Se me hace ridículo escribir esto, ya todos lo saben pero aquí va "Los personajes de Ranma ½ no me pertenecen T.T, sino a la gran Rumiko Takashi, yo solo los tomo prestados para hacer este fanfiction, sin ningún ánimo de lucro, solo por diversión".
Nota: La historia esta escrita en primera persona, desde el punto de vista de Akane. Los pensamientos de Akane, las acciones y la narración esta escrita con cursiva. Bueno aquí va el primer capítulo.
Capítulo 1:
Mi…..¿amigo?
Que extraño por que habrá tanto barullo, será mejor que valla a mirar- vamos P-chan parece que esta pasando algo afuera- me dirijo al patio con P-chan, me siento en la banca de la terraza que da justo a la casa de enfrente- Sugoi, mira que camión, es enorme. Se están mudando en la casa de enfrente- mi rostro demuestra mi felicidad y no puedo reprimir que una gran sonrisa adorne mi cara, comienzo a acariciar a mi lindo hámster, luego de un rato lo meto en el bolsillo delantero de mi jardinera- por fin se va a ir esa amargada vieja chismosa no P-chan- miro en dirección al camión para toparme con unos ojos azules que me miran como si fuese un pedazo de carne, y el dueño de estos un hambriento zorro, desvié la mirada rápidamente, otro pervertido más en mi vida, suspiro con desgano- que emoción- digo con mi típico tono sarcástico- dirijo mi vista nuevamente para encontrarme que aquel chico de más o menos de mi edad sigue mirando enseguida veo a todas mis 'amigas' 'colgándose' del nuevo chico y bombardeándolo con preguntas. ¿Qué preguntas?, las típicas: ¿Qué edad tienes? ¿Tienes novia? y cosas por el estilo- típico, llega un nuevo estúpido y todas están tras de el por lo menos un año, así cada una tiene su amorío con el baka. No se que le encuentran a eso no P-chan, es tan idiota, todos los chicos son unos insensibles, IDIOTAS, MAL EDUCADOS, DESCONSIDERADOS, PERVERTIDOS-casi sin darme cuenta termine la oración gritando- Ups. Se me paso la mano- vuelvo a reír al arme cuenta de que Nabiki tiene razón, soy muy temperamental por decirlo suave. Miro de nuevo hacia arriba ¿Qué aquel chico no va a dejar de mirarme? Desvía su mirada por algo que le dijo Shampoo, esa amazona ya saco sus garras. No le basta haber andado con más de la mitad de los chicos del Furinkan, ya le puso el ojo al nuevo. No se por que pero me molesta la idea de que ese chico y la sanguijuela de Shampoo tengan algo. Mejor me voy.
-Akane- Shimata, me vio, voy a 'tener' que acompañarlas.
-No vas a saludar al nuevo- esa es Ukyo mirándolo detalladamente- no crees que es lindo, míralo tiene los ojos azules. Tenemos planeado llevarlo al centro comercial.
-La verdad es que estoy ocupada, iba a darle de comer a P-chan, ha estado todo el día fuera de su jaula.
-Vamos que por saludarlo tu hámster no se va a morir- estúpida Ukyo. Voy a tener que hacer de buena vecina y saludarlo.
-OK. OK. Me llamo Akane tengo quince años, vivo en la casa de enfrente si llegases a necesitar algo pues pideles a ellas, por que por lo que veo ya las tienes baboseando por ti- dije todo esto con el tono más frío que pude encontrar y con una sonrisa falsa. Ja, eso machito entérate que no soy como ellas y que tu jueguito con migo no va a funcionar.
- ehe? O.o¿….yo…..yo…soy Ranma, Ranma Saotome. Por lo que veo tus amigas no me mintieron.
-¿En que?- esas arpías, quizás que le dijeron de mi. Mi aura de combate comienza a hacerse presente. Él solamente sube sus manos y las pone despreocupadamente en la parte baja de su cabeza. Luego de un momento me contesta.
-Oh, nada importante, solo que eres un marimacho- Tuve que contener el impulso de golpearlo, después de todo era nuevo, y no quería que pensara que tenia la razón. Me di la vuelta y entre a mi casa.
-Creo que tal vez fui muy molesto. Será mejor que me disculpe.
