Titulo: La Venganza
Bueno lo de siempre como ya han leído antes no es necesario repetirlo... bla bla bla... miles de gracias por los reviews y esto es dedicado a todos aquellos que leen esta historia...
Capítulo N° 09: Viviendo Juntos II
La habitación estaba oscura aunque levemente iluminada por la luna que filtraba sus plateados rayos en la habitación... debían ser más o menos las 4 de la mañana...
Kaede abrió los ojos al sentir como unos cálidos dedos comenzaron a recorrer su torso bajo su camisa... y poco a poco comenzaban a bajar hasta su abdomen... un suspiro escapó de sus labios siendo acallado por unos posesivos labios que se unían a los suyos... podía sentir ese adictivo sabor entre dulce y salado y reconoció inmediatamente a su dueño...
- Hanaaa... – suspiró nuevamente al sentir como su amante se separa de él para poder tomar aire... algo le decía en su mente que debía detenerlo... que no podía continuar... que era un error, sin embargo el placer que comenzaba a embargarlo era más fuerte...
Los cabellos del pelirrojo caían sobre su tostado rostro dándole un aspecto salvaje... se encontraba con la parte superior del pijama abierto... Kaede subió sus manos hasta colocarlas bajo las costillas del pelirrojo... entonces Hanamichi comenzó a besarlo nuevamente desde la parte posterior de la nuca pasando por el cuello, luego con una de sus manos comenzó a jugar con las tetillas erectas del moreno dándole pequeños piñiscos que hicieron que Kaede soltara un gemido contenido...
- Detente Hanamic... – sus ruegos fueron interrumpidos nuevamente por la boca de Hanamichi que luego de besarlo comenzó a pasar su cálida lengua por el borde del ombligo de Kaede... finalmente el moreno se dio por vencido y comenzó a participar de lo que había iniciado Hanamichi...
Kaede comenzó a acariciar la espalda del pelirrojo desde debajo de su cuello hasta la parte donde el pantalón comenzaba... mientras el pelirrojo jadeaba con dificultad frente al contraste de su piel caliente y los fríos dedos de Kaede... poco a poco el moreno comenzó a hacer las caricias más profundas y termino sacándole la camisa... su firme torso era un espectáculo digno de cualquier escultor griego... Kaede comenzó a acariciar al pelirrojo sacándole fuertes gemidos... entonces Hanamichi pareció reaccionar al ver que comenzaba a perder el control y bajo su mano hasta el despierto miembro de Kaede y lo comenzó a acariciar a través de la ropa... miles de colores comenzaron a llenar los ojos del moreno medida que perdía conciencia de lo que sucedía... sólo un escalofríos en la espalda le dio conciencia que ya no estaba vestido... ¿en que momento el pelirrojo lo desvistió?... no tenía idea y la verdad no le importaba...
- Hanaa... sigue... – suplicó el moreno frente a las expertas carias de Hanamichi que acariciaba el hinchado miembro que sobresalía entre los rizos morenos... entonces frente a las suplicas de Kaede Hanamichi se puso enfrente de las caderas de Kaede y sopló sobre sus genitales... un fuerte y placentero escalofrió recorrió desde su cuello hasta su entrepierna... – por favor....- suspiró Kaede... entonces pudo sentir como la lengua de Hanamichi comenzó a lamer a lo largo de su virilidad... sin pasar por el glande... Kaede podía sentir como estaba a punto de estallar, sin embargo el pelirrojo parecía darse cuenta y volvía el ritmo más lento... en una suave y eterna tortura... finalmente Kaede puso sus manos en la cabellera roja de Hanamichi y empujo su cabeza hasta su ingle... entonces el pelirrojo rodeó con su boca a Kaede... la sensación de suavidad de la boca del pelirrojo lo hizo perderse en las sensaciones... no importaba el mañana, solo el aquí y el ahora... lentamente el ritmo comenzó a hacerse más rápido... los gemido y gritos de Kaede llenaron la oscura habitación... – ooh... sii.. sii... sigue... es... te am.. – las palabras salían entrecortadas de sus labios... finalmente las estrellas llenaron sus ojos – Hana!!!!!... – gritó Kaede al terminar...
- ¿Qué te pasa kitsune?... – preguntó Hanamichi desde la puerta al momento que Kaede sentía como su semen le bañaba las piernas... – sentí que me llamabas... ¿te sucede algo?..
Kaede que aun no podía explicar lo que sucedía miró a Hanamichi confundido... en que momento se levantó de la cama... entonces lentamente su mente comprendió lo que había sucedido... había sido uno de "esos" sueños... maldijo para sus adentros y dio gracias por estar cubierto por unas gruesas mantas, ya que aun podía sentir su miembro algo despierto y goteando...
