Lo mejor de una largo y agotador viaje, es llegar y saborear un delicioso platillo o por lo menos algo aceptable ¿Acaso 006 será conciente de esto?
Ni los personajes, ni nada relacionado con Cyborg 009 me pertenece, esto es sólo un fanfic, que pretende divertir un poco.
El tiempo de este fanfic de vuelta es recién exterminado Fantasma Negro.
¿Cuál Es La Tragedia?
Capítulo Tres: Una Suculenta Bienvenida
En la playa el clima era fantástico. Las olas rompían en la orilla esparciéndose luego sobre la arena ya húmeda y las palmeras se mecían suavemente con el viento. Pero tanta belleza no era suficiente consuelo parar a 006 que con amargura gimoteaba en silencio.
Había pasado tan sólo un día desde que había jurado a 003 y los demás Cyborg, que sería capaz de encargarse sin problemas de 001. Pero el hecho de recordar cuando tuvo que pegar un gran cartel escrito con temblorosas letras en la entrada de la Sartén Mágica de Chang, que indicaba:
"ABRIRA SUS PUERTAS ESTE LUNES"
Le hizo sentir ganas de llorar mientras permanecía en la sala sosteniendo en sus brazos a 001, quien dormía como de costumbre con el chupón en su boca.
-Nunca imagine hacer un sacrificio así de grande y menos por una persona tan pequeñita- menciono 006 aguantándose una lágrima- Pero me pareció muy buena idea tenerte conmigo en el restaurante para no descuidarte. El problema fueron esos niños tan extraños que se te acercaron y comenzaron abrazarte. Por cierto ¿De que estarían enfermos? Por que tenían ronchas y unas casi descostradas-
Sin embargo, 006 todavía abrigaba una pequeña esperanza.
-Afortunadamente 003 llegara mañana junto con todos nuestros amigos. Sólo nos queda esperar-
¡¡¡RIIIIIIIIIIIINNNNNGGGGGG, RIIIIIIIIIIIINNNNNGGGGGG!!!
- ¿Aló?- pregunta algo desconcertado mirando atentamente la pared.
- ¡Hola 006! ¿Cómo han estado tu y 001?- saludo el Dr. Gilmore alegremente como si no supusiera cosas terribles.
Después de que 006 hubo desahogado todas sus fatales penas, escucho atentamente al Dr. Gilmore.
- Es una verdadera lástima que te hayas sentido presionado para cerrar momentáneamente tu restaurante, pero lamentablemente 003 ni nadie de nosotros puede volver por ahora a Japón, sucede que...-
Los ojos de 006 casi se abrieron después de oír lo que paso con sus amigos en Kenya pero ante todo por que tendría que quedarse durante cuatro días más en la casa, dedicándose absolutamente a 001, que por cierto no se había sentido muy bien desde su aventura en el restaurante de 006.
Ya podía imaginarse un nuevo cartel adornando su puerta y escrito con su propia sangre:
"ABRIREMOS HASTA NUEVO AVISO"
-¡¿Eso quiere decir que permaneceré recluido durante más tiempo aquí?!- pregunto 006 alarmado con lágrimas saliendo de sus ojos como pequeñas fuentecillas mojando el sofá.
- Descuida, ya hable con 004 y gustoso acepto ir hasta Tokio para quedarse con 001 por el tiempo en que demoramos en volver, así podrás dedicarte por completo a tu restaurante- respondió el Dr. Gilmore lleno de orgullo.
Orgullo procedente de su creída habilidad de convencimiento sobre 004.
-¿Lo dice en serio, no me esta mintiendo? –pregunto 006 sintiendo como al instante la vida le regresaba al cuerpo - Menos mal que no fue 002, ese muchacho es un completo holgazán con los quehaceres- agrego percibiendo como una inmensa felicidad brotaba de su ser por enterarse que 004 iría en su auxilio.
-Desde luego, pensamos en eso cuando mejor decidimos llamar a 004. Por cierto ¿Por que no vas a buscarlo al aeropuerto? Y cuando lleguen por favor llámame, así podremos quedarnos más tranquilos. El número es 134-679-258-937 ¿Sabes 006? Yo calculo que llegara mañana al mediodía por lo que deberás estar atento ya sabes como se pone cuando lo hacen espe... ¿006?-
BIP, BIP,BIP,BIP,BIP.....
