas de plástico y mi objetivo era la pared, pero deseaba que de verdad se sintiera que Anna descargaba todo su dolor y veo que quedo bien, y pues el verdadero dolor apenas va a comenzar para Yoh, cuídate mucho.

Hercy Tao: Muchas gracias por todo lo que me dices, en realidad esa era mi intención con respecto a Anna, y es un alivio para mí ver que no la puse como una loca, y pues escribo por hobbie, en realidad lo mismo es actuar, esa es mi verdadera pasión, y esa carrera me ha ayudado mucho para poder plasmar todos esos sentimientos, y espero que te haya gustado este capítulo.

Yukari: Tienes razón, Anna debe tomar conciencia, pero mi objetivo era eso, que Hana lo viera todo para poder tener una reacción para con Yoh, además Anna ya no pensaba con la cabeza sino con el corazón y cuando uno hace eso, pues lo demás no importa, aunque después de esto ya no volverá Hana a presenciar una escena como esta, Anna e Yoh discutirán lejos de él, lo prometo, en cuanto a Ren e Yoh, eso se comienza a ver desde este capitulo, aunque el verdadero conflicto vendrá después y será muy interesante y divertido.

Lady Kaoru: De hecho nadie esperaba esa reacción por parte de Anna y a todos les pareció la más lógica, y es que eso es lo que yo hubiera hecho sí un infeliz se fuera dejándome sola con un bebé y después regresara y cínicamente quisiera que todo fuera miel sobre hojuelas, en cuanto a Tamao, su reacción fue a causa del desengaño. Espero te haya gustado el capitulo, cuídate mucho amiga.

Minamo: Sí se lo merecía, pero no podía matarlo porque adiós historia, en realidad no, podría haber tomado otro rumbo, la culpa, yo que sé, pero no, eso mejor en otro fic, y este que siga su curso, y esta Tamao ya cambio, la gente suele cambiar con el tiempo y con las desilusiones y el que Hana viera todo eso es un plan con maña.

Jacqueline: Lamentablemente, no puedo actualizar demasiado rápido, el fin de semestre se acerca y tengo muchos trabajos escolares en puerta, aún así, sí gustas y en caso de que revises tu correo en un café Internet, yo podría enviarte los capítulos por ese medio, claro sí tu quieres.

Keiko sk: Muchisisimas Gracias.

Paz-ita: Claro que Ren hará una buena guerra, sería tonto que de buenas a primeras le dejara el camino libre, además él ha hecho mucho por Anna y además la ama a ella y a su hijo y lo mas indicado es que luche hasta que ya no pueda más.

Anna Kobayashi: Muchas gracias, pero de verdad lo mío es actuar, tal vez solo llegue a publicar un libro de cuentos pero eso esta en veremos y solo lo haría por la constante insistencia de mi mamá y mi hermano, y ya leí la vida es sueño, es genial, reflexione muchas cosas con ese libro y los monólogos de Segismundo estaban muy bien escritos, de hecho toda la obra esta muy bien, el lenguaje poético en verso es maravilloso y las metáforas que suele dar son excepcionales, en cuanto a tu pregunta, eso lo veras en el fic, no puedo adelantar nada, bueno, solo una pista, Anna nunca confundirá sus sentimientos, ella sabe a quien ama y mantendrá ese sentimiento hasta el final.

Leticia: Espero que tu intriga haya desaparecido con este capitulo, que también espero haya cautivado tu atención.

Solcito: De hecho ese era mi objetivo, que sintieran ese dolor.

Idgie Jones: De hecho eso es lo que me gusta hacer, sacar el lado oscuro de los personajes y desarrollarlos desde otros puntos, eso mismo sucede con Hao, y creo que es lo que hace interesante este fic, en cuanto a Manta, él al igual que Tamao están desilusionados, y la gente con las decepciones cambia su forma de ver las cosas, además que él presiente que ese viaje fue un verdadero viaje de placer.

May sk: Vaya, eres la primera que siente una compasión por Yoh (yo en mi interior a veces siento lo mismo), además fue un error y errar es de humanos, pero el dolor causado fue mucho y hay que cobrarlo, a toda acción una reacción y eso sucedió con Anna, Yoh debe darse cuenta de su error y para eso hay que hacerle sufrir, aunque no te preocupes tu odio hacía él retornara, lo prometo.

Ahora sí, los dejo, tengo que ensayar y repasar mis líneas, les dejo esta frase que me gusto mucho de La vida es sueño de Calderón de la barca: "Que toda la vida es sueño, y los sueños, sueños son"

Yo los veo en el próximo capitulo, cuídense mucho y muchas gracias por sus reviews, chao.