-¿A qué hora pasamos por ti Ranma?
-No podré ir con ustedes, lo siento chicas pero tengo que ordenar mis cosas en la nueva habitación
Estuve apoyada en el portón de la casa desde que deje aquella 'agradable' escena, para así escuchar que más decían. Por un momento me agrado la idea de que él se disculpara con migo, y al mismo tiempo me invadió la furia al saber que mis supuestas amigas estuvieran hablando así de mí, quizás cuanto tiempo que hacen eso. Mis ojos se llenaron de lágrimas y la vista se me nublo. PERO SOLO POR UN MOMENTO, no soy ninguna llorona.
-Ingratas- susurro. Y las lágrimas que guardaba recorrieron mi cara hasta aventurarse al suelo. Aquel muchacho asoma la cabeza por la abertura de la puerta
-Yo….venia a disculparme por lo que dije hace un momento. Se que no fue grato para ti escuchar eso, y menos de un desconocido- todo ese rato estuvo jugando con sus dedos, la cabeza inclinada y con un sonrojo en sus mejillas. Debo admitir que se veía kawaii. O.O. Diablos, como puedo siquiera pensar eso, debo estar loca por pensarlo. Levanta la vista de sus dedos y se enfoca en mi cara- Ah, Shimata. Disculpa, no quería que lloraras, lo siento- se fue acercando a mi de a poco, casi con miedo, tomo mis mejillas con sus manos oo, eran suaves, firmes, ó a secar mis lagrimas con ellas. Mi orgullo pudo más, que la deliciosa sensación.
-Suéltame, no te atrevas a tocarme de nuevo- le grité, al tiempo que sacaba rudamente sus manos de mi cara- Idiota no lloro por eso. No me importa lo que un chico opine de mi, ya te lo dije: NO SOY COMO ELLAS.
-Si no lloras por eso entonces ¿por qué?
-¿Quién te crees para interrogarme?- lo mire a los ojos y pude darme cuenta que él si estaba preocupado por lo que me pasaba- Bien, te voy a decir- tome un largo respiro, siempre se me ha hecho difícil confesarme- Estaba llorando por que las que siempre he considerado mis amigas son unas hipócritas. La primera oportunidad que tienen para apuñalarme lo hacen, y lo peor es que lo hacen a espaldas mías. Pero no me puedo alejar de ellas, son las únicas que están conmigo, nadie se acerca a mi y si yo me acerco ellos se alejan, excepto por los pervertidos del Furinkan que solo quieren forzarme a salir con ellos. Y eso me duele, me duele aquí- susurre entrecortadamente con la mano en mi pecho, ya sin poder contener las lagrimas. Siento unos brazos que me rodean, no puedo hacer más que dejar mi cabeza en su pecho y seguir llorando. Cuando la tristeza se fue disipando me di cuenta que estábamos abrazándonos, no tan juntos por que podíamos aplastar a P-chan, pero abrazados. Si mi abuela Colonge me veía tendría muchos problemas. Antes de que me pudiera soltar lo escuche susurrar en mi oído.
-Deberías sonreír más seguido…. Te ves hermosa, estoy seguro que si te vieran sonreír quedarían prendados de ti- como ya había conseguido liberarme un poco del abrazo note que su cara estaba sonrojada al igual que la mía. No dijimos nada solo nos quedamos ahí. Diablos que me pasa, debo recordar que él es un hombre y yo odio a los hombres. Mientras me recriminaba esto me soltó.
-Que bueno que estés mejor ahora…..mmmm, tengo que ir a ordenar mi cuarto mejor me voy- y desapareció rápidamente por la puerta.
-Gracias- fue apenas un murmullo que se dio naturalmente y que no esperaba respuesta.