Sumamente encantado 006 colgó de alegría el teléfono y dejo el número escrito en la pequeña agenda que estaba cerca del aparato. La buena noticia le hacía sentirse tan feliz que súbitamente sintió deseos de cocinar. Por lo que subió al segundo piso para dejar a 001 en su cuna y bajo velozmente a la cocina.
-Tengo mucho tiempo de no ver a 004, le prepare algo realmente delicioso de bienvenida- menciono 006 en tanto sacaba ollas y sartenes- Es algo apresurado pero debo crear un platillo único para él en agradecimiento-
En eso, 006 reacciono sobre las verdaderas intenciones de sus amigos.
-¿Entonces la venida de 004 significa que mis amigos sospechan que me iba a ir tan mal?...Bueno que más da, salí beneficiado-
Después de analizarlo un poco, saco de un cajón un extraño libro con bordes de oro que tenía grabado por nombre: Recetario Mágico de Chang Changku.
-Usar este libro es como leer mi Biblia- dijo 006 con solemnidad.
Abriéndolo, muy emocionado comenzó a leer.
Afuera, el sonido de las gaviotas inundaba la escollera.
-Cerdo dulce en salsa de chamoy- leyó 006 ligeramente fascinado.
Sin cesar su emoción pasó a otra página.
-Conejo a la parrilla en crema de charales y cilantro- leyó 006 hechizado.
Tratando de llegar a una sabia decisión, 006 creía que cualquiera podría ser la mejor, puesto que todas las recetas le parecen muy buenas alternativas.
-Pechuga de pollo al cordón blue bañado en salsa de champiñones ¡¿Qué hace esta receta tan insignificante aquí?!- grito 006 muy molesto escupiendo gotas de fuego al hablar.
Por lo que arranco la hoja del recetario para de inmediato comérsela. En tanto, su nariz se desprendía agitando fervientemente la cabeza, desaprobando la aberración con la que se había topado.
-¡¿Cuando aprenderá 007 a no anotar sus disparates en mi recetario?! ¿Acaso esta intentado que yo cocine algo tan vulgar? No puede ser a lo que esta llegando el mundo, han mancillado este sagrado libro- expreso 006 sintiéndose furioso.
Y ofreciendo una modesta plegaria a su Dios de La Cuchara, unió sus manos con dirección al cielo.
-Por favor perdónalo, el muy tonto no sabe lo que hace-
Después de revisar todo, no llego a una conclusión, por lo que 006 se sintió confundido.
-Todo lo que tengo apuntado me parece fantástico, que difícil decisión...-dijo 006 llevándose la mano a su redonda cara para acariciarse la quijada- ¿Qué le gustaría a 004? Aparte de mi platillo de avena con salsa de soya el cual le encanta, debe haber otra cosa que le deleite ¡Ah ya sé! Creo que este es el momento indicado aunque no se si mi corazón de pollo pueda soportarlo-
Con la orilla del delantal que se había puesto, comenzó a frotarse delicadamente los ojos.
-¡Mi súper receta!- menciono 006 llorando de la emoción- Por fin nacerá... Mi fantástico y majestuoso pescado frito marinado en tinta de calamar relleno de ostiones y buche de res con papaya-
Luego de haberse convertido un mar de lágrimas, 006 comenzó a preparar la suculenta bienvenida que ofrecería a 004.
Y de este modo transcurrió el día, con 006 extasiado por cocinar para 004, a quien siempre había considerado difícil de complacer, hasta para el más mínimo detalle.
Luego de abrir la puerta del vehículo, a lo lejos 004 comenzó a escuchar los gritos de 006 indicándole que no abordara el automóvil. Por lo que 004 se disculpo con el taxista y se dirigió hacia 006 para saludarlo.
No podía evitarlo, reconocía que pese a su indisposición por efectuar tan largo viaje, se encontraba entusiasmado de ver nuevamente a su 006.
