El
pedido de ayuda
Vincent custodiaba la entrada del cuarto de
los chicos de sexto de Slitherin, mientras Gregory trataba de
explicarle a su amigo lo que habían visto en Hogsmeade.
Draco
se había enfermado y había obligado a sus dos amigos a
ir al pueblo nada mas para seguirla. Esa chica lo tenía loco.
Ya no sabía que hacer.
El esfuerzo de Goyle era
considerable pero su cerebro no le permitía hablar como una
persona decente haciéndolo dispersarse a cada rato y no
permitiéndole explicarle las cosas como Draco necesitaba y
quería. Además, este oyente era del tipo de chico de
dieciséis años que no tiene demasiada paciencia con los
otros y el solo hecho de que Goyle no le pudiese explicar lo que
había pasado lo hacía estallar de furia.
Crabbe por
su parte controlaba que Pansy Parkinson no se acercara al cuarto con
su afán de mostrar sus sonrisitas fingidas y demostrar su
aptitudes para enfermera clandestina. Draco odiaba que eso sucediese.
Draco Malfoy, Vincent Crabbe y Gregory Goyle eran amigos desde el
primer viaje en tren hacia Hogwards. Desde ese momento conocían
también a esa chica que tenía al chico Malfoy
distraído, o mas de lo habitual.
- Muy bien – dijo
tratando de mantener la cordura pero respirando agitadamente – La
vieron en Hogsmeade primero con los dos idiotas que tiene por
amigos.
- Si, luego se separó de ellos, se fue...
- Bien
Greg, ya te estoy entendiendo... – repuso moviendo su cabellera
rubia y fijando sus ojos grises en los de Goyle – con quien se
fue...
- Con ese chico... ¿Cómo se llama? – dijo
estrujando su pequeño cerebro para sacar un mísero
nombre que la mayoría de las chicas del mundo conocían
-
¿Chico? ¿Quién Greg? Vamos, haz el intento... –
dijo Malfoy cerrando sus puños
- Es... Un chico con
cabellos negros... Ah si!... Victor Krum
Draco abrió
ligeramente su boca... Su Hermione con ese idiota que no servía
para otra cosa que para jugar Quiddich. Maldito buscador del equipo
de Bulgaria... Maldito cuarto año, cuando Herm y ese inútil
se habían conocido. Maldita sangre sucia que lo hacía
dar vueltas como si estuviese en su escoba voladora haciéndolo
sentir alguien especial, alguien superior, haciéndolo volar,
elevarse, pero sin sacar los pies de la tierra. Maldita realidad en
la que ella lo odiaba... Por que así era, el estaba seguro,
Hermione Granger lo odiaba. Maldita la primera vez que la había
tratado mal, quizás si no lo hubiese hecho ella no le
guardaría rencor. Maldito segundo año, cuando el sintió
una sensación extraña al verla.
Odiaba no poder
hablarle como un amigo o alguien mas importante que eso, odiaba
pensar que ella no lo quería. Sufría por la distancia.
Tenerla tan lejos le hacía mal. Necesitaba hablarle,
necesitaba consolarla, secarle esas lágrimas... Esta distancia
tenía que terminar.
- Draco... – le dijo una voz femenina
desde la realidad. Sin darse cuenta, él se había
sumergido en esos oscuros pensamientos que lo mataban en vida.
-
Pansy – dijo él mirando los ojos castaños de la
chica.
Ella le sonrió y le acarició los cabellos
rubios, mirándolo a los ojos. Ese chico, el chico Malfoy a
quienes todos odiaban era su máximo objetivo, era el chico que
ella quería tener a su lado toda la vida. Para ello solo hacía
falta que el se le confesara. Pero para que Draco sintiera por ella
otra sensación que repugnancia muy bien fingida faltaba un
largo trecho que ella ni se imaginaba.
- ¿Cómo te
encuentras? – le preguntó ella con su voz gangosa y tratando
de arrastrar las palabras como hacía él.