-Cuando quieras, si necesitas a alguien ahí estaré- fue su respuesta del otro lado de la puerta, en un tono apenas audible, era casi como si el viento lo hubiera traído directamente a mi oído para que nadie más lo escuchase. No pude evitar el reír feliz, la sonrisa no se borro hasta sentir los 'pequeños' dientes de mi hámster mordisquear mi ropa, rayos lo había olvidado tenía que darle de comer
-----------------------
Al día siguiente las chicas cumplieron la promesa de llevar a Ranma al centro comercial, y como siempre tuve que ir con ellas. Shampoo se compro un traje chino rosa, obvio; Ukyo compro dos espátulas y un broche para el cabello; Ranma se compro unas bonitas muñequeras negras con un dragón estampado a lo largo de ellas, el baka tiene buen gusto; yo compre una nueva rueda para P-chan y un hermoso vestido blanco, tiene una cinta celeste en la cintura para ajustarlo, había también un lindo sombrero por 500 yenes pero no me alcanzaba el dinero. Ahora estamos solo él y yo, las chicas están comprando algo para comer, se fueron hace 5 minutos y desde entonces ninguno de los dos ha dicho ninguna palabra. El silencio me esta hartando, lo mejor será que diga algo.
-eh….me gustaron tus muñequeras- dije de repente sin mirarlo.
-¿T-Te gustaron?- me miro por primera vez en el día.
-Si, están muy bonitas ¿Por qué las compraste?- esta vez lo mire
-Practico artes marciales y me hacían falta unas muñequeras, mi hermano destrozó las otras durante una práctica- el también me miro
-¿Practicas artes marciales?- le pregunte casi incrédulamente, afirmo con la cabeza- genial mi abuelo tiene un dojo en casa, todo lo que se lo aprendí ahí y de él. Si eres aficionado debes conocer al gran maestro Happosai-
-Claro que lo conozco. Espero llegar a ser como él algún día.
-Él es mi abuelo. Si quieres luego puedes ir a mi casa-
-¿Happosai es tu abuelo?- Es un baka, que no lo acabo de decir. Lo mejor será no comenzar una pelea.
-Sip, es mi abuelo. He entrenado con él desde los cuatro años.
-¿Tú también entrenas?-
-¿Siempre vas a preguntar lo mismo que digo? Si lo digo es por que así es.
-Siempre estas a la defensiva es por eso que nadie se te acerca. ¿Y por qué entrenas?
-Si que eres curioso. De pequeña entrenaba por que me gustaba, admiro a mí abuelo. Ahora también lo hago por eso pero debo sumarle lo del desafío de Kuno
-¿Desafío de Kuno?
-¿Vas a seguir repitiendo lo mismo? ¬¬- recordé que Ranma no me conocía, por lo tanto no sabía lo del desafío- Kuno les dijo a todos los chicos del Furinkan que si alguno me vencía en combate yo tendría una cita con el, desde entonces todas las mañanas tengo que luchar con todos ellos. No quiero salir con ninguno, por eso detesto a los hombres, son unos superficiales y pervertidos.
-Me gustaría poder ayudarte, podríamos entrenar juntos. Además sería genial si pudiera entrenar con tu abuelo, aprendería mucho de él- en ese momento las muchachas llegaron. Estaban enfadadas, seguramente creyeron que les había robado su conquista dada la familiaridad e intimidad que se formo entre nosotros. Más estúpidas no pueden ser, solo estábamos hablando.
-¿Shampoo y Ukyo interrumpir algo Akane?- La ferocidad con lo que fueron dichas las palabras de Shampoo nos sorprendieron a todos.
-Eres estúpida ¿Sabías?- el ambiente se tenso aún más, gracias a Ukyo todo se arreglo.
-Akane no bromees con eso, no por que Shampoo no sepa hablar bien es estúpida. Solo es un poco retrasada- dijo burlonamente Ukyo para despúes reír exageradamente. Tuve que dar por terminada la pelea, gire el rostro enfadada. Al parecer Ranma lo noto, sentí que me estaba mirando, lo miré yo también y note que estaba haciendo un gran esfuerzo por aguantar la risa, en cuanto lo mire estallo en una carcajada tan contagiante que me encontré a mi misma haciéndolo cuando paramos de reír ambos teníamos lágrimas en los ojos y tanto Shampoo como Ukyo nos miraban como si estuviéramos locos.