Pero tras un breve suspiro, 004 contemplaba a 006 correr como un loco hacía su encuentro llevando a 001 colgando del pecho por medio de una cangurera, dejándole muy mala impresión a 004 por ver la manera en que se mecía 001 de un lado a otro.
De cualquier manera, 004 con su acostumbrada seriedad se dispuso a estrechar la mano de 006, pero nunca se imagino que a pocos pasos de topárselo, 006 se abalanzaría contra él propinándole un tremendo golpe.
Rápidamente, 004 retrocedió un par de pasos para evitar irse de espaldas con 006 y 001 encima de él.
Pero aún cuando pudo evitar incrustarse contra el piso, no pudo liberarse de un par de brazos fuertes que lo aprisionaban asfixiándolo, dejándole en claro que 006 aún no perdía la costumbre de arrojarse encima de él para abrazarlo.
"Tengo que venir más seguido, porque cada vez se vuelve más efusivo" - pensó 004 mientras sentía sofocarse con el cariño de 006.
Al mismo tiempo, 004 se descubrió combatiendo entre el dejarse consentir por 006 para luego quedar más avergonzado que nunca o sus ardientes deseos de librarse de él arrojándolo en medio de la calle para ver como un auto le pasaba encima y así, quitarse las miradas de todos los presente cuyas murmuraciones malsanas comenzaban a ponerlo de mal humor.
Pero los murmullos tenían su razón de existir, puesto que ver a un varón de tan corta estatura y regordete, ataviado con ropajes chinos colgando como desquiciado del cuello y obsequiándole unos cuantos besos en la mejilla a otro hombre de apariencia fría que lucía todo menos complacido, sin olvidar a un bebé que ni siquiera lloraba por haber quedado aprisionado entre los dos hombres, no era la situación más cotidiana.
-¡Me da mucho gusto volver a verte 004 mi viejo amigo!- grito 006 aprensando con mayor fuerza y lleno de jubilo a 004 en la salida del aeropuerto donde todos esperaban un taxi.
-A mi igual- menciono 004 esforzándose por no ser escuchado con la voz entrecortada- ¿Me dejas respirar?-
-¡Oh, lo siento!- respondió 006 despejándose rápidamente mientras recibía las gracias y recuperaba la compostura.
Sin poderlo creerlo, 004 aún no asimilaba que 006 hubiese sido capaz de casi destripar entre sus cuerpos al indefenso 001, que siquiera se despertó.
"Quiero creer que de su estado de somnolencia paso inmediatamente al de inconciencia sin sufrir demasiado"- pensó 004 mientras disimuladamente le pidió a 006 que le entregará a 001.
-Por supuesto- respondió 006 quitándose la cangurera para que 004 pudiera colgársela.
Con cuidado 004 se coloco a 001 y llevando su mochila en la espalda y al pequeño Cyborg en el pecho, ambos hombres se dirigieron al estacionamiento.
En el interior del convertible deportivo, 004 con cuidado coloco a 001 en la silla para bebés, tras luego de asegurarlo en el asiento y dejar caer la cangurera en el asiento trasero, puso su equipaje en la cajuela y amablemente le pidió 006 las llaves.
-Se supone que yo soy tu anfitrión, por lo que no puedo permitir que manejes, o ¿Acaso no estas cansado por venir de tan lejos?- pregunto 006 con renuencia de entregarle el llavero y aferrándose al volante discretamente.
-Sólo un poco- respondió 004 con marcadas ojeras, aceptando la sugerencia de 006.
Dejándose caer con suavidad en el asiento del copiloto, 004 miró fijamente a 006 y con claridad, le dijo:
- Pero conducirás con cuidado ¿De acuerdo?-
-Relájate, yo soy el mejor chofer que La Sartén Mágica de Chang Changku jamás haya tenido- respondió 006 para luego pisar el acelerador como un demente.
El trayecto que normalmente duraba cuarenta minutos entre el aeropuerto y la casa del Dr. Gilmore, parecía que únicamente demoraría veinte minutos. Por lo que 004 se encontraba atónito y por cada volantazo que 006 daba sobre las complicadas curvas, no podía evitar incrustar con fiereza sus ojos azules sobre la diminuta persona de 006, que parecía sacaba la lengua para que el aire la refrescara.
