Atención: Este fic contendrá sexo, drogas y movidas de adolescentes en alguno de sus capítulos. Si tu corazón es débil o si eres demasiado impresionable y cerrado al mundo exterior no lo leas, si por el contrario quieres ver mi visión sobre cosas reales léelos.

Lo típico: Estos personajes pertenecen a la Rowling…. Bla bla (no me comáis la cabeza, va?)

Nenufr Jajajaja ya ves como se lo monta, quilla, que hay que vivir la vida!!! Jeje. Si, volverá a salir Joan, jeje, es que Joan es un chico de verdad que yo conozco jaja, es que en esta historia todos los chicos están amoldados a los más importantes de mi vida jaja, y Joan es muy muy tímido, jaja habla muy muy poco. Bueno claro que habrá algo de Ron y Hermione, jeje es que a todos os encanta esa pareja. Niña!!! Disfruta de barra libre, jajajaja y se buena (cara de angelito) jajaja. Me alegro de que te gustase el capítulo, yei Draco ha salido poquito en el capítulo 4 jeje. Bueno, cuídate tu también. Muchos besos!!!! Y continuaré el de segunda oportunidad ;-)

Lira Garbo: Ey pues esta vez tampoco tardé tanto en actualizar, es que como también estoy actualizando los otros... jeje. Lo que no me gustó de Draco, es que fue un bruto al decirla "que no le apetecía acostarse con ella" jeje pero luego fue muy mono. Bueno, algo liada si estoy jeje pero consigo compaginar todo, no sé cómo lo hago jaja. Venga, muchos besos!!!

Silence-messiah: Jejeje bueno Afrodita es una Diosa jaja, pero yo un jajaja. Hija, a la orden!!!!! Aquí tu servidora escribiendo jeje, espero que te guste este capítulo guapa. Venga, besazos!

Lil Granger: Si, algo agitada si que es mi vida jeje. Sisis tiene que gustarte Draco!!! Es que a mi me tiene enamorada jaja. Me pareció tierno mientras lo escribía, la parte cuando Hermione le pide dormir con él, jeje, quién lo hubiese dicho, Draco y Hermione durmiendo juntos jeje. Pues a mi nunca me han gustado los Hermi/Draco, pero ahora, jeje no sé, me están empezando a gustar algo más. Bueno aquí tienes la continuación, espero que te guste. Saludos!

Gala Snape: Gracias gracias. Bueno jeje Hermione es la representación de mi vida… pero ya me gustaría que mi Draco real estuviese tan bueno como Draco jaja. Bueno aquí tienes la continuación. Saludos!

Aredel Muchas gracias Bueno, aquí tienes el nuevo capítulo, espero que te guste.

TaTa-SuS: Me alegro que te guste mi manera de escribir. Bueno, no es exactamente un D/H, porque no está definido jeje, también aparecerá Ron y otros muchos jeje. Aquí tienes la actualización, espero que te guste. Besos!

Sagui Gracias, bueno aquí tienes la continuación.

VIDA NUEVA

5. Lo que hace el Señor Alcohol

Un ruido taladrándome los oídos, me moví molesta para intentar taparme las orejas con la almohada, pero le ruido seguía insistiendo, abrí los ojos de golpe y miré hacia el otro lado de la cama, estaba vacía y del baño se escuchaba el sonido del agua golpear la ducha.

Volvió a sonar, no era el despertador como en un primer momento había pensado, era la melodía de mi móvil, me levanté corriendo y fui hacia el salón, buscando mi bolso, al fin logré encontrarlo. Cogí el móvil y tiré el bolso encima del sofá.

- ¿Sí? –bostecé mientras me frotaba las sienes.

- ¿Hermione? Soy Joan –me pegué más el auricular a la oreja al reconocerle.

- Buenos días –dije resuelta.

- Sí, buenos, ¿qué tal dormiste? –hizo una pausa pero no me dio tiempo a contestar- te fuiste muy rápido.

- Lo sé, tenía que volver, no me fío de mi compañero de piso –dije bajando la voz. Se escuchó una risa al otro lado.

- Tu amiga Ginny es muy simpática, se quedó toda la noche con nosotros –se rió- es muy graciosa –me imaginé a Ginny cantando junto a ellos totalmente borracha y me reí por lo bajo- te llamaba porque hoy un colega va a celebrar su cumpleaños y vamos a ir a una discoteca, ya se lo dijimos a Ginny, dice que viene encantada pero sólo si tu te apuntas –me mordí el labio porque quería haber quedado con Harry y Ron.