- No me pasa nada da´haou... – contesto el ojiazul como una frialdad envidiable... – desde ¿hace cuanto estás ahí?... – preguntó al ver la manera en que el pelirrojo le observaba...
- Lo suficiente... – respondió el pelirrojo con una sonrisa en el rostro...
- ¿Suficiente para que?... – preguntó Kaede perspicaz...
- Para saber que soñabas conmigo... – respondió Hanamichi mirándolo con sus ambarinos ojos... –
- Era una pesadilla Da'ahou... – dijo Kaede desviando la mirada levemente para que Hanamichi evitara ver el leve sonrojo que cubría su rostro... – una horrible pesadilla... nada más...
- En serio?... – preguntó Hanamichi ya sin la sonrisa en la cara... – pues no veo porque deberías tener pesadillas conmigo... – dijo Hanamichi acercándose a la cama... – ¿hasta cuando vas a confiar en mi?... – le susurro Hanamichi acercándose al rostro de Kaede... – te lo dije anoche y te digo ahora... no te volveré a hacer daño... nunca...
Kaede esta vez no pudo evitar que el pelirrojo viera el rubor de su rostro ya que él lo había atrapado con sus brazos sobre la cama, entonces sintió como Hanamichi se inclinaba sobre él.. Kaede cerró sus ojos, sin embargo nada paso... al abrirlos vio como el pelirrojo se alejaba de la cama...
- Ya levántate kitsune, el desayuno esta casi listo... y ni se te ocurra rechazarlo – dijo al ver la cara de protesta del ojiazul... – te bañaras kitsune?... – preguntó mirando con los ojos entrecerrados a Kaede...
- No... – dijo el moreno inmediatamente... – ahora sale da'ahou... yo puedo levantarme sólo...
- Eres un zorro mal agradecido... – dijo Hanamichi fingiendo enfado... por algún motivo parecía de muy buen humor... – en el baño hay unas botellas de agua... aunque no se como lo harás te puedes lavar con ellas... – terminó diciendo antes de salir de la habitación...
Kaede se levantó y se percató que las manos ya no le dolían como el día anterior... se fijo que Hanamichi no estuviera cerca y saco con algo de dificultad las sábanas de la cama, enrollándolas y dirigiéndolas al cesto de la ropa sucia, mas tarde se preocuparía de cómo lavarlas, luego tomo unos pantalones con elástico y unos bóxer y se dirigió al baño, dando gracias de poder ponerse ropa sin necesitar la ayuda del molestoso invitado...
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Lo estaba volviendo loco... cada vez que Kaede intentaba realizar alguna actividad Hanamichi aparecía casi por arte de magia tras él y le ayudaba... incluso dentro de su hastío por no poder hacer nada había tomado una pala y torpemente intentaba sacar algunas malezas... Kaede había esperado que a estas alturas las incomodidades y precariedades hubieran ahuyentado al empresario pelirrojo, pero ya sea por orgullo o real interés (cosa que Kaede dudaba) él seguía firme en su postura de quedarse a su lado... ahora era tan obstinado como lo había sido sus planes de venganza...
- ¿Nunca te quedas quieto?... – le había reclamado Kaede cuando el pelirrojo le había propuesto salir a caminar por la costanera en vez de dejarle leer una revista deportiva de manera tranquila...
- Estoy quieto y relajado... - dijo el pelirrojo realmente sorprendido...
- Si esta es tu forma de estar tranquilo y relajado no me gustaría verte excitado... – dijo suavemente el ojiazul, percatándose demasiado tarde del contenido de sus palabras, en ese momento un leve sonrojo cubrió sus pálidas mejillas mientras que Hanamichi mostraba un brillo en sus ambarinos ojos...
- Tu ya me has visto excitado kitsune, y creo que te ha agradado bastante...
Kaede volvió instantáneamente a su lectura tratado de omitir su presencia, sin embargo era difícil no percatarse de la potente presencia del pelirrojo...
- Siempre pareces estar activo... – comentó Kaede mirando su revista... sólo descansas cuando duermes...
- Siempre he sido así... siempre he trabajado duro para conseguir mis metas cueste lo que cueste... y esto es lo más parecido a unas vacaciones que he tenido en bastante tiempo...
- Haruko siempre decía que te importaban más tus negocios que ella... – comento Kaede de manera despreocupada, sin embargo el pelirrojo se levantó de su asiento y se colocó frente al ojiazul... entonces Hanamichi se agachó y colocó sus brazos en sofá atrapando a Kaede quedando frente a él...
