Hola!!!!! No se si los que lo leyisteis volveréis a las andadas. Hechaba de
menos mi historia, y he decidido seguirla, aunque sea de un modo más
aburrido, e inclinándome por otros aspectos o personajes, intentaré
mantenerme íntegra.
He aquí una continuación de lo que creí terminado, pero que por peticiones
me remito a seguir
La canción que pone título al capi es del anuncio nuevo de GOLF (preciosa
:D)
CAPITULO 11
biZaRRe LoVe tRianGLe
Una luz tenue iluminó suavemente una colcha roja y dorada que cubría un bulto acurrucado debajo de ella. La habitación era grande con numerosos ventanales abiertos de par en par, pero sólo se iluminaba esa cama. Esos pocos rayos de luz típicos de las altas horas de la madrugada despertaron a una levemente dormida castaña, que abrió los ojos sin cansancio ni pereza.
No le costaría despertar esa mañana.
Los ojos color miel iluminados por esa franja de luz continuaban abiertos, pero no se había movido de su postura acurrucada bajo las mantas. Consciente de ella, oculta bajo las sábanas, enfundada entre las tibias manos de la chica, Hermione sostenía aún aquella carta que la noche anterior encontró al pie de su cama.
Apenas se podía leer ya las últimas líneas, devastadas por las lágrimas derramas desde esos ojos miel, mientras leía aquellas palabras de la persona que más quería en el mundo.
Acurrucada en la cama recordaba haber encontrado aquella hoja de papel como respuesta a la ausencia de pelirrojo la noche anterior, después de permanecer en la enfermería. Había salido a buscarle, a explicarle todo, perdirle perdón. Y. . . aunque sabía que le haría mucho daño, confesarle sus sentimientos hacia su hermano Fred. Porque ese abrazo en la enfermería, aquel abrazo que según aquella carta Ron presenció, dijo mucho más de lo que podría decir una noche en los baños, de lo que él mismo dijo aquel día en su habitación, tras rescatarle de la ducha.
Le dijo que todo saldría bien. Y que sería feliz.
Al encontrar aquella carta, desesperada por recuperar a su mejor amigo, a su pelirrojo, y leer entre aquellas líneas los pensamientos de un Ron mucho más maduro que el que podía pensar que podría ser, lloró de culpa y rabia, pero también de felicidad, pues tal como versaban aquellas palabras, volvería a ser su amigo.
Y con ese sentimiento se durmió, acurrucada en esa carta que guardaría con celo, esperando la mañana siguiente, en la que seguramente, no le costaría despertar.
(¯·.) (¯·.) (¯·.) (¯·.) (¯·.)
(¯·.)
¿Así que en serio se ha ido? Eso parece, Harry.
Ron miraba por la ventana de la sala común, con Harry a su lado. Estaba muy serio. Aquella mañana, muy temprano, su hermano George había abandonado el colegio, tal y como le había dicho el día anterior. Y el pelirrojo no sentía pena alguna. Toda aquella experiencia le había hecho reflexionar acerca de la forma de comportarse que había tenido hasta entonces. Quizás, su forma de ser, confiado, impulsivo, temeroso y quizás demasiado respetuoso, había ocasionado todo aquel lío. Quizás si se hubiera comportado como un hombre de verdad. . . Hermione. . .
Su mejor amigo, Harry, le observaba preocupado. Ahí, frente al cristal frío de la ventana, no veía a Ron, al de siempre. Estaba demasiado serio.
Harry deja de mirarme, tío, parece que te quieras acostar conmigo. Ron miró de reojo al moreno y sonrió de medio lado. Harry sonrió.
Ahí estaba Ron.
Y más tranquilo le dio un pequeño empujón, haciendo que ron se empezase a reír.
Entre las risas y comentarios chistosos acerca de las inclinaciones sexuales de ambos, apareció Hermione, igual de sonriente y agradable como lo era todas las mañanas.
Hola chicos, ¿no estaréis discutiendo otra vez verdad?
Harry y Ron pararon de bromear y miraron a la chica.