-Te noto distinto 006 ¿Te ocurre algo?- menciono 004 tratando de sonar de manera cotidiana.
Pero mientras su cabellera plateada se agitaba con violencia en contra del viento, cada cinco minutos volteaba hacia atrás para confirmar que 001 no hubiese salido volando.
-Si, deje cuatro cacerolas sobre el fuego y tenemos que llegar antes de que se incendie la casa del Dr. Gilmore y peor aún, que se queme el...- respondió 006 callándose abruptamente con mucha sospecha, pero muy preocupado convertía los 120 km/h a 150 km/h.
-006... creo que debes reconsiderar tu lista de prioridades- menciono 004 llevándose deliberadamente una mano al rostro para evitar alucinarse a 006- Cambiemos de tema-
-Como digas ¿Sabes? No pude dormir mucho a noche e incluso cuando pude tuve un sueño muy extraño- comento 004 consternado y sonando muy confundido- No he podido encontrarle un significado que me parezca claro-
-¿Qué tal si me lo cuentas?- menciono 004 oyéndose muy interesado puesto que siempre le había gustado escuchar de situaciones extrañas para luego descifrar algún significado coherente.
-Entonces te lo diré. Ayer tan pronto me quede dormido, un ejército de bailarinas ollas y sartenes me invitaron a danzar junto con ellos alrededor de la estufa, pero no hacíamos más que dar brincos entre las llamaradas de las hornillas-
-¿Acaso no soñabas con eso despierto?- pregunto 004 con marcada incredulidad y sarcasmo de sobra.
Oír eso, hizo que 006 de una breve risotada.
-Lo que sucede es que yo soy un excelente bailarín, pero no puedo entender que mi inconsciente no haya podido imaginarse una coreografía de mi talla- respondió 006 con bastante orgullo.
Entretanto, 004 se le quedo mirando fijamente y sin decir más nada.
Al cabo de un rato y de un prolongado pero incomodo silencio, el convertible comenzó a transitar sobre la carretera de la ribera, ofreciendo una majestuosa vista para contemplar y relajarse. Por lo que 004, se contento por considerar que en cuestión de unos minutos quizás, podría descansar un poco en la casa del Dr. Gilmore.
De inmediato, la pantalla del reloj digital fijado en el panel del automóvil, cambio anunciando las trece horas del día y por fin, podían vislumbrar la encantadora vivienda a unos cuantos metros. Una vez ahí, dejaron el vehículo al aire libre estacionado a la puerta de garaje, ubicado en la entrada trasera de la cabaña.
Sintiéndose cansado pero curiosamente reanimado 004 tomo a 001 entre sus brazos y dispuesto a esperar la ayuda de 006 para sacar su mochila de la cajuela, noto como éste se había marchado velozmente, dejando una estela de polvo y el portaequipaje abierto.
Efectivamente 006, por salir corriendo a apagar la estufa en un descuido presionó el botón del portaequipaje.
Tras un franco suspiro de desilusión, 004 se colgó la mochila en un hombro y se introdujo dentro de la vivienda llevando consigo a 001. Esperaba hallar todo en las mismas condiciones que la última vez que los había visitado hacia casi medio año e inmediatamente percibió, que salvo el encanto femenino que 003 había impuesto en la casa a base de flores de popurrí, velas aromáticas e incensarios, detalle que a su gusto asentaba bien a la vivienda, lo demás no había sufrido cambio en lo absoluto. Hecho que le provocó cierta tranquilidad.
Tanto así, que había relajado lo suficiente como para apreciar ese horrible aroma de un platillo inédito de 006 impregnado en las paredes.
-¡Ponte cómodo 004 que te tengo un sorpresa preparada!- grito 006 extasiado, asomando su cabeza desde la cocina.
De pronto los ojos de 004 se abrían instintivamente mientras permanecían escondidos tras las gafas de sol.
