Engouements
Por Nellie
Capitulo 2: Insecte
"Hace ya 2 años que regresé, que estuve aquí… en este mismo lugar. No sé ni siquiera como comenzó todo, pero fueron los momentos más bellos de mi vida, por primera vez me pude sentir vivo y además sentir la calidez de un amor puro e incondicional. Me sentía tan feliz y tan afortunado…
Este aroma, el cerezo esta en flor, es Abril, y el mes merece muchas sonrisas, me siento un poco cansado, además de un poco asustado, no sé lo que últimamente me pasa, estoy tan distraído que tengo cierto temor de equivocarme en mi trabajo. Estos pensamientos no me llevaran a nada, tal vez sea algo pasajero, pues al fin y al cabo, el destino esta escrito… "
- ¿Doctor Chiba? – se escucho una voz suave que interrumpía a un hombre bastante atractivo…
- ¿Eh? Ah si, Continúa diciéndome Areku – le contesto Chiba de una forma distraída, tomo un bolígrafo y una hoja de papel, oyendo atentamente a la enfermera que seguía dando explicaciones.
- ¿Y bien? – pregunto esta al terminar. Mamoru Chiba es un doctor especializado en pediatría. Esa mañana había arribado un niño con una fiebre inmensa, le había dado una gripa bastante fuerte, pero afortunadamente no era grave. La enfermera llevaría a la madre la receta del doctor, por eso le explicaba los ultimas observaciones que se obtuvieron del niño. Salió de la habitación, y el doctor Chiba se quedo nuevamente sumido en sus pensamientos. Así pasaron varios minutos, en los cuales revisaba papeles para despejar su mente, era viernes y los viernes no daba consultas después de las 5:00 p.m. se puso de pie, colgando su bata, en el perchero que se encontraba cerca de la puerta, y poniéndose su saco, salió de su consultorio, dio las buenas tardes a todos los presentes, y se encamino al estacionamiento…
"Es temprano, y hoy me toca cenar con Usagi. No me apetece ver a nadie, he estado demasiado ocupado con todo el trabajo que me han dado… además su tema de conversación será el mismo, 'nuestra boda'. Debería sentirme, feliz, dichoso, como antes me sentía al verla, mi corazón se emocionaba tanto, todo mi ser vibraba con su semblante, con su belleza. Esa belleza sigue intacta, y sé que seguirá siendo así, pero ¿Por qué mi corazón ya no vibra de la misma forma que lo hacia al verla?...
¿Qué demonios estoy pensando?, todo sigue igual que siempre, no puedo dejar perder todo lo que tenemos, lo que hemos construido. Mas sin embargo estoy tan… vacío. No siento, ni tengo deseos de nada, sólo tengo algo claro, que no quiero interrumpir mi vida laboral, la que me costo tanto trabajo, y sacrificio. Desde que me quede sólo mi único objetivo era ser un Doctor, siempre lo fue, por eso estudiaba tanto, todas las noches, para poder ser lo que ahora soy… y terminarlo, por cumplir un destino…
No debo ser egoísta eso lo sé y… vaya ya llegue."
Mamoru Chiba se detiene enfrente de un automóvil deportivo, sube a este y maneja sin rumbo, parece que anda indeciso acerca de su propia vida, su semblante es tan… ido. De repente se detiene abruptamente, da unas cuantas vueltas y llega justo a un parque. Se sienta en una banca y observa a la gente. Se ve que es un hombre bastante serio, contempla a los demás, y sobre todo observa a los niños. Desde siempre fue una de sus grandes pasiones, los niños, pues observaba su felicidad infinita, además de que desde esa edad… estuvo solo. Esa soledad que nos hace encerrarnos en nosotros mismos y además volvernos egoístas. Pues nos tragamos nuestro dolor mirando siempre hacia delante, nuestro futuro.
"No temo a casarme, no le temo a ella. Pues siempre ha significado para mi, todo en esta vida, y además me llena de tanta paz… Pero es que no quiero equivocarme, no quiero que con el paso de los años lo único que nos una sean nuestros hijos, y no un amor apasionado, vivo que me haga despertarme día tras día lleno de energía. Quisiera asegurar que al menos nuestro amor sigue tan vivo y eterno como tantos años ha permanecido… ¿Pero hoy?... hoy no siento nada, mas bien no quiero sentir nada.
