"Te ves hermosa cuando dormís"- murmuró alguien a mi oído mientras besaba mi rostro y cuello
"Es muy temprano, tengo sueño"- murmuré tapando mi cabeza con la sabana, Legolas me destapó completamente en un movimiento, mientras observaba mi cuerpo desnudo
"Los niños se levantaran en cualquier momento ¿No querrás que te vean en esas fachas?"- me levanté con pesar mirando en forma asesina a ese hermoso principito, tenía razón, por mal que me pese los niños no tardarían en invadir nuestra cama
"Vos no estas en mejores fachas"- comente mirando su pálido cuerpo, se levantó de un salto y plantó un beso en mis labios, en ese instante alguien tocó a la puerta, me calcé en un movimiento el camisón que se encontraba en el piso mientras Legolas hizo lo mismo con su pantalón.
"Pasen"- comentamos a una voz mientras nos tirábamos en la cama
"Aiya!!!"- gritaron dos infantiles voces mientras se tiraban encima nuestro y nos hacían cosquillas
"Niphedril, me estas ahogando"- comenté a la niña que se encontraba sobre m
"Esta bien- comentó la niña sentándose a mi lado- no te molesto, pero..."
"Sos una aburrida- le espetó su hermano- la idea era torturarlos"
"Gildor, no trates mal a tu hermana"- le retó su padre
"Bah... yo quería que ustedes se desarmaran de risa"- se quej
"Yo lo que quiero es estrenar la ropa que compramos la última vez que fuimos a visitar a los abuelos, quiero estar lista cuando lleguen"- Legolas y yo nos miramos sorprendidos
"Son las 10.30 de la mañana"- comentamos a una voz saltando de la cama
"Vamos chicos, tenemos que apurarnos, vayan a bañarse, tenemos que estar listos cuanto antes"- los apure, justo ese día teníamos que levantarnos tarde
Hacía once años que mi vida se había unido a la de ese elfo aunque solo llevábamos ocho de "casados", después de un tiempo habíamos decidido casarnos según las costumbres de mi dimensión para darles el gusto a mis padres, habíamos decidido decirles a estos que viviríamos en el exterior del país, de la dimensión, que más da.
En el lugar en el que vivimos 110 eran los años que llevábamos juntos, cual no había sido la alegría de Thanduril y Silmarien al enterarse la diferencia temporal que permitiría que su hijo no muriera tan rápidamente atado a mi destino mortal, habíamos construido una cómoda casa en el bosque alejada de la ciudad pero solo a media hora a caballo del palacio.
Justo ese día mis padres habían tomado un avión hasta Liechtenstein, el país en el que supuestamente vivíamos, XZ había organizado todo para abrir un portal y trasladar a mis padres en algún momento a otro avión que aterrizaría en las afueras del bosque, con la excusa de la hermosa vista los traeríamos a caballo.
Habíamos tratado de posponer esa vista por años, pero no habíamos podido negarnos aquella vez; nuestra casa era una extraña mezcla entre los objetos propios del lugar y algunos elementos tecnológicos que yo utilizaba para mantenerme en contacto con mi trabajo, el cual obviamente no había abandonado
Cuando salí del baño me puse un cómodo jean, una camisa entallada y unas zapatillas
"Hace años que no me sentía tan cómoda- murmuré, por protocolo, como princesa del Bosque Negro debía llevar vestido para todo, por lo que mis adorados pantalones habían caído en el olvido, Legolas me miraba sonriente con sus jeans y camisa blanca, le había tomado el gusto a aquella ropa el tiempo en el que visitábamos mi dimensión, alguien golpeo a la puerta
"Niniel ya despert"- comentó una elfa asomando por la puerta con el pequeño bulto, le indique que pasara y dejó a la bebe en mis brazos- "disculpe, pero es muy necesario que utilicemos esta ropa, es que me siento muy incómoda"- al parecer, la extraña ropa humana no era tan simpática para aquellos elfos
"Por favor Ithil, es por mis padres"- la elfa asintió con una sonrisa y salió, miré a la bebe en mis brazos
"Parece que tienes hambre"- expliqué mientras abría mi camisa y la amamantaba
"Eso es lo único que puedo envidiarte, yo nunca voy a sentir la sensación de dar con mi propio cuerpo de comer a mis hijos"- comentó un celoso padre a mi lado, abrazándonos
Una discusión se oyó tras la puerta, mientras los mellizos se aproximaban peleando
"Ni siete mil orcos provocan el desastre que esos niños de setenta años"- murmuró Legolas mientras los pequeños entraban a la pieza hablando a la vez