- Vale, me apunto –acordamos la hora y me dijo el nombre de la discoteca, resultó que era la misma a la que habíamos ido ayer, respire hondo y me despedí de él.

Busqué el bolso y lo cogí, también recogí mis prendas que estaba amontonadas al pie del sillón.

- ¿No te fías de mi? – pegué un salto y las ropas salieron volando. Me giré lentamente y vi a Draco con la toalla alrededor de su cintura.

- Es un decir –dije sin darle importancia y volviéndome para recoger la ropa ya que si seguía mirando ese cuerpo hipnotizante me pondría a contar las gotas que acarician su piel pálida.

Noté que se acercaba, me volví hacia él con la ropa apretada contra mi pecho. Sus pies se pararon para quedar frente a mi, recorrió mi cuerpo con una mirada fría y alargó la mano para quitarme la ropa que sujetaba, mis brazos no opusieron mucha resistencia, y pronto el montón volvió a quedar desperdigado en el suelo.

Sentí que cada vez estaba más cerca, desprendía olor a perfumes de baño que me embriagaban mientras sus manos se posaban sobre mi tripa y se deslizaban lentamente. Sus labios se acercaron a mi hombro y lo besaron, mientras yo tenía los brazos entrelazados y posados en mi pecho. Cerré los ojos mientras las manos de Draco se movían alrededor de mi cintura, y sus labios subían y subían por un camino trazado en mi cuello.

- Creo que no eres la más indicada para decir de quién hay que fiarse –susurró en mi oreja mientras rodeaba mi cuerpo con sus brazos y me acercaba hacia él, cerrando completamente las distancias.

Su piel húmeda se pegó a mi y no pude evitar colocar mis brazos alrededor de su espalda. Me empujó hacia el sofá y me indicó que me tumbase, él se puso en donde quedaban mis pies y comenzó a besar una pierna, mientras con la mano acariciaba la otra, y subió desde el pie, deslizando su boca por la rodilla, el muslo y seguía subiendo de forma lenta pero peligrosa.

Cuando llegó a mi estómago me despojó de la ropa interior y él se soltó la toalla, quedando ambos desnudos. Volvió a bajar la cabeza y continuó el recorrido desde mi ombligo, subiendo hacia los pechos y entreteniéndose en cada uno de ellos un tiempo necesario para dejarme completamente indefensa, expectante de lo que me hiciese y deseándole ardientemente, y sus labios continuaron deslizándose hasta llegar nuevamente a mi cuello.

Él estaba sobre el sofá, apoyando sus piernas con las rodillas y entrelazándolas con las mías, su peso estaba sujeto a su vez por un brazo que tenía apoyado a un lado de mi cuerpo.

Y por fin me besó en los labios, después de haberme hecho esperar tanto, recibí sus labios con ansias y fue uno de los besos más intensos que alguien me había dado.

- Hoy voy a salir –me dijo tumbándose entre mis piernas.

- ¿Dónde? –nuestros labios volvieron a encontrarse y entrelazamos los dedos.

- A Latipak –me separé de él, ese era el sitio a donde iba a ir yo- ¿Qué pasa?

- Yo también voy a ir –susurré, él se encogió de hombros y volvió a besarme, acercándose cada vez más.

Nuestros cuerpos se fundieron, entrelazándose mientras exhalábamos un suspiro. Cuando comenzó a moverse, enterró su cabeza en mi melena, intentando así apagar los gemidos que escapaban de su boca, cosa que me hizo mucha gracia a la vez que me excitaba.

Tapó mi boca con la suya en el preciso instante en que sentí como un placer mayor recorría todos los rincones de mi cuerpo, me agarré fuertemente a él, algo que Draco imitó, y se aferró a mi cuando él también llegaba a su punto máximo.

- ¿Con quién vas a ir? –me preguntó cuando nuestras respiraciones se normalizaron.

- Con Ginny y unos chicos que conocimos ayer, ¿tu?

- Con algún antiguo compañero de clase –dijo mientras se sujetaba con los codos pero sin separarse de mi cuerpo.

.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.

Llegamos a la puerta de la discoteca y encontramos a Joan con sus amigos, nos saludamos y luego nos pusimos en la cola para entrar al sitio.