El moreno miró un poco temeroso a su amigo. La noche anterior le contó todo lo que había pasado, y su resolución al escribir la carta. Le prometió a Hermione la vuelta al triángulo amistoso que siempre había habido entre ellos. Pero conocía demasiado bien a Ron. Esperaba casi con certeza, una explosión de rencor hacia Hermione, rompiendo la promesa que tan fácilmente se promete en un trozo de papel. En aquel microsegundo donde los tres sonreían, quizás falsamente. Harry temeroso de lo inevitable. Hermione esperaba la respuesta de ambos. Y Ron:
Buenos días Hermione. Nada, que aquí tu amigo Harry es gay.
¡Ey!
Comenzaron a pelear otra vez, mientras la castaña reía. Los tres sonreían, sinceramente, tras el primer momento de tensión.
No vuelvas a decir que soy gay, o juro que repartiré panfletos con impresiones de tu bonito cuerpo en pelota picada soltó Harry con furia fingida.
El moreno sonreía, con la asombrosa impresión de que Ron realmente había madurado.
Bueno, ¿bajamos a desayunar? Tengo hambre dijo Ron.
Tú siempre tienes hambre Ron respondió Hermione dándole el abrazo sincero y amistoso que el le pedía en la carta como único recuerdo a lo acontecido el día anterior.
Y viéndolos así, a los dos abrazados, con sonrisas de alivio y nerviosismo, de arrepentimiento y perdón, repartiéndose todo lo que se tenían que decir a través de ese gesto de amistad y unión, tal y como ocurrió el día anterior entre Hermione y Fred, quedó sellado ese lazo de unión, más grande que el título de "novios" y en el que el de "amistad" se quedaba corto.
Bajemos Ron se separó y empujó a los otros dos a través de la puerta Ey, no hace falta que seas así. . . ¡Os he dicho que tengo hambre! gritó Ron.
Los tres rieron bajando las escaleras.
Como siempre.
(¯·.) (¯·.) (¯·.) (¯·.) (¯·.)
(¯·.)
wen es sólo una forma de continuarlo. Es corto pero he puesto mis esfuerzos Si os gusta y queréis seguir leyendo más reviews, por favor. No voy a escribir para nadie!!!:(
MUAKKKZZZZ
('·.¸ ('·.¸ ¸.·'´) ¸.·'´ )
«´¨·.Krl0A .·´¨»
( ¸.·'´(¸.·'´ '·.¸) '·.¸)
CAPITULO 11
biZaRRe LoVe tRianGLe
Una luz tenue iluminó suavemente una colcha roja y dorada que cubría un bulto acurrucado debajo de ella. La habitación era grande con numerosos ventanales abiertos de par en par, pero sólo se iluminaba esa cama. Esos pocos rayos de luz típicos de las altas horas de la madrugada despertaron a una levemente dormida castaña, que abrió los ojos sin cansancio ni pereza.
No le costaría despertar esa mañana.
Los ojos color miel iluminados por esa franja de luz continuaban abiertos, pero no se había movido de su postura acurrucada bajo las mantas. Consciente de ella, oculta bajo las sábanas, enfundada entre las tibias manos de la chica, Hermione sostenía aún aquella carta que la noche anterior encontró al pie de su cama.
Apenas se podía leer ya las últimas líneas, devastadas por las lágrimas derramas desde esos ojos miel, mientras leía aquellas palabras de la persona que más quería en el mundo.
Acurrucada en la cama recordaba haber encontrado aquella hoja de papel como respuesta a la ausencia de pelirrojo la noche anterior, después de permanecer en la enfermería. Había salido a buscarle, a explicarle todo, perdirle perdón. Y. . . aunque sabía que le haría mucho daño, confesarle sus sentimientos hacia su hermano Fred. Porque ese abrazo en la enfermería, aquel abrazo que según aquella carta Ron presenció, dijo mucho más de lo que podría decir una noche en los baños, de lo que él mismo dijo aquel día en su habitación, tras rescatarle de la ducha.
Le dijo que todo saldría bien. Y que sería feliz.
Al encontrar aquella carta, desesperada por recuperar a su mejor amigo, a su pelirrojo, y leer entre aquellas líneas los pensamientos de un Ron mucho más maduro que el que podía pensar que podría ser, lloró de culpa y rabia, pero también de felicidad, pues tal como versaban aquellas palabras, volvería a ser su amigo.