"de a uno o terminaré haciendo las cosas al revez"- murmuré en el momento en que Niniel mordía mi pecho-"auch, al parecer esta niña ya esta queriendo morder"
"Naneth, no quiero ponerme vestido"- se quejo Niphedril
"Vamos a caballo, usa mejor los jeans con flores bordados, Ithil te ayudará a cambiarte"- conclu
" Gracias, naneth"- dijo clavando un beso en mi mejilla mientras corría por el pasillo
"Bah.. el vestido esto el vestido lo otro"
"Gildor, no tendrías que cambiarte también tu"- lo regañó Legolas
"Es que yo tampoco se que ponerme ada"- acepto sonrojado
"Muy bien, vamos y te ayudo a vestirte"- se ofreci
"Ada!!! Yo me visto solo!!" concluyo un ofendido Gildor saliendo de la habitación
"Sacó tu carácter"- comentamos a una voz contemplándonos antes de estallar en una carcajada
Después de muchas discusiones entradas y salidas partimos con cuatro caballos libres, hacia el "aeropuerto", una imagen holográfica de alta calidad que XZ había creado para tal ocasión, cuando terminaron los saludos nos dirigimos hacia la casa, tanto Elías como Micaela parecían tener pánico de los caballos, los niños los calmaban, en lo que ellos recordarían como el peor papelón de su vida. Una vez en nuestro hogar comenzaron las sonrisas y recuerdos
"Parece que el tiempo nunca pasara para voz hermanita- se burló Micaela- estas igual que hace diez años, si hasta pareces más joven que yo"
"Me mantengo activa todo el tiempo, ese es mi secreto"- murmuré mientras almorzábamos
"Y Legolas, como va el trabajo?"- preguntó mi padre
"Por ahora todo normal, los negocios –entiéndase por el reino- van muy bien, mi padre y yo estamos muy contentos"
"Tienen en verdad una casa muy hermosa- comentó mamá- en un estilo raro, pero hermoso"- en ese instante un mensajero llego hasta nosotros
"Su padre lo necesita de inmediato, majestad"- comentó dando una nota a Legolas, mi familia nos miraba extrañada ¿majestad?
"Si me disculpan, debo partir para la ciudad de inmediato"- Legolas se levantó de la mesa con una reverencia, - "alcánzame en cuanto puedas"- murmuró besando mi mejilla. En cuanto terminamos de comer deje a los niños con sus abuelos, tomé un caballo y partí en dirección del palacio
"Se puede saber porqué nunca me lo dijiste"- bufó Thanduril cuando llegué frente a él, al parecer estaba furioso, Legolas a su lado me miraba confundido
"que no te dije que???"- en verdad no sabía de que me hablaba
"Como es eso que sos la guardiana del universo"- cri cri... hay Eru, quien más podría saberlo?? Suspiré
"Cuando estuve muerta Eru y yo tuvimos un cara a cara- expliqué por fin- me explicó que uno de los hijos de la luz debe vivir hasta la próxima encarnación, para mantener el equilibrio, y la elegida fui yo- los ojos de ambos elfos brillaban felices- por eso permaneceré joven hasta que dentro de veinte mil años (n.a: dos mil años de la dimensión propia de Lamia) me dormiré y dejaré este mundo a los nuevos hijos de la luz"
"Por qué no me lo habías dicho antes?"- preguntó Legolas con la mirada triste
"Porque prometí guardar el secreto hasta que sea inevitable no notarlo, esa fue la condición que Eru me puso, lo que quiero saber es como lo saben ustedes"- en ese instante entró un guardia con Micaela a rastras, mire a mi hermana extrañada, mientras esta clavaba sus ojos en m
"Esta intrusa estaba escuchando tras la puerta majestad"- explicó el guardia
"Es mi hermana"- me apuré a avisar, antes que el rey se cabreara
"Que fue lo que ocurrió?"- le preguntó este, Micaela lo miró atemorizada, yo le indiqué que hablara.
"Me extrañó la forma en la que salieron de la casa- explico – además todo allí se nota distinto, raro, me llamó la atención así que seguí a Lamia y me escabullí hasta aquí- explicó- Ahora alguien puede decirme exactamente que pasa aquí??"- suspiré y mire a Legolas y a Micaela
"Llegó la hora de la verdad"
snif, snif, ya ahora si me despido de este fic, ya se termino ;; buahhhhhh y yo que me encariñé tanto!!! buahhhhhh ;; ni hablar, alargarlo hubiera sido perder el senrido de la historia y tampoco quería eso Namarië buscando un futuro, aquí te dejo, pero antes:
Hada: ya vez que los pobres padres de Lamia son unos inocentes, que nunca se dieron cuenta de nada, necesitaron de una hermana metiche para arreglar las cosas jejjeje, ya ves que lindos los demon..digo hijos de LAmia y Legolas, y fui buenita y les di un poco de más tiempo juntos, espero que nos veamos en la próxima historia (tengo varias ideas jejjeje) Namari