Ginny no paraba de cruzar miradas con un amigo de Joan, así que la agarré y la aparté un poco para que me contase si pasaba algo, y me dijo que ya se vería, sus ojos brillaban, así que sonreí y finalmente llegó nuestro turno para entrar.

Pagamos las entradas y nos fuimos hacia la sala de hip hop, cuando llegamos pedimos unas copas para cada uno, ese día estaba bastante más lleno que el anterior, la sala de baile estaba colapsada y todos se mecían al ritmo de las canciones comerciales que sonaban.

Joan se acercó a mi sujetando la copa que había pedido, le di las gracias y me quedé mirando ausente la sala, mientras Ginny iba a bailar con el chico con el que tonteaba y los demás se sentaban en unos sillones rojos que estaban situados en los laterales de la sala.

- Te veo decaída – ladeé la cabeza y levanté una ceja, odiaba que me dijesen eso.

- No lo estoy, simplemente estoy pensando –bebí un sorbo. Hubo un silencio incómodo entre los dos.

- ¿Te arrepientes de lo de anoche? –preguntó finalmente.

- No, yo tenía ganas y tú también –le miré y suavicé la mirada- luego te reto a unos chupitos –me sonrió y asintió.

Cuando acabamos la copa nos pedimos un par más y luego nos reunimos todos para hacer unas cuantas rondas de chupitos.

- ¡Quién acabe el último paga! –dijo Ginny poniéndose frente a su chupito.

Hicimos varias rondas de chupitos, siempre perdía un amigo rubio de Joan. Al final acabamos todos yendo bastante felices y decidimos salir a bailar un poco.

Pusieron una canción que a Ginny y a mi nos encantaba, así que empezamos a bailar sugerentemente, mientras nos teníamos que aguantar la risa al ver que algunas parejas se habían parado a mirarnos u otras chicas nos intentaban imitar.

De pronto me fijé en una pareja que había cerca de nosotras, la chica llevaba una minifalda y se movía sensualmente, mientras un chico al que le veía una espalda perfecta, la atraía hacia él agarrándola de la cintura. Ginny se fijó también en ellos y me miró con cara de intentar ser un angelito.

Vi las intenciones que tenía cuando se acercaba a mi boca, yo solté una risita y me acerqué a ella, lo que quería era calentar a los chicos, así que cuando nuestras bocas se encontraron empezamos a besarnos dejando pasmados a Joan y sus colegas y a varios chicos que había por la sala.

Noté como la pareja que antes estaba bailando se había parado y ahora nos miraba. Las manos de Ginny estaban en mi cuello, mientras que yo la agarraba delicadamente por el pelo rojo que llevaba recogido en una coleta alta.

Abrí los ojos y me fijé en que el chico rubio se había dado la vuelta, pude verle toda la cara y me asombré al reconocer a Draco, Ginny se separó al notar que yo me había quedado parada. La pelirroja siguió mis ojos y sonrió al ver a Draco, luego me miró a mi y volvió a besarme.

Un carraspeo detrás de Ginny nos hizo pararnos y observar al que nos había interrumpido, Ginny sonrió coquetamente al chico que iba detrás de ella, y luego me miró a mi como pidiéndome un permiso invisible para que pudiese irse con él, la guiñé un ojo y me giré hacia donde estaban los amigos de Joan, que alguno de ellos aún tenía la boca abierta.

Iba a ir hacia ellos cuando un susurro en mi oído me dejó paralizada.

- No sabía que hicieses esas cosas tan excitantes –me giré lentamente y miré retadoramente a Draco.

- Sé hacer muchas cosas –él levantó una ceja.

- No lo dudo –fijó sus ojos grisáceos en una figura que se estaba acercando y susurró afiladamente- ¿Es ese tu amigo?

Me giré y sonreí a Joan que se acercaba mirando con mala cara a Draco. Tuve que contenerme la risa.

- Joan, este es Draco, mi compañero de piso –su mirada se volvió aún más recelosa, y yo entorné los ojos, no me gustaban los celosos y menos si no había nada entre él y yo.

- Encantado –dijo sarcásticamente Draco mientras le tendía una mano que Joan estrechaba con más fuerza de la debida.

Se estuvieron midiendo durante unos segundos, hasta que alcé los ojos al cielo y les dije que si me invitaban a unos chupitos.