"No es que este impregnado, mas bien 006 se ha puesto a cocinar otra vez sus revoltijos- detecto 004 con notable expresión de alerta y apenas traspasado el umbral de la puerta- Estando yo solo no tengo ningún escape, creo que tendré que comerme sus mejunjes"
Influenciado por el indiscutible sufrimiento estomacal al que se vería sometido, dejo caer su mochila sobre el sofá y colocando luego a 001 con delicadez sobre su cuna, la cual hallo encima del comedor; 004 sintiéndose algo perturbado por lo incierto de su futuro, se acerco al centro de mesa de la sala para hacer más llevadera su situación.
-¡Pero cuantas velas ha comprado 003 ¿Le molestaría a si enciendo alguna?!- comento 004 con firmeza pero fingida espontaneidad, buscando discretamente algo de su bolsillo izquierdo del pantalón.
Desde la cocina, 006 le respondió de manera crédula.
-No lo creo, ella siempre enciende distintas velas no menos de tres veces al día- menciono 006 con total naturalidad, para luego confesar con un marcado tono de franqueza y afecto la sorpresa que por poco le revela a su amigo durante el camino - Sabes 004 estoy tan feliz con tu llegada que no pude contenerme las ganas de prepararte todo un suculento menú de bienvenida-
De tan emocionado 006 y por hallarse atareado sirviendo y adornando los platillos dentro de otra habitación, que afortunadamente no pudo notar la cautelosa pero expresiva cara de pánico de 004, que acababa de encender con unos cerillos la vela más robusta que encontró y por cierto muy hermosa por que tenía la forma de una flor.
"Por lo que entiendo, ya nadie soporta la peste que emana de los experimentos de 006 y no han tenido el corazón de decírselo- pensó 004 mientras abanicaba disimuladamente el humo que arrojaba la vela- Ese hermoso aroma de las azaleas, mmmm... Tiene una diminuta etiqueta que apenas y se puede leer"
DE: JOE
(TU TIERNO OSITO)
PARA: MI DULCE FRANCOISE
-¡Iahh! Pero que cursi es 009- exclamo 004 frunciendo el ceño y con no muy buena cara, dejo sus gafas encima la mesa que estaba atiborrada de aromatizantes- Cosas de chicos-
-¿Decías algo 004?- pregunto con un grito 006 aún sin abandonarla cocina.
Donde únicamente era posible distinguirse la silueta de 006, convertida en un peligroso torbellino de donde sobresalían los dos brazos, ambas piernas, una lengua y constates gruñidos.
- ¡Slumpgrrr, Slumpgrrr!....-
-No te molestes, yo puedo servirme solo- respondió 004 con reservado desencanto a mitad de la sala.
En eso, reparo en la cuna de 001 sobre la mesa y pensado que ahí no podría sucederle nada malo al pequeño, con toda tranquilidad y motivado por unas enigmáticas ganas de tomar otra vez al pequeño entre sus brazos, 004 se dirigió hasta 001, cuando de repente 006 se atravesó brincando encima de él para colocar todos los platos sobre el mantel.
Fue tan grande el salto de 006 que sin ninguna mala intención, casi alcanzó a caer encima de 001, por lo que con su pesado cuerpo provoco que la cuna se dirigiera a toda velocidad contra la pared.
Frente a los ojos de 004, la cuna se hizo pedazos entretanto las astillas flotaron en el aire.
Afortunadamente, 004 se había localizado tan cerca de la cuna que pudo apresurarse lo necesario para sujetar a 001 antes de que este último, corriera la misma suerte de estrellarse contra el muro.
Inmediatamente luego de esta hazaña, 004 examino con gesto impresionado lo sucedido, mientras acunaba a salvo entre sus brazos a 001 que increíblemente continuaba durmiendo.
Sin embargo, inesperadamente fue sacado de sus pensamientos alarmistas por 006, que al parecer no había notado lo que hizo
-Despreocúpate ya todo esta servido- menciono 006 aturdido con los ojos girándoles en espiral debido al golpe que se había propinado - Espero que disfrutes el banquete que con tanto gusto te he preparado-
"No, por favor, por lo que más quiera el Cielo que ocurra un milagro"- rezó 004 por sus adentros tragando saliva.
¡¡¡RIIIIIIIIIIIINNNNNGGGGGG, RIIIIIIIIIIIINNNNNGGGGGG,!!!
