Yo no acostumbro a contestar reviews, pero en este caso lo haré.

Querido (a) Yo: Muchas gracias por aquel review, me ayuda a sacar algo que quería decir desde hace mucho pero no sabía como. Este fic no es nada más que el prólogo de "Cuanto todo se derrumba", fic de 33 capítulos que tengo escrito en un par de cuadernos. Estoy completamente de acuerdo con aquello de que va en decadencia, lo terrminé lo más rápido posible y por consiguiente lo estoy subiendo todo de golpe, sólo para comenzar a subir el otro fic. Por cierto, muchas gracias por aquello de que puedo escribir mejor, la verdad es que no lo creo mucho, ya que he tenido el cereebro bastante seco, pero tu comentario me ha ayudado bastante. Besos.

¿Por qué te tuviste que cruzar en mi camino?

Capítulo 9: La mujer y el hombre pequeño.

-¡Siel!, Cariño, ¿Cómo estás?

-Nurrita, no te veía desde el verano. Has crecido mucho oo.

-O.O, ¿Me pueden explicar que diablos hacen aquí?...Por cierto Remus...te ves muy bien nn

-Ehh...gracias, tú también nn.

-¬¬...Deja de mirar a mi hija, Moony. Bueno Siel, estamos aquí porque decidí...mos pasar unas pequeñas vacaciones de invierno aquí, pero no te preocupes, todos me verán como el hermoso perro mascota tuya.

-¡Wow!, Es increíble. Te tendré conmigo todo lo que queda del invierno.- En eso corrí y abracé a Remus, me respondió con ese cálido abrazo que sólo él sabe dar. Sirius se veía algo enfadado.

-Remus suéltala, son veinte años de diferencia.

-Eso no me importa n.n

-¬¬

-Es broma Padfoot, como crees que yo, tu mejor amigo, me enredaría en una relación con aquella bella criatura que llamo Nurrita.

-¬¬...Eso espero Moony, eso espero.

-A mi no me importa que seas el mejor amigo de mi papá, Remus. Además, con los años te pones mejor n.ñ.

-¡NURROSIEL BLACK!, ¡JAMÁS CREÍ ESO DE TI!.

-¡YO TAMPOCO!

-¡TÚ CÁLLATE, POTTER!, ¡DEJA QUE MI PEQUEÑA HERMANA SEA FELIZ!.

-Gracias Daniela.

-Por nada n.n

-Sirius, no te tomes las cosas tan a pecho. Remus y yo sólo jugamos.

-Después de lo "amigos" que estaban este verano me puedo esperar cualquier cosa ¬¬.

-nn

-Jeje nn

-O.O...No entiendo.

-No tienes que entender nada, Potter.

-Ja-ja-ja ¬¬

-Ella tiene razón, son cosas que tienen que ver con Remus y conmigo...y Sirius por supuesto.

-Claro, me cambias por el Licántropo ¬¬.

-Nunca te he cambiado porque nunca has sido mío.

-O.O...entonces...Remus y tú...¡ASCO!.

-¡¡NOOOO!!, ¡¡PERVERTIDO!!.- Sentí que lo golpeé en el rostro con tal fuerza que me ardía la mano.

-O.O...Jamás creí que pensaras esas cosas, Potter.

-O.O... Me sorprendes ahijadito.

-O.O...¿Por qué pensaste eso de mí, Harry?. No soy ningún depravado sexual... Creo que voy a llorar ;;.

-Ves lo que tus inútiles palabras causan, Potter. Vete de aquí, sólo debías traerme.- Me acerqué a Remus que estaba en un rincón llorando y balbuceando.- ¿Estás bien, Remus?

-Ehh...ah...Algo bien, las palabras de Harry me afectaron.

-No te decaigas por el mocoso de, Moony. Algún día deberá crecer.

-Eso espero.- En eso Remus me quedó mirando fijamente a los ojos.

-o.o...¡Qué!, ¿Acaso tengo una cicatriz en la frente?, ¿Por qué me miras tanto?.

-n.n Es que me recuerdas a mi primera novia, tenía el mismo carácter que tú. Demasiada niña para unas cosas y demasiado adulta para otras.

En eso comprendí que para Remus no era mas que el vago recuerdo de aquella chica que conquistó su corazón en la juventud. Por algún extraño motivo creí que me iba a sentir peor, pero no fue así. Fue como si me quitara un peso de encima.

-¿Puedo darte un abrazo, Nurrita?.

-Sólo si me dices cómo se llama la chica n.n.

-Se llamaba Rinna.- Me abrazó de la manera que se abraza el recuerdo de alguien que se fue. Se llamaba Rinna, igual que mi madre. ¿Acaso Sirius tuvo una hija con el primer amor de uno de sus grandes amigos?.