- Hemos pensado en ir al mismo sitio de ayer –contestó Joan- Ginny se viene, t

- Ella se queda a por unos chupitos –cortó Draco, me miró y dijo- a no ser que tengas miedo de lo mal que puedes acabar retándome.

- Joan, ir yendo vosotros, yo me pasaré más tarde –asintió y me besó.

Mientras nos besábamos Draco se fue hacia la barra y pidió tres chupitos para cada uno para empezar.

Cuando Joan bajó por las escaleras me acerqué lentamente a Draco, que me dejó sitio en la barra y me miró sonriendo sarcásticamente.

- Es muy baboso "tu amigo" –no le hice caso.

- ¿Empezamos?

- Sí, hasta que no me ganes no vamos a dejar de beber –sonrió ampliamente- ¿estás dispuesta?

Entorné los ojos y mientras tragaba saliva al saber que eso me iba a ser muy difícil, cogí el primer vaso y le miré para que dijese cuándo podíamos empezar.

Los primeros tres chupitos como era de esperar se los acabó antes él, la siguiente ronda pasó lo mismo, y la siguiente y la siguiente… llegó un momento en que perdí la cuenta de cuántos chupitos llevaba en el cuerpo, y en ese momento estaba bastante ebria.

Los mofletes de Draco se habían coloreado de rojo al tener tanto alcohol corriendo por sus venas. Nunca le había visto borracho así que me dispuse a hacer que ese día acabase igual a como yo estaba.

Llegó un momento en que ya no sabía ni lo que estaba bebiendo, y me entraba la risa por cualquier cosa, Draco a su vez, estaba ebrio, se le notaba en la cara, así que le dije que era suficiente, que no iba a conseguir ganarle y que yo ya iba muy borracha.

Decidimos coger el metro y volver al apartamento, era ya bastante tarde, y a esa hora ya se habría abierto el metro de la madrugada.

Cuando salimos una niebla blanquecina nos recibió, haciendo que entornásemos los ojos al estar acostumbrados a las luces oscuras de dentro. Me agarró de un brazo porque yo no conseguía andar recta y aguantándose la risa me guió hacia la boca del metro.

Bajé las escaleras viéndolas borrosas, y me tenía que parar para ver dónde ponía el pie, Draco empezó a reírse así que le golpeé en el hombro fingiendo que me había molestado.

Se paró y se me quedó mirando, vi como se acercaba peligrosamente a mis labios y cerré los ojos, pero de pronto resbalé y me fui escaleras abajo, no sin antes agarrar a Draco y rodar los dos hasta el final de las escaleras.

Nada más aterrizar empecé a reírme por el guantazo que nos habíamos metido, Draco miró confundido hacia el lugar donde antes habíamos estado y luego hacia el suelo y finalmente acabó riéndose conmigo. La gente que pasaba se nos quedaba mirando, algunos murmuraban insultos, otros decían cosas como "ésta juventud de hoy en día…".

Draco se puso en pie tambaleándose y me tendió una mano para ayudarme a levantar, una vez estuve de pie me acerqué al calor que desprendía su cuerpo, y apoyé la cabeza en su pecho.

- El metro está llegando –lo dijo dulcemente en mi oído.

- Me da igual, sólo quiero que me abraces –me mordí la lengua, no quería haber dicho eso, pero ante mi sorpresa, Draco me rodeó con sus brazos y me estrechó hacia él.

- Deberíamos coger el metro, ¿no te apetece echarte en la cama? Yo estoy bastante cansado –se separó y me dio la mano mientras nos dirigíamos hacia el andén.

- Mm… pues que pena que estés cansado, yo quería… -volví a morderme la lengua, el alcohol me estaba haciendo hablar demasiado. Draco me miró con una sonrisa de superioridad.

- ¿Tú querías….? –me instó a continuar.

- Ya viene –dije mirando hacia el túnel en donde comenzaban a dibujarse los faros del tren.

El vagón estaba bastante lleno, había gente de todas las edades y culturas diferentes, nos colocamos en un rincón muy pegados y esperamos a que llegase nuestra parada sin ni siquiera mirarnos.

Al cabo de varios minutos, la voz anunció nuestra parada y bajamos agarrados de la mano, Draco casi se tropieza con el agujero que hay entre el vagón y el andén.

Un viento frío nos recibió en el trayecto del metro a nuestro piso, estuvimos en silencio hasta llegar a casa y quitarnos los abrigos, que dejamos tirados por el suelo.