-¿Cómo es posible que suene el teléfono en un momento tan importante en nuestras vidas?- pregunto 006 ligeramente enfadado.
-Tal vez se trate del Dr. Gilmore- respondió 004 sin molestarse por no oírse mordaz.
Que la llamada telefónica interrumpiera la ingestión de alimentos de 004 no era lo que indignaba a 006, sino que esta se interpusiera en su momento de gloria.
¡¡¡RIIIIIIIIIIIINNNNNGGGGGG, RIIIIIIIIIIIINNNNNGGGGGG,!!!
-Será mejor que atienda- dijo 006 caminado hasta el aparato.
De mala gana lo descuelgo y saludando sin deseos de hacerlo, de pronto 006 palideció. E inmediatamente colgó repentinamente. Luego, cabizbajo 006 se presentó ante 004.
-Lamento tener que decírtelo 004, pero infortunadamente no podré quedarme para acompañarte- menciono 006 con un expresión realmente afligida- Olvide que hoy tenía un pedido gigantesco de cangrejo a la plancha relleno con salpicón de res. Espero quieras entenderlo-
-Tranquilízate 006- dijo 004 tratando de verse desilusionado, pero aún así reanimando a 006.
"Perfecto así no estaré obligado a comer delante de 006 y nadie podrá ver cuando me deshaga de su comida... Tan pronto se marche enterrare allá afuera todo"- pensó 004 al mismo tiempo que lucia una amplia sonrisa de pretendida comprensión.
No obstante, 004 por instinto poso su mirada sobre la mesa servida, provocando que su gesto se desvaneciera de golpe.
Sobre el mantel se encontraban cinco diferentes platillos, o sea las cinco comidas del día. Pero cada una despedía un olor peor que la otra, por lo que 004 tuvo que obligarse a si mismo a no mostrar muecas de asco al estar oliendo esas atrocidades.
Para su fortuna, 006 se encontraba muy orgulloso de sus creaciones como para fijarse en sus gestos y dispuesto a marcharse, 006 noto que 004 tenía acurrucado a 001.
-¡¡¡WUAUUU!!! Me sorprende lo dedicado eres, no he visto que sueltes a 001 un solo instante y debo admitir que luces bastante bien con un bebé- comento 006 con admiración, quedándose luego pensativo casi al margen de la puerta- Sabes deberías de buscar una mujer como 003 para casarte y empezar una familia. Ahora que Fantasma Negro ya no existe este es el momento indicado para que sientes cabeza por segunda vez. Por cierto, no olvides por favor llamar al Dr. Gilmore para avisar de tu llegada, se suponía que yo tenía que hacerlo pero se me hace tarde, el número lo anote en la agenda-
Sorprendido por lo que acababa de oír y aceptando la petición de 006, la curiosidad abordo la conciencia de 004 mientras percibía como 001 se revolvía entre sus brazos.
-¿Porqué tendría que ser como 003 la mujer con la que yo me vuelva a casar?- pregunto 004 algo incrédulo y con la mirada fija sobre 006.
-Por que es la única chica que conozco, no se de otra ¡JE,JE,JE,JE!..¡Ahh! Quizás regrese hasta muy tarde- comento 006 desvergonzadamente mientras se iba riendo y dando de brincos por la felicidad.
Luego de 006 cerrará la puerta llevándose de la risa un lágrima, se dijo asimimismo:
-¡Pero que malo me he vuelto!-
Con la cabeza agachada, 004 no pudo evitar criticar la contestación de 006.
-Necesita salir más seguido-murmuro 004 bastante molesto.
Así que de mal humor 004 se encamino hasta la ventana trasera, distinguiendo tras el cristal como 006 sacaba del garaje el sedán negro del Dr. Gilmore, al mismo tiempo que escuchaba una melodiosa cancioncilla de 006.
"Sartén Mágica de Chang, amante mía ya pronto estaré junto a ti"
Una vez que se hubo cerciorado de como 006 se alejaba de la cabaña, no muy feliz 004 se encamino al comedor de la casa.