Me siento raro, deprimido, triste, vacío, no se como llamarle a este estado, pero no puedo simplemente sentirme mejor, desde que oí la noticia de la reunión para anunciar nuestro compromiso, además de empezar a planear nuestro hogar, donde viviremos eternamente… eternamente. Eso es lo que me he estado preguntando… ¿Seré feliz viviendo eternamente?, Todos tenemos un ciclo, la medicina lo enseña, ¿Inmortalidad?...
Son tantos pensamientos abrumadores, que no tengo ganas hoy de estar aquí pensando en el futuro de mi vida, que al fin y al cabo esta arreglado… ya no tengo curiosidad porque va a suceder… pues ya lo se, mi futuro esta tan escrito que diga lo que diga… no cambiara en lo absoluto. Es mejor dejar de pensar en esto porque si busco encontrare algo que me desagradara… lo sé."
- ¡Doctor Chiba! – le grito una mujer bastante hermosa, sacándolo de su ensimismamiento.
- ¿Arashi? – pregunto Chiba al ver a aquella mujer de cabellos dorados.
- Claro, ¿Qué hace tan solo?, es viernes y por lo regular usted siempre esta con su novia. ¿Acaso tuvo una emergencia en el hospital? – Arashi, como Chiba la acababa de llamar, tenia unos ojos verde agua, hermosos, y muy calidos. Ella se sentó al lado de el en la banca.
- Cenaremos como siempre, pero hoy quería estar solo… - le contesto con una sonrisa
- Lo siento, y yo aquí interrumpiéndolo, solo quería saludarlo – sonrió Arashi tímidamente, pues al parecer se sintió incomoda con aquella respuesta.
- No, no te preocupes. De todas formas ya iba a retirarme, no pude salir a comer, y tengo ya bastante hambre, ¿Gustas acompañarme? – pregunto Chiba con un tono de lo mas normal.
- Claro, sabe usted que nunca puedo negárselo – sonrió esta vez con verdadero entusiasmo, Arashi, los dos se pusieron en pie, y comenzaron a caminar. Parecía que se conocían desde hace bastante tiempo, porque los dos se divertían mucho, o al menos eso reflejaba el semblante tan feliz que tenia el doctor Chiba. Subieron a su automóvil y la llevo a comer hamburguesas.
- Hace mucho que no comía esto… - sonrió Chiba melancólicamente
- ¿Perdón?, pero si usted me dice que su novia es fanática de este tipo de comida – le dijo Arashi mientras tomaba un poco de refresco.
- ¿Sabes? Desde que nos vemos, siempre es en un restaurante elegante, con comida… demasiado cara y bastante desabrida. Y pues cuando salgo a comer yo solo, voy al restaurante cerca del hospital… ya sabes. Por eso te digo que desde hace mucho que no comía una hamburguesa, olvidaba lo rico que es todo esto – contesto Chiba mirando a su alrededor, lleno de gente joven y niños emocionados por los juegos del restaurante.