- Bien
gracias – le dijo él en un tono cortado para que ella
comprendiera de que no tenía nada que hacer allí.
Ella,
como siempre, se dio por aludida. Y continuo sonriéndole como
si su vida dependiese de ello.
Draco miró a Vincent quien
fingió haber visto a un profesor nada mas para que esa idiota
se fuese.
Por supuesto, el cerebro de la chica no le funciono como
Dios mandaba y trato de hacerse la heroína de telenovela
quedándose allí, aguardando para enfrentar su destino.
Draco la miró con una extraña mezcla de lástima
e incomprensión tratando de no reír de ella. Entonces
Gregory la tomó de la muñeca y le dijo que si los
profesores llegaban y la veían allí ella sería
expulsada y no podía ver a Draco nunca más en su
vida.
Por primera vez el cerebro de Goyle sirvió para algo
más que llenar espacio en el cráneo de su portador,
porque la chica se paró de inmediato le dio un beso en la
mejilla a Draco y se fue, sonriéndole, por supuesto.
Draco
se le quedó mirando un momento a Goyle.
- Greg, creo que te
amo...
Al decir esto los tres muchachos lanzaron estridentes
carcajadas.
- ahora – dijo el rubio fijándose en Crabbe –
puedes explicarme que pasó cuando Herm se fue con Krum... Greg
no pudo.
Vincent sonrió. Ese sarcasmo, típico de su
amigo, no era con mala intención, sino con impaciencia.
-
¿Ya te contó todo?
- Todo, ¿qué?
-
Bien – dijo el joven alto y delgado, había cambiado mucho
desde la entrada de Hogwards, sentándose sobre la cama de su
amigo – La chica Granger estuvo poco tiempo con Weasley y Potter y
cuando se iba a ir, Weasley le preguntó donde iba y ella le
dijo que se iría a tomar algo con Krum, que la había
invitado... Weasley se puso histérico y empezó a gritar
y a preguntarle no se que cosa como si fuese su hermano mayor y le
dijo que ella no se iría... Se pelearon muy feo...
- Bien –
dijo Draco entornando su mirada – eso es bueno, ¿no creen?
Uno menos.
- Supones que Weasley también esta...
- Si –
dijo el rubio bajando sus ojos grises y mirando el suelo sin dejar
que su amigo terminase su frase...
- Potter trató se mediar
pero se cansó y se fue solo afuera y desapareció –
dijo Goyle como quien se acuerda de algo – pero supongo que eso no
es importante...
- No lo es... – dijo Vincent
- Te equivocas
Vince, es muy importante... Si Herm se peleó con Weasley y
Potter no habrá problemas para que yo hable con ella, no se si
entienden. Quizás hasta pueda consolarla...
Ambos amigos de
Malfoy abrieron sus ojos enormes... Draco era tan inteligente...
-
continua Vince, y Greg... si se te ocurre otro de estos detalles,
dilo – dijo Malfoy mirando a Crabbe con impaciencia.
- Bueno,
entonces se fue con Krrum, pero no se quedó mucho, o por lo
menos no lo que él esperaba... Ella se veía triste... –
dijo Crabbe así concluyendo su relato.
- Greg, ¿algo
para contar? – pregunto el rubio aun sumergido en el éxtasis
de imaginarse consolando a Hermione
- Si... Vi a Weasley escondido
cerca nuestro espiando a Granger con Krum, luego Krum la acompañó
a la salida del pueblo y Weasley estaba allí. El saludo entre
Krum y Weasley fue bastante tenso...
Draco volvió a quedar
con la boca abierta. Sus amigos habían hecho mejor trabajo del
que él se había pensado...
- Drak – dijo Crabbe -
¿estas bien?
- Así que Weasley se dio cuenta de los
sentimientos de Krum... me lo había imaginado... Weasley es
pobre, no estúpido. Debo actuar rápido o sino...