-Pero que gracioso se ha vuelto 006- menciono 004 con pésimo genio- Pobre 001, con lo poco que he visto imagino cuanto habrás sufrido junto a él un día entero. Estoy seguro que por eso no te despiertas-
En eso, 004 destapo un poco a 001 pensado que este podría sentirse acalorado, notando con ello, una especia ligera de salpullido que estaba comenzando a brotarle en la cara. Asombrándose un poco, 004 lo descubrio más.
-¿Tendrá algún tipo de alergia o será una simple irritación?- se pregunto 004 inspeccionando esas diminutas alteraciones- Creo que únicamente es irritación... Me atrevo a firmar que has estado expuesto a la comida de 006 más tiempo de lo debido. Te daré un baño para que te refresque. Espero que con eso se te quite-
De repente 004 sonrío.
-Aunque preferiría que estuvieses despierto, así podríamos mantener una conversación y saber como te sientes-
Cuando 004 se dispuso a subir las escaleras, sintió como aún el estomago se le revolvía, por lo que dio un vistazo atrás.
-Me encargare de la comida y de la llamada mas tarde-
Y sin más rodeos 004 se dirigió al segundo piso.
En el cuarto de baño, 004 encontraba todo cuanto necesita 001. Una pequeña bañera, delicadas toallas azules con avioncitos bordados, shampoo y jabón para bebé. Incluso figuritas flotantes en forma de patos y tortugas.
Preparo el agua a una temperatura adecuada y puso junto a la diminuta tina todo lo que iba a necesitar. Después con delicadeza le quito 001 la ropa y al cerciorarse que su pañal estuviese limpio lo introdujo en la bañera, mojándolo luego con un poco de agua tibia.
Sorprendiéndose asimismo, 004 recordó las muchas veces que había dado un baño a 001. No obstante que en esas ocasiones, 003 lo acompañaba.
Por lo que sonrió brevemente.
Repentinamente el enojoso timbre de la casa, comenzó a oírse
¡¡¡DIIING, DOOONG!!!
-¿Pero quien podrá ser a esta hora?... Espero - dijo 004 un poco disgustado por ser sacado abruptamente de su proceso de autoevaluación.
Sacando a 001 de la bañera, 004 lo envuelve en una toalla llevándoselo consigo.
-Espero que no sea un vendedor- menciono 004 por lo mucho que destetaba a esas indeseables visitas
¡¡¡DIIING, DOOONG!!!
-Como odio que me apresuren- comento 004 con cara de pocos amigos y cargando a 001como si fuese un capullo en lo que se encontraba bajando vivamente las escaleras.
¡¡¡DIIING, DOOONG!!!
-¡Espero que tenga seguro de vida por que ya estoy fastidiado!- grito 004 a pocos metros de la puerta.
¡¡¡DIIING, DOOONG!!! ¡¡¡DIIING, DOOONG!!! ¡¡¡DIIING, DOOONG!!!
Tanto detestaba 004 las insistencias y casi odiando a quien fuera se había atrevido a perturbar su paz, con ansias de ponerlo en sus sitio, de muy mala gana entreabrió la puerta clavando sus ojos azules en el responsable.
- ¡Hola 004! Que sorpresa encontrarte aquí – dijo 002 despreocupadamente en la entrada de la vivienda llevando consigo una amplia maleta sobre su espalda- ¿Me permites pasar? ¿O me vas a tener aquí parado todo el día?-
"Que remedio" -pensó 004 con pesimismo.
En cuestión de un instante, 004 presintió que su estancia ya no sería tan apacible a partir de ese momento.
-Adelante- respondió 004 con una ligera sonrisa.
Abriendo completamente la puerta permitiéndole el paso a 002.
Continuará .....
Este es el tercer capítulo corregido y aumentado. Y aquí la trama si cambia, por que anteriormente 006 recibe a 004 en la casa del Dr. Gilmore y no va a buscarlo al Aeropuerto.
Bueno, lo que sigue no lo he cambiado, ni pensé en hacerlo:
Espero haya sido de su agrado, porque confieso que me demore mucho mas de los que había planeado. No se que pase en el capitulo siguiente, pero considero que la intervención de 002 puede cambiar un poco la atmósfera tan serena de 004.
Nada más deseo que ver a 004 metido en problemas por 002.
Hasta Pronto.