Cuando me iba a ir a mi cuarto, el rubio me agarró del brazo y me hizo girarme para que le mirase.

- ¿Qué quieres? –le solté algo molesta y arrepentida de lo que le había dicho mientras esperábamos al tren.

- A ti –no me dio tiempo ni de asombrarme ni de contestar, sus labios atraparon los míos de forma violenta.

Nos separamos respirando con dificultad y cogimos aire para volvernos a sumergir en otro beso igual que el anterior.

Me quitó la camiseta y yo hice lo propio con la suya, mientras seguíamos besándonos y nuestras manos acariciaban los torsos del otro, el turno siguiente fue de los pantalones, que acabaron amontonados en el suelo junto a las camisetas y después la ropa interior, mi sujetador acabó roto porque Draco no conseguía soltarlo, así que decidió que desgarrarlo era una manera más fácil de librarse de él.

Nos tumbamos en el suelo mientras nuestros dientes rozaban todas las superficies de piel que encontraban a su paso, deleitándonos con el cuello y los hombros, y haciendo que suspiros saliesen de ambas bocas, cargados de pasión y entremezclados con el alcohol que habíamos ingerido.

- Eres tan tentadora como un fruto prohibido –susurró jadeante Draco mientras me miraba fijamente.

- ¿Y mi sabor es como te lo imaginabas? –solté una risita.

- Es aún mejor –se puso serio de pronto y se movió nervioso, le miré sin entender.

- ¿Qué pasa?

- No puedo… -se incorporó mientras yo me sentaba y le miraba totalmente confusa.

- ¿Có-cómo? … ¿Qué? –no entendía nada, el miró hacia otro lado y luego me miró de reojo.

- No puedo enamorarme de ti –fijó sus ojos en los míos y yo abrí la boca sin que ningún sonido saliese de ella. Draco se giró y empezó a recoger su ropa, y vi que le perdía, que se iba… creo que fue el alcohol lo que me hizo levantarme y colocarme detrás de él.

- Draco –él se giró lentamente y recorrió mi cuerpo con su mirada, mordiéndose el labio como si tuviese que aguantarse para no volver a besarme- para mi ya es demasiado tarde –me miró sin entender- me he enamorado de ti.

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Y lo dejo aquí!!! Jejej soy mala yeeee, pero bueno espero que no me matéis por haber tardado una eternidad, pero es que tuve que formatear el ordena, porque estaba lleno de virus cabrones y entre que he empezado la Uni, menuda carrera más chunga, la madre que me parió… y que he estado muy liada por muchas movidas… pues no he tenido casi tiempo, y bueno he aprovechado a que estoy malita, y no fui ni ayer ni hoy a la Uni, para continuar este fic, que os lo debía!!!

Bueno quiero añadir, que lo de las escaleras me ha pasado, con una amiga xD Íbamos tan ciegas que la notas se cayó y me agarró así que nos fuimos las dos escaleras abajo y menudas risas nos echamos tiradas en el metro de Colón (que por cierto nos habíamos equivocado de dirección) y claro la peña que pasaba flipaba con nosotras, pero coño! Es sano reírse xD

Bueno chiquitines de mi alma, espero que no me reprochéis mucho que haya tardado tanto, intentaré actualizar más deprisa!!! De verdad que lo intentaré!!!

Y ahora una especie de poema de mi cosecha:

...Ámame por como soy y no por como quieres que sea.

...Ámame como yo a ti.

...Ámame porque sin tu amor no soy persona.

...Ámame tan fuerte como seas capaz de hacerlo.

...Ámame porque es lo único que necesito para seguir viviendo.

Y sólo necesito que me sonrías para ser feliz.

Y sólo necesito verte...

Y sólo necesito oírte...

Porque un día sin ti es un día perdido.

Y si me ves llorar no me juzgues por ello...

... porque algunas lágrimas te pertenecen.

Y si me abrazas...

... déjame que cierre los ojos y el tiempo no corra.

... déjame que me pierda entre tus brazos y sueñe, sueñe...

Y si me besas...

... perdóname por sentir que me muero.

... perdóname por anhelarte día y noche.

... perdóname por querer repetirlo.

Y no me preguntes...

... porque te diré que te quiero.

…Sólo tu sonrisa puede hacerme volver a brillar…

…Y es que sin ti, sólo hay oscuridad.