Poco a poco esa complicidad entre ambos fue creciendo, él comenzó a entrenar con mi abuelo, luego de un tiempo estuve capacitada para entrenar con ellos también. Ranma se convirtió en mi mejor amigo y confidente, comenzó a luchar a mi lado contra los pervertidos del Furinkan quienes desistieron del duelo entablado por Kuno, todos desistieron excepto Kuno, aún tengo, corrección, TENEMOS que luchar con él. Casi sin darme cuenta Ranma se me metió debajo de la piel, me ha ido enamorando con sus gestos, acciones, reacciones. Nunca me había dado cuenta de que tal vez lo veo con otros ojos, ya no es solo Ranma-mi-amigo, es Ranma-el-joven-al-que-amo. A un año de conocerlo puedo afirmar eso, y puedo atestiguar alegremente que los intentos de Shampoo y Ukyo por conquistarlo han sido en vano. Mi baka es muy tímido, me contó que entreno por diez años con su padre viajando por distintos lugares del mundo, después de eso sus padres se reencontraron y re-enamoraron, el entrenamiento termino debido a que su madre quedo embarazada; por su entrenamiento Ranma nunca tuvo contacto con las chicas lo que se le hace difícil interactuar con ellas.
-----------------------
Era día viernes, estábamos celebrando el aniversario de la llegada de Ranma en la casa de Shampoo. A Ukyo se le ocurrió la 'brillante' idea de jugar "Verdad o Desafío".
-Como es la casa de Shampoo que sea ella la primera. Shampoo Verdad o Desafío.
-Desafío- Ukyo estuvo pensando el reto a hacer hasta que uno de los amigos de Ranma dijo:
-Que bese a Ranma- escuche muchos gritos de apoyo a esa idea, fundamentalmente de hombres, otros de desagrado proveniente de mujeres. Sin que ni siquiera se hubiera aprobado la idea Shampoo beso a Ranma. ¿La reacción de él? Ninguna, no se movió, se quedo tieso. ¿Mi reacción? Apretar los puños y tratar de contener la ira que cada vez iba en aumento, creo que Ranma noto mi aura de combate brotar por que rápidamente empujo a Shampoo. No pude soportar su mirada, así que me fui de la habitación. Subí a la alcoba de Ukyo en el segundo piso y deje que mis sentimientos emergieran.
-¿Qué te paso?- Kami, que susto me dio, no lo sentí entrar.
-Nada ¿Por qué?
-Algo te tiene que haber pasado, saliste pálida del salón y te encuentro aquí arriba con los ojos húmedos y tiritando- él estaba arrodillado en el suelo enfrente de mí mientras que yo estaba sentada en la cama de Ukyo.
-De verdad no me pasa nada. Creo que tome mucho sake y me hizo mal- mentí, no quería que supiera que me estaba muriendo de celos por dentro.
-No se si creerte ¬¬- hizo una pausa, se levanto y tomo mis manos- bajemos, la fiesta esta entretenida- como me tenia las manos tomadas se le hizo fácil levantarme, yo lo seguí, caminaba casi sin caminar, no sentía ninguna parte de mi cuerpo, a excepción de mi herido corazón- Me asqueo el beso, Shampoo debería darse cuenta que no me gusta, se lo he dicho en todos los tonos existentes- no sabía si sentirme aliviada o asustada por lo dicho. No alcanzo a ocultarle nada, se dio cuenta que estaba así por el beso y no por el sake.
-¿En serio no te gusto?- se giro y enfrento mi mirada- Shampoo es muy bonita, cualquier chico haría lo que fuera por besarla-
-Deberías tener más que claro que yo no soy como cualquier chico. No me gusto el beso, ya te lo dije, me repugno, ni siquiera lo correspondí- no sabía que responder a eso, así que me deje llevar. Sin darme cuenta nos encontrábamos abajo, aún tomados de la mano, ni él ni yo hicimos nada por romper esa unión.
-Que bueno que volviste Ranma, la fiesta es en tu nombre, no deberías irte de nuevo. Es más, el próximo serás tú Verdad o Desafío- le pregunto Ukyo
-Verdad- le respondió seguro Ranma.
-Mmm?.... ¡Ya se! ¿Quién te gusta?- lo mire a la cara, su linda cara cubierta ahora por un tierno rosa.
-Mejor desafío- debatió algo tímido.