- O
sino qué... – dijeron sus amigos a coro.
- La perderé.
Ese pobretón de Weasley me la sacará... – Draco juntó
los dedos como cuando pensaba – Bien, llamen a Snape...
-
¿Me llamaste Draco? – dijo el hombre con nariz ganchuda y al
verlo en la cama le dijo - ¿Qué pasa muchacho?
-
Nada importante, solo un resfriado... – le dijo el rubio moviendo
su cabellera y su mano sin darle importancia – necesito ayuda
profesor...
Snape lo miró de costado. ¿El hijo de
Lucius Malfoy pidiendo ayuda? ¿Draco Malfoy, el
autosuficiente?
- Dime – dijo el hombre preocupado
-
Profesor, me tiene que ayudar con una chica
Severus Snape se
tranquilizó. Era solo eso.
- No necesitas ayuda...
Parkinson esta...
- No es el Parkinson, es...
Snape lo miro y
Draco corrió la vista.
- ¿Quién?
-
Granger
- ¿Qué?
- Lo que escuchó... Me
gusta Hermione Granger... y necesito su ayuda para conquistarla...
-
Oh dios – dijo tocándole la frente – la fiebre te ha
afectado, hijo.
- No, no es nuevo esto...
- Es cierto – dijo
Crabbe detrás de el profesor de pociones. Éste tenía
un aprecio especial hacia Draco. – le gusta desde segundo
- ¿Por
qué no me lo dijiste?
Draco bajo la mirada, no quería
admitirlo. Era cierto de que le encantaba Hermione y soñaba
con ella y demás romanticismos, pero él no lo quiso
aceptar en un primer momento. ¿Él, Draco Malfoy, con
una sangre sucia?
- Tenía vergüenza, miedo...
-
Entiendo, pero creo que ahora debes tener un miedo mas grande, ya que
me lo has contado – dijo el astuto profesor que sin duda merecía
el titulo de un ex Slitherin por su astucia e inteligencia.
- Le
tengo miedo a que alguien me la saque – dijo el muchacho algo
sonrojado, odiaba a pensar que Weasley se la podía sacar.
Weasley era pobre, alguien que nunca llegaría a ser nadie,
como su padre, pero lo que mas le molestaba a Draco era que Herm le
prestara atención a un grandísimo estúpido
pelirrojo pecoso como ese. Por eso odiaba admitir que esa basura se
podía quedar con alguien como Herm.
Al ver la cara del
chico Malfoy Severus reaccionó de inmediato.
- Weasley...
-
Exacto – dijo el muchacho – lo odio admitir pero ese enorme
pobretón se la quedará si usted no me ayuda.
Snape
parecía enfurecido.
- La culpa es de Potter – dijo el
hombre haciendo que Draco levantara las cejas interrogándolo –
Esos desgraciados tienen amigos que fastidian las vidas amorosas de
los de esta casa.
- No entiendo... – dijo Goyle
- Cuando
estaba en Hogwards me gustaba una joven, Eva Grant, y el estúpido
mejor amigo de Potter se casó con ella. Desgraciado...
-
¿Habla de Sirius Black? – dijo Goyle
- Si, ¿como
lo sabes? – preguntó intrigado Snape
- Mi padre me contó
de que media escuela estaba enamorada de esa chica, luego se casó
con la mayor basura mundial y luego la mataron los mortífagos.
-
Así es... – dijo bajando la cabeza Severus, quien aun
extrañaba a esa chica de cabellos castaños, y luego de
una pausa continuo – Volvamos a Granger...
- Quiero pedirle que
me ayude a pensar en algo, cualquier cosa...
- Primero te llevaré
a la enfermería y luego...
Snape sonrió. Ayudaría
a Draco, nada mas para vengarse de lo que había pasado en su
adolescencia, con Eva.
En el proximo cap:
Principio del plan de Snape
¿Qué pasará?