- Pues que horrible, por mi parte me gusta lo sencillo y rápido, no soy muy partidaria de lo glamoroso. Pero en fin, ¿Por qué últimamente anda usted tan distraído?, lo he estado observando en el hospital, y lo veo distraído, preocupado. ¿Algo lo abruma? – pregunto tímidamente, Arashi Natsu era una pasante, estaba estudiando su especialidad, odontología, y había conocido a Mamoru Chiba cuando este comenzaba, ella era pasante y estaba en emergencias, y él era el doctor de guardia. Desde entonces habían sido amigos, desde hace 1 y medio. Siempre le había platicado de su novia, de su vida, de una manera superficial…
- No es nada, no te preocupes – le dijo sonriendo fingidamente
- No te creo – dijo esta secamente
- ¿Por qué? – le pregunto extrañado Mamoru Chiba
- Porque tu eres serio, pero concentrado en tu trabajo, al cien. Siempre ha sido así, tú casi nunca te distraes. Pero entiendo que hay cosas, no puedes decirme, sólo quiero que sepas que soy tu amiga y estoy aquí, para ti – contesto Arashi, sonriéndole calidamente
- Arashi… nunca puedo mentirte… y a lo mejor me hace bien hablar con alguien que no la conozca… - murmuro Chiba
- ¿A tu novia? – pregunto tímidamente Arashi
- Si… es que veras, las cosas van demasiado rápido, este fin de semana nos comprometeremos, y me inquieta, que la seguridad que tal vez haya hoy, no este mañana. No sé si le tengo temor al matrimonio, pero es que no quiero que las cosas se precipiten tanto… y, sí, deseo casarme, pero no tan… pronto. No quiero llegar a ser egoísta… pero… - contesto Chiba pensando que lo aliviaría decirle a alguien su punto de vista del matrimonio, o mejor dicho de ese matrimonio. Arashi, se quedo pensativa, ella notaba en lo que le decía Chiba, que quería poner mil pretextos para no casarse… pero ¿Por qué?
- Me parece que esos pensamientos te conciernen a ti, no es que quiera ser grosera, pero Mamoru sólo tu sabes que hacer. Por mi parte, yo digo que todo es mejor, si estas feliz. – y le sonrió calidamente, Chiba le contesto con una sonrisa rápida y fingida. Terminaron de comer, Chiba dejo a Natsu en el hospital y el se dirigió a su departamento, serian alrededor de las 7, porque empezaba a anochecer. Llego y lo primero que hizo fue apretar el botón de su contestadota, y se oyó una voz dulce…
- Mamoru ¿Iremos a algún lado?, háblame a las 7, porque posiblemente no me encuentres antes, besos, Usagi – Chiba sonrió amargamente, vio su reloj y faltaban sólo cinco minutos para que fueran las 7, así que tomo su teléfono y marco el mismo numero de siempre… de toda la vida.
- ¿Hola? – contesto una voz del otro lado del teléfono
- Buenas noches, ¿Se encuentra Usagi? – pregunto Chiba pasando una mano por su cara… cansancio.
- Si, en un momento lo comunico. – pasaron 3 minutos, en los cuales Chiba miraba con mucha atención una foto, en esa foto estaba el y una hermosa rubia de ojos azules preciosos.
- ¿Mamoru? Por fin, ¿A que hora pasas por mi? – pregunto la voz entusiasta y alegre.
- Hola Usagi, pues en media hora. ¿Te parece? – dijo fingiendo un tono entusiasta…
- ¡Claro!, Nos vemos, ¡Mamoru Te amo! – y colgó. Chiba se puso en pie, su corazón se sintió tan pesado y a la vez tan… frío. Prendió las luces de su departamento, se dirigió a su habitación, al baño y ahí abrió la regadera. Con el mismo semblante de antes… ido.
"Estoy hecho un mar de confusiones, quisiera saber qué me esta pasando, y qué estoy sintiendo. No tengo muchas ganas de verla, preferiría estar solo, pero es una obligación… ¿Desde cuando dejo de ser un deseo?, Debo dejar de pensar en esto, y ¿Por qué me contesto eso Arashi?, No se que es lo mejor, y no sé si soy feliz o infeliz. Sólo no quiero dejar de hacer lo que más me gusta, mi profesión, ¿Acaso es eso tan difícil de entender?...."
Mamoru Chiba sale de la ducha y se viste con un traje elegante, toma sus llaves, su cartera y se dirige la casa de Usagi Tsukino, espera en la sala y esta baja… bella comos siempre. Ella lo saluda con un beso en la mejilla y el le abre la puerta de su automóvil, se dirigen a un restaurante bastante lujoso. La noche cae en todo su esplendor, y se ve a lo lejos nagareboshis…
"¿Estrellas fugaces?... pediré un deseo. Aclarar que es lo que quiero hacer y tengo que hacer…"
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Notas:
Termine a Mamoru Chiba, no sé como me habra quedado y gracias por sus reviews, no desesperen falta aun mucho por el encuentro Usagi/Seiya, ahm "nsecte"significa Insecto o.O!, bueno dejen reviews, ja ne.