-Cobarde- susurro Ukyo sin que él la escuchase- Entonces …..mmmm….. Besa durante tres minutos a….- miro por todo el salón hasta que sus ojos se toparon con los míos. No, no quiero que nuestro primer beso sea así, pero pensándolo bien no quiero que bese a nadie más que no sea yo- besa a Akane- su cara se torno mucho mas roja que antes. Como si se tratase de un robot su cara se giro hacia la mía mecánicamente.
-Tal vez a Akane le moleste- le dijo a Ukyo, pero sus ojos no dejaron mi rostro. Solté el agarre de nuestras manos y le susurre en el oído:
-Si no me besas a mi tendrás que hacerlo con cualquier otra chica- lo mire a los ojos tratando de animarlo y a la vez haciéndole saber que no me iba a negar.
-Bien, voy a besar a Akane- puso sus manos en mis mejillas y se me acerco lentamente, la fiesta había pasado a segundo plano para mi, solo existíamos nosotros dos, las caricias que nuestros alientos tenían me dejaron embriagada, no sabia que se podía sentir así, poco antes que nuestros labios se rozasen me pidió en un susurro-Cierra tus ojos- él tenia los suyos abiertos una rendija, para ver mis labios. Hice lo que me pidió, fue una verdadera tortura los siguientes diez segundos, sus labios aún no acariciaban los míos y ya me estaba desesperando, hasta que lo sentí, sus suaves labios tocaban los míos, inexperta pero deliciosamente comenzó a moverlos acariciando los míos. Al igual que él era la primera vez que basaba, no sabía que hacer y sin saber como moví mis labios al igual que los suyos, lentamente, entreabriéndolos un poco. Ambos tiritábamos, salte al sentir la punta de su lengua en mis labios, tratando de abrirlos más, hecha su hazaña exploró dentro de mi boca, abrí mis ojos sorprendida, los suyos estaban cerrados, podría asegurar que estaba inconsciente de lo que pasaba alrededor. Volví a cerrar los ojos. Ranma seguía explorándome, me pregunte como seria su boca, que sabor tendría, me aventure e introduje mi lengua en su boca, lo escuche suspirar, creo que también escuche algunas risas lejanas, llevábamos un rato explorándonos mutuamente, de vez en cuando nuestras lenguas se acariciaban entre si. Ranma suspiraba de vez en cuando, al igual que yo, nunca me había sentido así, sentía fuegos artificiales en mi cabeza y me vino un mareo, era extraño pero delicioso podría estar así por siempre…. Escuchaba algunas voces de fondo, se escuchaba extraño, así como cuando tus oídos se tapan.
-Chicos…. Hey chicos. Ya, ya pasaron los tres minutos- no quería prestar atención, sin embargo Ukyo nos separo toscamente- Dije que ya, paren ¿No?, eran tres minutos y llevan casi cinco- el tono irónico y venenoso me molesto igual o más que las risas que acompañaron al comentario. Ranma se avergonzó.
-No te escuche- dijo cortante, comenzó a caminar hacia la cocina, al llegó a la puerta de esta - ya cumplí el ridículo desafío, ahora déjenme en paz- nunca miro hacia atrás, entro a la cocina dando un fuerte portazo. También me sentí avergonzada, ahora estaba conciente del espectáculo que habíamos dado. Lo mejor era seguirlo y hablar con él. Emprendí el camino a la cocina. Durante el trayecto vi a dos de mis compañeros bufándose de nosotros, se estaban abrazando, simulaban que se besaban, y comenzaron a gemir fingidamente alternando nuestros nombres. Al ver la escena todos rieron nuevamente. Camine mucho más rápido y me uní a Ranma.
-----------------------
No estaba en la cocina, estaba afuera, en la mecedora. Me acerque.
-¿Qué no escucharon? Déjenme en paz, quiero estar solo- estaba con los codos apoyados en sus muslos y la cabeza entre las manos mirando al suelo, no me mov- ¿Quieres que te lo explique con dibujos?, NO QUIERO VER A NADIE- dirigió su vista a mi. Al verme se sorprendi- Disculpa no sabía que eras tú. Pensé que eran los otros.
-¿Me puedo sentar a tu lado?
-Claro, no estoy enfadado con tigo- tome sus manos. Las acaricio con las suyas- estoy harto de todos ellos.