- Siempre iba a ti con sus mezquinas acusaciones... – comento Hanamichi con tono amenazante...
- No eran mezquinas... – interrumpió Kaede de manera fría... – nunca en Haruko...
- Si ella me las hubiera dicho podríamos haber solucionado esas dificultades... – comentó Hanamichi
- Lo dudo... – volvió a decir el moreno involuntariamente acordándose de los ojos de su amiga empañados de lágrimas cuando le habló de su amor por Yohei Mito... fuera lo que fuera que hubiese pasado Hanamichi por lo menos jamás se enteraría que Haruko lo había cambiado por un hombre como Yohei... mientras el pelirrojo miraba de manera inquisitiva a Kaede frente al despreocupado comentario...
- ¿A qué te refieres?... ¿acaso tu sabes algo que no me quieres decir kitsune?... ¿ acaso no le satisfacía en la cama?...
- Tu jamás te acostaste con ella... – reclamó Kaede dándose demasiado tarde cuanta que había hablado de más...
- También te contaba eso... – comentó Hanamichi... – supongo que sabrás que ella era virgen... quizás tu fuiste el que avaló esa idea... – a Kaede le brillaron los ojos al momento que encaró al pelirrojo...
- ¡No!... a mi no me puedes echar la culpa de que ella no se acostara contigo... nunca entendí como... – entonces se percató de lo que estaba a punto de decir...
- ¿Qué?... ¿qué me rechazará?... – dijo Hanamichi divertido ante las palabras del moreno... – debo recordarte que hablamos de Haruko... una persona tímida al extremo y con un alto sentido moral... – entonces Kaede lanzó un bufido... Haruko no había sido tan tímida ni "moral" con Yohei... – mientras que tu...
- ¿Qué yo qué?... – interrumpió Kaede con tono amenazador... .
- Si estuvieras enamorado de alguien no podrían echarte de su cama... – continuó divertido...
- ¿Quieres decir que no tengo moral?... – preguntó Kaede ofendido...
- Para nada... – dijo Hanamichi con tono conciliador... – simplemente cuando te propones algo lo llevas acabo sin miramiento y pobre del que se cruce en tu camino... para algunas personas eso es un problema...
- Eso no es asunto mío... si a alguien le incomodo es su problema...
- Es verdad... – dijo Hanamichi levantándose... – pero yo no soy una persona que se rinde fácilmente...
- Por que n te olvidas de mi y te vas a dar una vuelta tu sólo... yo quiero leer esta revista y después me iré a dormir... solo... – añadió rápidamente...
- Yo no estoy acostumbrado a dormir tan temprano... – comentó Hanamichi... – además no he podido dormir bien...
- Debe ser el colchón... o las sábanas – comentó Kaede intentando volver a su lectura...
- Tal vez... ¿te importaría venir a mi habitación para ayudarme a alisarlas?... – preguntó Hanamichi inocentemente, pero con un brillo en los ojos...
- Lo lamento... – dijo Kaede levantando sus manos y tratando de obviar que tenía las caderas del pelirrojo a la altura de los ojos... – pero por el momento estoy imposibilitado...
- Hasta donde recuerdo tienes una boca muy ágil... – Hanamichi lanzó una carcajada ante la expresión de Kaede... lo cual le produjo al ojiazul una oleada de excitación... – creo que en eso estoy en lo correcto... Hanamichi se estiró y finalmente se sentó al lado del Kaede que se encontraba en un amplió sofá... mientras Hanamichi intentaba cavar en los pensamientos de Kaede este finalmente se canso, se levantó y se fue a dormir...
Lo estaba volviendo loco... por enésima vez intentaba estar un rato a solas y lo único que conseguí era que el pelirrojo le siguiera... había esperado a que Hanamichi se pusiera a trabajar en su portátil para salir al jardín e intentar sacar algo de la hierba que estaba saliendo en la pequeña huerta que tenía la casa, sin embargo dos minutos después y cuando él torpemente intentaba afirmar un rastrillo el pelirrojo le había interrumpió...
- ¿Debes hacer esto ahora?... –comentó Hanamichi fastidiado...
- Si crece será más difícil... déjame hacerlo da'ahou... – dijo Kaede al ver como el pelirrojo le quitaba la herramienta de las manos...
- ¿Qué debo hacer?... – preguntó finalmente...
- ¡Maldición!... – explotó Kaede... - ¡tú no quieres que haga nada de nada!... ¡hasta cuando me dejarás en paz!... –
- Sólo sigo las indicaciones de Kogure kitsune malagradecido... – dijo Hanamichi sorprendido por la repentina explosión del frió muchacho... – cualquier persona estaría agradecida de estas atenciones...