-Siri...papá. ¿Puedo hacerte una pregunta?.

-Claro, pero primero que Remus te suelte ¬¬.

-Lo lamento n.nu.

-¿Cómo se llamaba mi mamá?.

-Este...bueno...yo...

-Ese es el motivo por el cual le pedí al señor Potter que la trajera, señorita Black.

-¡¡Profesor Dumbledore!!- había olvidado por completo que él estaba allí. Fue muy estúpido de mi parte.

-Supe que al profesor Snape...

-¬¬

-Calma Padfoot n.n.

-...que al profesor Snape le habían arrancado una hoja de las carpetas de adopción que están en su poder, y justamente es la hoja donde sale el nombre de su madre.

-No entiendo, profesor.

-Entonces le pedí gentilmente a estos dos caballeros que ven aquí si podían venir para terminar este asunto ya. Bueno Sirius, comienza a hablar.

-¿Pero como lo digo?.

-Ya sabrás encontrar las palabras n.n.

-Ok...cuando estudiábamos en Hogwarts James conoció a Lily y se enamoraron, Remus estaba de novio con Rinna y yo era el galán más apetecido por todas las chicas. Pero no es mi culpa ser tan bello y sexy, mis padres me hicieron así, a ellos hay que agradecerles.

-¬¬

-Jeje...como decía, yo podía tener a la chica que me diera la real gana, incluso a la mismísima Lily, pero como quería mucho a James no lo hice, cuando conocí a una chica maravillosa. Era la mujer más dulce que jamás he conocido. Su sonrisa llenaba todos lo lugares y su larga cortina de pelo rizado se balanceaba con el mas mínimo roce del viento. Sólo tenía un pequeño problema, tenía un novio...Y ese novio era Remus.

Yo sabía que no debía mirarla con otros ojos que no fueran los ojos de la amistad, pero se me hacía imposible. Imposible porque estabamos todo el tiempo juntos. Moony la llevaba a todos lados con él. Entonces, en las vacaciones de séptimo año, las últimas vacaciones antes del último curso, James organizó una fiesta n la mansión Potter, invitó a todos nuestros amigos e incluso le pidió a sus padres que aparecieran una piscina gigante, ellos lo hicieron y nos dejaron la mansión toda la semana.

-Ya me imagino que cosas habrán hecho.

-Déjalo hablar Dana. Papá continúa.

-Durante el tercer día de fiesta, cuando caía la noche y yo tenía la piel muy arrugada de tanto nada en la piscina, pasó lo increíble. Me dirigí a uno de los cuartos de la mansión para cambiarme de ropa, entré de golpe y descubrí a Rinna terminando de abrocharce una blusa. Ambos nos sonrojamos demasiado, jamás me había sonrojado frente a una chica, le pedí mil disculpas y ella sólo me decía que no me preocupara, que estaba terminando de vestirse y ya se marchaba. Tomó sus cosas y se dirigió a la puerta, yo la tomé del brazo y exploté, le confesé todo lo que sentía por ella. Reaccionó de la misma manera, me lo dijo todo. Me acerqué suavemente a su boca y la besé, fue el beso más hermoso que he tenido en toda mi vida. De repente se abrió la puerta y entró Remus, , ya se imaginan lo que habrá pensado, yo en traje de baño y su novia a medio vestir, eso da mucho que decir. Se puso a llorar en la puerta y desde ese día pasaron ocho meses para que me volviera a hablar.

-¿Y a qué nos lleva eso, papá?.

-Te estoy contando como conocí a tu madre, ya te digo su nombre. Cálmate.

-Ok, pero apresúrate.

-Bueno. Tu mamá era Slytherin y después de un mes desde que la besé nos pusimos de novios, un golpe duro para mis fans te diré. Cuando salimos de Hogwarts, sus padres le revelaron el mismo secreto que Snape te reveló hace un año. Era adoptada. Su verdadero padre era de apellido Riddle. Se llamaba Tom Marvolo Riddle. Lo buscó por cielo, mar y tierra; se hizo pasar por mortífago y consiguió tener su apellido. Se convirtió en una espía de La Orden del Fénix y en la madrina de matrimonio de los Malfoy. A los años después quedó embarazada, planeamos nuestro matrimonio para la Navidad del mismo año en que cumplieras un año, pero no se pudo. En las fiestas de Halloween de ese año fui enviado a Azkaban y ella fue muerta por el mismo Voldemort. Su padre la mató al enterarse de que era espía de Dumbledore.

-Entonces lo que yo creí al leer la hoja es cierto...¡¡SOY NIETA DE VOLDEMORT!!.