-¿No te gustó?- creo que la tristeza se reflejo en aquella interrogante. No me atreví a mirarle, baje mi cabeza enfocando mis ojos en el suelo, el cabello suelto cubrió mi cara.
-¿A que te refieres?
-Al beso…. ¿No te gusto el beso?- seguía triste por una posible negativa. Esta vez Ranma lo noto. Giro un poco su cuerpo hacia mí.
-No seas tonta- ¿Era eso una negativa?- Mirame- ordeno. No podía, no podía mirarlo. Tomo mi cara en sus manos haciendo que nos miráramos. Recogió algo de mi cabello y lo llevo tras de mi oreja. Luego bajo sus manos- ¿Correspondí no?
-Si pero…. Pero luego saliste enfadado.
-Me irritan ellos, apostaría cualquier cosa a que se mofaron de nosotros- reí un poco- Realmente te ves hermosa cuando sonríes.
-Me vas a responder
-¿Qué cosa?
-¿Te gusto?- mordí mi labio inferior en consecuencia del nerviosismo. Ranma comenzó a sonreír.
-Demasiado- me respondió sonrojándose. Estaba jugando con sus dedos- ¿Te puedo preguntar algo?
-Claro que si baka-
-¿Yo….emh….yo hice sonidos cuando nos besábamos?- Se veía tierno, no fue capaz de decir aquella frase seguida, hablo entrecortadamente y en un susurro. ¿'Sonidos'? los quiere denominar sonidos. Me cuesta responderle, no tengo el valor.
-…………………-Lo dije. OO. Oh Kami lo dije, algo bajo……muy bajo, ¿Me escuchó?
-……No te escuche A-chan, dilo de nuevo- lo mire a los ojos asustada.
-Dije que si, y yo también- estuvimos callados y sin mirarnos por lo menos quince minutos, quince tortuosos minutos. Esto tenía que terminar, no quería perder a mi mejor amigo, prefería tener a Ranma como mi amigo por siempre, que tener a un Ranma algo-más-que-amigo que SE que durara un tiempo, y luego de que eso termine no volveremos a ser los mismos, no PODRÍAMOS ser los mismos. Hice mi decisión aquel beso tendría que olvidarse, seriamos los mismos de antes, las mismas peleas, los mismos insultos, todo como antes……aunque me lastime- Son las dos de la mañana, la noche es joven, vamos a divertirnos. Si alguien nos molesta se las va a ver con mi mazo- termine la frase mostrando al objeto y balanceándolo tratando de animarlo- Y si cierto jovencito sigue ahí y no me acompaña también mirará mi mazo de cerca- me miro, sonrió, se levanto tomo mis manos al igual que lo hiciera en el cuarto de Ukyo. Nos dirigimos a la fiesta tomados de la mano. Antes de llegar al salón donde se celebraba se detuvo.
- Gracias por hacerme sentir bien- iba a responder, le iba a decir que no tenia por que agradecer pero me sorprendió - Gracias A-chan, pero…..pero no quiero olvidarlo- fue lo único que dijo pero entendí perfectamente, ya lo dije, no alcanzo a ocultarle nada. Tal vez……tal vez, tal vez él también piensa que esto puede ser algo más que una simple amistad. Este pensamiento, fuera cierto o no, me mantuvo alegre el resto de la noche.
--------------------
----------------
-----------
Fin del capitulo I
Nota de la autora: Hola a tods, es el primer fanfic que me animo a publicar, y el tercero que escribo así que soy nueva en esto, no sean rudos XP. Quiero dedicar esto a mi GRAN amiga Mai, chica te adoro, no se que sería de mi sin ti; a Hitomi-ciel y Catalina que probablemente no lean esto pero también son muy buenas amigas, con esto quiero agradecerles que por ustedes tres hoy estoy fuera de mi depre. Y también dedicado a todos lo que estén leyendo. Nunca he sido buena escribiendo cartas ni dedicatorias, así que corto aquí. Si tienen dudas, comentarios u otras cosas MENOS VIRUS que he tenido que formatear mi compu dos veces por ellos T.T manden sus mensajes o
Prometo responderlos todos.
Nos vemos o leemos en el próximo capitulo.
XP -------- NORIKO -------- XP