Y con ese sentimiento se durmió, acurrucada en esa carta que guardaría con celo, esperando la mañana siguiente, en la que seguramente, no le costaría despertar.
(¯·.) (¯·.) (¯·.) (¯·.) (¯·.)
(¯·.)
¿Así que en serio se ha ido? Eso parece, Harry.
Ron miraba por la ventana de la sala común, con Harry a su lado. Estaba muy serio. Aquella mañana, muy temprano, su hermano George había abandonado el colegio, tal y como le había dicho el día anterior. Y el pelirrojo no sentía pena alguna. Toda aquella experiencia le había hecho reflexionar acerca de la forma de comportarse que había tenido hasta entonces. Quizás, su forma de ser, confiado, impulsivo, temeroso y quizás demasiado respetuoso, había ocasionado todo aquel lío. Quizás si se hubiera comportado como un hombre de verdad. . . Hermione. . .
Su mejor amigo, Harry, le observaba preocupado. Ahí, frente al cristal frío de la ventana, no veía a Ron, al de siempre. Estaba demasiado serio.
Harry deja de mirarme, tío, parece que te quieras acostar conmigo. Ron miró de reojo al moreno y sonrió de medio lado. Harry sonrió.
Ahí estaba Ron.
Y más tranquilo le dio un pequeño empujón, haciendo que ron se empezase a reír.
Entre las risas y comentarios chistosos acerca de las inclinaciones sexuales de ambos, apareció Hermione, igual de sonriente y agradable como lo era todas las mañanas.
Hola chicos, ¿no estaréis discutiendo otra vez verdad?
Harry y Ron pararon de bromear y miraron a la chica.
El moreno miró un poco temeroso a su amigo. La noche anterior le contó todo lo que había pasado, y su resolución al escribir la carta. Le prometió a Hermione la vuelta al triángulo amistoso que siempre había habido entre ellos. Pero conocía demasiado bien a Ron. Esperaba casi con certeza, una explosión de rencor hacia Hermione, rompiendo la promesa que tan fácilmente se promete en un trozo de papel. En aquel microsegundo donde los tres sonreían, quizás falsamente. Harry temeroso de lo inevitable. Hermione esperaba la respuesta de ambos. Y Ron:
Buenos días Hermione. Nada, que aquí tu amigo Harry es gay.
¡Ey!
Comenzaron a pelear otra vez, mientras la castaña reía. Los tres sonreían, sinceramente, tras el primer momento de tensión.
No vuelvas a decir que soy gay, o juro que repartiré panfletos con impresiones de tu bonito cuerpo en pelota picada soltó Harry con furia fingida.
El moreno sonreía, con la asombrosa impresión de que Ron realmente había madurado.
Bueno, ¿bajamos a desayunar? Tengo hambre dijo Ron.
Tú siempre tienes hambre Ron respondió Hermione dándole el abrazo sincero y amistoso que el le pedía en la carta como único recuerdo a lo acontecido el día anterior.
Y viéndolos así, a los dos abrazados, con sonrisas de alivio y nerviosismo, de arrepentimiento y perdón, repartiéndose todo lo que se tenían que decir a través de ese gesto de amistad y unión, tal y como ocurrió el día anterior entre Hermione y Fred, quedó sellado ese lazo de unión, más grande que el título de "novios" y en el que el de "amistad" se quedaba corto.
Bajemos Ron se separó y empujó a los otros dos a través de la puerta Ey, no hace falta que seas así. . . ¡Os he dicho que tengo hambre! gritó Ron.
Los tres rieron bajando las escaleras.
Como siempre.
(¯·.) (¯·.) (¯·.) (¯·.) (¯·.)
(¯·.)
wen es sólo una forma de continuarlo. Es corto pero he puesto mis esfuerzos Si os gusta y queréis seguir leyendo más reviews, por favor. No voy a escribir para nadie!!!:(
MUAKKKZZZZ
('·.¸ ('·.¸ ¸.·'´) ¸.·'´ )
«´¨·.Krl0A .·´¨»
( ¸.·'´(¸.·'´ '·.¸) '·.¸)