- Una cosa es que te ayuden y otra es que te acosen Hanamichi... – contestó Kaede molesto...
- Sólo estaba intentando ayudarte Kaede... ¿sabes que hace tiempo no decías mi nombre?...
- ¿De verdad?... – preguntó obviando el comentario del pelirrojo... - ¿es para ayudarme o para verme sufrir?... – inmediatamente se arrepintió de sus palabras al ver como cambiaba el semblante de Hanamichi... entonces el pelirrojo se acercó a su lado...
- Siento que creas eso Kaede... – dijo seriamente... – antes podría haber sido verdad, pero ahora las cosas son distintas y eso ya deberías saberlo... las cosas han cambiado desde que te conozco...
- Tu no me conoces... – comentó Kaede rígido y con hielo en la mirada...
- Mejor que cualquiera... el hecho que tus amigos vivan a kilómetros de distancia habla muy bien del tipo de conocimiento que pueden tener de ti... no te gusta mantener a la gente cerca de ti ¿verdad Kaede?... ¿a que le tienes miedo?... ¿acaso no quieres que descubran que bajo tu gélida postura también hay un corazón que late como en el resto de los seres humanos?... ¿o tienes miedo a que te lastimen?... - ¿lástima?... ¿acaso era lástima lo que Kaede escuchaba en su voz?...
- No necesito un psicólogo barato Sakuragi... puedes ahorrarte tus estúpidas conclusiones...
- No te estoy atacando Kaede... así que no te defiendas... Los dos hemos sido culpables de lo que ha sucedido entre nosotros... de lo malo... y lo bueno... – dijo haciendo una pausa... –dijiste que querías hacer una vida nueva acá... por que no aceptas mi amistad...
- Tu no quieres ser mi amigo... – dijo Kaede
- Los amantes son amigos Kaede... – dijo el pelirrojo...
- Te equivocas... no siempre... – no había habido amistad en su encuentro en el hotel y Kaede dudaba que alguna vez la hubiera...
- ¿Has tenido muchos?... – preguntó Hanamichi
- ¿Amigos?...
- Amantes...
- Eso no te importa...
- Ok... no soy el primero, sino el segundo, eso sería raro a tu edad, incluso en ti... – dijo Hanamichi bromeando de manera acertada... - ¿fue chico o chica?... – entonces vio como las mejillas de Kaede se teñían...
- Ya veo... fue una chica... – volvió a acertar... - ¿Fui mejor que ella?... – esta vez el sonrojo fue claramente evidente... – ya veo... así que fui mejor... – acertó por tercera vez... haciendo que el moreno se colocara rígido y señalara la maleza que salía entre unos brotes de lechugas...
- Hay que sacar la maleza de ahí... – dijo de manera rígida mientras se daba media vuelta...
- No te molestes kitsune... – dijo Hanamichi gritándoles... – el que haya acertado no es para que te pongas así...
Maldito pelirrojo!!!- penaba Kaede mientras trababa de arreglar su cuarto... si por lo menos estuviera seguro de sus motivos para no retirarse... ¿por qué no aceptaba su petición de marcharse y le dejaba rehacer su vida?¿acaso no era una buena manera de demostrar su arrepentimiento?... Hanamichi tenía la capacidad de irritarla, algo que nunca antes había logrado nadie... eran como chispas en una gasolinera... para luego confundirlo con extrema ternura y cariño... justo cuando él iba a ceder le dejaba solo y vació con una frustración física inmensa... mientras Kaede pensaba en esto un sonido le alejo de sus divagaciones, entonces se percató de que alguien llamaba a la puerta...
- ¿Esta Hanamichi?...
Entonces Kaede quedó sorprendido... frente a él se encontraba una mujer preciosa de largo cabello castaño largo y crespo hasta la cintura, enmarcada en un lujoso y corto vestido color azul rey que contrastaba perfectamente con su piel, junto con unos altos tacones que agregaban bastantes centímetros a su ya alta estatura... sus ojos castaños con enormes pestañas le miraban con algo de recelo, algo en su mirada se le hizo familiar al moreno... atrás de ella un deportivo estaba estacionado junto del jeep del todo terreno de Hanamichi... una diosa griega estaba en búsqueda del pelirrojo...
Notas: ojala les guste... disculpen por la demora, pero estoy trabajando de 8:00 a 19:00 y llego demasiado cansada para ponerme frente al pc... pero como ya he dicho de que termino, termino... a... visiten mi blog y dejen su firmita... esta recién hecho así que no hay mucho, pero igual... , además si tienen algo para agregar, algún link o cosas así solo díganme y lo hago...