-¿Entonces tú tomaste la hoja?.

-O.O me acabo de delatar. Soy una estúpida.

-Ya te conté la historia, ahora tú dime por qué tomaste la hoja y como llegaste a ella.

-Eh...iba a hablar con Sevy...

-¿Sevy?

-Sí, Sevy. Iba a hablar con él y lo descubrí durmiendo, entonces me puse a revisar su baúl y me enteré, además de su obsesión con los calcetines, de que soy hija de Voldemort.

-¿Eso es todo?

-Sí.

-¿Segurita?

-Sí.

-¿Segurita, segurita?

-YA TE DIJE QUE SÍ, ESTOY COMPLETAMENTE SEGURA.

-Bueno... sólo preguntaba. ¿Y por qué fuiste a conversar con Severus?

-Porque me sentía sola y no tenía a donde recurrir ;;- Un impulso de rabia hizo que yo saliera corriendo del despacho sin sentido alguno, en eso choco con una cara familiar.

-¡SIEL!, ¿Qué haces rondando por el castillo en una tarde de viernes tan linda? Deberías estar en el patio...y relajada.

-Cierra la boca Pastori ¬¬. Por cierto, ¿Dónde está Draco?

- Lo vi cerca del algo, si quieres puedo llevarte hasta donde está.

-Sé donde queda, además no soy un bebé para perderme.- De inmediato emprendí camino al lago, no sin antes escuchar las últimas palabras de Pastori.

-Que estés...bien.- El chico ya no me parecía tan desagradable como hace un tiempo atrás, es más, lo encuentro algo lindo.

Cerca del algo hay un matorral, recostado al lado de ese matorral encontré a Draco cantando.

-"...y vuelves otra vez a intentar, quieres sentirte bien y verte bien, bien. No es más que una actuación, el pedir perdón. No te hace falta sonreír sólo acaba con esa actitud".

-Bravo Draco. Podrías volverte cantante, serías muy famoso.

Me levanté rápidamente del césped, estaba muy rojo, jamás en mi vida alguien me había oído cantar. (N/A: Desde aquí narra Draco).

-Quizá me dedique a cantar, es que no quiero ganar más fans.

-Como digas galán n.n.

-¿Y qué estás haciendo aquí?

-Vengo de hablar con mi papá y para variar me enfadé, así que quise ver a alguien muy lindo y adorable y te busqué a ti.

-¿Lindo y adorable?, ¿esa impresión tienes de mí?

-Es la misma de casi todas las chicas que conozco, con la diferencia de que yo te quiero como un hermano.

-Jeje, es que soy irresistible n.ñ. ¿Y cómo has estado?, ¿Ya tienes novio?

-No he estado del todo bien, y no tengo novio y no pienso tenerlo hasta encontrar a alguien con quien me encuentre del todo bien.

-Sabes con quien te sentirías bien, con Pastori. Es un chico muy agradable.

-No sigas intentando que salga con él, eso no va a ayudarte con Hermione. Además, mira a tu alrededor, de seguro encontrarás muy cerca de ti a una chica que te arranque tu obsesión con Herms.

-Claro, claro. ¿Cómo quién?

-Como mi hermana. No te das cuenta de que la tienes tonta.

-Bueno, es linda...pero yo amo a Granger -.

-OK ¬¬. ¿Qué te parece si vamos a robarle ingredientes de pociones a Snape? Podríamos probar nuestros experimentos en Weasley.

-¿En cuál de los dos que quedan aquí?

-En el que quieras n.n.

-Ambos n.n

-Genial ñ.ñ.

Comencé a caminar junto a Siel, traía una cara de muerta en vida, pero al parecer se sentía mejor hablando conmigo, y como no, si yo alegro a todo el mundo. Cuando estábamos cerca del despacho de la demente profesora de defensa Contra las Artes Oscuras escuchamos la voz de un hombre, era temblorosa.

-¿Y cómo lo sabe?

-Ya te dije que pregunté a la mejor adivina que existe...- La otra voz era potente y producía un temblor en la espalda. Ambas salían del despacho de Carter. La curiosidad me embargó por completo y tomé la mano de mi primita y la llevé hasta donde pudiéramos escuchar. Siel se puso muy extraña. Se acercó a la puerta y la abrió de golpe.

-¡USTED AQUÍ! PERO...YO...NOSOTROS...- Siel cayó inconsciente al piso, a mi me golpearon fuertemente en la cabeza.

Terminadito, atrasadito, pero listo n.n.

Paola Black Riddle

Miembro de la Orden Siriusana

Hija de un sexy Merodeador

Nieta de la oscuridad en plenitud.